Este retrato en arte plumario de la virgen de los Remedios con el niño dios en brazos es un relicario que data del siglo XVII y actualmente se encuentra en el Museo Nacional de Historia, Castillo de Chapultepec.

Se cree que el culto a la virgen de los Remedios inició tras la llegada de los españoles a América, cuando un soldado de Hernán Cortés trajo a México una pequeña imagen de esta virgen a la cual se han atribuido diversos milagros.

Uno de esos milagros refiere que la virgen terminó con una sequía provocada por la ira de Huitzilopochtli luego que Cortés colocara su figurilla en el Templo Mayor, junto a la imagen del dios, y después el mismo Cortés aseguró que si se decían unas misas en honor de la virgen, llovería.

Descubre más sobre este relicario en la Mediateca INAH.

 

 

Ir al contenido