Dzibanché
Dzibanché |
Escritura en madera |
Es un sitio extenso que integra espacios cívico-ceremoniales y áreas residenciales que se encuentran entre y alrededor de dichos grupos, integradas por unidades habitacionales dispuestas en arreglos diversos que expresan formas particulares de organización doméstica, estatus social y actividades desarrolladas por sus habitantes. De los cuatro grupos de arquitectura mayor, Dzibanché y Tutil tienen una secuencia de construcción muy dilatada; los otros dos parecen haber funcionado durante un periodo más corto: Kinichná en la primera mitad del Clásico, y Lamay en la parte final del mismo periodo. Era un centro muy poblado que combinaba áreas de cultivo, residencias y espacios de culto y de gobierno; se trataba de un asentamiento disperso, cuyos ejes principales, formalizados con sacbés (caminos recubiertos de estuco blanco), no fueron trazados con la intención de regular el crecimiento del sitio, y menos aún, de reticular el espacio. En Dzibanché siempre hubo varios centros de actividad cívico-ceremonial. Parecía que cada uno de ellos desempeñaba funciones específicas que no se repetían en otro centro. Dzibanché tiene un juego de pelota (quizá dos), lo que no ocurre en los otros conjuntos arquitectónicos; Kinichná es realmente una acrópolis, un edificio especial que no encuentra paralelo en todo el sur de Quintana Roo; Tutil tiene un arreglo interno propio en el que proliferan pequeños conjuntos arquitectónicos asociados al ritual. Todo esto conduce a pensar que el asentamiento mayor de Dzibanché es un conjunto dividido intencionalmente con el propósito de mantener el control político e ideológico sobre una población de agricultores y pequeños artesanos que se asentaron entre casas y campos de cultivo, en un patrón disperso típicamente maya. Esta forma peculiar de operar habría hecho que el ceremonial se diera en diferentes partes del asentamiento mayor, dependiendo del evento que se realizara y la vocación de los edificios principales en los diferentes grupos arquitectónicos y también del tipo de actividad económica y del acto de gobierno a desarrollarse. El mercado, por ejemplo, se celebraría en uno de esos centros, la planeación en otro y las ceremonias de cambio de poder en otro. Por hallarse en una zona de transición, Dzibanché goza de una gran riqueza ambiental, que le garantiza acceso a una amplia gama de recursos básicos, incluidas materias primas y productos de origen distante, y una buena posición geográfica, lo que significa la posibilidad de controlar o monopolizar canales de comunicación y de circulación de bienes de todo tipo. Es en los ecotonos, es decir, en esos lugares de transición entre dos o más zonas ecológicas, en las que se desarrollan los puntos de los sistemas de comercio regional.