Soledad de Maciel
Soledad de Maciel |
La antigua ciudad de Xihuacan fue el principal centro religioso Cuitlateca, su territorio cubrió la actual Costa Grande de Guerrero y la Sierra Madre del Sur, comprendida entre los actuales municipios de Petatlán y Zihuatanejo. El área fue conocida como el Cuitlatecapan, “señorío de los cuitlatecas”, grupo que habitó este lugar desde el año 2500 a. C. y que al siglo XVI abarcaba una gran extensión territorial, desde la Costa hasta Tierra Caliente. Su ocupación data desde época Preclásica. El área más antigua se ubicó en la cima del “Cerro de los Brujos” donde se localizaron figurillas “Baby Face” y “Mujer Bonita”. Un segundo conjunto es el Centro Ceremonial, ejemplo de innovación en “arquitectura en tierra”, fue edificado hacia el año 450 empleando como referencia para su trazo elementos astronómicos como el planeta Venus, el Sol y la Estrella del Norte. Su construcción implicó la edificación de una plataforma de adobes que niveló el terreno en un área de 29 hectáreas, donde se construyeron cuatro edificios masivos, entre estos el Montículo B con adobes y acorazados en barro cocido. Estas estructuras delimitan una plaza que se asocia al norte con el área palaciega, el Juego de Pelota y con la falda sur del “Cerro de los Brujos”, integrándolo al paisaje ceremonial. Ambas áreas están rodeadas por un sistema de canales artificiales conectados al río San Jeronimito, por los que aún fluye agua y le otorgaba al asentamiento la imagen de isla mítica. El colapso de Xihuacan sucedió hacia el año 1350, tras un fenómeno meteorológico que inundó el conjunto provocando con ello el abandono paulatino del asentamiento.