ESCUELA NACIONAL DE ANTROPOLOGÍA E HISTORIA INAH SEP TESIS Religiosidad en el barrio de Tepito: el culto a la Santa Muerte entre lo emergente y lo alternativo QUE PARA OPTAR POR EL GRADO DE DOCTOR EN ANTROPOLOGÍA SOCIAL PRESENTA Roberto García Zavala DIRECTORA DE TESIS: Dra. Paloma Escalante Gonzalbo MÉXICO, D.F. MAYO DEL 2010 Dedicatoria: Son muchas las personas que han estado a mi lado en este proyecto llamado vida. Cada uno de ellos ha contribuido de manera especial en mi formación cívica-ética-religiosa-profesional, por lo que, no puedo nombrarlos en un orden jerárquico. Pero deseo plasmar en estas líneas mi gratitud a cinco mujeres que gracias a sus acciones permitieron la redacción final de este documento, ellas son: A mi madre, Tranquilina Zavala López que me enseño a buscar la rectitud en cada acto que realizo en la vida. A Leticia Guzmán González que en varias ocasiones me vio partir para emprender nuevos proyectos y nunca detuvo mi andar. A Quetzalli Itzel Guzmán por su sonrisa, su valor y por el hecho de que mientras tenga vida… yo vivo. A Paloma Escalante Gonzalbo por haber creído en mi proyecto y haber apoyado cada una de mis acciones. Gracias por haber decidido por mí en aquella selección propedéutica… mi eterno agradecimiento. A Miriam, que desde su labor de secretaria dio seguimiento a cada uno de mis trámites y que, gracias a su calidez y carisma nunca sentí la distancia que existe entre la institución y el alumno. Tú, si vuelves, lo harás cargado de oro, yo, solamente en apariencia de paja. Pero no me vencerá la envidia. Se desvanecerán tus riquezas y este favor del Rey con él morirá. Mis escritos, en cambio, incultos, inútiles y triviales, que además de servir de cantera a los escritores de la posteridad no han de pasar inadvertidos a causa de las preclaras hazañas de mis Reyes, permanecerán para siempre. (Pedro Mártir de Anglería, Epistolario, t. IX) ÍNDICE Introducción……………………………………………………………………I-XVII Capítulo I. Consideraciones en torno a la religiosidad popular y el culto a la Santa Muerte entre lo emergente y lo alternativo 1. 1 Campo de estudio………………………………………………………………. 1 1. 2 ¿La religiosidad popular como categoría de análisis es propia de los subalternos o marginados? …………………………………………………………2 1. 3 ¿Religiosidad popular es lo mismo que catolicismo popular?.....................4 1. 4 Religiosidad popular y catolicismo popular: definiciones y su empleo en casos específicos……………………………………………………………………...6 1. 5 ¿Dónde se encuentra la frontera entre lo oficial y lo popular con respecto a lo sagrado?..........................................................................................................9 1. 6 La centralidad de lo sagrado y la adopción de símbolos que responden a situaciones emergentes a los que se les construyen un referente sagrado….16 1. 7 Criterios de adopción de símbolos propios y antitéticos del universo sagrado católico y su especialización……………………………………………...21 1. 8 Diferencia entre símbolo mayor y símbolos adoptados……………………25 1. 9 El ritual como motor de la religiosidad……………………………………….27 1. 10 Consideraciones históricas para abordar el estudio de los rituales de respuesta inmediata………………………………………………………………….33 1. 11 Los rituales de respuesta inmediata: punto de tensión entre la Jerarquía eclesiástica y la feligresía…………………………………………………………37 1. 12 Anatomía del ritual de respuesta inmediata……………………………….38 1. 13 Los ―candados‖ de los rituales de respuesta inmediata………………….40 1. 14 Características básicas del culto a la Santa Muerte en la ciudad de México…………………………………………………………………………………41 1. 15 La Santa Muerte y los rituales de respuesta inmediata………………….45 1. 16 El culto a la Santa Muerte entre lo emergente y lo alternativo…………..49 CAPÍTULO II Diversas miradas sobre el barrio de Tepito……………………………………54 2.1 El punto de partida de las investigaciones sobre el barrio de Tepito elaboradas desde la academia……………………………………………………..61 2. 1.1 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Antropología Social…………….65 2. 1. 2 El barrio de Tepito bajo la óptica de la sociología………………………..76 2. 1. 3 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Psicología Social……………….80 2. 1. 4 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Historia…………………………..83 2.1. 5 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Lingüística……………………….86 2. 1. 6 El barrio de Tepito bajo la óptica de las Letras Hispánicas…………….88 2. 2 El barrio de Tepito desde dentro: la memoria colectiva registrada por los actores…………………….…………………………………………………………..91 2. 2. 1 El vínculo con lo sagrado y sus manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito en la obra de Armando Ramírez…………………………………….…92 2. 2. 2 El vínculo con lo sagrado y las diversas manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito contadas por Julián Ceballos Casco………………………….102 2. 2. 3 El vínculo con lo sagrado y las diversas manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito a través del taller literario de Eduardo Vásquez……………..106 2. 2. 4 El barrio de Tepito a través de la mirada de Alfonso Hernández…….112 2. 3 El barrio de Tepito desde fuera: los usos de Tepito en los medios de comunicación masiva……………………………………………………………...115 2. 4 El barrio de Tepito y sus actores en los foros de opinión (blogs) en el Internet……………………………………………………………………………….124 2. 5 El barrio de Tepito en la cinematografía comercial, independiente y documentales……………………………………………………………………….129 2. 5. 1 El barrio de Tepito en el cine comercial e independiente de los años setentas……………………………………………………………………………130 2. 5. 2 El barrio de Tepito en el cine comercial e independiente de los años ochentas……………………………………………………………………………133 2. 5. 3 El barrio de Tepito en el cine comercial y el video home de los años dos mil……………………………………………………………………………………138 2. 6 Tepito, ¿sinónimo de miedo?: la construcción desde fuera del barrio de Tepito………………………………………………………………………………...145 2. 7 Estrategias a priori para realizar la etnografía en el barrio de Tepito…...149 CAPÍTULO III Etnografía del barrio de Tepito 3. 1 Describir el barrio de Tepito desde la unidad………………………………152 3. 2 Describir el barrio de Tepito desde la diversidad…………………………..154 3. 3 Ubicación geográfica del barrio de Tepito…………………………………..155 3. 4 Metodología…………………………………………………………………….159 3. 5 Descripción de la zona A……………………………………………………159 3. 5. 1 Características generales de la zona A………………………………...174 3. 6 Descripción de la zona B……………………………………………………182 3. 7 Descripción de la Zona C (comercial)……………………………………..188 3. 7. 1 La lógica que impera en la zona C……………………………………...195 3. 7. 2 Manifestaciones religiosas en la Zona C……………………………….200 3. 7. 3 Descripción de las manzanas que componen la zona C…………….201 3. 8 El universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito de acuerdo a sus manifestaciones religiosas en el espacio público………………………..220 3. 8. 1 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona A……………..221 3. 8. 2 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona B……………..222 3. 8. 3 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona C……………..222 3. 9 Cifras finales…………………………………………………………………..223 3. 10 A manera de colofón: las vicisitudes de mi transitar por el espacio en la búsqueda del dato………………………………………………………………….225 CAPÍTULO IV Metodología 4. 1 Consideraciones previas a la obtención de los datos sobre los símbolos sagrados en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito……...229 4. 2 Datos que construyen estrategias…………………………………………..229 4. 3 Sobre la metodología aplicada………………………………………………235 4. 4 Formatos de las entrevistas aplicadas en el barrio de Tepito……………237 4. 5 Los datos duros de la encuesta sobre las manifestaciones religiosas en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito………………………...241 4. 6 Datos duros de la encuesta referida al aspecto ritual aplicada a los habitantes del barrio de Tepito……………………………………………………242 CAPÍTULO V El carácter emergente y alternativo del culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito…………………………………………………………………………..245 5. 1 El espacio privado: tercer elemento para determinar el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito………………………………………………250 5. 2 Símbolos sagrados presentes en los altares de la casa habitación…...251 5. 3 Peticiones a los símbolos sagrados presentes en el altar de la casa habitación…………………………………………………………………………..256 5. 4 Símbolos sagrados presentes en los altares en el espacio laboral……256 5. 5 Peticiones a los símbolos sagrados presentes en el espacio laboral….264 5. 6 Diversidad de artículos que se ofrendan a los símbolos sagrados en el espacio laboral………………………………………………………………………265 5. 7 Símbolos sagrados presentes en los altares en el espacio colectivo…..265 5. 8 Festividades en torno a los símbolos sagrados presentes en los espacios colectivos…………………………………………………………………………….267 5. 9 Peticiones que los habitantes del barrio de Tepito formulan a los símbolos sagrados presentes en el espacio colectivo……………………………………..268 5. 10 El universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito…………….269 5. 11 En Busca de la centralidad de la Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata en los campos de la salud, el amor y el dinero………...274 5. 12 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo de lo económico…………………..278 5. 13 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo de la salud…………………………285 5. 14 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo del amor……………………………292 5. 15 Comentarios finales sobre el carácter alternativo del culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito……………………………………………………...296 CAPÍTULO VI El carácter emergente de la Santa Muerte……………………………………303 6. 1 Los diversos mitos de orígenes de la Santa Muerte………………………307 6. 1. 1 El origen divino de la Santa Muerte…………………………………...…307 6. 1. 2 El origen de la Santa Muerte producto del sincretismo………………..320 6. 2 El culto a la Santa Muerte ¿tiene origen reciente?...................................325 6. 3 La muerte como recurso literario y fílmico en el México pos revolucionario y su relación con el actual culto a la Santa Muerte………………………………331 6. 3. 1 La muerte como protectora: La muerte como madrina en el cuento El ahijado de la muerte de los hermanos Grimm y su adaptación en la pantalla del director Norman Foster…………………………………………………………….332 6. 3. 2 La expresión novia fiel en la literatura y la filmografía de la época de oro mexicana y su relación con el actual culto a la Santa Muerte: las nupcias con la muerte en La vida inútil de Pito Pérez……………………………………………336 6. 3. 3 Las peticiones a la muerte en la filmografía de la época de oro mexicana y su relación con el actual culto a la Santa Muerte: La muerte enamorada y Macario………………………………………………………………………………339 Conclusiones……………………………………………………………………….346 Bibliografía…………………………………………………………………………..359 Transitar el camino de lo conocido es mucho más fácil que diseñar los métodos para abordar la nueva realidad a que nos enfrentamos, o que inventar las teorías adecuadas para integrar esa realidad en un todo coherente y lógico. (Miguel Martínez; El paradigma emergente). Introducción El barrio de Tepito es un espacio que al igual que un imán atrae la mirada de los ajenos. Las ideas con que se le asocian giran en torno a la diversidad de actividades comerciales que se sitúan en la ilegalidad, la bravura de sus boxeadores, el número de delitos que ahí se generan, la destreza de sus bailarines y sobre todo, un espacio de anarquía. Sobre el barrio de Tepito se presenta un fenómeno singular, ello es que la percepción que se tiene sobre el barrio tiene su texto en las crónicas periodísticas que enfatizan los delitos que se generan dentro del área, por ello, Tepito es considerada como una zona de terror, infranqueable para las autoridades de seguridad pública capitalinas y federales. ¿Y las voces de los habitantes del barrio de Tepito quién las recopila y expone? En estas crónicas periodísticas se encuentra ausente la voz de los actores y no es por el hecho de que los habitantes del barrio no tengan nada que contar sino que las preguntas que formulan están referidas al clima de violencia, tráfico de drogas, elaboración de material apócrifo y otras actividades que históricamente se generan en su interior. La regla de oro en el barrio de Tepito es guardar silencio ante estas preguntas, pero ello no impide que su voz sea registrada en documentos elaborados desde la academia y aun más importante, a través de diversos grupos generados en su interior que tienen como objetivo preservar la memoria histórica a través de la crónica y la literatura, la conservación de las vecindades y las Unidades de Renovación Habitacional donde tejen sus relaciones sociales y promover las actividades deportivas que tanta gloria han dado al barrio de Tepito. ¿Cómo se ven los tepiteños? ¿Qué usos hacen del espacio público los habitantes del barrio de Tepito? ¿Cómo ven los tepiteños a los ajenos al barrio? Estas fueron las preguntas que me llevaron a recopilar información sobre el barrio lo que no fue una tarea fácil ya que esa información no se encuentra en las librerías porque se trata de producciones que circulan al interior del barrio, es decir, esta dirigido a los habitantes y no a los externos ya que se exponen los problemas que se suscitan al interior y que necesitan solución. Uno de los principales difusores de este tipo de información social es el Centro de Estudios Tepiteños (CETEPI) dirigido por Alfonso Hernández, además de ser una fuente primaria para todo aquel que desee elaborar investigación sobre el barrio de Tepito ya que contiene un amplio acervo de las investigaciones que sobre el barrio se han elaborado y las que ellos generan. Diversidad de aspectos del barrio de Tepito se han abordado pero no existe una investigación que considere el vínculo que los habitantes del barrio de Tepito establecen con lo sagrado y las manifestaciones que de ella emanan como el eje central. Los estudios elaborados desde la academia sobre el barrio de Tepito –que expondré en el segundo capítulo de la presente investigación- se pueden resumir en cuatro grandes temas: las luchas por el espacio habitacional, el comercio y el clima que genera, la identidad del tepiteño y la historia del barrio. En estos cuatro grandes temas que atraen del barrio de Tepito me llama la atención que apenas se menciona la religiosidad de los habitantes del barrio ya sea por la celebración del santo patrono que es san Francisco de Asís, las festividades de la virgen de Guadalupe, las constantes peregrinaciones que se efectúan a los santuarios principalmente de Nuestro Señor de Chalma y la basílica de Nuestra Señora de San Juan de Los Lagos, la relación que guardan los habitantes para con las iglesias que ahí se encuentran (san Francisco de Asís Tepito, Santa Ana y Nuestra Señora de la Concepción ―La Conchita), la manera en que viven la Semana Santa, las misas que se celebran en el espacio público, las visitas de imágenes milagrosas a las diversas vecindades y predios. Es cierto que las investigaciones elaboradas desde la academia persiguen objetivos diferentes al de la religiosidad de los habitantes de Tepito, pero llama la atención que no hace referencia a manifestaciones religiosas que se encuentran en el transitar por las calles del barrio. En esas calles sobresalen los altares en la vía pública, la diversidad de símbolos sagrados que los comerciantes usan y que están expuestos en sus lugares de trabajo, los altares que se ubican en la entrada de las vecindades y Unidades de Renovación Habitacional, la propaganda anunciando las diversas peregrinaciones a santuarios que pegan los habitantes en postes y esquinas del barrio y, las cartulinas anunciando una misa a determinada imagen peregrina. Aun así, he logrado extraer de estas investigaciones las diversas manifestaciones religiosas que el investigador consideró interesantes de registrar. Las producciones literarias que se generan al interior del barrio es otro de los recursos que considero necesario para la construcción de esta investigación que tiene como eje rector el vínculo que los habitantes del barrio de Tepito establecen con lo sagrado y las manifestaciones materiales que resultan de ella. En estas obras, la religiosidad de los habitantes del barrio de Tepito no es el tema central; pero al describir la cotidianeidad de los actores se hace una constante referencia a los símbolos sagrados a los que se les dirigen una diversidad de peticiones. En estas narraciones se puede vislumbrar la centralidad de la Virgen de Guadalupe por encima de las tantas que puedan existir dentro del barrio de Tepito y la religión católica como aquella que predomina. Por ello, uno de lo objetivos principales que plantea la siguiente investigación es presentar el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito para ubicar la centralidad de diversos símbolos sagrados que puedan ser considerados como los símbolos mayores en torno a los cuales la comunidad se cohesiona. También se han de ubicar los símbolos sagrados alternativos que serán aquellos que por sus características se han especializado en la solución de problemas y a los que solamente se recurre en crisis específicas. Los símbolos sagrados emergentes serán aquellos que por sus características tales como la diversidad de mitos de origen, la santidad que les confiere un grupo convencidos de las capacidad taumatúrgica de algunos personajes populares, entidades espirituales o representaciones iconográficas que no figuraban dentro del universo sagrado de la entidad; estos símbolos sagrados emergentes se encargaran de solucionar los problemas que otros símbolos sagrados han dejado de atender. Con respecto a la Santa Muerte y los diversos usos que sobre ella hacen los habitantes del barrio de Tepito, deseo expresar que durante la recolección de datos para mi primer trabajo de investigación que tenía como eje rector el culto (García, 2007) estuve en las diversas ceremonias que se celebran los días primero de mes en el hoy conocido Santuario Nacional de la Santa Muerte en la calle de Alfarería # 12 en el corazón del barrio de Tepito. En estas ceremonias las cantidades de devotos se cuentan por miles y las manifestaciones hacía la Santa Muerte son diversas e innovadoras. Ello me llevó a suponer que el número de devotos en el barrio de Tepito era elevado y que los usos de la Santa Muerte eran diversos. Así también, los devotos refieren que dicho culto ya existía en el barrio por lo cual me di a la búsqueda de antecedentes escritos que corroboraran el arraigo histórico del culto de la Santa Muerte en el barrio de Tepito, pero no encontré más que una cita en la obra de Oscar Lewis Los hijos de Sánchez (1982) la cual refiere la existencia de un elemento ritual y su especialización en un campo especifico como lo es el amor. Esta cita no presenta elementos tales como la descripción del símbolo ritual, algún mito y que una comunidad se reúna en torno al mismo para celebrar rituales. Es difícil no sucumbir a la tentación de establecer relaciones directas entre lo observado como lo propio del espacio. Se podría afirmar que en la colonia Morelos y el barrio de Tepito son miles los devotos a la Santa Muerte y que son numerosas las familias que tienen una imagen con su respectivo altar en su espacio privado y que los altares erigidos en la vía pública serán numerosos. Esta afirmación sería respaldada y casi irrefutable cuando presente las ―pruebas‖ de la cantidad de devotos que se reúnen en estos espacios los días primero de cada mes y mayor cantidad cuando en el santuario de la Santa Muerte ubicado en la calle de Bravo # 35 recibe en su celebración mayor (15 de agosto) miles de devotos que vienen en peregrinación de otras entidades de la república y, en el santuario de la Santa Muerte de la calle Alfarería # 12 que recibe miles de devotos en su celebración mayor (1 de noviembre) que peregrinan de diversas localidades. Pero la antropología social no opera de esta manera y por supuesto que esta investigación no será elaborada así. El culto la Santa Muerte como fenómeno religioso rompe con el esquema tradicional del culto a los santos ya que pensándola como símbolo dominante 1 1 Para fines de la investigación las categorías de análisis símbolo dominante, símbolos instrumentales y símbolo ritual que propone Víctor Turner en su obra La selva de los símbolos no tiene parangón en el universo sagrado católico. La Santa Muerte es todo un oxímoron ya que la función que juega la muerte en el cristianismo es ser vencida y la santidad en el catolicismo es una virtud a la que están llamados todos los hombres. Pero la combinación sintáctica entre ―santa‖ y ―muerte‖ dará un nuevo sentido que permitirá el surgimiento de formas rituales especificas – y esto es importante- que no se apartan de las formas rituales propias del catolicismo popular, es más, a través de este culto se refuncionalizan y revitaliza el vínculo del hombre con lo sagrado en sus dimensiones mítica, simbólica y ritual. Para el desarrollo de la presente investigación es necesario recabar la información que sobre la Santa Muerte se ha generado poniendo especial énfasis en los diversos orígenes que sobre el símbolo sagrado se han generado, además de las opiniones provenientes de los órganos de comunicación oficiales de la Iglesia Católica Mexicana que han fijado su postura desde la aparición del culto en la ciudad de México hasta el tiempo en que redacto esta investigación. La Santa Muerte será el caso que me permitirá observar y exponer las formas en que dicho símbolo sagrado convive con otros cultos y devociones arraigados históricamente en el barrio de Tepito. Esta ―convivencia‖ se dará en los tres niveles que la antropología considera fundamentales para su quehacer disciplinario y que deben contener las investigaciones que aborden los fenómenos religiosos, ellos son: el clima que genera en la comunidad la inserción del nuevo símbolo ritual llamado Santa Muerte, los diversos mitos de origen que sobre el símbolo ritual se crean y recrean y, finalmente, sobre el aparato ritual ―desglosar‖ los elementos que son propios del culto y los que han sido ―importados‖ de otros sistemas de creencias que se refuncionalizan a través del símbolo ritual. Para el desarrollo de la investigación es necesario contar con tres elementos fundamentales que permitan abordar, describir y exponer la religiosidad en el barrio de Tepito y el caso del culto a la Santa Muerte. El primero corresponde a la categoría de análisis que permita trabajar el tipo de religiosidad que se presenta en el barrio de Tepito. Para ello, será la categoría (1999) serán de mucha ayuda para el desarrollo de la investigación; ellas serán expuestas en el primer capítulo. de análisis catolicismo popular es la que mejores resultados puede ofrecer ya que una de los fenómenos que aborda es el del culto a los santos, las mayordomías, las peregrinaciones y la creación de rituales en donde el santo es considerado como un símbolo ritual que tiene como fin aliviar la aflicción de quién acude a su ayuda. El segundo corresponde a las categorías de análisis símbolo dominante, símbolo instrumental y símbolo ritual que provienen de la teoría antropológica propuesta por Víctor Turner (1999) serán de mucha ayuda para cuando se este trabajando con los usos que los habitantes del barrio de Tepito hacen de los elementos que conforman su universo sagrado. El tercer elemento corresponde el conocer el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito para saber los símbolos rituales presentes entre los habitantes, los diversos usos que hacen de ellos y ubicar a la Santa Muerte en su real dimensión y el rol que juega dentro de esa diversidad de símbolos sagrados. Ello se lograra en el constante contacto que he de tener dentro del área de estudio, principalmente en el trabajo etnográfico. Las hipótesis que planteo para la elaboración de la presente investigación van dirigidas en dos planos. El primero tiene que ver con el fenómeno llamado culto a la Santa Muerte y el segundo tiene que ver con el barrio de Tepito y sus manifestaciones religiosas. Las hipótesis son las siguientes: Si en el seno del universo sagrado del catolicismo popular se presentan innovaciones simbólicas y si estas conservan el aparato ritual, la estructura básica de las formas en que la comunidad históricamente estable el vínculo con lo sagrado y su mito de origen refieren una conexión con elementos del universo sagrado católico, estamos en presencia de un culto emergente Si el origen del culto a la Santa Muerte no se encuentra en un pasado remoto y como símbolo ritual no tiene parangón en el universo sagrado católico, pero se desarrolla con mayor intensidad en el seno del catolicismo popular y los diversos mitos de origen además de sus funciones que refieren sus devotos queda establecida una conexión con Dios, entonces debe ser considerado como un culto emergente Con respecto al barrio de Tepito me acerco con la siguiente hipótesis: Si las crónicas y creaciones literarias generadas por habitantes del barrio de Tepito muestran un vínculo mayor con los elementos femeninos del universo sagrado católico como son las diversas advocaciones de María manifestado por las diversas peregrinaciones que miembros del barrio efectúan a los santuarios marianos, además de que la comunicación con estos símbolos sagrados femeninos esta enmarcado en una relación madre-hijo; entonces permite determinar que en el barrio de Tepito están dadas las condiciones para que los símbolos rituales femeninos emergentes sean integrados más rápido a su universo sagrado y su calendario ritual La presente investigación contiene cinco capítulos que considero serán una aportación a los estudios sobre la antropología de la religión ya que la categoría culto emergente no ha sido utilizada a profundidad dentro de las investigaciones antropológicas. Así también, pretende ser un aporte para los diversos estudios que consideren el fenómeno religioso como susceptible de ser abordado, además de proveer un mayor conocimiento sobre los cultos que existen en el país. Aunque no es el principal objetivo, considero que este tipo de documentos sirven más a la jerarquía eclesiástica para que tengan un conocimiento mayor de las formas en que su feligresía vive lo sagrado, las demandas que hacen a la institución religiosa y porqué no pensarlo, que a través de estos documentos diseñen las estrategias de intervención para con su feligresía. En el primer capítulo se elabora una disertación sobre las formas en que se han abordado los fenómenos religiosos que se presentan en el seno del catolicismo popular. Además de una disertación sobre el hecho de endosar el catolicismo popular a las clases subalternas siendo que el concepto escapa a la condición de clase. Por ello, hago la propuesta de utilizar a la par del concepto catolicismo popular el concepto de catequesis básica que propone Robert Pannet (1976) lo que permite abordar a todos los adscritos al sistema de creencias católico. Ahora bien, las formas en que se ha trabajado el catolicismo popular están referidas básicamente al culto a los santos. Existe una diversidad de estudios que exponen los diversos usos, rituales y festividades que la feligresía celebra en torno a los mismos. Estos estudios consideran solamente los elementos simbólicos del universo católico como son las diversas advocaciones de María y Cristo, además de los santos que forman parte del calendario litúrgico como susceptibles de ser estudiados bajo el concepto catolicismo popular, fuera de esos símbolos del universo sagrado católico se le catalogan como sectas, ello se pondrá a debate. Con la Santa Muerte tenemos un culto emergente que por la connotación que sus devotos hacen del símbolo dominante y de los símbolos instrumentales generaran diversidad de comentarios adversos entre los habitantes de determinada área donde su culto ha abandonado el espacio privado para posicionarse en el espacio público. Estos comentarios estarán enmarcados en ubicar el culto dentro de movimientos sectarios, en donde, ―secta‖ connota para los insertos en el catolicismo popular como sinónimo de ―satánico‖. Con el culto a la Santa Muerte surge un fenómeno interesante dentro de los que Robert Pannet (1976) llama católicos festivos de los medios populares ya que aquellos miembros de la comunidad que no adoptan el símbolo se ubican de facto dentro de un catolicismo más ortodoxo no porque se apeguen más al deber ser que dicta la institución católica, sino por la diferencia que establece con el devoto a la Santa Muerte a quien considera sectario e ―ignorante‖ de su religión; aunque en el análisis de los dos grupos demos cuenta de que poseen la misma información en relación a lo sagrado y las formas rituales son iguales, lo único que cambia es el símbolo ritual. En este primer capítulo trabajo la idea de que el catolicismo popular tiene su núcleo duro en el ritual y su parte más débil en el mito de origen y la exégesis que se hace de los símbolos dominantes e instrumentales lo que hace que la exégesis varié de un lugar a otro. Los cultos emergentes tendrán su motor principal en lo que yo llamo rituales de respuesta inmediata y que están destinados a solucionar de igual manera los problemas emergentes que necesitan ser resueltos, ellos serán básicamente e en el campo económico y el amor. Con respecto a las peticiones en el campo de la salud y protección serán hechas a los símbolos mayores que la comunidad ha erigido como tales, además de la entidad sagrada mayor que es Dios. En este primer capítulo pongo énfasis en los rituales y ofrezco la estructura básica de los mismos, además de los elementos indispensables como son esencias, colores y los artículos necesarios entre ellos la centralidad de la Santa Muerte para elaborar los rituales dependiendo de la aflicción que presenta el demandante. Finalmente, presento un panorama general del culto a la Santa Muerte para poder dar paso a la propuesta de lo alternativo y lo emergente de este culto en un área especifica como es el barrio de Tepito. El segundo capítulo de la investigación versa sobre el estado de la cuestión o del arte del barrio de Tepito y al igual que el primer capítulo se hace necesaria la búsqueda de trabajos elaborados con la óptica de la antropología y en especial aquellos que consideren el fenómeno religioso en el barrio. ¿Qué conocemos del barrio de Tepito? ¿Qué tipo de información nos llega del barrio? ¿Cómo ven el barrio de Tepito los ajenos al mismo? ¿El barrio de Tepito es como lo presentan los medios de comunicación o son los tepiteños los que se inventan? ¿La Santa Muerte ha estado presente desde hace décadas en el barrio de Tepito? ¿La Santa Muerte justifica su presencia en el barrio de Tepito por ser protectora de aquellos que viven al margen de la ley? ¿Verdaderamente conocemos el barrio de Tepito por el hecho de haber transitado sus calles? Este segundo capítulo pretende ―presentar‖ el barrio de Tepito desde diversas ópticas, con lo que, el lector tiene una visión más amplia del espacio donde se desarrolla la investigación. Además, este capítulo ha sido construido para que sirva de base a nuevas investigaciones sobre el barrio de Tepito y surjan nuevas preguntas que generen la inquietud de considerar el barrio como susceptible de nuevas investigaciones. Sobre el barrio de Tepito existe una diversidad de información que es generada principalmente en los periódicos locales y semanarios políticos de circulación nacional. En estos medios de comunicación el tipo de información que se ofrece al lector sobre el barrio de Tepito es la relacionada con su actividad comercial siendo lo ilegal el centro de las opiniones, además de los asaltos a transeúntes, narcotráfico, asalto a transporte público y privado y las ejecuciones que se dan dentro del perímetro del barrio. La información sobre el barrio de Tepito es contrastante ya que por una parte los medios de comunicación lo presentan como un espacio anárquico, insalubre, violento e indomable. Pero los mismos medios de comunicación nos muestran un barrio de Tepito que provee ídolos deportivos que mueven multitudes y que sus logros son en ocasiones el motor que un sector de la población necesita. La información que se vierte sobre el barrio de Tepito posee dos características a resaltar: la primera de ellas es que se trata de acercamientos de corte sincrónico y con ello se elabora la nota; la segunda tiene que ver con la imposibilidad de elaborar estudios de corte diacrónico por la idea que se trata de un barrio peligros, por ello es las voces de los actores se encuentran ausentes, es decir, sobre el barrio de Tepito importa lo que yo pueda decir y no lo que los actores pueden decir de su entorno y su problemática. Las tesis son los únicos estudios de corte diacrónico que sobre el barrio de Tepito existen. En ellas, los autores han transitado por sus calles, otros más han habitado en la casa de una familia en lo que recopila la información, otros le dan prioridad a la voz del cronista del barrio de Tepito y los líderes naturales que surgen en el barrio. Los temas que tratan las tesis sobre el barrio de Tepito son diversos, entre ellas tenemos las de: Mariel Baltierra Arcos (1993) que investiga lo relacionado al liderazgo en una organización vecinal del barrio de Tepito; Noé Gutiérrez González (1988) que investiga sobre la construcción interactiva del albur en Tepito; Mónica Castro Ramírez y Juan Manuel Cordero Peña (2004) que investigan sobre la actitud hacia el comercio en la vía pública en el barrio de Tepito; Mónica E. Ríos (2004) que nos habla sobre la función del imaginario en la reconstrucción literaria de la identidad cultural tepiteña; Luisa Aguilar Urbina (1987) que investiga sobre la reconstrucción de las vecindades de Tepito; Margarita González Torres y Manuel Meyen Morelos (1986) que investigan sobre la organización e interacción en una cooperativa de vivienda en el barrio de Tepito; Guillermina Castro Nieto (1987) que investiga sobre el control político y organización informal: el caso del comercio ambulante del barrio de Tepito; Ernesto Aréchiga Córdoba,(1998) que hace un trabajo de corte histórico sobre el antiguo barrio de indios, Tepito se transforma en arrabal urbano 18701920; Marco Darío García Franco (2005) que investiga sobre las fiestas de quince años en el barrio de Tepito; María Guadalupe Quiroz Padilla (1992) que investiga sobre la problemática de la vivienda popular en el barrio de Tepito: elementos para una antropología de la vivienda y, finalmente, Héctor Rosales Ayala en sus dos obras Casco ¡Vibrencias en un barrio popular y la neta del Arte Acá! (1989) Y, Tepito ¿barrio vivo? (1989). Pero no son las tesis la única fuente que tengo para buscar indicios de la religiosidad del barrio de Tepito. Por ello, recurro a la corriente literaria que se genera en el seno del barrio y que proveerá de una cantidad de datos que serán fundamentales para vislumbrar el vínculo de los habitantes del barrio con lo sagrado, ello claro, en voz de los autores. En este apartado realizo una revisión a la obra de Armando Ramírez y Eduardo Vásquez, en donde, el primero narra las cuitas de los personajes así como las transformaciones que ha sufrido el barrio de Tepito, además que provee información fundamental sobre la religiosidad de los tepiteños; el segundo, es fundador de un taller literario en donde los participantes expresan el vínculo que tienen con el barrio de Tepito, en donde, el elemento religioso es central en la narrativa de los escritores. Se realiza también una revisión a las diversas formas en que la cinematografía ha presentado al barrio de Tepito y una revisión de los diversos blogs en el internet en donde los usuarios expresan su opinión con respecto a los habitantes del barrio de Tepito y sus manifestaciones religiosas. La búsqueda del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito es parte fundamental de la investigación y en el segundo capítulo logro entrever los símbolos sagrados centrales y los diversos usos que sobre ellos hace el tepiteño. Estos símbolos sagrados serán trasladados a los espacios públicos y colocados en altares en torno a los cuales se celebraran ceremonias organizadas por la comunidad que lo erigió. Este segundo capítulo contiene un apartado metodológico que considero fundamental no sólo para m investigación, sino para todo interesado en abordar el barrio de Tepito no importando la disciplina social o de intervención comunitaria. Es necesario tener información sobre el espacio ya que todo encaja a la perfección cuando un científico social diseña en el escritorio las estrategias para obtener el dato. En ese espacio uno recrea los posibles escenarios que ha de encontrar y la manera en que ha de establecer contacto con los nativos. Así también, se piensa que los nativos estarán siempre receptivos a nuestras preguntas y entusiasmados por participar en nuestro proyecto y, con ello, los datos han de fluir en cascada. No se puede ir al trabajo de campo con la idea de que se va a descubrir algo y que ese algo será más comprendido y redimensionado por parte del investigador que por los mismos actores. De igual manera, no se puede acudir al campo pensando que los actores no tienen una idea de las formas en que nos conducimos y las obras que creamos. No hay actores pasivos que reciban con bombo y platillo la llegada del investigador. Por ello, este segundo capítulo compila las experiencias de los investigadores que ha realizado trabajo de campo en el barrio de Tepito en donde narran el escenario y los obstáculos que encontraron al intentar recabar los datos para sus investigaciones. Estás impresiones serán fundamentales en la planeación de los métodos de intervención social que he de emplear en mí transitar por el área de estudio en la elaboración de mi etnografía. Gracias a los cronistas, literatos y tesistas no acudo al campo con inocencia, tengo un panorama de lo que encontraré en el espacio gracias a lo expuesto en sus obras. Tampoco voy a ―descubrir‖ lo que históricamente ha estado ahí y que me interesa dar a conocer a los lectores de esta investigación. El tercer capítulo corresponde a la etnografía del barrio de Tepito y en ella el tema central es tener un primer esbozo del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito a través de los símbolos sagrados que se encuentran en los altares erigidos en la vía pública. La etnografía me permitirá saber el estado que guarda la Santa Muerte como símbolo ritual entre los habitantes del barrio de Tepito y poder exponer su carácter emergente. Para ello he divido el barrio de Tepito en tres zonas ya que a priori considero que habrá mayor presencia de determinados símbolos sagrados en una zona en contraste con otra. A priori establezco que espero encontrar mayor presencia de la Santa Muerte en lo que he llamado la zona C que es donde se ubica el comercio ambulante, además de otros símbolos rituales especializados en ―atraer‖ la buena suerte y ―alejar‖ las envidias y las energías negativas. Siendo que los altares en la vía pública son mi objetivo principal, en la descripción de cada una de las calles pongo mayor énfasis en los elementos que lo integran, la o las personas que lo atienden, el espacio donde se ubican, las ceremonias que ahí se realizan, a quién esta dedicado el altar y la función reguladora de la conducta que generan los altares entre los habitantes. Así también, además de la descripción de las ceremonias que ahí se realizan, ofrezco algunos de los comentarios que algunos vecinos me dieron cuando mi presencia les llamaba la atención y querían saber el objeto de mi investigación. No soy el primer investigador que ha de transitar las calles del barrio de Tepito buscando el dato, otros en diversas décadas lo han hecho. Si ya existe un material descriptivo ¿porqué no hacer uso del mismo? ello sería otra contribución a los formas en que los antropólogos elaboran sus etnografías. Tomar como base los datos de anteriores trabajos permite tener una visión histórica del espacio y poder encontrar mayores explicaciones de los fenómenos sociales del presente. Por lo tanto, algunas calles que he de transitar traerán a mi mente pasajes de otras descripciones que se hicieron sobre el mismo espacio. Ahí podre dar cuenta de los cambios que ha experimentado ya sea la actividad comercial o los personajes que ya no existen o se mantienen, ejemplo de ello son los teporochos. En mi etnografía de abrir citas textuales de otros narradores para que el lector tenga un panorama general de cada uno de los espacios que conforma el bario de Tepito y pueda con ello, formular nuevas preguntas o bien, concebir el barrio de Tepito más allá de la información que proveen los medios de comunicación impresos y electrónicos. Al final de mi recorrido por las calles de Tepito he de presentar en un orden jerárquico los símbolos sagrados que están presentes en los altares erigidos en la vía pública y tener un segundo acercamiento con el culto a la Santa Muerte 2. Al final del capítulo ofrezco al lector en un apéndice gráfico de las imágenes de mayor presencia en estos altares en la vía pública que han erigido los 2 el primero fue a través de las ceremonias de los días primero de mes en Alfarería #12 habitantes del barrio de Tepito y con ello, presento la mitad del universo sagrado del barrio de Tepito tan indispensable para poder presentar la religiosidad del barrio. Abordar el barrio de Tepito no es tarea fácil por el tipo de actividad económica que ahí se desarrolla, además de que algunos líderes de opinión del mismo barrio han satirizado el papel de los investigadores y las disciplinas a las que pertenecen, especialmente la de los antropólogos sociales. Por ello, en el cuarto capítulo ofrezco las experiencias en campo con la finalidad de que esta investigación pueda ser considerada para futuros trabajos sobre el barrio de Tepito. ¿Qué símbolos sagrados se encuentran en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito? ¿Qué tipo de rituales celebran en torno a ellos? ¿Qué tipo de peticiones le formulan? ¿Elaboran rituales de respuesta inmediata con los símbolos sagrados que se encuentran en su casa? Son las preguntas que guían los sondeos –incluyo los formatos- que tienen por objetivo traer del espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito las imágenes sagradas, las peticiones que le formulan, las ofrendas y los rituales que celebran en torno a ellas. El otro sondeo tiene por objetivo ahondar sobre el manejo de información sobre los rituales de respuesta inmediata que manejan habitantes del barrio, además de traer a colación los símbolos sagrados que están en boga, las ofrendas y los rituales que se tejen en torno a ellos. Finalmente presento los datos duros que resultaron de los mismos para que el lector pueda forjarse una idea de la diversidad de símbolos sagrados que existen y que no están presentes en los altares en la vía pública. En el quinto capítulo trabajo el carácter alternativo del culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito y lo refiero al grado de especialización en la solución de problemas que el catolicismo popular ha hecho de los santos. El capítulo ha sido estructurado considerando las siguientes preguntas: ¿La Santa Muerte soluciona problemas que ningún otro santo puede hacerlo? ¿La Santa Muerte ha desplazado al o los santos que se encargaban de solucionar esos problemas? ¿En que situaciones recurren a la Santa Muerte los devotos que viven en el barrio de Tepito? ¿La Santa Muerte esta en proceso de convertirse en símbolo mayor? ¿Cuál es el estado actual que guarda el culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito? ¿Cuál es el símbolo ritual al que actualmente recurre un porcentaje considerable de habitantes del barrio de Tepito? Debido a al carácter alternativo de la Santa Muerte ¿Hacía donde se dirige el culto? Estas preguntas son el eje que articula las reflexiones sobre el carácter alternativo de la Santa Muerte, el cual tiene su lado más fuerte en los rituales de respuesta inmediata ya que en el barrio de Tepito son otros los símbolos del universo sagrado que cumplen con la función de cohesionar y dar sentido a la comunidad. Traigo a colación los resultados de los dos sondeos antes mencionados los cuales arrojan una diversidad de símbolos rituales, además de la diversidad de sistemas de creencias que confluyen en el espacio y van desde testigos de Jehová, cristianos, los que niegan adscripción alguna a un sistema de creencias, espiritualistas trinitarios marianos y habitantes del barrio que se auto nombran ―santeros‖ por profesar el culto a los Orishas. Presento a los lectores lo que llamo el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito que fue uno de los principales objetivos de la investigación para ubicar la presencia de la Santa Muerte en los espacios públicos y privados, además de ubicar los símbolos rituales más usados en el barrio ante los diversos problemas que se le presentan a los que acuden a ellos. Los datos que arroja el sondeo y la manera en que se trabajan en este capítulo llevará a que el lector formule sus propias conclusiones sobre la necesidad de describir los espacios desde la diversidad y no desde la unidad, ya que afirmar que todo el barrio de Tepito es católico o considerar a la Santa Muerte como un símbolo mayor sería dar un salto al precipicio si no son respaldado por una serie de herramientas metodológicas. De hecho, una de mis principales conjeturas que consideraba que la presencia y los usos de la Santa Muerte tendrían mayor presencia entre los habitantes del barrio de Tepito resulto negativa de acuerdo con los datos que arrojan mi etnografía y el sondeo realizado. En el sexto capítulo presento el carácter emergente de la Santa Muerte considerando como factores que corroboran el mismo los diversos de mitos de origen, la diversidad de advocaciones que sobre el símbolo ritual han surgido y el carácter polisémico del símbolo ritual. Las preguntas que articulan este capítulo son las siguientes: ¿El culto a la Santa Muerte es producto de un sincretismo producto de la idea y los usos que sobre la muerte tenían los conquistadores y la idea y los usos que sobre la muerte tenían los conquistados? ¿El culto a la Santa Muerte es de origen reciente? ¿Cómo se ha tejido el vínculo del mexicano con la muerte en la literatura y la cinematografía? ¿Qué elementos de literatura y la cinematografía encontramos en el actual culto a la Santa Muerte? CAPÍTULO I: CONSIDERACIONES SOBRE LA RELIGIOSIDAD POPULAR Y EL CULTO A LA SANTA MUERTE ENTRE LO EMERGENTE Y LO ALTERNATIVO El hombre religioso ve aquello de que trata su religión como lo primario. Lo causante. Solo para la reflexión se transforma en objeto de experiencia observada. Dios es el agente de la relación con el hombre: La ciencia puede solamente hablar de la actividad del hombre en relación con Dios, Pero nada puede decir de la actividad de Dios. (Van der Leeuw) 1. 1 Campo de estudio La intensión de la presente investigación elaborada desde la óptica de la antropología social y en especial desde la antropología de la religión es describir con las herramientas propias de la antropología social aquellas manifestaciones religiosas emergentes que provocan que las mismas instituciones religiosas cierren filas y establezcan un frente en contra de aquello que las ha tomado por asalto, es decir, lo emergente. Estás formas en que la feligresía vive lo religioso ha sido objeto de estudio por profesionistas de diversas áreas del conocimiento como antropólogos, sociólogos, historiadores y teólogos, los cuales, ponen énfasis en la estructura ritual, las características del símbolo y la apropiación y exégesis que los individuos hacen del mismo y, los diversos mitos de origen que sobre el símbolo ritual existe y el origen del culto; ello en su conjunto, ofrece el panorama general las formas en que una comunidad vive lo sagrado. La religiosidad popular implica una apropiación y reinterpretación de los símbolos sagrados -en este caso- que la Iglesia Católica ha determinado como propios. Pero también en la religiosidad popular existe la capacidad de que un grupo pueda erigir sus propios símbolos sagrados que de acuerdo a sus características –principalmente simbólicas- generen tensión entre ellos y la jerarquía eclesiástica. La religiosidad popular como categoría de análisis permite ampliar el umbral de manifestaciones religiosas que pueden ser abordadas porque lo que considera como prioritario es la relación que establece el hombre o grupo para con lo sagrado y las diversas manifestaciones rituales que emanan de ella. Por ello se puede estudiar las diversas manifestaciones del hombre con lo sagrado no importando si el símbolo ritual es la Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo, la Santa Muerte, el Niño Fidencio, Juan Soldado o Jesús Malverde. La religiosidad popular también tiene su núcleo duro que radica fundamentalmente en el aspecto ritual el cual se refuerza y enriquece por la ―importación‖ de rituales pertenecientes a otros sistemas de creencias diferentes al católico. La estructura básica de una investigación sobre religiosidad popular debe incluir aspectos fundamentales como son: la descripción del área de estudio y sus actores, las formas de organización de la comunidad, los tipos de actividades que ahí se realizan, la diversidad religiones y de cultos. Con respecto a las manifestaciones propias de la religiosidad popular se pone énfasis en la fiesta y su organización, la diversidad de connotaciones y usos que sobre el objeto de culto tienen lo oficial y lo popular, la posibilidad que se trate de un culto sincrético, el registro y descripción de los rituales de respuesta inmediata y la relación de tensión que existe entre la Iglesia y la feligresía. Históricamente ha existido una tensión entre la jerarquía eclesiástica y la feligresía por la capacidad que estos últimos tienen de erigir símbolos sagrados e innovar rituales. Estos nuevos símbolos sagrados se les presentan a las jerarquías eclesiásticas locales como lo emergente y responderán a ellos de diversas formas en cada uno de los elementos –símbolo-mito-ritual- que conforman el culto. Sobre cada uno de los elementos que dan forma a un culto se genera un discurso en específico, estás visiones desde dentro y fuera deben ser recopilados y expuestos en los trabajos de religiosidad popular. 1. 2 ¿La religiosidad popular como categoría de análisis es propia de los subalternos o marginados3? 3 El término es tomado de la obra de Larissa Adler de Lomnitz (1975) y se refiere a los grupos que al no tener acceso a los beneficios del Estado como lo son la asistencia social y la salud generan redes sociales reciprocas lo que permite la sobrevivencia de la comunidad. Se debe apuntar que aun y cuando existe una gran diversidad de trabajos de corte antropológico que registran y exponen las diversas manifestaciones que emanan de la relación de un grupo de redes sociales reciprocas con lo sagrado como son el peregrinar, los votos, sus rituales y las oraciones que crean para las peticiones en el auxilio de diversas aflicciones; no le son exclusivos. Esta relación del grupo para con lo sagrado permite que los rituales trasciendan del espacio privado al espacio público ya que son integradores y permiten que los miembros del grupo se reconozcan entre si. Cristian Parker (Parker, Cristian; 1996) apunta que si bien es cierto que con respecto a los estudios sobre la religiosidad popular se han acumulado una importante cantidad de conocimientos sobre las creencias, ritos, mitos, actitudes morales, costumbres y organizaciones religiosas tradicionales del campesinado o de los grupos aborígenes. También se han incrementado los estudios sobre las nuevas expresiones religiosas populares urbanas, como el pentecostalismo y los cultos sincréticos afro americanos, los espiritistas y las sectas. Sin embargo el grueso de los ensayos, notas, observaciones descriptivas y estudios empíricos sobre ―religiosidad popular‖ en el continente, se han detenido en los aspectos más multitudinarios, espectaculares y extraordinarios de la religiosidad de las masas: santuarios populares, peregrinaciones, devociones masivas, movimientos de protesta religiosa, bailes y cantos religiosos. Robert Pannet (1976) exponiendo el caso francés menciona que el catolicismo popular no es exclusivo de la cultura de los pobres o de los proletariados. Pero en su misma obra se contradice cuando establece que cada posición sociocultural determina una manera de ser católico, de tal manera que el catolicismo oficial se distingue por ser más doctrinal, de explicaciones apegadas al dogma y especialmente difundido por los ministros que son, por su nivel de instrucción de un nivel cultural más elevado. Con ello, endosa el catolicismo popular a la cultura popular a la que describe como: Aquellas masas populares que no tienen medios intelectuales ni tiempo para asimilar toda la doctrina o para coronar todas las obras, pero que en bloque, tomando o dejando el mero detalle, se adhieren a la fe de la Iglesia a la que pertenecen. Se trata de grupos que viven generalmente en condición modesta cuyo universo mental no está polarizado por la racionalidad bajo cualquiera de sus formas, filosófica, teológica, científica, técnica. En ellas dominan los sentimientos y las pasiones elementales: amor y odio, amistad y envidia, egoísmo y generosidad, credulidad y duda, necesidad de lo maravilloso, risa y llanto. La conciencia popular es un reino interior en el que no hay direcciones ni comportamientos. No dispone de clasificadores intelectuales, ni de categorías especializadas para ordenar con sentido lógico las ideas, los sentimientos, los principios. Y, sin embargo, tiene su coherencia del lado de acá y del lado de allá de los cuadros del pensamiento racional. La cultura popular está formada de instinto, espontaneidad, de intuición más que raciocinio, de sentimientos aunque quizá frustrados, bastante sólidos y apasionados. Aun y cuando se ha intentado establecer una diferencia en la religiosidad de los grupos considerado la clase social, en el papel no funciona de tal manera ya que cada grupo tiene la facultad de interpretación –y con ello su aspecto práctico- de cada uno de los elementos que componen el universo sagrado del sistema de creencias. Antropológicamente hablando, la ―diferencia‖ que establece los grupos entre si permite que cada uno de los integrantes se reconozcan como tales no importando que ambos compartan puntos en común como es el mismo universo sagrado; la diferencia reside en las interpretación de los mismos. Existen otras categorías de análisis que permiten determinar lo religioso popular, una de ellas será la de catequesis básica de los católicos festivos de los medios populares que propone Robert Pannet (1976) que expondré en este capítulo. 1. 3 ¿Religiosidad popular es lo mismo que catolicismo popular? He mencionado líneas arriba que la religiosidad popular como categoría de análisis es aplicable a cualquier sistema de creencia. Pero de acuerdo al tipo de fenómeno religioso que genera la presente investigación la cual se desarrolla en un medio donde el catolicismo es predominante, se hace necesario acudir a una categoría de análisis que permita describir en términos de la antropología de la religión tanto al espacio donde se presenta lo religioso, las manifestaciones hacia lo sagrado por parte e los actores y la diversidad de elementos sagrados –y una posible diversidad de sistemas de creencias- que coexisten en el espacio elegido por el antropólogo. Por ello, la categoría de análisis catolicismo popular ofrecerá mejores resultados en el desarrollo de la presente investigación ya que hace referencia a la forma en que los individuos o grupos se apropian de elementos del universo sagrado del sistema de creencias católico dándole un sentido práctico y de ahí su vitalidad. Las investigaciones consultadas que hacen uso de está categoría de análisis ponen énfasis en la descripción extensiva y extenuante del aspecto ritual ya que es el punto más álgido debido a la participación de la comunidad que gira ante determinado símbolo sagrado. Efectivamente, el ritual es tan intenso que atrapa al mismo antropólogo el cual solo puede ver como susceptible el describir dicho evento. Con ello se deja de lado los dos elementos que permitirían dar una visión más amplia del culto que se esta presenciando. El mito de origen es fundamental para los estudios de los cultos ya que a través del mismo podemos identificar los cambios que ha experimentado el símbolo sagrado a través de los tiempos, además de que la narración suele ser homogénea en términos del origen de lo sagrado, pero diversas en relación a los favores recibidos. El símbolo sagrado es otro de los elementos de vital importancia cuando se utilice la categoría catolicismo popular, ya que no se trata de una elección al azar, sino que el mismo símbolo posee a su vez otros símbolos que tienen un sentido práctico para aquellos que se adhieren a su cobijo. El catolicismo popular como un sistema específico de conductas con lo sagrado posee una amplia gama de manifestaciones rituales y conductas que para el investigador neófito o experimentado pueden resultar contrarias a las formas en que los individuos o los grupos establecen su relación con lo sagrado. En el desarrollo del presente capítulo ofreceré diversas definiciones de catolicismo popular, además de exponer algunos casos donde se aplican las categorías de análisis religiosidad popular y catolicismo popular. Finalmente, haré una exposición de las formas elementales del culto a la Santa Muerte y con ello, exponer su carácter emergente y alternativo en un área geográfica conocida como el barrio de Tepito enclavado en la parte central de la ciudad de México, espacio donde se encuentra el santuario erigido a ella y que mes con mes recibe a miles de devotos. 1. 4 Religiosidad popular y catolicismo popular: definiciones y su empleo en casos específicos. Para fines de la investigación entiendo por catolicismo popular la capacidad que tiene los grupos de apropiarse y reinterpretar los símbolos sagrados y los rituales que forman parte del universo sagrado católico, además de aquellos que los grupos innovan y que erigen como sagrados. Las definiciones que se dan sobre la religiosidad popular contemplan los elementos antes mencionados –mito, símbolo y ritual- y la posición que juegan dentro de un sistema de creencias más amplio llamado catolicismo. Silvia Ortiz (2000) define la religiosidad popular como una producción cultural de las masas subordinadas que al apropiarse de elementos simbólicos que no surgen en su seno, los adapta, reinterpreta y refuncionalizan, ellos es, el símbolo tiene un carácter práctico. Efectivamente, cuando los subalternos adoptan un símbolo reinterpretándolo, estamos hablando de religiosidad popular. Solamente para complementar la definición de Silvia Ortiz los subalternos no solo adoptan símbolos del universo sagrado del catolicismo, también tienen la facultad de crear sus propios símbolos o adoptar otros que no formen parte del universo sagrado católico, dichos símbolos pueden provenir de universos diferentes y antitético al sistema de creencias en que dice pertenecer el individuo o el grupo. Pero, las formas rituales y los mitos de origen que le atribuyen al símbolo adoptado mantienen la estructura del sistema de creencias; estos símbolos u otros elementos como lo especifica José Luis González (2002) son transformados en función e sus necesidades e intereses. Para Manuel Marzal (2002) el catolicismo popular como todo sistema religioso, está formado por un conjunto peculiar y complejo de creencias, de ritos, de formas de organización, de sentimientos y de normas éticas. Con respecto a las características que presentan los insertos en el catolicismo popular, Marzal refiere: Creen en Dios, en los ―santos‖ y en el demonio, Acuden a la iglesia para recibir el bautismo, la primera comunión, los ritos fúnebres y el sacramento del matrimonio, que sigue siendo, aunque muchos no se casan por la iglesia, un ideal cultural. Participan en la celebración de las fiestas patronales, que son el rito religioso público más importante del continente, y peregrinan masivamente a los santuarios de Cristo, de la Virgen María o de los santos. Los católicos populares tienen, como lo revelan los censos nacionales, conciencia de su pertenencia a la Iglesia; participan en las cofradías y otras formas tradicionales de organización religiosa, y suelen respetar a los sacerdotes y religiosos y así no hay anticlericalismo en la mayoría de los países, a pesar del peso de la Iglesia en la vida pública. Los católicos populares muestran con frecuencia un sincero sentimiento religioso, aunque tengan una instrucción religiosa deficiente, y aceptan los valores cristianos, a pesar de su irregular asistencia al templo y de sus deficiencias éticas. Pero en este amplio espectro religioso, la ―devoción a los santos‖ es el principio fundante. Tal y como lo expresa Marzal, el fin último de la diversas formas en que un grupo establece la relación con lo sagrado es el dotar de un sentido trascendental a su vida y la vida de la comunidad. El símbolo contiene las aspiraciones y los anhelos de la comunidad los cuales se narran en las diversas oraciones y cantos. En las festividades no solo se reafirma el vínculo con lo sagrado, sino que se ponen en juego los elementos que hacen que un individuo se identifique con el espacio y sus habitantes. Robert Pannet (1976) los llama católicos festivos de los medios populares o más brevemente católicos festivos 4, cuyo rasgo distintivo son: Asisten a la Iglesia a la celebración religiosa de los grandes acontecimientos familiares y que poseen una catequesis básica que es con la que interpretan el sistema religioso católico. El catolicismo popular puede ser para otras disciplinas un sistema desordenado, meramente emotivo y compuesto de símbolos contradictorios; 4 El autor no se refiere lo festivo como sinónimo de alegres ejemplo de ello es el estudio de Juan Estrada (1989) en el cual establece que el catolicismo popular –bajo la óptica de la teología- aparece como un fenómeno ambiguo y lleno de interrogantes. Es una religiosidad en la que se juntan elementos sacrales y profanos, componentes que expresan una actitud de fe y una relación con la divinidad junto a otros que pertenecen a la cultura y el folklore popular. El catolicismo popular aparece muchas veces como un sincretismo, pagano y cristiano al mismo tiempo. Otras de las formas en que se aborda esta forma particular de catolicismo se hace resaltando las contradicciones que presenta con la llamada religión oficial5, la cual es especifica en el sentido que guarda tanto el ritual, la función de los símbolos y el manejo e interpretación de las Sagradas Escrituras. Ello difiere del carácter práctico que cada grupo le asigna a cada uno de los símbolos sagrados del universo católico, de ahí que polisemia de un símbolo sagrado. Por ello es que José García (1989) menciona que las esferas de lo oficial y lo popular se entremezclan, coexisten de formas más o menos diferenciadas, y no es tarea fácil definirlas con precisión ya que se trata de formas inadecuadas de entender y de practicar la religión oficial. En donde, la religión popular supondría una asimilación del fenómeno religioso que, en relación con la religión oficial, se situaría a una mayor o menor distancia de la ortodoxia pura, aunque sólo sea por la desviación inherente a la forma como el pueblo entiende y practica la religión oficial. Algunos estudios marcarán la diferencia entre el catolicismo popular y un catolicismo culto o erudito. De acuerdo con estos estudios la diferencia radica en que los primeros se encuentran más apegados al dogma, por ello, sus explicaciones sobre las formas en que establece la relación con lo sagrado son más elaboradas y sus rituales se remiten única y exclusivamente a la liturgia; es conocedor de la vida y obra de los santos a los cuales los toma como modelo a seguir. Los segundos establecen su relación con lo sagrado de manera más pasional, los santos tiene la función de conceder milagros, son incapaces de poder describir las formas en que establecen la relación con lo 5 Se entiende por religión oficial a las formas rituales y la función que cumplen los símbolos sagrados en la Iglesia Católica Apostólica y Romana, además del papel principal que cumple el sacerdote tanto en su parroquia como en la comunidad. sagrado, no pueden ofrecer descripciones densas sobre los cada uno de los símbolos que están presentes en sus fiestas y rituales. Ya Antonio Gramsci (Portelli, 1977) hablaba de religiones propias de cada grupo social. Consideraba que este fenómeno era inherente a la estructura social de la población católica y es básicamente la oposición entre la religión de los intelectuales (la jerarquía eclesial) y la de las clases subalternas, por lo tanto, cada grupo social tiende a elaborar su propio catolicismo lo que provoca una oposición ideológica que tiende a enfrentar la religión elaborada de los intelectuales a la popular de las masas. 1. 5 ¿Dónde se encuentra la frontera entre lo oficial y lo popular con respecto a lo sagrado? Las investigaciones sobre el catolicismo popular se han encargado de separar, primeramente lo oficial o docto, de lo popular o simple e ingenuo. Ejemplo de ello es Luigi Lombardi (1989) que en su ensayo El hambre como derrota de Dios, separa lo popular pensado como las producciones culturales y espirituales de los subalternos, de las producciones culturales y espirituales de las clases más acomodadas. No debe ser considerado como sinónimo de lo popular en el catolicismo las celebraciones en torno a lo sagrado por parte de los grupos con redes sociales reciprocas aun y cuando diversos rituales se celebren en el espacio público con la participación activa de un alto porcentaje de los miembros 6 y que en dichas celebraciones converjan diversidad de símbolos sagrados que ante la óptica de los ajenos puedan ser antitético. De igual manera, no debe ser considerado como sinónimo de lo oficial en el catolicismo los rituales que se celebran en el espacio donde la jerarquía eclesiástica profesa y la homilía por parte del ministro de culto como la única valida. Luego entonces, el catolicismo popular no es exclusivo de los grupos con redes sociales reciprocas aun y cuando sea más identificable por sus manifestaciones rituales debido a la especialización que para ellos guardan 6 En mis diversas asistencias con grupos que celebran en torno a lo sagrado tales como la Santa Muerte o Jesús Malverde y ante la pregunta ¿Qué religión profesa? la respuesta que se obtiene en un alto porcentaje es a la católica. Para ello no es prioritario el saber que su celebración es de corte popular; para ellos la celebración es integradora y les permite reconocerse como parte de una comunidad. determinados elementos de su propio universo sagrado el cual ha sido construido en el constante devenir histórico del grupo. Sería difícil poder determinar el universo sagrado del catolicismo popular por la premisa básica que lo mueve, ella es, todo elemento que lo conforma tiene un carácter práctico, por ello, en el catolicismo popular es la agregación y no la eliminación lo fundamental ya que a mayor número es mejor 7. Por esta característica no se puede determinar un solo universo sagrado propio del catolicismo popular ya que un símbolo ritual puede estar transitando en diversos grupos y en donde, antropológicamente lo que importa es la connotación y la exégesis que se hacen de ellos. El argumento que más se ha usado para establecer la diferencia entre lo oficial y lo popular en el catolicismo es la exégesis que se hace de los elementos que forman parte de universo sagrado católico. En este campo se encuentran la exégesis de la jerarquía eclesiástica y la de la feligresía. La primera pensada como la del erudito que posee un conocimiento del dogma el cual es fuente de su interpretación y, por la otra parte, la voz de aquellos cuya fuente de interpretación es el vínculo emotivo que guarda para con lo sagrado. Con respecto a la exégesis de la feligresía Robert Pannet (1976) propone una categoría de análisis que llama catequesis básica y refiere a la información que el neófito recibe en su preparación para los ritos de paso que han sido institucionalizadas a través del sacramento siendo las principales la Primera Comunión y el Matrimonio. Con esta información, el feligrés interpreta los elementos que forman parte de su sistema de creencias. Para ejemplificar cito dos pasajes extraídos de un Catecismo Popular para adultos8 cuyo ejemplar me fue obsequiado por un habitante del barrio de Tepito: Dios está en todas partes y nos ve Dios está en todas partes: en el cielo, en la tierra y en todo lugar. Dios siempre nos está viendo, y sabe muy bien lo que pensamos, lo que decimos, lo que hacemos todos y cada uno 7 Agradezco al Dr. Carlos Garma Navarro por la reflexión sobre este tópico. Editado por la Asociación Cultural ONIR, A.C en el año de 1988. Aprobado por la Curia del Arzobispado de México y firmado al calce y a lado del escudo de la Secretaria del Arzobispado de México por el Secretario Pro. Bernardo Martínez. 8 de los hombres. En cualquier lugar en que tú le hables. El te oye. Tú no lo ves porque no tiene cuerpo, es un espíritu. El sí te ve. En ninguna parte podrás esconderte de Dios. Si te portas bien, darás gusto a tu Padre Celestial y te premiará; si te portas mal, le disgustarás y te castigará. La Virgen María Madre del Salvador y Madre Nuestra Al llegar el tiempo de la venida del Salvador prometido, Dios mandó al arcángel San Gabriel a una virgen desposada con un varón llamado José. La virgen se llamaba María. El ángel saludó a María diciendo: ―Dios te salve, llena de gracia, el Señor es contigo‖. Dios te ama mucho y quiere que seas la Madre del Salvador, que todos están esperando. Entonces la Virgen preguntó: ―¿Cómo será esto?‖ El ángel le explicó: El Espíritu Santo descenderá sobre ti, por eso el Hijo que nacerá de ti será llamado Hijo de Dios. En seguida la Virgen María aceptó ser Madre del Salvador, y dijo: ―He aquí la esclava del Señor: hágase en mí según tu palabra‖. Y en ese mismo momento el Hijo de Dios se hizo hombre tomando cuerpo y alma por obra del Espíritu Santo, en el vientre purísimo de Nuestra Señora la Virgen María. Desde que María es Madre del Salvador, es Madre de Dios y es también Madre de nuestra espiritualidad. El primer pasaje esta referido a la omnipresencia de Dios y el segundo se refiere a la Anunciación. En estos pasajes están determinados una serie de normas que la Iglesia Católica Apostólica y Romana (ICAR) considera fundamentales para la feligresía, ellos son: la buena conducta merece premio y las malas acciones merecen castigo, Dios es una entidad omnipresente y nadie puede esconderse de Él. En el segundo pasaje se establece la obediencia como el valor supremo, además establece el rol que juega María dentro del sistema de creencias que es ser la madre espiritual. Para la ICAR está información no sufre modificación, pero en el catolicismo popular se presenta un fenómeno particular ya que determinados seres sagrados serán incorporados a la red familiar lo que permite un vínculo más estrecho y permite, además, la formación de la familia extensa9. 9 Para La familia extensa es un fenómeno que se presenta entre los grupos con redes sociales reciprocas y no está referido al vínculo consanguíneo, sino a la capacidad de dar y recibir. ejemplificar lo anterior ofrezco un cuadro que ha sido elaborado con base en mis observaciones y platicas con habitantes de algunos barrios de la ciudad de México y concatenándolo con los pasajes del Catecismo para Adultos ya expuesto, el cuadro es: Sagrado Familia Rol Dios Padre Disciplina, Vigilancia, recompensa-castigo María Madre Amor, perdón, obediencia sin cuestionar Jesús Hermano Confidente, solidario Pero ahora citemos del mismo Catecismo Popular para adultos dos pasajes que tendría que ver con un catolicismo más docto: Cómo debemos recibir a Jesús en la Sagrada Comunión Una vez dijo nuestro Señor a sus discípulos: ―No deis las cosas santas a los perros, ni arrojéis vuestras perlas a los puercos‖. La Sagrada Eucaristía es una cosa santa y vale más que las perlas preciosa. Es el alimento propio de los hijos adoptivos de Dios. Los que tienen la gracia santificante son hijos adoptivos de Dios; pero si alguno llegara a perderla por el pecado mortal, sería semejante a los puerco; y estando así, no podría comulgar, porque el estar en gracia de Dios es la principal condición para comulgar. Si una persona comulga sabiendo que está en pecado mortal, comete un grave pecado, que se llama sacrilegio. ¿Qué debe hacer uno que tiene conciencia de haber cometido pecado mortal? Si quiere acercarse a la Comunión, debe antes confesarse. Además el que va comulgar debe tener recta intención, esto es, deseo de agradar a Dios. En honor a Jesús, la Santa Iglesia manda que antes de comulgar se guarde el ayuno eucarístico, esto es, que desde una hora antes de comulgar no se tome alimento alguno; pero permite tomar agua natural y medicina a cualquier hora. Para recibir con mayor provecho la Sagrada Comunión, debemos prepararnos como se preparan los santos: con gran fe, pensando que vamos a recibir al mismo Jesucristo; con humildad, pensando que no somos dignos de recibirlo; con grade amor, pensando que El nos quiere mucho y que nosotros también lo queremos. Después de comulgar, daremos gracias a Jesucristo, con mucha devoción, platicaremos con Él, como si se platicara con un amigo, y le pediremos muchas cosas para nosotros y los demás. Para esto, conviene dedicar un poco de tiempo después de la Santa Misa. Larissa Adler de Lomnitz lo aborda en su obra Cómo sobreviven los marginados a través del compadrazgo. El sacerdote en el Sacramento de la Penitencia nos reconcilia con Dios y con la Iglesia La misma tarde del día de la Resurrección, Jesucristo se apareció a sus Apóstoles reunidos en el Cenáculo, los saludó, sopló sobre ellos y les dijo: ―Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonareis de los pecados, les serán perdonados. A quienes los retuviereis les serán retenidos‖. Con estas palabras Jesucristo dio a sus Apósteles y a sus legítimos sucesores el poder de perdonar los pecados. El Papa y los obispos, sucesores legítimos de los Apóstoles, comunican a los sacerdotes el poder de perdonar los pecados. El pecado, como ya lo sabemos, es una ofensa a Dios. Nadie puede perdonar la ofensa, sino el ofendido, que en este caso es Dios. Pero Dios puede dar este poder a quienes El quiera. Y en este caso lo ha dado a los sacerdotes. El Sacramento con que el sacerdote perdona, en nombre de Dios, los pecados cometidos después del Bautismo, se llama Penitencia o Reconciliación. Ningún pecado mortal cometido después del Bautismo puede perdonarse independientemente del Sacramento de la Penitencia. Para reconciliarnos con Dios y con la Iglesia, Jesucristo nos dio el Sacramento de la Penitencia. Además del perdón de los pecados, el Sacramento de la Penitencia nos da fuerza para no volver al pecado. En estos dos pasajes queda determinado el papel de la Iglesia y el rol que juegan los sacerdotes como administradores de los sacramentos, además de la capacidad que tienen de perdonar los pecados a través del Sacramento de la Penitencia, queda también manifiesta los pasos que se han de seguir para recibir los sacramentos principalmente el de la Comunión. El Arzobispado de México a través del Catecismo para adultos señala los roles que deben guardar tanto la feligresía como los miembros de la jerarquía eclesiástica. Eso sería el ideal para el Arzobispado de México, pero en la feligresía la relación con lo sagrado responde a otros factores que van desde el consuelo hasta la espera del milagro. Esa misma feligresía también ha tejido una relación para con cada uno de los integrantes de la jerarquía eclesiástica en donde, el sacerdote es la figura que más identifica y las que menos conocen son las de obispo o cardenal. En el catolicismo popular la función del sacerdote se puede reducir a ser tan solo un administrador de los sacramentos tal y como lo menciona Robert Pannet con los católicos festivos de los medios populares o bien puede ser la columna donde descansen grupos de feligreses que se unen para auxiliar en las actividades propias de las parroquias de su localidad. Con base a lo antes expuesto y las observaciones en el barrio de Tepito que hasta el momento he realizado sin la profundidad que brinda el trabajo etnográfico, me permite vislumbrar la relación que guarda los habitantes el barrio para con los presbíteros que profesan en las parroquias ubicadas en el barrio. La relación en términos generales se remite a la solicitud y prestación de los servicios sacramentales como son los bautizos, presentaciones, primera comunión, quince años, matrimonio, renovación de votos matrimoniales a los 25 y 50 años de unión y, los referentes a la muerte. He de citar un ejemplo de la relación que guarda un presbítero con los habitantes del barrio de Tepito en el acto ritual que da inicio a la cuaresma del 2009, ello es: En la liturgia del Miércoles de Ceniza en la Iglesia San Francisco de Asís Tepito10, la homilía del sacerdote versó sobre el misterio de la Resurrección y el significado de recibir la ceniza. La homilía incluyo un llamado a la feligresía a integrarse a las actividades de la Iglesia con respecto a la Semana Santa. El sacerdote se quejo de que no entendía porque en el Vía Crucis apenas lograban reunir 50 personas como máximo y que en la Procesión del Silencio era apenas unas 70 u 80 personas. Reclamó que las personas piensan más en las vacaciones que en el sentido que tiene para los católicos esos días. De acuerdo con Robert Pannet (1976) estos católicos de catequesis básica acuden solo por los servicios que administra el sacerdote y después de ello sus visitas serán esporádicas probablemente hasta que vuelvan a celebrar un evento de corte familiar. En el catolicismo popular el calendario litúrgico suele ser más amplio e involucra a la comunidad y otras más que se adhieren en la celebración en torno a lo sagrado y en donde, no es prioritario que sean precedidas o respaldadas por el sacerdote u otro jerarca eclesial; de hecho, dentro de la 10 Pertenece a la Arquidiócesis de México, IV Vicaría, ubicada en la Plaza Fray Bartolomé de las Casas en el barrio de Tepito. El Presbítero pertenece a la Sociedad de Hermanos de Cristo. comunidad surgen personajes que se encarga de ejecutar y dirigir los rituales en torno a lo sagrado. Ejemplo de ello es el barrio de Tepito que posee un calendario anual en donde circulan imágenes sagradas peregrinas que son recibidas en las casas o vecindades donde se les celebra a través de un rosario. Además, existen grupos consolidados que organizan peregrinaciones en donde, la persona que va en travesía involucra a un número mayor como son su familia u amigos. Los diversos santuarios y espacios sagrados donde peregrina el tepiteños son: San Juan de Los Lagos, Nuestro Señor de Chalma y la Basílica de Guadalupe. Otros más harán peregrinaciones al santuario de Nuestra Señora de Juquila; al Cerro de la Oración en Huatla de Jiménez, Oaxaca; el santuario del Niño del Cacahuatito en Mezquitic, Jalisco; al santuario del Santo Niño de Atocha en Plateros, Zacatecas y recientemente, peregrinaciones cada 28 de mes al templo de San Hipólito mejor conocido como el santuario de San Judas Tadeo en la ciudad de México. Un detalle que también he podido apreciar es el hecho de que las imágenes religiosas que se encuentran al interior de las tres iglesias del barrio de Tepito (Nuestra Señora de la Concepción ―La Conchita‖, San Francisco de Asís Tepito y Santa Ana) se encuentran en los altares erigidos en la vía pública, ello puede ser un indicador del grado de intimidad que guardan los habitantes del barrio de Tepito con el espacio ritual. Uno de los principales objetivos de este trabajo de investigación es poder exponer el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. Además de registrar los diversos usos y la exégesis que los habitantes del barrio de Tepito hacen de los símbolos que conforman su universo sagrado. Ceder el micrófono a los habitantes del barrio de Tepito para que narren la el vínculo que han establecido con los símbolos sagrados permitirá tener también una diversidad de historias que van desde la personal hasta la colectiva ya que los habitantes del barrio en alguna ocasión habrá de peregrinar, habrá de pagar una manda, formara parte de un grupo en el que un elemento sagrado sea el que cohesione. Para la antropología social esa exégesis y los usos que se hacen de los símbolos sagrados son de vital importancia. En donde no tiene relevancia si el devoto conoce la hagiografía del santo, ello no es el centro de su devoción, sino la espera de un milagro. La historia que los devotos cuentan sobre el símbolo sagrado va de la mano con la historia de la comunidad la cual tiene por lo normal su génesis en una crisis y por ello el haber recurrido al santo para la solución de la misma y el éxito de la petición estrechara el vínculo con lo sagrado; a través del santo se cuenta la historia de la comunidad y ello se transmite de generación en generación. De hecho, este es un recurso que puede utilizar el antropólogo social cuando intente ―construir‖ la historia de un grupo o una comunidad, contar la historia a través del vínculo de los grupos con lo sagrado. 1. 6 La centralidad de lo sagrado y la adopción de símbolos que responden a situaciones emergentes a los que se les construyen un referente sagrado. Hasta el momento he presentado las características del catolicismo popular y he descartado el endosarla a una clase social. He propuesto la categoría de análisis catequesis básica como un auxiliar para determinar si el fenómeno religioso que ha llamado nuestra atención se puede abordar desde la categoría de análisis catolicismo popular. Ahora bien, cuando hablamos de catolicismo popular nuestra observación se circunscribe a la apropiación y los usos que hace la feligresía de los símbolos que forman parte del universo sagrado –aquí la importancia- de la institución religiosa. He realizado la revisión de trabajos que utilizan la categoría religiosidad popular o bien catolicismo popular y en ellos puedo observar la centralidad de algunos símbolos del universo sagrado católico como son las diversas advocaciones de María, y Cristo, en los cuales, la exégesis que hace la feligresía de ellos se apega a la catequesis que obtienen en su preparación que pide la institución religiosa para los ritos de paso. Se deben considerar a estos como símbolos mayores, por ello la exégesis que de ellos se hace no presentan variaciones y su origen sagrado no es cuestionado. Se trata de símbolos que cumplen la función de cohesionar a una comunidad mayor y a los cuales se le hacen las peticiones más importantes que son las referentes a la salud y la protección de todo mal. Antropológicamente hablando, son los símbolos más difíciles de abordar en su referente del mito de origen, ellos no pueden ser cuestionados ni puestos en duda. Por otra parte, los santos oscilan entre ser considerados como símbolos mayores y símbolos rituales. Antonio Rubial García (1997) en su ensayo Los santos milagreros y malogrados de la Nueva España menciona los ―usos‖ que la tradición cristiana ha hecho de los santos, ello son: Los santos, cuyo culto y reliquias se sacralizaron, se convirtieron en patronos…se volvieron también los compañeros invisibles, los amigos y protectores contra los males del mundo. Con los santos el hombre puede entablar vínculos en forma de transacciones. A cambio de peregrinaciones y actitudes de dependencia, los santos manifiestan su potencia a través del milagro: la curación de la enfermedad provocada por el pecado, la salvación en los peligros. La realización de milagros principalmente relacionados con el cuerpo. Ante todo es un intermediario entre Dios y el hombre. Se presenta una especialización de los santos, en donde, para cada aflicción del hombre corresponde un santo que esta especializado en la solución de la misma. Los santos, al ser apropiados por la feligresía cumplen una función diferente, llegando a la especialización en la solución de problemas que se le presentan al individuo en su vida, ello difiere de la función que la institución religiosa les atribuye que es el ser modelos para que a través de su vida y obra la feligresía los imite para alcanzar la santidad a la que esta llamado el hombre. Sobre la especialización que los insertos en el catolicismo popular les atribuyen a los santos he de citar un pasaje de la obra de Oscar Lewis (1982) Los hijos de Sánchez. Valga también expresar que el espacio en donde se desarrolla la obra de Lewis es la vecindad conocida en su tiempo como la Casa Blanca enclavada en el barrio de Tepito a escasos metros donde se encuentra actualmente uno de los santuarios más importantes de la Santa Muerte. El pasaje es el siguiente: Muchas mujeres que conozco, para que venga una persona le rezan al ánima de Juan Minero. A las doce del día se le prende su veladora y se le pone un vaso de agua detrás de la puerta, y se le dan tres golpes a la puerta uno con cada Padrenuestro que se rece. San Antonio también es muy bueno para traer a los maridos, a los amantas, a los novios. La que sabe mucho de estas cosas es Julia, la vecina de mi tía, y dice que se pone un San Antonio de cabeza y se le tapa al niño y atrás el retrato de la persona y se le amarra en cruz con un listón rojo. Se le prende su vela y se le dice: ―San Antonio, si no me cumples lo que te pido, no te dejo ver a tu niño.‖ Dicen que San Antonio quiere mucho a su niño y por eso para que se apure en cumplir lo que se le pide debe tapársele. Si uno tiene una prenda de aquella persona –calcetines, calzones- con está se envuelve a San Antonio; es más efectivo. San Benito también trae a los maridos pero él los golpea cuando están con la otra mujer. Yo tenía miedo de rezarle porque a lo mejor me sale chueco el tiro y regresaba peor que antes. El pasaje muestra la especialización en la solución de problemas que los insertos ene el catolicismo popular han hecho de ellos. Amor y dinero serán las dos peticiones básicas que deberán cumplir los santos y deberán ―mostrar‖ su eficacia sino han de ser desplazados por otros símbolos rituales que si cumplan la petición. Estas formas en que los inscritos en el catolicismo popular especializan algunos símbolos del universo sagrado católico es el punto que genera tensión entre la jerarquía eclesiástica y la feligresía, pero la relación no se rompe, solamente se puede presentar un distanciamiento entre el feligrés y el espacio físico que administra el sacerdote, llevando al santo a otros espacios donde la jurisdicción de la institución no tiene alcance. En esos espacios los entonces llamados devotos celebraran ritos en torno al santo, será el lugar donde se hagan las peticiones y por supuesto se paguen las mandas, ahí surgirán formas especificas del culto que no serán reconocidas por la institución, pero que dotaran de sentido a los participantes. En esos espacios surgirán nuevos actores en torno al culto como son aquellos que construirán la historia del símbolo, los que oficiaran los ritos y aquellos que podrán consagrar las imágenes. La relación con la institución religiosa se remitirá a la administración de los sacramentos como son el bautismo, primera comunión y el matrimonio principalmente. Hasta aquí no hay nada nuevo en los estudios sobre catolicismo popular, este fenómeno se presenta en varias partes del mundo al igual que la tensión entre institución religiosa y feligresía. ¿Qué reacciones suscita el hecho de que el símbolo adoptado no tiene parangón en el universo sagrado católico? ¿Qué reacciones suscitara el hecho de que el símbolo adoptado connote la antítesis del dogma fundante de la iglesia católica? Existen una diversidad de usos que la feligresía hace de los símbolos sagrados católicos, en torno a ellos celebran rituales –como la limpia con veladoras- que no son aprobados por la jerarquía eclesiástica y cada vez que exhortan a la feligresía para que abandonen esas prácticas sucede un distanciamiento entre las dos partes. Son los santos los que constantemente han generado tensión entre las dos partes, ya sea por los usos que de ellos se hacen o las formas festivas que la comunidad teje en torno a ellos. Hablo de tensión más no de ruptura, ello se debe a que el mismo símbolo ritual esta en poder de los dos grupos aunque los fines sean diferentes. Son algunos personajes con actividades específicas a los que los grupos le han reconocido la santidad, pensada en la capacidad de obrar milagros, los que han generado el distanciamiento o la ruptura de la feligresía con la jerarquía eclesiástica; son ejemplo de ellas: La Bendita Ánima de Juan Soldado, Jesús Malverde, el Niño Fidencio, San Simón (santo popular guatemalteco) o la Santa Muerte. Antonio Rubial García (1997) expone que esta acción de erigir como santos a personajes, si bien proviene de Europa, se acentúa más en la Nueva España. Sobre ello refiere: La Nueva España del siglo XVII tenia una población que contemplaba a los santos en sus funciones a las de los antiguos dioses que aún sobrevivían, era lo único efectivo en la solución de las numerosas y lacerantes necesidades materiales. Al igual que en el cristianismo primitivo, la existencia de santos locales creaba nuevas formas de socialización y su existencia llenaba de sentido una tierra que no la tenía aún. La canonización de los santos autóctonos se convirtió para los criollos novohispanos en algo de vital importancia, pues si su tierra era fértil en frutos de santidad, quedaba demostrada su igualdad con los europeos. Una tierra que producía santos era una tierra madura espiritualmente, por lo tanto la exaltación de personajes autóctonos se convertía en una forma de autoafirmación. Existía un bloqueo por parte de la Santa Sede por no canonizar personajes de la Nueva España y lo que más pudieron otorgar fue la beatificación del mártir franciscano Felipe de Jesús (1621) y el también franciscano Sebastián de Aparicio (1789). Carlos III limito la canonización de santos nativos y solo permitió los santos peninsulares; darles santos a los criollos significaba entregarles armas para que se independizaran. A pesar de no haber sido canonizados oficialmente por la Santa Sede, los siervos de Dios autóctonos recibieron culto popular en sus imágenes y sus reliquias y sus vidas fueron preservadas y difundidas en voluminosos tratados hagiográficos. A través de estos llamados pseudos santos se conoce los valores morales, jurídicos o estéticos de la sociedad que los produjo. Pues bien, el surgimiento o el auge que tiene un santo en su momento histórico responden a necesidades emergentes que se le presentan al hombre y que no son solucionadas por algún elemento del universo sagrado católico. Por ello, en el caso de la Santa Muerte tenemos un fenómeno religioso bastante peculiar ya que, las funciones y atributos que los devotos le han conferido son las mismas que ha cualquier santo perteneciente al universo sagrado católico. Pero, como símbolo dominante, no tiene parangón dentro de ese universo sagrado católico, menos aun los símbolos instrumentales que la conforman. Así también, como representación dentro del dogma cristiano cumple con una función diferente a la que los devotos le confieren. Para las instituciones religiosas emanadas del cristianismo la representación connota lo que al final de los tiempos deberá ser vencida, la derrota de la muerte es la que sustenta el principio fundante. La adopción de este símbolo antitético cumple un papel fundamental en aquellos que lo tienen como un recurso al cual se puede acudir en momentos de aflicción. No se puede hablar de la centralidad de la Santa Muerte entre los devotos ya que otros símbolos son de uso cotidiano y el grado de vinculación con cada uno de ellos dependerá directamente de la aflicción que les tome por asalto. La Santa Muerte por sus características no puede ser aceptada como un símbolo ritual alternativo el cual al paso del tiempo pueda ―domesticar‖ y reglamentar. Por sus características se le ataca, se le llama culto satánico y se exhorta a la feligresía ha abandonar ese culto. Pero el vínculo que establece el devoto para con la Santa Muerte va más allá de los rituales que con ella se elabora, se trata de una devoción que cumple con la función de trascendencia para un grueso de los devotos. Esa trascendencia queda clara para ellos cuando mencionan que será Ella quién vendrá por ellos para llevarlos ante Dios y de alguna manera, los ceremonias masivas que se generan en torno a la Santa Muerte cumple con dos funciones, pedir que cesen las desgracias y tenerla contenta para cuando llegue el momento, que llegue una muerte más ―dulce‖. 1. 7 Criterios de adopción de símbolos propios y antitéticos del universo católico y su especialización Con respecto a los símbolos ajenos al universo sagrado católico que adoptan algunos individuos de una comunidad, sus usos estarán más referidos a los rituales de respuesta inmediata 11, entendiendo estos como una alternativa a la solución de los problemas del individuo principalmente la salud, el amor y el dinero, en donde el símbolo juega el papel central ya que esta especializado en la solución de los mismos; además de necesitar una serie de artículos con determinadas características que al ser ordenados atraen lo deseado. Para ahondar sobre los criterios por los cuales los individuos adoptan símbolos ajenos al universo católico, pensemos en la propuesta de Víctor Turner (1999) de considerar al símbolo como dominante y que el mismo contiene símbolos instrumentales. El criterio básico por el cual un individuo adopta un símbolo ritual –pensándolo como símbolo dominante- tiene que ver con los símbolos instrumentales que lo conforman y que son aquellos que determinan su especialización. Por ello, cuando al demandante se le pregunta sobre los problemas que pueden solucionar esos símbolos rituales hacen referencia a los símbolos instrumentales. Para ejemplificar lo anterior recurro nuevamente al pasaje citado líneas arriba de la obra de Oscar Lewis Los hijos de Sánchez de (1982): Muchas mujeres que conozco, para que venga una persona le rezan al ánima de Juan Minero. A las doce del día se le prende su veladora y se le pone un vaso de agua detrás de la puerta, y se le dan tres golpes a la puerta uno con cada Padrenuestro que se rece. San Antonio también es muy bueno para traer a los maridos, a los amantas, a los novios. La que sabe mucho de estas cosas es Julia, la vecina de mi tía, y dice que se pone un San Antonio de cabeza y se le tapa al niño y atrás el retrato de la persona y se le amarra en cruz con un listón rojo. Se le prende su vela y se le dice: ―San Antonio, si no me cumples lo que te pido, no te dejo ver a tu niño.‖ Dicen que San Antonio quiere mucho a su niño y por eso para que se apure en cumplir lo que se le pide debe tapársele. Si uno tiene una prenda de aquella persona –calcetines, calzones- con está se envuelve a San Antonio; es más efectivo. San Benito también trae a los 11 Este tema lo desarrollare en un capítulo y he de ofrecer la diversidad de símbolos, así como sus usos y las características de cada uno de los artículos que se necesitan para que el ritual de respuesta inmediata tenga éxito. maridos pero él los golpea cuando están con la otra mujer. Yo tenía miedo de rezarle porque a lo mejor me sale chueco el tiro y regresaba peor que antes. Con respecto al primer símbolo ritual que es el ánima de Juan Minero los inscritos en el catolicismo popular recurren a él para solucionar principalmente los problemas referentes al amor y el dinero. En el internet uno puede encontrar una serie de rituales en que el Ánima de Juan Minero es el símbolo ritual. En uno de ellos se puede leer lo siguiente: Juan minero, tráeme dinero Se Necesita: *Un kilo de velas de sebo, blancas *Cien gramos de polvo de piedra imán —la encuentra en los mercados. Esta operación debe comenzarla un martes y realizarla el tiempo que usted considere necesario. A una vela de cebo úntele el polvo de piedra imán. El ―trabajo debe hacerlo a oscuras totalmente, encienda la vela y diga fervorosamente: ―Juan minero, tráeme dinero‖ Repita lo anterior cuantas veces le sea posible. Deje consumir la vela. Usted puede salir de la habitación e irse a otra parte. Quizás se cuestione el porqué se debe apagar la luz; sucede que Juan minero trabajaba en las minas y su espíritu se identifica con la oscuridad, entonces para invocarlo es necesaria. 12 La oscuridad es el elemento principal que debe contener el ritual para que la petición sea cumplida. La función del Ánima de Juan Minero dentro de este ritual es la de atraer a la persona amada y con ello cumple una función diferente a la asignada dentro de la institución religiosa la cual esta asociada a la existencia del purgatorio. El ánima y su estancia en el purgatorio fueron los dos elementos que generaron la creación de las capellanías. Sobre ello, Cyntia Montero Recorder (1998) refiere: Los motivos de la fundación de las capellanías son diversos, pero todos coinciden en señalar que el objetivo primordial es la de celebrar las misas, porque la misa es ―el santo sacrificio que 12 http://magiarecetashechizos.blogspot.com/2009/04/juan-minero-traeme-dinero.html se le puede ofrecer a Dios y el sufragio mayor para las ánimas del Purgatorio‖. Los fundadores querían tener la certeza de que esta ofrenda se celebraría después de la muerte y el nombrar a familiares o conocidos aseguraba que se rezarían las misas por ellos…La misa es uno de los sufragios más importantes. Con ella se beneficia a las ánimas del Purgatorio (principalmente la del fundador) que están padeciendo la cruel tormenta de llamas y que se encuentran detenidas en prisiones de fuego, purificando las imperfecciones con que salieron de este mundo. Con la misa reciben el descanso y el alivio que desean, para gozar de la gloria eterna, donde estarán alabando la suprema majestad de un solo Dios y trino en persona, acompañadas de todos los bienaventurados y las demás jerarquías eclesiásticas. El uso de veladoras, flores, agua bendita, semillas e inciensos serán elementos que estarán presentes en los rituales de respuesta inmediata. Así también, existen números cabalísticos que serán de uso común como son el número 3, 7 y 12. El tocar tres veces a la puerta se utiliza para llamar a seres que están en otra ―dimensión‖; este recurso ha sido utilizado en los cuentos y fabulas. Con respecto al Padre Nuestro es el elemento que permite al ejecutante operar en un contexto sagrado y no profano, este elemento al igual que el rosario son los elementos más presentes en los rituales de respuesta inmediata. Ahora bien, tomemos a San Benito y considerémoslo como símbolo dominante; en su iconografía se le representa con un báculo y consideremos a este elemento como el símbolo instrumental que es el referente principal de petición, considerando al báculo como el instrumento que debe restablecer el orden. La hagiografía de San Benito nos habla que fue envenenado por un sacerdote de la región de Subiaco que le envidiaba. Por ello, en otras regiones se le pide a San Benito que los proteja contra las picaduras de las ortigas; el veneno; la erisipela13; la fiebre y las tentaciones. Por lo tanto, la especialización del santo estará en el símbolo instrumental o como en el caso de la Ánima de Juan Minero, en un pasaje de su vida. No hace falta ahondar sobre la especialización que dentro de aquellos de catequesis básica le han dado a San Antonio de Padua. En la obra de Oscar Lewis queda de manifiesto que el símbolo instrumental es el niño que trae entre brazos. ¿Qué connotación tiene el niño? Sin duda, la pareja para que pueda 13 Inflamación microbiana de la dermis, caracterizada por el color rojo y comúnmente acompañada de fiebre. existir y con ello una familia, por lo tanto la función principal de este santo es traer a la persona amada más no la deseada. En esta narración sobresale otra característica del catolicismo popular que es la de ―separar‖ o ―secuestrar‖ unos se sus símbolos instrumentales que posee el santo para ―obligarlo‖ así a cumplir con lo deseado. Si el santo no cumple la promesa será relegado al ―panteón de santos‖ que los insertos en el catolicismo popular tienen. A San Antonio de Padua se le ―secuestra‖ al niño, de igual manera en que a la Santa Muerte le separan una mano o le cercenan la cabeza a San Judas Tadeo o bien por no cumplir lo demandado o porque esta por cumplirlo. Estas manifestaciones han sido observadas y registradas en mí transitar por el barrio de Tepito en la recolección de información para la presente investigación. Con respecto a la presencia de la Santa Muerte en esta oración extraída de la obra de Oscar Lewis (1982) la función que cumple es la de regresar al ser amado humillado a los pies de la demandante. Manuel Marzal (2002) analiza esta misma oración en un trabajo que elabora sobre la obra de Lewis y refiere sobre ella lo siguiente: Los rezos al Ánima de Juan Minero, un ―santo informal‖, y a la Santa Muerte, que es Cristo Muerto. Al primero se le prende una veladora a las doce del día, se coloca un vaso de agua detrás de la puerta y se golpea ésta tres veces, mientras se rezan tres padrenuestros. A la segunda se le rea a las doce de la noche, con una vela de sebo en la mano y ante el retrato del ausente, cuyo retorno se implora. Marta compró, iniciada por su hermana paterna Antonia, una estampa con una oración, pero no la llegó a rezar, porque con su pareja Crispín ―no quería nada a la fuerza‖. La oración es ésta: Jesucristo Vencedor que en la cruz fuiste vencido, quiero que por tu intervención, Padre, me traigas a Crispín, que está vencido conmigo en el nombre del Señor. Si es animal feroz, manso como un cordero, manso como la flor de romero tiene que venir. Pan comió de él me dio; agua bebió y de ella me dio. Y por todas las cosas que me prometió quiero, Señor, que por tu infinito poder, me lo traigas rendido y amolado a mis pies a cumplirme lo que me prometió. Como creo, Señor, que para ti no hay imposibles, te suplico encarecidamente me concedas esto que te pido, prometiendo hasta el fin de mi vida ser tu más fiel devota. Llama la atención que cuando Marzal se refiere a la Santa Muerte hace una asociación directa con Cristo Muerto. Esta oración es una de las primeras que se conocen de la Santa Muerte, permanece su vigencia aunque han surgido otras día con día debido al grado de especialización que ha alcanzado la Santa Muerte, así como la diversidad de representaciones que han surgido las cuales tienen una oración en especial. De acuerdo a la propuesta de Víctor Turner (1999) ¿Qué símbolo instrumental determina la función de la Santa Muerte? De acuerdo con mis observaciones y las oraciones recopiladas en las ceremonias que he acudido puedo afirmar que la guadaña –como símbolo instrumental- es aquella que determina la función principal que es la de proteger de aquellos que atentan contra las personas y los bienes de quien acude a ella. Las mayores oraciones que existen gira en torno a la protección y de hecho en cada una de las ceremonias a la Santa Muerte los devotos recitan una oración que lleva por nombre la guadaña protectora la cual transcribo a continuación: Oración de la guadaña protectora Señora Blanca, Señora Negra, a tus pies me postro para pedirte, para suplicarte, hagas sentir tu fuerza, tu poder y tu omnipotencia contra los que intenten destruirme. Señora te imploro seas mi escudo y mi resguardo contra el mal, que ti guadaña protectora corte lo obstáculos que se interpongan, que se abran las puertas cerradas y se muestren los caminos. Señora mía, no hay mal que tu no puedas vencer ni imposible que no se doble ante tu voluntad, a ella me entrego y espero tu benevolencia Amen. 1. 8 Diferencia entre símbolo mayor y símbolos adoptados Es importante establecer la diferencia entre un símbolo mayor y un santo o ánima que adoptan individuos pertenecientes a la comunidad. El primero históricamente ha estado presente en la vida de la comunidad cuya principal función es proteger y proveer un estado de bienestar. En los rituales en torno al símbolo mayor participa la comunidad y ello les permite identificarse como parte de la misma. La exégesis que sobre el símbolo mayor elaboran los miembros de la comunidad no presenta variaciones y sobre la historia del símbolo mayor ubican su génesis generalmente en una crisis por la que paso la comunidad. En la narración el vínculo que establece el símbolo mayor y la comunidad es indisoluble y ese vínculo necesita ser renovado generalmente cada año; ejemplo de ello, son los diversos estudios sobre la mayordomía. El espacio donde reside el símbolo mayor generalmente se encuentra en espacios que preside la jerarquía eclesiástica, no importando que el símbolo mayor se haya manifestado en un espacio fuera del mismo, en dado caso se edifica un santuario que de igual manera será presidido por la misma. Los símbolos que se adoptan pertenecientes o no al universo sagrado de su sistema de creencias, tienen más un carácter individual y responde a necesidades emergentes que se le presentan al individuo. Por ello la exégesis que sobre el símbolo dominante y los símbolos instrumentales tendrá variaciones de un individuo a otro. De igual manera el vínculo que estable el símbolo adoptado tendrá variaciones de un individuo a otro. Ahora bien, estos símbolos adoptados por su capacidad de respuesta inmediata pueden tener un alcance mayor con individuos de la comunidad; ello puede generar que el símbolo deje el espacio privado que es generalmente donde se encuentra, a un espacio público donde los devotos del mismo puedan celebrar el ritual colectivo en torno al símbolo y que de igual manera puedan identificarse como miembros de una nueva comunidad, ya que apoyan o propician colectividades. Cuando el símbolo adoptado se posesiona del espacio público puede generar tensión no solamente con la institución religiosa, sino con la comunidad misma. La primera consideración sobre el símbolo mayor es más visible en las zonas rurales o en el área metropolitana en los lugares donde los habitantes aun se nombran pueblo. La segunda se presenta más en la urbe, donde los constantes cambios por migración y un proceso de secularización no han permitido el arraigo de un símbolo mayor, aun y cuando la Virgen de Guadalupe tenga presencia en los espacios tanto público como privado. Recurro a Carlos Garma (2004) para ejemplificar las diferencias entre los dos espacios en que el símbolo puede considerarse como mayor y con ello un arraigo con la comunidad lo que frena la inserción de nuevos símbolos y formas rituales; y por otra parte, un espacio que permite la presencia de una diversidad de símbolos y formas rituales que fragmenta a la comunidad e impide el arraigo hacia una solo símbolo. Carlos Garma –en su estudio sobre el pentecostalismo- establece esta relación cuando identifica que en las zonas consideradas más democráticas ello es, colonias de reciente formación es más común la presencia de recintos pentecostales, es decir, una diversidad de sistemas de creencias; mientras que en las zonas de la misma delegación Iztapalapa donde los habitantes se denominan como pueblo, se reduce a grados mínimos la presencia de individuos o familias pentecostales, es decir, son espacios en donde el vínculo entre el habitante y el símbolo mayor es estrecho, lo que impide una diversidad de sistemas de creencias. 1. 9 El ritual como motor de la religiosidad Para Arthur Hocart (1975) ―El ritual como entidad dinámica consiste en investir de poder a alguna persona o cosa, de forma que ésta sea capaz de conferir la vida, entendiéndose por vida a la vez la salud, riqueza y fertilidad; esto se realiza mediante la celebración de determinados actos, al tiempo que se recita el mito en que se relata lo que se supone que el creador del rito hizo en los orígenes. El ritual es una actividad social; requiere, por tanto, una organización, y organización significa jerarquía. Los cultos emocionales son al mismo tiempo individualistas y gregarios: individualistas en cuanto que cada participante sigue su propia fantasía, gregarios en cuanto que todos los participantes actúan juntos y sus fantasías están marcadas por la monotonía. Todos necesitan compañía para excitarse, pero cada uno se excita por sí mismo. Hay entre ellos poco trabajo de equipo. Los rituales emocionales son democráticos, y por tanto las sectas emocionales lo son igualmente‖. En el catolicismo popular el ritual es punto máximo de cohesión entre la comunidad y lo sagrado. La innovación es una de las principales características que presentan los rituales que las comunidades celebran en torno a lo sagrado, ello debido a su capacidad integradora. Son los rituales en torno al símbolo mayor (el protector de la comunidad) los que permiten que el todo se cohesione, ello se debe a que el ritual organiza la fe mediante la repetición incansable de la apologética (Portelli, 1977). En ese tiempo de celebración, los rituales que tienen como lo central al símbolo mayor pueden ser oficiados por un presbítero dentro del espacio de culto (lo que le daría un carácter oficial) o bien por uno o varios integrantes de la comunidad en los espacios que ellos han determinado. Esta diversidad de rituales se genera sin causar tensión entre las dos partes aun y cuando la exégesis que se hace del símbolo mayor no tengan puntos en común y es a través de dicha exégesis donde podemos encontrar el vínculo indisoluble de lo sagrado con la comunidad. Ahora bien, para fines de este apartado he de considerar las tres categorías de análisis en torno al ritual que propone Víctor Turner (1999) que son: ritual, símbolo ritual y ritual de aflicción que ayudaran en el desarrollo de la presente investigación. El ritual de acuerdo con Turner se trata de una conducta formal prescrita en ocasiones no dominadas por la rutina tecnológica y relacionada con la creencia en seres o fuerzas místicas. Dentro del catolicismo popular, los elementos del universo sagrado católico son susceptibles de ser ritualizados. Cada uno de estos símbolos pueden considerarse como símbolo ritual el cual define Turner como un factor de la acción social, una fuerza positiva en un campo de actividad, en donde, el símbolo viene a asociarse a los humanos intereses, propósitos, fines y medios. Para ejemplificar consideremos la liturgia como el ritual principal que celebra la Iglesia católica; en este ritual Cristo es el símbolo mayor, por ello, la distribución que guarda los elementos simbólicos dentro del espacio ritual se distribuyen a los costados, considerando el centro como propio de Cristo. La misma feligresía identifica la centralidad de Cristo, de tal forma, la relación que existe entre Él y los hombres se da en términos de latría. Cuando una advocación de Cristo es considerado el protector de la comunidad las conductas rituales son un tanto diferentes que cuando un santo es el protector, ello debido a que el tiempo ritual se celebra en Semana Santa, en donde, se recuerda la vida, pasión, muerte y resurrección de Cristo. Elías Zamora (1989) en su trabajo sobre el culto a los santos, presenta las diferencias que desde el punto de vista doctrinal a los santos se les debe culto de dulía o veneración, a Dios se rinde culto de adoración o latría y a la Virgen por sus condiciones especiales, se le rinde culto de hiperdulía, mostrándose de esta forma su posición superior entre los santos. Para los estudiosos del catolicismo popular no existen grandes problemas cuando abordan con todo su bagaje científico los cultos que giran en torno a los santos; pero resulta difícil abordar con el mismo bagaje científico las diversas advocaciones de Cristo y la Virgen. Aun para los investigadores del fenómeno religioso -no importando su adscripción religiosa- resulta difícil cosificar estos elementos centrales del universo sagrado católico y del mismo cristianismo. Incluso, por muy básica que sea la catequesis de la feligresía, Cristo y la Virgen cumplen funciones diferentes como proveer el amor y el sentido mismo de la vida. Por el contrario, para los estudiosos del catolicismo popular otros elementos del universo sagrado católico -en específico los santos- son susceptibles de ser considerados símbolos rituales ya que la misma feligresía los han especializado en la solución de determinadas aflicciones, por ello acuden a su amparo. Como lo establece Víctor Turner, estos símbolos rituales están asociados a los humanos intereses, propósitos, fines y medios. Los santos como símbolos rituales están referidos a su especialización en la solución de los problemas cotidianos de aquellos que lo solicitan, en especial aquellos que tienen que ver con el amor, dinero y la salud. Para ejemplificar sobre el símbolo ritual recurro a la obra de Ray Malbrought (1998) en el que hace un compendio de los santos más milagrosos y las enfermedades y males que elimina, de los cuales cito los siguientes: San Ignacio de Loyola que protege la casa de los espíritus malignos, San Benito elimina fiebres o enfermedades contagiosas y especial todas aquellas que tengan que ver con un veneno; Santa Clara de Asís es solicitada para solucionar los problemas de alcoholismo y mejorar el entendimiento, Santa Inés para los problemas de infidelidad en el matrimonio, Santa Bárbara para alejar la maldad y protectora de las mujeres. Líneas anteriores mencione que estos símbolos rituales operan por lo normal en un espacio privado; representan para el que acude a ellos la posibilidad de solucionar sus problemas. El que opta por ellos también adquiere un bagaje de las formas específicas y de los elementos (esencias, inciensos, frutas, metales, colores, hierbas, oraciones especiales, veladoras) básicos para que el símbolo ritual pueda cumplir lo prometido. ¿Puede un símbolo ritual desplazar al símbolo mayor? Ello depende de su capacidad taumatúrgica ya probada por aquellos que acuden a él. La información sobre los milagros que concede un solo ritual determinado circula en la cotidianidad de la gente. El testimonio es el elemento principal por medio del cual un símbolo instrumental puede cobrar mayor auge que el símbolo mayor. Carlos Garma (2004) menciona que el testimonio posee un argumento basado en una expresión oral que cuenta una historia que suele basarse en una vivencia del narrador. Esta vivencia muestra cómo el contacto con lo divino ha influido sobre la persona; el testimonio siempre lleva una moraleja, porque se destaca el triunfo del bien sobre el mal. Cuando el símbolo ritual que esta cobrando auge se encuentra dentro del espacio de la Iglesia, puede –dependiendo la particularidad de cada casopuede generar tensión entre la jerarquía eclesiástica y la feligresía por los tipos de rituales que se elaboran para la petición. Esta tensión entre la jerarquía eclesiástica y la feligresía es eje central del trabajo de Javier Peso (1989) sobre el culto a san Pancracio en Sevilla, del cual cito una parte: Los devotos acuden, sin duda, a buscar una ayuda sobrenatural para resolver sus graves problemas terrenales. Las peticiones siempre giran en torno a los problemas de salud o de dinero, no necesariamente identificado con la falta de trabajo. Suelen ser las mujeres las más preocupadas por la salud, que nunca olvidan en sus peticiones. Los hombres e muestran preocupados por la falta de trabajo. Las religiosas de Santa María de Jesús mostraron desde el primer momento un rechazo hacia la instauración del culto en su capilla por temor a que les restase la tranquilidad necesaria para el retiro y la oración; y según ellas, si no hubiese sido por la insistencia de algunos devotos, hubieran preferido no colocar el santo en el templo. También se manifestaban en desacuerdo con las actitudes de algunos devotos, a las que tachaban de ―supersticiosas‖, poniendo como ejemplo la ofrenda del perejil. Para ellas, como también reconocen otros miembros de la Iglesia, la devoción a san Pancracio, en la forma en que la entienden la mayoría de los fieles, ―no se ajusta todo lo que debiese‖ a la ortodoxia, aunque consideran estas ―desviaciones‖ como ―un mal menor‖, ya que este tipo de cultos son ―la única posibilidad de acercamiento a Dios de los faltos de formación‖. Otras opiniones menos indulgentes, aunque en esta misma línea argumental, llegan a mostrar el desprecio más absoluto por las ―incultas clases populares‖… Sólo en una ocasión al año la Iglesia parece tomar conciencia de su deber evangelizador ante los devotos de san Pancracio, e intenta reconducir el culto hacia posiciones más cercanas a la doctrina católica. Se aprovechan las fechas de la onomástica del santo para organizar un triduo en su honor, que consiste fundamentalmente en una misa diaria con su predicación correspondiente, en la que se suele insistir en que el santo es tan sólo un intermediario entre Dios y los hombres y no ―un dios en si mismo‖; algo que un gran número de devotos no tienen demasiado claro. Aunque la capilla se llena casi por completo….Son más las que mientras se celebra la misa entran y salen de la iglesia, depositando flores y perejil en la repisa vacía, pues el santo se coloca en estos días en el altar mayor. De esta forma continúa el rito popular, paralelamente a la ceremonia ortodoxa. Un ejemplo más cercanos a nuestra realidad, se pueden observar en el Templo de San Hipólito14 administrada por la Congregación de Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María más conocida por el nombre de Claretianos. Con una historia que se remonta al tiempo histórico llamado La Colonia; el cual desempeñaba la función de ser el espacio en que se atendía a los enfermos mentales15. En este templo se presenta un desplazamiento del símbolo mayor por un símbolo ritual. En la última década, el referente para ubicar el templo ya no es San Hipólito, sino San Judas Tadeo. Fenómeno sobresaliente ya que el templo ha sido elevado por los devotos a San Judas Tadeo como santuario y por ello en el transcurso del año se observan peregrinaciones de varios puntos de la ciudad a dicho espacio y cada día 28 de mes la avenida se cierra ya que las aglomeraciones de los devotos al santo se presentan durante todo el día. El comercio esta especializado en San Judas Tadeo y se pueden encontrar desde playeras con la imagen del santo, pulseras, escapularios, gorras, dijes, imágenes de bulto simples o bien preparadas con elementos que connotan para los devotos la petición que desean del santo. Haciendo un recorrido por la diversidad de imágenes que se venden en ese 14 Perteneciente a la Arquidiócesis de México, IV Vicaría, 3er Decanato y con dirección en la calle Zarco # 12, colonia Guerrero, Distrito Federal. 15 Incluso de entre las tantas versiones de la leyenda de la llorona, el hospital de san Hipólito se menciona porque ahí fue atendido por la locura que causó la muerte de los infantes la pareja sentimental de Marina o la llorona. espacio no se logra ubicar por lo menos una estampa, una imagen de bulto y algún otro elemento que haga saber que ahí es el espacio de San Hipólito. Ello llevó a los mismos Claretianos ha poner en primer plano a San Judas Tadeo en su propaganda pastoral y detrás del mismo, los cuatro evangelistas. San Hipólito como símbolo mayor ha sido desplazado por san Judas Tadeo por dos motivos: La capacidad taumatúrgica de San Judas Tadeo ya que es el santo de las causas perdidas o difíciles, La falta de difusión de San Hipólito por parte de la iglesia y, La falta de especialización de San Hipólito para responder a las humanas necesidades. Este mismo fenómeno se estaba presentando en la Iglesia de San Francisco de Asís Ubicada en la calle Madero casi esquina con eje central Lázaro Cárdenas, colonia centro en el Distrito Federal. En el 2006 en que concluí mi primer investigación sobre el culto a la Santa Muerte se estaba presentado el desplazamiento del símbolo mayor representado en San Francisco de Asís; por un símbolo ritual representado en San Charbel Majluf. Este último ha cobrado auge entre la feligresía por su capacidad taumatúrgica en las diversos problemas que se le presentan al devoto en su cotidianidad. En la entrada del recinto se encontraba una imagen de bulto de tamaño natural de San Charbel Majluf, en sus brazos y en su hábito se podían apreciar más de un centenar de listones de diversos colores con inscripciones que al darles lectura el devoto hacia la petición al santo; así también se podían observar una serie de veladoras con la imagen del santo impresa y de varios colores. Estando apostado durante varias horas y en diversos días en el recinto, pude apreciar que los devotos a dicho santo solamente se dirigían hacia la imagen de bulto, se signaban, prendían del santo el listón con la petición, encendían la veladora y se retiraban, muy pocos pasaban al recinto a hacer un recorrido o quedarse a misa. El comercio religioso que se ejerce a la entrada del atrio presentaba en primer plano todo lo referente a San Charbel Majluf como son los libros de oraciones, pulseras, escapularios, imágenes de bulto y los citados listones multicolores con la imagen en serigrafía del santo. Se les podía preguntar a los vendedores sobre las formas en que se debía de efectuar la petición e incluso que tipo de oración se le debía rezar al santo. Actualmente ya no se encuentra en ninguna parte del recinto esa imagen de bulto de San Charbel Majluf. Pero la presencia del santo en cuestión no ha desaparecido y la imagen de bulto fue cambiada por una pintura en lo alto de una capilla del mismo recinto y en donde, no se le ha dejado espacio para veladoras o para que los devotos cuelguen sus listones. El comercio de la entrada del atrio no ha cambiado, aun se encuentran los mismos productos de San Charbel Majluf en primer plano, pero la venta de listones ha venido a la baja porque ya no se encuentra el destinatario. Continuemos con los rituales y para ello hago uso de otra categoría de análisis que propone Víctor Turner (1999), los llamados rituales de aflicción los cuales se ponen en práctica cuando el individuo asocia entidades ajenas llamadas fuerzas negativas a su condición de crisis ya sea familiar, económica y de salud física o emocional que no pueden ser explicadas por la ciencia. En estos tipos de rituales existe la creencia de que se puede manipular las fuerzas positivas para combatir las fuerzas negativas y superar la situación de crisis. Para ello, es necesario un especialista que conozca y pueda comunicarse con las fuerzas para poder manipularlas ya sea hacia el bien o el mal. Este tipo de ritual –realizado con el símbolo ritual- es uno de los más recurridos por un número considerable de personas insertos en el catolicismo popular y que en o sucesivo en la investigación llamaré rituales de respuesta inmediata. 1. 10 Consideraciones históricas para abordar el estudio de los rituales de respuesta inmediata Charles Guignebert (1988) refiere en su obra, que por las formas en que se implemento el cristianismo –por conquista- no pudo consolidarse en cada uno de los pueblos. Por lo tanto, el cristianismo en los pueblos conquistados se presenta como un sincretismo entre la antigua religión y la recién impuesta. San Agustín –refiriéndose a la fe popular- sabia que era necesario hacerle alguna concesiones, tales como las de contentarse con sus asentimientos sobre los puntos esenciales de la doctrina, cerrar por fuerza los ojos ante sus menudos extravíos y, sobre todo perdonarle sus involuntarios retornos a costumbres atávicas. Sin duda los simples son accesibles a todas las sugestiones del pasado, de las circunstancias y del medio; su sensibilidad religiosa se conmueve más rápidamente y reacciona más profundamente cuando colectivamente es impresionada, siendo capaces de reglarla; con ello, ponen siempre en un predicamento a los teólogos. Las crisis humanas son aquellas que activan los rituales de respuesta inmediata. Ante las situaciones emergentes y la falta de respuestas prácticas por parte de las jerarquías eclesiales los hombres recurren a las prácticas que nunca se habían perdido y que ahora son necesarias para encontrar respuesta a las situaciones que vive. Para ejemplificar los tipos de crisis y las conductas rituales que elaboran los individuos en un momento de crisis colectiva he de citar tres ejemplos; el primero se refiere a la crisis generada por la caída del Imperio romano de la cual nos habla Guignebert (1988) y la segunda se refiere a la crisis del siglo XIV de la cual nos habla Gottfried (1989) y la tercera parte del trabajo de Michael Taussig (1995) sobre la situación que vive Colombia. Con respecto a Guignebert, cito el siguiente fragmento de su obra que contiene los dos aspectos –el tipo de crisis y las conductas rituales de los grupos- que interesan para fines de este capítulo. A la caída del Imperio romano de Occidente, la verdadera inteligencia de la religión cristiana se obscurece rápidamente. Las formulas que repiten las gentes de la Iglesia, sin entenderlas bien ellas mismas, no hacen más que recubrir una inmoralidad sin freno y una fe incoherente y torpe, un pesado sincretismo, en le que las supersticiones germánicas, mezcladas a las supersticiones autóctonas, ocupan prácticamente más lugar que las afirmaciones cristianas. Entonces se amplifica, de manera alarmante, el culto de los santos, de las reliquias y de las imágenes, la confianza en los ritos y en los ademanes; por lo que acaban por reinstalarse en la Iglesia el politeísmo y la magia. Aquellos bárbaros recién ganados a la fe, llevaban consigo una representación antropomórfica de la divinidad, que se acordaba, fortificándola, con la que no habían abandonado completamente los campesinos del imperio romano: el dios del credo cristiano debía parecerles poco accesible y los santos intercesores, sucesores naturales de los dioses especializados y familiares, los seducían mucho más… Desarrollan, pues, su culto, no muy elevado siempre, es verdad, pero práctico, y, por así decirlo, que da buen rendimiento diario: se pide a los santos el milagro útil, la curación necesaria y la solución, vanamente buscada por medios humanos, en los casos embarazosos de todo género. Permanecen en relación constante con ellos, les escriben y esperan la respuesta; les temen, pero hacen contratos, comercian, por así decirlo, con ellos; se los recompensa si dan satisfacción, se los amenaza y hasta se los castiga, privándolos de su culto, o a veces, afligiéndolos, en sus imágenes, con graves penas corporales, en caso contrario; los llevan a la guerra en las especies de sus reliquias y los oponen a las epidemias y cataclismos diversos en largas procesiones, buscan su protección en la muerte preparándose una sepultura lo más cerca posible de sus tumbas…Especialmente vivo parece el culto a los árboles y las fuentes. Los adivinos y hechiceros cuentan con innumerables parroquianos. Ahora bien, Gottfried menciona que ante la devastación que provocó la Muerte Negra, tanto el cristianismo como el islamismo se enfrentaban a una prueba que requería acciones de inmediato. Por una parte, dentro del cristianismo los espacios donde se proveía asistencia a los individuos, así como la formación de los especialistas en enfermedades eran administrados por el clero. Los cristianos sufrieron el abandono de aquellos que deberían proveer las atenciones, así los representantes eclesiales locales por temor al contagio dejaron de suministrar los servicios funerarios a la feligresía. Este ambiente genero en los dos sistemas de creencias que ante la falta de respuestas y acciones por parte de las jerarquías, acudieron a los adivinos para buscar las respuestas. Surgieron además, en los cristianos, una serie de manifestaciones, en donde, el dolor vía la flagelación tenía como fin calmar la ira de un Dios que los castigaba; sobre este periodo histórico, Guignebert señala: Ante la Peste Negra, se ven circular bandas de penitentes que van por las ciudades y los campos entonando cánticos y flagelándose los unos a los otros durante treinta y tres días y medio, tiempo necesario para la purificación del alma. De camino matan a los judíos y demuestran sus sentimientos hacia el clero robando los bienes de la Iglesia y maltratando a sus poseedores... En el fondo de la agitación de aquella gente hay evidentemente una vigorosa hostilidad contra la Iglesia establecida; además de creer que no realiza su misión divina, ven en ella el principal obstáculo al advenimiento de la esperada era de bienaventuranza. Michael Taussig realiza su estudio en Colombia y basándose en la tesis del estado de emergencia de Walter Benjamín realiza una analogía entre el sistema nervioso y el estado de emergencia, es decir, una realidad de constantes situaciones emergentes, una realidad donde existe ese algo que constantemente esta vigilando a cada uno de los miembros de la comunidad. Un estado en crisis crónica que lleva a la desconfianza del hombre hacia el hombre. Lo que distingue a ese estado de emergencia es un lenguaje de terror y lo define como un lenguaje súper acelerado que se vuelve contra nosotros. Ante la situación emergente que vive Colombia por la guerrilla, grupos paramilitares y el propio ejercito, el ciudadano común siente el desamparo. En esta situación de crisis ¿a quien recurre el ciudadano? Taussig nos habla de un culto a las ánimas y describe su estructura ritual y las peticiones de aquellos que acuden a ellas; sobre ello menciona: El silenciamiento no sólo sirve para preservar la memoria en forma de pesadilla encerrada dentro de la fortaleza del individuo, sino también para impedir la organización colectiva del poder mágico de las almas desasosegadas que rondan a los vivos incesantemente, tal como las almas de los que sufrieron una muerte violenta… Este rondar a los vivos contiene una cuota de fuerza mágica que puede ser canalizada por cada individuo, como se puede comprobar en el Cementerio de Central de Bogotá todos los lunes, el día de las ánimas, cuando grandes masas, en especial de gente pobre, se reúnen para rezar por las almas perdidas del purgatorio, en general o específicamente, y por este medio logran un alivio mágico de los problemas del desempleo, la pobreza, los fracasos en el amor y la hechicería. Sintetizando todo esto se erige la imagen omnipresente para la religión del pueblo colombiano (que se vende a las puertas del cementerio, por ejemplo) del Ánima Sola (el alma sola), una joven mujer que tiene sus manos encadenadas en alto y está a punto de ser consumida por e fuego. Detrás de ella se ven unas paredes macizas y una puerta atrancada… El logro que efectúan las Madres de los Desaparecidos es canalizar ese poder mágico de las almas perdidas del Purgatorio y restablecer la memoria en la disputada esfera pública, lejos de la cerrazón aterradora y enloquecedora de la mente individual, donde los escuadrones de la muerte y la maquinaria de silenciar del Estado quisieran mantenerla oculta. Al nombrar y exhibir con tanto coraje las fotografías de los muertos y desparecidos, las madres crean la imagen específica necesaria para revertir la memoria pública y oficial. Como mujeres, dadoras de vida, colectivamente mantienen la supervivencia ritual y política de la muerte y también de la memoria. Estos tres ejemplos cronológicamente distantes hacen referencia que en situaciones de crisis las instituciones pueden perder su papel central ante la incapacidad de ofrecer respuestas inmediatas a las situaciones emergentes que se le presentan a su feligresía. También mencionan que en estas situaciones emergentes surgen nuevos actores que capitalizaran esa feligresía ya que ofrecerán soluciones inmediatas recurriendo a un sistema de creencias que bien puede emanar del sistema de creencias que identifica esa feligresía o bien, puede ofrecer una diferente la cual puede crecer en la medida en que las respuestas vayan llegando. Como la ayuda tiene que venir de otro mundo se hace necesario el actor que posee el conocimiento y las herramientas (inciensos, piedras, yerbas, oraciones, símbolos) para hacer que el otro mundo le de solución a las necesidades emergentes de este mundo. Por ello, la aflicción entendida como aquello que no se puede controlar y que siempre esta al acecho dará paso a lo que llamó rituales de respuesta inmediata y son los más recurridos en las situaciones de crisis ya sea individual o colectiva. Después de establecer la relación entre crisis y rituales de respuesta inmediata ofrezco en el siguiente apartado un panorama sobre los mismos ya referidos a mi área y objeto de estudio. 1. 11 Los rituales de respuesta inmediata: punto de tensión entre la Jerarquía Eclesiástica y la feligresía Las prácticas rituales adquieren su significado de las creencias en las que se apoyan. La misma Iglesia ha dado muestras suficientes, a lo largo de su historia, de saber integrar rituales ajenos a su misma práctica, siempre que éstos transformasen su sentido, en el contexto del universo de las creencias cristianas. Los rituales para aliviar la aflicción tal y como se expuso en el apartado anterior no son exclusivos de un sistema de creencias en especifico. En el caso del catolicismo, la celebración de estos rituales ha generado una tensión histórica entre la jerarquía eclesiástica y la feligresía debido a la persecución y condena que los primeros han hecho de ellos y la persistencia de los otros por la búsqueda de soluciones que ayuden a establecer el orden perdido. Para fines de mi investigación me centrare en tensión que existe entre la jerarquía eclesiástica de La Iglesia Católica y la feligresía que recurre a rituales de respuesta inmediata. Los rituales de respuesta inmediata de corte individual son los más comunes y suelen ser elaborados con un símbolo ritual que constituye el centro del mismo. Líneas anteriores he referido que estos rituales se efectúan con mayor frecuencia en espacios privados y las peticiones giran en torno al amor, la salud y la bonanza económica, así también la presencia de un actor especializado en el uso de esta información que posee el poder16 de comunicarse y manipular las fuerzas que el ser humano ordinario no puede hacerlo. Dentro de los rituales de respuesta inmediata existen símbolos rituales de mayor demanda así como los elementos necesarios para la celebración de los mismos. Pero puede suceder que el símbolo ritual no de los resultados esperados y que no conceda lo pedido ¿Qué pasa con ese símbolo ritual y con los elementos con que se elabora el ritual de respuesta inmediata? El símbolo ritual puede dejarse a un lado y se incorpora uno nuevo que no necesariamente pertenece al sistema de creencias católico y que puede ser importado de otro sistema de creencias. En los rituales de respuesta inmediata lo que no cambia son los elementos con que se elabora el ritual, ello sería por así decirlo, el núcleo duro del ritual de respuesta inmediata. 1. 12 Anatomía del ritual de respuesta inmediata La estructura básica de un ritual de respuesta inmediata lo conforma: El símbolo ritual que puede ser del universo simbólico del catolicismo principalmente los santos y las ánimas. Los pertenecientes a otro universo simbólico como puede ser el de los Orishas; duendes, elfos o algún personaje al que se le atribuye una capacidad taumatúrgica como es el caso de Jesús Malverde, el ánima de Juan Soldado o la Santa Muerte. Los colores son fundamentales y cada uno denota el tipo de petición; estos colores operan a nivel sensorial de tal forma, que un ritual para el amor no puede ser elaborado con un color diferente al rojo, si alguien pretendiese ofrecerlo sin este color el demandante no lo aceptaría. Otros colores y su relación con la petición son: para el dinero el color dorado, para la salud el color azul o verde. A ello se le adhieren elementos que simbolizan la petición como son el uso de miel y semillas para los rituales de amor; monedas para el dinero; manzana para la salud. 16 A decir de los que elaboran los rituales de respuesta inmediata, el poder les es conferido por dos vías: la primera tiene que ver con el hecho de haber sido iniciado por otra persona que posee el conocimiento y la segunda, por el vínculo que han logrado establecer con el símbolo ritual, de tal manera que solamente ellos logran establecer contacto con el mismo y por ellos se convierten en los mensajeros de las peticiones de aquellos que acuden a él, además de que por esta relación se convierten en las voces autorizadas que trasmiten los deseos del símbolo ritual. Las esencias es otro elemento básico que contiene el ritual y es aquí donde es indispensable la presencia del especialista ritual que a través del conocimiento que tiene de lo desconocido y de rituales que solo él conoce logra conferir un estado diferente a las cosas, por ello, en cada ritual está presente su esencia aunque no este físicamente. Platicando en una ocasión con un operador ritual (García 2007) sobre las formas en que confería el estado diferente, me comentaba que después de combinar los elementos –los cuales no menciono- se pasaba una noche velándolos en constante oración. Cada día los operadores rituales proponen rituales más poderosos con elementos que son difíciles de elaborar, por ejemplo, se hace necesario el agua bendita de siete iglesias, el agua de siete ríos, doce docenas de rosas, doce litros de miel, doce prendas y otras más en donde el numero siete y doce – números que el demandante identifica como cabalísticos- son básicos. Todos estos elementos se encuentran contenidos en una esencia que ya fue elaborada por el operador ritual y que pueden conseguir en los centros donde ofrecen sus servicios o en los mercados populares. Otros elementos básicos, es el uso de veladoras –también de un color específico-, el uso de inciensos; ellos claro, consagrados por un especialista. Se requiere de una hora y un lugar específico, que puede ir desde los espacios de la casa, hasta un lugar diferente como puede ser un panteón, un bosque, un río u otros; estos espacios quedan al libre arbitrio del operador ritual que lo propone. El conocimiento sobre los elementos que debe contener un ritual de respuesta inmediata llega a los demandantes por varios medios: Los medios de comunicación impresa y electrónica incluyen en su diseño una sección en donde constantemente se ofrecen rituales de respuesta inmediata, siendo el de amor el más recurrido. Ahí presentan a operadores rituales de gran renombre que develan el misterio de los elementos que intervienen en su elaboración. En eso segmentos se nos da la información necesaria para hacer frente al día, se nos dice como salir vestido, con que persona de cierto signo zodiacal podemos relacionarnos o debemos evitar. Si el astro que rige nuestro destino se encuentra en buena posición y con ello las decisiones llevarán al éxito o bien que no debemos salir de casa por ningún motivo. En el caso del Distrito Federal es el Mercado Sonora el espacio donde se encuentran los especialistas en la elaboración de rituales de respuesta inmediata así como los elementos necesarios. Así también, en los mercados populares de los barrios y colonias se encuentran locales que se especializan en estos rituales o bien en los mercados ambulantes17. En estos espacios se venden los símbolos rituales así como su manual de uso y todos los artículos necesarios. Es importante señalar que todo producto debe ser original para que el ritual surta efecto, se han presentado casos en que los operadores rituales interponen demandas por la presencia de productos rituales apócrifos. 1. 13 Los “candados” de los rituales de respuesta inmediata De acuerdo a mis observaciones y registros, el porcentaje de éxito de los rituales de respuesta inmediata elaborados con la Santa Muerte u otro símbolo ritual es ínfimo. Desde su propia elaboración contiene una serie de candados que permite en determinado momento poner a salvo al operador ritual. Estos rituales necesitan una precisión casi matemática equiparado a la elaboración de una sustancia química en un laboratorio. Los horarios específicos, los lugares, las cantidades, las danzas, las oraciones, la alineación de los astros, si es luna llena o cuarto menguante, si un planeta tiene ascendencia en otro, que si los colores u otros más que dejo abierto a la imaginación del lector. Todos estos elementos que forman parte del ritual de respuesta inmediata deben de ser ejecutadas magistralmente como si se tratase de una orquesta sinfónica perfectamente sincronizada, en donde, si un elemento se adelanta o retrasa la pieza musical se hecha a perder o en este caso el ritual no funciona. 17 Son los comerciantes ambulantes un sector que antes de iniciar sus actividades realizan determinados rituales para pedir que las ventas les sean favorables. Es por ello que encontramos a personas que venden diversos productos y esencias que van desde bálsamos, inciensos y la imagen de San Martín Caballero preparada con ajos, sábila y herradura que auxilian en dicha petición. De los tres elementos presentes en un ritual de respuesta inmediata demandante- símbolo ritual y los artículos necesarios para la elaboraciónquien tiene el rango de error es el demandante por su naturaleza humana y nunca pero nunca los otros dos elementos que corresponden a una naturaleza extrahumana. Los símbolos rituales pueden consolidarse en el individuo hasta llegar el grado de culto y convertirse en símbolo mayor dentro del universo sagrado particular. Pero como lo manifesté anteriormente, el porcentaje de éxito del ritual de respuesta es muy bajo de ahí los ―candados‖ con los que se elaboran los mismos. Ello puede ser consecuencia de que los individuos se encuentren oscilando entre varios símbolos rituales que de acuerdo al saber popular están especializados en auxiliar en determinadas situaciones a los hombres. 1. 14 Características básicas del culto a la Santa Muerte en la ciudad de México Hasta el momento he plasmado las características básicas de la religiosidad popular de una manera incluyente sin separar lo urbano de lo rural; sin endosar a los subalternos la religiosidad popular; desglosando los rituales que van desde la fiesta hasta los de respuesta inmediata; planteando el debate si un símbolo instrumental puede desplazar a un símbolo mayor; planteando en tres periodos históricos la idea que ante una crisis comunitaria se hace más recurrente que los individuos acudan a operadores rituales y se incremente en mayor medida la elaboración de rituales de respuesta inmediata; la estructura básica de los rituales de respuesta inmediata y el rol que juegan los operadores rituales en el mismo y por último, la existencia de espacios especializados en la elaboración de rituales de respuesta inmediata. Para dar inicio a este apartado es necesario presentar las formas elementales del culto a la Santa Muerte que han sido expuestas en mi anterior trabajo de investigación (García, 2007) y con ello poder presentar mi propuesta de considerar al culto a la Santa Muerte como lo alternativo en el catolicismo popular ejemplificada en área territorial conocido como el barrio de Tepito enclavado en la zona centro de la ciudad de México. Los espacios en que se realizan las ceremonias a la Santa Muerte han logrado consolidarse y gozar de una autonomía. En este espacio encontramos entre los asistentes diversas manifestaciones de su devoción a la Santa Muerte que van desde el vestir a sus imágenes de bulto, pasando por la entrega de ofrendas principalmente a los asistentes que llevan sus imágenes a las ceremonias. En estas celebraciones los devotos utilizan el espacio para instalar sus altares ya sea en los toldos o cofres de los vehículos, en cestos de palma, en cajas de cartón, en fin, una gran variedad de altares ambulantes que son portados y exhibidos por los devotos con orgullo. Espacios rituales donde los devotos renuevan su votos con la Santa Muerte y por ello la diversidad de manifestaciones gracias a que el devoto se siente en libertad de poder manifestar en plenitud su devoción, donde se comenta con otros devotos el significado de la imagen que porta, así como de los milagros que han sido concedidos o que esperan que conceda la Santa Muerte, donde se intercambia información sobre como se le debe rendir culto, lo que se le debe de ofrendar, en que espacio de la casa se debe de colocar, las veladoras que se les ha de poner de acuerdo al mes, día o año. La información que se intercambia de la Santa Muerte gira en torno al milagro, por lo tanto, los rituales que se recomiendan y las oraciones que se deben de utilizar para que el ritual sea efectivo están más apegadas a las diversas manifestaciones del catolicismo. En estos espacios, la ceremonia principal consta del rezo de un rosario, previo al mismo el oficiante se dirige a las imágenes principales que componen el altar, se inca, le pide permiso a la Santa Muerte para poder efectuar el Rosario, le ofrece las oraciones y señala a los devotos que ahí se encuentran, finalmente se signa, se incorpora y se dirige al templete improvisado desde donde oficiara la ceremonia, ahí pide a Dios le permita invocar la presencia de la Santa Muerte para que pueda estar presente en la ceremonia. En el transcurso del rosario, entre misterio y misterio se pide a la Santa Muerte a través de una oración especial intervenga por los presos, los enfermos, los drogadictos y los desamparados. Al final de los misterios se hace una petición final en donde se pide a la Santa Muerte y al Padre, Hijo y Espíritu Santo que los proteja. Dentro del ritual el momento de mayor catarsis es cuando se forma una cadena humana, cadena que parte de las ―manos‖ de la Santa Muerte. El que oficia el ritual pide a los asistentes que focalicen su petición y que pidan a la Santa Muerte que se las conceda. Al finalizar la ceremonia los devotos realizan sus ofrendas, intercambian información y quien oficio la ceremonia se dispone a ―bendecir‖ con agua las imágenes de los devotos. Al oficiante se le atribuye la facultad de bendecir las imágenes de bulto de la Santa Muerte de los devotos que se dieron cita. El agua que se utiliza previamente se le ofrece a la Santa Muerte y el acto que le confiere un estado diferente al que originalmente tenía es el poder de la oración colectiva. Hoy en día es común observar que el devoto que asiste a las ceremonias en los altares particulares de culto masivo18 juegue un rol más allá de recitar las oraciones y llevar a sus imágenes de bulto. Con el correr del tiempo en las ceremonias han surgido devotos que se dedican a sahumar las imágenes de bulto de la Santa Muerte que se encuentran en la ceremonia, este acto se elabora ya bien con un puro, copal, cigarros o marihuana; el sahumador dirige el humo a los diversos artículos de la Santa Muerte que van desde la imagen de bulto, escapularios, medallas u otras; este acto lo elaboran por excelencia los varones jóvenes que se dan cita a la ceremonia, es importante sentenciar que este acto se efectúa antes o después de la ceremonia, casi nunca durante el desarrollo de la misma. Si consideramos las conductas de los devotos por sexo en estas ceremonias tenemos que: Las mujeres son las que visten a las imágenes: es usual que a las imágenes de bulto e la Santa Muerte se les diseñe ropa especial para vestirlas, la vestimenta más utilizada son las de catrina, reina, ángel; ello ha llevado a la especialización de personas en el diseño de vestimenta, es común encontrar en las ceremonias a personas que ofrecen sus servicios como modistas de la Santa Muerte. Los varones son los encargados de sahumar a las imágenes de bulto de la Santa Muerte, así como otras representaciones de la misma como cuadros, dijes, pulseras, estampas. Las imágenes de bulto de los varones son más ―austeras‖ y solo poseen collares. 18 Se trata de altares erigidos por devotos en espacios públicos y que en los días de ceremonia congregan a gente de la comunidad y externos. A la imagen que ahí se encuentra se le reconoce la capacidad de conceder las peticiones. Durante la ceremonia los varones jóvenes platican, fuman; es difícil captar su atención por lo tanto no es común escucharlos rezar. Los varones en edad madura muestran un mayor respeto tanto a su imagen de la Santa Muerte como a la de los asistentes a la ceremonia; reza, recibe y otorga ofrenda a los devotos que portan imágenes de la Santa Muerte. Los varones adultos mayores se entregan más al rezo y guardan una posición de respeto a los asistentes. Las ofrendas de los varones son por lo normal cigarros, puros o bebidas alcohólicas, todos los productos son adquiridos por lo normal en el centro de la ciudad de México (mercado Sonora, plaza de los artesanos, el Carmen) que venden estos productos de mayoreo. Las peticiones que realizan los varones no son más variadas, pero generalmente se pide protección en sus actividades y su vida diaria. Los varones le ―hablan‖ a sus imágenes de la Santa Muerte con un lenguaje ordinario, es común que se escuche en ellos llamarla santita, flaquita, huesuda, madrina. En las ceremonias son las mujeres las que inician y terminan el rezo del Rosario. Las ofrendas que reparten las mujeres son por lo general manzanas, flores, dulces, veladoras, velas, estampas, oraciones dedicadas a la Santa Muerte. Los artículos que se ofrendan llevan un plus, ello es, que las mujeres agregan detalles. A diferencia de los varones, las mujeres se dan a la tarea de innovar elementos que han de ofrendar, compran los artículos a granel y ellas elaboran de acuerdo a los gustos de la Santa Muerte. Simbólicamente la mujer ofrenda su devoción y el milagro, mientras el varón ofrenda el producto de su trabajo. La comunicación que establece las mujeres con la Santa Muerte se da en el marco del respeto y el amor; le llaman madrecita, santita, mi niña. Es por ello que cuando las mujeres cargan sus imágenes de bulto lo hacen por lo normal en el regazo, mientras que el varón por lo normal simplemente carga la imagen de bulto. Las peticiones de las mujeres a la Santa Muerte son por lo general la protección a la familia, salud, bienestar económico. Las innovaciones que se harán con respecto al culto será a nivel de la creación de nuevas advocaciones de la Santa Muerte, de ahí que tenemos ahora al símbolo dominante –esqueleto vestido con hábito, guadaña en una mano y en la otra ya sea un mundo o una balanzamontado en una motocicleta, sentada en un trono con un tetragrámaton en el respaldo, montada en un corcel negro –tomado de la representación de la muerte como jinete del Apocalipsis-, tomando en su regazo a Cristo –representación que es tomada de La Piadosa-, estas y otras más que se agregan día con día. Recientemente se están institucionalizando las peregrinaciones a diversos espacios rituales que alberga a las imágenes de la Santa Muerte que de acuerdo a los testimonios de los devotos son las más milagrosas. Entre los santuarios de mayor peregrinaje tenemos: El conocido santuario de la Santa Muerte en la calle de Bravo #35 en la colonia Morelos cuyo registro ante la Dirección General de Asociaciones Religiosas de la Secretaría de Gobernación es ―La Santa Iglesia Católica, Apostólica, Tradicional MEX-USA, Misioneros del Sagrado Corazón y San Felipe de Jesús A.R.‖; la celebración mayor en este espacio ritual es el 15 de agosto. El conocido Santuario Nacional de la Santa Muerte ubicado en la calle de Alfarería # 12 enclavado en el barrio de Tepito cuya celebración mayor es el último día del mes de octubre para dar inicio el 1º de noviembre y finalmente, el Santuario de Tepatepec en el estado de Hidalgo cuya celebración mayor es el día 2º de agosto. 1. 15 La Santa Muerte y los rituales de respuesta inmediata En el momento histórico que escribo estas líneas, la Santa Muerte es el símbolo ritual más demandado para efectuar los rituales de respuesta inmediata. De hecho, su culto va creciendo día con día en otros estados de la república mexicana, ello se debe a los movimientos migratorios y principalmente a difusión que tiene el culto vía las revistas especializadas. Un ejemplo de ello es que hasta hace tres años la venta de imágenes de bulto en el mercado Cuauhtémoc de ciudad Juárez, Chih., era en mínima escala e incluso pocos conocían los usos del mismo. Hoy en día encontramos todos los artículos necesarios para la elaboración de rituales de respuesta inmediata necesarios para que la Santa Muerte tenga buenos resultados. Los rituales de respuesta inmediata que se realizan con la Santa Muerte como símbolo ritual están referidos al amor, la bonanza económica, la protección de aquellos que desean el mal y la salud. En estos rituales de respuesta inmediata se debe hacer la acotación de que los referentes al amor y el dinero son elaborados para que el beneficiario sea el ejecutante y responden a un carácter inmediato ya que se tienen o no se tienen. Pero los rituales de respuesta inmediata referentes a la salud pueden presentar un patrón diferente dependiendo del tipo de enfermedad que aqueje al demandante. Los dos tipos de enfermedad están referidos a las emocionales y las físicas de corte crónico degenerativas, en donde, la primera requiere un carácter emergente ya que inhibe las actividades cotidianas de aquel que la padece. Pero en las segunda la elaboración de los rituales de salud están sujetos a la petición de una gradual recuperación de la salud y va acompañada de que el destinatario siga sus tratamientos y bajo supervisión médica. En estos rituales de salud se puede presentar que el ejecutante del mismo no lo pida para él, sino que este encaminado a una tercera persona. La estructura del ritual ya la expuse anteriormente y solo queda por agregar que la especialización de la Santa Muerte es similar a la de San Judas Tadeo: la solución de las causas perdidas ya que no hay nada que la Santa Muerte no pueda solucionar. Es por ello que las representaciones de la Santa Muerte han evolucionado de manera vertiginosa. Hasta hace cuatro años sólo existían imágenes de bulto de diversos colores, hoy en día existe una representación llamada de las siete potencias, es decir, todos los colores todas las demandas. De ahí se le han agregado otro tipo de elementos como son semillas que connotan abundancia, monedas, que connotan prosperidad económica y otras imágenes que en su interior se pueden encontrar el octágono identificado con la Bagua, la representación del buda obeso que connota abundancia económica, podemos encontrar a la Santa Muerte dentro de una pirámide que connota energía positiva, imágenes a las cuales se le puede desprender una mano para que el devoto la pueda castigar por no cumplir la demanda; en fin, cada día aparecen más representaciones. Será por ello que en los altares particulares y los particulares de culto masivo en donde la Santa Muerte es el símbolo mayor, se han adherido nuevos símbolos rituales que van desde aquellos identificados con la santería hasta muy recientemente Jesús Malverde y San Charbel Majluf. Para ejemplificar los rituales que se elaboran con la Santa Muerte como símbolo ritual, reproduzco dos rituales propuestos por dos operadores rituales que en la ciudad de México contribuyeron y contribuyen a la consolidación del culto. El primero de ellos es un ritual propuesto por Li-Ping-Li (finado) que dirigía el Centro de Consejería espiritual Li-Ping-Li en el Barrio Chino de la ciudad de México. El segundo es un ritual propuesto por Macario el chamán de la Santa Muerte que se ubica en la colonia Romero Rubio, en su espacio no sólo ofrece estos tipos de rituales, sino que organiza pláticas y cursos relacionados con la Santa Muerte. Ritual de Li-Ping-Li19 La Santa Muerte En muchas ocasiones y etapas de la vida del ser humano se llegan a encontrar en etapas adversas a su vida: falta de trabajo, alejamiento de la persona o el ser querido, el fallecimiento de alguna persona cercana, falta de salud, dinero, falta de dinero, enfermedades, mala suerte, etc. Pueden ser infinidad de cosas que en ocasiones pueden llegar a deprimir o desesperar a cualquiera. Es aquí donde desde los más creyentes hasta los más escépticos sienten la necesidad de la ayuda de un ser superior o intentan ya sea refugiarse o creer en algo o alguien y en el mejor de los casos a un dios. Pero a demás de él existen seres que debido a su nivel de espiritualidad se han dedicado a ayudarlo en sus laboriosas tareas de socorrer a todas las personas que lo necesiten y depositen su fe en ellos. Muchas personas se enfocan en imágenes para su protección y se utilizan gran diversidad de ellas hasta para la magia o ciertos rituales de los cuales se desprenden infinidad de trabajos para el beneficio o las necesidades de las personas y una de las más efectivas y que yo personalmente recomiendo es la Santa Muerte. La existencia de de la figura de la Santa Muerte se remonta a finales del siglo XIX, cuando comenzó a realizar sus milagro, el estudio a la devoción de estas deidades ha sido sumamente difícil de explicar para toda clase de filósofos, sociólogos, psicólogos y teólogos, lo cierto es que estos seres y estas imágenes están aquí para ayudar a sacar de los problemas a quien lo necesite. Tanto para la magia, la santería, diversos pedimentos como son la sanación de un paciente, el amor que se busca, la solución de problemas monetarios, para la paz y armonía, en el hogar o 19 “Li-Ping-Li te dice todo: la Santa Muerte‖, en Periódico La Prensa, 20 mayo 2002 el trabajo y la infinidad de una lista interminable que sería, es que la Santa Muertes un aliado totalmente efectivo. A la Santa Muerte se le pueden hacer peticiones de cualquier índole y los resultados serán sorprendentes, pero también se le deben tener una serie de cuidados. Al dejar entrar en nuestro corazón y vida a la Santa Muerte se le debe tratar como a un ser de la familia o tal vez un poco más, en el cual siempre debe estar tanto en nuestro corazón como en el alma y espíritu. LI-PING-LI TE ACONSEJA PARA ATRAER AL SER AMADO ORACIÓN DE LA SANTA MUERTE Santa Muerte, auxiliadora de los hermanos que se encuentran sin amor; te invoco que atraigas a mi vida (decir el nombre de la persona) para que por medio del amor y felicidad sea quien llene mi alma de paz y tranquilidad, ya que en la energía divina que fluye dentro de mi corazón, están depositadas todas las virtudes de todo el universo, pues Dios Padre universal ayudará para que esto sea realizado. Terminando esta oración debe encender la cantidad de años que tenga el ser amado en velas de color rosa y deben rezar siete padres nuestros. Ritual de Macario20 LIMPIAS DE HECHIZOS Y ENVIDIAS CON UN CARACOL Simbología del caracol: Básicamente una es la figura que representa la eterna transformación de todo lo que existe: la espiral. No hay descanso para la energía, siempre esta en actividad siguiendo los mandatos cósmicos que mantienen al universo dinámico. El hecho de que los caracoles un espiral en su constitución, le hacen un claro representante del impulso cósmico al que están sujetos los seres y las cosas. Por ello se le atribuyen capacidades que ciertos chamanes emplean para realizar limpias a aquellas personas que padecen algún mal energético. Selección del caracol: No cualquier caracol sirve para estos efectos. El adecuado no debe presentar perforaciones ni tener objetos extraños en su interior. Su color deberá ser lo más blanco posible y su tamaño no menor a la longitud de una de sus manos y no mayor a su cabeza. Este caracol deberá estar previamente consagrado con el poder de la luna. Para ello deberá exhibirlo a cielo abierto nueve noches completas durante nueve lunas llenas consecutivas. Si se interrumpe alguna de ellas el caracol quedará inservible para la realización de limpias. Para lo cual deberá tener sumo cuidado. El caracol se coloca sobre una charola de plata lisa y sin dibujo alguno y se le pone cada noche un par de velas blancas encendidas. Cada ocasión deberá ser nueva y si no se consumieron en su totalidad, podrá colocarlas en su altar. Al término de las nueve lunaciones se baña con agua bendita, se seca con un paño morado, se le pone un nombre y se guarda en un saco de manta. No le debe dar el sol salvo cuando se utilice para limpiar. Nadie debe tocarlo. Este caracol consagrado sirve para anular ―Macario el Chaman de la Santa Muerte: Limpias de hechizos y envidias con un caracol‖, en Devoción a la Santa Muerte, Editorial Mina, México, 2 de febrero 2004 20 envidias, mal de ojo, trabajos negros, hechizos y embrujos. Su poder es notable, pero si no se posee el conocimiento para dominar estas energías se las puede echar encima. No cualquiera puede trabajar con un caracol para limpias. Eliminando malas vibraciones y hechicerías La manera en que se realiza esta limpia es de noche, en un espacio abierto, se coloca a la persona en el interior y el centro de un círculo de azúcar. El chaman coloca la mano izquierda sobre la cabeza del sujeto, con la derecha se lleva el caracol a la boca y lo hace sonar con un sonido moderado, mientras da tres vueltas en el sentido de las manecillas del reloj. Luego otras tres en el sentido inverso. Se supone que el caracol jala las malas vibraciones y los traduce en sonido que queda esparcido en el aire. Luego se limpia a la persona con una pluma de lechuza hembra y se concluye con una sahumación con copal. El círculo de azúcar se esparce con el pie izquierdo hasta borrar toda huella de éste. Este trabajo se realiza para solucionar asuntos complicados y graves. 1. 16 El culto a la Santa Muerte entre lo emergente y lo alternativo 21 Después de dar una breve semblanza de lo que es el culto a la Santa Muerte en la ciudad de México; paso a exponer mi propuesta de los emergente y lo alternativo en la religiosidad popular y de cómo el culto a la Santa Muerte puede ser abordado con estas dos categorías de análisis. Manuel Marzal (2002, p. 551) propone la categoría cultos autóctonos emergentes, sobre ellos refiere: Los términos de ―religión‖ y ―culto‖ pueden considerarse sinónimos. Sin embargo, reservo el de ―culto‖ a la institución que, aunque tenga ciertas creencias, ritos, normas éticas y sentimientos que dan un sentido religioso a la vida, carece de una comunidad permanente más o menos organizada y, así, no cumple un rasgo esencial de toda religión. Eso ocurre, por ejemplo, con ciertos movimientos de revitalización religiosa, aunque no es raro que tales cultos constituyan una comunidad permanente y organizada y se conviertan en una religión o Iglesia. Es sabido que en América Latina han surgido siempre, dentro de la rica tradición devocional de la Iglesia, cultos espontáneos y que algunos han sido aprobados por ésta con la formula habitual de que no contienen nada contrario a la fe y la moral cristianas y así los fieles pueden practicarlos libremente si les ayuda en su vida religiosa. Pero en este apartado me limito a los cultos 21 Con respecto a los términos emergente y alternativo, realice un ejercicio con maestros de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez en donde les pedía que escribieran los primero que se les viniera a la mente cuando escuchaban cada termino. Con respecto a lo emergente mencionaron que era aquello que no estaba y que hoy esta, una sorpresa, lo que nos toma desprevenidos. Con respecto a lo alternativo contestaron que era otra opción, algo genérico, lo similar. Cuando les pedí que asociaran los términos con algo, en lo emergente lo relacionaban con accidentes, la muerte, enfermedades y con respecto a lo alternativo lo refirieron a otra opción dentro del mismo universo. autóctonos que, por distintas razones, no cumplen ciertos requisitos y que por tanto parece seguro que nunca tendrán una aprobación oficial de la Iglesia. Sin embargo, tales cultos suelen tener los rasgos propios del catolicismo popular ya expuesto (santo, devoto, milagro, castigo, etc.), pero con reinterpretaciones adicionales. Por ejemplo, si con tal de que haga milagros, entre los adeptos de estos cultos esta importancia es menor aún; por eso, se rinde culto a santos no canonizados o a personajes míticos de tradiciones no cristianas, aunque es cierto que se da un proceso de ―canonización‖ o ―cristianización‖ popular, visible en la historia de esos ―santos populares‖, que refleja muchos rasgos de la santidad cristiana como cercanía a Dios, vida pobre, sacrificio, bondad, compasión y solidaridad con los demás. Por otra parte, tales cultos emergentes dan un énfasis especial a la salud, que siempre es un problema límite, y mucho más en países con un sistema de salud pública muy deficiente. El culto a la Santa Muerte contiene un elemento que por sus características se encuentra en el centro del debate y es motivo de descalificación constante de otras instituciones religiosas. El símbolo dominante (la muerte) es el que siempre ha estado en debate por lo que connota en cada uno de los sistemas de creencias y de ahí que los constantes comunicados que emiten las instituciones religiosas contra el mismo han llevado a los devotos a crear una trinchera para protegerse de aquellos que atentan contra sus creencias y las manifestaciones rituales que le son propios al culto. El culto a la Santa Muerte se le presenta a las instituciones religiosas e incluso a los investigadores del fenómeno religioso como una situación emergente, es decir, aquello que nos toma por sorpresa y que en el caso de las instituciones religiosas se enfrentan, no a una serie de conductas rituales con la cuales ha convivido a través de los siglos y que algunas de ellas las ha incorporado, sino con un símbolo que dentro del dogma connota la antítesis de lo que fundamenta al sistema de creencias y que por esta característica la posible aceptación del culto es poco probable. Por otra parte, a los mismos investigadores del fenómeno religioso les presenta como lo emergente, prueba de ello es que en las diversas investigaciones sobre este fenómeno no logran coincidir en sus orígenes. Algunos ubican el origen del culto en las manifestaciones que el pueblo mexicano tiene con respecto a las diversas formas de recordar a sus muertos; otros desean corrobora el dicho popular de que los mexicanos nos burlamos de la muerte y que por ello la hemos incorporado a nuestra vida pero de forma sagrada; otros llegarán a ubicar su origen en el mundo prehispánico y que el hoy culto no es más que una evolución de ese culto primero en que Mictlantecuhtli y Mictlantecihuatl reinaban el inframundo mexica; otros ubicaran el culto a la Santa Muerte como lo inherente al ser humano; otros han de recurrir a las Sagradas Escrituras para ubicar ahí su nacimiento y sus funciones. En fin, la Santa Muerte nos toma por asalto y es una necesidad imperiosa por parte de algunos investigadores construir ese pasado que es de lo que carece el símbolo y que dicho sea de paso, esa historia se ubica en un segundo plano para los devotos a la Santa Muerte que establece el vínculo con ella a través de las formas rituales, para ellos, ella es santa y no importa otra cosa. ¿Cómo explicar este culto? ¿Qué categorías de análisis utilizar para explicarlo? En mi primera investigación utilice las categorías de símbolo, símbolo ritual, símbolo dominante y símbolo instrumental que propone Víctor Turner. Así también recolecte las diversas narraciones del mito de origen tanto del símbolo dominante como de los inicios del culto y, finalmente narre las diversas formas rituales que realiza el devoto para con la Santa Muerte y para ello, utilice la categoría de análisis llamada rituales de respuesta inmediata. En mi investigación (2007) establezco que para los devotos a la Santa Muerte no existen diferencias entre ella y los santos por lo menos en sus formas rituales. Para ellos, estos símbolos gozan del mismo rango en su universo sagrado que es más amplio porque incorporan de manera súbita nuevos símbolos de carácter práctico, además que entre ellos surgirán actores que se especializaran en el diseño y ejecución de los rituales, así como en determinado momento adquirirán la capacidad de consagrar elementos para los fines y usos de los devotos. Por el sentido que tiene el peregrinar en ellos, no establecen diferencia alguna entre peregrinar al santuario de Nuestro Señor de Chalma, a la Basílica de Guadalupe, al templo de San Hipólito donde se encuentra San Judas Tadeo, a San Juan de los Lagos o al santuario de la Santa Muerte en Tepatepec, Hgo. Los santos y la Santa Muerte son dos representaciones que deben ser consideradas como símbolos rituales y que de acuerdo a su difusión en determinado momento pueden desplazar al símbolo mayor por la capacidad taumatúrgica expresada en los testimonios de los devotos. En los diversos foros en que he presentado mi primera investigación estas consideraciones han causado malestar e hilaridad entre los asistentes por el hecho de igualar a la Santa Muerte con los santos o cuando describo las ceremonias y las fiestas en donde llevan las imágenes de bulto de de la Santa Muerte en andas. Por otra parte, en los foros ajenos al área metropolitana de la ciudad de México donde el culto es más arraigado, el fenómeno es considerado una herejía, como algo folklórico o un movimiento pasajero. La opinión generalizada de los ajenos al fenómeno se han encargado de catalogarlo como un culto negativo que entre sus mayores devotos se encuentran prostitutas, narcotraficantes, secuestradores, asesinos, niños en situación de calle y sobre todo los llamados pobres en espíritu. A raíz de que la imagen de la Santa Muerte sale al público con la captura del temible secuestrador Daniel Arizmendi alias el mocha orejas; se empiezan a crear discursos periodísticos de corte emergente que pretenden explicar aquello que fue encontrado en poder de tan despiadada y que se supone le protegía. De ahí en adelante, en cada captura de malhechores, se ―buscaba‖ la presencia de la Santa Muerte para establecer con ello el vínculo indisoluble entre aquellos que hacen mal a la sociedad y aquella que los protege. Pero el culto a la Santa Muerte no se presenta solo como lo emergente a los investigadores del fenómeno religioso que intentan llenar ese vació histórico con que surgió y también como emergente a los periodistas. A las instituciones religiosas también se les presenta de manera emergente este culto que por sus características –especialmente lo controversial del símbolo dominante- no tiene parangón en su historia y su actual estructura. Por ello lanzarán anatemas en contra de aquellos que continúen en el culto y no se arrepientan. Surgirán también discursos de corte emergente que serán plasmados a través de sus órganos de difusión y especialmente en los espacios que administran, siendo la homilía el momento de hacerlo. Un símbolo que cumple con una sola función y en donde, la santidad es impensable. Un símbolo que tiene sus orígenes como representación en la crisis demográfica de Europa del siglo XIV. En el transcurso de la investigación daré un vistazo histórico a las formas en que se adquiere u otorga la santidad, así como los criterios actuales por los cuales un personaje o una representación son erigidos como santo. Metodológicamente, lo emergente que se puede abordar desde los discursos de alteridad. Se tiene que considerar los discursos que provienen de las instituciones religiosas del barrio de Tepito, la percepción y los discursos de aquellos de catequesis básica que no se consideran devotos, así como la percepción de otras instituciones que se encuentran dentro de la misma área del barrio de Tepito. Lo alternativo estará referido a la diversidad de símbolos rituales que existen en el barrio de Tepito, así como la especialización en la solución de problemas que los demandantes le atribuyen. ¿La Santa Muerte soluciona problemas que otros símbolos rituales no hacen? O ¿Los símbolos rituales han dejado de solucionar problemas lo cual ha permitido el arraigo y crecimiento del culto a la Santa Muerte? Previo a trabajar las categorías de análisis emergente y alternativo, es indispensable conocer el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. Este universo sagrado será expuesto gracias a la etnografía la cual se encargara de registrar los altares y las imágenes sagradas que la componen ubicados en la vía pública. Interesa saber el alcance que tiene la Santa Muerte en esta manifestación pública. También se traerá a la investigación las imágenes sagradas que se encuentran en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito, así como sus usos y rituales. Ello se logrará gracias a la aplicación de su sondeo en diversas áreas del barrio. Finalmente, el tema que genera esta investigación apunta a dos objetivos complementarios; el primero de ellos tiene que ver con la religiosidad del barrio de Tepito. Por ello se hará una revisión a los trabajos que se han escrito sobre el área de estudio e identificar las figuras sagradas centrales y vislumbrar los usos que la Santa Muerte tiene en esos documentos. Esta claro que no todo el barrio de Tepito es católico y que en el espacio converge una diversidad de sistemas de creencias. Por ello, en el transcurso de la compilación de datos he de identificar actores que profesen sistemas de creencias no católico; con ellos se ha de trabajar a nivel de entrevistas. El siguiente capítulo tiene como fin el presentar al barrio de Tepito desde varias ópticas, con ello, el lector podrá tener un panorama más amplio del espacio donde se presenta el culto a la Santa Muerte. CAPÍTULO II: DIVERSAS MIRADAS SOBRE EL BARRIO DE TEPITO Tepito es una pila de agua bendita Armando Ramírez El barrio de Tepito es un espacio que llama poderosamente la atención a diversos campos del conocimiento y medios de comunicación por sus diversas manifestaciones culturales, sociales y religiosas. Considerado como un espacio de eterna resistencia a la aplicación de las diversas políticas públicas y como un espacio de franca tensión entre sus formas de convivencia y el deber ser que proponen cualquier institución. Armando Ramírez menciono en un programa de televisión que Tepito es una pila de agua bendita en donde todos toman de ella, se refería de esta manera a las diversas visiones que sobre el barrio de Tepito existen y que no necesariamente son ciertas, pero que en base a una constante apologética logra que el extraño lo de por un hecho. Alfonso Hernández (2006) líder de opinión del barrio de Tepito, director del Centro de Estudios Tepiteños (CETEPI) y cronista del mismo; menciona que existe un interés de los ajenos por conocer el barrio y saber como piensan y actúan los habitantes del mismo, así lo expresa: Al obstinado barrio de Tepito nos siguen llegando estudiantes de todas las carreras politécnicas y universitarias, que para corroborar nuestro dicho en tiempo y forma: México ya es el Tepito del mundo y Tepito se significa por ser la esencia y la síntesis del mexicano urbano. Y entonces, nos vienen a observar con lentes de culo de vaso barato, o queriendo descifrar el hardware de nuestro disco duro, de roer. ¿Cuál es la posición de los habitantes del barrio de Tepito para con los profesionistas que pretenden elaborar una investigación en esa área? ¿Los habitantes del barrio de Tepito hacen distingo entre un trabajo de corte académico o uno periodístico? ¿Existe una abierta disposición de los habitantes del barrio de Tepito para aportar datos? Y la más importante ¿Cómo intervenir a la comunidad para contactar y obtener los datos necesarios para los trabajos de corte académico? ¿Cómo Intervenir el área y contactar a los actores? Si en el barrio de Tepito; una pluma, un cuaderno, una cámara de video o digital, una grabadora de audio es equivalente a portar un arma ya que el efecto es similar, los habitantes consideran que los registros que de ahí se obtienen tienen como fin desprestigiar a la comunidad entera. Aquí cabe la pregunta ¿De donde proviene esa oposición de los habitantes del barrio de Tepito? Trato de explicarlo a continuación: En el momento que escribo este capítulo existen alrededor de 58,000 artículos sobre el barrio de Tepito en la Internet, siendo los de corte periodístico los que más abundan, en donde informan sobre las actividades ilícitas que ahí se desarrollan y las acciones de las autoridades locales y federales ejercen para erradicarlas. Por otra parte, en la misma Internet inicie una búsqueda de trabajos elaborados desde las ciencias sociales sobre el barrio de Tepito la cantidad es mínima y no llegan a más de 400 artículos, de los cuales, la mayoría tratan sobre los hallazgos de vestigios prehispánicos, problemas de la vivienda, la actividad comercial y el movimiento Tepito Arte Acá. De los artículos en su mayoría estaban referidos a los enfrentamientos entre los habitantes del barrio de Tepito y la fuerza policial por la expropiación del predio conocido como el 40, ubicado en la calle de Tenochtitlán. Sobre este enfrentamiento, la información que fluía en los medios impresos y electrónicos ponía especial énfasis en las actividades ilícitas que ahí se desarrollaban especialmente el tráfico de drogas y la elaboración de productos apócrifos. Las cámaras tomaban en primer plano las modificaciones que sobre el espacio habían hecho los habitantes que vivían en la opulencia en un espacio que desde fuera no se podía imaginar que existiera. Las cámaras llevaron también las diversas manifestaciones religiosas a las cuales los habitantes de dichos espacios estaban adscritos ¿cuáles eran ellas? Los altares a la Santa Muerte y sus ofrendas fueron por excelencia la que apareció en primer plano. El hecho de que la Santa Muerte fuera captada en primer plano para ofrecerla al espectador o lector no es casual ya que el culto desde su nacimiento se le estableció un vínculo directo e indisoluble con personas y comunidades que viven en situaciones de riesgo, de aquellos que necesita el amparo de una entidad no terrenal para salir airosos de sus actividades. De ahí que ante los ojos del visitante o el extraño establece una relación directa entre la Santa Muerte y las actividades ilícitas del barrio de Tepito. Los medios de comunicación tanto impresos como electrónicos nos han presentado durante décadas una imagen del barrio de Tepito que damos como cierta y con esta información reelaboramos la idea que tenemos sobre el espacio y sus actores. Tenemos una imagen parcial del barrio de Tepito debido a dos aspectos que considero fundamentales: la escasez de trabajos sobre el barrio de Tepito elaborados desde las ciencias sociales y las humanidades y los existentes no han sido difundidas quedando solo en el espacio académico. El otro factor es la ―apropiación‖ del espacio por parte del periodismo que ha construido un monopolio de la información, de tal manera que pareciera ser que hay periodistas apostados en todo el barrio esperando la nota que día a día genera el espacio. ¿Qué hace tan atractivo el barrio de Tepito de tal manera que lleva al posible visitante a conocer partes del manual de sobrevivencia? ¿Es cierto lo que dicen los habitantes del barrio de Tepito que ahí se puede adquirir hasta lo insospechado? Pero lo insospechado es manejado por los medios de comunicación impresos y electrónicos como las herramientas de las que se valen los delincuentes (de cualquier parte de la capital incluso de la República) para cometer sus fechorías; por ello se lee en sus crónicas que en el barrio de Tepito se puede encontrar el armamento más sofisticado y contratar sicarios, además de encontrar los narcóticos que están de moda. Los miles de visitantes a la zona comercial del barrio de Tepito no van preguntando de puesto en puesto sobre armas y narcóticos, ni los comerciantes vocean este tipo de productos. Pero volvamos al punto, ¿Qué atractivo tiene la zona comercial del barrio de Tepito para correr la aventura de internarse en la misma? Para ello, presento algunos aspectos de interés22 de lo necesaria que es la zona comercial para sus visitantes. Quiero dejar en claro que mi función no es ser un defensor ni detractor de las actividades que ahí se realizan, mi función es y sigue siendo 22 Algunos de estos aspectos se desarrollaran en amplitud en la etnografía del barrio de Tepito registrar las manifestaciones religiosas y el sentido que estas otorgan a los habitantes del barrio de Tepito. Para exponer estos puntos de interés del barrio de Tepito recurro a la idea de Renato Rosaldo23 sobre la técnica de las tarjetas postales, estas son: Primera tarjeta postal Los productos de audio y video apócrifos Actualmente en el barrio de Tepito se pueden encontrar películas en formato DVD a un precio que va desde los cuatro a los diez pesos y los discos de audio oscilan entre los tres y los diez pesos. Estos precios ya hacen atractivo el incursionar en la zona comercial, por ello vemos a cientos de personas que compran grandes cantidades de estos productos los cuales los pondrán a la venta en los mercados ambulantes de la capital (estos productos llegan incluso a Centroamérica y la Unión Americana). En dichos mercados ambulantes los precios de estos productos se elevan a un precio no mayor de diez pesos por producto lo cual genera una ganancia que va entre los tres y seis pesos. ¿Quiénes son los que venden en los mercados ambulantes? Principalmente desempleados y discapacitados, los cuales planean el gasto familiar en base a la venta de estos productos los cuales les permiten vivir al día, sin la posibilidad de enriquecerse. También es un atractivo el hecho de que en la zona comercial existen puestos especializados en películas de varias partes del mundo, se puede encontrar ópera, música clásica, rock nacional y otras tantas cosas que no se encuentran en las grandes cadenas comerciales. En cada uno de estos puestos encontramos a verdaderos profesionistas los cuales tienen un saber especializado llegando incluso a plasmar en cada uno de estos productos la leyenda Arte Tepito, por ello saben escuchar las necesidades del comprador y ubicar el producto que necesita ¿los precios de estos productos? No van más allá de veinte pesos por unidad. Parece que esta penado para los medios de comunicación ya sea impresos o electrónicos hablar sobre las ―bondades‖ de estos comerciantes y la manera 23 En http://www.tij.uia.mx/el bordo/vo103/bordo3_ciudadania2.html que contribuyen en acrecentar el acervo de los ávidos de consumir productos no tan comerciales y que no se encuentran en las grandes cadenas. Se carecen de estudios que hablen sobre este fenómeno llamado curiosamente ―piratería‖ en los diversos alcances que tiene para las familias, la academia y la formación intelectual de los individuos. Los ―estudios‖ que existen hablan sobre el fenómeno como flagelo que daña a todo el país, debemos darle nuevamente una pensada. Segunda tarjeta postal Ropa y calzado en el barrio de Tepito El barrio de Tepito ofrece estos productos a personas de diversos estratos sociales. Si se es pudiente acudirá a los mercados de tenis importados en donde encontrara las novedades a precios muy por debajo de las cadenas comerciales (el ahorro puede significar entre 200 y 500 pesos), de igual manera encontrara ropa original de las mejores marcas y que de igual manera el ahorro es significativo. Pero si la situación económica es apremiante podrá encontrar en las calles de Matamoros y Tenochtitlán grandes puestos de ropa usada que ofertan sus productos desde un peso, por lo que una persona puede hacerse de una muda de ropa con diez pesos. Encontramos también puestos que venden ropa usada de marcas reconocidas y los precios ahí se elevan y son variados, pero también están al alcance de las personas que no tienen grandes recursos monetarios. Se carecen se estudios desde las ciencias sociales o las humanidades que hablen de este fenómeno que sirve como una alternativa a los que menos tienen y que sirve como paliativo a las situación económica que vive el país. Los ―estudios‖ que existen son elaborados por periodistas de los medios impresos o reporteros de los medios electrónicos en donde ponen especial énfasis en las condiciones insalubres en que operan estos comerciantes y piden a gritos desaparezca esta actividad. Tercera tarjeta postal Los bazares en el barrio de Tepito Los bazaristas son comerciantes que establecen un punto fijo en las colonias de mayor prestigio de la capital de México. Con anuncios espectaculares invitan a los habitantes a que lleven las cosas que ya no les son útiles y que ellos están dispuestos a comprar. La mercancía que llega a ellos va desde tecnología, ropa, libros y antigüedades que pondrán a la venta en sus puestos del barrio de Tepito. Pero también los bazaristas ponen anuncios en los periódicos de mayor circulación en donde anuncian que compran bibliotecas y el mobiliario de las casas; otros más anunciaran que compran específicamente un producto como lo son discos o revistas. Ya con la mercancía en sus manos da inicio un proceso de selección en donde separan los artículos de mayor valor como son las antigüedades, libros especiales y ropa de marcas prestigiadas los cuales venderán a personas que se dedican específicamente a ello y que por tal motivo el precio del artículo aumenta. La mercancía restante es puesta en sus espacios de trabajo y los ávidos de comprar libros, revistas, discos y películas, en donde, los precios por un libro pueden ir desde los diez pesos hasta miles de pesos. Hasta el momento no conozco algún tipo de estudio que considere como sujetos de estudio a los bazaristas u otros comerciantes que se encargan de reciclar artículos. En estas tres postales he intentado mostrar tan solo tres actividades comerciales que atraen miles de visitantes a la zona comercial del barrio de Tepito y que por los precios y esa sensación que se experimenta cuando uno encuentra un artículo que ha resistido el paso del tiempo bien valdrá la pena el transitar por esas calles. Pero volvamos al punto que genera este capítulo que son las diversas miradas sobre el barrio de Tepito en relación a sus actores, el espacio, sus actividades económicas y las manifestaciones religiosas que se presentan en el espacio la cuál es la más importante para la presente investigación. Existen diversas miradas sobre el barrio de Tepito, muchas de ellas han sido difundidas gracias a los medios de comunicación impresos y más recientemente los electrónicos. Cada mirada tiene su porque y responde a una serie de intereses que pueden ir desde el académico, el político y el religioso. En cada mirada sobre algún aspecto del barrio de Tepito se trasmite un mensaje y en base a ella el espectador, lector, visitante o viajero retransmite dicha información a otras personas, con ello, queda una sola imagen y por lo tanto un solo uso del barrio de Tepito. Veamos las formas en que se utiliza la palabra Tepito por parte de sus actores y con ello su denotación: Puede denotar orgullo en voz de sus cronistas y de las personas de edad madura y de la tercera edad; Puede denotar miedo y violencia cuando quien la utiliza es un joven que viste playeras de tirante o playeras con la imagen de un santo principalmente San Judas Tadeo, el pelo con corte tipo militar, tenis Jordan y algún distintivo que connota su creencia que pueden ir desde escapularios de San Judas Tadeo o la Santa Muerte; Puede denotar esperanza en la voz de las madres del barrio; Puede denotar el triunfo a la adversidad en voz de un boxeador o bien; denota una histórica resistencia en voz de sus cronistas Puede denotar la quintaesencia de la madre cuando los habitantes se refieren al barrio como aquel que protege no importando las acciones que hayas cometido, no te cuestiona, te ama, de alimenta, siempre esta con los brazos abiertos para aquel que lo necesita. Ahora bien, los usos de Tepito desde fuera son los siguientes: En uso de los medios de comunicación impresos y electrónicos connota denota ilegalidad, anarquía, asesinatos, en fin, ubican por excelencia al barrio de Tepito en la nota roja; En uso de los que acuden a comprar mercancía para venderla en otra parte connota oportunidad de salir adelante; En uso de los cronistas deportivos connota un barrio que se abre camino en base a los golpes ya sea por el box o la lucha libre (violencia al fin); En uso de los defensores de la lengua el albur connota una desviación de las formas correctas de expresión; Para las autoridades sanitarias connota un espacio insalubre; En uso de los ajenos al espacio ya sea de las colonias contiguas al barrio y de los transeúntes connota miedo tanto a ser asaltado, secuestrado o violado; Y finalmente, para las instituciones religiosas connota un espacio en donde los habitantes hacen uso de los símbolos del sistema de creencias de manera diferente a la que establece la institución religiosa, además de vivir un alejamiento con la institución a la que solamente acuden cuando demandan un servicio; por ello, Tepito es tierra fértil para nuevos cultos. El presente capítulo tiene como fin traer y exponer esas miradas así las como reacciones que han generado entre los actores para poder vislumbrar quiénes son (mirada desde fuera) y quiénes somos (mirada desde adentro) y con ello, ubicar los usos que se hacen del barrio de Tepito. Algunas de las miradas serán más prolíficas que otras, ello debido a las formas que cada profesión determina que lo expuesto cumple con los estándares mínimos para su publicación. Por ello, los trabajos elaborados desde la academia serán menores ya que por su característica principal -el método científico como rector de las mismas- necesitan de mayor tiempo para ser elaboradas, además de que serán sometidas a defensa por un comité de especialistas en el tema. Las cinco miradas y sus reacciones que he de privilegiar son: La mirada del barrio de Tepito generada desde la academia; La mirada desde dentro, es decir, en voz de los habitantes del barrio de Tepito; La mirada desde el periodismo ya sea en los medios de comunicación impresos y electrónicos; La mirada desde fuera expuestas por ciudadanos que se expresan a través de la Internet; La mirada desde la cinematografía. 2. 1 El punto de partida de las investigaciones sobre el barrio de Tepito elaboradas desde la academia24 Es en la década de los 70‘s con la propuesta del Gobierno Federal del Plan Tepito que implicaba la construcción y remodelación de varios vecindades, además de la proyección para la construcción de ejes viales provocaron 24 Aunque existe una diversidad de estudios elaborados desde la academia en relación al barrio de Tepito, solamente he de privilegiar aquellos que han sido producidos desde la óptica de las ciencias sociales y las humanidades. De los mismos solamente he de traer a esté capítulos los que plasman en algunos de sus pasajes el vínculo que existe entre los habitantes del barrio de Tepito con lo sagrado. reacciones entre los habitantes del barrio de Tepito que consideraban que el espacio se iba a fragmentar y que ―desaparecer‖ las vecindades equivalía a terminar con la columna vertebral que genera la convivencia y permite se establezcan lazos solidarios entre los habitantes de la misma. Dicho programa genera una serie de reacciones lo que permite el surgimiento de asociaciones vecinales y de líderes de opinión que se opondrán abiertamente en contra de dicho plan. Este tensión entre las instituciones gubernamentales y los habitantes del barrio de Tepito genera por una parte la unión de los vecinos que encaminan sus protestas hacía manifestaciones originales expresadas a través de la plástica, el teatro y el periodismo independiente. Esta franca oposición y los problemas de vivienda atraen la mirada de científicos sociales que acuden al barrio de Tepito con el interés manifiesto de registrar las acciones que emplean cada uno de los bandos. Cada investigador acude al barrio de Tepito con una óptica dada desde su disciplina, por ello, los provenientes de las ciencias sociales pondrán mayor atención a las formas en que los vecinos se unen, generan discursos y planean las actividades a seguir en pro de su movimiento. Antes de que se generara la tensión y las acciones por el Plan Tepito, del barrio se conocía muy poco y lo poco que se conoce nos presenta un espacio que tiene como motor económico principal la elaboración de productos ilegales, principalmente la producción de licor. Además, se describe como una zona insalubre, zona de prostitución, cuna de hampones y lugares de mala nota. Curiosamente, el barrio de Tepito también posee una cara que le fascina a la nación ávida de glorias deportivas, por ello dirigen su mirada al barrio de Tepito donde la fiereza y técnica de sus boxeadores dan satisfacciones a la nación y por ello se le conocerá como ―barrio bravo‖ y no por las diversas actividades que se desarrollan al margen de lo legal. Hasta antes de la década de los 70‘s existe un desconocimiento de los elementos que constituyen la identidad y la estructura social propia del barrio de Tepito. Por ello, las ciencias sociales tendrán como principal objetivo antes de iniciar cualquier investigación el ―presentar‖ el espacio en sus diversos usos determinados por los horarios, además de ―presentar‖ los elementos fundamentales del tepiteño que permite la identificación y cohesión de los habitantes de ese espacio. Las vecindades y las formas de convivencia entre las familias que las habitan será uno de los elementos que atraerá la mirada de los científicos sociales. Estos estudios alcanzan su punto más álgido con la obra Los hijos de Sánchez de Oscar Lewis (1982) en donde presenta las diversas percepciones y miradas de cada uno de los miembros de la familia Sánchez. Con ello, se tiene una visión diferente de las vecindades que presentaba el llamado época de oro del cine mexicano en donde se desarrollaban una serie de situaciones que iban del drama a comedia, mejor ejemplo no puede haber que la trilogía Nosotros los pobres (1948), Ustedes los ricos (1949) y Pepe el Toro (1953) en donde se presentan diversas historias que se entretejen en torno a la figura principal Pepe el Toro encarnado por Pedro Infante. Por el lado cómico, tenemos a Germán Valdés ―Tin-Tan” con El rey del barrio (1950) y el revoltoso (1951), Mario Moreno ―cantinflas‖ en Si yo fuera diputado (1952) que presentan situaciones jocosas sobre los habitantes de la vecindad, en donde, se pude ser ratero pero el producto de sus asaltos tendrán como beneficiarios a los mismos habitantes de la vecindad que sufren algún problema. Presentan también la unión que genera entre los habitantes de la vecindad cuando su espacio les quiere ser arrebatado y las estrategias que utilizan para salir airosos. A final de cuentas, la vecindad va a ser ese espacio que eternamente se verá atentado por los intereses de llamado progreso al cual siempre se le opondrá resistencia, quizá por eso la historia del barrio sea la historia de resistencia; es aquí el punto que los científicos sociales pondrán mayor énfasis. Es cierto que las vecindades no son exclusivas de la zona centro de la ciudad de México, pero si pueden ser las de mayor densidad poblacional por el perímetro que abarcan una manzana entera. Las formas de conducta y convivencia se presentaran de igual manera en los espacios que condensan varias familias en un espacio reducido, siendo el hacinamiento la característica principal de los mismos, por lo tanto, una eterna lucha por ganar centímetros ya sea en el patio o la calle que serán vitales ya que el espacio de la casa habitación será insuficiente. Estamos hablando de una conducta barrial en donde el patio y la calle es la extensión de la casa, un espacio que siempre estará en disputa, en donde el compadrazgo es la vía para extender la red de apoyos, en donde la actividad económica tendrá que ver con la puesta en práctica de un saber especializado a través de un oficio, por ello, no existen grandes diferencias entre los miembros de un barrio y otro. Para desarrollar mi investigación necesitaba explorar las posibles investigaciones elaboradas desde las ciencias sociales y las humanidades, poniendo especial énfasis en las investigaciones elaboradas de desde la Antropología Social que pueda aportar información básica tal como: Descripción física del barrio de Tepito Descripción de los actores La actividad comercial propia del barrio de Tepito La percepción que tienen los tepiteños de los ―otros‖, ello incluye a los visitantes e investigadores Y la más importante, investigaciones que toquen a profundidad o de manera simple todo aquello que tenga que ver con el fenómeno religioso en el barrio de Tepito. Esa búsqueda tiene como fin el ubicar el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito y los diversos usos y rituales que se giran en torno a estos elementos sagrados. Ubicar trabajos que hablen sobre las transformaciones físicas del barrio de Tepito, la evolución de la conductas entre los habitantes, el surgimiento de nuevos actores, pero principalmente la relación que existe entre el barrio de Tepito como un todo en relación a lo sagrado, ello tiene que ver con los diversos símbolos sagrados y los ciclos festivos que se organizan en torno a ellos ya sea a través de las fiestas mayores o las constantes peregrinaciones anuales que ejecutan los habitantes del barrio. Para ello, solo seleccione aquellas en donde se hablara de imágenes, fiestas, oraciones, peregrinaciones, relación entre los habitantes y las instituciones religiosas, la percepción que tienen de otros sistemas de creencias, donde se describieran los altares, donde se hablara de diversos rituales para pedir ya sea el milagro u otros cosas prioritarias (dinero y amor) y las diversas formas en que el habitante se comunica con lo sagrado. ¿Qué otra elemento busco en esas investigaciones? Algún vestigio que de cuenta de la existencia de lo que hoy conocemos como Santa Muerte y si existe, ubicar los usos y las formas rituales que giran en torno a este símbolo. Así también, busco las diversas manifestaciones rituales y las peticiones en torno a los símbolos del universo sagrado del barrio de Tepito para poder establecer si el culto a la Santa Muerte es novedoso en cada una de sus manifestaciones o si sólo se ponen en práctica los mismos rituales revitalizados por el símbolo conocido como Santa Muerte. A estas alturas de mi investigación y basado en la búsqueda de material que tenga como eje rector la religiosidad en el barrio de Tepito, me permito afirmar que no existen investigaciones que analicen el fenómeno religioso en esa área. Los motivos pueden ser diversos, pero el más plausible es que la tensión generada por el Plan Tepito en relación a la vivienda y a ello sumándole la problemática que generó el sismo de 1985 fueron los que atrajeron la mirada de los científicos sociales. Aun así, las investigaciones elaboradas desde las ciencias socales y las humanidades que presento a continuación tocan el vínculo de los habitantes del barrio de Tepito y lo sagrado. Ello permitirá poder establecer el universo sagrado de los habitantes de Tepito en el tiempo histórico en que se escribió la investigación y, desde mi presente ubicar los símbolos sagrados y sus usos que sobreviven en el tiempo histórico en que escribo esta investigación. 2. 1. 1 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Antropología Social La tesis de licenciatura de Guadalupe Quiroz (1992) sobre la problemática de la vivienda popular en el barrio de Tepito, es sin duda la que mayores datos aportan a mi investigación sobre el fenómeno religioso. En uno de los capítulos de su investigación ahonda en lo que ella llama peculiar cultura del tepiteño, además que describe sus prácticas cotidianas, religiosidad, indumentaria, lenguaje, formas de expresión y formas de trabajo, para luego describir cuál es la concepción que tienen de ellos mismos. Sobre el espacio refiere la apropiación y modificación que los habitantes hacen del mismo, de tal forma que constituye una barrera que solo permite el paso de los extraños a la zona comercial, pero que fuera de los horarios en que opera dicha zona no se permite el libre tránsito de los extraños ya que las calle vuelven a ser propiedad exclusiva de los tepiteños. Guadalupe Quiroz (1992) refiere que la mayor parte de la gente que vive en el barrio de Tepito se conocen; sienten que pertenecen a una gran familia y aunque algunas familias vieron acrecentados sus recursos económicos y adquirieron propiedades en otras zonas de la ciudad no dejaron al barrio de Tepito, un tanto por no perder la red social y otra por el estigma que tienen los habitantes del barrio. Claro que como integrantes de un barrio tienen sus afinidades, debido al tiempo de vivir ahí y al contacto humana diario, a su posición en la sociedad, a sus actividades laborales, etc. Esto va creando en ellos lazos de amistad y comprensión que se ven reflejados en la ayuda mutua ante alguna situación inesperada, se van formando lazos de parentesco por afinidad y luego consanguíneos, se identifican con una forma de vivir la vida en su barrio desde que amanece hasta que anochece, puesto que debido a su situación económica y a la costumbre, pasan casi toda su vida dentro de ese medio ambiente que los llama a la familiaridad y tranquilidad que da el conocimiento de algo, un sitio seguro y sólido. (p. 200) Guadalupe Quiroz deduce que estas redes bien estructuras se debe a que varias generaciones de abuelos, padres y jóvenes han conocido a sus cónyuges en el mismo sitio y se han relacionado; sus oficios y trabajos son muy similares y a veces los mismos, como es el caso representativo, el del trabajo informal, el cual se refleja en el comercio ya sea fijo o ambulante; la concepción que tienen de si mismos y del medio ambiente que los rodea, está comprendida en sus actitudes y acciones muy semejantes; sus creencias religiosas iguales, que por lo general son de santos básicos, la Virgen de Guadalupe y san Francisco de Asís, aunque también hay otras imágenes a las cuales veneran; sus líderes y las formas de escogerlos y hasta un emblema del barrio, creado por sus actuales pensadores originarios de ahí mismo. Otro elemento que permite describir al barrio de Tepito desde la unidad es el hecho de que los habitantes en un porcentaje considerable no poseen un empleo fijo con una remuneración producto del mismo. Debido a ello Guadalupe Ortiz da una explicación del porque del comercio de artículos de segunda mano y la capacidad de los habitantes de ―reciclar‖ determinados artículos electrodomésticos y muebles de madera que ponen nuevamente a la venta. A continuación cito una parte de la tesis de Guadalupe Quiroz (1992) que permitirá dar cuenta del Tepito de la segunda mitad de la década de los 80‘s y que el hoy visitante no lograría ubicar las siguientes actividades a las que se dedican en la actualidad, sobre ellas refiere: En cambio se han dedicado al comercio como su principal fuente de ingreso, de esta forma compran y venden ropa vieja y usada, ropa nueva, saldos, cosas robadas, fierros, herramientas, adornos, cosas sacadas de la basura o cosas que el cambiador traía de las zonas medias y ricas de la ciudad; también venden fritangas en la calle, fuera de su vecindad, recogen cartón y papeles tirados en las calles y luego los venden, hacen trabajos de hojalatería, plomería, electricidad, mecánica, albañilería, carpintería, entre otras actividades. (p.190) Tanto hombres como mujeres trabajan, pero las mujeres siempre trabajan, ya sea que estén solas con sus hijos y por lo tanto tengan que mantener a la familia, cosa que es muy común en el barrio, o que ayuden a sus maridos en el trabajo además del que realizan en su hogar. Casi todos los centros de trabajo de quienes poseen un trabajo fijo, se encuentran dentro de su casa, por lo que no tienen que desplazarse fuera de éste, ni gastar en pasajes; es el caso de artesanos, comerciantes y hasta mecánicos. Después de que termina el trabajo, que es como a las 20:00 hrs se retiran a sus hogares a cenar, platicar sobre los incidentes del día, a contar sus ganancias, a ver la TV, a escuchar música, a convivir de diversas formas con su familia o se van a buscar otras distracciones dentro o cerca del barrio, como ir a la casa de los amigos, a una cantina o a las luchas. (p.2002) En el apartado de la tesis que Guadalupe Quiroz llama religiosidad en el barrio y festividades hace mención de la necesidad en todo México de creer en los santos principalmente la población que se encuentra en una posición vulnerable ante las crisis económicas y las situaciones mundiales. Los santos son necesarios para no sentirse solos y tener un respaldo espiritual al cual se le pueden confiar pensamientos y hasta actos que pueden ser considerados como malos por los demás, entonces se buscará el perdón a los llamados ―pecados‖, para que así la gente pueda continuar sintiéndose aceptada y vivir tranquila con sus semejantes. Posteriormente hace una comparación entre las formas en que se vive la religiosidad en las entidades cercanas al Distrito Federal, del vínculo estrecho que existe entre el santo patrono y la comunidad y refiere que en el Distrito Federal a pesar de que la vida y las relaciones humanas son más frías, más rápidas y la creencia es menor cada día, se celebran también las fiestas a varios santos, y en orden de jerarquía Sobre el barrio de Tepito sentencia la existencia de dos iglesias (La Conchita y San Francisco Tepito) y describe la fiesta que se realiza en torno a los símbolos mayores (4 de octubre para San Francisco de Asís) no aporta datos sobre el día, la organización y las actividades que se desarrollan en relación a la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción, además de que omite la existencia de la iglesia de Santa Ana en la calle de Matamoros y Peralvillo. Los tepiteños creen en varios Santos principales y a todos veneran con diferentes rituales como realizar peregrinaciones y festejarlos entre todos, además de venerarlos en los altares familiares. (p. 220) También hace mención de la importancia y el sentido que tiene para los habitantes del barrio de Tepito el peregrinar a determinados santuarios, además de que solidifica la red de aquellos que deciden peregrinar; sobre ello refiere: Algunas peregrinaciones son las que realizan a San Juan de los Lagos en donde visitan y le rezan a la Virgen de Talpa en Guadalajara, con lo que se fortalecen las relaciones sociales y culturales entre los pueblos, rehabilitándose y reproduciéndose cada año y pasándose de generación en generación. También van a Zacatecas, a visitar al Santo Niño de Atocha y comentan que es muy bonito porque se van más de un mes fuera del barrio y van conviviendo de diferentes formas con sus vecinos, ayudándose y cuidándose, porque van por la orilla de la carretera. (p. 220) Toda su creencia se manifiesta en sus actividades religiosas, pero como ya se anotó, se reflejan en las peregrinaciones que gran número de personas realizan en el barrio, en las mandas, acuden a misas, cuelgan milagros en las ropas de sus santos y participan en las celebraciones religiosas, porque es una forma de relacionarse con sus semejantes y también se sentirse integrados, porque todos hacen cosas comunes por sus creencias y toda su creencia termina con la festividad, la alegría que es una forma de desahogo en sus inquietudes internas. Este ambiente de festividad y cordialidad, implica estar en paz con su familia, tener contacto con vecinos y amistades creadas, intercambiar chistes y bromas, aunque en realidad así es toda la vida de los tepiteños, muy alegre y sin tantos prejuicios sociales. (p. 221-222) De acuerdo con Guadalupe Quiroz, el universo sagrado del barrio de Tepito esta conformado por las siguientes representaciones: Virgen de Guadalupe Virgen de Talpa San Judas Tadeo Santo Niño de Atocha San Francisco de Asís Virgen de Zapopan San Antonio Sobre la instrucción religiosa que reciben los habitantes del barrio de Tepito menciona que las mandan a sus hijos a la Iglesia para que aprendan el catecismo y realicen su primera comunión, mientras que para ellas hay pláticas orientadoras sobre Dios, la Biblia o las relaciones familiares. En las entrevistas que Guadalupe Quiroz realiza a los habitantes del barrio y realiza preguntas referidas a la religiosidad llama la atención dos de ellas. En una de ellas se trata de una mujer ama de casa que menciona que aunque son católicos no asisten a misa, pero que cada noche reza a sus santos desde su casa, que antes iba a las peregrinaciones y que dejó de hacerlo. En la segunda refiere sobre los altares que son erigidos en los patios de las vecindades y pone énfasis en altar con la imagen de San Judas Tadeo, en donde, su entrevistado que habita en una vecindad que antes llamaban el Crucero refiere que dicho espacio era constantemente vigilada por la policía porque vivían muchos rateros ahí y actualmente uno que otro aún existe y que por eso pusieron a San Judas Tadeo y su imagen, porque es el patrón de los rateros. Sobre la manera en que se conciben los habitantes del barrio de Tepito, Guadalupe Quiroz refiere: Ellos se aceptan como son, aunque no saben cómo han sido reproducidos culturalmente ni para qué, es decir, no tienen conciencia de clase para sí, sino una conciencia de clase en sí, despreciados o menospreciados, cuando deberían de estar orgullosos y afirmándose constantemente contra todo eso que produce la ideología dominante y que de hecho lo hacen cotidianamente. Los tepiteños han llegado al grado de verse chovinistamente, porque sienten que son lo máximo en la sociedad que los rodea, por su forma de ser es muy natural, sin tantos prejuicios como en otros grupos sociales; dicen que son muy ―chingones‖; también por su vocabulario, formas de expresión, bravura, su religiosidad, su aguante frente a los golpes o al alcohol, su machismo manifestado diariamente en su actitud frente a la vida. Todo esto, es producto de la sociedad que los rodea, pues ella ha ayudado a que se continúe la fama típica sobre el barrio y sus habitantes, pues la han creado, la han hecho creer porque la han creído, defendido y cotidianamente la alimentan. (p. 63-264) Sobre algún tipo de dato que pueda dar cuenta de la existencia de la Santa Muerte o de elementos de su culto no existen. Si consideramos el sismo de 1985 como un momento de crisis en el barrio de Tepito ¿Por qué no surge en esos momentos el culto a la Santa Muerte? La información que provee la investigación de Guadalupe Ortiz debe ser considerada como prioritaria en toda investigación que tenga como objeto de estudio al barrio de Tepito ya que penetra la intimidad del barrio mismo y sus actores. Sus herramientas para hacerse del dato son aplicados en los espacios de los actores y toca puntos medulares en lo que podemos llamar identidad de los tepiteños. Marco Darío García Franco (2005) en su tesis de licenciatura en Antropología Social Quinceañera: Ritualidad y modernidad en una familia tepitense pondrá mayor énfasis en la relación y la organización que teje un grupo en torno a una fiesta de quince años en el barrio de Tepito. Para ello, tendrá contacto directo con una familia en que una de las integrantes esta por celebrar dicha edad. Si bien Armando Ramírez a través de sus obras Quinceañera (1987) y Tepito (1983) hace referencia a la festividad de los quince años, lo hace con una visión desde dentro y pone énfasis en las situaciones jocosas por las que atraviesan los personajes, así también plantea la forma en que se vive la sexualidad en esa etapa de la vida. Aun y cuando se trata de un ritual que tiene una trascendencia en las familias urbanas, Marco García al realizar su estado del arte, da cuenta que no son muchos los estudios sobre ritualidad en sociedades urbanas y prácticamente nulos los existentes sobre este popular festejo. La categoría de análisis rito de paso será la principal con la que el autor a de desarrollar su investigación. Para ello es necesario señalar que hace una distinción entre los prioritario de la institución religiosa como son los sacramentos y que efectivamente, se trata de ritos de paso y las celebraciones de corte social como son la presentación de tres años y los quince en donde la institución religiosa solo cumple con un papel secundario, es decir, no es prioritario la celebración de estos eventos. Sobre el barrio de Tepito menciona que –de acuerdo a sus informantes- existe una fragmentación en las relaciones sociales debido al cambio producido en su entorno habitacional. En el barrio de Tepito de antes la vecindad era integradora y en el patio de la misma los habitantes intercambiaban puntos de vista, los lavaderos eran otro espacio en donde se intercambiaba información ya sea de los problemas familiares, de la vecindad o del mismo barrio; las fiestas se desarrollaban en los patios y todos las familias que formaban parte de la vecindad eran invitados. El barrio de Tepito de hoy está conformado en su mayoría por Unidades de Renovación Habitacional y aunque número de familias que confluyen el espacio es mayor, no se presentan este tipo de eventos integradores. Parece ser que quitarles los lavaderos, el patio y los sanitarios comunitarios a los habitantes del barrio de Tepito es como haberles quitado el motor integrador principal. A eso debemos de sumar el creciente comercio en el barrio de Tepito, por lo que, del espacio de la calle también se han visto privados y sólo pueden hacer uso del mismo por las noches y los días martes en que se suspende la actividad comercial. Contrario a la idea de un barrio completamente integrado que presenta Guadalupe Ortiz en su tesis, Darío García señala que en la actualidad el barrio de Tepito esta dividido y las relaciones sociales están marcados por la competencia, la desconfianza y el chinga quedito. El espacio se comparte sólo porque es necesario y las relaciones son cordiales mientras no se metan con uno. Con respecto a los elementos que denoten la religiosidad, el universo sagrado y la relación para con la institución religiosa de los habitantes del barrio de Tepito sobresale la siguiente: Señala la existencia de altares principalmente erigidos a la Virgen de Guadalupe en las vecindades o Unidades de Rehabilitación Habitacional La dificultad de hablar sobre la vida religiosa de sus informantes porque no es muy activa ya que ningún miembro de la familia asiste a misa los domingos, ni tiene mucha relación con los padres de las iglesias cercanas, sin embargo, es costumbre pagar una misa en todo evento que amerite, sea bautizo, presentación de tres años, primera comunión, Quince años o boda. Aunque existen en sus viviendas imágenes de Cristo y algunas vírgenes colgadas en algunas paredes de la casa, no se les tiene especial veneración, es decir, no se les ponen veladoras o flores, ni se reza ante ellas. La ayuda que proveyó la iglesia a los vecinos en la obtención de sus viviendas después del sismo de 1985. El peregrinar de miembros de la familia a la Villa, Chalma y San Juan de los Lagos para pagar una manda. Su actitud hacia los grupos religiosos de origen protestante es de fuerte crítica y burla, aunque estas críticas se enfocan más a las limitaciones y restricciones que imponen, pues reconocen el mayor conocimiento que los adeptos tienen de la Biblia, así como su dedicación al trabajo. La relación por la religiosidad es de carácter pragmático, se hacen promesas de peregrinación o de adorar alguna imagen en especial, a cambio de buena salud, dejar algún vicio o encontrar trabajo. Estas promesas se cumplen ineludiblemente, y una vez cumplidas se olvidan de la religión hasta que una nueva necesidad lo requiere. Aun y cuando Darío García hace una distinción entre los ritos de paso que son prioritarios para la institución religiosa y los ritos de paso de corte secular, no pone énfasis en ninguno de los dos. Sobre los elementos que provee para mi investigación son de vital importancia, solamente que se trata de la descripción de un solo espacio y la entrevista esta aplicada a una sola familia, lo que necesito es una visión global. El trabajo de investigación de Darío García data del 2005 y el culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito es plenamente identificable y por ello llama la atención que la etnografía no señala ni aporta algún tipo de dato que de cuenta del culto a la Santa Muerte, ello debido quizás a que solamente considero un micro espacio de la totalidad del barrio y –como se mencionó antes- una sola familia que por supuesto no es devota a la Santa Muerte. Guillermina Castro Nieto (1987) en su trabajo de investigación Control político y organización informal: el caso del comercio ambulante del barrio de Tepito, centra sus observaciones en la zona comercial del barrio, en donde los liderazgos de los comerciantes y su vinculación con la política es la parte medular y desde donde se hilvanara el entramado de la investigación. El tiempo histórico en que se encuentra desarrollando su investigación es sin duda importante ya que se trata de los movimientos políticos y de organización vecinal previa al sismo de 1985, de hecho, su trabajo de campo culmina en septiembre del mismo año. En su investigación nos presenta al igual que Guadalupe Quiroz la vecindad como el punto donde se entretejen todas las relaciones de los habitantes del barrio de Tepito. Pero difiere de la descripción de Guadalupe Quiroz en la medida que presenta a la vecindad como un espacio que aun cuando cuentan con todos los servicios urbanos como agua, luz y drenaje, no tienen en su interior instalaciones adecuadas, ya que por su antigüedad se encuentran en mal estado y no proporcionan un buen funcionamiento. Además existe en ellas un alto grado de hacinamiento y falta de higiene, así como de zonas de esparcimiento, patios y jardines. Así también, hace mención sobre la imposibilidad de que los habitantes del barrio que no están directamente involucrados en el comercio ya sea por edad o por su rol de ama de casa, se ven privados del espacio de la calle ya que el comercio abarca una gran extensión y su actividad dura hasta el atardecer. Dentro de su investigación hace un análisis sobre los tipos de liderazgos y la manera en que interactúan con la comunidad. De ellos, el líder tradicional es el que busca mayor contacto con la comunidad a través de diversos eventos que son prioritarios para el barrio de Tepito. Uno de ellos es el que tiene que ver directamente con mi investigación sobre religiosidad en el barrio de Tepito y se trata de la fiesta en torno a las vírgenes y los santos, por ello, me permito transcribir parte de la investigación de Guillermina Castro (1987) en donde describe el papel del líder y la forma en como se desarrolla la fiesta. También participan en eventos sociales organizados en la comunidad como fiestas en los mercados, bailes, veladas, novenarios y actos penitenciales que hacen en honor de los patronos del barrio (San Francisco y la Madre del Buen Consejo). Para ilustrar lo anterior describiremos a continuación algunas de las festividades que se efectúan en la comunidad. Entre la gente de la localidad recogimos opiniones sobre la importancia que tienen las fiestas y ceremonias religiosas que se efectúan en el barrio y la participación que, en algunas de éstas, tienen los líderes como las peregrinaciones a la Basílica de Guadalupe y las fiestas de Aniversario de los Mercados. El 14 de octubre se celebra el aniversario de los mercados y es tan importante que se considera como una fiesta de barrio. Algunos informantes dijeron que esto responde a que los comerciantes son un gremio muy representativo en Tepito expresándolo como sigue: ―Muchos de los vecinos del barrio se dedican al comercio, por eso la fiesta de los mercados es nuestra fiesta. Algunos de los comerciantes que vienen de otras colonias, pero que trabajan en Tepito, conviven con sus compas de acá, no importando que sean comerciantes ambulantes, celebran junto con la gente de los mercados‖ El día de la fiesta nadie trabaja. Se colocan planchas y los puestos se improvisan comedores donde se colocan manteles de papel para servir los antojitos y bebidas. En los pasillos se ponen orquesta y los mariachis que como cortesía de los líderes llegan a amenizar la fiesta. ―En el andén del Mercado 14 hay gente Fraternal y de otras organizaciones, unos dirigentes traen a un grupo y otro a otro. El de la de la Fraternal trajo la Sonora Tropical.‖ En el interior de los mercados se adornó con flores y guías de papel; los altares de la Virgen de Guadalupe se cubren con cortinas nuevas y flores frescas resplandeciendo con los adornos de diamantina que brillan a la luz de las veladoras o focos de colores. (p.147) Todos los líderes de organizaciones celebran estas fiestas con sus agremiados, algunos líderes compran cajas de refresco o cerveza, otros aportan una colaboración para gastos de la comida que se sirve. (p.148) En Tepito los líderes no sólo hacen aportaciones para estas fiestas, gastan en el sonido, flores, cohetes y distintivos y pagan la música con la que concluye la peregrinación a la basílica. Estas peregrinaciones la realizan varias organizaciones en diferentes fechas. El 17 de octubre es la peregrinación de la Alianza de Comerciantes, el 26 de noviembre de la Federación de noasalariados y la de la Fraternal que se lleva a cabo el primer domingo de diciembre teniendo ya 44 años de realizarse en forma consecutiva. Esta peregrinación de la Fraternal se hace después de una velada a la Virgen de Guadalupe que se realiza la noche anterior para que la peregrinación salga del barrio a las cuatro de la mañana. (p. 148) Otro dato de vital relevancia que aporta la investigación de Guillermina Castro es el hecho de haber realizado un sondeo en la zona comercial sobre la pertenencia al barrio de Tepito, lo que arrojó que aproximadamente el 50% de los encuestados manifestó no vivir en el barrio y su vínculo con el espacio es solamente a través del comercio. Pero también dichos comerciantes se suman a los eventos de corte religioso que ejecutan los habitantes del barrio de Tepito, ya sea el peregrinando o financiando las peregrinaciones y las fiestas a los santos. La investigación de Guillermina Castro aunque tiene como objeto el control político específicamente entre los comerciantes del barrio aporta datos importantes sobre las formas en que un sector del barrio de Tepito se organiza en torno a las fiestas de los elementos sagrados que ahí se veneran. Aun y cuando el culto a la Santa Muerte esta directamente vinculado con los comerciantes, la investigación no arroja datos sobre la existencia de dicho culto. Insisto, no se intenta refutar la existencia de la Santa Muerte en el barrio de Tepito, simplemente encontrar algún vestigio que nos hable de la presencia u el uso en un sector del barrio, así también de algunos rituales que se generen en torno a la Santa Muerte. Mariel Baltierra Arcos (1983) en su investigación antropológica Estudio del liderazgo en una organización vecinal del barrio de tepito aporta elementos que nos permite conocer las formas en que los habitantes del barrio de Tepito se organizan en pos de un objetivo común en una situación emergente como lo fue el problema de vivienda generados por el Plan Tepito y los sismos de 1985. Mariel Baltierra deja entrever el carácter contestatario que tienen los habitantes del barrio de Tepito para con las instituciones. Menciona que existe una percepción homogénea la cual se aprecia en cuestiones ideológicas ya que se manifiestan abiertamente radicales y opositores al sistema político vigente. Muestran entre si muchos aspectos en común: tales COMO sus argumentaciones, sus razonamientos, sus ejemplos, su lenguaje coloquial, su manera de vestir, su círculo de relaciones sociales. También menciona la divergencia que existe entre los miembros de un grupo que persigue un objetivo en común sobre puntos torales de la vivienda, dicha divergencia se salva entre aquellos miembros que han establecido una red sólida a través del tiempo ya que cuenta en gran manera el haberse conocido desde años atrás, haber compartido experiencias como vecinos, como amigos, como compañeros de trabajo, situaciones difíciles, privaciones económicas, situaciones de trabajo, tanto adversidades así como momentos de convivencia social. Lo anterior se ve reforzado por el sentimiento de pertenecer o estar próximos al barrio de Tepito, barrio donde se difunde la convicción de que son gente que cuando entrega su amistad y su confianza, para lo cual el tepiteño es bastante selectivo, lo hace de todo corazón. Un dato relevante que aporta Mariel Baltierra es que en base a su experiencia en campo logra observar que el barrio de Tepito es muy unido en situaciones de emergencia, pero cuando no se presentan estos es difícil que participen en grupos que persiguen objetivos no de tanto alcance. El trabajo de investigación aunque no aporta elementos que tengan que ver con la religiosidad del barrio de Tepito, si aporta la percepción que tienen los actores de las autoridades y los mismos habitantes del barrio. Esta investigación difiere de la realizada por Guadalupe Ortiz, que presenta al barrio de Tepito como un grupo compacto y unido. Así también coincide con algunos aspectos que cita Darío García en la entrevista realizada a los miembros de la familia con la que convivió y que están referidos a la poca unión que existe entre los habitantes de las Unidades de Renovación Habitacional. Finalmente, la categoría de análisis liderazgo difiere de las que utiliza Guillermina Castro quién ubica el campo de acción de los diversos tipos de liderazgo para con la comunidad. La importancia de la obra de Mariel Baltierra radica en el hecho de presentar a un grupo compacto y la diversidad de comportamientos que se presentan por tratar de responder a situaciones emergentes y que no tienen que ver con todo el barrio de Tepito. Su obra no menciona aspectos que tengan que ver con el universo sagrado, la apropiación y función del mismo en la vida colectiva del barrio de Tepito. 2. 1. 2 El barrio de Tepito bajo la óptica de la sociología Héctor Rosales Ayala (1991) en su obra Tepito ¿barrio vivo? Hace un ejercicio similar al que estoy elaborando en este capítulo. Un recorrido por los trabajos de corte académico que se habían producido hasta el momento en torno al barrio de Tepito. Héctor Rosales al igual que Guadalupe Ortiz desarrollan sus investigaciones en un tiempo histórico que será el parte aguas de los estudios sobre el barrio. Les toca la aplicación a raja tabla del Plan Tepito por parte del gobierno federal y que debido a ese plan se logra la unión de los vecinos para formar un frente común en contra de dicho plan. A dichos autores les toca registrar dichos movimientos y en el caso de Héctor Rosales Ayala va más allá de su posición como investigador social para involucrarse en su primera etapa a los movimientos culturales (Tepito Arte Acá) y académicos que se generaron dentro del barrio de Tepito. ¿Qué papel juega Héctor Rosales en los movimientos generados principalmente por el Plan Tepito? El principal, generar un discurso junto con los líderes de opinión tepitenses que responde la pregunta ¿Qué nos hace ser tepiteños? ¿Quiénes somos? ¿Cómo nos conciben? ¿Cómo los concebimos? Es hasta este momento que se empieza a construir la historia del barrio de Tepito desde dentro con la finalidad de contrarrestar la idea general que la sociedad tiene en torno a ellos. Así el barrio de Tepito dejará de ser únicamente la cuna de grandes boxeadores y luchadores –en su versión positiva- o el espacio en donde se falsifica todo tipo de productos, residen los ladrones más despiadados y tierra de anarquía. Actores como Alfonso Hernández quién encabezara la campaña de difusión informativa sobre las acciones que el gobierno pretende realizar en el barrio y las acciones que el barrio debe acatar para contrarrestarlas. Daniel Manrique y Julián Ceballos Casco encabezaran el movimiento plástico, en donde, el primero firmara los murales pintados en las vecindades como ―Tepito Arte Acá‖ y el segundo plasmará en su obra la esencia de la vida en la vecindad que es considerada como la columna vertebral del barrio de Tepito, además de que gran parte de su obra plástica estará enmarcada en las representaciones religiosas (vírgenes y exvotos) que pintará por encargo. Armando Ramírez encabezara el movimiento a través de la literatura y su obra Tepito (1983) es escrita –sin pretenderlo- bajo el método etnográfico, en donde, presenta personajes representativos del barrio de Tepito. 25 Aun y cuando Héctor Rosales Ayala participo de manera activa con estos actores en la creación de discursos que tenían como principal objetivo determinar los elementos propios de la cultura del tepiteño, se desligó de ellos para dar inicio a su trabajo de corte sociológico en donde los actores serían sistematizados bajo la óptica de la sociología. Se parte de la premisa de que Tepito es un barrio con características culturales propias, con una diferenciación social y cultural que objetiva hasta en la forma de expresarse, 25 Estos líderes los presentare en un apartado dentro de este capítulo con una historia profunda y una memoria organizada que se articula en un repertorio de respuestas ante la vida, ante sus problemas, ante la sociedad. Por lo tanto, la conservación de los elementos claves de su herencia cultural sería fundamental. De su obra Tepito ¿barrio vivo? (1991) a decir del autor, tiene como objetivo ofrecer un servicio a la comunidad tepiteña, mostrando sus orígenes de su circunstancia actual. Este conocimiento puede cumplir, para algunos, la reafirmación de sí mismos y para otros, una opción liberadora. Además, ahonda que solo puede hablarse de los tepiteños como un grupo social específico, cuando se define un territorio y se construye en el discurso social común una identidad diferenciada. Además, esta obra expone la historia de los movimientos y sus estrategias en pos de la vivienda y de presentar hacia el exterior una imagen diferente a la que se conoce de Tepito. El estado de la cuestión que realiza Héctor Rosales es amplio y rico en su contenido ya que somete a la óptica sociológica la producción de los medios de comunicación masiva que tocan al barrio de Tepito, los analiza y desmitifica de acuerdo a su experiencia de campo. Como se mencionó líneas arriba, todo discurso que se generaba en el interior del barrio de Tepito tenía la finalidad de desmentir a las autoridades locales e informar a los habitantes del barrio sobre las estrategias a seguir. Por ello, el aspecto religioso no es tocado por Héctor Rosales en su obra, pero no quiere decir que no existe dicho vínculo con lo sagrado entre los habitantes e incluso los mismo integrantes de los movimientos culturales del barrio de Tepito; ya que como veremos en el transcurso de este capítulo; tanto Julián Ceballos Casco declara abiertamente su guadalupanismo como eje rector de su vida; Armando Ramírez plasmará en cada una de sus obras la importancia de lo religioso en la vida de los tepiteños. En la producción de Alfonso Hernández se denotará la ausencia de lo religioso y es hasta nuestros días en que ha tomado el culto a la Santa Muerte para hablar del mismo; de la obra plástica de Daniel Manrique no he realizado una revisión a fondo. En esta obra de Héctor Rosales Ayala se toca el elemento religioso cuando habla de los sismos de 1985, en donde, más que quisimos hacer énfasis en recordar, más que la tragedia, la hazaña de la reconstrucción, la solidaridad barrial, citadina, nacional e internacional, la búsqueda de un sentido nuevo para la vida y los actos cotidianos, el redescubrimiento de lo religioso: la Virgen del Carmen y la Guadalupana. Luisa Aguilar Urbina (1987) en su trabajo de investigación sociológica Reconstrucción de las vecindades de Tepito plantea como una necesidad prioritaria dos elementos para abordar el barrio de Tepito: la primera tiene que ver con la historia del barrio y la segunda tiene que ver con la cultura del tepiteño. En lo que refiere a la historia del barrio su principal fuente son los trabajos que produce el Centro de Estudios Tepiteños (CETEPI) que dirige Alfonso Hernández. Por lo tanto, la historia que Luisa Aguilar plasma en su investigación es la historia oficial producida básicamente por Alfonso Hernández y Armando Ramírez, los cuales construyen la historia dando seguimiento a la palabra Tepito, en donde la ubican desde los tiempos prehispánicos, pasando por la conquista, Colonia y así hasta nuestros días. En esa historia oficial sobresalen dos detalles a considerar: Tepito siempre ha sido zona de comercio en donde se vendía incluso mercancía ―ilegal‖ La gente de Tepito siempre ha sido contestaría e indomable Aquí traigo a colación el trabajo de investigación histórico que realiza Ernesto Aréchiga (1998) Antiguo barrio de indios, Tepito se transforma en arrabal urbano 1870-1920 que somete bajo la óptica de la historia esas dos afirmaciones llegando a la conclusión que dichas narraciones carecen de fundamento, pero que la valía de esas afirmaciones radica en la cohesión que genera en el área, por lo tanto, se puede incluso hablar del mito del tepiteño, por supuesto, generado por los pertenecientes a dicho espacio. Volviendo a la obra de Luisa Aguilar y en lo referente a lo que llama como la cultura del tepiteño refiere Cuando hablamos de una cultura propia del tepiteño, hacemos alusión a los rasgos y valores como el lenguaje (caló), la vida en vecindad, el uso de la calle como prolongación del patio y la casa, los tapancos como medio para un aprovechamiento máximo del espacio habitacional, el ingenio personal que se expresa en su habilidad de vender, las múltiples fiestas que se realizan comunitariamente en la vecindad, el baño de vapor, etc., rasgos y valores culturales que probablemente encontraremos en otros barrios, pero no de manera tan intensa como en Tepito. (p. 13) Ahora bien, si los tepiteños tienen ese arraigo en el barrio y muestran lo significativo que es la interacción casa, patio y calle exaltando la identidad barrial, no es sólo por una sensibilidad particular o una actitud romántica, sino que detrás de todo existen relaciones económicas, políticas y sociales, que le dan sustento, de tal forma que fuera de ese contexto y de se territorio no podrían sobrevivir o reproducirse de igual forma. Consecuentemente, la defensa del barrio, de la vecindad y el comercio obedece a las diferentes presiones que sufren por parte del capital y del Estado u otras organizaciones, situación que los mantiene unidos y les da forma de comunidad local. (p. 15) El fenómeno religioso no se toca en la investigación de Luisa Aguilar, ni deja entrever la posible existencia de algunos elementos que denoten la relación de los habitantes del barrio de Tepito con lo sagrado. Ello se debe a dos posibles causales: el primero tiene que ver con el planteamiento de la misma investigación que es la reconstrucción de las vecindades y aunque toca las formas en que conviven las familias en el espacio llamado vecindad, omite la descripción de las mismas en su espacio colectivo y el privado, ahí seguramente hubiera identificado y sentenciado el vínculo estrecho que existe entre lo sagrado con los tepiteños. La segunda tiene que ver con sus fuentes y sus informantes; sigue a pie puntillas las afirmaciones de Alfonso Hernández sobre la historia y cultura del barrio; además que en las entrevistas solamente pregunta lo referente al vínculo del habitante para con el espacio. 2. 1. 3 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Psicología Social Mónica Castro y Manuel Cordero (2004) en su trabajo de investigación Actitud hacia el comercio en la vía pública en el barrio de tepito mencionan que el barrio de Tepito es susceptible de ser estudiado por: El barrio se puede y debe estudiarse por diferentes razones, algunas de ellas son: por los altos índices de delincuencia e impunidad que ahí se registran, por la venta de mercancía ilegal y "pirata‖, porque según registros, México, junto con Argentina, encabeza la lista de países de occidente con mayor consumo de productos falsificados, Por su organización y su estructura interna, y los códigos y costumbres que ahí se manejan; por ejemplo es el centro de culto a la Santa Muerte; porque según cifras del INEGI los habitantes del barrio son de los más pobres de la capital, con ingresos de entre uno y tres salarios mínimos, por su índice de deserción escolar, los niños y jóvenes prefieren atender puestos, vender o distribuir alguna droga que continuar después de los estudios básicos, entre otros muchos factores, y claro estudiar la actitud que se tiene hacia el comercio que se ejerce en sus calles por habitantes cercanos a este, que es el tema que proponemos. (p. 18-19) Los autores realizan un ejercicio que si bien no es usual en la antropología social, si es valido dentro de las formas que la psicología social tienen para obtener el dato ¿de qué ejercicio hablo? De preguntar a una fracción (la colonia Guerrero) la percepción que tiene de aquellos (el barrio de Tepito) con los históricamente han tenido diferencias profundas. Más aun, se les pregunta sobre la percepción que tienen de las actividades de los ―otros‖ (principalmente la producción de productos apócrifos) y que los mismos investigadores consideran como un flagelo de la economía nacional. El comercio ambulante es un problema que ha alcanzado enormes dimensiones en México y nos afecta a todos, por lo mismo pagamos un precio muy alto, ya que las empresas aumentan sus precios debido a la poca demanda de productos originales; la gente aun sabiendo las consecuencias prefiere precio sobre calidad, es decir, productos clonados, robados o ―piratas‖ que sean mas económicos. Los resultados: menos oportunidades de bienestar para las familias, la calidad de los servicios disminuye, más inseguridad, se pierde la confianza y el respeto hacia nuestras instituciones; no se necesitan nuevas leyes que regulen el comercio informal, sino que las existentes dejen de ser un mero espejismo y se apliquen. (p.2) En su análisis desde dentro del barrio de Tepito hacen mención que este barrio es único porque la mayoría de sus habitantes viven y trabajan dentro de el; esto le da al barrio una imagen de cohesión y una función de totalidad. Y ahondan que el barrio de Tepito es auto suficiente ya que sus habitantes no necesitan desplazarse grandes distancias para ir al trabajo, a la escuela, al deportivo o al mercado, es decir, Tepito satisface las necesidades de sus habitantes en cuanto a servicios públicos, ya que cuenta con la mayoría de ellos, de ahí su carácter contestatario ante las autoridades federales y capitalinas. Con respecto a nuestro tema de interés que versa sobre la relación del barrio para con lo sagrado, los autores sentencian en su investigación la presencia de la Santa Muerte en diversas representaciones entre los comerciantes –a decir de los autores- principalmente entre los que venden productos apócrifos e incluso armas. Las imágenes de la Santa Muerte también se pueden comprar ya que la venden en algunos puestos del tianguis. Menciona que hay gentes que creen en ella y le rinden culto, ―nunca los ha abandonado‖, les comenta un amigo que lleva tiempo vendiendo en Tepito; y afirma ―a veces pensamos que la gente que no forma parte del barrio, lo considera malo‖. Aquí cabe formular una pregunta en relación con el hecho de que los autores sentencian la existencia del culto a la Santa Muerte; si para ellos lo que se comercializa en el barrio de Tepito es un flagelo a la economía del país y el comerciante por lo tanto es un ente nocivo y por esa relación directa entre lo sagrado con la actividad del devoto ¿Cómo conciben los autores a la Santa Muerte? ¿Por qué sentencian exclusivamente el vínculo entre los comerciantes con la Santa Muerte y no con otros símbolos sagrados del universo católico u orisha? Margarita González y Manuel Meyen (1986) en su trabajo Organización e interacción en una cooperativa de vivienda en el barrio de tepito, se trazan como principal objetivo el analizar el proceso de interacción que se da al anterior de un grupo de habitantes del barrio de Tepito que están decidiendo formar una cooperativa en pro de la vivienda. El papel que juegan los investigadores es que a través de una serie de instrumentos metodológicos podrán ―ayudar‖ a los integrantes de la misma a definir su potencial en las funciones que atañen al grupo, así también, se encargaran de establecer –en base a este potencial- las funciones que cada integrante ha de cumplir para el buen funcionamiento de la cooperativa. Los autores señalan en su investigación los problemas de los integrantes de los diversos grupos en pro de la vivienda debido a que el grado de afinidad no es estrecho entre los miembros, además de que la asignación de las funciones genera tensión entre los integrantes del grupo lo que lleva a la fragmentación del grupo. Esta investigación muestra otra cara de los habitantes del barrio de Tepito diferente a la Guadalupe Ortiz y Héctor Rosales Ayala que muestran y escriben sobre la unidad de los habitantes del barrio de Tepito. Sobre el barrio de Tepito sólo ofrecen información general sobre la ubicación y el área del barrio, así como hacer del conocimiento del llamado ―corazón del Barrio‖ referido al área comercial que servirá de base para futuras investigaciones como lo es la de Marco Darío García Franco (2005) en su tesis de licenciatura en Antropología Social Quinceañera: Ritualidad y modernidad en una familia tepitense que ya fue expuesta en este capítulo. Sobre las características del barrio y sus habitantes los autores refieren: El barrio de Tepito se distingue de los demás barrios del Distrito Federal, porque la mayoría de sus habitantes viven y trabajan dentro de él; esto le da al barrio una imagen de cohesión y una función de totalidad. Estas características hacen de Tepito un barrio singular. Podríamos decir que Tepito es un barrio autosuficiente ya que sus habitantes no necesitan desplazarse grandes distancias para ir al trabajo, a la escuela o incluso para ir al mercado. Es decir, Tepito satisface las necesidades de sus habitantes; debido a esto, la población de Tepito adquiere un sentido de pertenencia al barrio, lo que les hace buscar su conservación. (p. 40) Los autores se dan a la tarea de realizar sus entrevistas en los domicilios de los anteriores y actuales integrantes del Consejo de Administración de la mesa directiva de la Cooperativa Unión y Esfuerzo de Tepito (COPEUNETE) y nos ofrecen una descripción amplía y puntual del espacio individual y el colectivo, aunque no pone énfasis en los elementos simbólicos de los habitantes o en el caso que me compete, algunos de los elementos del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. 2. 1. 4 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Historia Manuel Gamio en su obra Forjando Patria (1992) hace referencia a las actividades ilícitas del los habitantes del barrio de Tepito y la manera en que las relacionan con lo sagrado sobre ello refiere: ¿No sabemos todos que los guapos de Tepito y la Palma se arrodillan ante la Virgen de la Soledad, como ante bélico Huitzilopochtli, implorando pulso firme para esgrimir la chaveta en próximo homicidio? (p. 90) Ernesto Aréchiga Córdoba (1998) en su tesis de Historia Moderna y Contemporánea Antiguo barrio de indios, tepito se transforma en arrabal urbano 1870-1920 aborda un tema que los habitantes del barrio de Tepito habían considerado fundamental para la construcción de la llamada identidad del tepiteño…la historia del barrio. Como mencione líneas anteriores, uno de los efectos que trajo consigo el Plan Tepito fue la consolidación de un grupo de tepiteños que desde diversos campos buscaron la unión de los habitantes en contra de las autoridades que – a su forma de ver- intentaban despojarlos de las vecindades que es el elemento que formaba la columna vertebral de las relaciones sociales. Este grupo se dará a la tarea de ―construir‖ la historia del barrio, para ello, identifica los elementos prioritarios de su presente como lo es el comercio, su vocación contestaría, la vecindad y sobre todo, el origen de la palabra tepito. Después hará un seguimiento de estos elementos a través de documentos históricos y el uso que harán de ellos tiene como fin que los habitantes del barrio de Tepito ubiquen un origen común y con ello formar un frente único en contra de las acciones del gobierno que atentan contra sus formas de ver y actuar en el mundo.26 Ernesto Aréchiga desde su disciplina hará un seguimiento del área que hoy es Tepito y ubicará las discontinuidades en diversos tiempos históricos, ello difiere de la historia lineal que construye el grupo que pretende unificar el barrio. Sobre el origen y las discontinuidades Aréchiga se refiere de la siguiente manera: La existencia del barrio de Tepito, o al menos de su denominación, tiene una amplia trayectoria iniciada en la época colonial, cuando la traza de la ciudad de México reservó el centro para la ―gente de razón‖ y ubicó a los indios en la periferia. Al igual que los barrios colindantes, Santa Ana-Atenantitech-Peralvillo y la Concepción Tequipeuhcan. Tepito formó parte de la Parcialidad de Santiago Tlatelolco y desde entonces ha recorrido de la mano del devenir histórico de la ciudad. Sin embargo, esta permanencia encierra a su vez un largo proceso de cambios de funciones y adaptaciones, que han seguido la pauta del crecimiento urbano y demográfico de la ciudad y sus necesidades inherentes. En efecto, aquel barrio de indios que quedaba en el margen septentrional de la traza española de la ciudad, no es lo mismo que el barrio sobre el cual la ciudad se expandió durante el siglo XIX, ni es comparable bajo una supuesta línea de continuidad con el barrio actual. (p. 1) Pero evidentemente sólo se puede hablar de la persistencia de un barrio, explicable sólo desde la perspectiva de cambio. Aunque siempre es tentador ubicar a los tepiteños como herederos directos de Cuauhtémoc, no parece haberse dado la continuidad histórica de ese alcance pues, por el contrario, el barrio ha atravesado por diversos momentos en que han variad radicalmente tanto sus funciones como sus pobladores y sus condiciones espaciales. (p. 2) Aunque Ernesto Aréchiga basado en su información determina que los elementos del Tepito de hoy no es una sucesión lineal de hechos, si reconoce 26 Esta construcción de los elementos que dan identidad al barrio las traeré a colación cuando hable de la óptica del barrio de Tepito desde dentro. la importancia de la historia que crearon los habitantes del barrio en la conformación de la identidad del tepiteño y que las investigaciones de corte académico que surgieron en su tiempo y aun las actuales han dado como cierta esta historia y la han plasmado en sus trabajos de investigación cuando hablan de los orígenes del barrio de Tepito. Sobre este tipo de trabajos académicos Ernesto Aréchiga menciona: Debido a su conformación social, a su riqueza cultural, el barrio de Tepito ha sido estudiado en épocas recientes por especialistas de toda índole: antropólogos, médicos, sociólogos, psicólogos, arquitectos, periodistas, lingüistas, urbanistas. La mayor parte de estos trabajos contiene una introducción de la historia del barrio que repite una serie de imágenes producidas por los habitantes de Tepito durante los años sesenta y setenta de este siglo. Se trata de verdades no necesariamente históricas pero que han servido para reforzar su identidad cultural y su defensa del espacio barrial. Hay por lo menos dos argumentos centrales que en forma combinada o aislada aparecen en esas versiones: una, aquella que rescata el hecho, probado por las fuentes, de que en estos barrios los tenochcas y tlatelolcas libraron sus últimas batallas contra los conquistadores españoles antes de la caída de Tenochtitlán; la otra, sin ningún sustento en las fuentes, aquella que supone que en el área establecida desde la época prehispánica un tianguis, paralelo al de Tlatelolco, en el que ya se intercambiaban cosas usadas, menudas o ―chuecas‖. (p. 2) Este tipo de historia que ubica un elemento en el presente y le da seguimiento a través de diversas épocas hasta ubicar el origen o lo primero, será la forma en que se construirá la historia desde dentro que tendrá como fin, el dotar de sentido a la comunidad.27 La principal propuesta de Ernesto Aréchiga consiste en que el barrio debe ser observado con una mirada que provenga del bagaje metodológico de las disciplinas que pretendan abordarlo, dejando ese carácter nostálgico con que se aborda el barrio, siendo la descripción como unidad el ejemplo típico. Así pues, desde la perspectiva nostálgica, la noción de barrio puede sujetarse, hasta cierto punto, fácil y rápidamente: está asociada fundamentalmente a un medio popular cálido y solidario, integrador, donde el pobre, a pesar de la miseria y de la indigencia –o quizá a causa de ellas- puede encontrar apoyo y protección. Debe agruparse otro elemento a esta noción: el barrio es una especie de microcosmos que se presenta ante nosotros como una realidad socioEste tipo de ―construcción‖ de la historia lo explicare más a detalle cuando entre en materia del culto a la Santa Muerte, ya que se ha utilizado la misma formula de tal manera que el culto de hoy en día tiene su origen en el culto a las deidades prehispánicas de la muerte. 27 económica y cultural relativamente homogénea. Idea que subyace en estos trabajos independientemente del carácter que asuman, ya sea una memoria o una elaboración historiográfica mayormente sustentada. (p. 19) Durante los años ochenta se realizaron varias tesis y monografías de la historia social urbana, en las cuales el tema del barrio popular u obrero aparecía o bien como el objeto central del estudio o bien como un ―marco cómodo para aproximarse a las formas de vivir y habitar de las clases populares‖. Se trata de investigaciones realizadas desde la perspectiva de lo total, que pretenden explicar los aspectos espaciales, sociales, culturales y familiares que construyen las identidades sociales al interior de un barrio. (p. 22) Ernesto Aréchiga menciona la existencia de tres barrios que tenían como centro las iglesias de Nuestra Señora de la Concepción, San Francisco de Asís Tepito y la de Santa Ana, no aporta mayores datos sobre el aspecto religioso del barrio de Tepito. Su importancia y con ello su inclusión en este apartado de mi investigación, es la invitación que hace a fragmentar el barrio y someterlo a las diferencias que pudieran existir con el mismo barrio, para ello, se debe describir el espacio desde la diversidad y no desde la unidad; además de dejar el carácter nostálgico en nuestras descripciones ya que se debe considerar el área de estudio en una constante transformación en donde los elementos existentes pueden ser reinterpretados o refuncionalizadas, además de que surgirán nuevos elementos que pueden ser una respuesta alternativa o bien, un elemento emergente que puede fragmentar al barrio. 2. 1. 5 El barrio de Tepito bajo la óptica de la Lingüística Noé Gutiérrez González (1988) en su investigación lingüística Que trabajos pasa Carlos: la construcción interactiva del albur en Tepito, toma como objeto de estudio el albur que es considerado por los tepiteños un elemento que surge en el seno del barrio y que forma parte de la identidad del barrio de Tepito. De hecho, cuando se le pregunta a los ajenos al barrio de Tepito sobre un elemento que se propio de ellos se referirán al albur, los golpes y el comercio. El albur –menciona el autor- es un juego verbal que se practica en todo el país con distintos grados de elaboración y complejidad, pretender elaborar una definición del albur es una tarea difícil, como lo es el intento definitorio de cualquier manifestación cultural. Pero para abordarlo es necesario descender para acercarnos al contexto cultural y lingüístico donde se elabora el albur y poder reconocer los procedimientos discursivos, las reglas del juego y los distintos tipos que emplean los albureros para construir esta práctica verbal. Con respecto a la forma en que ha de abordar el barrio de Tepito para su investigación refiere que no pretende partir de la idea de que el barrio es homogéneo como un grupos social, pero la imagen que proyectan al exterior es una construcción social peculiar sustentada en varios factores, de permanencia constante que le dan cohesión y le permiten la elaboración de una identidad cultural específica. Sobre las formas en que los habitantes del barrio de tepito conciben su espacio y las formas en que establecen el vínculo con sus habitantes, además de la importancia del albur en las relaciones sociales refiere lo siguiente: Para la mayoría de los tepiteños su barrio tiene una relativa autonomía: allí se vive, se convive y se trabaja. La fuerte socialización de sus relaciones hace que la comunicación verbal sea también intensa. El manejo del lenguaje cumple funciones importantes, no se escatima la interacción verbal y cuando ésta se trastoca en juego, en contienda de albures, el acto se convierte en regocijo. Casi nunca se elude la provocación porque permite el lucimiento del ingenio y la sagacidad en el manejo del repertorio alburero. Su cultivo, creación y recreación es toda una institución social y algunos de sus practicantes tienen conciencia de ello, reconocen las reglas del juego, la calidad de un duelo y la capacidad del contrincante. (p. 1-2) ¿El albur cómo un elemento de resistencia? Efectivamente, Si el lenguaje es un código en torno al albur se crearan nuevas comunidades en donde sus miembros son capaces de decodificar de manera expedita el mensaje que se esta enviando y que necesita respuesta inmediata pues no se debe olvidar que el juego del albur es una contienda que tendrá un vencedor y un vencido. Por ello Noé Gutiérrez refiere que el albur es una manifestación de la apropiación del lenguaje por parte de grupos sociales populares, que se oponen y es una burla de las formas discursivas institucionales por medio de las cuales el poder se expresa. Pues bien, el lenguaje no es el único elemento que el tepiteño a codificado y con ello establecer la distinción entre los que pertenecen y los ajenos. El comercio, la religiosidad, el deporte y otros aspectos también han de ser codificados, para ello es necesario ahondar en las formas en que el tepiteño las codifica. Noé Gutiérrez para explicar la esencia del albur ahonda en demasía en la personalidad del mexicano a través de la obra de escritores como lo es Octavio Paz en El laberinto de la soledad y con ello, surge la imposibilidad de entender la esencia del albur para el tepiteño porque no ahonda en su personalidad. Para él, el albur es una contienda en donde uno saldrá vencedor. Por ello, cuando se encuentra intentando registrar una ―contienda‖ sus resultados no son alentadores por el simple hecho de que es él quien la programa quitando uno de los elementos más importantes del albur….las espontaneidad. Pero en esencia, la postura de Noé Gutiérrez es acertada ya que se da a la tarea de registrar el lunfardo –y sus connotaciones- del hecho que lo llevo al área de estudio. Los que acudimos al barrio de Tepito pretendemos en esencia lo mismo, por mi parte el registrar el lunfardo de la religiosidad, es decir, las formas verbales manifestadas en las oraciones con que los habitantes del barrio de Tepito establecen el vínculo con lo sagrado y registrar las formas en que las mismas han sido incorporadas a lo que se conoce como cultura popular. Quizás por eso la frase de ―tepito es la síntesis de los mexicano‖ de Alfonso Hernández no suene tan hueca, ya que por lo menos el albur se ha extendido a otras entidades y como intentare mostrar, el culto a la Santa Muerte tal y como lo conocemos en el presente tiene su centro de origen en el barrio de Tepito y se ha extendido a otras entidades. 2. 1. 6 El barrio de Tepito bajo la óptica de las Letras Hispánicas Mónica Ríos (2004) en su trabajo de investigación en Letras Hispánicas De lo marginal a lo subversivo: La función del imaginario en la reconstrucción literaria de la identidad cultural tepiteña [crónica de los chorrocientos mil días del barrio de Tepito (1972) y Tepito (1983)] de Armando Ramírez, traza como objetivo: El objetivo de este trabajo consiste en mostrar la función del imaginario en la reelaboración de la cultura barrial de Tepito en algunas obras del escritor Armando Ramírez. Intento también situar en su contexto las obras seleccionadas y vincularlas con el movimiento cultural ―Tepito Arte Acá‖. Asimismo pretendo exponer la relación intertextual que se establece entre las Crónicas de Indias, específicamente la Historia General de las cosas de la Nueva España de Fray Bernardino de Sahagún y la Historia Verdadera de las conquista de la Nueva España de Bernal Díaz del Castillo con la obra de Armando Ramírez. La hipótesis que planteo es que Armando Ramírez establece la marginalidad como la piedra angular donde se cimienta la identidad cultural tepiteña. Para reafirmar esto se vale de lo que llamo ―marginalidad histórica‖ que consiste en la reelaboración de la historia la que generalmente reinventa, la refuncionalización de leyendas y mitos prehispánicos y de la religión católica, así como de la invención de nuevas historias y leyendas sobre el barrio. La lectura de este trabajo de investigación resulta de lo más rico para aquellos que tenemos conocimiento de la obra de Armando Ramírez ya que nos presenta a un escritor que aunque proviene del barrio de Tepito, no es para nada un improvisado ya que maneja la esencia de las obras épicas e histórica que hace uso de ellas para presentar el barrio de Tepito y sus personajes. 28 Mónica Ríos cataloga la obra de Armando Ramírez en lo que llama marginalidad histórica, ello es, la refuncionalización del mito, la reelaboración de la historia y la creación de nuevas leyendas. El lenguaje que utiliza en sus obras, lo toma de barrios como Tepito y la Merced y se caracteriza por sus giros y deformaciones y por el uso constante de albures o palabras y frases con doble sentido. La justificación del título de este trabajo, De lo marginal a lo subversivo, se da en primera instancia, tanto por el autor como por sus obras. Armando Ramírez es un escritor que podemos calificar de marginal, lo es primeramente porque se encuentra alejado de los círculos literarios y asume una temática y lenguaje socialmente marginal. En sus textos presenta una inversión de valores debido a que lo marginal, con toda su carga de connotación negativa, se instituye como cimiento de la identidad tepiteña. Lo subversivo no sólo hace alusión a la forma en que Ramírez aborda la literatura, sino también porque en su obra el marginado, en palabras del autor, comienza a elevar su voz con la frase desafiante: ―Aquí estoy, existo y quiero mentarles la madre!‖ (p. 8) Para los investigadores que pretendan abordar el barrio de Tepito, la lectura de las obras de Armando Ramírez son obligatorias ya que a través de sus personajes –que parecen ser ficticios- muestra el barrio en cada uno de su rincones, además que ofrece la visión particular que tiene el tepiteño de si mismo y la que tiene de los otros. Por ello, Mónica Ríos hace una defensa a la 28 Este tipo de recurso en la obra de Armando Ramírez alcanza su punto más alto en su libro en: Ramírez, Armando; La tepiteada, OCEANO, México, 2007 obra de Ramírez ya que los medios académicos constantemente rechazan porque la consideran en demasía popular. Mónica Ríos extrae de la obra literaria de Armando Ramírez el aspecto religioso que será una de los ejes rectores en su narrativa, sobre ellos refiere: El discurso religioso católico se inserta en la obra a partir de dos instancias: la Biblia que se establece como un hipótexto a Crónica y las prácticas religiosas de los habitantes del barrio. El mejor ejemplo de esto es el habla de los personajes. Por ejemplo son comunes los juramentos por Dios o frases como ―que Dios me perdone‖, ―Diosito lo manda‖, o ―Dios lo tenga en su santa gloria‖. También encontramos que el primer narrador o ―Encuentrador‖ explica que las familias se hincan durante los temblores, debajo del arco de la cocina para rezar, así este lugar se torna en altar. Cuando el ―Encuentrador‖ cae en un hoyo que se formó por el sismo, nadie escucha sus peticiones de ayuda porque están muy ocupados rezando. Encontramos también referencia a los oficios religiosos como la misa. Con lo que concluimos que la religión y su práctica son parte de la vida de los personajes y por tanto del barrio. (p. 57) Cabe mencionar que por lo menos en la obras que la autora refiere no se nombra a la Santa Muerte ni se hace ningún tipo de referencia ya sea simbólico o ritual que de indicios de su posible culto 29. Además, cuando Armando Ramírez ―construye‖ la historia del barrio de Tepito pondrá énfasis en el carácter contestatario para con los designios del gobierno local o federal, pero no plasma ningún indicio de un carácter contestatario para con los representantes de la iglesia u otro sistema de creencias. Finalmente, de dejado hasta el final de este apartado la obra de Mónica Ríos ya que sirve de preámbulo para el siguiente apartado que tiene que ver con la óptica del barrio de Tepito desde dentro, es decir, en voz de los actores. 2. 2 El barrio de Tepito desde dentro: la memoria colectiva registrada por los actores. El presente apartado tiene la finalidad de que los habitantes nos presenten el barrio de Tepito y los elementos que constituyen su identidad barrial, así como las transformaciones que ellos mismos han registrado ya sea por el surgimiento de nuevos actores o por las crisis generadas por la naturaleza. 29 Sobre la aparición de la Santa Muerte en su obra literaria se va a encontrar en su última novela: Ramírez, Armando; La tepiteada, OCEANO, México, 2007 Algunos de los actores que han escrito sobre el barrio los he presentado de manera somera en el apartado anterior, siendo Armando Ramírez el principal de ellos y quizá el más reconocido por su extensa producción literaria. Otros más, circulan en el ámbito de lo local y sus movimientos culturales tienen como fin perpetuar la memoria del barrio, aunque dicho sea de paso, sus creaciones serán de mayor consumo por los ajenos al barrio de Tepito. También existe una mirada particular sobre el barrio de Tepito en cada uno de los exponentes que los llevara al distanciamiento por las formas y los elementos propios del barrio (Carácter contestatario, religiosidad, deporte, comercio, entre otros) que presentan al ajeno al espacio. Con excepción del frente común en contra del Plan Tepito que formaron habitantes del barrio, en donde la información y la producción plástica estaban dirigidas al interior del barrio ya que la finalidad de los autores es ―crear‖ la identidad tepiteña. Pero librado el escollo disuelven su sociedad y sus producciones estarán encaminadas a un público diferente con el cual surgieron; ahora su producción será consumida por los ajenos al barrio de Tepito, principalmente el medio académico y el gremio de los periodistas. Algunas de las obras de Armando Ramírez, Alfonso Hernández, Julián Ceballos Casco, Eduardo Vásquez con su taller literario y los comentarios de Daniel Manrique serán expuestas en este apartado. Los elementos que he de traer a colación son aquellos que tengan que ver con el aspecto religioso de los habitantes del barrio de Tepito, ello es: El culto a algún santo en específico, Posibles oraciones, Peregrinaciones, El papel de lo sagrado en sus actividades cotidianas, Los posibles comentarios que se viertan sobre otros sistemas de creencias, Los diversos rituales que se elaboren en torno a un santo o una virgen, Las diversas fiestas en torno a lo sagrado, La relación que priva entre los habitantes del barrio y las instituciones religiosas y los representantes de las mismas. Este tipo de revisión a la obra de los habitantes del barrio de Tepito cumple con la finalidad de determinar el universo sagrado en voz de los actores. Ello me permitirá en una línea de tiempo, ubicar la vigencia de determinados elementos del universo sagrado, así como el surgimiento de nuevos y el abandono de otros. Así también, este tipo de revisión o estado de la cuestión cumple con una de las premisas básica de la antropología social que es escuchar la voz de los actores, de hecho, este tipo de ejercicio se puede considerar como una entrevista a cada uno de los actores en relación a lo religioso. También cumple con la finalidad de tener un antecedente de los posibles elementos que uno encontrara en la realización de la etnografía y en las herramientas por medio de las cuales se ha de registrar los elementos del universo sagrado en el espacio privado. 2. 2. 1 El vínculo con lo sagrado y sus manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito en la obra de Armando Ramírez Son cinco las obras de Armando Ramírez de las que he de extraer el elemento religioso ya sea en sus formas míticas, simbólicas y rituales. Con ello, presento a los lectores de mi trabajo de investigación la apropiación que hacen los habitantes del barrio de Tepito de los elementos que forman parte del sistema de creencias católico y la función que cumplen en su cotidianidad. Debe de señalarse que la obra de Armando Ramírez no es de ninguna manera una autobiografía, ni sus personajes son una ficción. Cada personaje contiene parte de la personalidad de los tepiteños, su visión del mundo y su relación para con los diferentes incluso del mismo barrio. También se debe señalar que el autor recurre al método etnográfico en su narrativa y cuando uno de los actores se refiere ya sea a su grupo o en contra de los otros, no lo hace a titulo personal ya que la opinión de cada personaje en su obra literaria representa la opinión de un sector de los habitantes del barrio de Tepito. Las historias de vida serán el medio por el cual Armando Ramírez ha de contar la historia del barrio de Tepito y los elementos que cohesionan a los habitantes como lo es la vida en vecindad, las tardeadas, la palomilla y sus diferencias con otras colonias. Por el contrario, la vida de estos personajes es de gran atractivo para los habitantes del barrio de Tepito que los ubica en el polo que nunca desearían; por lo tanto, se acude a ellos para que narren sus vidas y las causas que los llevaron a ser teporochos, comerciantes exitosos, bailarines reconocidos, fayuqueros y otros roles que se presentan en su obra. Claro que narrar la historia siempre tendrá un costo y aquel que desee saberla debe de realizar el pago que puede ser efectivo o en especie30, en el caso de los teporochos el pago se hace en especie y la especie es alcohol 31, precisamente este personaje es parte central de la siguiente obra de Armando Ramírez. En su obra Chin chin el teporocho (1985)32 Armando Ramírez nos sitúa en el Tepito de las décadas de los 60‘s y principios de los 70‘s. En ella, narra las peripecias del personaje Rogelio que a la postre por causas diversas será un alcohólico que el barrio cataloga como teporocho, ello es, un ser de aspecto desalineado y repulsivo, que no le importa donde pasa la noche ni donde ha de morir. Con respecto a las manifestaciones religiosas y el vínculo con lo sagrado en el barrio de Tepito el personaje Chin chin refiere lo siguiente: Cuando a Rogelio (Chin Chin) se le pregunta su adscripción religiosa responde: ¿Y tu Rogelio tampoco crees en Dios? Me pregunta Agnes agarrándome desprevenido. –Pues yo ya no se ni que creer, mira yo desde que hice la primera comunión no me he confesado y a misa pues nada más voy cuando ustedes me llevan pero yo más bien por ustedes que por Dios, ahora que cada quien ¿no? –Si mi papá sabe como piensas olvídate de Michele. –Si no se lo dices tú, además por Michele soy capaz de volverme santo, aprenderme de memoria el rosario y recitar el Padre Nuestro, el Ave María y el Yo Pecador de corridito y hasta de hacerme elegir papa. –Ya, ya no exageres- dice Agnes en tono molesto. –Bueno al menos te prometo ser como todos los católicos. – ¿Te refieres como nosotros? No, ustedes son casi místicos, no me refiero a todos los demás católicos, a los de herencia y por costumbre, a la que nacieron en un hogar católico y no tuvieron el chance de escoger sino la religión de sus padres y que por consiguiente la recibieron de herencia y ya después acostumbrados a echarle a alguien la responsabilidad de sus actos se hicieron católicos por costumbre. …los gritos del español nos volvieron a la realidad, nos ordenaba que nos levantáramos para ir a misa, yo no sabía para que se iba a misa, no me importaba nada relacionado con la religión, 30 Esto sigue vigente y lo atestigua el hecho que al realizar mi investigación algunos de mis posibles informantes piden algo a cambio y ese algo es dinero. 31 Este estilo literario ya había sido utilizado por José Rubén Romero en su obra La vida inútil de Pito Pérez, en donde el personaje narra su vida a cambio de botellas de licor. 32 Las citas textuales que haga de esta obra contienen errores ortográficos, se respeta el estilo de Armando Ramírez que no hace correcciones de las mismas ya que la obra es considerada una especie de testamento del personaje Chin chin, por ello aparece una carta dirigida al editor para que también respete la forma en que fue escrita. era católico porque había nacido en un hogar católico, y porque algunas veces me lo indicaron más bien era católico por costumbre, por no parecer diferente a los demás, y a veces esto me traía problemas y reprimendas con mi suegro quien me preguntaba de repente ¿Qué fiesta se santifica ese día? –yo le decía el primer nombre que se me venía a la cabeza –san José- y el contestaba enojado- hoy es el día de san Juan o de san Ignacio- después me preguntaba que cual era el santo de mi devoción, también le decía el primero que se me venía a la cabeza, este lo había leído en un periódico, pero resultaba que ese ya no valía, o mejor dicho, como decía el español entre risotadas, ya me lo habían descontinuado…(p. 170) En un pasaje de la obra cuando Rogelio tiene que entregar un pedido de marihuana en el interior de la iglesia y antes de que llegue su comprador reflexiona sobre su catequesis, sobre ello refiere: Cuando llegue al cine, apenas si iba a mirar los cartelones, cuando se me acercaron tres jovencitos como de unos trece y quince años me compraron un cartón, leí la siguiente dirección y me sorprendió pues era la iglesia, ahí decía que fuera y me hincara y rezara ante la imagen de la virgen de la Macarena. Estaba hincado tratando de rezar algo, pero no sabía que rezar porque nunca había rezado, claro que era católico, pero no sabía ni persignarme, así que nomás estuve ahí hincado hasta esperar a que alguien me reconociera, lo que dudaba era en ponerme la gorra o no, pues en la iglesia está prohibido cubrirse la cabeza a los hombres, por fin con cierta vergüenza me la pongo la gorra ante el temor de que dirá la gente, me reprenderá? Cuando la misma Agnes33 le dice a la prima34 de Rogelio que debe de ir a misa se desarrolla un debate de tintes teológicos entre ellas. Anda ve a dejar lo que te mandaron a traer y pides permiso, dile a tu mamá, que vas a ir con Rogelio y nosotras a misa. –No gracias, no me gusta ir a misa. –Oye niña, no se trata de que si te gusta ir a misa o no, es tu obligación. –La tuya no la mía. -¿Qué no eres católica? –No, ¿para qué? –Como para qué, para que aprendas la palabra de Dios, para que aprendas a ser mejor, para que salves tu alma del infierno. –Para que aprender la palabra de Dios, si no nos va a dar de comer, ¿para que se mejores, si ser mejores, si ser bueno, es dejar que a uno lo traten de tonto?, ¿para qué? Salvar el alma si no existe, es el cuerpo quien sufre y siente las heridas en su carne escarnecida, mejor hay que salvar el cuerpo, matándolo para que descanse en paz, en la nada. -¿Entonces tu no crees en Dios? –No existe, si existiera como dicen y fuera en verdad perfecto hubiera un mundo balanceado y no lleno de altas y bajas, de buenos y malos, de pobres y ricos, de hambrientos y obesos de vanidad de dupont, onassis, 33 Estudiante universitaria, hija de españoles exiliados que llegaron al barrio de Tepito La prima de Rogelio es estudiante y esta directamente involucrada a los movimientos estudiantiles de finales de la década de los 60‘s 34 Rockefeller, getty y biafranos, negros en gettos, huicholes, watusis, tarahumaras, pigmeos, chinos, hindues y norteamericanos, si existiera, no existieran, soviéticos y yankis y chinos, ni imperialistas ni comunistas, ni nacionalistas, ni absolutistas, solo existirían los humanos. En el transcurso de la obra se narran diversas manifestaciones religiosas efectuadas por los habitantes del barrio de Tepito, una de ellas es una procesión que Rogelio narra de la siguiente manera: Me retiro del jardín, pienso en lo sucedido esta tarde, tengo un desasosiego, una procesión hace su peregrinación por las calles del barrio hacia la capilla entre cánticos, flores y personas con grandes escapularios de franela café, entre las personas está el papá de Michele, llevando en sus hombros junto con otras tres personas a una estatua de san Martín de Porres de madera, al paso de la procesión, las personas que están en la calle se santiguan pero, ¡extraño! Sus caras me parecen deformes, con muecas de dolor y llenas de angustia, parecen ratoncillos asustados, me cubro la cara con mis manos, ya no oigo. Los rezos ni cantos, abro los ojos, la calle está vacía, sola comienzo a caminar por la calle oscura, me alejo lleno de incertidumbre. P. 50 La obra presenta los cambios que la Iglesia católica platea en el Concilio Vaticano II y que son puntos de tensión entre la feligresía más tradicional y los jóvenes que experimentan y viven dichas reformas, el fragmento de la obra es el siguiente: Cuando llegamos a la iglesia, Agnes iba a entrar con la cabeza descubierta, pero su mamá que desde que la conocía apenas si había hablado la reprende: -¿Qué piensas entrar así a la iglesia? –si mamá, el papa ya dio permiso para que las mujeres entremos descubiertas de la cabeza. –Nada que, anda cúbrete la cabeza, ese papa piensa que puede destruir nuestras costumbres de más de mil años, con solo decir unas cuantas palabras, pues que se cree ese papa, ya hasta destituyó al santo de mi devoción. Renato Rosaldo (1991) en su obra Cultura y verdad menciona sobre el riesgo de que las descripciones rituales de nuestra sociedad sean consideradas no como un aporte a la antropología, sino como una parodia. Pone como ejemplo la descripción del ritual de lavarse los dientes de los nacirema (leído de atrás hacia delante es american), realizado con el rigor antropológico y que ante los ojos de los miembros de la sociedad termina siendo una parodia. Pues bien, en la obra Chin Chin el Teporocho Armando Ramírez realiza la descripción de los elementos que forman parte de la liturgia y del comportamiento de los feligreses dentro del espacio ritual. Esta descripción puede parecer una parodia o bien una falta de instrucción religiosa por parte de aquel que la describe, dicha descripción es la siguiente: Agnes de mala gana, resignada saca un velo de su bolsa con el cual cubre su cabeza, yo me siento raro, creo que no pisaba una iglesia desde que hice mi primera comunión y de eso hace más de doce año, ya ni me acuerdo de persignarme, ni de ninguna oración, trato de pasar el brazo por la cintura de Michele, quien me rechaza y me dice alarmada: -No, aquí no, híncate y persígnate. –No se. –No te da vergüenza, mira haz la señal de la cruz y sigue todos mis movimientos y repite mis palabras. Con los dedos de mi mano derecha hago la cruz y cruzo mi frente de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha, luego mi boca e igualmente mi pecho y luego me toca la frente de nuevo, los extremos de mi pecho y la parte de abajo, por último beso mis dedos en forma de cruz, un sacerdote joven oficia la misa, las notas musicales, salen de un órgano que esta en las alturas de la iglesia, donde en la cúpula mayor están pintados los evangelistas, escribiendo en diferentes formas, Michele me indica que me pare y yo sigo con mis observaciones al tiempo que me paro, hay muchísimas imágenes, tapizando los muros de la iglesia imagino que son diversos santos y pregunto a Michele. –¿Quién es aquella santa que pisa contra el mundo una víbora? – Siéntate- me indica antes de contestarme- es la virgen María. –Y la que está allá con Juan Diego. –La virgen de Guadalupe. -¿Y aquella otra que parece flotar en una nube? –La virgen de Fátima. -¿Cuál es la mamá de Cristo? –Todas. ¿Todas? –le contesto sorprendido. –Si, no ves que son la misma persona, híncate y cállate. Me hinco como me lo indicara Michele, pero me quedo confundido con la respuesta y de nuevo me vuelvo a sentar y a parar y a hincarme interminablemente, luego cuando, estaba hincado de nuevo, Michele me dice al oído –es la consagración.- poco después veo a varias personas acercarse al altar mayor, se hincan alrededor del sacerdote, el cual introduce en sus bocas una cosa circular y plana y blanquizca que es la hostia, están comulgando, al terminar el acto nos volvemos a hincar, por entre la gente viene un señor con un escapulario sobre sus hombros con sus imágenes en la espalda y el pecho, también en su cintura atado a un cordón blanco, con las puntas que le cuelgan a un lado, en la mano lleva una charola, que acerca a los feligreses, quienes depositan unas monedas sobre la misma, Michele me dice que prepare la limosna, de mi bolsillo, saco un peso de plata, el cual dejo caer en la charola, Michele hace lo mismo, Agnes su mamá, su papá todos dan limosna y me hago una pregunta cuando me vuelvo a hincar para recibir la bendición del sacerdote ¿para quién será tantísimo dinero? (p.105-106) Finalmente, en la obra referida Armando Ramírez plasma el ingenio que tienen los actores para violar las promesas a lo sagrado y que tienen como fin corregir las conductas personales, ello también hablara de una rotación de santos que permiten lo que otro condena y el temor al castigo de Dios. Si derecho, aunque te caiga de variedad, ya fui a jurar, un año. -¡y a poco te piensas aguantar un año sin tomar. –Pues haber, si no quiebro, pero no mejor le voy a pedir permisito al padrecito, para tomar el quince de septiembre, o si no me voy a Tlalnepantla por fueras del distrito para tomar, al fin aquí jure y no en el estado. –pero si quebrantas tu juramento. –no le hagas, si de por si me va del cocol, imagina ahora que rompiera, me iría de la jodida con el castigo de diosito. (p. 110-111) En su novela Tepito (1983) Armando Ramírez presenta la historia del barrio a través de personajes que contienen elementos que los ajenos identifican en los habitantes del barrio de Tepito, dichos elementos formaran parte de la identidad del tepiteño. Sobre los aspectos que tengan que ver con la religiosidad en el barrio de Tepito, así como los diversos centros de culto se mencionan en el siguiente pasaje: Pueblo religioso es, también, pueblo despolarizado; de todo hay en esta viña. Los católicos tienen su templo de Santa Ana, el del Carmen, el del Espíritu Santo, la iglesia de San Francisco de Asís, de San Sebastián. Hay una sola iglesia Cristiana Metodista, la protestante del Divino Redentor y el Templo Presbiteriano. Hay una Iglesia Espiritista y la iglesia de la creencia cristiana especial del Padre Alcalá. En su personaje el kid, narra las promesas y las mandas a la Virgen de Guadalupe que realizaba el personaje y su madre para que saliera victorioso en cada combate, pero la ayuda divina nunca llegó. Cuando narra los preparativos de los quince años hace mención del servicio que los habitantes solicitan a la iglesia, así también el ir a dar gracias a la iglesia de Santo Domingo por poder llevar a salvo a su hija porque la juventud de ahora vive descarriada y desorientada. Con respecto a la asistencia a misa y la conducta de la feligresía para con el sacerdote Armando Ramírez refiere que la gente grande acude a la misa de las ocho de la mañana o de doce; aunque menciona que a esa gente grande ya no le gusta estar casi enfrente del padre, se ponen hasta atrás y nada más esperan a que les den la hojita del evangelio, dar su limosna, toman su bendición y salen de la iglesia San Francisco de Asís Tepito. En el cuento Ya se perdió el oficio de ratero, Ramírez narra las creencias que tiene la gente del barrio cuando están presos y los rituales que deben de realizar a fuerzas más poderosas para salir de la cárcel, sobre ella refiere: También se acordó de las prácticas de brujería: los rateros viejos que ya tienen callo, maña o experiencia en estos menesteres, imploran las fuerzas maléficas para salir de chirona, una de estás, cuenta don Regino, es pintar un diablo con tridente y cola, todo de rojo feroz, ya que está terminado de pintar, los presos hacen cola y comienzan a escupirle y pegarle, así dicen que incitan al diablo para que ayuden a que caigan otros a la cárcel, con lo cual, los que están adentro podrán salir. El viejo Regino cree que fue coincidencia pero el hecho es que él escupió al diablo. El policía de guardia gritó su nombre: Regino López, a la reja con todo y chivas, se va a chingar a su madre a otra parte. En su novela Quinceañera (1987) Armando Ramírez narra las peripecias de Alejo, un adolescente que pretende a Cecilia que esta por cumplir quince años. Esta novela también esta cargada de diversas manifestaciones de los personajes para con lo sagrado, como es el hecho de que los personajes antes de iniciar sus actividades se signan ante la virgen de Guadalupe a la cual siempre le tiene una veladora prendida. Menciona la existencia de los altares erigidos a la virgen de Guadalupe en el espacio público que es el patio y como las vecindades que tienen integrantes con mayor capacidad económica la adornan con series de luces traídas de los Estados Unidos, con floreros de latón a sus lados y flores frescas siempre; mientras que en las vecindades con integrantes de menores recursos económicos los altares son más austeros. En su novela ¡Pantaletas! Confesiones sentimentales del estudiante Maciosare: ¡El último de los mohicanos!, (2001) Armando Ramírez narra la historia de Bartolache, un personaje que desde su niñez fue educado bajo el amparo de la Virgen de Guadalupe y Benito Juárez. De hecho, la familia entera gira en torno a la Virgen de Guadalupe a la cual constantemente se le ofrece el producto del esfuerzo cotidiano, así como las obras a largo plazo como es el hecho de la manda que tienen que pagar yendo de rodillas desde el atrio al altar mayor de la Basílica de Guadalupe por haber concluido los estudios de licenciatura. Mi carnal regresó a la escuela por periodos monacales, sin terminar la primaria. Pero mi jefa a pesar de ese traspié dio gracias a la Guadalupana porque aunque fuera uno de sus escuincles le hubiera salido bueno para los estudios, ella, la neta, sentía que la virgencita le hablaba al oído. (p. 22) Después de ver las broncas de mi hermano, le prometí a la Guadalupana no embarcarme antes de tiempo, es decir, antes de que obtuviera mi título profesional. A ese titulo lo veía como una tilma llena de rosas. (p. 46) No cabía duda, al no doblarnos ante la adversidad nos superábamos. En ese instante nuestra máxima motivación existencial era tener un changarro a todas margaritas. Fue cuando tuve una idea genial. Era como si me hubiera llegado el aroma de las rosas del Tepeyac. (p. 71) Cuando le entregué el título a mi jefecita, exclamó iluminada: -Por fin, hijito. Por fin…dar gracias a santa Epistemología, ay no, no, hijo, nosotros firmes con la Virgencita de Guadalupe…¡Gracias madre de Dios! Ya comenzaba a elevarse de nuevo mi jefecita cuando la jalé de la bastilla de su vestido y la aterricé: -¡No vamos a ir de rodillas…! Cuando escuchó mi retobo sus ojos, como dos cántaros, se vaciaban. Y ni pedo…Ahí estábamos, ante la morenita del Tepeyac, ella, la Virgencita con sus manos juntitas, parecía decirme: -Vientos huracanados, Maciosare, cumpliste como los buenos- casi casi me sentía como Juan Diego. –Si Virgencita. No fallé a mi jefecita, por eso te vengo a dar las gracias..-con fervor atávico recogí mi barbilla sobre mi pecho y sentí el aroma de las rosas del Tepeyac, era como si me las estuviera ofreciendo mi lupita, la Guadalupana. (p. 98) Se debe destacar el hecho de que algunos personajes de la historia nacional como es el caso de Benito Juárez, es elevado por la familia Bartolache al grado de santo y su función no es el conceder milagros, sino a través de su biografía (que seria su hagiografía) sirva de ejemplo a seguir por parte de los hijos. Si bien la virgen de Guadalupe es el eje de la familia Bartoleche, también se recurre a otras entidades sagradas alternativas cuando la petición reviste un mayor esfuerzo de lo sagrado. Esta otro elemento sagrado es San Judas Tadeo y recurren a él cuando se tiene que pedir trabajo y como este es negado, se culpa a San Judas Tadeo dejando a salvaguardo la virgen de Guadalupe. Ve, hijo, quien quita y rogándole a la Virgencita de Guadalupe y encendiéndole una veladora a san Judas Tadeo, se nos haga. Fue una promesa guadalupana. Y cumplí. Fui al Banco de México a pedir trabajo de sociólogo. (p. 102) Ay mi hijito, ¿no se apagaría la vela de san Juditas?- ahí estaba mi madre todavía con su fe intacta. (p. 103) Esta novela presenta una escena en que la madre se flagela pidiendo a la virgen de Guadalupe el perdón por haberle dicho y hacerle creer a su hijo que el estudio le iba a cambiar la vida y le permitiría dejar el barrio. En la penumbra, una llamita resplandecía. Era una veladora depositada en la repisa de la Virgen de Guadalupe. Escuché gemidos de dolor. Me espanté. Aguce el oído, la violencia surcaba el aire. Tuve miedo. Vino a mis ojos el ruido de una correa chocando contra la piel. El dolor corrió mi cuerpo de los pies a la cabeza, sudé. Mi madre, con la espalda descubierta, hincada, se daba cinturonazos, flotaba unos centímetros sobre el suelo, como un péndulo se balanceaba; se soltaba tres cinturonazos en su espalda y rezaba; y de nuevo el balanceo y los cinturonazos y la rezada: -Acúsome, madre de Dios, Virgencita de Guadalupe, de haber sido una mala madre. Acúsome madre mía de haberle hecho mucho daño a mi hijo. Señora mía. Al terminar la recriminación se daba otros cinturonazos. Sus cabellos cortos, rayitos de luna, se erizaban; su espalda enrojecida era iluminada por una tenue y pálida luz. Vi, con claridad cómo su piel era tierra surcada por rayas gruesas, ensangrentadas. –Señora mía que estás en los cielos, acúsome de haber obligado a mi hijo a estudiar. De engañarlo diciéndole que iba a tener una mejor vida. (p. 127) En la misma novela aporta el dato de cómo los católicos llaman a los que profesan el protestantismo en el barrio de Tepito, les llaman atalayas, porque para la gente todo lo que no es católico es atalaya. Así también hace referencia a las recomendaciones de acudir a una limpia para que se salga el diablo que en este caso hace la maestra del hijo de Maciosare que no sigue las reglas institucionales y tiene como ejemplo a seguir a los narcotraficantes. Finalmente, Maciosare tiene como pareja a una mujer que llama Atalayita, que es protestante y que ello no le impide establecer su relación porque las creencias están bien arraigadas y la comunicación con ella es frontal, por ello dice que nunca renunciara a la virgen de Guadalupe, a este tipo de unión entre dos sistemas de creencias que históricamente son incompatibles él le llama Cristiano Plural. Ella es muy estudiosa de la Biblia y me ha ayudado a encontrar a Cristo. Nuestro único punto de conflicto es que ella quiere que no crea en la Guadalupana, pero eso ya se lo he dicho de frente: va a estar cabrón. Concedo, puedo creer en Cristo pero no sólo en él; me hace falta La Lupita, la jefa, la que hace fuerte. Ella y Don Benito Juárez son la luz que le inculcaré a nuestro hijo. Por eso amo a la Atalayita, me respeta y me deja ser, es cristiana pero no se impone. Además es muy buena para vender por Internet. Por eso doy gracias al Señor y a la Virgencita de Guadalupe, ya que soy cristiano plural como la Atalayita. La verdad, mi jefecita me pudo fallar con el estudio, más no en lo que me inculcó: mi amor atávico por la Guadalupana. Ahora me siento como Juan Diego abriendo nuevas rutas para la raza de bronce. Un camino de rosas y cardos nos espera en el tercer milenio, pero Dios mediante con la mística del Carruaje Juariano la haremos. (p. 153-155) En su novela La Tepiteada (2007) Armando Ramírez sigue manejando el vínculo que existe entre lo sagrado –y su consumo- en varios grupos que confluyen en el Centro Histórico que siempre esta en una constante disputa por diversos grupos vandálicos. Por ejemplo, el Diablo (personaje central) narra la leyenda del Cristo del Veneno que esta en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México, así también describe la vestimenta de otros personajes de la novela poniendo énfasis en los objetos religiosos que portan, ya sea un tatuaje o una medalla principalmente de la virgen de Guadalupe. La descripción del Centro Histórico la realiza señalando los diversos altares erigidos principalmente a la virgen de Guadalupe y san Judas Tadeo. De las novelas de Armando Ramírez que he dado lectura para realizar este apartado y las contribuciones a la etnografía del barrio de Tepito, es la primera que sentencia la existencia de la Santa Muerte y reconoce la paternidad del barrio como generador del culto y protectora –en este caso- del grupo que se ha de enfrentar en una guerra a las huestes de Saturno. Sobre la presencia de la Santa Muerte refiere: En la intensidad de la noche… Sobre la línea del horizonte, como estuvieran trepando la montaña, aparecen las potentes luces de las naves con las velas arriadas, avanzan a toda velocidad, el ronroneo intenso de sus motores los delata en el paraje silencioso, como aztecas ante la piedra del sol, así los Xochimilcas se saben arrojados, van como si en ello les fuera la vida, en un viejo camión transportador de frutas y verduras, pintado de rojo y amarillo, trompa larga y grande, la caja de carga es enorme: los jóvenes de San Juan Ixtayopan van al frente, parados, en sus ojos está la decisión de no abrirse, jugarse lo único que tienen, una vida muy jodida, usan gorras piratas de marcas famosas, lentes para el sol hechos en China, imitación de los lentes que usan los artistas de cine: ellos, los carnales, son de brazos correosos y rostros afilados, sonríen lo necesario y arrugan la nariz a la menor provocación, atrás, sin la marcialidad de los de Ixtayopan, van los jóvenes de Mixquic, echan desmadre, gozan el trayecto, ríen a carcajadas y se pegan en la cabeza al menor descuido, algunos bromean con una máscara de hule, semejante a una calaca, la mayoría lleva camisetas blancas sin mangas, y en el hombro izquierdo tienen un tatuaje: un esqueleto de la huesuda, de la flaca, la dientuda, la muerte de Mixquic, a veces se cuelgan de los tubos para llevar volando el cuerpo y luego con gran esfuerzo regresar al interior de la caja del camión, o se avientan y caen al piso, pero se levantan de inmediato y echan a correr para alcanzar la nave y como corsarios trepan de nuevo; la mayoría de los jóvenes de Chalco montan sus bicicletas con maestría, puede formar un escuadrón e irse en fila en las bajadas: llevan pantalones amplios casi como banderolas, botas de gruesas suelas, muy chatos, visten playeras o sudaderas deportivas de los equipos de fútbol americano, como de los 49‘s, o de los Delfines, o de los Cowboys, los Jefes, sus cortes de pelo son como mechones arremolinados y puntas disparejas, los cabellos los llevan teñidos de diferentes rubios, pelirrojos o tonos azules y verdes, cantan a la Señora del Más Allá, son sus fieles devotos, adoradores de la Santa…la famosa Santa…, la de Tepis, la que todo lo brinda, ante la que se postran los más cabrones, ella es la Señora del Más Allá, en donde de algún modo se existe, la que les enseña que aquí se viene sólo a sufrir; y ellos lo entienden, van a su encuentro, recortados en la bóveda gris; a lo lejos logran ver cómo la Nave Madre se enfila por inmenso mar, de largas rayas asfálticas como ríos procelosos cruzan el altiplano de la república… (p. 165-166) 2. 2. 2 El vínculo con lo sagrado y las diversas manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito contadas por Julián Ceballos Casco. En el apartado que tenía que ver con la producción académica sobre el barrio de Tepito hice referencia a uno de los autores más importantes: Héctor S. Rosales Ayala. Pues bien, en su obra Casco ¡Vibrencias en un barrio popular y la neta del Arte Aca! (1989) realiza una serie de entrevistas al pintor Julián Ceballos Casco que a la postre será presentado como un libro que describe al barrio de Tepito a través de la vida y obra de este pintor y en donde el elemento religioso será la columna vertebral de este pintor de guadalupanas y exvotos, maestro restaurador, y cultivador incasable de la historia oral. Los sacerdotes y la institución religiosa católica jugaban un papel fundamental en la vida de los habitante en el barrio de Tepito que le toco vivir en su niñez a Casco. Sobre el papel del sacerdote, la iglesia y las fiestas litúrgicas Casco se refiere de la siguiente manera: Me acuerdo del padre Rafael, un viejo españolote, me imagino que ha de ver sido madrileño, alto, así, corpulento, peludo, parecía abarrotero, mano, muy blanco él, de pelo muy negro, con un lunarzote, su sotana negra. Entonces este cuate fue el que empezó a mover Santiago de nuevo y eran unas fiestas, maestro, ¡pero increíbles! Se sabía ganar a la chavalada, nos aventaba bolo de canicas, incluso y sentía que mi tirito era una canica verde ágata, mano, me acuerdo re´ bien, me podía yo quedar sin todas menos sine esa, porque era la bendita ¿no?, era la que me había regalado el padre. Yo creo que sí se reflejan en mi pintura esos boletos. Recuerdo en una Semana Santa, una fiesta súper maratónica, así con el rollo de la Pasión, con pura gente de la localidad. Algo que me impacto mucho fue un baile donde salían el diablo, la calavera y el ángel, pero en la onda así…!colonial!, ¡lo sentías!. Las Semanas Santas eran fabulosas, por eso, tal vez, porque era medio pagano el asunto, era festivo. Pero había más profundidad en el concepto que ahora, ¿no? Eran más los días de guardar. Los que estaban en ese rollo sí se ocupaban de cuestionarse un poco durante ese tiempo, como que había cierto recogimiento. (p. 34) Julián Ceballos Casco se declara abiertamente guadalupano y en una entrevista externa a Héctor Rosales Ayala la importancia que tiene tanto para su vida, para los habitantes del barrio de Tepito e incluso la importancia que tiene para el pueblo de México; sobre ello expresa: La Guadalupana A mí desde siempre me ha gustado la Guadalupana como pintura, como imagen, y por toda esa carga histórica que tiene, es el gran mito que nos une de alguna manera. Me fascinaba la antigua Basílica, los altares, siempre me ha atraído ese barroquismo, el olor a incienso a mí me encantaba, el murmullo de los rezos, que ahora ya podría relacionar con Comala y Pedro Páramo; el cerro y las cuevitas que había, las leyendas y el museo maravilloso de la Villa. Es tal vez algo de lo que me hizo pintar, dentro de muchas otras cosas. Era precioso ver aquellos trabajos de monjas, recuerdo uno hecho de algodoncitos, telitas y cositas encima, era la Villa misma, todo eso era encantador y los exvotos y la leyenda de que le pusieron un cartucho de dinamita a la Virgen y que el cirio se dobló antes, y los ladrones de corazones dorados de los milagros y todo ese rollo ¿no? Consejas, chismes, leyendas. Para nosotros ir a la Villa sí era cotidiano. Ya sabes, las ―mandas‖, el ir descalzo, de rodillas nunca me aventé el tiro, descalzo sí, por la cuestión de mi madre. La Guadalupana nos da un quid de identidad, nos aglutina de alguna manera ¿no?, en ese transmite cultural sigue siendo la gran madre, ¿no? Mi interés por la Guadalupana no sé si sea un homenaje, pero sí es la búsqueda, de algo ¿no? En realidad no sabes qué es pero la estás buscando, y como que estoy identificado completamente con este boleto, y lo que tiene que ver con Tepito ¿no? Mucha gente quizá se me haya echado encima: ¡fanático! Te digo ¿no?, me interesa no tanto por la cuestión religiosa sino por la importancia que tiene en el trasmite cultural. En el barrio toda la gente quiere su Guadalupana para el zaguán y ¿no? Y la gente me da ese ―look‖ como pintor de Guadalupanas y además les encantan y las aman. De alguna manera estoy respondiendo, me piden lo que necesitan y lo que les doy les gusta. La Virgen de Guadalupe es eso ¿si?, es la superpadre, es aquella que te va a proteger, te va a hacer el paro ¿no? Yo tuve un problema en 1972, me fui hasta ―home‖. Estuve en la procu, incluso yo tengo una deuda allí, qué bueno que lo recordé. Me di cuenta allí de la importancia que tiene para la gente. En cada una de las celdas o los separos hay una Guadalupana, donde los prisioneros, con migajón, con el papel de estaño de los cigarrillos, le van haciendo unos altares reducidos ¿no?, y le hacen unas copitas, y cuando llega el ―barco‖, así le llaman cuando les llevan de comer, sus esposas logran pasar unas florecitas y se hace una cooperacha para darle al llavero y que se consiga una veladora. La Virgen allí es importantísima porque les da, en la fe que desarrollan, un paliativo para aguantar la chinga ¿no?, la chinga del encierro y del –―¿qué va a pasar conmigo?‖-. Incluso yo me llegué a cuestionar fuertísimo a ese nivel ¿no? Me sentí en el peor desamparo de mi yoidad ¿no? , dije: ―-¿Qué transa conmigo, pinche Casco, tú no tienes este paliativo, tú ya no tienes este recurso de fe, la bronca es solo para ti, y tú y los próximos a ti son los que te van a chispar de este pedo, si es que la chispa y si no te tendrás que sumir allá dentro ¿no?, porque no tienes esa fe, aunque pintes unas Guadalupanas bien a toda madre, bien bonitas o bien feas regulares, cuestionantes o no, pero tú no tienes ese rollo de fe o ese dogma, entonces esta bronca te la vas a chingar tú solo-¿‖, ¿si? Y ves que hasta los más curtidos, cabrón, se persignaban diciendo: ―-Madrecita, hazme un paro, ablándale el corazón al pinche juez o a la parte acusadora, por favor, chingá te prometo que voy de lengua hasta allá…-―. Y lo hacen porque traicionar a la Guadalupana yo creo que es peor que traicionar a la mamá ¿no? Porqué estás hiriendo a la Madre Cósmica, a la chingonsísima de toda chingonería, ¿si? Entonces, yo siento que tiene una importancia espantosa para toda esta gente ¿verdad? Además de la importancia histórica que uno le da y todo ese rollo ¿no? Este culto forma parte de la vida cotidiana. Tú sales orita a cambiar y te persignas allí en esa Virgen que ya fue bendecida. La que pinté allá en Florida, enfrente de la Delegación, allí estaba la incongruencia, la ponían en un predicamento del carajo a la pobre morenaza. Pasaban los malos y se persignaban para que les pusiera la buena, pasaban los buenos y también se persignaban para que Dios los ayudara ¿no? O sea, pasaban los agentes, los policías, los comerciantes, los rateros y se persignaban ¿no? Incluso la señora Lupe llegó a ponerle un milagro y el mismo hijo de ella fue quién se lo chingó ¿no? Y nunca le faltaron sus flores mientras estuvo y todo ese rollo ¿no? Mi interés por la Guadalupana es muy personal y medio barrial, como diría Virgilio Carrillo: ―-Entonces ¿qué onda con el barrio, lo barrial?-―. Es un interés personal, particular ¿verdad? Las cosas que se, no es tanto por irlas investigando, sino por irlas descubriendo. La Guadalupana tiene una competidora fuertísima que es la de San Juan de los Lagos, ¿no? Incluso aquí en Tepito mucha de la gente se va a las peregrinaciones y se las avientan a pincel hasta allá. Incluso yo les decoré la carita de una, de la esquina cañón, ―Tenochtitlán y Peñón‖, del señor Luciano Palomares, un amigo mío les hizo talla en madera, y yo le pinté la carita y las manos, y ha salido muy afortunada, muy buena la virgencita esta, agarra muchas limosnas. Esto tiene que ver mucho con nuestra cultura, todavía no nos desafanamos como los sajones, todavía es la madre ¿no? Porque es de quien recibimos el primer refine, el primer calorcito, la primera seguridad, el talcazo, el aceitazo, la comida de las uñas (porque con las tijeras corres el riesgo de llevarte un dedo) y etcétera ¿no? ¿Quién te hace el paro? Pues la madre, el padre es una abstracción un poco como en un cuentito de Joyce, creo: ―Del por qué de mi complejo de Edipo‖, ¿no? Al padre no se le reconoce hasta que tienes cierta edad, maestro. La madre es el todo, los padres somos más egoístas, más ajenos: ―A‘i esta la lana, yo salgo a chingarle y tú te avientas la bronca-―, ¿si?- Tú los tienes que llevar a la escuela, los tienes que cambiar, les tienes que dar de comer, los tienes que procurar si se enferman-―… Toda esa onda mamerta que por fortuna está cambiando ya un poco ¿no?, porque además las circunstancias, la modernidad y la chingada van haciendo que sea así, la lana no alcanza, entonces hay que chingarle los dos y vamos a dividirnos las broncas: ―-Ahora te toca darle el biberón a ti, maestro, ahora te levantas tú, ¿por qué siempre yo?-―, y etcétera, ¿no? Pero de alguna manera siempre priva el rollo este del matriarcado. Entonces por allí puede estar la explicación tanto de la Guadalupana como a estas advocaciones marianas de alrededor de Tepito, siempre es la advocación mariana, la madre ¿no? Por eso yo creo que nos duelen las mentadas de madre ¿no? Por eso, ¡en la madre!, ¿no? Además la Guadalupana también tiene que ver con la identidad, te decía yo. Si revisamos la Historia Universal, si revisamos lo que sucedió con México y su ―conquista‖, es una cuestión muy aparte ¿no?, muy diferente de lo que pasó con los chinos, los japoneses y los egipcios. Ellos siguen hablando su mismo idioma, claro, con las connotaciones de la modernidad, pero el chino sigue hablando chino, el japonés sigue hablando japonés, sigue vistiéndose igual, auque sea para sus ceremonias y tal ¿no?, los egipcios siguen teniendo ese concepto de historicidad sin interrupción ¿no?, allí tienes el Ayatolla, todavía está removiendo a Mahoma y sus profetas ¿no? Y nosotros, trasminadamente, seguimos adorando a Tonantzin… (p. 60- 67) Considerando que la búsqueda de material que vislumbrara la religiosidad en el barrio de Tepito fue amplia, me permite afirmar que no existe mejor ejemplo de la religiosidad del barrio de Tepito y la centralidad de la virgen de Guadalupe en el pensamiento de Julián Ceballos Casco. En su narración podemos apreciar la apropiación no sólo de él, sino de barrio de Tepito e incluso de una cuestión de identidad nacional de la virgen de Guadalupe, la reinterpretación que hace de ella considerando el mito de Tonatzin y otras deidades mexicas. Las fiestas que se realizan en torno a ella, su rivalidad –en el aspecto de feligreses- con la virgen de San Juan de los Lagos, el pago de mandas por los favores recibidos, el sentido que otorga en situaciones difíciles como es el hecho de estar preso y pedir su libertad o que ablande el corazón del juez; así también sentencia la centralidad que tiene la virgen de Guadalupe en los reclusorios y los altares y las festividades que realizan los internos en torno a la guadalupana. Finalmente, Casco comparte con el lector su visión particular sobre el barrio de Tepito y el papel que juega en su creación plástica que fue su aporte al movimiento Arte Acá, sobre ello refiere: El Arte Acá me permitió darme cuenta de que llevaba mi Tepito adentro y me dio la oportunidad de reconocer toda una serie de valores que estaban en mi, en mi familia y en el barrio. Nadie inventa el barrio, el barrio nos inventa a nosotros, el barrio es una identidad en él mismo que nos infiere, nos engendra y nos pare, nos procrea y juega al caracol, es auto generable, es hembra y macho. Nosotros somos producto, ya después, torpes o inteligentes o acuciosamente lo decimos, lo balbuceamos. 2. 2. 3 El vínculo con lo sagrado y las diversas manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito a través del taller literario de Eduardo Vásquez Eduardo Vásquez (2003) compila una serie de trabajos literarios elaborados por habitantes del barrio de Tepito y los presenta en el libro El lado oscuro de tepito…su cultura, se trata de dos tomos del cual solo poseo el 2º ya que el primero se convirtió en búsqueda incesante pero infructuosa. Sobre el objetivo que pretenden con la publicación de sus trabajos y los aspectos del barrio de Tepito que han privilegiado el autor refiere: El Lado Oscuro de Tepito…su Cultura. T. II, libro hecho a todo pulmón, que muestra gran variedad de temas y manejos del lenguaje. Este último es manipulado muy acá, a la manera tepiteña, que no respeta cánones. A sus productores interesa expresar sus vivencias y necesidades, hay cierto gozo por escribir y describir su entorno social y espiritual. Textos híbridos que dirán entre la literatura y el documento. Dentro de la tradición literaria esta narrativa se afilia a los antihéroes, desventuras y entorno material de la picaresca; pero a diferencia de ésta, los relatos son ―contados‖ por los protagonistas o testigos reales, concretos, a partir de una intención literaria. En algunos textos se encuentran referencias concretas: calles, hoteles, antros de mala muerte, cines, pulquerías, vecindades, etcétera, que nos indican que se habla de este lugar y no de otro. Sin embargo, los personajes y situaciones que se plasman son válidos para el reconocimiento de cualquier otro barrio popular. Los autores se identifican con su tronco común: el barrio. Éste los cobija bajo su historia, sus leyendas y sus mitos; permitiéndoles desarrollar un sentido de pertenencia, seguridad emocional e identidad. Su trabajo refuerza la memoria histórica individual y de barrio, sobre todo a las posibilidades de la creación verbal (aunque no debemos olvidar que hay otras expresiones artísticas como pintura, fotografía, video, etcétera, propios de este lugar). Es una fuente de identidad, creación y trinchera de resistencia cultural que se opone a la masificación. (p. 11-13) Con respecto a la religiosidad del barrio de Tepito expresada en la narrativa de los diversos autores que comprende el libro El lado oscuro de tepito…su cultura sobresalen los siguientes: Alejandro Bay (2003) en su narración que tiene por titulo el barrio, menciona que el barrio tiene sabor santero, además de: Sus vírgenes en cada esquina, sus flores, sus costumbres, sus altares de colores, sus santos, sus atardeceres de diciembre fríos y llenos de gente, sus Hijos de Sánchez y su Casa Blanca, con su gente siempre dispuesta a morir amparada con su Santa Muerte, o con su Cristo sonriente, Él debió haber nacido ahí, donde lo veneran desde el hojalatero hasta el asesino, ricos y pobres, cultos e ignorantes. De todo hay en mi barrio, incluso escritores. (p. 72-73) El mismo Eduardo Vásquez en su narración que lleva por título Mi oscuro barrio oscuro, habla de la existencia de los altares a la virgen de Guadalupe en las vecindades y la importancia de este espacio como integrador de los que ahí habitan. Aquel patio aún conservaba la tradición de ser el ombligo social; ahí se festejan los cumpleaños, los bautizos, las bodas y el doce de diciembre a nuestra Señora de Guadalupe. Lugar de esparcimiento y alegría pero también de odios e infidelidades, pequeños territorios donde sus integrantes tejen y destejen penélopescamente sus pasiones. Ombligo pasional donde coinciden alianzas y traiciones, rebeliones domésticas y soluciones fingidas. Sitio donde se convocan verdades, mentiras a medias, calumnias y chismes pero también a la intimidad, al encuentro humano y sobre todo al amor. (p. 80) El Dedo Vengador35(2003) en su narración que lleva por título Noticias Tepiteñas 1, presenta la historia de un comerciante que ha progresado dentro del barrio de Tepito vendiendo productos apócrifos y que por dicha actividad es extorsionado por las autoridades judiciales que exigen el pago de una cuota para continuar con su actividad. Llega el momento en que decide no dar más esa cuota lo que genera que los judiciales secuestren a su esposa llegando 35 No se sabe el nombre del autor que firma con el seudónimo El Dedo Vengador, en la parte final del libro El lado oscuro de Tepito…su cultura tomo II se ofrece una pequeña semblanza de los escritores que participaron en el proyecto pero omiten decir el nombre del autor. incluso a violarla, todo ello tiene como fin que el comerciante entregue lo que tiene y que continúe pagando las cuotas, además que con esta acción mandan un mensaje a los otros comerciantes que con ellos no se juega y que si no entregan las cuotas también pueden sufrir lo mismo. ¿A quién acude este comerciante si la misma autoridad es la corrupta? El Dedo Vengador plasma en su narración la comunicación que establece el comerciante con la virgen de Guadalupe, resalta la promesa por el milagro que pide se cumpla. Él, aún pálido y tembloroso, se dirigió al altar de la Guadalupana en el zaguán de su vecindad, se persigno y alzó su mirada húmeda, cristalina: madrecita mía, no permitas que estos hojaldras me rompan la madre; ilumíname, dime pa‘ dónde jalar. Recuerda que yo siempre te pongo tus flores y te hago fiesta el doce, ya sé que a veces se me pasan los tragos en tu día, pero es de puro gusto; de ahora en adelante te juro que cada año traigo al sacerdote a que te diga la misa y hasta mariachis; no te estoy echando en cara nada, tú sabes por qué suceden las cosa; ilumíname, madrecita; no permitas, no permitas que me rompan la madre; tú sabes que he trabajado como pinche negro para darle lo mejor a mi familia; cuida a mi vieja, protégela con tu santo manto; a mi no me abandones, sé que soy un cabrón pero no soy malo. Se alejó hacia su vivienda aún musitando entre lágrimas: no soy malo, no merezco esto que me está sucediendo. (p. 123-124) Angie Jiménez Novoa (2003) en su narración que lleva por título Sobrevivir la Lagunilla, presenta la forma en que se celebra la misa conmemorativa por la muerte de Jonathan Michael, ―Mycol‖ a celebrarse en la parroquia de Santa Ana36, además de que los altares en la vía pública cumplen con la función de anunciar este tipo de ceremonias o los asuntos relacionados con las peregrinaciones a los santuarios. Esta narración ofrece elementos que forman parte del culto a San Judas Tadeo y la función que cumple para los devotos, además de sentenciar el hecho de que fuera de los lugares sagrados el comercio es diverso y no cede su ritmo 37 36 Esta parroquia se encuentra en la esquina de las calles Matamoros y Peralvillo. La descripción del espacio así como una semblanza de su historia la he de presentar en la etnografía de mi investigación. 37 En la etnografía también he de presentar el tipo de comercio que se presenta en las tres parroquias del barrio de Tepito: San Francisco de Asís Tepito, Nuestra Señora de la Concepción y Santa Ana. Un lugar sacrosanto, pacificado por las imágenes del Sagrado Corazón y de San Judas, donde se podía dar un respiro de descanso o alivio, sin el temor de percibir el tufo de un baño público, o de los cientos de humores del tianguis de la Lagunilla. San Judas parecía inclinarse cada vez más por el peso de los muchos escapularios salvaguardadotes que ya le habían desaparecido el cuello. En Tepito nunca está de más andar protegido, y aún con eso el arriesgue del pellejo es inminente: las riñas entre pandillas, el pasón, el encuentro inesperado con un judas incomprensivo. El ―ajuste de cuentas‖ de siempre pudo haber sido la causa de que ese domingo se celebrara una oración en memoria de Maycol. En el techo del recinto volaban con gracilidad varios querubines recientemente dotados de una sorprendente belleza humana, con aerosol difuminado. Al desembocar por esa puerta angélica se llegaba justo a un puesto de fetiches sexuales: penes de goma color carne o traslúcidos, bicéfalos, diamantados, de cúpula mongoloide, rasca-huele, gigantescos, chaparritos, con texturas puntiagudas, inflables, enchuecados e intercambiables, deformes con un segundo miembro diametralmente más pequeño; diseñado para llenar vacíos mas estrechos pero no menos excitables. (p. 131-132) Rafael López Castillo (2003) en su narración que lleva por título Peregrinos del perdón, presenta las vicisitudes de Martín el ―Garoto‖ y su tío Dimas después de treinta días de caminata al santuario de la virgen de San Juan de los Lagos que realizan anualmente los habitantes del barrio de Tepito. En esta narración el autor ofrece al lector la fecha tentativa del origen de la peregrinación, quiénes las realizan y los motivos por los cuales los habitantes realizan la travesía Allá por los años veinte, en que se comenzaron a realizar, la costumbre se hizo tan necesaria que dura todavía hasta nuestros días. Y son muchos los que van en ella; desde personas de mucha religiosidad, pasando por los que van a pagar mandas y hasta los que buscan en los sufrimientos de las difíciles jornadas la expiación de culpas y remordimientos. (p. 109) Martín el ―Garoto‖ tiene fiebre y es auxiliado por su tío Dimas, entre la fiebre, Martín tiene una especie de revelación y exclama la siguiente oración: Por tu misericordia y por la gloria de tu nombre me libraste de aquellos que estaban listos para tragarme. Me rescataste de las manos que querían quitarme la vida y de todas las calamidades por las que he pasado. Me salvaste de las llamas que me rodearon y cruzando en medio del fuego no me quemé. Me pusiste a salvo de las fuerzas oscuras de la muerte, me pusiste lejos de los falsos testimonios de los labios mentirosos y de las flechas de los calumniadores. Mi alma llegó al borde de la muerte. Mi vida estuvo a punto de caer al infierno. Me rodearon por todas partes y no había quien me prestara socorro, miraba buscando algún salvador pero no había nadie. Entonces me acordé de tu misericordia y de tus obras en el pasado y de cómo salvas Señor, a los que en Ti esperan y los libras de sus enemigos. (p. 110) Después de terminar la oración se incorpora como si nada hubiera pasado saltando de un lugar a otro como un atleta que se esta entrenando, por ello provoca el asombro y el temor de su tío Dimas que acaba de ser testigo de algo que no alcanza a explicar. El autor también ofrece un dato para aquellos que nos interesa el fenómeno religioso en el barrio de Tepito, pues nos habla de una cofradía de sanjuaneros de Tepito, en donde, Don Poncho es una de los veteranos de la misma. En esa caminata que dura más de un mes, existe un punto que todo sanjuanero teme y que para salir del mismo se debe de estar preparado o podrá perderse para siempre; ese punto es el Paso de las Ánimas que Don Pancho explica a Martín el ―Garoto‖ y su tío Dimas: Al ratito pasaremos por el Paso de las Ánimas y hay que ir bien al tiro, si no, te llevan los muertitos. El Dimas sabe de lo que habla don Poncho: Él una vez estuvo a punto de ser llevado por un ánima. Se te acercan, pero no les puedes ver la cara, traen un morral y te lo ofrecen, te piden que les ayudes a llevarlo. A veces te convencen y los ayudas, y es que, ¿Cómo no los vas a ayudar si se ven tan tristes, tan cansados, tan sedientos? Pero todos ellos ya están muertos. Lo que pasa es que algunos murieron violentamente y no logran descansar en paz. A mi me hace dos años me salió mi sobrino Toño; lo reconocí por sus escapularios y por el San Judas Tadeo tatuado a la mitad del pecho. Yo casi le recibo el morral, el que dicen contiene los huesos de otro difunto; pero a último momento comencé a rezar y saqué una botella con agua bendita la que le di al Toño. Me acuerdo que sonrió tristemente antes de beber un sorbo de agua. Luego, no sé s me dijo o yo lo pensé, que se le dijeran nueve misas para que pudiera dejar de andar penando y ya no regresar al Paso de las Ánimas. Por eso buscamos cruzar este paso lo más que podamos y tenemos que ir rezando en voz alta para que no se nos acerquen los muertitos. Es doloroso porque luego nos encontramos a conocidos; pero también hemos sabido de quienes se han ido con ellos para ayudarles con su morral y ya nunca se volvieron a ver. Por eso, Martín, es que tienes que ir rezando sin parar y ponerte bien al tiro porque es como media hora de caminar entre las ánimas; mientras tómate un café con tantita charanda y muérdete este bolillo, al fin que ya se te bajó la calentura. No habían caminad mucho cuando un resplandor rojizo, como de zacatales quemándose, ilumina el horizonte. Es el Paso de las Ánimas- se escucho la voz de don Poncho en tono cansado. Así se ve de noche. El brillo es por las velas de los peregrinos. Y porque también las ánimas tienen su luz propia. Los murmullos de los rezos en voz alta, los ayes lastimeros, los gritos de súplica, van formando un remolino angustioso que parece acabar con la entereza de los peregrinos, los que a fuerza del rezo colectivo adquieren la fuerza para seguir avanzando. En un momento dado cruzan por un claro donde se ven multitud de siluetas; parecen personas apostadas a las orillas del camino que se acercan a los caminantes; les piden de comer o de beber, les ofrecen su morral haciendo señas para darles a entender que están cansados y que necesitan ayuda. Otros abordan a algunos hasta de a cinco o seis; a veces los tiran y nos los dejan levantar; sobre todo a los que ven muy borrachos o los que no rezan lo suficiente. Hay otros que parece que andan buscando a sus conocidos o familiares. Hasta les llaman por su nombre con voz lenta y apagada. Les piden que se detengan, y que les ayuden tantito. Dicen que algunos hasta llegan a decir algo que ya no pudieron hacer en vida. (p. 112) Es notable resaltar los tintes épicos y se la forma en que se narra es como una epopeya. Este tipo de narración es con la que me voy a encontrar cuando realice mis entrevistas a peregrinos del barrio de Tepito y sobre lo épico y la epopeya he de poner énfasis en especial. Finalmente, es necesario saber que Martín el ―Garoto‖ es un joven inserto en la vida vandálica en el barrio de Tepito y su tío es quién anualmente peregrina al santuario, por ello siempre se encuentra a lado de él porque es el que conoce el camino. Cuando están caminando por el Paso de las Ánimas Martín es jalado por una persona que llaman el ―brujo‖ y desaparece. Dimas se preocupa y le comenta a Don Pancho que si no sabe donde esta su sobrino, que si no sabe quién se lo llevó, a lo que Don Pancho contesta con tintes burlones que si estaba buena la ―mota‖ con charanda. Le dice que no se preocupe, que en dos días estará ante la Virgen de San Juan de los Lagos y que habrán cumplido ese año. Cuando llegan al santuario Dimas parte de inmediato al barrio de Tepito y no deja de pensar en su sobrino, al llegar se encuentra con la siguiente noticia: Cuando llega a su casa es recibido por la abuela, la China, con una bendición y una noticia: Ya dieron de alta a Martín. Mañana lo van a entregar a tu hermana. Vivió de milagro. La Virgencita le hizo el favor. ¡Chamaco cabrón, con un balazo en la cabeza y no se murió! ¡Dios y su santísima madre sabrán porqué!; El Dimas no contestó nada. En silencio se metió a su cuarto. Enciende una veladora en su altarcito junto a la puerta. Se persigna, reza una oración de gratitud y se mete a la cama. Se duerme casi enseguida. Tiene sueños de perdón. (p. 114) Este es otro de los posibles elementos que he de encontrar en las entrevistas con peregrinos itinerantes…las ánimas de sus seres queridos los acompaña en su travesía, les dan impulso cuando el físico ya nos responde, de tal manera que cuando un peregrino llega al santuario nunca lo hace solo. 2. 2. 4 El barrio de Tepito a través de la mirada de Alfonso Hernández Alfonso Hernández es una de las voces autorizadas para hablar sobre el barrio de Tepito, fundador del periódico ―El Ñero‖ que fue punta de lanza en el movimiento de resistencia en contra del ya mencionado Plan Tepito. Actualmente goza del estatus de ser cronista del barrio y continúa registrando la memoria viva de los habitantes de Tepito, además: Hace de Guía con quines se arriesgan a un safari en Tepito, asesora tesis académicas en torno a la sobrevivencia urbana de Tepito y da pláticas a niños de escuelas primarias en la Galería José María Velasco, respecto a la historia, el carisma, y el estigma barrial. Es fundador y director del Centro de Estudios Tepiteños, recopilando el acontecer histórico, artesanal, comercial, deportivo y cultural del barrio de Tepito. Es autodidacta y –entre tantos académicos-, dice ejercer el oficio de Hojalatero Social. Y es un de los cuatro cronistas acreditados en la Delegación Cuauhtémoc.38 El carácter contestatario de Alfonso Hernández se percibe en toda su obra y utiliza los elementos que son propios del barrio para que sean su punta de lanza en su cruzada contra lo ―oficial‖ es decir, aquello que pretende construir una sola historia y con ello la pérdida de los valores o elementos que son únicos en el Tepiteño y que –según el autor- les permite identificarse como comunidad y a los cuales se recurre cuando es necesario la unión. Alfonso Hernández parte del hecho que nadie puede escribir mejor la historia del barrio de Tepito, ni hablar de sus valores más que los propios tepiteños. Por ello, someterá bajo lupa los trabajos de corte académico que se harán en el barrio y el resultado será la desacreditación a través de comentarios mordaces y sentenciará a través de su destino manifiesto Tepito para los Tepiteños (1986) que nadie tiene autoridad más que ellos para hablar las cosas del barrio y que las ciencias sociales son las causantes de la ―pendejes‖ del barrio porque tienen como fin el dotar de elementos a las autoridades para que planeen el exterminio del barrio. 38 En http://www.cronistasdf.org.mx/10101/11406.html Los ―ñeros‖ (apócope de compañero) de Tepito somos un grupo social con más de cuatrocientos años de vida urbana. Y por ello las ciencias sociales se han convertido para nosotros en ciencias de la pendejez humana, pues gracias a ellas nos ha ido como en feria. (p. 333-334) La renta urbana como factor explicativo de la renovación del barrio de Tepito se consolida en 1972 con un programa de vivienda y desarrollo urbano denominado Plan Tepito, cuyo recorrido institucional duró diez años, dirigido por doce diferentes entidades gubernamentales, demoliendo 920 viviendas y construyendo 556 nuevos departamentos. Durante el desarrollo de la primera etapa del Plan Tepito fue obvia la desarticulación espacial de la vida comunitaria y las actividades artesanal y comercial. La lucha no se hizo esperar. Antropólogos sociales contratados por el Plan Tepito trataron de incentivar a la comunidad para que aceptara el proyecto y paralelamente, lo que dieron por llamar ―vicios de comportamiento social de los tepiteños‖, cuya catalogación permitiría desarrollar estrategias terapéuticas vivenciales para hacer a los tepiteños seres humanos más plenos. (p. 339) Pero vayamos al punto que nos interesa que es la religiosidad en el barrio de Tepito y el culto a la Santa Muerte y traer a colación la visión de Alfonso Hernández sobre este culto. Primeramente, he de resaltar que por lo menos en la revisión que efectúe de la obra de Alfonso Hernández el discurso religioso no esta presente ¿el posible motivo? Que los habitantes del barrio viven una religiosidad plena e intensa paralela a la doctrina de la iglesia católica, en donde, los sacerdotes son contemplados como administradores de servicios que requiere el habitante del barrio de Tepito. Existe una tensión entre la las formas en que el tepiteño vive su relación con lo sagrado y las formas en que la iglesia pretende que se viva ese vínculo; tensión que no lleva a la ruptura pues se respeta el rol y el carácter ritual de cada uno de los bandos39. Alfonso Hernández considera a la religión como un Aparato Ideológico del Estado40 cuyo fin es no permitir la apropiación y reinterpretación del universo 39 En la etnografía del barrio de Tepito pondré énfasis especial en el universo simbólico sagrado de los habitantes del barrio de Tepito manifestado en el espacio público (altares en la vía pública) y el espacio privado (casa) y como coincide con el universo simbólico sagrado que se encuentra dentro de las tres parroquias del barrio de tepito a saber: San Francisco de Asís Tepito, Nuestra Señora de la Concepción y Santa Ana. Ello también incluirá el vínculo que existe entre la iglesia y los diversos grupos de peregrinos itinerantes del barrio. 40 “La formación de religiones propias de cada grupo social: este fenómeno es inherente a la estructura social de la población católica y es básicamente la oposición entre la religión de los intelectuales (¿?) y la de las clases subalternas. Esta ruptura es tanto más compleja cuanto que cada grupo social tiende a elaborar su propio catolicismo. Pero la oposición ideológica tiende a enfrentar la religión elaborada de los intelectuales a la popular de las masas‖. Ver en sagrado católico, además de mantener sumido en una eterna ignorancia a su feligresía lo que no les permitirá el despertar de su conciencia social, es decir, saber quiénes son, cuál es su papel en la vida y el derecho a elegir su propio destino. Primeramente, sobre la Santa Muerte Alfonso Hernández refiere: Irse al otro barrio, cuando chiras pelas La ciudad ilustrada, opulenta y cristiana, genera acusaciones genéricas con calificativos avanzados contra los barrios populares a los que estigmatiza como inmensas cloacas de infección y vicio, de crimen y de peste, cual si fueran verdaderos potreros de la muerte La religión en su obsesiva necesidad de dominarlo todo, ha tenido por consecuencia el olvido de nuestro ser ritual, expresivo y ceremonial; cuya recuperación no implica irracionalidad, sino que, todo lo contrario, es la condición de la sana racionalidad, cuya devoción emotivamente primaria se enfrenta a la condición del hombre moderno y su ceguera; no ya para entender a los demás, sino para comprenderse a sí mismo, sin nada que opaque su propia naturaleza. Cuando misteriosamente La Cierta se hace presente para llevarnos al otro barrio, es un hecho que no ha de trivializarse, pues tal misterio se convierte en guía. Por lo tanto, no hay que dejar al Yo (a nosotros) fuera de la figura con la que se representa a la Muerte. El Yo es una parte fundamental de todos los elementos de esta figura. Pues lo que le da contenido y profundidad a esta, es la unión entre cada quien y Ella. Ya que entre los devotos de la Santa Muerte persiste el reconocimiento de algo que es humano y que puede manifestarse de formas bien distintas. De ahí que, para quienes no son devotos, lo siniestro de tal costumbre se considere como el miedo a la existencia y su relación con otros aspectos de la vida humana. Y en tal perspectiva, la religión, en esencia, no es sino el intento de ponerse a salvo de las inclemencias de la vida. Se llega a decir que la religión es como un sentimiento; un sentimiento que anhela lo que no puede. Mientras que esta devoción callejera es un sentimiento que no se deja engañar por las formalidades del dogma religioso. Que no permite el reencuentro con nosotros mismos, con nuestras creencias primitivas, expectativas, valores y sentido de la existencia. Ya que sus ministros controlan todas las instancias de opinión: Yo sé de este problema y la solución. En estos tiempos, el proceso de evolución cultural del hombre todavía no despeja ni responde los enigmas que circundan el nacimiento y la muerte, el fin de la magia y el surgimiento de la religión41. Portelli, Hugues, Gramsci y la cuestión religiosa: una sociología marxista de la religión, Editorial LAIA, España, 1977 41 Ver en http://www.cronistasdf.org.mx/10143.html?*session*id*key*=*session*id*val* He aquí que intento dar una respuesta –plausible si sí se quiere ver- del porqué Alfonso Hernández trae a colación a la Santa Muerte y le construye una historia en donde el vínculo que existe entre ella y el barrio se remonta a tiempos pasados. ¿Cuál sería uno de los posibles motivos por lo que Alfonso Hernández traiga a colación en su obra a la Santa Muerte? Creo que no se le debe de dar mucha vuelta o someter su discurso a un análisis profundo ya que una de las características del catolicismo popular es su carácter contestatario ante la visión de la jerarquía eclesiástica. Además, Alfonso Hernández ha sido testigo de las anatemas lanzadas por los sacerdotes en contra del culto y el llamado a la feligresía de que abandonen lo que consideran un culto del diablo. Si la Santa Muerte es del barrio de Tepito y de acuerdo a su destino manifiesto, luego entonces, la Santa Muerte forma parte de la identidad del barrio de Tepito y, hacer la defensa de su culto es al mismo tiempo la defensa de elección y la capacidad de creación ritual por parte de los tepiteños. 2. 3 El barrio de Tepito desde fuera: los usos de Tepito en los medios de comunicación masiva. Cada viajero al barrio de Tepito se forja una idea de acuerdo a lo que ve, escucha, olfatea y degusta. Al salir del barrio esa impresión la traduce en una información que socializa entre su red y dependiendo si la experiencia fue placentera (tan simple como haber comprado una película difícil de conseguir o la ropa de moda a precios por debajo de su costo) presentará al barrio como un espacio de oportunidades; por supuesto en esta narración también se trasmite una guía básica de sobrevivencia que tiene que ver con las calles por las que se debe evitar transitar o evitar preguntar en un puesto y en otro los precios de la mercancía. Si la experiencia no es placentera (ya sea que fue asaltado o que no le hicieron efectiva la garantía) presentará a un barrio al cual no se debe de acudir y generalizara sobre los aspectos negativos que vio y experimento. He puesto un ejemplo a pequeña escala de la información que generan los externos sobre el barrio de Tepito. Ahora llevemos esta información a dimensiones mayores como los que tiene los medios de comunicación masiva ¿qué resulta de ello? En el caso del barrio de Tepito, presentar un espacio en una eterna disputa, con una crisis de valores y sin respeto a todo lo que connote humanismo. En el caso de la religiosidad, los medios de comunicación pondrán en tela de juicio el vínculo de los habitantes del barrio de Tepito con lo sagrado, ya que presentan un espacio anárquico donde impera la ley del más fuerte. Se pone en tela de juicio sus diversos cultos porque los medios de comunicación no logran explicarse como puede estar tan arraigado el culto a la Virgen de Guadalupe o la Virgen de San Juan de los Lagos, si en ese espacio se están matando. Para la realización de este apartado tuve que realizar una búsqueda de diversos artículos que tuvieran como factor común el barrio de Tepito y que mencionaran en su descripción algún elemento que denotara la religiosidad de los habitantes del barrio. En la revisión de estos artículos pude dar cuenta que lo que atrae del barrio de Tepito es el comercio informal y los productos que ahí se ofertan, siendo los productos apócrifos, armas y drogas sobre lo que giran las narraciones de los periodistas. El análisis que hacen de su realidad (que lo darán a conocer como una verdad) lo hacen fundamentado en una serie de valores éticos que parece ser ellos si poseen; por eso nada bueno puede haber en el barrio de Tepito y es su actividad lo que llevará a pique la economía del país. Un porcentaje del gremio periodístico presentara a los lectores a Tepito como cuna de secuestradores, sicarios, contrabandistas, narcotraficantes, prostitutas, espacio insalubre, de anarquía; en fin, un lugar al que no se debe de acudir. Sus investigaciones tienen un factor común: Sus fuentes bibliográficas son otros artículos periodísticos Sus informantes son pocos y sus opiniones las toman como la voz de todo el barrio de Tepito Las estadísticas a las que acuden son las proporcionadas por la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Distrito Federal Cuando utilizan herramientas metodológicas como puede ser un sondeo o una entrevista para obtener un dato, son pocas las que aplican y sus preguntas son cerradas. Muy pocos periodistas acuden a los trabajos y especialistas de la academia, será porque sus trabajos son elaborados en base a una situación emergente y se requiere una respuesta inmediata a lo que se esta viviendo. La información para ellos tiene un valor de cambio, por eso se buscan las notas de mayor impacto porqué el fin mismo es vender. Sobre este último punto, si ellos venden entonces existe un comprador que probablemente no esta dispuesto a comprar algo que no le genere un comentario que ha de socializar, veamos dos ejemplos de noticias que puede o no vender: la primera, ¡supiste que en Tepito mataron a una persona por negarse a entregar sus cosas cuando lo asaltaron y dejó una viuda y tres niños en la orfandad! ¿Cuántos comentarios generara esta noticia? ¿Cómo verán a los tepiteños?; la segunda ¡sabias que en el barrio de Tepito se han unido para luchar por una vivienda digna apegada a sus valores! ¿Cuántos comentarios generara esta nota? ¿Cómo verán a los tepiteños? No es mi intención en este apartado poner en el banquillo de los acusados a un tipo de periodismo que se hace en México, ellos tienen su propia lógica y sus propios métodos; sobre ello no puedo opinar. Lo que si me compete es sentenciar que debido a este tipo de periodismo los habitantes del barrio de Tepito son poco receptivos a los extraños que llegan a formular preguntas, pues piensan que dicha información será utilizada en su contra. Debo sentenciar el dato que los habitantes no logran distinguir entre un trabajo de corte académico y uno periodístico, para ellos el que una persona traiga consigo una cámara de video o digital, una grabadora de audio o tenga entre sus manos una tabla para anotaciones es signo inequívoco que se trata de un periodista que esta ahí para sacar algo que hablara mal del barrio. Por ello, nos acosan, nos hacen sentir que estamos vigilados y que cada movimiento que hacemos ellos lo sabrán y cuando logramos que nos den la información sentenciaran que si la información se llega a utilizar mal, la habremos de pasar muy mal. Los siguientes artículos periodísticos han sido seleccionados porque tocan el elemento religioso en el barrio de Tepito. Sobre ellos no he de emitir comentario alguno ya que he ofrecido información amplia sobre el fenómeno religioso en voz de los actores; queda al lector formular sus propias preguntas. Erika Duarte en su nota del 23 de febrero del 2007 hace una descripción general y también una particular del predio conocido como el 40 que fue expropiado por el Gobierno del Distrito Federal, en dicha nota comenta lo siguiente: La ubicación en una de las calles más concurridas del barrio de Tepito, la entrada oculta entre cientos de puestos semifijos y la afluencia de miles de comerciantes y compradores, la pintura descarapelada de la fachada y un zaguán dañado, contrasta con el "lujo" en el interior de los 144 departamentos que aún forman parte del predio ubicado entre las calles de Jesús Carranza y Tenochtitlán, mejor conocido como El 40. La edificación de la unidad de interés social, nada tiene que ver con los acabados de lujo de cada una de las viviendas. Mucho menos con el gimnasio, el jacuzzi y un mural que se encuentra en uno de los departamentos más altos de la unidad, cuya azotea fue acondicionada como centro de esparcimiento, cual si fuera el de una residencia. Y es que en el número 301-S se encontraban no sólo diversas colecciones de enciclopedias de Historia Universal y libros de Voltaire, Bocaccio y otros clásicos de la literatura, sino también una caja fuerte con marcas de impactos de arma de fuego; un gimnasio en una terraza cubierta con estructuras de aluminio y acrílico que permitía el paso de luz natural y dejaba ver un mural con técnica de aerosol; en el se aprecia, en la parte central y superior un águila republicana, plasmada entre los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl. Debajo del águila se observa la imagen de Emiliano Zapata, de cuerpo completo, el emperador Cuauhtémoc a sus pies, mientras que a los costados se combinaron figuras de la historia, del arte y de la farándula. Detrás del mural se encontró una tina de baño de aproximadamente 3 metros de largo por 2 de ancho, en un cuarto cubierto con acabados en loseta gris. En otro cuarto se encontraron 11 cartuchos útiles calibre .22 y 95 pastillas de anfetamina y restos de mariguana. El común denominador del resto de las viviendas son los altares a imágenes como San Judas Tadeo, la Santa Muerte y Jesús Malverde; las dos y hasta tres puertas metálicas de entre 5 y 8 centímetros de espesor, y de 6 a 9 candados y chapas reforzadas, además de sistemas de seguridades digitales y electrónicas. En la gráfica, una de las viviendas donde predominan los altares a Malverde y a la Santa Muerte Foto: Víctor Camacho Francesc Relea en su artículo El barrio que venera a la Santa Muerte publicado el 15 de junio del 2008 en la edición digital del periódico español El país42 presenta al barrio de Tepito de la siguiente manera: Bienvenidos a Tepito, en el centro de México DF. Uno de los barrios más peligrosos de América. Bautizado como ―fábrica de delincuentes‖. Una explosiva mezcla de contrabandistas, ‗narcos‘ y comerciantes piratas con algo en común: su culto a una Virgen calavera. Aquellos que no conocen Tepito no conocen México, dicen con orgullo los vecinos del barrio más bravo del país. Los tepiteños se revuelven contra la maldición de vivir en el territorio más peligroso, reducto del narcomenudeo (tráfico de droga), la fayuca (contrabando), los tianguis (mercado ambulante) y la piratería (venta de mercancía falsificada). En Tepito es posible comprar de todo. Desde marihuana y cocaína hasta un fusil AK-47, el arma más usada por los sicarios. Y por supuesto, todo tipo de productos de dudosa procedencia, ropa, complementos, películas en DVD, discos compactos… Sólo es cuestión de precio. Todo ocurre en pleno centro de la gigantesca capital mexicana, a 15 minutos del Zócalo, el corazón de la ciudad. Miguel Cabildo y Raúl Monge (1999) en su artículo periodístico Tepito: territorio libre, paraíso fiscal, nos presentan al barrio de Tepito de la siguiente manera: Enclavado en la colonia Morelos, en pleno corazón de la ciudad de México, el barrio de Tepito tiene varias caras: Es una mezcla de ―isla de la fantasía‖, de paraíso fiscal y de territorio libre. En medio de sus derruidas calles y callejones, de sus maltrechas viviendas, de basura acumulada, por doquier, de cientos de esqueletos metálicos distribuidos a lo largo y ancho de la vía pública, de una pobreza aparente, subsiste un mundo subterráneo, el de la economía informal y el de los negocios turbios. Ambos están compuestos por mafias que, al margen de la ley, son capaces de hacer realidad fantasías, caprichos y sueños y, más todavía, de vender, falsificar, fabricar, robar y conseguir todo tipo de artículos o productos nacionales o de importación, legales o ilegales. Locales que en apariencia venden productos electrónicos, trafican con armas o drogas a gran escala; puestos de periódicos que son la fachada de negocios de prostitución; tiendas de abarrotes que sirven de disfraz para vende grapas de cocaína y alcohol a menores de edad; conjuntos habitacionales que funcionan como bodegas y nidos de delincuentes, y niños de la calle que forman partes de redes de distribución de drogas. A plena luz del día o cobijados por la oscuridad de la noche, se realizan operaciones comerciales millonarias con productos de contrabando transportados en trailers desde la frontera norte, cuya carga desaparece en cuestión de minutos. Víctima de su propio 42 http://www.elpais.com/articulo/portada/barrio/venera/Santa/Muerte/elppgl/20080615elpepspor _10/Tes aislamiento y de la voracidad, corrupción e indolencia de autoridades, dirigentes vecinales y líderes de comerciantes, tepito está sumido, pues, en una profunda descomposición urbana, social, comercial y cultural. P 22 Así también ofrece una radiografía de la criminalidad en el barrio de Tepito, sobre ello menciona que: TERRITORIO LIBRE Las autoridades capitalinas, reconocen abiertamente que en Tepito ―no hay gobierno‖ y advierten que ―gran parte del espacio público‖ –calles, plazas y jardines- ha sido ―privatizado‖, por lo que la función urbana básica, la libre circulación de personas, ―se encuentra cancelada‖. Y alertan: De no modificarse esta tendencia, el barrio tiende a convertirse en un ―gigantesco tugurio‖, en el que el comercio ―seguirá siendo fachada de grandes negocios turbios‖. El proceso de degradación de Tepito comenzó con la construcción de los ejes viales 1 y 2 norte, y se aceleró con el terremoto de 1985. Y es que ambos acontecimientos no sólo alteraron la traza urbana, sino que fracturaron el tejido social que había permanecido intacto por décadas. La ―cartografía‖ criminal de ese espacio urbano no deja lugar a dudas: En el cuadrante uno, que comprende del Eje 1 Norte a Fray Bartolomé de las Casas y de Jesús Carranza a Avenida del Trabajo, el delito más recurrente es el robo a transeúntes, aunque la policía tiene detectados sitios donde se vende droga al menudeo, particularmente en las calles de Tenochtitlán, callejón de Tenochtitlán y Jesús Carranza. En el cuadrante dos, que cruza de Fray Bartolomé de la Casas a Canal del Norte y de Jesús Carranza a Avenida del Trabajo, se concentra la fabricación, adulteración y venta de bebidas alcohólicas al menudeo, así como tráfico de drogas a menor escala. Los puntos de venta se encuentra básicamente en las calles de Peñón, Constancia, Jesús María, Matamoros y Caridad. Dentro del cuadrante tres que va de Reforma a Jesús Carranza y del Eje 2 Norte al Eje 1 Norte, el giro comercial que predomina es la venta de autopartes. El jefe policiaco revela que es uno de los principales deshuesaderos de vehículos robados de la ciudad. Se tiene identificada también venta de droga al menudeo, principalmente en las calles de Libertad y Peralvillo número 15. El robo a transeúntes tiene su punto fuerte entre las calles de Peralvillo y Matamoros y Peralvillo y Morelos. En el cuadrante cuatro, que va de Avenida del Trabajo a Circunvalación y Eje 2 Oriente, la PGJDF asegura que el conjunto habitacional que existe dentro de esa zona sirve de guarida de organizaciones de delincuentes que tienen su centro de operación en las calles de Panaderos, Peluqueros, Mineros, Ferrocarril de Cintura y Hortelanos. P. 22-23 Con respecto a elementos que denoten la religiosidad o la mención de un símbolo del universo sagrado de los tepiteños, se encuentra la siguiente referencia: Entre las telarañas metálicas de puestos colocadas en plena vía pública, se alcanzan a distinguir entradas de vecindades o de casas, con sus grandes altares guadalupanos, que funcionan más bien como bodegas de mercancía o talleres y laboratorios clandestinos desde donde se falsifican prestigiadas marcas de ropa, calzado y discos de moda. P. 25 Gardenia Mendoza Aguilar (2008) en su artículo periodístico El barrio de Tepito y su extensa red de líderes, hace la siguiente descripción del barrio de Tepito: Estudios de diversas industrias en México señalan que ocho de cada 10 películas de video y discos apócrifas son vendidos o comprados en el barrio. La policía capitalina reporta que cada mes en Tepito vende15 toneladas de mariguana y 240 kilos de cocaína a otras zonas de venta de droga al menudeo en la ciudad como Iztapalapa y Gustavo A. Madero. En consecuencia, las ejecuciones con signo del narcomenudeo están a la orden del día. En el 2006, se registraron 58 homicidios con arma de fuego. En ese año el 14.4%; es decir, 439 de los 3 mil 93 reclusos de la Ciudad de México dijeron que tenían su residencia en el Barrio Bravo. Existe otro tipo de artículos sobre el barrio de Tepito que se han publicado en revistas y semanarios de corte cultural, ellos deben de ser también incluidos en este apartado, aunque se debe resaltar que el tiraje de estas revistas es más limitado que aquellas que son publicados por los grandes casas editoriales. Un ejemplo de este tipo de periodismo es el artículo de Cynthia Ramírez (2007) Bienvenidos a Tepito, que parodiando a un guía de turistas hace un recorrido por diversas calles y espacios públicos del barrio de Tepito, en donde, la historia la cuentan los actores. De su artículo extraigo el presente texto en donde se conjuga su impresión al llegar al barrio y como establece contacto con los actores que describen su profesión y los problemas por los que pasa el barrio, esa será la forma en que continuara su trabajo, en donde, la voz de los actores es el ingrediente principal. Llegar al barrio bravo El calor es sofocante y el sexto vagón del metro de la línea B –de Ciudad Azteca a Buenavista– va repleto de gente que, con bolsas, maletas y cajas cargadas de fayuca, espera ansiosa la siguiente parada para tener un respiro de aire menos viciado y expandir algunos milímetros los linderos del espacio vital. En la estación Tepito las puertas se abren y varias decenas de personas salen en bloque. Recuperada la individualidad, afianzadas las mercancías y resguardadas las carteras, uno piensa que, ahora sí, se está listo para encarar el barrio bravo. Pero no hace falta salir de los túneles del metro para que Tepito haga gala de su áspero ánimo: el icono de la estación –un guante de box– es una mezcla de memorial, homenaje y advertencia de que usted ha llegado a la tierra del luchador. Adentrándose en ella, entre las calles de Aztecas y Caridad, un pasillo de no más de medio metro de ancho, entre vendedores de relojes de imitación, conduce al Centro Deportivo Tepito, mejor conocido como El Maracaná, por el campo de fútbol que alberga y es testigo tres días a la semana de aguerridos encuentros entre los equipos del barrio. A un costado de la cancha, el gimnasio José ―Huitlacoche‖ Medel hospeda el cuadrilátero donde, dicen, nació la fama brava de Tepito. Aquí, de lunes a sábado, por 35 pesos al mes, decenas de hombres y algunas mujeres aprenden a boxear. Los más jóvenes aspiran a exhibir algún día sus dotes pugilísticas en la Arena Coliseo; otros asisten buscando consolidarse, bajo la dirección de Raúl Valdés, como boxeadores profesionales, y la mayoría acude para aprender a ―levantar las manitas‖ y defenderse. Los ánimos a lo largo del entrenamiento son grandes y elevados, pero nunca violentos. El código del ring dicta: ―con la fuerza que pegues serás golpeado‖ y, sintiéndose todos compañeros, nadie pierde el control de sus puños. Incluso en el ring le sorprenderán Daniel y Adolfo Landeros (profesional de diez rounds) por la consideración que prestan a las combinaciones de golpes y defensas. Si usted llega en punto de las seis de la tarde, mientras los pugilistas se duchan al final del entrenamiento, Valdés aceptará gustoso contarle sobre la debacle del box en Tepito. Para él el box constituyó durante mucho tiempo una válvula de escape y una garantía de ingresos y ascenso social en el barrio, pero la creciente comercialización de fayuca dio a los vecinos de Tepito una vía menos dolorosa de allegarse recursos. Aun así, está convencido de que lo que el barrio necesita es un campeón mundial (el último fue Bazán hace ocho años) para volver a encumbrar el box. Cuando el barrio se levanta Si usted planea un viaje a Tepito es aconsejable llegar cerca de las ocho de la mañana. Así no sólo podrá despejar su ruta sino que tendrá oportunidad de ver cómo se despereza el barrio. A estas horas de las bodegas salen cientos de armazones, los comales se calientan, el café y las migas (potaje preparado con agua, chile ancho, huesos de res y cerdo y al que, como toque distintivo, agregan trozos de bolillo) hierven esperando a los primeros transeúntes. El ambiente es un festín de ruido metálico y olor a grasa quemada. Si cruza un saludo con los puesteros o ventila algunas dudas sobre su ubicación, no se sienta extrañado si a bocajarro, como si lo conocieran, lo alburean. Trate de pensar en las posibilidades del juego de palabras y siéntase abiertamente retado a un duelo de albures. Pero sobre todo no albergue muchas esperanzas de salir victorioso de ese combate verbal. Miguel, un vendedor de discos pirata, confirma que sí, sin duda asaltan a los que ―se apendejan‖ y que muchas veces ni siquiera se necesita un arma. Él lo ha hecho y ―es pura presión de la mente, les llegas por atrás y te los bailas con el choro‖, pero también sabe que la fama de que en Tepito asaltan no conviene a nadie, pues ahuyenta a la clientela. Así que el protocolo entre comerciantes es cuidar, por lo menos dentro de su puesto, a sus clientes. Pero la protección que los comerciantes ofrecen depende de la cantidad de dinero que sus mercancías atraen. Por ejemplo, los vendedores de relojes, alrededor del Deportivo Tepito, ofrecen un espectro de seguridad más amplio: sus principales compradores son escoltados, hasta la puerta de sus coches, por gente de la zona. La contraparte es que muchas asperezas entre puesteros se liman llevando a la ruina al contrincante, asaltando de manera sistemática a todos sus clientes. En Tepito ser asaltado o no depende tanto de la ingenuidad, el descuido o la ostentación del cliente, como de a quién y qué le compra. Otro método preferido de asalto es mediante motonetas, vehículo común de transporte por las calles de Tepito; en términos de tránsito resulta poco práctica pues la cantidad de peatones y comercios acota los límites de velocidad. Pero a pesar de todas las complicaciones las motonetas son efectivas para despojar a los peatones de sus pertenencias y acelerar una cuadra para entregar el botín a un cómplice. Con ello logran disfrazar el delito. He presentado dos formas diferentes en que el periodismo hace uso del barrio de Tepito. Cada profesionista de los medios de comunicación ya sea impreso o electrónico se forja una impresión del espacio que comparte a sus lectores o espectadores potenciales. Sobre el manejo del fenómeno religioso en el barrio de Tepito por parte de estos profesionistas depende de la situación emergente que se presente en el momento. Por ello, establecen un vínculo entre el culto a la Santa Muerte, Jesús Malverde y San Judas y la santería con la delincuencia organizada y con grupos vulnerables. Por ello, ante fenómenos como narcotráfico, piratería, secuestros que se presentan en el barrio de Tepito, la lente del fotógrafo registrará los altares e imágenes con la que asocian la actividad, por ello, la Santa Muerte y Jesús Malverde aparecerán siempre en primer plano. Con respeto a otros elementos del universo sagrado del barrio de Tepito como es el caso de los altares erigidos a la Virgen de Guadalupe, se llegan a mencionar porque lo asocian con actividades ilícitas. Determinar el universo sagrado del barrio será el principal objetivo de la etnografía que he de realizar. Además, expondré si ese vínculo entre la Santa Muerte y el barrio de Tepito que los medios de comunicación han establecido es tan cierto como lo dicen. Puede ser que para el periodista la formula Santa Muerte-delincuencia sea la que venda más y por ello necesita estar siempre vigente. Finalmente, reitero que el objetivo de este apartado es presentar los usos que los medios de comunicación hacen del barrio de Tepito. Sobre la lógica y los métodos que determinan sus disciplinas -que son la columna vertebral con la realizan sus artículos- no tengo nada que decir al respecto porque me declaro inexperto en el tema. 2. 4 El barrio de Tepito y sus actores en los foros de opinión (blogs) en el Internet Un nuevo elemento de análisis se le presenta a los científicos sociales: los blogs en la Internet. Estos foros de opinión pueden ser considerados como una herramienta metodológica porque la voz de los actores es el ingrediente principal. Estos foros de opinión han sido creados con la finalidad de contener los comentarios sobre un tema en específico, por ello el control de estos foros es mínimo, por ello los comentarios se realizan desde el anonimato y elaborados en un lenguaje –códigos- que los participantes pueden decodificar. El barrio de Tepito también esta presente en estos foros, se suben al Internet videos que tratan temas tales como: la música, sus cultos a los santos, su vestimenta, su idea del mundo, la visión que tienen de los otros, sus actividades comerciales, la delincuencia, entre otros. No he de extenderme en el análisis de los ejemplos que presentare en este apartado, ya que solamente lo propongo como una herramienta de donde los científicos sociales pueden hacerse del dato. En la página electrónica Youtube realice una revisión con la palabra Tepito y arrojó como resultado una cantidad de 1130 videos. Tome una muestra de videos que incluyeran en su producción aspectos que denotaran la religiosidad en el barrio de Tepito. Posteriormente puse énfasis en los comentarios que se vierten sobre el video en el blog que la página Youtube provee. Los videos son los siguientes: 1. Tepiteños: maldita fauna urbana43 2. Tepiteños de mierda: una escoria de este mundo que debemos eliminar rápido44 43 Subido a Youtube por aurumletalys el 26 de noviembre del 2008, con una duración de 1:40 minutos, http://www.youtubes.net.cn/video/IUivGMidJBo/tepiteños.html 44 Subido a Youtube por ultramexicorebel el 30 de octubre del 2008, con una duración de 3:53 minutos, http://www.youtubes.net.cn/video/xJUBW0l2MFo/tepiteños-de-mierda.html 3. Tepiteños de mierda: ja ja ja ja una descripción del reggaeton por mi a matar adoradores de san judas45 4. Anti tepiteños ja ja 46 5. Severa crítica a una puta regetonera47 6. Chingue a su madre disquetepiteños: crítica constructiva sobre los famosos que se hacen llamar tepiteños48 7. Qué es un Tepiteño: describe a los pobres morros que se creen dizque tepiteños49 De manera general, estos videos se refieren a tepito y los tepiteños de la siguiente manera: El tepiteño al que se refieren se ubica en un rango de edad entre los 15 y 20 años Hacen una crítica a su vestimenta la cual consta de zapatos tenis marca Jordan, Playeras en colores chillantes de las marcas D&G, Lacosste y Tommy. Este tipo de ropa de marcas reconocidas las utilizan para ocultar su pobreza. Hacen una crítica a su aspecto físico y los describen como individuos que se pintan el pelo de color rubio, sus corte de pelo es raso y múltiples perforaciones. Son asaltantes Venden productos apócrifos Su medio de transporte predilecto es la motoneta la cual usan para asaltar a los transeúntes. 45 Subido a Youtube por Subido a la Youtube por ultramexicorebel el 28 de octubre del 2008, con una duración de 0:40 segundos, http://www.youtubes.net.cn/video/n5DqZUlO5vg/anti-tepiteños-ja-ja.html 46 47 Subido a Youtube por juanitobasura el 2 de septiembre del 2008, con una duración de 6:32 minutos, http://www.youtubes.net.cn/video/7Nkd8krHOoQ/Severa-crítica-a-una-puta-egetoneraGABIITAMAMIITA.html 48 Subido a Youtube por unionsmc el 25 de agosto del 2008, con una duración de 4:29 minutos, hthttp://www.youtubes.net.cn/video/RUJCB9C4N_M/chinguen-a-su-madre-disquetepiteños.html 49 Subido a Youtube por vertico123 el 28 de febrero del 2009, con una duración de 6:39 minutos, http://www.youtube.com/watch?v=EZCUiy7nbYI Son drogadictos Son temerarios en grupo, pero temerosos cuando andan solos Les gusta hacer alarde de que poseen armas Critican su lenguaje que se limita a las palabras: chales, dijiste, la neta, carnal, carnala Son nacos y asquerosos El tepiteño es materialista por excelencia por ello utiliza ropa de marcas reconocidas ya que lo importante es presumir y para ellos, las marcas son símbolo de poder. La mujer es para el tepiteño un fetiche, una cosa que el tepiteño insulta, humilla y maltrata. Se cuelgan escapularios de San Judas Tadeo y la Santa Muerte porque les da seguridad; así también, usan playeras con la imagen de San Judas Tadeo para acudir cada 28 a una iglesia. Les cuestionan si verdaderamente son devotos por la manera en que se comportan. Cada uno de los videos que se exhiben en Youtube tienen un blog para quién quiera exponer su punto de vista. Con respecto al tema de interés de mi investigación sobre La religiosidad en el barrio de Tepito: el culto a la Santa Muerte entre lo emergente y alternativo; he de traer a colación algunos comentarios que se han vertido en relación a estos videos, destacando aquellos que por su lectura han sido escritos por los tepiteños ya sea defendiendo al barrio o bien defendiendo su culto a algún santo en específico. Los comentarios los he de transcribir tal y como han sido escritos en el blog, ellos son: juanitobasura Says: Nov 28, 2008 - jaja, buena reflexión, te recomiendo que le añadas imagenes, es mejor. Regetoneteas, jaja, me cago en san judas, santo de los malvivientes e hipócritas. barneyeksl Says: Dec 18, 2008 - chinga atu puta perra zorra madre el pendejo q hizo es puto video cuando t encuentre t voy meter unos pinches plomazoz en tu pinche culo para q t calles y m voy a coger a tu puta madre q siempre la encuentro en la esquina de mi casa chpmg Says: Dec 28, 2008- esos putos son una copia pendeja de los q somos del barrio" estos hijos de puta son copia de raperos con mamada y media q bailan regaetton como putas"" me cago en ellos, en San Judas y en el puto regaetton"" arriva el rap lo inato del barrio y no copias de calle entienden no?? yeahh hip-hop att. mAtA pUtAs-cReW chpmg Says: Dec 28, 2008 - aHuevo todos sabemos q el pendejo este es una estupida copia del pendejo anticristo!! pero me alegro de q alguien porfin se cague en los tepiteños"" q tambien ya sabemos son la mayor mamada de Mexico"" lo q mas me caga esq algunos son copia de Raperos pero con un chingo de escapularios q bailan regaetton como putas q c sienten del barrio pero son unos chamacos pendejos"" pd. Me cago en San Judas att. mAtA pUtAs- cReW chpmg Says: Dec 28, 2008 - haaay q hueva"" los tepiteños son la mayor mamada!! algunos son copia de raperos y eso es lo q me caga los huevos otros hijos de puta son unos malditos entuvados de mierda en fin son copia de varios weyes como los emos" pero ellos me valen verga!! en conclusion.... el puto del ultramexico es otro pendejo como el anticristo## a la mierda los tepiteños"" me cago en San Judas att. mAtA pUtAs-cReW oskiyandel Says: Sep 20, 2008 - Hijo de puta como te atreves a meterte con los tepiteños si te metes conmigo te metes con mi familia y mi familia es todo el barrio eres un puto marika que te cubres tras eso videos mierderos con un puto asento marika españolete si tienes tantos webos di las cosas de frente lo unico que estas buscando es que te mate mierda ! kdc000 Says: Oct 28, 2008 - cada 28 van a misa a !!! rogar por ke no los castiguen por lo mal ke han hecho en el mes y se sienten perdonados !!! hipocrecia!!! y en la ciudad en este dia debes tener cuidado para no ser azalltado por ellos! muera san judas tadeo rey de los tenis jordan las monas y D&G jajajaja rojiazcapo Says: Dec 27, 2008 - pinches tepiteños de mierda. nadamas andan faroliando y robando los culeros, pinches nacos c cienteen los reyes del barrio y c ven de la verga con sus collares de san judas tadeo, deberian de respetar cabrones, y como andan pidiendo para la misa jajaja si es para que compren su pvc. juanitobasura Says: Dec 29, 2008 - eso sí, a mi me toco ver a unos pidiendo igual que para san judas y la mamada, y traían un san judas de esos huecos que traen agua bendita, pero esos weyes traían solvente dentro de esa chingadera y venían moneando, pura mierda! FERHIJODEFARISROTTER Says: ohh!! dios eeres el puto amo jajaj loa doradores de san judas jjaja pinches nacos regetoneros hijod de puta se sienten bn chingones y kren ke monearse es un orgullo ajajajaja gracias personas komo tu acen falta gracias por este buen video pilfoer Says: piche invezl de mierda al chile vete ala verga el tepiteño mueve mexico puto al chile y tu m sobabas lo huevos ser ntepiteño es verga y t damos miedo puto y san juditas es nuestro santo y t viene valiendo madres si si o no y insulta a tu puta madre q m la cogo diario hijo d puta 1000% tepiteño awebo puto rulasyei Says: chinga atu madre puto no saves ni kien es sanjudas pendejo mejor atiende a tu mama x q la deje muy guanga jaajajaja¡¡¡¡¡ josecake Says: jajajaja puta moda del san judas el el nuevo elfo de los tepiteños chakalitotepito17 Says: chingas a tu madre no insultes a mi patronsito, pero van a ver a todos los k hablen d el les va a ir de la verga, se acordarann d este mensaje " arriba los tepiteños" o chakalitos. vargrounymuss Says: pronto a ustedes se los va cargar la verga negro de mierda. jaja tu patroncito. me cago en sanjudas y en tu madre asquerosa jajaja espero tu reaccion de eso se trata perro, de que ladres. 3mosuizidee Says: n0 mames est0s wuelles me kaen de la wergua se cienten bn zalsas jaja me dan risa inxes put0s siempre andan es sus m0t0s kn su put0 regaet0n kreyend0 en san judas y x0n un0s pinches ratas muert0s de hambres se kren bn madres y andan en kda pinches escuela asaltand0 a l0s xik0s pz km0 n0 tienen travaj0 idj0s de la xingada l0 xid0 k mis amix s el0s madrear0n jajajjajajajaa bn El haber recurrido a los blogs en la Internet me abre un nuevo panorama que no ofrece las diversas lecturas que sobre el fenómeno religioso en Tepito existen. Las opiniones en estos blogs tienen la frescura de lo actual, además que son jóvenes que tienen contacto con los actores referidos y ello les da ―autorización‖ para opinar sobre el tema. De acuerdo con las opiniones vertidas por los usuarios de estos blogs, ubican más el culto a San Judas Tadeo, su consumo simbólico, su carácter ritual, las actividades con las que se asocian y la conducta de quines le rinden culto. ¿Y la Santa Muerte? ni los productores de los videos, ni los que expresan su opinión asocian el culto a la Santa Muerte con el tipo de tepiteño que describen y que ya expuse líneas anteriores. Entonces no solo basta presentar el universo sagrado de los tepiteños, sino ubicar los universos sagrados de los diversos grupos que conforman el barrio de Tepito. Puede ser que a determinadas variables (edad, tiempo de vivir en Tepito, actividad laboral, sexo, entre otros) un culto este más arraigado que otro. Por ello, la etnografía será de vital importancia para determinar el universo sagrado de todo el barrio de Tepito, así también, ubicar esos micro universos sagrados y su carácter ritual dependiendo de las variables. 2. 5 El barrio de Tepito en la cinematografía comercial, independiente y documentales. El Barrio de Tepito ha figurado en el cine nacional desde sus inicios ya sea por la bravura de sus boxeadores, por adulterar el licor, por sus futbolistas o por la llamada Herradura de tugurios, en donde, los salones de bailes sobresalían en las décadas anteriores a los años 60‘s. Estamos hablando de un cine que responde a los intereses del Estado, en donde, se privilegia un tema por encima de los otros. La idea es clara, presentar al público historias que no necesitan ser analizadas con temas que tienen que ver más con el ámbito familiar poniendo especial énfasis en la crisis generacional que viven padres e hijos con el movimiento musical llamado rock and roll. Refleja una juventud universitaria, inquieta en sus manifestaciones artísticas, que viven la vida como se les presenta y que aun así, tienen la certeza de que al terminar sus estudios se incorporaran al mercado laboral como profesionistas. ¿Y el cine que presenta la vida y costumbre de los marginados? Es decir, aquel que presente la problemática en que viven las clases subalternas ¿Dónde quedó? Los proyectos de cine independientes deberían cubrir esos huecos, pero no se debe olvidar que se vive en un Estado represor de la ideas diferentes a las que se piensa llevara al país al progreso. El cine es un arma de dos filos, bien puede presentar la problemática de un grupo, una comunidad o un país y despertar las conciencias de los espectadores; o bien, puede inventar realidades presentando una idea y actores diferentes a los que existen en la realidad ¿en Jalisco todos serán charros? ¿La gente del Norte del país hablaran y vestirán todos como el Piporro? ¿Toda la gente de la Capital de México habla como Pepe el Toro? El presente apartado tiene como fin los usos de Tepito en la cinematografía oficial y la independiente, así como ubicar dentro de la trama de cada obra los elementos que denoten un vínculo de los actores con lo religioso. Así también, los usos y las asociaciones que hace el director de los elementos del universo sagrado del barrio de Tepito. No se hará un análisis a fondo de cada uno de los materiales sometidos a observación, solamente se mencionara el posible vínculo de los sagrado en la cotidianidad del personaje. Para mi análisis he seleccionado un paquete de películas que tienen ya sea como escenario el barrio de Tepito o que en el titulo contenga el prefijo Tepito. El material abarca tres décadas a saber: los setentas, los ochentas y las posteriores al año 2000. Algunas de estas películas fueron exhibidas en los cines, otras son producciones conocidas como video home y por último los documentales en torno al barrio. He querido marcar la importancia del tiempo histórico en que fueron producidas ya que responden a necesidades no del director, sino de los habitantes o de los gobernantes. Cada década presentará un barrio y sus actores de manera diferente, así también los valores que cohesionan la comunidad cambiaran de una década a otra. La finalidad de esta revisión cinematográfica del cine oficial e independiente es pensando en relación a mi investigación con la religiosidad en el barrio de Tepito y el culto a la Santa Muerte entre lo emergente y lo alternativo. Busco elementos del universo sagrado en los espacios en que se ha filmado cada película y determinar la vigencia o el abandono de algunos de ellos. Parto del supuesto que cualquier director no puede pasar por alto algo que es de vital importancia para los habitantes del barrio…su religiosidad. Por ello, al presentar el espacio íntimo de los actores no se puede pasar por alto este detalle. También busco un vestigio del culto a la Santa Muerte, no en las obras cinematográficas de los años dos mil, sino de la década de los setentas y ochentas, pensando que un culto tan antiguo como lo refieren algunos antropólogos sociales e historiadores debe de aparecer en alguna toma o en algún diálogo. 2. 5. 1 El barrio de Tepito en el cine comercial e independiente de los años setentas En el apartado que puse por titulo Tepito en las ciencias sociales, hice referencia al Plan Tepito y las acciones internas que llevaron a diversos actores a formar un grupo que informaría a los habitantes del barrio sobre las acciones que la Regencia del Distrito Federal y el Gobierno Federal intentaban implementar en Tepito, ese grupo fue conocido como el movimiento Arte Acá. Pues bien, en el año de 1976 surge en la colonia Morelos un grupo de jóvenes que forman la Peña Morelos, que tendría desde su nacimiento la misión de despertar las conciencias de los habitantes del barrio para que modifiquen sus conductas y con ello realizar mejoras a su entorno cotidiano. Dos proyectos diferentes entre Tepito Arte Acá y la Peña Morelos, en donde, los primeros planteaban una acción contestaría y de resistencia en contra de los proyectos federales y, la Peña Morelos opta por trabajar de manera directa con los habitantes de los barrios de la Merced, Tepito y la Morelos con una visión y plan de acción que emana del socialismo. En el año de 1979 se produce el documental que lleva por nombre Primer Cuadro y versa sobre las acciones que realizan los integrantes de la Peña Morelos con los habitantes de los barrios referidos. El documental da inicio con el Grito de Independencia que esta presidiendo un joven de la Peña Morelos en un templete en el barrio, se le escucha gritar: Vivan los héroes de la independencia, viva México, viva México, viva México. Viva la colonia Morelos, Viva Tepito, Viva la Merced; luchemos por un salario justo, luchemos por una vivienda digna, luchemos contra la corrupción, luchemos por una verdadera educación para el pueblo, mueran los gachupines y los gringos, viva México, viva yo. Así también los integrantes de la Peña Morelos se plantean los siguientes puntos a tratar: - Significado de la cultura popular: ¿Cómo fue el principio? ¿Qué se esta haciendo? ¿Hacia donde vamos? - Las condiciones de la habitación en la colonia - Un análisis de los ejes viales - La juventud y el problema de la educación - La droga, el alcoholismo y la prostitución - En cuanto a la represión - ¿Qué estamos haciendo? La importancia de este documental radica en el hecho de que los integrantes de la Peña Morelos tienen un plan de acción a cumplir y sus métodos de intervención van desde el teatro, los conciertos de folklore latinoamericano, hasta las asambleas al aire libre. La Peña Morelos plantea una serie de acciones que tienen como fin despertar la conciencia de los habitantes para con ello, tener mejoras en todos los aspectos de su vida. Por ello, el Teatro será el medio más idóneo para presentar los problemas que sufren los habitantes tales como: alcoholismo, el abandono del padre hacía los hijos y la esposa, violencia intrafamiliar, drogadicción. Todas las obras serán actuadas en la vecindad y serán trasmitidas en un lenguaje que los espectadores identifican y códigos que forman parte de su realidad. Se realiza una entrevista a uno de los actores sobre la idea de llevar este tipo de eventos a las vecindades, a lo cual responde: ¿Qué buscan con el teatro? Nosotros hacemos este teatro porque creemos que es realista a lo que estamos viviendo en la Morelos, en el barrio de Tepito. Entonces nosotros como chavos nos damos cuenta de esto y nos impulsa a hacer un trabajo, por eso hacemos el teatro que creo es una verdadera arma para poder dar solución, no solución sino motivar a la gente, a los padres de familia y a todos los chavos del vecindario para que se organicen y le den solución a todos su problemas que tienen, pues es que vivimos una serie de problemas sociales que luego nos da miedo vivir la realidad. Si nosotros los chavos no hacemos esto, pues nunca lo vamos a hacer… ¿No crees? Otro hecho importante que debe mencionarse es que los integrantes de la Peña Morelos no pretenden trascender de manera individual, lo que permitirá la cohesión de sus integrantes que sabe que el actor principal es el mismo habitante de los barrios. Por ello, en el documental los que hablan y narran las historias son los propios actores. Por ejemplo, una mujer de la tercera edad que esta narrando la historia de la vecindad conocida como el Palacio Negro (96 viviendas y 15 accesorias), considerado por las autoridades policiales locales y los habitantes del mismo barrio como extremadamente peligrosa. En esta vecindad logran traspasar ese umbral de lo público que es el patio a lo privado que es la casa habitación. En este espacio se encuentra el elemento principal que guía mi investigación…el universo sagrado. Nos presentan una toma del altar de una de las viviendas y en el mismo se encuentran aproximadamente 20 elementos sagrados, de los cuales se alcanzan a apreciar: La Madre del Buen Consejo, La Última Cena, Nuestro Señor de Chalma, Virgen de la Candelaria, San Antonio de Padua, Virgen de Guadalupe y Virgen de San Juan de los Lagos. Otro dato que nos habla de la importancia de lo sagrado en estos barrios lo refiere Arsacio Vanegas Arroyo que menciona la unión y comunicación de los barrios a través de la fiesta ya sea de un santo patrono o las fiestas patrias. El documental presenta los diversos oficios y talleres que existían en ese tiempo en los barrios referidos. Así tenemos conocimiento que en la colonia Morelos existían una gran cantidad de telares, que en Tepito existía una prospera economía familiar basada en la producción de calzado. Presenta también el rostro más famoso del barrio…sus boxeadores y ven en el deporte una alternativa para mejorar las condiciones tanto económicas como las del barrio. Presenta unos murales de Tepito Arte Acá pero no presenta a su creador ni alguna entrevista con actores de este movimiento. El documento sirve también como una denuncia de los cambios que ha experimentado el área por la construcción de los ejes viales, la ejecución del Plan Tepito. Además denuncia la corrupción en las instituciones y los cuerpos policiales que abusan de los habitantes del barrio no importando si son estudiantes o trabajadores. Al final del documental Arsacio Vanegas Arroyo nos da su reflexión sobre la vida en el barrio: Esta es mi casa, mi barrio, mi ciudad, mi país. La vida aquí es muy dura para niños, jóvenes, mujeres y hombres; están en una batalla constante por sobrevivir. Pero encontraremos el camino para salir adelante. Nuestro pueblo es creador de grandes culturas y tiene una gran tradición de lucha. El pueblo…nuestro pueblo despertara de esta larga pesadilla de miseria y se levantara y cambiara todo, todo, todo. 2. 5. 2 El barrio de Tepito en el cine comercial e independiente de los años ochentas Son tres películas las que presento en este apartado para ejemplificar los usos y con ello las representaciones del barrio de Tepito. Además pretendo ubicar el manejo de los elementos del universo sagrado que el director haya querido presentar al espectador. Las películas ¡Que viva Tepito! (1980), Barrio de campeones (1981) y Los fayuqueros de Tepito (1982) presentan situaciones, oficios, valores jerárquicos, la tensión con las autoridades y los anhelos de los habitantes del barrio de Tepito. La película ¡Que viva Tepito! da inicio con diversas tomas sobre un altar en el interior de una vivienda, las imágenes que ahí se encuentran son: Virgen de San Juan de los Lagos, San Ignacio de Loyola, Madre del Buen Consejo, Crucifijo, Nuestra Señora de la Concepción, Virgen de Guadalupe, Ángel de la Guarda, San Martín Caballero o Tours, San Martín de Porres, San Antonio de Padua, Sagrado Corazón de Jesús y el Santo Niño de Atocha. La muerte de Refugio y los preparativos para su funeral permitirá que se entretejan las historias de los actores, que tienen un vínculo con Refugio ya sea como madrina, consejera o bien como protectora. Esta película presenta un Tepito diferente, la trama se sitúa en una vecindad que esta derruida y en ella se presentan constantes pleitos entre los vecinos. La sexualidad se vive de diferente manera y todos son candidatos a tener encuentros sexuales no importando su estatus civil o religioso. Muere Refugio y todos viven el evento de diferente manera: Un ahijado aprovecha el evento para defraudar la buena voluntad de sus allegados que han cooperado para el entierro de Refugio. Ramón en toda la trama se la pasa deseando sexualmente a una de sus vecinas que poseerá en el baño comunitario de la vecindad en pleno velorio. Concha durante la trama estará exigiendo las pertenencias de Refugio, especialmente la vivienda y sus santos. Chucho (la pareja de Refugio) vivirá el duelo bebiendo durante todo el día. Las conductas por genero son muy marcadas durante el hecho luctuoso; los varones no estarán presentes en el inicio de la velación pues están viendo la pelea de box del kid interpretando por el ―puas‖ Olivares y las mujeres estarán en el velorio pero hablando sobre la repartición de los bienes. ―Qué viva Tepito y que chingue a su madre el mundo‖ exclama un alcohólico cuando el ―Kid‖ ha ganado una pelea. Por la madrugada se suscitan peleas entre los dolientes por la falta de alcohol para seguir viviendo y para solucionarlo se le encomienda a un joven que vaya a la otra vecindad (en donde hay fiesta) para pedir regalado un poco de alcohol. El joven no quiere ir porque refiere que ahí se encuentran los de la vecindad conocida como ―el palacio negro‖ y el adulto contesta que no debe temer pues él es de la vecindad conocida como la ―coyotera‖. Cuando este joven entra a la vecindad se suscita una fricción que desencadena en una batalla campal entre las dos vecindades con el saldo de un muerto de la vecindad conocida como ―el palacio negro‖. Todos los involucrados son detenidos por la policía. Mención aparte merece el hecho de que las mujeres son frecuentemente golpeadas por lo varones. También sobresale el tema del hacinamiento de la vecindad y se menciona que en un solo cuarto llegan a habitar hasta doce personas. El funeral de Refugio sigue su curso aunque casi sin dolientes, entre botellas de licor, destrozos y sangre. Referente a la religiosidad de algunos de los actores de esta vecindad se puede resumir en las siguientes frases y diálogos: ―hay San Judas Tadeo protégeme, a ver si no me rompe la madre mi viejo‖ menciona Concha cuando va a despertar a su marido para darle la noticia de que murió Refugio. Cuando están arreglando a Refugio para meterla al féretro se presenta el siguiente diálogo: ¿Y sus santitos? ¿Ahora quién se los irá a cuidar? ¡Tantos como tenía!, -pues yo creo que de toda la vecindad era la que más tenía, -Pues y aunque se enoje Ramón me voy a llevar mi santito; me dijo (Refugio) a mi ―Mira Concha, cuando yo me muera te llevas el que más te guste; -Pues a mi me gusta esta, la Virgen de San Juan de los Lagos; ella (Refugio) me dijo ―te las llevas cundo me muera pa‘ que te cuide y te acuerdes de mi siempre‖ Se suscita una discusión entre las mujeres cuando Concha intenta llevarse el cuadro de la Virgen de San Juan de los Lagos. Hay un altar a la Virgen de Guadalupe en la pulquería, así como en el gimnasio. Cuando colocan a Refugio en la caja, Concha menciona que deben ser cuatro cirios los que deben de estar a rededor de la caja, se presenta el siguiente diálogo: -Ahora si para que vean; -así debe ser, concha si sabe; -si, luego luego se ve lo correcto; -si, la religión no nada más es ir a misa, mira que diferencia. En otra escena Refugio menciona a una de sus ahijadas que tiene problemas ―mira ese santito tan chulo nunca me ha fallado, ya veras como te va a ayudar‖ En una toma a primer cuadro se muestra el cuadro de la Virgen de Guadalupe y un ahijado recuerda cuando fue a con su madrina a pagar la manda a la Basílica de Guadalupe por haber salido de prisión. En el velorio dos dolientes platican y uno le comenta al otro: La vida y la muerte son buenas comadres verdad de Dios, solo que la vida es la comadre rica y poderosa, cuando ya no quiere algo a alguien se lo regala a su comadre la morida. Un ejercicio interesante se podría haber realizado con esta película, ello es, proyectarla a un público con determinadas características y registrar sus impresiones sobre la trama de la película y que idea les queda del barrio de Tepito así como de sus habitantes. Ya que las conductas que presentan los actores escapan a la idea de las formas correctas que uno debe seguir en un funeral. A eso le sumamos el hecho de que los varones que viven en la vecindad la mayoría no trabajan y viven del esfuerzo de sus mujeres que prestan sus servicios como lavanderas. La película Barrio de campeones se desarrolla en una vecindad del barrio de Tepito. Una familia conformada por la abuela, tres hijas, un hijo y dos nietos convergen en una habitación, por ello han construido un tapanco para maximizar el espacio. Será por el hecho de que el argumentista y director es de origen colombiano no plasma la esencia del interior de las viviendas, aun y cuando en su país había tratado temas relacionados con la violencia y la religiosidad (él es autor de la novela La virgen de los sicarios). La historia gira en torno a dos personajes: la abuela Doña Leonor y su nieto el boxeador. La primera es la columna vertebral de la familia y su trabajo en una fonda permite ayudar a su familia. El nieto tiene una oportunidad de boxear en una de las arenas más importantes y de ahí dar el salto a las peleas por el campeonato. La abuela desea comprar un local para instalar un restaurante, por ello dispone de sus ahorros de la vida y el traspaso de su fonda en el mercado. Entrega ese dinero a una agencia de bienes raíces, el cual la defrauda al igual que a otras personas. El Nieto se presenta en su pelea, resiste tres asaltos y cae noqueado en el cuarto asalto quedando malherido. Parece ser que los habitantes del barrio de Tepito están destinados a sufrir y no tener un final feliz; defraudados, abusados por la ley, atletas vencidos por el alcohol y promiscuidad es su sello distintivo. Aun y cuando la mujer es el centro de la familia y el varón es quien abandona los hogares; se tiene una idea negativa de las mujeres ya que consideran que son una carga para los padres y que sus oportunidades son menores; por ello siempre se desea el nacimiento de un varón. Los niños se expresan de las mujeres de la siguiente manera: ―puras viejas, que friega‖; ―Sáquese, esto no es para viejas‖ Cuando una mujer esta por parir, al llevarla al hospital una anciana le grita al esposo ―Ya no te preocupes, le voy a pedir a la virgen de Guadalupe para que te de un varón‖ Doña Leonor acude a que le lean las cartas para saber si ha de hacer el negocio del local o dejarlo pasar; su decisión depende de lo que las cartas le diga, ―Por mi, por mi casa, por lo que quiero saber‖ ―el tarot no se equivoca‖ La película Los fayuqueros de Tepito se desarrolla en la zona comercial del barrio de Tepito, al parecer en las calles de Tenochtitlán y la Rinconada. La mercancía que venden es la llamada fayuca, es decir, productos electrodomésticos y de electrónica que ingresan de manera ilegal a México. En esta actividad comercial se involucra toda una familia e incluso la casi totalidad de la vecindad donde se desarrolla la trama. Actividad perseguida por la ley y lucha interior por el control de la distribución de la mercancía; generará que las familias pierdan todo por los decomisos que son frecuentes para aquellos que no están coludidos con la ley. En esta película se recrea la idea de que el barrio se llama ―Tepito‖ por el hecho que un silbido anuncia el peligro para los que desarrollan su actividad (si pasa algo te-pito). Película que muestra la unión entre los habitantes de la vecindad ya que se unen cuando se van a cometer injusticias como el desalojo de una madre y su hija por deber seis meses de renta, así también cuando a una familia le decomisan toda su mercancía y se quedan con una gran deuda; ahí se utilizan las frases que cuestionan a toda la vecindad ¿Somos hermanos o no somos hermanos? ¿Somos ñeros o no somos ñeros? El solidaridad entre los habitantes de la vecindad –aunque dos mujeres se lían a golpes porque una mujer le pega al hijo de otra- y la amistad serán los valores que cohesionan a los habitantes del barrio. Película que trata de dignificar la actividad de fayuquero y presentar una imagen diferente a la que se conoce del barrio, se podría resumir en dos frases. - ―Una cosa es ser fayuquero y otra cosa es ser ratero‖ - ―Mira que atracar aquí en el barrio, ya ni la friega - Ante la desgracia ―Dios aprieta pero no ahorca‖ Con respecto a la religiosidad en el barrio de Tepito que presenta la película se puede destacar la presencia de un altar en el interior de la casa de la familia que juega el rol principal. Las imágenes religiosas que ahí se encuentran son: la Madre del Buen Consejo (esta imagen esta en la iglesia de San Francisco de Asís Tepito), San Judas Tadeo y un cuadro de Cristo Crucificado. En torno a este altar se presentan la siguiente acción: el hijo mayor esta robando el dinero que su madre guarda en el altar, es sorprendido por su madre, se genera una discusión y el hijo sale huyendo maldiciendo. La madre se queda viendo el cuadro de la Madre del Buen Consejo con ojos suplicantes. Por último, existe un altar a la entrada de la vecindad ya que quién pasa por ahí se signa ante la imagen (no se sabe cual es) que ahí esta. 2. 5. 3 El barrio de Tepito en el cine comercial y el video home de los años dos mil Los dos apartados anteriores que tenían que ver con las películas y documentales sobre el barrio de Tepito tienen una característica en común: están filmadas dentro del barrio de Tepito y los actores han trasladado su vida a las viviendas que conforman la vecindad. ¿Qué hay personajes sobre actuados? Tal vez, pero ahí están los actores, tratando de captar algo de los habitantes del barrio. Las películas muestran valores jerárquicos entre los habitantes como es la amistad, la solidaridad ante los eventos difíciles, la esperanza de que vendrá algo mejor, la fe puesta en los guantes del boxeador, los esfuerzos por evitar que la familia se desintegre, no dejarse humillar por los poderosos y otros valores más. Pues bien, la palabra Tepito va a ser considerada por los llamados video home (producciones de bajo presupuesto que se realizan en tiempo record) como una mercancía que tiene un consumidor cautivo alimentado por las notas cotidianas de asesinatos y lucha por el control del tráfico de drogas y armasen el barrio de Tepito. Las películas escogidas para este apartado son: - Barrio bravo de Tepito: Los caifanes de Tepito II (2001) - Tepito (2003) - Los gatilleros de Tepito: hijo de puta (2004) - Tepito barrio sin ley (2005) - Don de Dios (2005) De igual manera, en cada una de las películas pondré atención a los elementos que denoten el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. El video home Barrio bravo de Tepito: Los caifanes de Tepito II, aunque esta filmada en el barrio de Tepito, llama la atención que no muestra a sus habitantes, ni su actividad comercial. Por lo tanto, se infiere que la película aprovecho el día martes que no labora el barrio, además de la mañana y la noche en que no hay actividad comercial. Dos bandos disputándose el control del mercado de las drogas en el barrio de Tepito lo que arroja varias muertes por los dos bandos. Se muestra también otra cara del barrio de Tepito: el deporte como una posibilidad de salir adelante, por ello, se le hace saber a los niños en su entrenamiento de fútbol que el estudio es la vía para ser alguien de provecho en la vida. Por otra parte esta el box y con ello la posibilidad de una nueva vida y a decir de los actores ―una manera de agarrarse a trompadas, pero al menos por un dinero‖. La película deja entrever a través de los diálogos las diversas actividades ilícitas del barrio de Tepito, ellas son: Narcotráfico, venta de armas, venta de material apócrifo, asalto a mano armada. El siguiente diálogo entre dos personajes de la película deja entrever la idea que se tiene del barrio de Tepito: -¿Qué crees? Anoche decomisaron un cargamento de armas muy sofisticado y la mitad iba a llegar aquí a Tepito ¿cómo la ves? –No me extraña, aquí en Tepito puedes encontrar lo que sea, lo que tu quieras por más extraño que parezca. –Quién lo diría, Tepito lugar sin límites. De los escenarios religiosos nos muestra la iglesia de Santa Ana en dos ocasiones: la primera cuando el personaje central encuentra ahí a su novia y la segunda, cuando esta reclamando a Dios por el asesinato. En la misma escena, al salir el Procurador (padre de la hija asesinada y novia de quién reclama) sale y le da muerte un francotirador las afueras de la iglesia. Fuera de esta escena, no se toca el elemento religioso en ninguno de los espacios. La película es una especie de denuncia en contra de las autoridades corruptas que permiten el libre tráfico de armas en Tepito. Son dos diálogos que llaman la atención y que pueden resumir la esperanza por parte de los habitantes del barrio: Tienes que concentrarte en ser un buen boxeador, para que de esta forma puedas salir de toda esta mierda que nos rodea y nos toco vivir Ante el enfrentamiento generado por el intento de decomiso de mercancía apócrifa entre los comerciantes y las autoridades (lo que es un hecho verídico), un personaje reflexiona: Mejor deberían de ir tras los narcos en ves de estar jodiendo a la gente de aquí, que nomás busca subsistir en este país donde la injusticia es carajo En el video home Tepito se debe resaltar que que utiliza el nombre de Tepito y sin embargo no se filma en su espacio, ni aparecen actores con las características que los identifica (principalmente el lenguaje). Solamente al inicio de la película cuando están corriendo los créditos se presentan imágenes de la zona comercial y todas hechas a través de un auto en movimiento, no se hace una toma cerrada o un acercamiento. La trama gira en torno al robo y reventa de automóviles. Para ello, dos jóvenes serán los encargados de robarlos y entregarlos a los que contratan su servicio. Estos ladrones ascienden a escoltas de un líder de la red de robo de vehículos el cual sufre un atentado del cual sale airoso por la valentía de las escoltas. Ese acto les lleva a ser ascendidos a sicarios, pero uno de ellos traicionara los códigos de ética de la banda y en vez de ejecutar a uno lo deja ir por una cantidad de dinero. Robo de vehículos, autoridades judiciales corruptas, drogadictos y ejecuciones son asociadas directamente con Tepito en esta película. El aspecto religioso no se maneja en ninguno de los espacios en que se desenvuelven los actores, ni tampoco portan algún elemento que denote su pertenencia a un sistema de creencias. Tepito es una mercancía y su promoción y venta se hace con la idea que se tiene del mismo y no del conocimiento del barrio. En el video home Los gatilleros de Tepito: hijo de puta se trata de una producción que utiliza el nombre de Tepito, pero que no se realiza en escenarios abiertos del mismo barrio. A excepción del tema musical que interpreta un grupo de cumbia que se hacen llamar los ―Qleros‖ en donde, las letras de sus canciones se expresan en un lenguaje soez en una clara apología de la violencia. ―si te topas conmigo te voy madrear‖ chingas a tu madre‖ ―soy de Tepito y soy bueno para el tropo‖ y otras frases más se podrán encontrar en sus letras. ¿Dónde esta Tepito? Solamente en una toma que se hace a un hotel que esta dentro del barrio y un probable antro de nombre ―La Casa del Zaar‖, probablemente en una calle den donde dan muerte al Ajolote o en una esquina donde una persona de la tercera edad asesina y roba a transeúntes, por cierto, esta persona muere a balazos por intentar robar un vehículo. Quizás también pertenezca al barrio la calle donde se filmó una ejecución a un adicto que no quería pagar. Prostitutas jóvenes y de la tercera edad, padrotes que las explotan, narcotraficantes, sicarios, ladrones de todas las edades (incluye a los niños), autoridades corruptas y adictos son los personajes centrales de la película. El mensaje es claro: no te metas con la gente de Tepito porque ellos no se tocan el corazón para matarte. ¿Qué función cumple esta película? Aunque no es filmada en su totalidad en el barrio de Tepito, nos manda el mensaje de que nos debemos de cuidar de ellos, ya que hemos sido testigos de cómo una ladrón asalta y mata a una persona; de cómo un sicario le da muerte a un adicto ante la mirada de los niños que han interrumpido su juego para ver la ejecución. Esta frase puede resumir la película: ―ve y cóbrale una vez más, si no te paga chíngatelo, ellos solo con sangre entienden‖. No se toca ningún elemento que denote la religiosidad de los personajes en la película. El video home Tepito barrio sin ley, al igual que la anterior producción utiliza el prefijo Tepito y no presenta a personajes del barrio que pueden identificarse por su vestimenta o caló. Los personajes que aquí se presentan son diversos, unos son cholos pero del Este de los Los Ángeles, Cal., otros son pachucos y darketos. Película que no se realizó en el barrio de Tepito por los escenarios que presenta, además presenta un tipo de vecindad que es poco viable que exista en el mismo barrio. La trama de la película se desarrolla en las constantes batallas por la disputa del territorio para la venta de droga. Esas batallas arrojan muertos al por mayor, por lo que deja la impresión que la muerte es vista como algo natural en el espacio que supuestamente es el barrio de Tepito. La historia de cuatro jóvenes que viven situaciones difíciles: Uno engaña a su padre diciendo que estudia, pero se dedica a las drogas; una que estudia pero que roba dinero a una amiga; una mujer que es violada y uno que es trabajador pero se convierte en asesino por vengar el ultraje de la mujer que fue violada. No se maneja ningún tipo de elemento religioso en la película, ni oraciones, ni rituales o símbolos religiosos. Es de llamar la atención una escena en donde se desarrolla un baile en donde esta el grupo que quiere dominar el barrio; la música que se escucha es o bien cumbia o vallenato, el título de la canción es ―tengo los huevos bien puestos‖. Quizá por ello la película es una apología a la violencia en todas sus manifestaciones. La película Don de Dios muestra una cara similar a las anteriores producciones, solamente que en su realización se utilizo mayor capital y excelente logística que permitió grabar en diversas locaciones del barrio en las horas de comercio o la vida nocturna en el barrio. Por cuestiones de mercadotecnia la portada de la película presenta en primer cuadro una imagen de bulto de la Santa Muerte. Ello supone que en el desarrollo de la película un encontrara dicha imagen y sus posibles usos rituales propios de la imagen y el barrio de Tepito. Pues bien, en la película no sólo esta ausente el fenómeno religioso, sino que no aparece la imagen de la Santa Muerte en el desarrollo de la misma. Lo único que refiere la película en relación a la Santa Muerte, es el tema referido a la misma interpretada por un grupo musical llamado ―cartel de santa‖ y el tema se utiliza en varías escenas de violencia extrema que se presenta en la trama de la película. Si la imagen de la Santa Muerte esta en la portada y la trama de la película gira en torno al tráfico y distribución de drogas, sicarios, venganzas, venta de armas, disputa por el territorio, asesinatos de familias, desintegración familiar; además, en el inicio de la película se presentan varias escenas de actos delictivos que se desarrollan en la zona comercial del barrio, ellas son: Comercio de productos apócrifos, asalto a transporte público, asalto a transeúntes ya sea robando las bolsas de las mujeres o el conocido ―abrazo del diablo‖ (alguien llega y te abraza, entonces sabes que debes de entregar tus cosas). La trama de la película muestra un valor jerárquico entre los habitantes del barrio de Tepito, le llama la ―hermandad del barrio‖, ello es, no puedes traicionar a tus socios referidos a tus negocios, aunque puedes atentar contra otra hermandad del barrio. Estas hermandades tienen una característica fundamental en su conformación ―todos tienen los huevos bien puestos‖, por lo tanto, el temor a morir esta latente y para reducir el temor se debe eliminar al contrario (el que lo puede eliminar) La película tiene un personaje-narrador que es un pordiosero que deambula por el barrio y por ser un personaje neutral ya que no tiene familia, punto fijo de residencia, actividad laboral o círculo de amigos se convierte en el narrador ideal ya que puede moverse por todos los espacios, escuchar todas las platicas, observar todos los movimientos, es una persona que no incomoda a nadie porque lo que ve y escucha no lo comunica a nadie. Este personaje se encarga de presentar al espectador información sobre el barrio de Tepito, curiosamente toda la información tiene que ver con las actividades ilícitas que se desarrollan en el barrio; un ejemplo de ello es el prólogo de la película, en pordiosero ofrece las siguientes descripciones del barrio de Tepito: La venta de segunda, saldos de ropa, mercancía robada, bebidas adulteradas, armas y drogas es la práctica del barrio bravo. Estamos en un problema de seguridad nacional, es el santuario de la impunidad más grande del país. una fortaleza donde se concentra todo el crimen organizado, se distribuye la droga, la piratería, el secuestro, robo a transporte de carga, organización y distribución de armas. Lo que fueron viejas vecindades hoy son fortaleza, bodegas modernas con avances tecnológicos gruesos en materia de comunicación y conexión subterránea; verdaderas fortificaciones con personal armado dignas del crimen organizado. No hay barrio más antiguo, más famoso y más cabrón que Tepito. Más de un intento de reforma urbana se ha desvanecido desgastándose en sus implacables calles. La gente aquí mantiene la cabeza erguida con orgullo y el vecindario le debe su existencia. Nuestro lema es ―estoy orgulloso de ser mexicano, pero es un don de Dios ser de Tepito‖. ―Jorge desde chavito sabe lo que quiere, lo que cualquier morrito de barrio quiere llegar a ser: narco, padrote, jefe a lo cabrón…feria es feria― ―En tepito acecha la muerte, la ley del asfalto, tierra de nadie‖ ―Aquí en el barrio todos saben a lo que se dedican…al narco callejero‖ ―Es el santuario de la impunidad, donde las raíces de los intereses se saben, lo han sabido siempre, conocen los puntos rojos, han diseñado cartografías del crimen, es el barrio donde todo se consigue. Están los sectores, pedazos de asfalto bien delimitados, son el tradicional, arrabal de batallas, disimulos y mitos‖ Un barrio en constante disputa no solo por los bandos que pertenecen al barrio, sino por grupos ajenos al barrio. La película presenta un personaje de la política nacional que quiere apropiarse del mercado ilícito, para ello recurre a un de los personajes centrales que esta preso para ofrecerle su libertad y que sea punta de lanza en su deseo de apropiarse del barrio. Este personaje de la política refiere lo siguiente: ―Soy el presidente de un Partido Político, trabaje en el gobierno y tengo muchas influencias. Conozco como opera tu barrio, quiero ser dueño del territorio‖. Cuando este personaje central acepta el trato con el político sale del reclusorio y al llegar nuevamente al barrio manda el siguiente mensaje. ―Quiero que le digas a Reyes que estoy libre y que vengo por lo mío, Tepito es para los tepiteños cabrón y que ya regrese por mi barrio‖ 2. 6 Tepito, ¿sinónimo de miedo?: la construcción desde fuera del barrio de Tepito Parafraseando a Paloma Escalante (2007) diré que existen diferentes gremios que hacen uso de la palabra Tepito y que sus comportamientos están regidos por la forma en que también se posicionan del espacio, cada uno de esos usos nos remite a un campo semántico y actividades específicas. Con respecto a las formas en que se genera el miedo y los usos que se hacen del mismo, recurro al trabajo de Paloma Escalante (2007, p. 17-18) al cual se refiere como: Todo el miedo, de todos tipos y para todos los sectores juega un papel en la ciudad de México, en la forma en que se usa la ciudad, en la forma en que la gente se relaciona entre sí, la forma de vestir, los lugares y horarios para circular, etc., Esto no quiere decir que el miedo no tenga un referente y un origen en la realidad fáctica de la violencia, o que no haya un vínculo en algún punto entre ambas cosas, pero no hay correspondencia o una relación directa entre ambos. Los factores determinantes para el miedo son subjetivos y se fundan más en valores y prejuicios sociales que en la realidad del fenómeno a que ese miedo se refiere. Las causas del miedo son complejas y su permanencia lo es aún más y tiene que ver con procesos mentales de larga duración, que no se transforman al lograrse cambios en la incidencia, si no objetiva, al menos medible de la violencia. Los lugares y situaciones que generan miedo no son aquellos en los tenemos el registro más alto de las situaciones de violencia. Las situaciones peligrosas en términos de los delitos violentos que suceden en ellas, no son las más temidas o vistas como peligrosas. Las medidas que se pueden tomar en una ciudad como la de México para reducir la incidencia de delitos violentos y para aumentar la sensación de seguridad son de órdenes distintos. De hecho, según lo veremos con las cifras a que se puede tener acceso, en los últimos años podemos observar un incremento del miedo social generalizado y un decremento que comienza a ser significativo, de los delitos violentos. La pregunta sería ¿Le incomoda a los habitantes del barrio de Tepito la forma en como los presentan? O bien ¿Qué provecho sacan de esta forma en que los presentan? ¿Qué idea genera en el espectador las historias imágenes que presentan este tipo de películas? De acuerdo con Michael Taussig (1995) el lenguaje de terror esta asociado a la historia de cada región y dicho lenguaje siempre se nos vuelve en contra, al ser un diálogo superacelerado, forzando al sistema nervioso tanto hacia la histeria como hacia una aparente y apática aceptación, ambas, las dos caras del terror, el arte político de lo arbitrario, como de costumbre. Por ello, la palabra Tepito forma parte del lenguaje del terror de los habitantes de la ciudad de México por el tipo de información que llega a ellos. Pero resulta importante que la historia de la región no esta construida desde dentro en voz de los habitantes, sino desde una visión desde fuera a través de simples postales50 y de ahí, narramos lo que se piensa es el todo. Ahora bien, este lenguaje del terror no incomoda del todo a los habitantes del barrio de Tepito y se sirven del mismo para crear lo que Michael Taussig llama cordones sanitarios, en donde una de las ventajas es que el área deja de ser de fácil acceso; pero lo contrario es que se establece un franco rechazo hacia aquellos con los que se ha asociado el terror. Pero también este tipo de películas cumple con esa función básica de de crear ese cordones sanitario que permite que sus actividades se realicen con mayor soltura ya que el mensaje es claro…la gente de Tepito tiene los huevos bien puestos y quien se mete con ellos encuentra la muerte. Una pregunta que debe estar presente en este tipo de estudios es ¿Quiénes consumen este tipo de películas? Algo que queda en el aire pues mi investigación no incluye este tipo de consumo, sino el religioso. El material fílmico presenta a los habitantes del barrio de Tepito como gente que desconfía de los ajenos. Además, existe una idea negativa de la política y sus actores, de las instituciones gubernamentales y sus programas, de los investigadores y las universidades e institutos que los respaldan, de la jerarquía eclesiástica y sus anatemas en contra de sus formas de vivir lo religioso. Por 50 Este tema de las postales la he de trabajar en la etnografía del barrio de Tepito ello, en el barrio de Tepito siempre se debe estar atento del andar de los extraños y a la defensiva cuando se les pregunta. Un aspecto que sobresale en el material fílmico es la ausencia del ―final Feliz‖ y cuando se presenta uno es debido al sacrificio de uno de los actores, es decir, la muerte lleva a una reflexión y un replanteamiento de las conductas. Pues bien, puedo decir a estas alturas que después de hacer una extensa revisión y análisis a los usos de Tepito desde diversos campos ya estoy preparado para iniciar mi incursión en el barrio de Tepito con motivo de la elaboración de mi etnografía. Pero esto no es tan fácil como parece ya que la desconfianza de los actores y la negación de proporcionar información es con lo que se han encontrado las investigaciones de cualquier tipo que anteceden a la mía. Para ejemplificarlo recurro a la tesis de Guadalupe Quiroz (1992) que no tuvo problemas en la descripción del barrio, pero al realizar las entrevistas se encontró con que: En mínimas ocasiones en realidad la gente estuvo poco participativa, es decir, la gente si accedía a la entrevista, pero hubo quienes creyeron que estaban delatando su vida, sus intimidades familiares hasta cierto punto y de esto dependía mucho que se cerraran un poco más en su actitud y contestaciones, hasta llegar a responder en forma agresiva y cortante, con una expresión facial retadora, hubo quien hizo la observación de que si la información era manejada en forma diferente podría haber consecuencias, con un tono amenazador. Aunque mi investigación tiene que ver con la religiosidad en el barrio de Tepito, puedo pensar de manera inocente que no veré en situaciones similares a la de mi colega. Necesito de la tecnología para llevar a cabo mi trabajo y será un reto planear la estrategia para llevarlos y utilizarlos de manera abierta en un espacio donde los habitantes son recelosos del uso de este tipo de tecnología por parte de los extraños ya que consideran que el registro que toman tendrá un mal uso, además de que en ocasiones no distinguen entre el quehacer de un antropólogo y la de un periodista que siempre esta a la espera de la nota que ha de seguir reafirmando la idea de que el barrio es violento. Puedo acudir al barrio de Tepito con una actitud inocente pensando que los informantes me están esperando o bien, puedo plantear mis estrategias tomando en consideración las experiencias de mis antecesores. No soy ajeno a las versiones que existen sobre el barrio de Tepito y cuando se me pregunta si siento miedo al estar en ese espacio no dudo en contestar que si y que constantemente me embarga la idea de que al desempeñar mi labor antropológica soy candidato a ser asaltado o bien, si formulo una pregunta que no este bien planteada mi integridad física se vea trastocada. ¿Cuál es el origen de mi miedo? Si bien es cierto que desde mi temprana edad he tenido contacto con el barrio de Tepito por diversos motivos, el rol que jugaba no iba más allá de ser un comprador en potencia y cuando había recursos económicos lo era en acto. Desde esa temprana edad aprendí a moverme por las calles principales de la zona comercial siendo la calle de Jesús Carranza y sus locales peleteros los que justificaban mi presencia en el barrio. Así también fui parte del engaño de un comerciante a quién le compre un perro apócrifo y no porque me haya dado otra especie, más bien me dio una raza por otra, de ello me di cuenta al llegar a mi casa y descubrir que dicho perro tenía las orejas cortadas y cocidas, de tal manera que siempre estaban erguidas; de ahí una de mis primeras postales sobre las actividades que suelen ser típicas entre algunos comerciantes. Surge la pregunta ¿porqué no fui a reclamar al comerciante el engaño y reclamar la devolución de mi dinero? Esa acción no podía ser viable porque ya estaba educado de que ante tal eventualidad se debe de quedar callado y asimilar el evento como parte de las experiencias de la vida. Esta educación de la que hablo tiene su referencia en las historias que uno como consumidor escucha, siendo la principal de que no se puede reclamar al comerciante porque la integridad física peligra, de hecho nos educaron con las historias de consumidores que fueron golpeados por los comerciante. Esas historias sobre la zona comercial del barrio de Tepito son generadas y contadas entre los visitantes y consumidores a dicha zona comercial y que no se necesita sean corroboradas, forman parte digámoslo así, del manual de sobrevivencia del barrio de Tepito y puede parecer exagerado pero verdaderamente existe dicho manual aunque no esta escrito y que expondré a través de la investigación, especialmente en la etnografía. Sobre estos dos últimos usos me detengo a reflexionar sobre las estrategias que he de emplear para obtener los datos necesarios para realizar mi investigación en una zona que es considerada por las autoridades locales como de alto riesgo y por ello es una generadora de miedo. Todo puede estar perfectamente planeado en el escritorio pero puede diferir cuando uno ya esta en el campo ante los actores, por ello, he de abogar a mi capacidad de improvisación siempre pensando en los métodos de intervención social que plantea la antropología social. 2. 7 Estrategias a priori para realizar la etnografía en el barrio de Tepito He caminado por las calles del barrio de Tepito en las horas en que el comercio es la actividad principal y que por la cantidad de puestos que se ubican en las aceras no permiten observar el otro barrio: el de los nativos y el registro de su cotidianidad. Se que están ahí y que para lograr mis registros he de realizarlos en las horas en que los puestos y la actividad comercial no domine el barrio. Para la realización de mi etnografía el primer obstáculo a salvar es el miedo que evoca el barrio de Tepito. Siento miedo pero ¿acaso Renato Rosaldo (1991) no plasma en su obra los temores sobre la caza de cabezas de los ilongotes? O ¿Michael Taussig (1995) no plasma en su obra el miedo que siente cuando realiza su investigación en Colombia? Son dos los elementos que considero construyen esta percepción del barrio: a. la información que los medios de comunicación masiva tejen en torno al barrio de Tepito que lo consideran como un espacio violento, donde le atribuyen la paternidad de la ilegalidad y el desacato a las instituciones. Por ello, el barrio de Tepito es un generador de noticias que no van más allá de las ejecuciones y los decomisos de productos apócrifos, ejemplo de ello, el artículo de Miguel Cabildo y Raúl Monge (1999) publicada en la revista Proceso que se refieren al barrio de Tepito en los siguientes términos: En medio de sus derruidas calles y callejones, de sus maltrechas viviendas, de basura acumulada, por doquier, de cientos de esqueletos metálicos distribuidos a lo largo y ancho de la vía pública, de una pobreza aparente, subsiste un mundo subterráneo, el de la economía informal y el de los negocios turbios. Ambos están compuestos por mafias que, al margen de la ley, son capaces de hacer realidad fantasías, caprichos y sueños y, más todavía, de vender, falsificar, fabricar, robar y conseguir todo tipo de artículos o productos nacionales o de importación, legales o ilegales. Locales que en apariencia venden productos electrónicos, trafican con armas o drogas a gran escala; puestos de periódicos que son la fachada de negocios de prostitución; tiendas de abarrotes que sirven de disfraz para vende grapas de cocaína y alcohol a menores de edad; conjuntos habitacionales que funcionan como bodegas y nidos de delincuentes, y niños de la calle que forman partes de redes de distribución de drogas. b. La información que generan los nativos como barrio bravo que les permite –en los términos de Michael Taussig- delimitar un cinturón de asepsia que impide el paso de los ajenos a la cotidianidad de los habitantes del barrio. En este tenor no deben considerarse únicamente las narraciones que dan cuenta de ello, sino también las creaciones simbólicas que les permiten identificarse entre ellos y poner una barrera ente los extraños. Esta es la información con la que cuento para tener una idea del espacio y sus habitantes en donde he de realizar mi investigación, en donde, por sus características se necesita ser cuidadoso de lo que se pregunta e incluso del uso de tecnología en el levantamiento antropológico, ya que los habitantes del barrio los consideran un arma que va contra ellos. Para fines de la etnografía he dividido en tres zonas el barrio de Tepito y cada una de ellas implica la planeación de una estrategia para transitar por sus calles. En lo que he llamado zona A, la estrategia a seguir es transitar el espacio por la mañana ya que las calles lucen despejadas de puestos ambulantes y de talleres que ofrecen diversos servicios que se ubican en la acera de la calle. Por la mañana he de encontrar a los actores que considero son fundamentales para mi investigación. Considero que las mujeres serán mis principales informantes ya que de acuerdo al estado de la cuestión que elaboré son ellas donde descansa lo religioso del barrio. Por la mañana he de tomar fotografías a los altares erigidos en la vía pública y que es una de las actividades que me he propuesto para contar con un archivo gráfico que permita ser fuente de análisis para la investigación presente y las futuras. Pero la mañana no solo está pensada para mi levantamiento etnográfico. Está pensada para evitar –en la primera etapa- tener contacto con los varones del barrio que son los más reacios a proporcionar información y también porque son los vigías del espacio ya que es sabido que existe una red de observadores que al ver una persona sospechosa se le da seguimiento a cada uno de sus pasos. En lo que he llamado la zona B, la estrategia a seguir es transitar por la mañana y buscar el auxilio de uno de los habitantes del barrio de Tepito que goce de autoridad ya que ahí se encuentran una serie de multifamiliares en una especie de laberinto en el que es fácil perderse. Además que no debo pasar por alto las recomendaciones que los mismos habitantes hacen a los ajenos la cual es no transitar por los lugares donde se encuentren vecindades, multifamiliares ya que el riesgo de ser asaltado es más alto. En lo que he llamado la zona C, la estrategia a seguir es transitar el espacio cuando la actividad comercial este en su apogeo ya que mi intención es pasar como un cliente. Además de que si percibo amenaza a mi integridad puedo entrar a un negocio donde me sienta seguro. Aquí también considero acudir acompañado de un amigo que me auxilie en dos vertientes: la primera en el levantamiento etnográfico ya que por las características del espacio solamente dispongo de pocos minutos para hacerlo y segundo, transitar en pareja ya que los riesgos de ser asaltado se reducen. En cada una de las zonas también he identificado las rutas de escape para cuando perciba que mi integridad corre riesgo. Las avenidas principales, negocios atendidos por mujeres o personas de la tercera edad, paradas de autobús, centros de culto y módulos de policía son los puntos que he de ubicar para iniciar y terminar mi recorrido del día. Pues bien demos paso a la etnografía del barrio de Tepito con énfasis en las manifestaciones religiosas en le espacio público, principalmente los altares en la vía pública y con ello determinar lo que llamo el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. CAPÍTULO III. ETNOGRAFÍA DEL BARRIO DE TEPITO 3. 1 Describir el barrio de Tepito desde la unidad. En el capítulo dos presenté a un Tepito desde varias ópticas que van desde la forma en que los actores se describen, las formas en que los han descrito y las formas en que han explicado algunos de los elementos característicos del barrio siendo el más estudiado el de organización barrial en contra del Estado por el Plan Tepito y posteriormente la organización barrial por vivienda a raíz del sismo de 1985. Los investigadores y los periodistas han descrito al barrio de Tepito como una unidad. Su análisis parte de una postal de la cual se hilvana un discurso que valida una idea ya preconcebida, por ello, en cada casa habita un boxeador porque Tepito es cuna de boxeadores. Otra postal es la del albur, por ello se piensa que cada habitante del barrio maneja ese lenguaje codificado y que constantemente se esta midiendo en una lucha, en donde, el triunfador es quien maneja un lenguaje más codificado que su contrincante. Este tipo de lenguaje permite la conformación de grupos en donde se produce y reproduce el albur y aunque no es del manejo de toda la comunidad, investigadores y principalmente cronistas han tomado el albur como un elemento de resistencia hacia lo oficial. En fin, sobre el barrio de Tepito se puede hilvanar discursos que tengan un fin apologético de ahí que la unidad es fundamental para aquellos que buscan los elementos propios del ser tepiteño por ello, cronistas, novelistas, pintores plásticos y los productos de los diversos talleres en que se escribe cuento han plasmado en sus obras los elementos propios de ser tepiteño. Así también, los discursos que se hilvanan en abierta detracción de los elementos que forman parte de la dinámica del barrio, se elaboran a desde la unidad y toman el modelo de la postal como el más viable para hacer sus análisis del barrio de Tepito. ¿Por qué utilizar la postal como fuente de análisis y base de interpretación unilateral? Las propias características del barrio orillan tanto a investigadores de lo social, como a otras profesiones a hacer un uso excesivo de este recurso. Extraer la información del barrio de Tepito con cualquier medio de registro electrónico o escrito no es fácil. No importa el tipo de investigación, ni la profesión, ni el aval institucional que respalda a cada uno de los profesionistas. La información que cada uno de los profesionistas requiere para cubrir las necesidades propias de su área de conocimiento debe de se extraída en ocasiones de forma no tan ortodoxa y con ello me refiero que los instrumentos de registro no son exhibidos en el quehacer profesional, sino que se mantienen ocultos por ser un elemento diferenciador que puede que atrae la atención de los habitantes del barrio. Además, por las características comerciales en la vía pública del barrio de Tepito que están enmarcadas en la ilegalidad, los instrumentos de registro no pueden ser exhibidos ya que la información que se esta recabando puede ser – a la vista de los habitantes del barrio- utilizada en contra de ellos. Ejemplo ello, es el fragmento que cito de la tesis de Guadalupe Quiroz (1992): En mínimas ocasiones en realidad la gente estuvo poco participativa, es decir, la gente si accedía a la entrevista, pero hubo quienes creyeron que estaban delatando su vida, sus intimidades familiares hasta cierto punto y de esto dependía mucho que se cerraran un poco más en su actitud y contestaciones, hasta llegar a responder en forma agresiva y cortante, con una expresión facial retadora, hubo quien hizo la observación de que si la información era manejada en forma diferente podría haber consecuencias, con un tono amenazador. P. 395 La entrevista que se le realizó a la señora Francisca, puede estar no muy completa en algunos apartados porque no quiso responder abiertamente a las preguntas, algunas ni le fueron mencionadas, porque fue agresiva en sus contestaciones, pasaba de la indiferencia a la agresividad. Después de terminada la entrevista cambió un poco su actitud, tal vez porque yo ya no iba a escribir nada de lo que dijera, y parte de la información la obtuve mejor después, es decir, en forma de conversación. (p. 415) Por ello, el análisis del barrio de Tepito a través de las tarjetas postales es la forma más recurrida, por eso en las descripciones se presenta el área como una unidad, ya que plasmar la diversidad requiere de una constante negociación con cada uno de los actores y si uno se apega a un líder para con ello tener la vía despejada, solamente se podrá describir un universo micro ya que los liderazgos también tiene un área delimitada. 3. 2 Describir el barrio de Tepito desde la diversidad Siendo que mi interés son las manifestaciones religiosas de los habitantes y grupos del barrio de Tepito, haré mención que durante la elaboración del estado del arte o de la cuestión tome investigaciones de corte social, literaria y artículos periodísticos con el fin de ubicar las figuras religiosas centrales y los diversos rituales en torno a ellas. De acuerdo a esta información, es la Virgen de Guadalupe la figura central y en un segundo orden San Judas Tadeo. ¿Y el culto a la Santa Muerte? ¿En que espacio del barrio de Tepito tiene mayor presencia? Porque también, el análisis sobre las manifestaciones religiosas del barrio de Tepito se han hecho a través de las tarjetas postales y en el caso de la Santa Muerte se afirma que su culto esta arraigado en el barrio por la magnitud del evento ritual que se celebra cada primero de mes en la calle de Alfarería # 12. Para fines del presente capitulo he de seccionar el barrio de Tepito en tres zonas, que presentan características diferentes tanto en el posicionamiento de la vía pública y los espacios de tránsito por parte de los habitantes. En la descripción de los espacios pondré énfasis en toda aquella manifestación religiosa que va desde los altares que se erigen en la vía pública y las imágenes religiosas que ahí se encuentren, los artículos de corte religioso que portan los habitantes, los carteles que anuncian diversos eventos que están relacionados con lo sagrado. Así también, he de mostrar otros espacios que no están referidos al catolicismo popular y que van desde templos cristianos arraigados en el barrio de Tepito. Se deja abierta la ventana para incluir todo espacio público en que se establezca una relación del hombre con lo sagrado. Deseo dejar en claro que solamente considero susceptible de incluir en la descripción etnográfica las manifestaciones religiosas que los habitantes trasladan al espacio público. No es pretensión de la investigación el incluir los altares erigidos en las vecindades o Edificios de Renovación Habitacional a algún personaje sagrado, que dicho sea de paso y para sentenciar el dato, es la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo las símbolos mayores. Un estudio de este tipo requiere de mayor tiempo y de más participantes ya que los habitantes del barrio consideran al externo como un invasor de su privacidad. 3. 3 Ubicación geográfica del barrio de Tepito Lo ideal en este tipo de trabajos sería elaborar un mecanismo a través del cual se pudiera obtener de parte de los actores la delimitación del barrio de Tepito. ¿Cuál es el mojón donde empieza y termina el barrio de Tepito? Eso es completamente arbitrario y quizás no tenga que ver con una cuestión geográfica, sino de consumo simbólico, de participación ritual y del manejo de códigos tales como el lenguaje. Vuelvo al planteamiento de la unidad y la diversidad para formular la pregunta ¿Cuántos Tepitos hay en Tepito? De eso se trata esta etnografía, de plasmar la diversidad principalmente en sus manifestaciones religiosas de un área que se ha descrito desde la unidad. Por lo tanto y para fines de la investigación se parte de la delimitación territorial que sobre el barrio de Tepito hacen Armando Ramírez en su obra Tepito (1983), Alfonso Hernández en su artículo Tepito para los tepiteños (1986), Guadalupe Quiroz en su tesis de licenciatura en Antropología Social sobre la vivienda (1992) y el artículo de Georges Couffignal Misterioso tepito (1987). Georges Couffignal ubica al barrio de Tepito en dos delegaciones políticas: la Cuauhtémoc y la Venustiano Carranza. Resalta que los habitantes al oscilar entre estás dos demarcaciones políticas favorece la consolidación de organizaciones ciudadanas y políticas por el constante regateo político. Para Armando Ramírez los límites del barrio de Tepito van desde Reforma Norte, por Peralvillo, a las calles de Costa Rica, Canal del Norte y Ferrocarril de Cintura, con una población de 150,000 individuos. Miguel Cabildo y Raúl Monge (1999) Tepito tiene 57 calles, delimitadas por el cuadrante vial formado por las avenidas Paseo de la Reforma, Canal del Norte, del Trabajo y Granaditas y aquí difiere con Armando Ramírez ya que proporciona una cifra poblacional cercana a 50 mil habitantes. Para Alfonso Hernández (1986) el barrio de Tepito esta ubicado en el segundo perímetro del Centro Histórico; en dos delegaciones políticas: Cuauhtémoc y Venustiano Carranza; en dos colonias: Morelos y Ampliación Morelos; en tres distritos electorales: III, IV y V; limitado por las siguientes calles: al norte, Canal del Norte y Av. Circunvalación; al sur, República de Costa Rica y Ecuador; al oriente, Ferrocarril de Cintura; al poniente, Av. Peralvillo (ver mapa) Guadalupe Quiroz coincide con cuatro de los límites del barrio de Tepito: Canal del Norte, Circunvalación, Ferrocarril de Cintura y Costa Rica, pero amplia la frontera más allá de la calle Peralvillo hasta Paseo de la Reforma y con ello agrega por lo menos 22 manzanas más al área de Tepito, además que esta área extra es más identificada con la Lagunilla por el mercado de antigüedades que se establece cada domingo (ver mapa). Mónica Castro Ramírez y Juan Manuel Cordero Peña (2004) además de mencionar que Tepito pertenece a dos delegaciones políticas (Venustiano Carranza y Cuauhtémoc); ubican dentro del área del barrio de Tepito una sub área que será conocida como el corazón del barrio, cuyos limites se identifican de la siguiente manera: al norte, con la calle de Rivero; al sur, con el eje Uno Norte; al oriente, con el eje uno oriente y al occidente, con la calle Jesús Carranza. Estos límites son los más reconocidos de la zona comercial (ver mapa). Es importante mencionar que de los autores antes citados dos de ellos pertenecen al barrio de Tepito, uno de ellos es un invitado francés que hace un recorrido con un guía del mismo barrio, y por último, tres de ellos no pertenecen al barrio de Tepito. Armando Ramírez y Alfonso Hernández coinciden en la delimitación geográfica del barrio, mientras que Guadalupe Quiroz amplia el área del barrio de Tepito, en su investigación solo pone énfasis en las características de los habitantes, las condiciones de las viviendas y las organizaciones en torno a esa demanda. Finalmente, Mónica Castro y Juan Manuel Cordero ponen énfasis en el Tepito que más se conoce y que los habitantes llaman el corazón de Tepito, ya que ahí se concentra toda la actividad económica desde las 09:00 a las 19:00 horas de miércoles a lunes (se descansa el día martes excepto e temporada alta que es el mes de diciembre) y que de acuerdo con Armando Ramírez (1983) la densidad poblacional en eso que llaman corazón de Tepito llega a los dos millones de personas durante el día, cuando acuden compradores, visitantes y familiares de los tepiteños. Es importante mencionar que la obra Tepito de Armando Ramírez esta escrita desde su inicio como una etnografía y narra la historia del barrio de Tepito a través de personajes que encarnan la percepción que tiene tanto sus habitantes como los externos del barrio de Tepito. Esos personajes son: un boxeador, la experta en baile, el cábula, el teporocho, el ratero; en donde, a cada uno le da el micrófono para expresar su sentir, sus aspiraciones y sus desventuras. Este texto lo seguiré tocando a lo largo de la investigación y con respecto a esta parte que es la etnografía me permito citar la descripción general que el autor hace del barrio de Tepito. Tiene mercados importantes, el de Tepito atrae a verdaderas muchedumbres. Sus mercados son: la Lagunilla, Zona Tepito, Tepito fierros, Tepito Muebles, Tepito Ropa. Tiene clubes deportivos, de donde salen figuras populares y hasta famosas mundialmente: Club Tepito, Ramón López Velarde, el Florida. Los cines de Tepito son: el Bahía, el Florida, el Javier Solís, el Tepito, el Acapulco y uno con ínfulas de cine-club, la sala Chaplin. Hay seis jardines de niños, quince escuelas primarias, cinco secundarias, tres preparatorias, tres bibliotecas y una galería de arte llamada José María Velasco. Quien es inculto en Tepito es porque quiere. Pueblo religioso es, también, pueblo despolarizado; de todo hay en esta viña. Los católicos tienen su templo de Santa Ana, el del Carmen, el del Espíritu Santo, la iglesia de San Francisco de Asís, de San Sebastián. Hay una sola iglesia Cristiana Metodista, la protestante del Divino Redentor y el Templo Presbiteriano. Hay una Iglesia Espiritista y la iglesia de la creencia cristiana especial del Padre Alcalá. No hay grandes salas de baile, porque en cualquier calle de puede bailar. El barrio de Tepito comprende por un lado, parte de la Delegación Política Cuauhtémoc, por otro lado la Delegación Política Venustiano Carranza, los distritos electorales cuarto y quinto y hasta parece que tercero y además es la colonia Morelos y parte de la del Centro o sea el barrio de Tepito sólo existe en la mente de los habitantes del barrio como punto de identidad. 3. 4 Metodología Para fines de la investigación dividiré el barrio de Tepito en tres zonas que poseen características diferentes principalmente en el ámbito comercial. La primera zona que en lo sucesivo llamare zona A, está delimitada por la Avenida del Trabajo, Circunvalación, Ferrocarril de Cintura y el Eje Vial 1 Norte. La segunda zona que en lo sucesivo llamare zona B está delimitada por el Eje Vial 2 Norte (Canal del Norte), Peralvillo, Constancia y Avenida del Trabajo. La tercera zona que en lo sucesivo llamaré zona C comprende lo que líneas anteriores fue llamado como el corazón de Tepito delimitado por las calles de Rivero, Peralvillo, Avenida del Trabajo y el Eje 1 Norte. Para fines prácticos, se hizo el levantamiento etnográfico enumerando las manzanas de cada zona de ahí que su nomenclatura será conforme al caso A1, A2, A3…B1, B2, B3…C1, C2, C3… y así sucesivamente. La información estará dada por manzanas y al final de cada zona manifestaré las características generales de la misma, además de incluir información sobre lo que llamo anexos y que son zonas en donde se encuentran las escuelas, plazas cívicas, zonas deportivas, entre otras. 3. 5 Descripción de la zona A (Avenida del Trabajo- Circunvalación- Ferrocarril de Cintura- Eje 1 Norte) A1 A2 A3 A4 A5 A6 A7 A10 A8 A9 A11 A12 A13 A14 A16 A15 A17 A18 A19 A20 A21 MANZANA A 1 (Circunvalación- Talabarteros- Jarcería- Alfarería) Esta manzana se conforma principalmente por edificios multifamiliares. En la calle de Talabarteros # 8 se encuentra un altar en la vía pública cercano a la entrada del multifamiliar. Las imágenes que se encuentran al interior de altar son las siguientes: Al centro y en lo alto la Virgen de Guadalupe Al centro y en el piso una imagen de bulto de San Martín de Porres A la izquierda y la derecha de la imagen central se encuentran imágenes de bulto de San Judas Tadeo y en una de ellas a sus pies se encuentra una imagen de bulto pequeña que tiene colocadas varias pulseras con el nombre del santo y cuelga de su cuello un rosario. Al centro y pegado al cristal se encuentra un Ángel que de acuerdo a sus características pertenece a lo que se conoce como angelología. En la esquina de Circunvalación y Talabarteros se encuentra un altar en la vía pública, los elementos que contiene al interior son los siguientes: Un cuadro que representa la escena en que Juan Pablo II en una de sus visitas a México beso el cuadro de la Virgen de Guadalupe que se encuentra en la Nunciatura Apostólica. El detalle es que en esta representación se observa a Juan Pablo II besando la mano de la guadalupana. No hay imágenes de bulto MANZANA A 2 (Circunvalación- Talabarteros- Plomeros- Alfarería) En la calle de Plomeros # 28 se encuentra un altar en la vía pública y cerca a la puerta del edificio (Renovación Habitacional). Los elementos que se encuentran al interior del altar son: Al centro y en la parte alta las imágenes de la Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo y la Virgen de San Juan de los Lagos. A los costados diversas imágenes y cuadros tales como: El Sagrado Corazón de Jesús, un crucifijo, un cuadro de la última cena, un cuadro de la Virgen de San Juan de los Lagos En la calle de Talabarteros # 15 se exhiben un cartel que a la letra dice ―Bienvenido Señor de los Milagros a este tu predio‖ y otro cartel que indica el día 9 de enero, así como los nombres Esperanza, Guillermina, Alfredo, Lucero, Emma, Sergio, Josefina, Aurora, Margarita y Gloria que son inquilinos del predio y son los encargados de organizar la ceremonia que consta del rezo de un rosario y recibir al Señor de los Milagros que viene desde Xochimilco a decir de dos mujeres que tienen su negocio en la entrada del predio. En una de las vecindades de la calle Talabarteros se distingue sobre las demás porque la entrada de la misma parece ser un retablo en donde se puede apreciar en la parte superior a un religioso vestido con su hábito, cargando unos libros y sobre de estos un niño. Esta escultura contiene los elementos de San Antonio de Padua. MANZANA A 3 (Circunvalación- Alfarería- Plomeros) Sobre la calle de Plomeros se encuentra un altar en la vía pública (este altar se encuentra en la parte trasera de un edificio multifamiliar), en donde, al interior se encuentran las siguientes imágenes: Al centro y en lo alto s encuentra una imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe En la parte baja se encuentra pequeñas imágenes de la Virgen de San Juan de los Lagos, el Santo Niño de Atocha, San Miguel Arcángel, y San Judas Tadeo. Sobre la avenida Circunvalación y a lado de un negocio de tatuajes el cual por sus características lo describo: en la cortina metálica que protege el negocio se observa una pintura que hace alusión al movimiento cholo del Este de Los Ángeles, Cal. En frente de este negocio se encuentra una camioneta de transporte privado que tiene un rotulo de la Santa Muerte. A un costado del negocio de tatuajes se encuentra ―incrustado‖ un altar que tiene los siguientes elementos: Las dos únicas imágenes son: La Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo la cual tiene adherida pulseras con el nombre del santo y escapularios. La foto de un varón joven sobresale en primer plano. La esquina de Circunvalación y Alfarería se encuentra un altar con las siguientes imágenes: Es un altar de dos niveles protegido por cristales en cada uno de sus lados En la parte alta y fuera del recinto se encuentra el águila nacional En el segundo nivel y dentro del recinto se encuentra Nuestro Señor de Chalma. En el primer nivel del recinto se encuentra un cuadro de tamaño natural de la Virgen de Guadalupe A los costados y en el piso se encuentran imágenes de bulto de San Judas Tadeo. MANZANA A 4 (Jarciería- Pintores- Plomeros- Alfarería) En la esquina de Alfarería y Plomeros se encuentra u altar que a decir de los habitantes fue erigido en honor de un joven que cayó muerto. Las características de este altar son las siguientes: Solamente dos imágenes: la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo. Otros elementos: un árbol navideño y un oso polar con la leyenda Coca- Cola, además de varias esferas. En la calle de Plomeros # 27 se encuentra un altar en la vía pública situado cerca de la entrada de un edificio de Renovación Habitacional. Las imágenes que contiene el altar son las siguientes: Virgen de Guadalupe, Santo Niño de Atocha, San Judas Tadeo, Nuestro Señor de Chalma, el Divino Niño. En las imágenes de San Judas Tadeo y los crucifijos que representan al Señor de Chalma, se aprecia que llevan colgado rosarios y pulseras con el nombre del santo En la calle de Alfarería se encuentra un altar en la vía pública en frente de un taller de hojalatería y pintura. Las características del altar son las siguientes: Al centro y en lo alto se encuentra un cuadro que proyecta dos imágenes de acuerdo al ángulo del que se observe, una de ellas es la Santísima Trinidad y la otra es la Virgen de Guadalupe. A un costado se encuentra un cuadro del Sagrado Corazón de Jesús, un cuadro de la Virgen de Guadalupe, un cuadro y una imagen de bulto de San Judas Tadeo. Esculturas de un Ángel y María como las que se utilizan en los nacimientos. Cuando estaba tomando fotografía en Alfarería # 46 me llamó una persona de otro taller. Al terminar de tomar las impresiones acudí a su llamado. Me dijo ―no me haga menos a la mía‖ y me mostró su altar guadalupano que se encuentra en el interior de su taller de hojalatería y pintura. Me dispuse a tomar fotografía y mientras los hacía me comentaba que él y muchas personas del barrio son peregrinos y que el mes de enero es cuando muchos salen a los santuarios principalmente el de San Juan de los Lagos y Plateros. Las características del altar son las siguientes: Un cuadro de tamaño natural de la Virgen de Guadalupe adornado con luces multicolores. A los pies del cuadro se encuentra Nuestro Señor de Chalma y una imagen de bulto de San Judas Tadeo. MANZANA A 5 (Circunvalación- Plomeros- Alfarería- Pintores) No se encontraron altares en la vía pública MANZANA A 6 (Carpintería- Circunvalación- Pintores) No se encontraron altares en la vía pública MANZANA A 7 (Jarciería, Alfarería, Peluqueros- Pintores) Sobre la calle de Pintores se encuentra un complejo habitacional de grandes dimensiones, ocupa prácticamente la mitad de la calle Pintores. En la esquina de Jarciería y Plomeros se encuentra un altar en la vía pública que contiene los siguientes elementos: En el centro encontramos una imagen de la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo Una imagen de San Antonio de Padua Sobre la calle de Pintores se encuentra un complejo habitacional de grandes dimensiones, ocupa prácticamente la mitad de la calle Pintores. Sobre la calle de Jarciería # 183, en la parte alta de una vecindad se puede leer el siguiente letrero: Excursión a San Juan de los Lagos y recorrido al Niño del Cacahuate. Salida el 30 de enero a las 11: 00 p.m regreso de San Juan el día 1º de febrero a las 11: 00 p.m del 2009. Costo 400 pesos. Informes en Jarciería 183 B-101 con Verónica. En la esquina de Alfarería y Pintores se encuentra un altar en la vía pública, los elementos que forman el altar son los siguientes: El altar tiene una forma octagonal con una cúpula y sobre de ella encontramos una imagen de tamaño natural de Cristo Rey (el del Cerro del Cubilete y/o jubilete, Gto.), la bóveda –de color blanco- tiene grabada una corona de espinas. Cada uno de los lados tiene un cristal de gran tamaño y en cada lado se exhibe cada uno de los santos y vírgenes que a continuación se describe: Lado 1. Imagen de tamaño natural de San Judas Tadeo Lado 2. Imagen de bulto de tamaño pequeño de la Virgen de San Juan de los Lagos y una imagen de bulto de tamaño mediano de la Virgen de Guadalupe Lado 3. Imagen de bulto de tamaño natural de San Charbel con decenas de listones de varios colores con inscripciones en los mismos. Lado 4. Imagen de bulto de tamaño natural de San Miguel Arcángel. Lado 5. Imagen de bulto de tamaño mediano del Santo Niño de Atocha Lado 6. Imagen de bulto de tamaño natural de San Francisco de Asís Lado 7. Imagen de bulto de tamaño mediano del Divino Niño Jesús Lado 8. Imagen de bulto de tamaño natural del Sagrado Corazón de Jesús. En el centro del interior del altar se encuentran las siguientes imágenes: Al centro y en la parte alta se encuentra Cristo Crucificado Al centro y en piso se encuentran imágenes de bulto de la Santísima Trinidad, Virgen de Guadalupe y la Virgen de Juquila. Visto desde dentro, en una pared se encuentra el Divino Rostro. Cada una de las imágenes tiene al pie la oración ―oficial‖ del santo, además tienen al pie en una placa metálica grabado el nombre de cada santo o virgen. Las personas que pasan se signan ante el altar y algunas dejan monedas en el interior las cuales recoge la persona que atiende el altar. MANZANA A 8 (Alfarería- Pintores- Carpintería- Peluqueros) En la esquina de Alfarería y Pintores se encuentra un altar que a decir de las personas que ahí desempeñan sus labores como hojalateros y pintores tiene más de 25 años. Tal y como lo expresan ellos, este no es un altar que se hace, sino que se hizo y es que el altar se encuentra en un hueco del tronco de un árbol que aun florece y el cual esta pintado de azul. Ahí se encuentran minúsculas imágenes cubiertas por un cristal con el rostro de Cristo fotograbado en color dorado. Al igual que cada una de las personas que les pido permiso para tomar fotografías, me preguntaron sobre el fin de la investigación. Después de explicar de qué se trata, me dieron todas las libertades para realizar mi trabajo. Las imágenes que se encuentran al interior son: San Judas Tadeo Virgen de Guadalupe Santo Niño de Atocha Virgen de Juquila Virgen de San Juan de los Lagos San Charbel Majluf En la esquina de Pintores y Alfarería se encuentra un altar en la vía pública y que no lo separa más de seis metros del altar del árbol. Este altar requiere de muchos cuidados –al igual que todos- ya que tiene dos jardineras con sábila y rosas. En la parte trasera del altar esta pintada una gran cruz sobre un fondo blanco. Las imágenes que contiene este altar son los siguientes: Cuadro e imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Dos crucifijos que connotan a Nuestro Señor de Chalma ya que llevan colgados dos cintas que tienen la inscripción recuerdo de mi visita al Santuario de Nuestro Señor de Chalma. Imagen de bulto de San Judas Tadeo –con escapularios y pulseras prendidas de la imagenImagen de bulto del Sagrado Corazón de Jesús –con escapularios y pulseras prendidas de la imagen. En la calle de Pintores # 45 se encuentra un altar en la vía pública. En este domicilio se encuentra un negocio de venta de agua purificada y tiene un espacio grande que sirve de pensión de automóviles. Las imágenes que contiene dicho altar son las siguientes: Un crucifijo con un Cristo Negro (parece ser el Señor del Santo Veneno que se encuentra en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México y al que la Arquidiócesis Primada de México a través del semanario Desde la Fe hace un llamado a los feligreses que dejen el culto a la Santa Muerte y para ello deberían de ir a dejar las imágenes a los pies del Señor del Veneno). Una imagen de bulto pequeña de San Francisco de Asís bajando de la cruz a Cristo. Una imagen de bulto de San Judas Tadeo Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Una imagen de bulto de un Ángel (como los que se utilizan en la ―angelología) Una imagen de bulto que representa una de las tres caídas en la Pasión de Cristo. En la calle de Pintores # 57 (esquina con Carpintería) se encuentra un altar en la vía pública. Las imágenes que contiene este altar son las siguientes: Al centro Cristo Crucificado con varios escapularios pendiendo del cuello (este tipo de características nos hace pensar que se puede tratar de Nuestro Señor de Chalma). Una imagen de bulto de San Judas Tadeo con escapularios y rosarios que penden del mismo. Una estampa de San Lázaro Un cuadro pequeño de la Virgen de San Juan de los Lagos. Una vitrina con una imagen de San Judas Tadeo en su interior con varios escapularios. Un cuadro del Sagrado Corazón de Jesús Dos oraciones pirograbadas en madera En la calle de Peluqueros casi con esquina con Alfarería se encuentra el Templo Bethel perteneciente a la Iglesia Metodista de México A.R. Se trata de una estructura de dos pisos, en una de las alas muestra una gran cruz en color rojo elaborada con cristales u acrílico. La construcción no da señas de que haya sido adaptada para el culto, parece ser que se diseño esta construcción, por lo tanto, se puede tratar de un templo con mucho arraigo en el barrio de Tepito. MANZANA A 9 (Alfarería- Pintores- Ferrocarril de Cintura- Peluqueros) Sin altares en la vía pública MANZANA 10 (Jarciería- Alfarería- Peluqueros- Panaderos) En la esquina con Alfarería se encuentra un altar solamente con una imagen de bulto de Virgen de Guadalupe. En la acera de Alfarería # 24 se encuentra un altar con las siguientes imágenes: Al centro y arriba un cuadro de la Virgen de Guadalupe Al centro y abajo un Cristo crucificado con escapularios y rosarios pendiendo de la cruz, Una imagen de bulto de la Virgen de San Juan de los Lagos Una imagen de bulto de San Miguel Arcángel Imagen de bulto del Divino Niño con juguetes como ofrenda San Judas Tadeo San Charbel Majluf Cristo Rey Cuadro del Niño de las Suertes Imagen de bulto del Santo Niño de Atocha Imagen de bulto de San Simón un santo popular que se representa sentado con cigarro en la boca, con sombrero y una botella de licor en una mano. MANZANA A 11 (Alfarería- Peluqueros- Mineros- Carpintería) En la esquina de Alfarería y Panaderos se encuentra un altar de dos niveles (4 a 6 metros de alto aproximadamente) en que cada día ocho de mes se celebra una gran fiesta. Las imágenes que conforman el altar son los siguientes: En el segundo nivel: Al centro y en lo alto un Cristo Negro crucificado y a los lados dos imágenes de bulto del Santo Niño de Atocha que se encuentran dentro de urnas. En el primer nivel: al centro una imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo. Un detalle que llamó mi atención es un letrero ubicado en la parte trasera del altar que a la letra dice: ―A la persona que sea sorprendida haciendo sus necesidades o tirando basura se le partirá la madre, respete a la virgencita‖. MANZANA A 12 (Carpintería- Peluqueros- Ferrocarril de Cintura- Panaderos) Sin Altares en la vía pública Sobre peluqueros se encuentra un templo en un predio de grandes dimensiones que exhibe dos espectaculares que a la letra dicen lo siguiente: Primer espectacular con dos elementos gráficos: una paloma y una Biblia abierta JESÚS CRISTO ES EL SEÑOR Iglesia Cristiana en restauración REMANENTE NUEVO Sirviendo para interceder SGAR/2938/2007 Segundo espectacular con dos elementos gráficos: verdes campos y una montaña en el horizonte SIGUE EN PIE A. de Jesucristo Daniel Castañeda Álvarez…estamos contigo JESUCRISTO ES FIEL Ahora os digo: Apartaos de estos hombres, y dejarlos: porque si este consejo o esta obra es de los hombres se desvanecerá: más si es de Dios, no lo podéis destruir: más no seas tal vez hallados luchando contra Dios. (Hech. 5:3 8-39) LA IGLESIA CRISTIANA EN RESTAURACIÓN ―MARANATHA‖ ESTA CONTIGO. MANZANA A 13 (Alfarería- Jarciería- Mineros- Panaderos) En la esquina que forma la cera de Alfarería y Panderos se encuentra un altar a las afueras de un estacionamiento. Las imágenes de este altar son las siguientes: Al centro una imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Dos Imágenes de Bulto de San Judas Tadeo, en una de ellas hay escapularios y un rosario pendiendo del cuello. En la acera de la calle jarcería y las espaldas de un complejo multifamiliar se encuentra un pequeño altar a lado de una tienda de abarrotes que despacha por una ventana. Las imágenes que conforman este altar son las siguientes: Imagen de bulto del Sagrado Corazón de Jesús Imagen de bulto del Santo Niño de Atocha Imagen de bulto de San Judas Tadeo En la acera de Alfarería # 1251 se encuentra el Santuario de la Santa Muerte en Tepito52 que ha sido objeto de investigaciones de corte social, notas periodísticas, así como de diversos comentarios de la Iglesia Católica Mexicana a través de su órgano de difusión Desde la Fe de social. El ritual que cada primero de mes que se realiza en este espacio ha sido descrito en mi Ensayo Científico con el cual obtuve el grado de Maestro en Antropología Social de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (García, 2006). En mi anterior trabajo por sus características deje de lado la descripción de los elementos simbólicos, los elementos que se ofrendan a la imagen de la Santa Muerte que ahí reside y las oraciones o testimonios escritos o gráficos que los devotos depositan en ese espacio. La descripción que ofrezco a continuación es a través de los elementos gráficos y escritos que ahí se encuentran, ellos son: En lo alto y a lo largo de la calle Alfarería se aprecia una manta que en extremos muestra una fotografía del nicho de la Santa Muerte y en la parte central una leyenda que a la letra dice: 51 Agradezco a la Señora Enriqueta Romero por haber permitido el tomar los registros gráficos. Por segunda ocasión su ayuda a sido de gran valía…mil gracias. 52 La denominación Santuario Nacional de la Santa Muerte fue utilizado en un principio por Monseñor David Romo Guillen que oficia en la calle de Bravo # 35 en la también colonia Morelos. Posteriormente también se utilizo esta denominación en el espacio de Alfarería # 12. desde mi perspectiva ambos cumplen con la función de santuario ya que las imágenes que ahí se encuentran han cumplido milagros, por ello los devotos realizan peregrinaciones a ambos espacios y no hacen distingo uno de otro. Se invita al 7º aniversario de la SANTÍSIMA MUERTE que se llevará a cabo el 31 de octubre 2008 a las 12:00 de la noche en Alfarería N. 12 entre mineros y panaderos. En la parte central del santuario se encuentra un retablo que hace la función de puerta y el pequeño espacio que queda entre éste y el nicho simula el atrio. Este retablo posee los siguientes elementos simbólicos: En la parte central se encuentra un mundo y en medio la Santa Muerte y debajo del mismo la leyenda 7º aniversario, A los costados del mundo se encuentra una guadaña y una balanza, Tiene dibujados alcatraz y girasoles, dulces y manzanas, La leyenda que se encuentra en la parte central dice a la letra: No temas a donde vayas que has de morir donde debes. Un anuncio que oferta servicios relacionados con el culto a la Santa Muerte, que a la letra dice: Se dan rosarios y se visten santas muertes, informes con “N” o “N” en Caridad N. ¿? y un número de celular 53. Un anuncio que anuncia la ceremonia de cada primero de mes que a la letra dice: Se invita al rosario para la Santísima Muerte el día domingo 1º de febrero a las 8 de la noche. Una manta de 2 metros con una oración para pedir a la Santa Muerte que a la letra dice: ORACIÓN MARA COMENZAR EL DÍA Señora Santa Muerte, dame esperanza, una esperanza de 24 horas, Día tras día aparta de mí la tristeza y no la entregues a ningún otro, Planta en mi corazón la semilla del amor, para que mi vida De abundantes y ricas cosechas. Ayúdame a transformar mis rivales en amigos, Saca de mi alma las arrugas, feas del odio, Que en envejecen antes del tiempo. DAME ¡OH! SEÑORA SANTA MUERTE El equilibrio para reconocer mis defectos y para Poder enmendarlos, venda mis ojos para que Comente y amplíe los defectos ajenos. Dame el coraje y la fuerza de saber perdonar Y apartar de mi, Señora Santa Muerte cualquier 53 Se han omitido los nombres, dirección y teléfono de los que ofertan el servicio ya que no los he contactado para obtener la autorización para que aparezcan sus datos. Deseo de venganza, que no tolerante sin ser cobarde, Perseverante sin presunción, Activo sin orgullo. (Ilegible)…del cordero ingenuo ante los (Ilegible)…que no sea un león ante los débiles. Señora Santa Muerte, que yo sea justo y leal, Comprensiva y optimista; una mujer (hombre) De profunda fe y oración y lo demás me vendrá Todo por añadidura con (ilegible)... y tu amor; Por que tú, Señora Santa Muerte eres mi protectora. A lado del nicho de la Santa Muerte se encuentra el acceso a la vivienda de la familia Romero que ha sido modificado para ofertar artículos relacionados con el culto, ahí se encuentran libros especializados, dijes, pulseras, inciensos, imágenes de bulto de la Santa Muerte y otras deidades Orishas, escapularios de la Santa Muerte, veladoras de diversos colores y aromas, en fin, la gama de productos es diversa. Se exhiben diversos recortes periodísticos que hablan sobre el culto a la Santa Muerte y en especial aquellos que hablan sobre el de Alfarería # 12. A un costado del nicho de la Santa Muerte se encuentra un espacio techado en donde los devotos dejan sus veladoras, la cantidad de las mismas es considerable no importando el día en que se visite el mismo. El espacio también alberga las diversas manifestaciones de fe que los devotos dejan a la Santa Muerte, entre ellos se encuentran desde figuras esqueléticas que aluden a la Santa Muerte y cuadros con oraciones. Entre los cuadros que ahí se encuentran me llamo la atención una pintura que un devoto ofrendó a la Santa Muerte y que para fines de la investigación considero oportuno describir. De las diversas iconografías de San Francisco de Asís existe una que quizás es la más reconocida cuando esta bajando de la cruz a Cristo. Pues bien, en este cuadro se plasma el mismo pasaje con una variación que es un esqueleto con aureola en el cráneo vestido con el hábito franciscano que es el que esta bajando de la cruz a Cristo, incluye una leyenda que a la letra dice: Dios contigo Santa Muerte...tus almas. Finalmente, incluyo la descripción de los elementos que se encuentran en el nicho, ellos son: La imagen de bulto principal de la Santa Muerte mide aproximadamente un metro y medio de alto y en sus manos diversos dijes y cadenas. En este mes de enero54 estaba vestida de color azul con corona en el cráneo. A decir de la señora Enriqueta Romero este vestido y la corona son propios de Yemayá una entidad Orisha y la Santa Muerte es equiparada con Oyá la deidad orisha del cementerio. En las tres paredes que forman el nicho se encuentran fotografías de la imagen de la Santa Muerte con los diversos vestidos que ha portado. Hay imágenes de bulto de entidades Orishas como Yemayá, Oyá y Eleggua y con ella las ofrendas que les son propias que son arena de playa, caracolas, estrellas de mar y collares de color azul, La Catrina creación de José Guadalupe Posadas y un ángel que en vez de rostro presenta un cráneo. Las ofrendas que se encuentran afuera y a los pies del nicho son diversas y van desde una orquídea en una caja de cristal, manzanas, berenjena, cigarros y dulces. En la entrada al nicho se encuentra pintado en la calle un símbolo Orisha el cual presento en imagen ya que describirlo podría modificar el sentido, este es: Finalmente, mencionó que no importando el día que se visite el altar los arreglos florales están siempre presentes y por ello el olor que desprenden dan al espacio un toque especial. 54 Una de las características del culto a la Santa Muerte es que cada mes se le hace un cambio de vestido a las imágenes, para mayores detalles ver en: García, Roberto; El culto a la Santa Muerte: mito y ritual en la ciudad de México, Ensayo científico para acreditar el grado de Maestro en Antropología Social, ENAH, México, 2006 MANZANA A 14 (Alfarería, Carpintería- Mineros, Panaderos) En la acera de Alfarería hay un altar en la vía pública55 que contiene las siguientes imágenes: Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Imagen de bulto de la Virgen de San Juan de los Lagos Un Cristo Crucificado Sobre la acera de Panaderos y a las afueras de una pensión de autos se encuentra un altar en la vía pública que luce en mal estado, al parecer esta abandonado. Las imágenes que contiene el altar son las siguientes: Imagen de bulto de San Juan de los Lagos Un cuadro de la basílica de San Juan de los Lagos Imagen elaborada en plástico de San Judas Tadeo Una Biblia MANZANA A 16 (Alfarería- Jarciería- Mecánicos- Carpintería) En la esquina de Mineros y Carpintería se encuentra un altar monumental que también fue motivo de interés de Cristina Pacheco quien entrevisto a uno de los encargados de atender el mismo. Las imágenes que contiene el altar son las siguientes: Un mural que representa las apariciones de la Virgen de Guadalupe al indio Juan Diego. También incluye a Juan Pablo II, Cristo Rey sentado en un trono que es jalado por leones, un grupo de hombres con rostros bien definidos que portan estandartes con imágenes de santos y vírgenes, el Santo Niño de Atocha y en la parte baja se encuentra Eleggua una deidad Orisha. La estructura del altar esta dividida en tres niveles y dos arcos. En lo alto de la estructura principal, así como en un arco se encuentra dos cristos crucificados de grandes dimensiones. 55 Este altar fue motivo de charla en el programa Aquí nos toco vivir el cual se trasmite el día sábado por el canal Once del IPN. Este programa lo dirige Cristina Pacheco cuyo formato es la entrevista a personajes de los barrios o colonias. En esta entrevista el propietario del altar relata la historia del mismo y sus recuerdos de la vida en vecindad. Cristina Pacheco le hace una pregunta que tiene que ver con el hecho de tener en el frente el altar de la Santa Muerte a lo que contesta que ―cada quién sus creencias…yo respeto y que me respeten‖. No establecí contacto con el propietario ya que la manera en que Cristina Pacheco llevó la entrevista me arroja material de análisis ya que formuló preguntas similares a las que hay en mi formato de entrevista. Dentro del altar se encuentra imágenes de bulto de: San Miguel Arcángel San Judas Tadeo Virgen de Guadalupe Santo Niño de Atocha Sagrado Corazón de Jesús Virgen de la Candelaria San Francisco de Asís El Niño del Cacahuatito que se encuentra en una urna con juguetes como ofrenda fotografías de varias personas San Lázaro Santísima Trinidad Santa Clara de Asís ANEXO 1 (Jarciería- Mineros- Alfarería) Sobre la acera de Jarciería se encuentra una manta que a la letra dice: COMUNIDAD CRISTIANA DE MÉXICO EN TEPITO A.R SGAR 364/93. ANEXO 2 (Jarciería y Av. del Trabajo) Entre la calle de Jarciería y Av. del Trabajo se encuentran unas canchas de básquetbol y la plaza de armas. Ahí encontramos un altar en donde las imágenes son las siguientes: Imágenes de bulto de San Judas Tadeo y la Virgen de Guadalupe, Un Cristo Crucificado Un cuadro del Santo Niño de Atocha Una cuadro con una fotografía en blanco y negro de una familia A un costado del altar y sobre el sentido que lleva la Avenida del Trabajo se deposita la basura que genera la zona comercial (que inicia cruzando la avenida), aquí la lógica comercial se impone, por ello la máxima de no tirar basura en los altares no se aplica porque responde a otra necesidad. 3. 5. 1 Características generales de la zona A La densidad poblacional habita en un alto porcentaje en las diversas unidades habitacionales que fueron construidas a través de dos programas, el primero de ellos el Plan Tepito en la década de los 70‘s y el segundo, las Unidades de Renovación Habitacional construidas a partir del sismo de 1985. Si bien la investigación privilegia el aspecto religioso de los habitantes de Tepito y sus manifestaciones religiosas en la vía pública; es necesario presentar el espacio intimo de los habitantes del barrio que se remite a su casa habitación y la vecindad. Así también, se incluye la descripción que sobre las calles y personajes del barrio de Tepito hacen sus cronistas y habitantes que han escrito sobre ello. Primeramente recurro a la descripción que hace Armando Ramírez en su novela Quinceañera de cómo percibe el tepiteño su espacio privado: Al amanecer la vivienda donde vive el Alejo huele a sueños desmañanados y olores acumulados, los ronquidos y los empujones ordenan la quietud de ese cuarto-total. Cuarto-habitación. Cuarto-tapanco. Cuarto-sala. Cuarto- convivencia. Cuarto-comedor. Cuarto-cristiandad. Cuarto-hechos bolita. La mira informe, la mira cansada, la mira ya sin el mirar del cachondeo. Se sabe con toda certeza de la fatalidad que es el viejo de su vieja y el Padre-temor de los niños dormidos, de esos niños regados acurrucados por el tapanco y el suelo del Cuarto-dormitorio… Entra al Cuarto-ropero y se pone una playera…Oye la voz de Doloritas: ―Ya vente a desayunar…‖, le llegan los recuerdos olorosos de chorizo y la textura de la tortilla recalentada, ya sabe cual será el almuerzo, hoy, cuando pare de trabajar un rato en el taxi… La mamá grita en el sueño del Cuarto-útero: ―Alejo, levántate cabrón, es muy tarde, don Chente es muy enojón. (Ramírez, 1987, p. 21-23) ¿Qué es un tapanco y que función cumple en los cuartos de las vecindades? Armando Ramírez lo describe en su novela Tepito56, así como la función que cumple en las familias. Mi cuais vive en un tapanco, producto de su ingenio, es que él viene de una familia donde sus miembros son doce, habitan una vivienda que tiene un 56 Esta novela la escribe Armando Ramírez como una etnografía y presenta en la misma los espacios y su función, así como los personajes típicos del barrio de Tepito, sus actividades económicas y el nexo que tiene el barrio y sus habitantes con lo sagrado, por ello, la novela será base en esta etnografía. cuarto, la azotehuela y la cocina, entonces Lao se dijo que: la pared no es lo que hace la habitación sino que el hueco hace al cuarto, y se volvió a decir para qué tanto hueco si ocupamos menos de la mitad, y decidió dividir el hueco en dos cuartos, uno abajo y otro arriba y cuando los hubo terminado, soltó el serrote, se secó el sudor, descansó, admiró su obra y se dijo, se llamará: tapanco. (Ramírez, 1983, P. 84) Sobre las vecindades Ramírez se refiere de la siguiente manera: Lao lo sabe, la vecindad era antes casa, caserón, casota, donde vivían los españoles que las podían en sus tiempos, con barandales estilo art noveau, pasamanos, cuartos de techos enormes con decorados de la Belle Epoque y patios con aljibes que al final de cuentas no podían negar su origen por más que estuvieran en tierras nuevas. Y Lao vuelve a recordar que donde antes vivió una familia y sus sirvientes, ahora viven veinte o veinticinco familias haciendo una vida más comunitaria, por eso Lao dice: las cosas que no están se buscan para encontrarlas. Es el que se encuentra en la Casa Blanca, ¿eh, cómo les quedó el ojo? Lao recuerda que hay una casa rosada, una plaza roja y una casa Blanca, pero él sabe perfectamente que se está refiriendo a una enorme vecindad, ocupa una manzana entera, al revés y al derecho, la gente le llama la casa Blanca, porque no sabe si era para competir con Washington o porque había un cuate que le decían el Lincon, la cosa es que la casa se construyó en el período de Lázaro Cárdenas, son un montón de viviendas, pueden ser quinientas o mil, y todos se saben de memoria que tiene dos entradas, una por Carpintería y la otra por avenida del Trabajo, sin contar con las que les han hecho sus habitantes por las viviendas que dan a las calles de Panaderos y Peluqueros… (Ramírez, 1983, p. 85) Siendo que el aspecto religioso es el tema que mueve esta investigación me permito sentenciar el dato de que en el transitar que efectúe en la zona tanto las vecindades como las unidades habitacionales tienen a la entrada un altar en donde las imágenes principales son la virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo. Eduardo Vásquez describe la cotidianidad de una vecindad y menciona la presencia de los altares en cada vecindad en su cuento llamado mi oscuro barrio oscuro del cual cito el siguiente fragmento: Los tres jóvenes apenas rozaban los diecisiete años; amigos desde que la memoria se presentó en sus vidas. Joel y el Carnal vivían en la misma ruinosa vecindad: un angosto zaguán tercamente apolillado, luego de éste, el altar de la virgen morena, Guadalupe Tonatzin, siempre con limpias flores sintéticas a sus pies, después un estrecho pasillo, que alguna vez sostuvo un techo con travesaños de madera, que conducía a un amplio patio soleado, a donde todas las puertas de las viviendas desembocaban. Ahí uno de los vecinos, obrero despedido de la fábrica, instaló un improvisado taller de herrería donde los tianguistas llevan a reparar la estructura de metal de sus puestos. Aquel patio aún conservaba la tradición de ser el ombligo social; ahí se festejan los cumpleaños, los bautizos, las bodas y el doce de diciembre a nuestra Señora de Guadalupe. Lugar de esparcimiento y alegría pero también de odios e infidelidades, pequeños territorios donde sus integrantes tejen y destejen penélopescamente sus pasiones. Ombligo pasional donde coinciden alianzas y traiciones, rebeliones domésticas y soluciones fingidas. Sitio donde se convocan verdades, mentiras a medias, calumnias y chismes pero también a la intimidad, al encuentro humano y sobre todo al amor. Patio solar custodiado por viejos y gruesos muros de adobe centenario cuya piel roída por el tiempo y el uso, levantan murales policromos, hechas de costras antiguas que despellejan sus colores entre la lluvia y el abandono. Murales que en sus grietas acogen el musguito y la breve rama reverdecida, gigantescos cuadros vanguardistas que gritan con formas, texturas y cierta humedad; que como tierna lágrima calcárea, recorre el recuerdo y el tiempo. Y apoyados en ellos se levantan, tratando de alcanzar y fecundar al cielo, las garrochas. El viento agita suavemente la desfallecida ropa que vibra y cuelga ridículamente de los tendederos. Ahí están también las minúsculas tangas lascivas de la voluptuosa chica del número quince que ha provocado más de una fantasía e inconscientes orgasmos nocturnos. (Vásquez, 2003, p. 80) Este tipo de vivienda al igual que vecindades las encontramos a lo largo de las manzanas 1, 2, 3, 4, 5, 7, 8, 10, 11, 13,14,16 y 17. Varios complejos habitacionales restringen el paso de las personas a través de rejas o puertas a los extraños y sólo se puede tener acceso a través de las personas que ahí viven. Otros complejos habitacionales mantienen las puertas abiertas durante el día, aun así, el acceso al espacio debe ser a través de alguno de los habitantes y que el habitante de esa zona sabe diferenciar a aquellos que no pertenecen a ese espacio y no me refiero exclusivamente a los ajenos al barrio, esta diferencia va de calle en calle, de edificio en edificio donde se establecen cotos de poder. Para ejemplificar recurro nuevamente a Armando Ramírez citando el fragmento en donde narra la persecución de la que esta siendo objeto el Alex por parte del chancho y de cómo se siente protegido ya en su espacio: El Chancho aceleró sus botas norteñas pero el Alex ya estaba en terreno apache. El patio era su reino y el Chancho lo sabía. El guey no era tan guey, se paró en el marco del zaguán, desde ahí le hizo con la mano una señal de: vas a ver…El otro, ya engallado, le mandó unos espermas con el hueco de la palma de su mano luego se agarró los testículos con las susodichas manos y enseñó al Chancho las gónadas envueltas en mezclilla…Alex se metió a toda madre en la totalidad del Patio de su vecindad. (Ramírez, 1987, p. 33-34) El diseño de estas viviendas no permite que se establezcan negocios formales, por ello, a las afueras de algunos de ellos encontramos puestos semi fijos en donde por lo general se vende comida. La calle donde está su vecindad es derechita, con montones de basura a cada rato. En su acera hay otras vecindades y accesorias que son talleres de todo y de lo que se pueda. Los colores de las paredes descarapeladas están cansados, son: amarillos huevo, azules grasientos, rojos lodosos y algunos trechos de adobe desnudo. (Ramírez, 1987, P. 33) En la esquina comenzaba el tianguis: los puestos armados de varilla y techos de lona hacían cola en los bordes de la banqueta. La calle era así como patio de vecindad. Todos compran todos venden, todos tranzan, todos comen o arremedan. (Ramírez, 1987, P. 39) Los negocios establecidos los encontramos en las casa habitación que no fueron construidas por los dos programas antes mencionados y estos negocios son tan diversos que van desde tiendas de abarrotes, purificadoras de agua, carnicerías, tortillerías, maquila de zapatos, vidrierías, peluquerías, panaderías, taller de suajes, un local de tatuajes, talleres de reparación de motocicletas, reparación de bicicletas, estacionamientos públicos, renta de mesas y sillas para eventos sociales, cocinas económicas, es decir, encontramos negocios que cubren las necesidades de los habitantes de esa zona. Cabe destacar que en esta zona no se encuentran mercados de abasto popular, por lo menos uno lo encontraremos en la Zona 3. Sobre la calle de Alfarería en toda su extensión (de avenida Circunvalación a Jarciería) se establecen los oficiantes de la hojalatería y pintura que toman el espacio de la calle para ejercer su oficio. Toda esta zona se especializa en estas labores, pero resulta importante señalar que no existen negocios que proveen de material necesario para los hojalateros57. Importante señalar que varios de los altares en la vía pública han sido erigidos por estos oficiantes o bien son ellos los que se encargan de dar mantenimiento a los mismos, ejemplo de ello es el altar de la esquina de Alfarería y avenida de Circunvalación en donde se encuentra el altar de dos pisos y que es atendido por un hombre de edad madura. Todos los días antes de iniciar sus labores atiende el altar, barre la calle, pone sus anuncios, prepara su banco de trabajo, ameniza su espacio con música y se dispone a esperar a los clientes. En la acera de peluqueros de la manzana A 10 encontramos un campamento de indigentes que se dedican a la pepena de cartón y chácharas. La esquina de Panaderos y Alfarería, así como las canchas deportivas del anexo 2 esta tomada por varones con problemas de alcoholismo, son personajes que describe Armando Ramírez en sus obras Tepito y Chin chin el teporocho y Eduardo Vásquez en su cuento Cuatro movimiento y una sola obsesión de la siguiente manera: La calle es un callejón, el callejón es la parte última del barrio, adonde dicen, van a morir los que andan en la levita: hoy son doscientos, mañana, quizás cien o a lo mejor trescientos, todo es cosa de cómo se van muriendo en las madrugadas, ¿verdad señor maestre Carpina?, un traguito más para que duela la caminera vida. Al callejón la gente le llama el cementerio de los elefantes…adonde los grandes, es decir, los más viejos va a morir porque durante los cuatro o cinco años que anduvieron en la leva, entendieron que los otros, los que se fueron (que Dios los tenga en su santa gloria), así lo hicieron, buscando el calor del callejón para recostarse…Lao recuerda que ha habido varios cementerios, tanto como los fisgones los que han querido profanar: en medio de los mercados, por la Casa Blanca, por Hojalatería, por el mercado Abelardo L. Rodríguez. (Ramírez, 1983, p. 109-110) Mira quien anda con los teporochos-. –Señala hacia la esquina, ahí están unos hombres desalineados, grotescos, irreales, son como mágicos, tomando todos los días y todo el día alcohol de noventa y seis grados revuelto con refresco de uva o de naranja, dicen que la teporocha –así se llama el coktelito- sabe a whiskey, es bebida que arrulla, bebida que adormece, a los sufrimientos, a las penas, que lo hace soñar a uno en la vigilia y lo hacer ver fantasmas buenos que platican con uno, o ver el diablo y jugar a los naipes con él y todavía más, ganarle, platicar con la pelona y echarle albures y jugarle al que me lleva y no me lleva, al 57 Hago esta referencia ya que en otras partes del Distrito Federal, específicamente en la colonia Peralvillo existe estas zonas de especialización del Trabajo, pero ahí se encuentran locales que venden los consumibles para los hojalateros. que me muero y no me muero, a que la muerte te hace sufrir y te hace tentar su cuerpo huesudo y pellejudo y sentir la fría y tenerle miedo porque a fin de cuentas se le tiene miedo, pero un miedo delicioso, que al fin y al cabo la muerte es mujer, o no, porque ha de ser mejor, pudiera ser hombre o tal vez….si, porque no, homosexual, quien la ha visto para que pueda afirmar lo contrario. (Ramírez, 1985, P. 81-82) Mi oscuro barrio oscuro, hinchado de embriagados solitarios, calles sucias, perros sarnosos muy parecidos a sus habitantes, teporochos que en su caótica infancia corrieron por sus calles pateando el desconsuelo, desafiando la existencia con afilado aullido casi humano, casi animal, casi pétreo, y que de pronto el tiempo los sorprendió, enloquecidos y maduro, con una interrogación confusa, casi ininteligible, pegada a su frente a manera de signo maldito, entre música guapachosa, con letras de amores irredentos, tristes, grotescos, ridículos; amores mortecinos, consumidos pálidamente entre acordes que a fuerza de escucharlos cotidianamente, se repiten de forma mecánica, sin sentido. (Vásquez, 2003, p. 94) Las manzanas 6, 9, 12, 15, 17, y 19 poseen características diferentes a la anteriormente descrita, además de que geográficamente está más distante de la zona comercial (zona C) los espacios no cumplen con esa doble función de ser casa- habitación y bodega. Cecilia igual que alejo vive en una vecindad pero no igual a la de Alejo. Esta está bien cuidada, el zaguán es de azulejos y con el altar de la Virgen de Guadalupe con floreros de latón a sus lados y flores frescas siempre, tiene una lamparita eléctrica que no necesita electricidad y nunca se apaga, es del otro lado. (Ramírez, 1987, P. 26) Las aceras que dan a la avenida Ferrocarril de Cintura y Circunvalación se establecen un tipo de comercio diferente en el que encontramos escuelas particulares, servicios medico, talleres mecánicos, talabarterías (en una gran cantidad), tiendas de abarrotes, entre otros negocios legalmente establecidos. Se debe señalar que en estas manzanas no se encuentran altares expuestos en la vía pública, se trata de casas particulares con sus fachadas arregladas, calles más limpias y no logre apreciar que algún grupo se posesionará en las esquinas lo cual es distingue a las manzanas que se encuentran cercanas a la zona comercial (zona C). No se tiene registro de las manzanas A 15, A 17, A 18, A 19, A 20 y A 21; ya que a decir de los habitantes de de esta zona con los que tuve contacto me hicieron la recomendación de no internarme en ellas ya que son consideradas de alto riesgo incluso para ellos. Recibí la misma recomendación por parte de comerciantes de zona C y habitantes de la Zona B. Un dato que llama mi atención es que los mismos habitantes logran identificar las zonas de alto riesgo y por este motivo el habitante del barrio de Tepito tiene un área de movilidad limitada ya que en su espacio es conocido pero desconocido incluso en la calle siguiente. Si bien pude realizar la descripción de las manzanas que presento se debe a dos factores: el primero de ello es la hora en que iniciaba mi levantamiento etnográfico de las 09:00 horas a las 12.00 horas. Por ello sólo observaba a mujeres llevar a sus hijos a la escuela y personas salir a su trabaja y conforme llegaba las 10 de la mañana las calles cercanas a la zona C presenta movimiento de jóvenes llevando los ―diablitos‖ con mercancía enfilándose a la zona C. El otro factor que me permitió realizar mi levantamiento etnográfico fue el hecho de que esas manzanas están más vigiladas por patrullas de seguridad pública, además de que los negocios que ahí se establecen dan servicio a los comerciantes y visitantes de la zona C, por ello, el tepiteño se convierte en el garante de la seguridad de los externos, de no hacerlo los estacionamientos públicos y las cocinas económicas dejarían de ser útiles; sumémosle también el hecho de que aquí se encuentra el altar de la Santa Muerte (Alfarería 12), en donde, constantemente llegan devotos que no son del barrio a dar gracias o bien a hacer una petición. Finalmente, para cerrar la descripción de lo que he llamado zona A; ofrezco la descripción etnográfica de Marco Darío García (2005) que habla sobre esta zona, en donde hace énfasis en lo peligroso que puede ser algunas calles del barrio. Fuera de estas calles tomadas, en los alrededores del corazón de Tepito, existe otra cara del barrio, donde las calles todavía son de los vecinos y algunas vecindades sobreviven junto a los modernos ―condominios vecinales‖, donde día a día se juega en las calles la cáscara, se va por las tortillas y el teporocho y los novios de se secundaria son parte fundamental del paisaje urbano. Es aquí donde se ubican las escuelas, los talleres, las ―tienditas‖, los puestos de sopes, quesadillas o de ―caldo de migas‖ (caldo de tomate con migas de pan y carne de cerdo, característico de la colonia Morelos) y los eventuales de fruta. El visitante externo prefiere no aventurarse por estas calles, pues no ser reconocido podría significar ser asaltado y los mismos vecinos evitan algunas calles por reconocidos puntos de venta y tráfico de drogas. -Aquí el ritmo es diferente al de la zona comercial, más tranquilo, más parecido al de cualquier otro colonia popular, algunas viviendas se utilizan también para instalar pequeños talleres, sobre todo de zapatos o de maquila textil a destajo, y algunas otras , las menos, como bodegas. Aquí la mayoría de los habitantes ven con cierta desconfianza el tianguis, ya que saben que adentro las reglas de convivencia se (texto borroso) verse involucrado en una redada. Muchos de los habitantes de esta zona de Tepito se dedican al comercio en el tianguis, pero los más forman parte del proletariado obrero y de servicios. El anochecer es, por otra parte, el momento más vivo del día: las calles de desbordan con niños jugando, grupos de jóvenes que se dedican a ―echar novio (a)‖, puestos de antojitos rodeados de clientes, señoras discutiendo los pormenores de la telenovela en la entrada de las vecindades, señores echando una cerveza en la tiendita, y rápidas visitas a la panadería o miscelánea más cercana para preparar la cena. Las actividades nocturnas se prolongan hasta las once o doce de la noche, quedando sólo furtivas parejas que buscan la oscuridad del zaguán y el sonido lejano de la cumbia que se resiste a morir. 3. 6 Descripción de la zona B La característica principal de esta zona es que durante el día el movimiento de personas es menor y decir de algunos informantes cobra vida por las noches ya que se instalan una diversidad de puestos de comida a los que acuden los que habitan esta zona. Grandes unidades habitacionales que comprenden casi una manzana, bodegas de grandes dimensiones, servicios de paquetería, hoteles, un Nacional Monte de Piedad, escuelas y grandes complejos habitacionales que se están construyendo es parte de paisaje. Esta zona difiere de las otras dos ya que no encontramos comercio alguno sobre la vía pública por ello no es posible determinar un área donde se encuentre algún servicio en específico, no hay ni hojalateros, ni herreros, ni mecánicos que extiendan su espacio de trabajo hasta la calle. Un gran porcentaje de los que aquí habitan laboran en el comercio de la zona C. Solamente en la avenida Peralvillo se aprecia movimiento constante de personas que acuden a buscar alguna pieza de vehículos ligeros o de carga; además del movimiento de personas que acuden al Nacional Monte de Piedad. De cualquier manera nos estamos refiriendo a la parte periférica de la zona B como la de mayor movimiento –ello incluye la Avenida del Trabajo- pero en la parte central es raro ver transeúntes y sólo se aprecia el paso de vehículos. Manzana B 1 (Peñón- Toltecas- Constancia- Avenida del Trabajo) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 2 (Constancia- Toltecas- Granada- Avenida del Trabajo) Sobre la acera de Avenida del Trabajo en frente de una vulcanizadora se encuentra un altar construido con ladrillos y en obra negra, carece de protección y se encuentra expuesto a la intemperie. En este altar se encuentran las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe Nuestro Señor de Chalma San Judas Tadeo con la Cabeza cercenada Virgen de San Juan de los Lagos Dos crucifijos Dos cuadros de la Última Cena En la casi esquina con la calle de Granada y en el espacio donde se ofertan los servicios de hojalatería y pintura se encuentra un altar de estructura metálica protegido con cristal; en el se encuentran las siguientes imágenes: Virgen de Juquila Virgen de Guadalupe Nuestro Señor de Chalma Santo Niño de Atocha Dos escapularios de gran tamaño de San Judas Tadeo En la misma acera de Avenida del Trabajo se encuentra un altar en la ventana de una casa que abre todos los días y la cual iluminan al caer la noche; en este altar se encuentra la siguiente imagen: San Judas Tadeo Sobre la acera de Constancia afuera de una Unidad de Renovación Habitacional se encuentra un altar en la vía pública con la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe Manzana B 3 (Granada- Toltecas- Gorostiza- Avenida del Trabajo) Sobre la acera de la calle Granada y afuera de una unidad de interés social se encuentra un altar con las siguientes imágenes: Virgen de San Juan de los Lagos Virgen de Guadalupe Sagrado Corazón de Jesús San Judas Tadeo Santo Niño de Atocha Cristo crucificado Manzana B 4 (Gorostiza- Toltecas- Eje 2 Norte Canal del Norte- Avenida del Trabajo) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 5 (Constancia- Totonacas- Tenochtitlán- Granada) Sobre la acera de la calle Totonacas el tipo de vivienda es Unidades de Renovación Habitacional y en su esquina con la calle de Constancia se encuentra una Unidad de Medicina Familiar del ISSSTE. Que aunque no da consulta a los que no son derechohabientes, si ofrece cursos a la comunidad sobre salud reproductiva y medicina preventiva. En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 6 (Granada- Tenochtitlán- Gorostiza- Toltecas) Sobre la acera de la calle Granada y en la esquina con la calle Tenochtitlán a las afueras de un edificio se encuentra un altar en la vía pública que contiene la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe Manzana B7 (Gorostiza- Tenochtitlán- Eje 2 Norte Canal del NorteToltecas) En la acera del Eje 2 Norte Canal del Norte en la casi esquina con Tenochtitlán se encuentra un altar en la jardinera construido en concreto y protegido de las inclemencias de clima. En este altar las imágenes que ahí se encuentran son las siguientes: Virgen de Guadalupe Dos crucifijos Cuadro de la Última Cena En la acera de la calle Gorostiza y en la esquina que forma con la acera de la calle Tenochtitlán a las afueras de un edificio se encuentra un altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Manzana B 8 (Constancia- Tenochtitlán- Gorostiza- Totonacas) Sobre la acera de la calle Tenochtitlán a las afueras de un edificio de departamentos de interés social se encuentra un altar con una Santa Muerte de bulto de tamaño natural y otras imágenes de bulto de la Santa Muerte más Pequeñas. Este altar a la Santa Muerte fue motivo de interés del fotógrafo Francisco Mata Rosas y la presenta en su libro fotográfico Tepito ¡bravo el barrio!. Manzana B 9 (Constancia- Tenochtitlán- Jesús Carranza- Granada) La acera de la cale Constancia conecta con la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción conocida como la iglesia de la Conchita, por ello se venden artículos relacionados con las festividades del calendario litúrgico, por ejemplo: el día que realice el registro de esa iglesia fue el 2 de febrero, por ello a las afueras de la iglesia se vendía lo relacionado con el Niño Dios. Fuera de este detalle no se encontraron altares en la vía pública. Manzana B 10 (Granada- Tenochtitlán- Jesús Carranza- Gorostiza) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 11 (Gorostiza- Jesús Carranza- Eje 2 Norte Canal del NorteTenochtitlán) En la acera del Eje 2 Norte Canal de Norte en la esquina que forma con la calle Tenochtitlán se encuentra un altar montado sobre un árbol que contiene la siguiente imagen: Cristo crucificado Manzana B 12 (Matamoros- Peralvillo- Rivero- Jesús Carranza) Sobre la acera de la calle Matamoros predominan los locales comerciales que en décadas pasadas albergaban las grandes tiendas de distribución de discos llamada La Feria del Disco. Ahora ese espacio alberga una plaza comercial en donde se venden productos de audio y video apócrifos, así también sirve de bodega para varios comerciantes que se ubican sobre el arroyo vial que dicho sea de paso la venta de audio y video apócrifos es lo que predomina en esta acera y en especial la calle de Matamoros desde Tenochtitlán hasta casi su entronque con Paseo de la Reforma Norte. No se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro elemento que connote lo sagrado. En la acera de la calle Jesús Carranza se encuentra una cantina que tiene décadas de existir. En esta acera el tipo de vivienda es de casas particulares, algunas de ellas con locales en su parte frontal en donde se ofertan diversos servicios que van desde tienda de abarrotes hasta un café Internet con centro de copiado. Esta calle sirve como estacionamiento ya que se encuentra abierta al tráfico por ello se ven a jóvenes atendiendo a los que llegan a solicitar un espacio. No se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro elemento que connote lo sagrado. En la acera de la calle Peralvillo ya no se ejerce el comercio informal, la calle sirve como estacionamiento y como base de taxis. En esta acera encontramos un kinder, una gasolinera, locales que venden partes para automotores y la galería José María Velasco que este día en especial (13 febrero 2009) un pintor de origen cubano exponía sus obras. Ahí establecí contacto con los dependientes de la galería y me permitieron tener acceso a un mural de Daniel Manrique que aun no se encuentra en exhibición y en el cual el artista plasma los actores del barrio de diversas épocas. Les pedí que si en un futuro me permitieran tomar unas fotografías del mismo a lo que accedieron. Tuve una charla con Antonia Lozano Jaloma que al parecer es una de las encargadas de la galería. Charlamos sobre el barrio a través de las obras de Casco, Armando Ramírez, Daniel Manrique, Alfonso Hernández y Eduardo Vásquez. Me hizo la invitación para acudir al grupo multidisciplinario Los Olvidados que se reúnen en la calle Gounod # 52 en la colonia Peralvillo. De dicho taller han salido varias obras que tienen como fin preservar la memoria histórica de los barrios no solo el de Tepito. En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 13 (Rivero- Jesús Carranza- Santa Lucia- Peñón) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 14 (Rivero- Peralvillo- Peñón- Santa Lucia) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 15 (Peñón- Santa Lucia- Constancia- Jesús Carranza) Sobre la acera de la calle Constancia en lo alto de un poste de energía eléctrica se encuentra un altar con la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe Manzana B 16 (Peñón- Peralvillo- Constancia- Santa Lucia) En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ningún otro símbolo que connote la religiosidad de los habitantes. Manzana B 17 (Constancia- Santa Lucia- Granada- Jesús Carranza) En la esquina que forman las calles Santa Lucia y Granada a las afueras de una Unidad de Renovación Habitacional se encuentra un altar con la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe Manzana B 18 (Constancia- Peralvillo- Granada- Santa Lucia) Sobre la acera de la calle Constancia se encuentra un altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe Virgen de San Juan de los Lagos Virgen de la Candelaria Manzana B 19 (Granada- Peralvillo- Reforma Norte- Eje 2 Norte Canal del Norte) Sobre la acera de la calle Peralvillo, en la curva que hace esta manzana y que conecta con la calle de Gorostiza a las afueras de un local de venta de auto partes se encuentra un altar construido en concreto y detalles en azulejo protegido con cristal y guarnición; en el encontramos las siguientes imágenes: Un crucifijo incrustado en la parte alta Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Virgen de San Juan de los Lagos San Charbel Majluf San Judas Tadeo 3. 7 Descripción de la Zona C (comercial) Esta zona comprende un perímetro que va desde la Avenida del TrabajoPeralvillo- Eje 1 Norte Héroes de Granaditas y diversas calles en donde la de Tenochtitlán será la columna vertebral del comercio hasta su límite que es la calle de Constancia donde se encuentra la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción mejor conocida como la iglesia de la ―conchita‖. La zona comercial es la que representa más a Tepito, ahí se distribuye una diversidad de mercancía que van desde productos originales y apócrifos. Se encuentran por ello grandes bodegas en diversas puntos que comprende esta zona, así también se encuentran plazas comerciales especializadas en un solo tipo de mercancía que van desde ropa, electrónica, cosméticos, calzado deportivo de importación, calzado del país, entre otros que van surgiendo de acuerdo a las innovaciones del mercado mundial y del consumo de una parte de la población. Esta zona es la que atrae más a los medios de comunicación por el tipo de mercancía que se oferta en el espacio público, así como la mercancía que se oferta en espacios más privados y que requieren de un conocimiento mayor del barrio para poder acceder a ellas. Noticias sobre asaltos a transeúntes, narcotráfico, laboratorios de productos apócrifos, asesinatos y venta de armas son las noticias que se leen cotidianamente en los medios de comunicación impresa y en los medios electrónicos. ¿La zona Comercial es Peligrosa? Dejemos que Cynthia Ramírez (2007) a través de su trabajo de corte etnográfico que realizó para la revista Letras Libres nos ofrezca las cifras proporcionadas por la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno del Distrito Federal sobre esta zona: Las cifras del crimen De acuerdo con la Dirección General de Estadística e Información Policial de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, en 2006 se reportaron trescientos diecisiete robos a transeúntes dentro del sector Morelos. De enero a mayo de este año los robos a personas que circulan por la vía pública suman ciento siete. La mayor parte de estos asaltos no son violentos, usualmente se llevan a cabo por medio de ―el abrazo del diablo‖, lo que significa que, si de buenas a primeras un desconocido te abraza, ―ya te jodiste y vas sacándote tus chivitas‖. Según la SSP-DF, 32.6% de las denuncias de asaltos apuntan a las calles de Tenochtitlán y Jesús Carranza. Sobre esta última se detuvo a 18.43% de los 2,200 arrestados de la colonia Morelos durante 2006. También se recomienda evitar la calle Bartolomé de las Casas. Procure no acudir los sábados, martes y viernes pues, de acuerdo con el Sistema de Información Policial, durante 2006, 16.2% de los delitos se cometieron en sábado, 15.4% en martes (día en que el tianguis descansa) y 15.3% en viernes. El mejor día puede ser un domingo (cuando sucede sólo 13.1% de los delitos cometidos) o un miércoles, cuando la posibilidad de ser víctima se reduce a 13.5 por ciento. Entre ocho y nueve de la mañana, aunque habrá poco movimiento comercial, la probabilidad de ser asaltado en la vía será mínima, si acaso de veinte por ciento. Entre doce y cinco de la tarde la posibilidad de recibir el ―abrazo del diablo‖ se multiplica, alcanzando hasta setenta por ciento si se decide por el horario de dos a tres de la tarde. Siguiendo con descripciones sobre la misma zona Marco Darío García (2005) en su tesis señala que los habitantes y visitantes identifican esta zona como el corazón de Tepito, por el movimiento de gente que se presenta durante el día y la intensa actividad comercial, sobre ello refiere: Generalmente se identifica a Tepito con la colonia Morelos, sin embargo, el barrio sólo ocupa parte de la misma, e incluso los habitantes de la zona distinguen entre el corazón de Tepito – que limita al norte con Rivero, al sur con Eje 1 Norte (Héroe de Granaditas), al oriente con Eje 1 Oriente (Avenida del Trabajo) y al occidente con Jesús Carranza- y Tepito en general, que incluye esta zona comercial y parte de la colonia Morelos. -El corazón, para los miles de visitantes diarios sólo es una inmensa sucesión de pasillos y mercados sólo diferenciables por el tipo de mercancías que predomina, ya que gran parte de las calles han sido absorbidas por el mega tianguis y por momentos no se sabe si se camina por el pasillo de un mercado o por una calle. Sin embargo, el tepitense sabe que el corazón reside en la plaza de Fray Bartolomé de las Casas, en ella se encuentra el campo de fútbol (conocido como Maracaná entre los lugareños), la iglesia de San Francisco de Asís (pequeños templos del siglo XVII), la célebre Rinconada, calle en forma de ―L‖ que rodea el templo; el mercado de comida, el de objetos usados o chácharas, el de zapatos, y por todos lados un abigarrado conjunto de puestos. -Caminar por las calles del corazón del barrio es sumergirse en un maremagnum de puestos donde sólo el iniciado sabe el camino más corto para llegar a un destino. Si bien en todas las calles se expenden todos tipos de artículos, cada una tiene cierta especialización, así por ejemplo en la calle de Caridad, a espaldas de los puestos de electrodomésticos, se colocan ―las marías‖, indias mazahuas que venden verduras y frutas a los inquilinos del barrio; en la calle de Fray Bartolomé de las Casas se consiguen todo tipo de artículos eléctricos (calculadoras, radios, nintendos, secadoras de pelo, etc.), de presencia de mayoreo; alrededor del atrio de la iglesia de San Francisco de Asís se encuentran todo tipo de anteojos y armazones; la calle de Toltecas en la parte que divide los mercados de comida y el de chácharas se venden saldos de ropa, mientras que en las calles de Tenochtitlán y Rivero sirven de (texto ilegible) . -El corazón es el lugar perpetuamente fuera del orden urbano, donde las calles se invaden para fines más lucrativos que el de paso de peatones y carros, donde la ley que impera no es la del Estado, sino la del más chingón, el más gallo, del que se pone las pilas. Calles tomadas por comerciantes informales, donde el pan de cada día pues viene de la fayuca, el saldo, la cháchara o el mercado negro. Lugar donde es posible conseguir desde un arma hasta lentes con visión de rayos X, lo que quiera comprar está a la venta o se consigue pa’ la próxima semana. Calles tomadas diariamente por miles de puesteros y sólo desalojadas en las noches y los martes, convirtiéndose entonces en un lugar peligroso y sin dueño, donde los vecinos prefieren no salir y los extraños ni se acercan. Miguel Cabildo y Raúl Monge (1999) en su artículo para la revista PROCESO refiere sobre esta zona la siguiente descripción: Un estudio del gobierno del DF ofrece otros indicadores que dan una idea nítida de la ilegalidad que priva en el barrio con más de 400 años de vida urbana: La mayor parte de sus 57 calles están invadidas por casi 10 mil comerciantes ambulantes que, contra lo que marca la ley, no aporta ningún centavo a la Tesorería capitalina por derecho de piso. La delegación Cuauhtémoc calcula que por este concepto deja de percibir alrededor de millón y medio de pesos anuales. Agrupados en 62 organizaciones, los ambulantes tampoco pagan derechos por consumo de agua potable y energía eléctrica, y si, por el contrario, afectan redes de luz, drenaje, agua potable y estructuras de inmuebles, amén de generar un promedio de 150 toneladas de basura diariamente. Hay, así mismo, mil 536 viviendas y campamentos irregulares y en condiciones de alto riesgo, cerca de 162 bodegas y lotes baldíos que sirven de guaridas a asaltantes y mal vivientes. Además, tiene una densidad bruta habitacional de 84 viviendas por hectárea (365 habitantes por hectárea), faltan escuelas, servicios comunitarios y recreativos, y proliferan los nudos viales. Y, por si fuera poco, el barrio está asentado sobre una falla geológica y un gasoducto de PEMEX, lo cual lo tiene catalogado como zona de alto riesgo. Dentro del perímetro existen cuatro mercados públicos –el 23 (antes de fierros viejos), el 36 (varios), el 14 (comidas) y el 60 (zapatos)-, que, en conjunto, albergan a más de mil 500 locatarios. Tres calles concentran el mayor número de vendedores en toda la zona: el Eje 1, con 924; Tenochtitlán, con 739, y Matamoros con 578. El resto se disemina por las siguientes calles: Manuel Doblado, Obreros, Peñón, Palma Norte, Fray Bartolomé de las Casas, plaza San Francisco, plaza Santa Ana, plaza de la Conchita, Peralvillo, Paseo de la Reforma, Costa Rica, Rivero, Santa Lucía, Toltecas y Vidal Alcocer. Leopoldo Illescas, dirigente de la Organización Trajinante, advierte de plano: ―En Tepito nadie le va al Guadalajara porque el que es ―chiva‖ se muere‖ Nadie, en efecto, se atreve a dar nombres, a revelar domicilios donde se oculta la mercancía ilegal. Por eso, Tepito es Tepito. Desde lo alto de los inmuebles o en los paraderos de autobuses, jóvenes vigilan todo el movimiento. Son quienes alertan de la presencia de cualquier autoridad. Así funciona Tepito. Finalmente cito otra descripción –también la apreciación- que Guillermina Castro Nieto (1987) hace de la misma área comercial que nos ocupa en este apartado, sobre la misma refiere: La actividad comercial se realiza de manera más importante en el comercio ambulante en el que se venden los diferentes giros, entre los que destacan el de los aparatos eléctricos, electrodomésticos y electrónicos, ropa, zapatos, telas, perfumes, alhajas, alimentos, etc. Este comercio es practicado por más de cinco mil comerciantes ambulantes agrupados en 29 organizaciones, objeto de nuestro estudio. En apariencia el tianguis de Tepito es anárquico y desordenado, pero cuenta con una forma de organización política que será analizada a través del proceso de incorporación de las organizaciones de comerciantes de Tepito al partido oficial, por medio de la afiliación de éstas a la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP), describiendo la formación de algunas de las 29 organizaciones de comerciantes que existen hoy en el barrio de Tepito, tanto de comerciantes al interior de los mercados establecidos como de comerciantes ambulantes. Guillermina Nieto plasma en su tesis la llegada de la fayuca58 como la actividad comercial que se considera como el parte aguas de las antiguas formas de comercio y que sentó las bases del comercio que conocemos hoy en día y el hecho de que la calle Tenochtitlán fue la columna vertebral del comercio hasta hace unos años, sobre la fayuca refiere lo siguiente: La fayuca como factor dinamizador del mercado de Tepito Desde 1969 comenzó la venta de fayuca en Tepito, pero ésta no representaba aún un elemento considerable para el comercio del barrio. Fue después de 1975 en que cobró importancia debido principalmente a que a partir de este año aumentó la cantidad de mercancía que fue introducida al barrio y con esto, consecuentemente, un aumento en el número de comerciantes que se dedicaron a la distribución y venta. Los mayores introductores de fayuca fueron los dirigentes que colaboraron en el Plan Tepito. Por ser este un proyecto de 58 Sobre la fayuca y los fayuqueros he de hablar en otro capítulo que tiene que ver con los actores y sus actividades en el barrio de Tepito. vivienda, dichos dirigentes fueron en su mayor parte representantes de asociaciones de inquilinos y comerciantes que estrecharon su relación con funcionarios del gobierno gracias a las actividades que entonces realizaban para la ejecución y funcionamiento del proyecto. Apoyados por los funcionarios, algunos comerciantes comenzaron a distribuir la fayuca entre el grupo de carreros de la calle Tenochtitlán. Por referencia de varios informantes, sabemos que la mercancía era enviada por funcionarios para entregarse en Tepito a los dirigentes para su distribución y comercialización. Estos dirigentes comercializaban la fayuca iniciando a varios carreros en este giro. En un principio la fayuca sólo se distribuyo en la calle de Tenochtitlán, pero a medida que fue proliferando su venta se introdujeron más comerciantes por lo que se presionó al grupo de carreros59 que trabajaban en Tenochtitlán para que vendieran fayuca o para que abandonaran su lugar en dicha calle, dejando éste a los comerciantes que se interesaban en trabajar dicho giro. ―Muchos compañeros que no tuvieron para comprar fayuca se trasladaron al callejón de 60 Tenochtitlán de donde también los corrieron para darles más espacio a los fayuqueros , los carreros son los que hacen las plazas en Tepito…los carreros hemos sufrido mucho, nos han traído de un lado pa´ otro‖. (Castro, Guillermina; 1987, P. 118-119) Los coreanos es otro de los actores que encontraremos en esta zona C principalmente en la calle de Florida desde el eje 1 Norte Héroes de Granaditas hasta la calle de Caridad, sobre ellos refiere Cynthia Ramírez: Baste para avalar esta recomendación la denuncia que el año pasado hizo Víctor Cisneros, presidente de la Unión de Comerciantes del Centro Histórico, en que afirmó que ―la mafia coreana‖ surtía mercancías de procedencia ilegal a cientos de líderes de vendedores ambulantes (63 para el caso de Tepito) y que algunas de las cabezas visibles de esta mafia estaban comprando negocios establecidos. Cisneros calculó, en ese entonces, en 2,500 el número de coreanos que trabajan y actúan de manera impune en las calles del oriente del Centro Histórico y en Tepito. (Ramírez, Cynthia, 2007) También sobre este actor comenta Mónica Castro Ramírez y Juan Manuel Cordero Peña en su tesis en los siguientes términos: Los coreanos llegados a México durante el sexenio de salinas, se convirtieron en una de las más importantes alteridades dentro del barrio, debido al papel que han desempeñado en la 59 Carreros: son los antiguos fierreros. Se les caracteriza porque no utilizan el ayate sino con un carro de madera con dos ruedas en el cual transporta su mercancía. Vende y compra ropa usada, fierro viejo y nuevo, artículos deteriorados como lámparas, relojes, muñecos, cuadros, muebles, etc. 60 Fayuqueros: Son vendedores de artículos manufacturados extranjeros conocidos como ―fayuca‖. Utilizan puestos tubulares para la exposición de su mercancía. maquila y comercialización de mercancía pirata, así como en la compra masiva de viviendas para ser convertidas en bodegas o talleres. (Castro Ramírez Mónica, Cordero Peña Juan Manuel; 2004) Pero no solo existen los documentos que enfatizan sobre la problemática del comercio en esta zona y los espacios que pierden los habitantes de estas calles. Sobre esta misma área existen descripciones que tienen la peculiaridad de ser elaboradas por los mismos habitantes y con ello se puede establecer la diferencia que existe entre el antes y después del boom de la fayuca que fue la actividad comercial que le cambió el rostro al barrio. Por ello, he de citar a autores cuyo relato esta enmarcado en la crónica en este caso de Tepito. Silvano Héctor Rosales Ayala realiza una serie de entrevistas a Julián Ceballos Casco quién es uno de los fundadores del concepto Tepito Arte Acá y que a diferencia de otros fundadores que dejaron el barrio él continúo en el barrio. En una de las entrevistas Casco narra la actividad comercial en un día específico y el tipo de mercancías que ahí se encontraba. Los recuerdos sobre el Tepito que viví, ese otro barrio que a mi me tocó tan sabroso ¿no? Los domingos, que era el día de la supercháchara, se juntaban Tepito, desde Anillo de Circunvalación con la vieja Lagunilla, que estaba aquí en Granaditas. Se hacia un solo camino con callejones adyacentes, incluso había puestos fijos de madera sobre Comonfort, con su tenderito y tal. Muchos de ellos funcionaban como casa, dormían allí, allí comían, muchas veces hacían allí sus necesidades ¿no? En las noches pasar por el cine Morelos para acá era medio cinegético, mano, te tenías que venir pateando ratas, literalmente, unos tiros padrísimos de los perros con los gatos, de los gatos con las ratas y todo el rollo ¿no? El área del mercado era sumamente reducida, incluso hasta la fecha, uno que vive aquí dice: ―Vamos a Tepito-―. Tepito era, geográficamente, el mercado y sus pequeñas áreas periféricas de comercio. Algo que me gusta del barrio es que se ha integrado, antes era más de áreas, por ejemplo, los de Peralvillo no se sentían Tepito ¿no?, cuando la gente te quería hacer el favor de verte a otro nivel te decía: ―-Tú eres de Peralvillo, tú no eres de Tepito-―. Había esas diferencias. Por ejemplo en la vestimenta, el tepiteño estaba menos colonizado, no les llegó tan fuerte el ayanquinamiento ¿no?, de los pantalones vaqueros, que ahora a chaleco hay que decirles ―jeans‖, para verte muy ―nice‖. (Rosales Ayala, S. Héctor; 1989, P. 30-31) Eduardo Vásquez nos presenta a los actores que laboran en esta zona con el lenguaje propio del barrio, describe el tipo de mercancía que se puede encontrar en la zona, además de los discursos que uno puede escuchar al transitar por la misma. MI OSCURO BARRIO OSCURO Estaban en esa pequeña calle apretujada por el hedor y el calor del mediodía, cuyo piso era un chicle negro, tembloroso, pegajoso, caliente. Bebían cerveza. El tianguis estaba en todo su apogeo, los vendedores ofrecían mercancía diversa con grito iracundo y desesperado, los diablos repletos de mercancía importada o pirata desfilaban como manada de elefantes furiosos, conducidos por jóvenes morenos sin camisa, con fajas y músculos tensos, perlados por un sudor agrio e intolerante: va el golpe, cabrones/ el golpe avisa/ hágase a un lado/ fíjate pendejo me estás echando el diablo encima. Los compradores tratan de hacerse un poquito de sombra con la palma de la mano sobre la frente, otros con un periódico, algunos llevan sombrero o gorra de beisbolista. En los puestos de discos compactos los equipos de sonido luchan, ya enloquecidos por la competencia, unos contra otros por ganar la atención los transeúntes; los carritos ambulantes coronados por un parasol que anuncia alguna de las tantas marcas de cerveza, ofrecen bebidas: chescos bien fríos/ micheladas heladas/ cárgales calor. Un primaveral sol pesado, a plomo, implacable, cae sobre aquel insoportable hormiguero donde sus integrantes se atropellan, insultan, vociferan, con mirada fiera, dispuestos, a la menor provocación, a tensar el cuerpo y la mirada, al insulto, al manotazo, a la pelea, a las armas. Los agrios pregones, los gritos hirientes, la música estruendosa y machacona del artista de moda, producen un enloquecedor huracán auditivo, sin pies ni cabeza. En aquel tianguis, hervidero de carne y emociones, el calor subía y con él los gritos iracundos y el rostro duro. Bara, bara/ a‘i tenemos las fuscas de lujo que siempre soñaste, del tamaño del miedo/ cuernos de chivo para que se le caiga los huevos al cabrón de enfrente/ municiones/ si quieres un toque o unas tachas o si te gustan las emociones fuertes, tenemos, fíjate bien cabroncito: ácidos de esos que truenan hasta la última neurona y que, me cae de madre, hasta a diosito ves, y ahí le puedes reclamar todas las chingaderas que suceden en este mundo/ bara, bara/ tenemos tinta china que funciona como el mejor pulque chamaquero/ mira chavito tenemos unas películas pornos y yohumbinas, y con eso tu novia te afloja el cuerpo y hasta el alma/ bara, bara…(Vásquez, Eduardo, 2003, P. 80) CUATRO MOVIMIENTOS Y UNA SOLA OBSESIÓN Uno. Pesadilla Emotivas vías olvidadas entre la araña maraña de tubos que conforman el tianguis, en el cual se vende todo: carne tierna, sueños mal reciclados, falsas ilusiones, caricias artificiales, miradas maliciosas, ternuras fallidas, hijas, hijos, padres, madres; donde lo único importante es el precio, el bisne, la tranza, el negocio, las monedas, la marmaja, el billete, las pesetas; donde niños inhalan amargura y soledad de thinner, herencia de un sistema siniestro, infantes que jamás llegarán a ser hombres porque su vida, breve, fugaz, es como ―grapa‖ que estalla en el cerebro para reventar neuronas, sentidos, y terminar en una obsesión idiota, colgada de una bovina mirada lejana, vidriosa, extraviada, que se pierde por los resquicios de un recuerdo atarugado, despeñado, oscuro, indecible, porque las palabras pierden su calidad de idioma, incapaces de mostrar, imaginar, intuir, suponer, esta galería de oscuridad absolutas, vacíos inconmensurables, dolores infinitos, calambres en el alma que te doblan hacía adentro, sin que acabes de entender si esto es la ausencia que nos devora, o si es la línea fronteriza donde vida y muerte se aferran a un himeneo perverso y sucio. (Vásquez, Eduardo, 2003P. 94-95) 3. 7. 1 La lógica que impera en la zona C En esta zona cada centímetro tiene un valor económico determinado por la especialización comercial de cada calle y que no tiene que ver con la cantidad de dinero que circula en cada zona de especialización. Así que, ese centímetro lo pelea desde el que vende tecnología de punta hasta el que vende cháchara. Los lugares ya tienen dueños y sólo pueden ser traspasados con la autorización del líder él cual lleva un porcentaje de ganancia en la transacción, por citar un ejemplo: un lugar de dos metros de frente por dos de ancho en la calle Tenochtitlán en la zona de los ayateros61 y bazaristas hasta hace cuatro años se cotizaba en 50,000 pesos, hoy en la actualidad el precio se ha incrementado y basta con preguntar el costo que puede tener un lugar con las mismas dimensiones en la calle de Florida, Caridad, Fray Bartolomé de las Casas o la Rinconada. Cada centímetro es vital en esta zona y cada centímetro esta conectado a la actividad comercial y en detrimento de los habitantes de vecindades, Unidades de Renovación Habitacional y casas particulares. Este detrimento no sólo tiene que ver con la imposibilidad de utilizar el espacio público como extensión de su casa; sino que también el comercio ha penetrado a los espacios en donde los habitantes históricamente se abastecen de alimentos como es el mercado de la Rinconada –situado al frente del deportivo y la iglesia de San Francisco de Asís Tepito- en donde, los locales comerciales han cambiado sus giros a un tipo de mercancía igual a la que se vende a las afueras del mercado. Tan vital es un centímetro para el comercio que mismo atrio de la iglesia de San Francisco de Asís Tepito ha sido invadido por vendedores que ofertan 61 Un ayatero es la persona que se encarga de ir por las calles de diversas colonias principalmente las de clase media y a través de su pregón anuncia que intercambia las cosas que ya no les sirve a las personas por artículos principalmente de cocina. Se les conoce también por el tipo de recipiente que utiliza para su mercancía, el cual esta formado por una malla unida por un lazo –similar a una red para pescar- que va al hombro. principalmente lentes y cuyos puestos aunque metálicos, quedan fijos ya que se trata de una calle que no tiene movimiento vehicular. Las calles de esta zona C que no son tomadas por los comerciantes de una manera directa a través de un puesto metálico donde se vendan su mercancía, son tomadas por otras personas principalmente habitantes del mismo barrio que las habilitan como estacionamiento donde los comerciantes pueden dejar sus vehículos bajo el cuidado de estas personas. En esta zona C es difícil encontrar un espacio incluso para descansar de la travesía que uno efectúa en su visita al barrio. Por ello, los puestos de comida se ven abarrotados un poco por el alimento y otro tanto para darse un respiro y continuar con el camino. Líneas arriba presente la descripción que Miguel Cabildo y Raúl Monge (1999) hacen de la zona C específicamente del número de comerciantes y la distribución de los mismos. En su mismo artículo de la revista PROCESO ofrecen una descripción del área en base al tipo de mercancía que se oferta, sobre ello refieren: TERRITORIO LIBRE Las autoridades capitalinas, reconocen abiertamente que en Tepito ―no hay gobierno‖ y advierten que ―gran parte del espacio público‖ –calles, plazas y jardines- ha sido ―privatizado‖, por lo que la función urbana básica, la libre circulación de personas, ―se encuentra cancelada‖. Y alertan: De no modificarse esta tendencia, el barrio tiende a convertirse en un ―gigantesco tugurio‖, en el que el comercio ―seguirá siendo fachada de grandes negocios turbios‖. El proceso de degradación de Tepito comenzó con la construcción de los ejes viales 1 y 2 norte, y se aceleró con el terremoto de 1985. y es que ambos acontecimientos no sólo alteraron la traza urbana, sino que fracturaron el tejido social que había permanecido intacto por décadas. La ―cartografía‖ criminal de ese espacio urbano no deja lugar a dudas: En el cuadrante uno, que comprende del Eje 1 Norte a Fray Bartolomé de las Casas y de Jesús Carranza a Avenida del Trabajo, el delito más recurrente es el robo a transeúntes, aunque la policía tiene detectados sitios donde se vende droga al menudeo, particularmente en las calles de Tenochtitlán, callejón de Tenochtitlán y Jesús Carranza. En el cuadrante dos, que cruza de Fray Bartolomé de la Casas a Canal del Norte y de Jesús Carranza a Avenida del Trabajo, se concentra la fabricación, adulteración y venta de bebidas alcohólicas al menudeo, así como tráfico de drogas a menor escala. Los puntos de venta se encuentra básicamente en las calles de Peñón, Constancia, Jesús María, Matamoros y Caridad. Dentro del cuadrante tres que va de Reforma a Jesús Carranza y del Eje 2 Norte al Eje 1 Norte, el giro comercial que predomina es la venta de autopartes. El jefe policiaco revela que es uno de los principales deshuesaderos de vehículos robados de la ciudad. Se tiene identificada también venta de droga al menudeo, principalmente en las calles de Libertad y Peralvillo número 15. El robo a transeúntes tiene su punto fuerte entre las calles de Peralvillo y Matamoros y Peralvillo y Morelos. En el cuadrante cuatro, que va de Avenida del Trabajo a Circunvalación y Eje 2 Oriente, la PGJDF asegura que el conjunto habitacional que existe dentro de esa zona sirve de guarida de organizaciones de delincuentes que tienen su centro de operación en las calles de Panaderos, Peluqueros, Mineros, Ferrocarril de Cintura y Hortelanos. (Cabildo Miguel, Monge Raúl; 1999, P. 22- 23) Este documento –que tiene como fin la denuncia- nos ilustra que existen áreas de especialización mercantil en esta zona comercial. Sobre este aspecto he de comentar que efectivamente en esta área se encuentran calles especializadas en la venta de productos en específico y que de alguna manera el conocimiento que se tenga del área ayuda al visitante a sobrevivir en su travesía por el barrio. Es de todo conocido que en el barrio de Tepito se puede encontrar el producto que buscas ya sea original o apócrifo y para ello debes saber donde dirigirte y sobre todo saber a quién preguntar: Si tu deseo es comprar productos de audio y video apócrifos los van a encontrar especialmente en la calle de Caridad, Rivero, Jesús Carranza, Manuel Doblado, el Eje 1 Norte Héroes de Granadita y sobre todo la calle de Fray Bartolomé de las Casas en donde incluso se puede encontrar los locales que venden las portadillas y los discos vírgenes para aquellos que se dedican a ―armar‖ discos y videos. Si se quiere comprar ropa se debe dirigir especialmente a la calle de Florida hasta su conexión con la calle Fray Bartolomé de las Casas, sobre el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas se encuentra toda la ropa de moda y si lo que se desea es comprar ropa nueva pero de saldo se debe dirigir específicamente a la calle de Toltecas en la cerrada de Matamoros –entre los dos mercados-, si se desea comprar ropa interior el lugar más indicado es en la calle de Rivero en su esquina con la calle Toltecas y finalmente, si se tienen recursos limitados se debe acudir a la calle de Tenochtitlán en su esquina con Matamoros y ahí encontrara a los ayateros y vendedores de ropa de paca62 62 Se entiende por ropa de paca a las prendas de vestir que se venden en las tiendas de beneficencia en los Estados Unidos (Salvation Army, Goodwill, ARC) y que son adquiridas por empresas que utilizando maquinaria las comprime y la fleja con la intención de que se reduzca el volumen y su transportación sea más fácil. Si se desea comprar zapatos deportivos de importación se debe dirigir al mercado que se encuentra ubicado en la calle de Matamoros en su esquina con la calle de Tenochtitlán. Para comprar calzado de vestir fabricado en el país se deben dirigir al mercado de Granaditas ubicado en el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas en su esquina con la calle de Tenochtitlán. También lo pueden encontrar en la calle de Toltecas entre la calle de Matamoros y Rivero o bien en la calle de Tenochtitlán entre la calle de Fray Bartolomé de las Casas y Matamoros. Si deseas comprar productos de audio y video originales se debe dirigir a la calle de Peralvillo en donde se encuentran locales que los distribuyen, así también si se necesita adquirir consumibles como son discos vírgenes o estuches los puedes adquirir en esta calle en donde te pueden facturar. Si se desea adquirir línea blanca y electrónica se debe acudir a las calles de Díaz de León en donde encontraras productos nuevos que han sido puestos en remate por tener algún defecto en su estructura física y que por ello las tiendas no los ofrecen al público. En este mismo espacio se puede adquirir tecnología de punta como cámaras digitales, pantallas de plasma, cámaras videograbadoras, equipos de audio para casa y telefonía celular. La tecnología de punta también se encuentra sobre el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas en su esquina con Jesús Carranza hasta su esquina con la calle Florida. Si se desea adquirir utensilios de cocina o artículos para niños recién nacidos se debe acudir a la calle de González Ortega en su esquina con Caridad y podrás encontrar desde sartenes hasta cunas y carriolas para niño. Si se desea adquirir productos apócrifos de lentes y relojes se debe acudir a la Rinconada en donde encontrara todos estos productos, así como las novedades que van surgiendo en el mercado mundial. Si se desea adquirir la llamada fayuca que es todo aquel producto que tiene mayor demanda en el mercado mundial se debe acudir a la calle de Caridad en su esquina con el deportivo, así también sobre la calle de Caridad encontrara plazas comerciales que de dedican a la venta de estos productos. Pero si desea buscar libros usados, antigüedades y una diversidad de productos usados se debe de acudir a la calle de Tenochtitlán en su esquina con Rivero y que llega hasta la iglesia de la Nuestra Señora de la Concepción o mejor conocida como la conchita, que es donde termina la zona comercial. Si se desea adquirir productos eróticos se debe acudir a la calle Tenochtitlán en su esquina con el Callejón Tenochtitlán en donde se encuentran estos productos que Angie Jiménez Novoa describe de la siguiente manera: Al desembocar por esa puerta angélica se llegaba justo a un puesto de fetiches sexuales: penes de goma color carne o traslúcidos, bicéfalos, diamantados, de cúpula mongoloide, rascahuele, gigantescos, chaparritos, con texturas puntiagudas, inflables, enchuecados e intercambiables, deformes con un segundo miembro diametralmente más pequeño; diseñado para llenar vacíos mas estrechos pero no menos excitables. (Jiménez Novoa, Angie; 2003, P. 131-132) Tener conocimiento del área comercial así como las rutas de salida puede ser la diferencia entre ser asaltado o salir airoso con lo que se fue a buscar. De hecho, los mismos comerciantes recomiendan a los visitantes que cuando acudan a Tepito se dirijan directamente al lugar donde encontraran lo que buscan. Recomiendan no caminar por detrás de los puestos, no ingresar a las cerradas, evitar circular por las calles de Peralvillo a la altura de la calle Estanquillo al Eje 1 Norte Héroes de Granaditas, moverse por la zona comercial y no buscar ningún tipo de atajo, no llevar telefonía celular ostentosa ni joyería, moverse con soltura por la zona comercial aunque no la conozca, preguntar sólo a los comerciantes donde se pude conseguir algún producto y evitar preguntar los precios en un puesto y otro. 3. 7. 2 Manifestaciones religiosas en la Zona C Debo hacer notar que no es la primera vez que recorro algunas partes de la zona C, desde pequeño he tenido contacto con ella ya que un día a la semana acudía a la calle de Jesús Carranza por consumibles para la elaboración de fajas para realizar ejercicio. Así también, desde niño ingrese a varias vecindades en donde se ubicaban talleres que manufacturaban el producto antes mencionado; ya en mi juventud, acudía cada fin de semana a esta zona comercial a comprar las cosas que necesitaba, principalmente ropa y otros artículos de moda. No obstante de que conozco algunas calles principalmente de la calle de Tenochtitlán en donde se ubican los ayateros y bazaristas de los cuales tengo varios amigos, desconocía otras zonas de especialización y debido a ello acate las recomendaciones de los comerciantes para sobrevivir en esta zona. Bueno, todos menos uno: no caminar por detrás de los puestos metálicos en donde uno se encuentra desprotegido ya que lucen solos. Por lo tanto, acudía a mi amigo José Luis Rosas Guadalupe para que me acompañara en mi recorrido ya que lo que es de mi interés se encuentra precisamente en el espacio que no debe ser recorrido. Pensé una persona se expone demasiado, pero dos ya no son tan viables para asaltar. Aun así, en donde veíamos a un gripo de varones a las afueras de una vecindad o una Unidad de Renovación Habitacional evitábamos pasar por ahí y cambiar el rumbo, volviendo después para completar el recorrido y como lo manifesté líneas arriba, se evitaron las cerradas y las calles que son consideradas por la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal como extremadamente peligrosas y que ya he señalado, fuera de esas calle el recorrido fue total. Antes de iniciar mi recorrido por esta zona inferí a priori que las manifestaciones de lo sagrado principalmente el erigir altares en la vía pública serían menos y no tan espectaculares como los que se presentan en la Zona A y B debido a la lógica que impera en esta zona. A continuación presento cada una de las manzanas y las manifestaciones religiosas de los tepiteños expresadas en el espacio público. Para ello he de seguir la misma secuencia que en las zonas A y B, es decir, manzana por manzana. 3. 7. 3 Descripción de las manzanas que componen la zona C63 En el plano de barrio del INEGI aparecen dos triángulos entre la calle Caridad y el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas, uno de ellos es un parque en el cual se ejerce el comercio en todo su perímetro. Las chacharas son la mercancía que más se oferta en este parque y aquí se puede encontrar herramienta usada, libros y revistas usadas, ropa de segunda mano, venta de tecnología usada entre otros. Manzana 1 C (Obrero- Díaz de León- Manuel Doblado) 63 las manifestaciones religiosas que me interesan son la de los habitantes del barrio de Tepito que llevan al espacio público. Esta claro que los comerciantes tienen sus altares o imágenes en sus espacios y que pueden ir desde San Judas Tadeo que es el más presente, pasando por la Santa Muerte, el Divino Niño, San Lázaro, San Martín Tours o Caballero, este último con una serie de elementos instrumentales que connotan la buena suerte por una parte y el alejamiento de las envidias por el otro. En la esquina de la calle Obreros con Díaz de León se encuentra un altar en la vía pública con construcción de concreto y que tiene una dimensión de dos metros de frente por dos de largo. El altar esta protegido en la entrada por una cadena que impide todo pasó. Las imágenes religiosas que ahí se encuentran son: Al centro y en lo alto un cuadro de la Virgen de Guadalupe, al igual que tres imágenes de bulto de la misma virgen. Un Cristo crucificado Manzana 2 C (Obreros- Manuel Doblado, Díaz de León- Eje 1 Norte Héroes de Granaditas) En la calle de Obreros y a lado de una tienda de abarrotes se encuentra un altar que tiene la particularidad de que es un nicho que para ser construido se tuvo que abrir parte de la construcción para formarlo. Su forma es triangular y son dos espejos unidos por un vértice que sirven de pared a la Virgen de Guadalupe, en donde, el efecto óptico es que se trata de tres imágenes. Sobre la acera del Eje 1 Norte Héroes de Granaditas, a cinco metros de la calle Obreros y a diez metros de la estación del Metro se encuentra un altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: Al centro la Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo El Divino Rostro Sobre la acera del Eje 1 Norte y a pocos metros de la calle Manuel Doblado se encuentra en un establecimiento que vende productos del mar un altar en una ventana que contiene las siguientes imágenes: Una imagen de bulto de San Simón un santo popular que se representa sentado con cigarro en la boca, con sombrero y una botella de licor en una mano. San Judas Tadeo San Martín Tours o Caballero (sin aditamentos extras) Una rana64 64 En el mundo de los rituales de respuesta inmediata una rana connota fortuna y es puesta en negocios para atraerla. Sobre la acera de Manuel Doblado el tipo de vivienda es de Renovación Habitacional. En esta acera no se encontraron altares en la vía pública. En la acera de Díaz de León el tipo de vivienda son Unidades de Renovación Habitacional. Aquí no se ejerce comercio y la vía pública es utilizada como estacionamiento. A escasos diez metros con la esquina de Obreros en la entrada de una Unidad de renovación Habitacional se encuentran dos pinturas de la Santa Muerte. Manzana C 3 (Manuel Doblado- Eje 1 Norte Héroes de GranaditasGonzález Ortega- Díaz de León) Sobre la acera del Eje 1 Norte no se encontraron altares en la vía pública. Sobre la acera de Manuel Doblado y casi con esquina con el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas se encuentra un mural con la imagen de la Virgen de Guadalupe. En la esquina de Díaz de León y González Ortega cercano a una herrería se encuentra un altar en la vía pública el cual se encuentra sujeto a la pared el cual contiene las siguientes imágenes: La Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Una Cruz con el nombre de un varón en que señala la fecha en que murió. Sobre la acera de Díaz de León se encuentran dos altares sujetos en la pared y en la parte alta de una tienda de abarrotes en donde uno de ellos contiene la siguiente imagen: Imagen de bulto de la Santísima Trinidad. El otro altar contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Manzana C 4 (Díaz de León- González Ortega- Caridad- Obreros- Manuel Doblado) En la acera de Díaz de León a las afueras de una Unidad de Renovación habitacional se encuentra un altar sujeto a la pared con las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe Virgen de Juquila La Sagrada Familia San Judas Tadeo Sobre la acera de Caridad con esquina con González Ortega se encuentran dos pinturas murales a las afueras de una tienda de abarrotes, en ella se pueden apreciar los siguientes elementos sagrados: 1.- pintura de Nuestro Señor de Chalma en primer plano y uno de sus costados encontramos pintado el santuario de Chalma y en el otro costado la representación de María con el cuerpo de Jesús muerto, esta imagen es conocida por ―La Dolorosa‖ 2.- En la otra pintura mural se aprecia solamente a San Judas Tadeo Manzana C 5 (Eje 1 Norte Héroes de Granaditas- Florida- Caridad- Cerrada de González Ortega- Díaz de León- González Ortega) En la acera de González Ortega con la cerrada del mismo nombre se encuentra un altar de grandes dimensiones que abarcan toda la esquina en un espacio en donde no se ejerce el comercio ya que la cerrada sirve como bodegas y negocios establecidos que venden al mayoreo. En esa cerrada el tipo de vivienda es de casas particulares de dos niveles. Las imágenes –todas ellas de bulto- que se encuentran en el altar son las siguientes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Cristo resucitado Cristo crucificado Santo Niño de Atocha Virgen de San Juan de los Lagos Dos representaciones de Juan Pablo II San Miguel Arcángel San Charbel Majluf San Juan Diego Sagrado Corazón San Martín Tours o Caballero San Felipe de Jesús El Niño Dios vestido con su atuendo típico del día de la Candelaria Figuras del nacimiento (Reyes magos, María, José, animales, el pesebre) Al fondo de la cerrada de González Ortega se encuentra un altar en la vía pública del cual no tengo registro de las imágenes que ahí se encuentran ya que consideré de alto riesgo internarme en ese espacio. Sobre las aceras que forman la calle Díaz de León (se trata de una cerrada que conecta con la plaza comercial que se extiende hasta la calle Florida) el tipo de comercio que sobresale es la venta de línea blanca y electrónica. Ahí se encuentran dos manifestaciones de la religiosidad de los que ahí habitan (uno en cada acera) en donde las imágenes son las siguientes: 1.- Pintura mural con la imagen de San Judas Tadeo 2.- Altar en la parte alta de una pintura mural del Santuario de Nuestro Señor de Chalma con la representación de Cristo crucificado. En el altar superior encontramos imágenes de bulto y cuadros de: Virgen de Guadalupe Virgen de Juquila Cristo crucificado San Juan Diego Manzana C 6 (Florida- Eje 1 Norte Héroes de Granaditas- AztecasCaridad- Fray Bartolomé de las Casas) En la acera de la calle Florida casi a la mitad y en la entrada de una Unidad de Renovación Habitacional se encuentra un altar que contiene las siguientes imágenes: Santo Niño de Atocha Pintura de San Francisco de Asís Un cuadro de la Virgen de Juquila Una pintura de la Virgen de San Juan de los Lagos con un rosario alrededor de su cuello, a los pies de la virgen esta su santuario. Un cuadro con el Señor del veneno Un cuadro con la imagen del Niño Doctor Sagrado Corazón de Jesús San Miguel Arcángel Un placa con el nombre de varios varones que acaecieron y a su lado dos piezas de cerámica pintadas con los rostros de cuatro varones que se intuye son los que murieron. En la acera de Fray Bartolomé de las Casas el comercio que sobresale es la venta de productos de audio y video apócrifos, así como la venta de ropa en puestos de grandes dimensiones. El comercio de la acera va desde establecimientos que venden discos compactos originales y un negocio que vende imágenes diversas que van desde una Virgen de San Juan de los lagos, Arcángel Miguel, Elfos, ángeles de la llamada angelología, entre otros. Manzana C 7 (Aztecas- Callejón de Tenochtitlán- Tenochtitlán- Eje 1 Norte Héroes de Granaditas) Sobre la acera de Tenochtitlán el comercio que sobresale es la venta de ropa tanto en la banqueta como el arroyo vial. Aquí encontramos plazas comerciales que están especializadas en la venta de ropa –observe varios locales desocupados-. Es común ver a personas de origen asiático transitar o atender los locales en esta zona. En un local que tiene décadas de existir en donde se vende repostería se observa un altar a la Santa Muerte con varías representaciones de la misma y una representación de Yemayá. Sobre la acera del callejón Tenochtitlán casi con esquina con la calle Aztecas se encuentra un pequeño altar en la parte superior de la pared con la siguiente imagen: Solamente la Virgen de Guadalupe Sobre la acera de la calle Tenochtitlán en la entrada de una Unidad de Renovación habitacional y empotrado sobre la pared se encuentra un altar en donde la imagen central es: La Virgen de Guadalupe Sobre la acera del Eje 1 Norte Héroes de Granaditas se encuentran locales en donde la mercancía que sobresale es la venta de tecnología de punta. Los comerciantes han acondicionado la banqueta de tal manera que al transitar por ella da la impresión de que se esta en una plaza comercial. En esta acera y pintadas sobre las puertas metálicas que protegen el local comercial se encuentran los siguientes personajes: Virgen de Guadalupe Nuestro Señor de Chalma Manzana C 8 (Aztecas- callejón Tenochtitlán- Fray Bartolomé de las Casas- Tenochtitlán) En la acera del callejón de Tenochtitlán y casi con esquina Tenochtitlán se encuentra un altar en la parte superior en donde la imagen central es: La Virgen de Guadalupe Manzana C 9 (Tenochtitlán- Fray Bartolomé de las Casas- Jesús CarranzaEje 1 Norte Héroes de Granaditas) Sobre la acera de la calle Tenochtitlán y cerca del llamado el 40 o ―la fortaleza‖ que fue expropiado por el Gobierno del Distrito Federal y en donde actualmente se esta construyendo un complejo que dará servicio a la comunidad se encuentra un altar montada en la pared en donde la imagen central es: La Virgen de Guadalupe En la misma acera pero casi para llegar al Eje 1 Norte Héroes de Granaditas se encuentra una imagen pintada sobre azulejo y empotrada sobre la pared de: San Judas Tadeo Sobre la acera de Fray Bartolomé de las Casas se encuentran una serie de bodegas que ofertan productos varios principalmente productos de audio y video apócrifos, ello también el arroyo vial. En esta acera se encuentra un altar construido en concreto con guarniciones en el arroyo vial que comparte las aceras de las manzanas 13 y 14, en donde, la imagen central es: La Virgen de Guadalupe Sobre la acera de la calle Jesús Carranza a las afueras de un local peletero se encuentra un altar construido en concreto con las siguientes imágenes y elementos: La Virgen de Guadalupe La Santísima Trinidad Una urna funeraria Manzana C 10 (Jesús Carranza- Libertad- Peralvillo- Eje 1 Norte Héroes de Granaditas) Las aceras de las calles Libertad y Estanquillo que pertenecen a las manzanas C 10, C 11 y C 12; no serán descritas de manera amplia, ni se sentenciara si existe altar alguno. Son consideradas por las autoridades del Gobierno del Distrito Federal, así como por los habitantes como zona de alto riesgo. En esta manzana no se encontraron altares en la vía pública ni ninguna imagen o símbolo que connote lo sagrado para los habitantes. Manzana C 11 (Jesús Carranza- Libertad- Peralvillo- Estanquillo) Sobre la acera de la calle Jesús Carranza se encuentran locales peleteros y a unos veinte metros de la esquina con Estanquillo se encuentra un altar elaborado en concreto, sin protección ya que el vidrio esta roto, en el cual se encuentra la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe pintada en técnica de aerografía. En la acera de la calle Peralvillo en frente a una Unidad de Renovación Habitacional y en la jardinera encontramos un altar elaborado en concreto con guarnición, limpio, con iluminación y bien pintado, en este altar las imágenes son las siguientes: Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Imagen de bulto de San Judas Tadeo Imagen de bulto de Juan Diego Sobre la misma acera y casi con esquina con Estaquillo de frente a una tortillería se encuentra un altar de grandes dimensiones elaborado en concreto, bien protegido con una reja en color negro erigido a la Santa Muerte, en el cual encontramos las siguientes imágenes: Imagen de bulto de tamaño natural de la Santa Muerte vestida con un vestido de una sola pieza en color rosa y un sombrero ancho con pluma en la parte alta –la representación es similar a la de la catrina de José Guadalupe Posada, solo que en color rosa- . Imagen de bulto de tamaño mediano de la Santa Muerte vestida de igual manera que la de tamaño natural. Una Bagua (tablero con una serie de números y un espejo octagonal al centro) Una gran variedad de imágenes de bulto de la Santa Muerte en diversas representaciones. En la parte de la reja se observan escapularios con la imagen de la Santa Muerte pendiendo de la misma. En la misma reja se encuentran colillas de cigarros. Un letrero en donde se anuncia la invitación a la ceremonia que se celebra en ese altar los días catorce de cada mes a las 19:00 horas. Manzana C 12 (Jesús Carranza- Estanquillo, Matamoros, Peralvillo) Sobre la acera de Peralvillo y de frente a un local que vende consumibles para la elaboración de CD‘S se encuentra un altar elaborado en metal que contiene las siguientes imágenes: San Judas Tadeo Detrás de la imagen se encuentra inscrita la frase San Judas Tadeo que nunca nos falte dinero y salud. En la casi esquina con la acera de estanquillo se encuentra un altar elaborado en concreto con rejas que lo protegen, con las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Cristo crucificado En la esquina de la acera de Peralvillo con Estanquillo en la esquina de la plaza comercial que luce abandonada en donde debería de ir la nomenclatura de la calle se lee la siguiente inscripción: Bienvenidas células de la iglesia Monte Sinaí. En la acera de enfrente sobre la misma calle de Matamoros se encuentra un parque público y la iglesia de Santa Ana, de la misma proporciono la siguiente información extraída de un cuadro informativo sobre la historia de la misma que se encuentra al interior a la izquierda de la puerta principal: Comisión Nacional del Arte Sacro Arquitectura Fachada de estilo barroco sobrio. Dos torres de planta cuadrada, campanarios de planta octagonal. Portada De cantera aparente, en dos cuerpos. En el primero la imagen de San Joaquín. En el segundo dos querubines sobre volutas. Al centro, la imagen de bulto de Santa Ana con la Virgen Niña, flanqueada por ángeles y coronada por un escudo. Planta de norte a sur de una sola nave falso crucero, cubierta por cúpula con linternilla. Molduras caprichosas y dos grupos de querubines en las claves de los muros; en los arcos, junto al anagrama de Cristo, grutescos envolviendo el anagrama de María. El ábside, un retablo al estilo churrigueresco, de este siglo, donde se alojan las imágenes de Jesús Resucitado, la Purísima Concepción y San José. Piso y tambrín, de mármol poblano. En 1796 celebró aquí su cantamisa el P. Mariano Matamoros, héroe insurgente. Imágenes de bulto del siglo XIX: Virgen del Carmen Santa Teresita Santa Ana Jesús Nazareno San Francisco de Asís San Joaquín Ecce Homo La Guadalupana del siglo XVIII Del siglo XIX San Zacarías Lienzos al óleo La Santísima Trinidad San Vicente de Paul San Carlos Un crucifijo del siglo XVIII Capilla dedicada a la Virgen de San Juan de los Lagos, la imagen data del siglo XIX. Cuatro lienzos relativos a la vida de Jesús (siglo XIX), el Buen Pastor, la Magdalena y la Virgen María y la Samaritana. Manzana C 13 (Jesús Carranza- Matamoros- Tenochtitlán- Fray Bartolomé de las Casas) En la esquina de Matamoros y Tenochtitlán se encuentra una tienda de abarrotes en donde encontramos en primer plano dos urnas que contienen imágenes de la Santa Muerte, con buena iluminación. Manzana C 14 (Tenochtitlán- Matamoros- Aztecas- Fray Bartolomé de las Casas) No se encontraron altares en la vía pública u algún otro símbolo que connote el universo sagrado de los habitantes. Manzana C 15 (Jesús Carranza- Rivero- Tenochtitlán- Matamoros) Sobre la acera de la calle Matamoros casi para llegar a la esquina con la calle Jesús Carranza se encuentra un altar sujeto a la pared en lo alto con la siguiente imagen: La Virgen de Guadalupe Sobre la acera de la calle Rivero casi esquina con la calle Tenochtitlán se encuentran cuatro imágenes colgando de la pared a la intemperie, ellas son: Virgen de Guadalupe Dos crucifijos San Judas Tadeo Manzana C 16 (Matamoros- Tenochtitlán- Rivero- Toltecas) La mitad de esta manzana la ocupa el mercado que en sus inicios fue conocido como el ―mercado de chacharas‖ y que ahora es conocido por el de los tenis, aun y cuando la venta de productos es diversa que va desde la venta de electrodomésticos, calzado usado, venta de ropa usada, equipo deportivo que va desde unos simples guantes de fútbol hasta equipo para físico constructivistas, chacharas y otros más. A las afueras del mercado sobre la calle Matamoros el comercio es variado y se puede encontrar desde productos de audio y video apócrifos, herramienta nueva, calzado, ropa nueva de saldo, ropa usada, tenis deportivos de importación y bazaristas. En la acera de la calle Rivero fuera de una Unidad de Renovación Habitacional se encuentra un altar en la vía pública construido en concreto, pero descuidado ya que tiene vidrios rotos y por ello mucho polvo. La imagen que se encuentra en este altar es: Virgen de Guadalupe Manzana C 17 (Jesús Carranza- Peñón- Tenochtitlán- Rivero) Sobre la acera de la calle Tenochtitlán a la mitad se encuentra un altar pegado a la pared con protección metálica que es difícil de apreciar ya que es franqueado por dos grandes puestos. Las imágenes que contiene este altar son: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Crucifijo Manzana C 18 (Tenochtitlán- Peñón- Toltecas- Rivero) No se encontraron altares en la vía pública ni símbolos que connoten el universo sagrado de los habitantes. Manzana C 19 (Peñón- Jesús Carranza- Constancia- Tenochtitlán) En la esquina de la calle Constancia y Tenochtitlán se encuentra un altar de construcción en concreto con detalles en azulejo, perfectamente bien cuidado; dicho altar se encuentra de frente a la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción. En este altar encontramos las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Cristo Crucificado Imagen de bulto de La Dolorosa En la acera de la calle Tenochtitlán a escasos diez metros de la esquina con Constancia se encuentra un altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: En la parte superior y ubicado en el exterior del altar se encuentra un cuadro de Nuestro Señor de Chalma con un rosario pendiendo del mismo. En la parte superior y ubicada en el interior del altar se encuentra un cuadro de la Virgen de Guadalupe y a sus pies una imagen de bulto de Juan Diego. Sobre el piso se encuentra una imagen de bulto de un ángel que contiene características de la corriente conocida como Angelología. En el exterior del altar y ubicado en la parte inferior una imagen de bulto del Ángel de la Guarda. En el exterior y ubicado en la parte superior izquierda encontramos la imagen de San Martín Tours o Caballero con diversos elementos que van desde una herradura, semillas y polvos atrae dinero. En el interior del altar se encentra la fotografía de una persona de la tercera edad junto al altar que estoy describiendo. En la calle de Constancia y a unos diez metros de la esquina que hace con la calle Tenochtitlán se encuentra lo que fue un altar en la vía pública –solo se mantiene la estructura de concreto- que ahora es ocupado por los comerciantes para mostrar sus mercancías. Esta estructura se encuentra no pegada a la pared sino a la contención que es el espacio que utilizan los comerciantes como asiento o trasfondo de su negocio. Manzana C 20 (Peñón- Tenochtitlán- Constancia- Toltecas) Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción o Iglesia de la Conchita La Iglesia de la Conchita presenta un diseño franciscano con una sola torre y un atrio pequeño. Su fachada se encuentra completamente descuidada, siendo su torre la que más daño presenta ya que faltan pedazos de concreto. Además no tiene ningún tipo de protección contra la intemperie. Las litografías e imágenes de bulto que se encuentran al interior de la Iglesia de la Conchita son las siguientes: En el altar mayor en la parte superior se encuentra incrustada sobre la pared la representación de la Santísima Trinidad. Debajo de la Santísima Trinidad encontramos un nicho con una imagen de bulto de Nuestra Señora de la Concepción posada sobre el mundo cruzado por una media luna y ángeles sosteniéndolo. Debajo de Nuestra Señora de la Concepción se encuentra el sagrario un anagrama con el símbolo del triangulo equilátero que simboliza a Dios Padre y una letra m mayúscula que simboliza a María. En las paredes laterales encontramos las siguientes imágenes: Imagen de bulto de San Judas Tadeo y debajo de él la pila de agua bendita que no contiene el líquido65. A los pies de la imagen se encuentra una cabeza de una imagen de bulto de menor tamaño del mismo santo66. 65 El hecho de que la pila de agua bendita no contenga el líquido tiene si razón de ser. Para efectuar rituales de respuesta inmediata es necesario el agua bendita de siete iglesias. También se utiliza el agua bendita para consagrar imágenes. Este tema lo toque en mi tesis de Maestría y lo volveré a desarrollar en el capítulo cuando hable de los rituales de respuesta inmediata. 66 A decir por uno de mis informantes los devotos le cortan la cabeza para ―presionar‖ al santo a que conceda lo pedido y sólo hasta que ha sido cumplido lo demandado se le vuelve a colocar. Este tipo de manifestaciones no es nuevo ya que al santo se le castiga para ejercer presión, tal es el caso de San Antonio de Padua al que se le esconde el niño y se le devuelve cuando Imagen de bulto de la virgen del Carmen Imagen de bulto dentro de un mueble con cristales del Divino Niño adornado con globos color rosa (de ese color es el atuendo del Divino Niño), juguetes como ofrenda y cartas de agradecimiento por haber concedido favores a los demandantes que están referidos a los hijos pequeños. Imagen de bulto de la Santísima Trinidad Imagen de bulto de la Virgen de la Candelaria Imagen de bulto de Jesús llevando de la mano al Divino Niño Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Imagen de bulto de San Martín de Porres Imagen de bulto de Cristo resucitado Imagen de bulto de San Lázaro Imagen de bulto de San Charbel Majluf con listones multicolores y leyendas escritos en los mismos dando gracias por los favores o bien haciendo una petición67. A la entrada del recinto se encuentra una imagen de bulto de Cristo Crucificado al centro. Sobre la calle y a las puertas del atrio se encuentra en un mueble de madera con cristal la imagen de bulto de Nuestra Señora de la Concepción. Manzana C 21 (Avenida del Trabajo- Caridad- González Ortega) En la esquina con la calle de Caridad a un lado de una base de taxis se encuentra un altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Imagen de bulto de San Judas Tadeo Sobre la acera de la calle de caridad a las afueras de un local de ropa se encuentra un altar sobre la banqueta construido en concreto que contiene las siguientes imágenes: cumple con su misión de atraer a la persona deseada. También en el culto a la Santa Muerte los devotos castigan a la misma quitándole una mano no se le devuelve hasta que haya cumplido con lo demandado. Existen antecedentes en que comunidades han tirado a la basura a los santos que no cumplen con lo demandado. 67 Cuando toque lo referente a los rituales de respuesta inmediata haré énfasis en que los artículos que se ofrendan, así como en los colores ya está implícita la petición; ejemplo: rojoamor, dorado o amarillo- solución económica. Nuestro Señor de Chalma San Judas Tadeo Virgen de la Caridad En la acera de la calle González Ortega franqueado por puestos metálicos se encuentra un altar en la vía pública edificado en concreto con una forma de tres triángulos equiláteros, en este altar las imágenes son las siguientes: En la parte alta y protegido con cristal se encuentra a Cristo Crucificado En el triángulo del centro la imagen de bulto de la Virgen de Zapopan En un triángulo de la parte baja una imagen de bulto de San Judas Tadeo. En el otro triángulo de la parte baja la imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe. Manzana C 22 (González Ortega- Caridad- Rivero- 1ª cerrada de Rivero- 2ª cerrada de Rivero- Avenida del Trabajo) En esquina con Avenida del Trabajo se encuentra un pequeño altar en forma de cruz, sin protección de vidrios y descuidado que no tiene cuadros ni imágenes de bulto, sino estampas, entre las cuales se observan: San Judas Tadeo Virgen de Guadalupe Sagrado Corazón de Jesús Divino Rostro A escasos metros con la calle Caridad se encuentra un altar que contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe Virgen de San Juan de los Lagos Continuando el perímetro del mercado de abastos en una de sus aceras tiene de frente otro mercado que oferta productos diferentes. En la cerrada que contiene las dos aceras de los mercados se establecen comerciantes de ropa nueva de saldo. Los mismos comerciantes han techado la cerrada y se encuentra perfectamente resguardada de las inclemencias del clima. En esta cerrada en la parte final se encuentra un altar en la parte alta de la pared que contiene la siguiente imagen: Virgen de Guadalupe Continuando el perímetro del mercado en el arroyo vial encontré un puesto de aproximadamente dos metros en donde se oferta la lectura de cartas y el diseño de rituales de respuesta inmediata por parte de un varón cercano los 40 años y dos mujeres cercanas a los treinta años. En este puesto también se venden piedras, inciensos y fetiches y el dependiente diseña de acuerdo a las necesidades de los demandantes collares o pulseras con las piedras. Sobre esta acera se encuentra arriba de la banqueta un altar en la vía pública que contiene los siguientes elementos: Imagen de bulto de San Judas Tadeo Imagen de bulto de la Virgen de Guadalupe Fuera de este altar no se encuentran otros en lo que resta de la acera de Rivero que desemboca en la Avenida del Trabajo. NOTA: La 1ª y la 2ª cerrada de Rivero no se hace descripción de sus características ya que es considerada como zona de riesgo. Sobre el arroyo vial de la calle Rivero y al inicio de la zona comercial que inicia en la Avenida del Trabajo se encuentra un puesto que exhibe un espectacular en que se anuncia un especialista en la santería que oferta sus servicios e inician a personas en este movimiento. A continuación escribo el texto del espectacular en donde he de omitir el nombre y los teléfonos de quién los ofrece: OMO ELEGGUA Se pone a tus órdenes para darte un extenso surtido de productos y servicios de santería desde un Eleque hasta la iniciación en la Ocha. Manzana C 23 (Caridad- Toltecas) En esta manzana encontramos la cancha de fútbol conocida como el Maracaná y la iglesia San Francisco de Asís Tepito. Tanto la iglesia como la cancha de fútbol son imperceptibles a los transeúntes ya que son cubiertos en su totalidad por los puestos metálicos de los comerciantes, además de que la calle es angosta y la entrada para la iglesia no se aprecia como tal ya que los comerciantes han extendido su territorio hasta el atrio de la misma. Llama la atención que al salir del espacio de la iglesia uno encuentre a escasos cinco metros puestos en donde se oferta principalmente lentes apócrifos. Antes de iniciar la descripción de las imágenes que se encuentran en el interior de la iglesia he de mencionar que realice tres intentos para elaborar el registro. En los dos anteriores la iglesia se encontraba cerrada en un horario de las 12:00 horas y en otro a las 14:00 horas, ello contrasta con la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción o mejor conocida como la conchita y la iglesia de Santa Ana que se encuentran abiertas a la feligresía. Por la denominación de la iglesia se puede pensar que San Francisco de Asís es el símbolo mayor, pero ello difiere de la práctica, ya que la Madre del Buen Consejo es a quién recurren los feligreses68. Si tomáramos una fotografía aérea de la iglesia San Francisco de Asís observaríamos que tiene una forma de cruz y se debe resaltar que carece de una torre que se pueda apreciar desde varios puntos, quizás por ello el transeúnte no logre percibir que ahí se encuentra una iglesia. En la entrada de la iglesia se encuentran las siguientes imágenes: En una urna la imagen de bulto de San Francisco de Asís En una urna la imagen de bulto del Divino Niño En el altar mayor encontramos a: En lo alto a Cristo crucificado 68 Este patrón de que una imagen desplace a la otra se puede observar en el Templo de San Hipólito que se encuentra a las afueras del metro Hidalgo y que la feligresía conoce y llama como la iglesia de San Judas Tadeo. El mismo caso sucede en la iglesia de San Francisco de Asís ubicado en la calle Madero y casi esquina con Eje Central Lázaro Cárdenas, en donde la feligresía ha empezado a nombrar como la iglesia de San Charbel ya que ahí se encuentra dicho santo y las manifestaciones son mayores hacia él. Un cuadro de la Santísima Trinidad Una vitral de la representación de San Francisco de Asís bajando de la cruz a Jesús Imagen de bulto de San Francisco de Asís Imagen de bulto de la Madre del Buen Consejo En la bóveda encontramos a los cuatro evangelistas con los símbolos que los representan: San Juan con un águila San Marcos con un león San Lucas con un buey San Mateo con un ángel Debajo de la bóveda se encuentra un vitral con la Madre del Buen Consejo. En una de las alas encontramos: El nicho de la Madre del Buen Consejo Imagen de bulto de La Dolorosa Imagen de bulto de Jesús llevando de la mano al Divino Niño Imagen de bulto de San Martín de Porres La otra ala lleva por nombre capilla del Altísimo, en ella encontramos: El nicho donde se encuentra el Altísimo protegido con una reja y candado, además de varios reclinatorios. Imagen de bulto de Nuestra Señora de Fátima Imagen de bulto del Sagrado Corazón de Jesús Un cuadro del Espíritu Santo en lo alto del nicho del Altísimo. En las paredes del corredor se observan varias representaciones y si consideramos al arco del interior de la iglesia se puede observar que el diseño es diferente ya que en una mitad encontraremos grandes espacios con imágenes de bulto y cuadros de tamaño natural y en la otra mitad pequeños niños con imágenes de bulto pequeñas protegidas con un virio que contiene la leyenda Ruega por Nosotros. En la primera mitad encontramos las siguientes imágenes: Cuadro de tamaño natural de la Virgen de Guadalupe Cuadro de tamaño natural de la Santísima Trinidad Cuadro de tamaño natural de San Judas Tadeo Cuadro de tamaño natural de Juan Pablo II Imagen de bulto de la Santísima Trinidad Imagen de bulto de la Madre del Buen Consejo En la otra mitad encontramos las siguientes imágenes: En una columna la imagen de bulto de San Antonio de Padua y en la parte de abajo un ―perchero‖ de madera en donde se aprecian pulsera elaboradas con listón con peticiones al santo. En otra columna se encuentra la imagen de bulto de San Charbel Majluf con otro ―perchero‖ en que se aprecian más de un centenar de listones de varios colores en donde los devotos a este santo hacen sus peticiones o bien dan gracias por el milagro recibido. Las siguientes imágenes se encuentran dentro de nichos protegidos con cristal: Imagen de bulto de Santa Bárbara y a un costado se puede leer la vida de la misma, así como la oración ―oficial‖ y las peticiones que se le pueden hacer. Imagen de bulto de Nuestro Señor de Chalma Imagen de bulto de la Virgen de Zapopan Imagen de bulto de la Virgen de Juquila En un solo nicho las imágenes de bulto de San José, Santo Niño de Atocha y San Antonio de Padua. Las siguientes imágenes están representadas ya sea en un cuadro o imagen de bulto: Cuadro del Resucitado Cuadro de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro Imagen de bulto del Divino Niño Cuadro del beato Juan Diego Dos imágenes de Bulto de Nuestra Señora de Fátima Imagen de bulto de tamaño natural de San Judas Tadeo Imagen de bulto de la Ascensión de Cristo Imagen de bulto de tamaño natural y dentro de una urna del Señor de la Cañita Cuadro de San Miguel Arcángel Cuadro del Señor de los Milagros Cuadro de aproximadamente dos metros de la Virgen de Guadalupe Continuando con el recorrido del perímetro de la iglesia y la cancha de fútbol en la acera de la calle Caridad se encuentra una pintura sobre la barda que apenas se asoma ya que ahí se encuentra un puesto metálico la siguiente imagen: Sagrado Corazón de Jesús Manzana C 24 (Rivero- Toltecas- Peñón- Avenida del Trabajo) En el ángulo que forma acera de Rivero y Avenida del trabajo se encuentra una plaza comercial, frente a un modulo de policía. Esta plaza comercial tiene varias jardineras y a lado de una de ellas se encuentra un altar construido en concreto con detalles en azulejos que contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Arcángel Gabriel Juan Diego Sobre la acera de Avenida del Trabajo se encuentra un altar en la vía pública que ha sido montada sobre la estructura metálica que sirve como señalamiento de tránsito. En este altar se encuentran las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe San Judas Tadeo Virgen de la Macarena San Antonio de Padua Dos crucifijos Juan Diego También se encuentra otro altar en la vía pública que contiene las siguientes imágenes: Virgen de Guadalupe El Señor del Veneno Un crucifijo Sobre la acera de la calle de Rivero en un local del complejo comercial se encuentra un altar erigido en honor de una persona de apodada ―Guayabita‖, de hecho se encuentran varias playeras con su fotografía y una fecha. También se encuentran playeras que contienen la leyenda ―Grupo San Juan Diego‖ y ―Chalmeros de Tepito‖. Las imágenes que se encuentran en este local son las siguientes: Juan Diego San Judas Tadeo Nuestro Señor de Chalma Virgen de Guadalupe Virgen del Carmen San Antonio de Padua San Miguel Arcángel Virgen de Juquila Santo Niño de Atocha San Charbel Majluf 3. 8 El universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito de acuerdo a sus manifestaciones religiosas en el espacio público El criterio que se empleó para llevar a cabo este censo de imágenes es el siguiente: Solamente se considero una representación por altar aun y cuando el altar tuviera varias representaciones de la misma. Se evito incluir en el censo las imágenes de la iglesia San Francisco de Asís Tepito, la de Nuestra Señora de la Concepción y la de Santa Ana. Solamente se consideraron todas las manifestaciones expresadas en los espacios públicos ya sean altares o pinturas murales que están visibles al ojo del transeúnte. Cristo crucificado será ordenado junto con Nuestro Señor de Chalma ya que el habitante del barrio así lo considera. 3. 8. 1 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona A Virgen de Guadalupe presente en 24 altares San Judas Tadeo presente en 23 altares Nuestro Señor de Chalma presente en 11 altares Virgen de San Juan de los Lagos presente en 10 altares Santo Niño de Atocha presente en 10 altares Sagrado Corazón de Jesús presente en 7 altares San Miguel Arcángel presente en 4 altares Cristo Rey presente en 3 altares Divino Niño presente en 3 altares San Charbel Majluf presente en 3 altares San Francisco de Asís presente en 3 altares Santísima Trinidad presente en 3 altares Ángeles pertenecientes a la Angelología presente en 2 altares Eleggua presente en 2 altares Juan Pablo II presente en 2 altares San Lázaro o Babaluaye69 presente en 2 altares Señor del Veneno presente en 2 altares Virgen de Juquila presente en 2 altares Arcángel Gabriel presente en un altar Biblia presente en un altar Divino Rostro presente en un altar Beato Juan Diego presente en un altar María presente en un altar Niño de las Suertes presente en un altar Niño de Mezquitic o también conocido como del Cacahuatito presente en un altar Oyá presente en un altar San Antonio de Padua presente en un altar San Martín de Porres presente en un altar San Simón (santo popular guatemalteco) presente en un altar Santa Clara de Asís presente en un altar Santa Muerte presente en un altar Última Cena presente en un altar Virgen de la Candelaria presente en un altar Yemayá presente en un altar 69 Tanto San Lázaro como Babaluaye se representan de forma similar: un anciano con una muleta acompañado de un perro. 3. 8. 2 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona B Virgen de Guadalupe presente en 11 altares Nuestro Señor de Chalma presente en 7 altares San Judas Tadeo presente en 6 altares Virgen de San Juan de los Lagos presente en 4 altares Santo Niño de Atocha presente en 2 altares Última Cena presente en 2 altares Sagrado Corazón de Jesús presente en un altar San Charbel Majluf presente en un altar Santa Muerte presente en un altar Virgen de Juquila presente en un altar Virgen de la Candelaria presente en un altar 3. 8. 3 Imágenes presentes en el barrio de Tepito en la zona C Virgen de Guadalupe presente en 35 altares San Judas Tadeo presente en 23 altares Nuestro Señor de Chalma presente en 16 altares Beato Juan Diego presente en 7 altares Virgen de Juquila presente en 4 altares Sagrado Corazón de Jesús presente en 3 altares San Martín Tours o Caballero presente en 3 altares San Miguel Arcángel presente en 3 altares Santo Niño de Atocha presente en 3 altares Santa Muerte presente en 3 altares Virgen de San Juan de los Lagos presente en 3 altares Divino Rostro presente en 2 altares La Piadosa presente en 2 altares San Antonio de Padua presente en 2 altares San Charbel Majluf presente en 2 altares Santísima Trinidad presente en 2 altares Señor del Veneno presente en 2 altares Ángel perteneciente a la angelología presente en un altar Ángel de la Guarda presente en un altar Arcángel Gabriel presente en un altar Bagua presente en un altar Cristo Resucitado presente en un altar Juan Pablo II presente en un altar Niño Dios presente en un altar Niño Doctor presente en un altar Sagrada Familia presente en un altar San Felipe de Jesús presente en un altar San Francisco de Asís presente en un altar San Simón (santo popular guatemalteco) presente en un altar Virgen de la Caridad presente en un altar Virgen de la Macarena presente en un altar Virgen de Zapopan presente en un altar Virgen del Carmen presente en un altar 3. 9 Las cifras finales Por último, ofrezco las cifras finales sumando las tres zonas y presentando una sola cifra; ellas son: Virgen de Guadalupe en 70 altares San Judas Tadeo en 52 altares Nuestro Señor de Chalma en 35 altares Virgen de San Juan de los Lagos en 17 altares Santo Niño de Atocha en 15 altares Sagrado Corazón de Jesús en 11 altares Juan Diego en 8 altares Virgen de Juquila en 7 altares San Miguel Arcángel en 7 altares San Charbel Majluf en 6 altares Santísima Trinidad en 5 altares Santa Muerte en 5 altares Señor del Veneno en 4 altares San Francisco de Asís en 4 altares Arcángeles de la angelología en 3 altares Cristo Rey en 3 altares Divino Niño en 3 altares Divino Rostro en 3 altares Juan Pablo II en 3 altares San Antonio de Padua en 3 altares San Martín Tours o Caballero en 3 altares Última Cena en 3 altares Arcángel Gabriel en 2 altares Elegguá en 2 altares La Piadosa en 2 altares San Lázaro o Babaluaye en 2 altares San Simón santo popular en 2 altares Virgen de la Candelaria en 2 altares Ángel de la Guarda en un altar Bagua en un altar Biblia en un altar Niño Dios en un altar María en un altar Niño de las Suerte en un altar Niño de Mezquitic o conocido como del Cacahuatito en un altar Niño Doctor en un altar Oyá en un altar Sagrada Familia en un altar San Felipe de Jesús en un altar San Martín de Porres en un altar Santa Clara de Asís en un altar Virgen de la Caridad en un altar Virgen de la Macarena en un altar Virgen de Zapopan en un altar Virgen del Carmen en un altar Yemayá en un altar 3. 10 A manera de colofón: las vicisitudes de mi transitar por el espacio en la búsqueda del dato En el último apartado del segundo capítulo me di la oportunidad de externar que el barrio de Tepito ha sido construido desde el miedo principalmente por los medios de comunicación impresos y electrónicos. Debo confesar que el miedo a los espacios del barrio de Tepito no lo he perdido aun y cuando en mi transitar tuve la oportunidad de crear una red que un principio era de informantes y que después se convirtió en una red donde podía encontrar el apoyo solidario además de protección cuando las cosas no salían bien. Con mi equipo de audio y video, mi diario de campo y una docena de folders con una carta del Posgrado de Antropología de la ENAH dirigida a los habitantes del barrio de Tepito, la mañana del 8 de enero del 2009 dio inicio mi recorrido en la esquina de Circunvalación y Jarciería. Ahí encontré el primer altar erigido en la vía pública a las afueras de una Unidad de Renovación Habitacional. Me acerque al altar y di inicio al registro de las imágenes que ahí se encontraban y aunque no había personas en la calle me sentía observado por lo que era difícil utilizar mi diario de campo. De ahí que todas mis anotaciones fueron elaboradas en espacio tales como parques públicos, paradas del camión, iglesias, puestos de comida instalados en la vía pública o bien –de manera discreta- en mi grabadora de audio. El primer contacto que tuve fue con una mujer que llevaba a sus hijos a la escuela. Le pedí si me permitía tomar fotografías a su altar explicando el motivo de ello. Me sometió a un rápido interrogatorio que tenía como fin saber el porque de mi presencia en su espacio y lo que pretendía hacer con las fotografías del altar. Ella accedió a que tomara las fotografías después de quedar conforme con mis respuestas. El interrogatorio se convirtió en parte de mi cotidianidad y no había calle en donde tenía que dar explicación tras explicación. El interrogatorio de las mujeres y los varones de edad madura eran más tranquilos y lograba convencerlos que mi presencia respondía a un trabajo de investigación, de hecho, ellos mismo me advertían por donde tenía que extremar precauciones. Los interrogatorios que hacían los jóvenes eran más extensos y no bastaba con mis respuestas ya que exigían comprobar mi personalidad además de mostrar ―pruebas‖ como era mi credencial de la institución a que pertenezco. En diversas ocasiones pude salir avante gracias al conocimiento que tengo sobre el barrio debido a la extensa lectura de los materiales usados para el estadio de la cuestión. Otras tantas en que salí avante fue conocer a personas que viven en el barrio y que gozan de determinado conocimiento. Aunque esta última no es un estrategia que uno pueda usar mucho ya que si algo distingue al barrio de Tepito es el desconocimiento de las personas para con sus vecinos; ello quizá dado porque el anonimato trae buenos dividendos, es decir, si no se quién eres tampoco se a lo que te dedicas y si no se a lo que te dedicas no represento un peligro. Había comentado que las estrategias diseñadas para obtener los datos desde el escritorio suenan bien, pero lo que nos permite salir avante es la capacidad de improvisación. Cuando diseñe las estrategias en el escritorio tenía presente que las probabilidades de ser asaltado eran altas debido a dos factores: a. La disciplina exige el posicionarse ante los informantes, ello es, dejar siempre en claro que el antropólogo esta ahí porque necesita de la información que ellos proporcionan y que será trabajada con ética profesional. b. Por lo anterior, se elimina la posibilidad de poderse mimetizar en el medio ya que se trae consigo elementos que establecen la diferencia como lo puede ser los artículos que uno utiliza para elaborar sus registros. Pues bien, el martes 20 de enero del 2009 fui asaltado por un pareja de jóvenes varones que me abordaron y pistola en mano me despojaron de mi cámara fotográfica, mi teléfono celular, el dinero que traía y, logrando negociar con ellos logré que me devolvieran mis documentos. Después de este asalto se suscitaron una serie de llamadas a los números que había en mi agenda para que proporcionaran información mía. Este evento me generó un shock que me llevó a tomar un descanso de unos días para volver después al barrio. En esos días tuve el apoyo total de mi directora de tesis la Dra. Paloma Escalante Gonzalbo que acudiendo a su experiencia me llevó a replantear la estrategia para obtener el dato. Las estrategias a seguir después del evento consistían en: Realizar mi recorrido en compañía de alguien al que previamente lo había ―capacitado‖ sobre la labor de antropólogo y los datos que necesitaba obtener, Evitar traer conmigo cualquier tipo de instrumento de registro y abogar a mi memoria y la de mi acompañante, Cambiar mi teléfono celular por unos de los más antiguos y casi sin valor que hay en el mercado, además de evitar tener nombres y teléfonos en la agenda, Llevar solamente el dinero suficiente para el transporte y los alimentos, Evitar llevar documentos de valía y solamente una credencial que no incluyera mi dirección y teléfono, Llevar siempre en mis manos un libro con un separador. Aun y con estas estrategias fui asaltado en dos ocasiones con el llamado ―abrazo del diablo‖, pero los daños no fueron mayores y me permitió seguir adelante con la obtención del dato. Transitar el barrio de Tepito para realizar la etnografía tal y como lo marca la antropología no fue tarea fácil. Habían días en que mi ánimo mermaba por la dificultad de encontrar a personas que tuvieran el deseo de ser informantes. El ánimo mermaba con los asaltos; los escapes fugaces cuando sentía que mi integridad física estaba en peligro; cuando escuchaba las conversaciones de las personas sobre los asaltos y homicidios que acontecían en las calles del barrio; cuando me entere por el periódico que en la esquina de Mineros y carpintería habían ejecutado un taxista la noche previa en que me tocaba levantar el registro ahí. Por ello, la lectura de mi etnografía debe hacerse considerando los estados de ánimo por los que pase y de ninguna manera debe considerarse como una visión total de las cosas que acontecen en las calles del barrio de Tepito. Mi etnografía se trata de una visión parcial –la de un solo hombre-, pero elaborada con apego al método etnográfico y por ello no se plasman mis miedos en la redacción de la misma. He querido cerrar la misma con este colofón que espero sea de utilidad a futuros investigadores que tengan preguntas sobre el barrio de Tepito y tengan que acudir al espacio para encontrar respuestas. Finalmente, deseo expresar que hubiera sido más fácil para mi el haber recurrido a los diversos líderes de opinión que existen en el barrio de Tepito, pero ¿Qué hubiera logrado con ello? Solo una visión parcial de un actor que me describiría el todo desde su óptica y lo que mi investigación planteo desde un principio fue el dar el micrófono a un número mayor de actores. Por ello me interesaron las imágenes ubicadas en los altares erigidos en la vía pública ya que son parte de los habitantes y por ser de ellos son susceptibles de ofrecer información, en este caso, de la religiosidad que se vive en el barrio de Tepito. CAPÍTULO IV METODOLOGÍA 4. 1 Consideraciones previas a la obtención de los datos sobre los símbolos sagrados en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito. En los documentos expuestos en el segundo capítulo además de buscar los símbolos sagrados centrales y los diversos usos que los habitantes de barrio de Tepito hacen de ellos he intentado diseñar mi estrategia de intervención basado en la experiencia de otros investigadores. Gracias a esa experiencia de mis antecesores pude vislumbrar el escenario con el que me encontré al realizar la etnografía. Debido a que esas investigaciones fueron fundamentales para mi quehacer he considerado fundamental el ofrecer este apartado metodológico. En este he de detallar de manera puntual la forma en que se construyó el dato, así como las vicisitudes por las que pase en mi estancia en el barrio de Tepito intentando obtener cada uno de los datos para presentar el universo sagrado del barrio de Tepito, tan necesario para determinar el carácter emergente y su condición alternativa de la Santa Muerte. No esta de más recordar que los trabajos de investigación elaborados desde las ciencias sociales tienen dos propósitos: el primero tiene que ver con su carácter de explicar las situaciones emergentes ya que las preguntas que uno formula las hace desde su presente en base a situaciones que consideramos diferentes; el segundo tiene que ver con la construcción de nuevo conocimiento que tiene la finalidad de apuntalar la disciplina, por lo tanto, todo documento elaborado desde las ciencias sociales posee un carácter histórico y por ello será susceptible de ser considerado para nuevas investigaciones. 4. 2 Datos que construyen estrategias Algunos datos extraídos de anteriores investigaciones y artículos periodísticos de que permiten vislumbrar las relaciones sociales, comerciales, políticas, religiosas y de diversa índole que se tejen en el barrio de Tepito son las siguientes: La poca disposición de los habitantes del barrio de Tepito a colaborar como informantes en los trabajos de corte académicos. El descrédito que efectúan los habitantes sobre el papel del investigador y las instituciones de educación. Los habitantes se convierten en vigías de los que llegan al barrio a preguntar generando un clima poco favorable para desarrollar la investigación. Además, cuando uno camina por cualquiera de las calles de las tres zonas del barrio de Tepito esta en completa alerta ya que puede ser abordado por individuos que le despojen de sus pertenencias. La imposibilidad de elaborar registros gráficos ya que por las actividades comerciales que ahí se desarrollan existen puntos de vigilancia en donde aquel que se adentra en el área y asume una conducta diferente a la que se debe de guardar es monitoreado en su transitar. Portar una libreta o un medio electrónico que registre información es considerado como un elemento invasor y a su portador como alguien que intenta obtener información que será utilizada en contra de ellos70. Los habitantes del barrio de Tepito están negados a brindar información no importando que reciban una explicación de los objetivos de la investigación y el valor que tiene la información que puedan brindar. Los varones oponen franca resistencia a brindar información y las mujeres aunque escuchan pacientemente toda la explicación sobre el objetivo de la encuesta alegan que no disponen de tiempo para contestarla. Los registros fotográficos y fílmicos son difíciles de obtener y cuando uno la esta tomando no falta la recomendación que se debe tener cuidado en tal calle porque se corre el riesgo de ser despojado de su cámara fotográfica. Cuando una persona brinda información puede advertir al que pregunta que si la información la utilizan de manera diferente puede ser motivo para que tomen represalias en contra de ellos. Las personas con las que mejor se puede trabajar son las de edad madura y de la tercera edad, en especial con las mujeres. Los registros deben de elaborarse en el transcurso del día en espacios abiertos y evitar los registros nocturnos. 70 En mi caso, solamente pude efectuar las anotaciones en espacios como paradas de camiones y en el espacio de las tres iglesias del barrio de Tepito. Con estos datos puede corroborar la regla de oro en el barrio de Tepito que es: ―en Tepito nadie le va al Guadalajara, porque el que es chiva se muere‖, entiéndase como ―chiva‖ a un informante. Por lo tanto, ver, callar y escuchar es fundamental para no meterse en problemas, lo cual asegura la supervivencia en el barrio. Para ejemplificar lo antes expuesto me permito narrar un pasaje de mi estancia en la zona A del barrio de Tepito. En el mes de enero del 2009 me encontraba en la calle de Jarcería tomando registro de un altar en la vía pública y se me acerco un comerciante que vende tamales en un triciclo, me pregunto sobre mis actividades y para que quería la información. Le ofrecí una explicación sobre el objetivo de la investigación y cuando mencione el tema referente a los altares en la vía pública emitió como comentario de que el fin con el que fueron erigidos los altares fue para regular la conducta de los vecinos que tiraban basura en cada esquina y que su tía era una de las primeras personas en poner estos altares. Le pedí si me podía conceder una entrevista en donde pudiera tener registro de sus información pero la respuesta fue negativa argumentando que era cristiano, que la gente de ahí no los ve con buenos ojos y que no quería meterse en problemas. Este no fue el único caso en que se me negaba una entrevista u obtener por lo menos una respuesta a una pregunta que parece ser no tiene nada de especial u ofensiva como el saber quien es la persona que da mantenimiento al altar. Dentro de las estrategias de intervención que diseñe en el escritorio se debe señalar la petición a la Coordinación del Posgrado en Antropología Social de la Escuela Nacional de Antropología e Historia de un oficio dirigido a los habitantes del barrio de Tepito en donde especificaba las labores ha realizar en el espacio, además de pedir la colaboración de ellos para ser informantes y el compromiso ético con el que se iba a manejar y exponer la información. Así también me di a la tarea de elaborar una carta en donde explicaba a los habitantes del barrio el motivo de mi presencia en el barrio, los objetivos de mi investigación y la petición de que en un tiempo presente o futuro me concedieran una entrevista. Agregue una tarjeta de presentación con mi nombre y correo electrónico y los números telefónicos donde se me podía localizar. Todos estos documentos fueron puestos en un fólder que repartí aproximadamente 150 oficios- a cada uno de los habitantes del barrio con los que tuve contacto y principalmente a aquellos que se encargaban de dar mantenimiento a los altares en la vía pública. Nunca se negaron a recibir el fólder, pero cuando pedía una entrevista a futuro o si me podían dar información referente al altar en la vía pública argumentaban falta de tiempo. Se debe señalar que durante mi transitar por el barrio de Tepito en la construcción de mi etnografía se ejerció sobre mi persona una constante vigilancia aun y cuando en mi labor diaria nunca me sitúe en el mismo punto por más de un día aun así ellos ya sabían de mi presencia. Las estrategias fueron diversas para obtener el dato en el barrio de Tepito ya que su composición es diversa. Así tenemos que la zona A (ver los mapas en mi etnografía) es donde el investigador se encuentra más expuesto ya que no existe espacio alguno donde pueda hacer sus anotaciones. En esta zona tuve algunos sobresaltos por parte de aquellos que se les conoce teporochos y mencionaron que me iban a asaltar, esto se repitió durante los días que estuve realizando el registro. Con respecto a la zona B (ver mapa en la etnografía) tiene características similares a la de la zona A. se trata de calles que sólo en una pequeña porción de su área concentra comercio informal. Se trata de un espacio donde se encuentran varias Unidades de Renovación Habitacional, bodegas, refaccionarias, banco, un Nacional Monte de Piedad. Las calles son más amplías y deshabitadas, además que los mismos vecinos las refieren como una zona de alto riesgo ya que aun existen complejos habitacionales que comunican una calle con otra. En este espacio también fue difícil elaborar los registros y solamente se pudieron realizar en la iglesia de Nuestra Señora de la Concepción (La Conchita) ubicada en la calle de Constanza y Tenochtitlán. De acuerdo a la experiencia que había dejado la zona A, decidí contratar los servicios de acompañamiento de uno de los habitantes de esta zona para que sirviera de salvoconducto y poder realizar mi trabajo etnográfico. Aun así, los habitantes se mostraban desconfiados sobre el destino que tendría mis registros y la posible información que habrían de proporcionarme. La zona C (ver mapa en mi etnografía) es la más conocida ya que su área comprende el comercio. Aquí la estrategia para transitar por sus calles con la finalidad de registrar los símbolos sagrados presentes en los altares en la vía pública constó de acudir acompañado por un amigo. Uno de los principales problemas de esta zona es que mi objeto de estudio no se encuentra en el frente de los puestos metálicos sino que se encuentra detrás de los mismos. Este espacio es considerado por lo habitantes, visitantes y autoridades policiales capitalinas como la de más alto riesgo. La sensación de estar siempre observados nunca la perdimos y cuando no sentíamos inseguros por el hecho de que uno o varios individuos realizan movimientos similares a los nuestros sabíamos que era el momento de abandonar el área por las rutas que previamente habíamos planeado y que siempre fueron las plazas comerciales, la estación del metro Tepito o el Eje 1 Norte Héroes de Granaditas. No es y no ha sido fácil obtener los datos en el barrio de Tepito dadas las características antes expuestas y que los trabajos de corte académico ya habían sentenciado. Aun así, necesito la tercera parte de la investigación para poder presentar el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito ello es, el espacio privado que se encuentra en el interior de sus viviendas, sus lugares de trabajo y el espacio colectivo. Aunque esto lo maneje en el segundo capítulo a través de las producciones literarias y la cinematografía falta actualizar el dato para observar la vigencia, el olvido o los nuevos elementos del universo sagrado del barrio de Tepito propio del tiempo histórico en que redacto este trabajo de investigación. Tomando en cuenta mi experiencia cuando solicitaba información a los habitantes del barrio de Tepito que ya expuse líneas arriba, decidí que la persona que mejor podía cumplir con la aplicación de las encuestas era un habitante del mismo barrio que pudiera moverse con soltura e incluso obtener los datos de su propia red. No cualquiera podía aplicar las encuestas ya que se necesitaba una persona con características específicas como son: un grado de estudio mínimo de nivel medio superior, habilidad para establecer contacto con las personas, compromiso hacía el trabajo y ética en el desempeño de su trabajo. 71 71 Uno de los principales problemas al contratar encuestadores es el hecho de que llegan a contestar las encuestas y con ello, los datos que ofrecen son falsos lo que demerita la calidad de la investigación. A través de conocidos del barrio que les expuse mi necesidad lograron contactar al estudiante en historia por la Universidad Nacional Autónoma de México Juan Manuel Álvarez Valdés quien siempre ha vivido en el barrio de Tepito al igual que su familia. Le plantee mi necesidad además de explicarle de manera detallada en que consistía mi investigación ya que también tenía dudas sobre el destino final que tendría la información. Le hice entrega de un oficio de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, un oficio redactado por mi persona en que presentaba a Juan Manuel Álvarez y explicaba el fin que tendría la información, le entregue tarjetas de presentación mías y un total de doscientas encuestas (son dos encuestas que he de utilizar en la investigación) ha realizar. Llegamos a un acuerdo sobre el pago y acordamos que la entrega de las encuestas sería en un plazo de dos meses ya que se aplicarían en su tiempo libre. Siendo que Juan Manuel Álvarez fue quien aplico el sondeo, me permito plasmar su experiencia en el momento de aplicar la encuesta, ello con el fin de que sirvan a futuros investigadores que tengan como elemento central el barrio de Tepito y necesiten extraer el dato para la elaboración de sus investigaciones. Los varones siempre fueron los que más rechazaban contestar las encuestas, mientras que las mujeres se prestaban más a contestarlas, pero si una mujer estaba acompañada de un varón a la hora de contestar por cada pregunta que se formulaba volteaba a ver al varón esperando la autorización para que pudiera contestar. Las mujeres jóvenes y las de la tercera edad son las que mejor respondieron a la encuesta. Los varones que contestaron fueron básicamente conocidos de Juan Manuel. Los varones jóvenes fue un sector que de facto rechazaba la encuesta En un alto porcentaje de las personas con las que Juan Manuel estableció contacto para pedir que contestaran la encuesta le preguntaban el fin que tendría la información. Las personas con las que establecía contacto por lo general le hacían una serie de preguntas tales como: su lugar de origen, de que institución educativa venía y preguntas sobre el barrio para certificar su pertenecía. La gente desconfiaba de él aun y cuando se presentaba con los oficios, sus credenciales tanto de la UNAM como del IFE, tampoco importaba si era o no del barrio de Tepito. En varias ocasiones los varones con los estableció contacto para que contestaran la encuesta le hicieron saber la perdida de tiempo al estar realizando su actividad y lo inútil que es la escuela, ya que ellos se consideraban triunfadores porque habían logrado acumular capital y la escuela es una actividad que no les permite tener esos ingresos. Alguna ocasión pregunte a Juan Manuel sobre su sentir como encuestador y contestó que existía una dificultad para realizar las encuestas y en algunas ocasiones se sintió observado sólo por el hecho de ser alguien que formula preguntas en el barrio. Algunos de los encuestados refieren que no acostumbran dar informes porque o bien los han asaltado o porque piensan que van de parte de alguna institución gubernamental y que preguntan cosas, pero que el real es diferente. La tarea para Juan Manuel no fue fácil ya que en ocasiones mermaba su ánimo para continuar con las encuestas y la opción más viable era el haber dejado las encuestas, pero no lo hizo así y continúo hasta terminar con ellas. Vaya pues mi reconocimiento a Juan Manuel Álvarez por creer en este proyecto, por su ética en el trabajo, por su pasión por hacer las cosas; este capítulo no podía haber sido escrito sin el empeño al trabajo que mostraste. 4. 3 Sobre la metodología aplicada Se elaboraron y aplicaron 115 encuestas para obtener el dato referente al universo sagrado en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito. Se elaboraron y aplicaron 85 encuestas para obtener el dato referente a los usos de algunos elementos del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito, así como ahondar sobre los rituales y las peticiones que los habitantes del barrio de Tepito formulan a los elementos del universo sagrado. Las encuestas fueron realizadas en su mayoría en la zona C y D del barrio de Tepito (ver mapas en la etnografía) Los lugares en que efectúo la mayor cantidad de encuestas fue en el centro de salud ubicado en la las calles de Rivero y Tenochtitlán. A ese centro de salud llega gente de todo el barrio, incluso personas ajenas al barrio debido al prestigio que han alcanzado algunos médicos. A las personas ajenas al barrio no se le aplico encuesta alguna. En las horas de consulta. La forma en que el encuestador se presento a las personas fue de la siguiente manera: ―llegaba, están los pasillos largos con las bancas, estaba la gente sentada esperando entrar a los consultorios, me sentaba con la tabla y el oficio subrayado en color amarillo fluorescente las partes importantes y la encuesta en mano y les decía: mira, estoy haciendo un trabajo para la Escuela Nacional de Antropología e Historia, aquí esta el oficio. El trabajo consiste en un registro de las expresiones religiosas dentro del barrio de Tepito, sin cuestionar el culto, sin atentar contra la creencia, la religión y el registro lo hago por medio de esta encuesta…no te pido ni nombre, ni dirección, ni cuanto ganas, nada de esas cosas, solamente es lo enfocado al aspecto religioso que es el trabajo antropológico‖ Otro porcentaje considerable de encuestas fue elaborada a las afueras de la institución educativa en donde estudia el hijo del encuestador la cual se encuentra ubicada en la calle de Jesús Carranza entre Rivero y Peñón. Un porcentaje de encuestas fueron aplicadas en el martes de arte en Tepito que se desarrolla en la esquina de Circunvalación y Eje 1 Norte Héroes de Granaditas. Un porcentaje menor contestó las dos encuestas, por lo que la representatividad es más amplía. Otro porcentaje de encuestas fueron contestadas por la red social del encuestador, ello incluye propietarios de negocios, amas de casa, comerciantes y familiares. Todas las encuestas fueron realizadas por la mañana De manera estratégica el encuestador evito ingresar a las vecindades para aplicar las encuestas por ser espacios en donde el riesgo a sufrir un percance es alto. 4. 4 Formatos de las entrevistas aplicadas en el barrio de Tepito Formato del sondeo que se ha de aplicar a los habitantes del barrio de Tepito con el cual se pretende obtener información sobre las imágenes presentes en tres de sus espacios: su casa, trabajo y si comparte el espacio –tipo vecindadcon otras familias. Justificación: Por las características del trabajo y del área de interés el sondeo es una herramienta con la cual podemos extraer los datos del espacio privado que cuesta más trabajo penetrar y que llevaría un contacto más intimo con aquel o aquellos que interesaren en la investigación. El sondeo se ha de aplicar a los habitantes del barrio de manera aleatoria y para ello la forma ideal es aplicarlo en los espacios de tránsito. Edad _______ Sexo (M) (F) Escolaridad ______________ Estado civil _____________ Tiempo de vivir en Tepito ____________ Actividad laboral _______________________________________________ Trabaja dentro del área de Tepito (SI) (NO) En su casa ¿Tiene altar religioso en su casa? (SI) (NO) ¿En que parte de la casa esta ubicado? ______________________________ ¿Qué imágenes, cuadros u objetos religiosos lo conforman? De todos estos elementos religiosos ¿Celebra festivamente a alguna o varias de ellas? (SI) (NO) ¿Cómo es la celebración? _______________________________________________________________ ¿Cuáles son las peticiones cotidianas a los elementos sagrados que conforman su altar? _______________________________________________________________ En su trabajo ¿Tiene altar religioso en su espacio laboral? (SI) (NO) ¿En que parte del área de trabajo esta ubicado? _______________________________________________________________ ¿Qué imágenes, cuadros u objetos religiosos lo conforman? _______________________________________________________________ De todos estos elementos religiosos ¿Celebra festivamente a alguna o varias de ellas? (SI) (NO) ¿Cómo es la celebración? _______________________________________________________________ ¿Cuáles son las peticiones cotidianas a los elementos sagrados que conforman el altar del lugar de trabajo? _______________________________________________________________ En el espacio colectivo (todo aquel en que en un espacio pequeño cohabiten más de dos familias sin nexo de parentesco) ¿Usted vive en vecindad, departamento, condominio o Unidad de Renovación Habitacional? (SI) (NO) ¿Tienen un altar religioso en el espacio colectivo? (SI) (NO) ¿En que parte del espacio colectivo esta ubicado? ______________________ ¿Qué imágenes, cuadros u objetos religiosos lo conforman? _______________________________________________________________ De todos estos elementos religiosos ¿Celebra festivamente a alguna o varias de ellas? (SI) (NO) ¿Cómo es la celebración? _______________________________________________________________ ¿Cuáles son las peticiones cotidianas a los elementos sagrados que conforman el altar colectivo? _______________________________________________________________ Formato para el sondeo que tiene como objetivo obtener el universo simbólico que opera en los rituales de respuesta inmediato. Justificación: Esta herramienta permitirá registrar lo que los especialistas de la religiosidad popular llaman la especialización de los santos y también ofrecerá los elementos (objetos, colores, olores, espacios, horas, oraciones, consagraciones y otros) que están presentes en la elaboración de los rituales de respuesta inmediata en donde el santo ya sea canonizado, el santo popular u algún otro personaje mítico o de leyenda es el elemento central. Básicamente son tres las peticiones que se realiza a lo sagrado: el amor, la salud y el dinero. Por lo tanto, sobre estás tres peticiones giraran las preguntas de la encuesta. Edad _______ Sexo (M) (F) Número de hijos __________ Estado civil ____________ Actividad Laboral _______________________ Años de vivir en Tepito _________ 1.- Cuando surgen problemas de dinero: ¿A que santos, vírgenes u otros seres sagrados acude a pedir ayuda? Estos santos, vírgenes u seres sagrados ¿Están en su casa o acude a un lugar en particular para hacer la petición? ¿Existe alguna oración en especial que se le rece a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para pedir la mejoría en lo económico? (SI) (NO) ¿Puede recitar algunas partes de esas oraciones? ¿Hace algún tipo de ofrenda a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para que se cumpla su petición? (SI) (NO) ¿Puede decirme los artículos u otros elementos que le ofrenda al santo, virgen u otro ser sagrado a quien le hizo la petición? ¿Qué color o colores en especial se deben utilizar en un ritual que tenga como fin la petición de lo económico? ¿Qué elementos materiales deben estar presentes en los rituales que tienen que ver con lo económico? ¿Conoce algún ritual para atraer la fortuna? ¿Puede describirlo? (SI) (NO) 2.- Cuando surgen problemas de salud: ¿A que santos, vírgenes u otros seres sagrados acude a pedir ayuda? Estos santos, vírgenes u seres sagrados ¿Están en su casa o acude a un lugar en particular para hacer la petición? ¿Existe alguna oración en especial que se le rece a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para pedir la mejoría en la salud? (SI) (NO) ¿Puede recitar algunas partes de esas oraciones? ¿Hace algún tipo de ofrenda a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para que se cumpla su petición de salud? (SI) (NO) ¿Puede decirme los artículos u otros elementos que le ofrenda al santo, virgen u otro ser sagrado a quien le hizo la petición para que mejore la salud? ¿Qué color o colores en especial se deben utilizar en los rituales para hacer las peticiones de salud? ¿Qué elementos materiales deben estar presentes en los rituales que tengan que ver con las peticiones de salud? ¿Conoce algún ritual para pedir por la salud? (SI) (NO) ¿Puede describirlo? 3.- Cuando surgen problemas de amor: ¿A que santos, vírgenes u otros seres sagrados acude a pedir ayuda? Estos santos, vírgenes u seres sagrados ¿Están en su casa o acude a un lugar en particular para hacer la petición? ¿Existe alguna oración en especial que se le rece a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para pedir las cosas relacionadas con el amor? (SI) (NO) ¿Puede recitar algunas partes de esas oraciones? ¿Hace algún tipo de ofrenda a los santos, vírgenes u otros seres sagrados para que se cumpla su petición en las cosas del amor? (SI) (NO) ¿Puede decirme los artículos u otros elementos que le ofrenda al santo, virgen u otro ser sagrado a quien le hizo la petición en las cosas del amor? ¿Qué color o colores en especial se deben utilizar para elaborar un ritual que tenga como fin las cosas del amor? ¿Qué elementos materiales deben estar presentes en los rituales del amor? ¿Conoce algún ritual para atraer la fortuna? (SI) (NO) ¿Puede describirlo? 4. 5 Los datos duros de la encuesta sobre las manifestaciones religiosas en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito. Antes de ofrecer las imágenes religiosas de mayor presencia en el espacio privado entre los encuestados me permito ofrecer al lector los datos duros de las 115 encuestas. Con ello intento ubicar al lector en el contexto desde donde se escribe este apartado. Con respecto a la edad de los encuestado la media aritmética es de 43.6 años, siendo el rango menor un encuestado de 17 años y de 89 el rango mayor. La moda es de 12 encuestas con 26 años de edad. Del total de encuestas se aplicaron 30 a varones y 85 a mujeres.72 Con respecto al estado civil tenemos que 19 encuestados manifiestan ser solteros (5 son hombres y 14 mujeres); 45 encuestados manifestaron ser casados (10 hombres y 35 mujeres); 24 encuestados manifestaron la unión libre (8 hombres y 16 mujeres); 11 encuestados manifestaron estar divorciados (5 hombres y 6 mujeres9; 11 encuestados manifestaron ser viudos (3 hombres y 8 mujeres) y finalmente, 5 encuestadas manifestaron ser madres solteras. 72 Las razones del porque es más elevado el número de encuestas contestadas por las mujeres ya se expusieron líneas anteriores. Con respecto a la escolaridad de los encuestados 48 manifestaron tener únicamente la primaria; 43 refieren tener la secundaria; 14 el nivel medio superior; 2 el nivel superior y 8 una carrera técnica. Con respecto a los años de vivir en el barrio de Tepito la moda es de 7 encuestados con 20 años, siendo el rango menor el de un año y el rango mayor de 80 años. Con respecto a la actividad laboral de los encuestados 35 refieren que son comerciantes; 44 solamente de dedican a las labores del hogar; 14 manifestaron tener el doble rol de comerciante y las actividades del hogar; 5 manifestaron ser jubilados; 5 manifestaron ser empleados y otros especificaron su campo donde desempeñan sus funciones tales como: carnicero, seguridad privada, servidor público, mecánico, profesor de boxeo, ex profesor de educación física, desempleada, intendente, serigráfista, electrónica, vendedora y empleado de gobierno. Con respecto a saber si sus labores económicas las desempeñan dentro del barrio de Tepito 50 encuestados respondieron afirmativamente, entre ellos se encuentran: comerciantes informales, carnicero, profesor de boxeo, serigráfista y electrónica. 65 respondieron que no desempeñan su actividad económica dentro del barrio de Tepito, las actividades del hogar el grupo más nutrido y algunos prestadores de servicio que lo hacen fuera del barrio, entre ellos: un mecánico, un varón que labora en seguridad privada, un servidor público, una vendedora y un empleado de gobierno. 4. 6 Datos duros de la encuesta referida al aspecto ritual aplicada a los habitantes del barrio de Tepito Se aplicaron un total de 85 encuestas exclusivamente a los habitantes del barrio de Tepito. Los datos generales son los siguientes: La edad media de los encuestados es de 46.65 años, siendo el rango menor de 15 años y el rango mayor de 79 años, siendo la moda 40, 43, 49 y 70 años que se presentan cuatro ocasiones cada uno en la encuesta. Se encuestaron a 51 mujeres y 34 varones El estado civil que guardan los encuestados es de: 19 solteros de los cuales 11 son mujeres y 8 son varones; 43 casados de los cuales 25 son mujeres y 18 son varones; 7 son viudos de los cuales 6 son mujeres y uno es varón; 11 viven en unión libre de los cuales 6 son mujeres y 5 son varones; 3 divorciadas y finalmente, 3 madres solteras. Con respecto al número de hijos tenemos: 11 de los encuestados no tienen hijos; 9 encuestados tienen un hijo; 17 encuestados tienen dos hijos; 25 encuestados tienen tres hijos; 9 encuestados tienen cuatro hijos; 5 encuestados tienen cinco hijos; 2 encuestados tienen 6 hijos; 2 encuestados tiene siete hijos; un encuestado tiene ocho hijos; 2 encuestados tienen diez hijos; un encuestado tiene 13 hijos y finalmente, un encuestado tiene 15 hijos. 73 Con respecto a la actividad laboral tenemos que 47 encuestados se dedican al comercio; 17 se dedican exclusivamente a las labores domésticas; 3 son estudiantes; 2 son empleados; 2 no contestaron esa pregunta y existe una diversidad de oficios que los encuestados manifiestan tener, ellos son: atiende un taller de bicicletas, pintor de autos, mesero, zapatero, dos empleados, dos franeleros74, un pensionado, una estilista que atiende una estética, una catequista, una persona que trabaja por su cuenta, un empleado de gobierno, un auxiliar de crédito y cobranza y finalmente, un desempleado.75 Los años de vivir en el barrio de Tepito es un dato que considere relevante para dar mayor ―validez‖ a la encuesta como una herramienta que arroja datos susceptibles de ser tomados como indicadores fiables, para ello ofrezco el total de datos que arroja la encuesta, ellos son: 0, 1, 4, 4, 6, 15, 17, 18, 20, 20, 20, 20, 21, 22, 23, 23, 24, 25, 25, 26, 27, 27, 27, 27, 27, 28, 28, 28, 30, 30, 31, 31, 32, 32, 73 Sobre los encuestados que manifiestan tener 13 y 15 hijos se debe aportar el dato que se trata de varones quienes declaran ello, una posible explicación es que en la pregunta manifieste reconocer la paternidad de todos, aunque sean con diferentes mujeres. 74 Los franeleros son aquellos que ofrecen a los visitantes a la zona comercial de Tepito un espacio para estacionar su vehículo, ello implica el cuidado del mismo, así también algunos de ellos ofrecen el servicio de lavado del vehículo. 75 Aunque en los oficios aquí referidos pueden tener cabida en rubros como el de comerciante, he tomado la decisión de transcribir el dato tal y como lo especifican los encuestados que desearon manifestar su oficio o bien, el espacio donde desempeñan sus labores. 33, 33, 34, 34, 34, 35, 35, 35, 37, 38, 39, 40, 40, 40, 41, 41, 41, 42, 42, 43, 43, 43, 43, 45, 46, 48, 48, 49, 50, 50, 52, 52, 52, 55, 58, 59, 60, 60, 60, 61, 62, 62, 62, 63, 63, 63, 65, 70, 70, 79, 79. Si consideramos los datos del 0 a los 6 años como ―poco‖ fiables por el hecho de que los encuestados no puedan tener este visón amplio de las manifestaciones religiosas. Por el contrario, debemos considerar de los 15 a los 79 años como datos más fiables ya que sus respuestas implican un mayor conocimiento de las manifestaciones religiosas del barrio de Tepito. CAPÍTULO V: EL CARÁCTER ALTERNATIVO DE LA SANTA MUERTE EN EL BARRIO DE TEPITO Lo alternativo lo define la enciclopedia electrónica Wikipedia como una de al menos dos cosas (objetos abstractos o reales) o acciones que pueden ser elegidas. Desde un punto de vista específico, los objetivos y las alternativas son siempre equivalentes. Así también el Diccionario Encarta lo define como la capacidad de alternar con función igual o semejante. El carácter alternativo de la Santa Muerte no esta pensado en relación a su capacidad taumatúrgica de la cual dan fe los devotos por lo cual le han conferido la santidad, sino porque en su especialización en la solución de problemas cumpla las similares a otro símbolo ritual que esta en uso de la comunidad que lo ha adoptado. La inserción de nuevos símbolos rituales se pueden deber a dos causas que considero son las principales: la primera de ella tiene que ver con problemas emergentes que afecten a la comunidad y que dentro de sus símbolos rituales no exista uno especializado en la solución se ese problema que no existía y que hoy se tienen que atender. La segunda tiene que ver con una pérdida de confianza por parte de aquellos que realizan la petición y no han encontrado respuesta a sus plegarías, lo que propicia la inserción de un nuevo símbolo ritual especializados en el mismo campo del símbolo ritual que no atendió la plegaria, por lo que, el símbolo ritual desplazado queda en un compas de espera pero no es ―desechado‖ ya que el vínculo con lo sagrado no se rompe, ello queda demostrado por el hecho de que las estructuras rituales sólo se refuncionalizan en torno al nuevo símbolo ritual. Para determinar el carácter alternativo de la Santa Muerte en el barrio de Tepito es necesario tener como dato principal el universo sagrado de los actores y de ahí poder ubicar los usos que sobre el símbolo ritual llamado Santa Muerte se hacen. Ya he presentado un primer esbozo de este universo sagrado en el transcurso de la investigación. El material de análisis del segundo capítulo que constó de revisión te tesis, artículos periodísticos y las producciones literarias permite tener un acercamiento con ese universo sagrado en el cual la Santa Muerte se encuentra ausente y empieza ha tener mención en los campos antes referidos a partir del año 2000 hasta nuestros días. La revisión de estos campos arroja que el universo sagrado primario lo conforman los siguientes símbolos sagrados: Virgen de Guadalupe Virgen de San Juan de los Lagos Nuestro Señor de Chalma San Judas Tadeo Santo Niño de Atocha La información que provee esta revisión hace referencia que en torno cuatro de estos símbolos sagrados los habitantes del barrio de Tepito organizan peregrinaciones a los santuarios (Basílica de Guadalupe, D.F; San Juan de los Lagos, Jal.; Chalma, Edo. Mex.; Plateros, Zac.). En relación a San Judas Tadeo hasta hace apenas un lustro las peregrinaciones al Templo de San Hipólito (se ubica a no más de dos kilómetros del barrio de Tepito) son más frecuentes. Para el habitante del barrio de Tepito el peregrinar tendrá un sentido fundamental ya que renueva el nexo con lo sagrado tanto en el nivel personal como el de comunidad ya que los peregrinos portan con orgullo los pendones que hacen mención al barrio de Tepito. Este peregrinar también puede considerarse como un ritual de paso en donde existe una formación previa para aquellos que han de peregrinar por primera vez. Ahora bien, sobre los datos del aspecto religioso que extraigo de los textos tiene una limitante que no me permite darlo como un dato que determine lo propio del barrio de Tepito ya que los textos han sido elaborados en las décadas de los años 70‘s, 80‘s, 90‘s y pocos posteriores al 2000. Ya había mencionado que en el caso de la obra de Armando Ramírez se describen los espacios en un tiempo presente, lo que esta viendo y viviendo el autor. Por ello, no presenta otros elementos del universo sagrado más que aquellos que tienen mayores seguidores. Pero, en su obra reciente La Tepiteada (2006) deja de describir la vecindad y describe las Unidades de Renovación Habitacional y por primera vez en su obra aparece la Santa Muerte y la vincula directamente con el barrio de Tepito. Un segundo esbozo del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito lo aporta la etnografía que tuvo como principal objetivo el registrar los símbolos sagrados expuestos en los altares erigidos en la vía pública. La etnografía corrobora la centralidad de los símbolos sagrados que narran las producciones expuestas en el segundo capítulo. Además de los cinco símbolos sagrados ya mencionados se debe incluir los siguientes: Sagrado Corazón de Jesús, Beato Juan Diego, Virgen de Juquila, San Miguel Arcángel, San Charbel Majluf, Santísima Trinidad, Santa Muerte, Señor del Veneno, San Francisco de Asís, Arcángeles de la angelología, Cristo Rey, Divino Niño y/o Niño de Colombia, Divino Rostro, Juan Pablo II, San Antonio de Padua, San Martín Tours o Caballero, Última Cena, Arcángel Gabriel, Eleggúa, La Piadosa, San Lázaro o Babaluaye, San Simón (santo popular guatemalteco), Virgen de la Candelaria, Ángel de la Guarda, Bagua. Llama la atención que en estos altares erigidos en la vía pública se encuentren tanto el beato Juan Diego y el Papa Juan Pablo II como símbolos sagrados centrales. Ello no debe de extrañar por el hecho de que a Juan Pablo II se le ha considerado santo súbito y en el caso del beato Juan Diego existe dentro del barrio un grupo que se denomina igual y son quienes se encargan de festividades y peregrinaciones, además de tener bajo su responsabilidad el altar ubicado en la esquina de Mineros con Carpintería el cual es el más grande y con mayores símbolos sagrados que se pueda encontrar en el barrio de Tepito. Llama la atención que en estos altares erigidos en la vía pública se encuentren símbolos rituales pertenecientes a otro sistema de creencia como es la religión orisha representada por Eleggúa y Babaluaye 76. La presencia de los Arcángeles pertenece a la categoría de la angelología y es un tema que se puede explotar no sólo a nivel del barrio de Tepito, sino de una población mayor ya que en los momentos en que escribo esta investigación el uso que se hace de ellos va creciendo. Los criterios por los cuales se incorpora la Bagua que corresponde al fengshui77 son sus diversos usos que emanan de sus símbolos instrumentales, ellos 76 Estos símbolos rituales los he de trabajar en el transcurso de este capítulo ya que existe un cuadro de equivalencias entre los santos católicos y los personajes Orishas, de tal manera que San Lázaro equivale a Babaluaye y Elegguá equivaldrá al Santo Niño de Atocha. son: el espejo octagonal que refleja las ―malas vibras‖ que se le desean al que la incorporó, además posee el símbolo conocido como ying-yang (taoísta) que es interpretado por quienes lo usan como equilibrio. Otro de los símbolos rituales importados que pueden estudiarse bajo la categoría del catolicismo popular es la presencia de San Simón y/o Maximón 78 que es un personaje al cual diversas comunidades guatemaltecas le han conferido la santidad por su capacidad taumatúrgica. Se trata de un caso similar al que se vive con Jesús Malverde o el ánima de Juan Soldado y porque no decirlo, similar al que se vive con la Santa Muerte. Con respecto a esta última y de acuerdo con mi etnografía sólo existen cuatro altares en la vía pública siendo el más importante el ubicado en la calle Alfarería # 12, este altar ha sido elevado a santuario por los devotos que acuden mes con mes a la ceremonia masiva que ahí se celebra y donde dirigen sus peregrinaciones. Los otros tres altares realizan su ceremonia un día específico de cada mes, se le reza un rosario, se bendicen las imágenes, los devotos ofrendan a otras imágenes de la Santa Muerte artículos relativos al culto (dulces, veladoras, manzanas, licor, flores, estampas, escapularios, dijes) y comparten información referente al culto. Este esbozo del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito tiene su fundamento en la etnografía y el estado de la cuestión elaborado en el segundo capítulo. Pero ¿Qué hay de los símbolos sagrados que los habitantes del barrio de Tepito tienen en el espacio privado? Entendiendo como espacio 77 El mapa Ba-gua tiene sus orígenes en el I Ching (libro de las mutaciones) que se usa para la adivinación. "Ba" significa ocho y "Gua" significa trigrama; Ba-gua = "Ocho trigrama", los ocho trigramas básico donde se estructura el I Ching. Antigua representación mística de todas las posibles combinaciones de la energía Yin-Yang. En http://www.euroresidentes.com/vivienda/feng-shui/bagua-feng-shui.htm 78 Para la población que habita el altiplano guatemalteco San Simón, llamado también Maximón o Ry Laj Man (nombre maya), representa una figura extremamente controvertida: sinónimo de prosperidad y felicidad para algunos, pero brujería y paganismo para otros. En general la tradición lo identifica como el protector de los borrachos y por eso disfruta de una ilimitada devoción, sobre todo entre los desheredados. A los finales del siglo XIX, la imagen del ―santo‖ era venerada por los jugadores que, en caso de victoria, ofrecían dinero, aguardiente o tabaco. En San Andrés Itzapa, la capilla donde está guardada la estatua de San Simón (representado por un viejo sentado, teniendo en la mano una botilla de aguardiente) abre durante toda la noche del 28 de octubre, acogiendo centenares de devotos que llegan desde cualquier lugar de América Central, para hacer confidencias sobre sus propias esperanzas, pidiendo favores y dejando ofertas en dinero, flores y obviamente alcohólicos. En http://www.pmoroni.it/esp/notasde-viaje/san-simon-protector-de-los-borrachos/ privado no sólo la casa habitación sino el lugar de trabajo y las representaciones que el individuo puede portar ya sea en la cartera, el bolso o en cualquier parte del cuerpo a través de dijes o tatuajes. Pero hasta el momento no puedo determinar lo que he llamado el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito porque me falta un elemento central que es el espacio privado de los habitantes del barrio. Los símbolos sagrados en el espacio privado son los más difíciles de obtener por lo infranqueable que resulta el espacio no sólo para el investigador, sino para cualquier ajeno a la red social de la persona. Para un antropólogo social es aun más difícil ya que el método propio de la disciplina dicta que debe existir una interacción entre las dos partes, en donde, el dato es algo que ofrece el actor de manera cortés sabedor del objetivo que persigue la investigación. Tomando en consideración que una tesis doctoral esta sujeta a los tiempos institucionales que son en promedio cuatro años y a ello sumamos el hecho de que se trata de ejercicios individuales surge la pregunta ¿Cuánto tiempo debo de emplear para granjearme la confianza de los actores para obtener los datos que me interesan? He señalado desde el segundo capítulo la dificultad de los investigadores para obtener el dato para elaborar sus investigaciones, además de que en la etnografía señalo la imposibilidad de establecer una comunicación frontal y fluida con los habitantes del barrio de Tepito. Por ello, los escritos que sobre el espacio existen son elaborados de manera sincrónica ya que el observador en determinado momento se convierte en observado y con ello la imposibilidad de elaborar estudios diacrónicos. Aunque tuve acercamiento con habitantes del barrio de Tepito con los cuales existió comunicación frontal y abierta que me hubieran abierto las puertas de su casa, trabajo y espacio colectivo para elaborar mis registros no lo considere viable para la investigación. La inviabilidad tiene que ver con la muestra que se debe tomar del universo para dar cuenta de un fenómeno social o en este caso religioso. Se corre el riesgo de que solamente al entrevistar a tres, cuatro, cinco o diez familias se determinen como lo propio del área de estudio. Se hace necesario tomar una muestra significativa del universo y recurrir a una herramienta metodológica que permita traer al escritorio este cumulo de datos que se encuentran en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito. Por ello, he diseñado una encuesta79 que tiene como fin traer esa diversidad de elementos del universo sagrado del espacio privado y con ello exponer al final de este capítulo y en suma con los anteriores lo que se pudiera llamar el núcleo duro de la religiosidad del barrio de Tepito. 5. 1 El espacio privado: tercer elemento para determinar el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito En el segundo capítulo pude vislumbrar a la Virgen de Guadalupe como el símbolo mayor del barrio de Tepito tocándose de manera muy somera la presencia de San Judas Tadeo y la casi ausencia de la Santa Muerte. Pensé que ello se debía a que dichos trabajos datan de los setentas hasta los noventas por lo que el dato no esta actualizado. Al estar elaborando mi etnografía pensé encontrar un mayor número de manifestaciones en torno a la Santa Muerte expresadas en los altares en la vía pública. Esta conjetura estaba fundamentada en los miles de devotos que se reúnen en la ceremonia masiva efectuada en la calle de Alfarería #12 y de la gran cantidad de imágenes de bulto que ahí se congregan y la diversidad de rituales que se elaboran en torno ella. Pero al término de la misma solamente pude registrar un máximo de cinco manifestaciones en donde se encuentra la Santa Muerte y no todas se encuentran en un altar, siendo la zona C la que presenta mayores manifestaciones en torno a la Santa Muerte. Mi etnografía reafirma la centralidad de la Virgen de Guadalupe ya que se encuentra en 70 altares erigidos en la vía pública. Pero sorprende el hecho de que San Judas Tadeo se encuentra presente en 52 altares erigidos en la vía pública y Nuestro Señor de Chalma presente en 35 altares en la vía pública. Sin duda se trata de datos reveladores pero aun estoy impedido de hablar del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito ni los usos que hacen de éstos en diversos campos expresados a través de la petición y la ofrenda. Para hablar de ese universo falta traer a colación la diversidad de símbolos sagrados que se encuentran en ese espacio y poder ubicar el grado de presencia de la Santa Muerte. 79 Por razones metodológicas incluyo los formatos del sondeo al final del trabajo de investigación. 5. 2 Símbolos sagrados presentes en los altares de la casa habitación. La vía para obtener este dato fue aplicar encuestas a los habitantes del barrio de Tepito (ver capítulo metodológico), por lo tanto, se aplicaron 115 encuestas que tiene por objetivo registrar los elementos sagrados que se encuentran en su espacio privado. De esas 115 encuestas 101 habitantes del barrio manifestaron tener un altar en su espacio privado y 14 dijeron no tener altar. Los lugares donde se encuentra un alto porcentaje de altares fueron la recamara con 35 y el comedor con 29. Los espacios con menor cantidad de altares fueron la entrada de la casa o algún punto que no estuviera expuesto como son las escaleras. Las imágenes que tienen mayor presencia en los altares en el espacio privado son: Virgen de Guadalupe en 90 altares San Judas Tadeo en 57 altares Cristo en 40 altares Virgen de San Juan de Los Lagos en 17 altares Niño Dios en 15 altares Sagrado Corazón en 15 altares Última Cena en 11 altares Santo Niño de Atocha en 10 altares Divino Niño en 8 altares Señor de Chalma en 7 altares Santa Muerte en 6 altares Virgen de Juquila en 5 altares Señor de los Milagros en 4 altares San Antonio de Padua en 4 altares Sagrada Familia en 3 altares San Martín Caballero en 3 altares Señor del Veneno en 3 altares Señor de la Misericordia en 3 altares Ángel de la Guarda en 2 altares Divino Rostro en 2 altares Juan Pablo II en 2 altares Niño Doctor en 2 altares Niño Pa en 2 altares Rosario en 2 altares San Charbel en 2 altares San José en 2 altares Virgen del Rosario en 2 altares Con presencia en un solo altar las siguientes representaciones: Ángeles (de la angelología), Biblia, Cristo Resucitado, Cristo Rey, Dios Padre, Juan Diego, Niño de las Palomas, Niño del Cacahuate, Nuestra Señora del Sagrado Corazón, San Juan, San Simón, Santa Cecilia, Virgen de la Caridad del Cobre, Virgen de la Concepción, Virgen de la Luz, Virgen de La Merced, Virgen de La Paz, Virgen de Montserrat, Virgen de Zapopan, Ánima Sola, Virgen del Perpetuo Socorro, Virgen María. De estos 101 encuestados que tienen altar en el espacio privado, solamente 6 encuestados manifestaron tener en su altar a la Santa Muerte, ellos representa únicamente un 5.94% dicho de otra manera, seis habitantes por cada cien tienen a la Santa Muerte en el altar en su casa habitación. Permítaseme hacer un ejercicio comparativo entre el símbolo mayor que es la Virgen de Guadalupe presente en 90 de los 1001 altares si a ello sacamos el porcentaje resulta 89.10%, ello es, de cada cien habitantes noventa tiene a la Virgen de Guadalupe en su altar. Los mismos ejercicios pueden hacerse con otras representaciones sagradas de los altares en el espacio privado, ahí están los datos por quien deseara hacerlo. Se podría pensar que estoy sometiendo a la Santa Muerte en una posición de desventaja ya que el ejercicio se elaboró considerando al símbolo mayor. Para ello, tratare de hacer el mismo ejercicio con otro grupo que manifestó no tener altar en su espacio privado y que manifestaron pertenecer a otro sistema de creencias. De los catorce que manifestaron no tener altar se desprende un grupo de siete encuestados que se definen como cristianos y Testigos de Jehová. Dicho de otro modo, por cada cien habitantes en el barrio de Tepito casi 7 habitantes están adscritos a otro sistema de creencia. Los mismo sería con las otras siete personas de esos catorce que manifestaron no tener un altar ya sea porque no creen en ello o porque argumentan que el trabajo es la fuente de todo. En un punto porcentual los adscritos a otro sistema de creencias y los que basan su confianza en el trabajo superan a los de la Santa Muerte. Ahora bien, voy a tomar estas seis encuestas que refieren tener a la Santa Muerte en su altar para ofrecer a los lectores una descripción más amplía de este grupo compacto. Las edades son: 20, 26, 27, 35, 42, 42 Sexo: 2 varones, 4 mujeres Estado civil: tres solteros, dos en unión libre y una casada Escolaridad: tres primaria, dos secundaria y uno carrera técnica Tiempo de vivir en el barrio de Tepito. 5, 10, 27, 35, 42, 42 años Actividad laboral: cuatro comerciantes, una ama de casa y una más que cumple el doble rol de ser comerciante y ama de casa. He aquí la parte que considero más importante de la investigación y tiene que ver con las imágenes que están compartiendo el altar de los encuestados que manifestaron tener a la Santa Muerte en su altar, estás imágenes son: En un altar de un varón, 42 años y comerciante se encuentra la Santa Muerte con San Judas Tadeo. Él celebra a San Judas Tadeo el 28 de cada mes y a la Santa Muerte cada 1º de mes En un altar de un varón de 35 años y comerciantes se encuentra la Santa Muerte a lado de San Judas Tadeo, Él celebra a las dos representaciones cada 14 de mes rezando un rosario. En un altar de una mujer de 26 años y comerciante se encuentra la Santa Muerte a lado de Nuestro Señor de Chalma, Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo, Santo Niño de Atocha, Virgen de San Juan de Los Lagos y el Niño Pa. Ella celebra a la Virgen de Guadalupe cada 12 de diciembre yendo a La Villa, una vez al año va al Santuario de Nuestro Señor de Chalma, cada 28 de mes celebra a San Judas Tadeo y cada 1º de mes celebra a la Santa Muerte en el santuario de la calle Alfarería # 12 en el mismo barrio de Tepito. En un altar de una mujer de 20 años y comerciante se encuentra la Santa Muerte a lado de la Virgen de Guadalupe, Cristo Crucificado y San Judas Tadeo. Ella celebra cada 1º de mes a la Santa Muerte, cada 28 de mes a San Judas Tadeo y cada 12 de diciembre a la Virgen de Guadalupe. En el altar de una mujer de 42 años con un doble rol de comerciante y ama de casa, se encuentra la Santa Muerte a lado de la Virgen de Guadalupe, Virgen de Juquila y San Juan. Ella celebra a todas ellas, siendo a la Virgen de Guadalupe a la que pone mayor empeño ya que hace providencia (regalar comida a los peregrinos) cada 11 de diciembre. En el altar de una mujer de 27 años ama de casa se encuentra exclusivamente la Santa Muerte. Ella la celebra cada 1º de mes en el santuario de la calle Alfarería # 12 en el barrio de Tepito. Una encuestado manifiesta que en el espacio donde se encuentra la Santa Muerte es un altar colectivo en el que también se encuentran la Virgen de Guadalupe, Sagrado Corazón y San Judas Tadeo. En este espacio colectivo se celebra a la Virgen de Guadalupe cada 12 de diciembre y a la Santa Muerte se le saca del altar cada 1º de mes para llevarla al santuario de la calle de Alfarería # 12. Ya que he tocado lo referente a las celebraciones considero necesario presentar el dato de la diversidad de celebraciones que los encuestados elaboran a los símbolos sagrados que forman parte de su altar ubicado en su casa habitación. En estas celebraciones incluyo todas las encuestas y para fines prácticos sólo agrupo las celebraciones que son iguales; ellas son: 73 encuestados celebran a la Virgen de Guadalupe en donde: 24 acuden a la Basílica el día de la festividad además de cantar las mañanitas; una que hace providencia regalando comida a los peregrinos; una la celebra además del 12 de diciembre también el 10 de mayo. 30 encuestados celebran a San Judas Tadeo cada 28 de mes en donde: 14 mencionan que sólo lo celebran; 12 acuden al templo de San Hipólito; una menciona que después de acudir al templo de San Hipólito se reúnen en casa de su hermana donde la celebración es mayor ya que se juntan hermanos, cuñados, etc.; una refiere que lo celebra en la iglesia de Cristo Rey 15 encuestados celebran las diversas advocaciones del Niño Dios en donde: 13 especifican que lo hacen cada 2 de febrero; dos especifican que se trata del Niño Doctor; una lo celebra cada 24 de diciembre arrullándolo y otra refiere que se trata del Niño Pa el 15 de mayo y que en dicha celebración se regalan juguetes y comida. 9 encuestados refieren que celebran a sus imágenes en la iglesia escuchando misa 7 encuestados celebran a la Virgen de San Juan de Los Lagos en donde: los siete acuden a la basílica de San Juan de Los lagos en fechas como agosto y enero. 5 encuestados celebran a la Santa Muerte en donde: dos lo hacen cada 1º de mes; dos devotos acuden al Santuario de la Santa Muerte en la calle de Alfarería # 12 y, una refiere que sólo le pone ofrenda. 3 encuestados celebran a Nuestro Señor de Chalma especificando que acuden en peregrinación al santuario una vez al año. 2 encuestados celebran al Señor de la Misericordia en donde: una refiere que lo hace el primer domingo después del Domingo de Ramos; la otra lo hace el segundo sábado después de Semana Santa en la Catedral Metropolitana de la ciudad de México. Otros más refieren que: acude ocasionalmente a los santuarios, agradece al levantarse, es cristiana y celebra a Cristo con alabanzas, es cristiana y va al templo cada 8 días los domingos y los martes con una organización feminista-cristiana, celebra a Cristo Rey en peregrinación, celebra a La Divina Providencia cada lunes, celebra al Divino Niño cada día 20 de mes, no celebra porque le cumplen nada, celebra a Nuestra Señora de La Concepción cada 8 de diciembre, efectúa retiros espirituales de fin de semana con regularidad, reza diariamente ante su altar un Padre Nuestro y un Ave María, reza un rosario el día 14 de cada mes, celebra al Sagrado Corazón, celebra a San Antonio de Padua, se persigna y reza todos los días además de encomendarse, respeta los preceptos de Semana Santa, es Testigo de Jehová por ello solo lee la Biblia, celebra a la Virgen de La Asunción cada 15 de agosto, celebra a la Virgen María. 5. 3 Peticiones a los símbolos sagrados presentes en el altar de la casa habitación. Las peticiones cotidianas que se formulan a los símbolos sagrados pueden dar una idea de grado de especialización que cumplen los mismos entre los demandantes. Por razones prácticas ubique las peticiones en cinco rubros, ellos son: 21 encuestados incluyen en su petición lo referente a la familia 67 encuestados incluyen en su petición lo referente a la salud 45 encuestados incluyen en su petición lo referente al trabajo 46 encuestados incluyen en su petición lo referente a la protección 7 encuestados incluyen en su petición lo referente la caridad (pedir por la humanidad) 6 encuestados no contestaron ese rubro 3 encuestados refieren que no acostumbra hacerlo 5. 4 Símbolos sagrados presentes en los altares en el espacio laboral ¿Los altares en la casa son susceptibles de ser considerados como los únicos en el espacio privado? Desde el segundo capítulo se hace énfasis en que los habitantes del barrio de Tepito desarrollan diversas actividades laborales dentro del área que van desde los talleres de calzado, talleres de costura, los comerciantes formales e informales y el oficio de hojalatería y pintura. Ellos son los que emplean un alto porcentaje de habitantes del barrio de Tepito y el porcentaje de habitantes que desarrollan su actividad productiva fuera del barrio es muy reducido, de ahí que se considere al barrio como ―bendito‖ porque no desampara a nadie. En la etnografía sentencie la existencia de un alto porcentaje de altares en la vía pública son atendidos por personas que tienen ya sea su establecimiento fijo o bien desempeñan sus actividades al aire libre, algunos de estos altares se encuentran empotrados en el mismo espacio laboral. También es común que al transitar por las calles del barrio de Tepito se aprecien altares dentro de los establecimientos, los talleres, bodegas, estacionamientos y principalmente en los puestos metálicos de los comerciantes informales no importando la zona del barrio. He considerado incluir los altares en el espacio laboral dentro del rubro de lo espacio privado ya que considero a este espacio como una extensión de la casa. En la misma encuesta incluí las preguntas referentes a la existencia de altares en el espacio laboral, el espacio donde se encuentra, las imágenes que ahí se encuentran, si les celebran algún día en especial y como lo hacen y las peticiones que cotidianamente les hacen. De ese universo de 115 encuestas 33 encuestados respondieron que cuentan con un altar en su espacio laboral. De ese universo de de 33 encuestados se puede elevar a 36 ya que algunos encuestados manifiestan que portan consigo estampas de imágenes religiosas en su cartera o bolso de mano y que para ellos lo consideran como un altar. Los espacios donde se ubican los altares son la entrada del negocio, en su puesto metálico, en el espacio de convivencia y reposo dentro del espacio laboral y diez de ellos portan imágenes en la cartera y bolso. Los símbolos sagrados presentes en los altares en el espacio laboral tenemos los siguientes: Virgen de Guadalupe en 20 espacios San Judas Tadeo en 15 espacios San Martín Caballero en 6 espacios Divino Niño en 5 espacios Virgen de San Juan de Los Lagos en 5 espacios Sagrado Corazón en 3 espacios Señor de los Milagros en 3 espacios Cristo Resucitado en 2 espacios Los que portan Escapularios 2 encuestados San Charbel en 2 espacios Los siguientes símbolos sagrados son referidos en el espacio laboral una sola vez: Virgen de Juquila, Virgen del Carmen, San Antonio de Padua, Santa Bárbara, Santa Muerte, Divino Rostro, La Biblia, San Cipriano (santo patrón del calzado) y San Crispín (santo patrón del calzado) En estos datos existen dos detalles a resaltar: el primero sigue siendo la centralidad de la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo como aquellos a los que más recurren los habitantes del barrio. Otros detalle que sobresale es la presencia de San Cipriano y San Crispín que son los santos patronos de los que se dedican al calzado. La presencia de estos santos puede darnos indicios que el barrio de Tepito aun existen talleres que se dedican a la elaboración de calzado tal y como lo refieren las crónicas y los trabajos históricos que mencionan que existió una oleada de migrantes del bajío que se asentaron en esa zona e instalaron en su casa habitación pequeños talleres; por ello, en los alrededores del barrio de Tepito se ubicaron grandes talleres de tenería además de las calles de Jesús Carranza, Ferrocarril de Cintura y el mercado de la calle Rivero que se especializaron en la venta de pieles y artículos referentes al calzado y artículos elaboraos con piel. Aun y cuando los estudios cuantitativos están constantemente en el ojo del huracán por el hecho de que el que interpreta el dato tiende a generalizar, ellos si son un indicador que nos acerca a una interpretación de los fenómenos. Hago mención de ello porque en el caso de la presencia de la Santa Muerte en el espacio laboral solamente de un encuestado que se dedica al comercio mencionó tener a la Santa Muerte en su espacio laboral. ¿A qué se debe ello? Si revisamos los datos podemos dar cuenta de que San Martín Caballero tiene presencia en seis espacios laborales. Ello responde a que dicho santo esta especializado los negocios, además de que viene acompañado de símbolos instrumentales como una herradura, sábila, semillas, polvos para atraer la fortuna, trébol de cuatro hojas y una oración especial para atraer la fortuna. La exégesis que sobre los símbolos instrumentales hacen lo que recurren a este santo son: la sábila es un receptáculo de las ―energías negativas y las envidias‖; el trébol de cuatro hojas, la herradura y los polvos son para atraer la buena suerte y finalmente, las semillas connotan prosperidad. En la descripción de la manzana A 13 y A 16 de mi etnografía, menciono que la Santa Muerte estaba vestida de azul con ofrendas de elementos propios del mar y que decir de la señora Enriqueta Romero Romero esos colores son con los que se identifica a Yemayá y que su equivalente de la Santa Muerte en el culto a los Orishas es Oyá. Así también en el altar ubicado en la manzana A 16 mencione que debajo de la pintura del Santo Niño de Atocha se encontraba pintada la imagen de Elegguá. Tanto en mi etnografía como los datos que ofrece el sondeo hacen acto de presencia una serie de símbolos sagrados del llamado culto a los Orishas, siendo las que más llamaron la atención Eleggúa, Babalú Ayé y Yemayá. El primero siempre estaba a lado del Santo Niño de Atocha, el segundo estaba a lado de una representación que por características se le puede identificar como San Lázaro pero que también es la forma que se representa a Babalú Ayé y finalmente, Yemayá fue ubicada en el santuario de la Santa Muerte de la calle Alfarería # 12. En el culto a los Orishas existe una equivalencia entre los santos católicos y las entidades sagradas propias de ese culto ejemplo de ello es que Eleggúa tiene su equivalente en el Santo Niño de Atocha, Babalú Ayé tiene su equivalente en San Lázaro, Yemayá tiene su equivalente en la Santa Muerte y Santa Bárbara tiene su equivalente en Changó. Por la presencia de estos símbolos en altares en la vía pública y porque son referidos en las encuestas me veo en la necesidad de ofrecer información sobre las equivalencias entre los Orishas y los santos católicos, la especialización en la solución de problemas del demandante y los artículos que se le ofrendan. Ovatalá: Padre/madre de la humanidad, trae paz y armonía. Representa creatividad, claridad, justicia y sabiduría. Su color es el blanco: la nieve, las nubes, la plata, los huesos y el cerebro le pertenecen. A veces se manifiesta con atributos femeninos, pues representa las fuerzas de la tierra, y a veces con atributos masculinos, al representar las fuerzas del cielo. Por eso algunas personas lo consideran andrógino. Su equivalente católico es La Virgen de La Merced (asociada con la misericordia). Oshún: Es la señora del amor, la sexualidad, la belleza y la diplomacia, la reina de los ríos y las aguas dulces. Protege la región abdominal y enseña el placer y la felicidad. Es generosa, pero difícil de calmar cuando está furiosa. El pavo real es uno de sus regalos favoritos, por la belleza de sus plumas. Color: amarillo. Su equivalente católico es Nuestra Señora de la Caridad del Cobre (asociada con la generosidad), Nuestra Señora de la Concepción (maternidad). Oggún: Dueño de los metales, del hierro y de la guerra, es una figura fundamental en las luchas de los esclavos por la libertad en el Caribe. Colores Rojo y verde. Su equivalente católico es San Jorge (guerrero). Babalú Ayé: Espíritu de la enfermedad y las epidemias. Su equivalente católico es San Lázaro (que era leproso). Yemayá: Señora del mar y de la luna, espíritu de la maternidad, la fertilidad y la riqueza. Es la figura femenina por excelencia, pues regula los jugos vitales (la sangre, la menstruación), y da nutrición y suavidad a todos. Es muy generosa, pero puede ser implacable, como la madre que ofrece amor pero no renuncia a su poder. Conoce el inconsciente colectivo y los secretos del mar. Color: Azul celeste. Su equivalente católico es Nuestra Señora de Regla (Asociada con la menstruación). Elegguá: Es el mensajero entre los seres humanos y los otros Orishas. Tiene numerosos aspectos, y puede hacer bromas pesadas para enseñar lecciones, pero abre nuevas oportunidades y muestra los caminos para llegar a diferentes metas. Los santeros lo consideran guardián de las casas, y mantienen una imagen suya detrás de la puerta. Sus regalos favoritos son los dulces, el ron, los cigarros y las velas. Su equivalente católico es San Martín Caballero (porque viaja a caballo), San Antonio de Padua (porque encuentra personas y cosas desaparecidas), San Miguel Arcángel (porque es mensajero de Dios), Santo Niño de Atocha. Changó80: Quizás el mas "popular" de los Orishas, Changó gobierna los relámpagos, los truenos, el fuego, los tambores y la danza. El es un orisha guerrero de inteligencia o ingenio agudo, temperamento irascible y la personificación de la virilidad. Changó tomo la forma del cuarto Alafin (rey supremo) de Oyó en la tierra durante un tiempo. El esta casado con Obba, pero mantiene relaciones amorosas con Oyá y Oshún. Changó es un orisha extremadamente fogoso y de voluntad fuerte, que ama todos los placeres del mundo: el baile, los tambores, las mujeres, los cantos y la comida. El es ocanani con Elegba, lo cual significa que son de un mismo corazón. Cuando se 80 La información referente a Changó http://www.angelfire.com/me/ZayXena/orishas.html fue tomada de la página electrónica contempla la rapidez con la cual el rayo cae en un árbol, o con la que el fuego brama a través de un área, uno ha presenciado el temperamento de Changó en acción. Aunque el negocio el Tablero de Ifa con Orunmila a cambio de la facultad del baile, sus hijos tienen una habilidad innata para la adivinación. En reconocimiento de la grandeza de este rey, todos en la religión se yerguen en la punta del pie (o se levantan del asiento si están sentados), a la mera mención de su nombre. Sus colores son el rojo y el blanco, y el se reconoce a si mismo en los números cuatro y seis. A menudo se le representa por un hacha doble. Oyá o Yanza81: Orisha del río Níger, nacida de Yemayá, y una de las tres esposas de Changó. Es la soberana de los vientos, la tempestad, la muerte, el remolino y las puertas del cementerio. Controla a los Egúns, es decir, a los espíritus del mal que provocan perturbaciones físicas y psíquicas en las personas a las que subyugan. Tiene dominio sobre los espíritus inoportunos. Carga el Ebó (ofrenda o sacrificio animal hecho a un Orisha) en la cruz de los cementerios. Sus colores es el rojo vino tinto, aun que se le adorne ciertas cosas con nueve colores. Sus insignias, la espada, la vaina del framboyán y el látigo de cola de caballo. Sus comidas rituales: chiva, gallina, gallina de guinea, Abará (pequeña albóndiga de caraota roja con cáscara envuelta en hoja de plátano) y unas caraotas bien guisadas con chorizo, morros y orejas de cerdo. Su número es el 9, el cual le da el titulo de Yansá o "Madre del Nueve", el cual ella gobierna a Eggún o los muertos. Ella representa el lapso o ligación entre los vivos y la muerte, (o ella es la muerte) y el aire que respiramos. Es Ella que nos busca y nos lleva al cielo cuando dejemos de existir en esta tierra. Ella es un Orisha de gran importancia, pues recuerden que mas temprano o mas tarde, todos nosotros tenemos que llegar donde Ella está. Su equivalente católico es Nuestra Señora de la Candelaria. Santa Teresa (Asociadas con el valor y el fuego) Este cuadro básico de deidades Orishas, su función y su equivalente católico lo debemos tener presente porque varios encuestados harán referencia a ellos y en ocasiones los mismos encuestados establecerán dicha equivalencia. Esta 81 La información referente a Oyá ha sido tomado http://www.orichas.com/espanha/quais_sao.asp?codigo=3 de la página electrónica información será de mucha utilidad cuando presente los datos que arrojó la segunda encuesta que tiene que ver con los usos de los elementos sagrados, específicamente en los rituales referentes al dinero, la salud y el amor. De ninguna manera estoy estableciendo una relación directa entre los elementos sagrados que manifiestan tener en su altar privado los encuestados con el culto a los Orishas. Pero si se debe considerar el hecho que algunos de lo encuestados están refiriendo a un santo que tiene su equivalente en el culto y los usos de los Orishas y no el culto y los usos de los santos en el catolicismo popular. Con respecto a Elegguá se debe sentenciar el dato que su uso (ver líneas arriba) se ha popularizado entre los comerciantes que lo tienen en sus puestos metálicos ya que es el encargado de abrir los caminos82. Para fines de ilustración presento la forma más común en que se le representa: ¿Cómo saber si la estampa de San Lázaro que se encuentra en el altar en la vía pública de la manzana A 8 esta referido al culto a los santos propios del catolicismo popular o se trata en realidad de Babalú Ayé? ¿Cómo saber si las imágenes del Santo Niño de Atocha, San Marín Caballero o San Antonio de Padua presentes en los altares en la vía pública y en los altares particulares no se tratan de Elegguá y por ello su especialización y las peticiones se encuentran en el culto a los Orishas que al culto a los santos propio del catolicismo popular? El culto a los Orishas se va abriendo camino en el barrio de Tepito teniendo en los comerciantes sus principales demandantes. Durante el transcurso de la etnografía pude apreciar a varones y mujeres vestidos completamente de blanco con collares de diversos colores y un gorro con conchas de mar que a 82 Los comerciantes son los que poseen una diversidad de símbolos rituales que tienen como fin alejar las envidias y atraer la buena suerte. Entre ellos encontramos al Buda que en su interior contiene semillas u otros elementos que connotan buena suerte y muy recientemente encontramos a Eleggúa y San Judas Tadeo. La Santa Muerte tuvo mayor presencia entre los años del 2004 al 2006 pero ahora se encuentra esporádicamente en los puestos de los comerciantes. decir de los habitantes del barrio se trata de Santeros; otros más van vestidos de blanco con un muñeco de ―piel‖ negra vestido de blanco con su gorro con conchas de mar. Así también, en la etnografía ofrezco el dato de que en la esquina de la calle Rivero con avenida del trabajo se encontró a una persona que ofrecía sus servicios como iniciador al sistema de creencias Yoruba y con ello, el culto y los usos de los Orishas83. Las preguntas quedan en el aire y pueden ser tema para otra investigación. Por mi parte he señalo la presencia de nuevos actores y nuevos elementos rituales que forma parte de la diversidad religiosa en el barrio de Tepito que son vigentes en este tiempo histórico en que elaboro esta investigación. Volvamos a los datos que arroja la encuesta sobre los elementos sagrados de los habitantes del barrio de Tepito en el espacio privado por lo que habiendo presentado los elementos religiosos en el espacio laboral queda saber las formas festivas que se realizan en torno a ellas. Para ello se pregunto a las personas si además de tener el altar en el espacio laboral le celebraban un día y un mes especifico a uno o varios símbolos sagrados que conforman el altar. Del universo de 36 encuestados que tiene altar en el espacio laboral respondieron afirmativamente a la pregunta de la celebración en un día específico a los símbolos sagrados. Las imágenes religiosas que se les celebra un día específico y las formas de celebración se describen a continuación: 13 encuestados celebran en especial a la Virgen de Guadalupe, en donde: uno le hace misa; cinco van a la Basílica; uno le celebra cada 12 de diciembre y el 10 de mayo; uno va en peregrinación a La Villa con los productores y vendedores de calzado el 25 de octubre o noviembre. 13 encuestados celebran en especial a San Judas Tadeo en donde: cuatro lo hacen cada 28 de mes en el espacio laboral y nueve acuden al templo de San Hipólito. 83 En mis recientes visitas al mercado Sonora los productos que más se ofertan son los referentes al culto a los Orishas, incluso han surgido nuevos operadores rituales de origen afro que ofertan los productos y elaborar rituales de respuesta inmediata. 6 encuestados solo hacen oración, en donde, cinco oran para que les vaya bien; una hace oración y pide a Cristo que bendiga el lugar de trabajo y las personas conocidas 3 encuestados celebran a la Virgen de San Juan de Los lagos, en donde, uno le pone flores y veladoras; dos más van en peregrinación al santuario. 2 encuestados celebran al Divino Niño, en donde, uno acude cada segundo domingo al templo para agradecerle; el otro lleva su imagen a la iglesia cada día 20 de mes 2 encuestados celebran a la Santa Muerte, en donde, una lo hace cada 1º de mesen su espacio laboral; la otra lo hace cada 1º de mes en el santuario de la calle Alfarería # 12. 2 encuestados celebran a Nuestro Señor de Chalma, en donde, los dos lo hacen acudiendo al santuario en Chalma, Edo. Mex. 5. 5 Peticiones a los símbolos sagrados presentes en el espacio laboral. Los 36 encuestados formulan las siguientes peticiones a los símbolos sagrados presentes en su espacio laboral: 8 encuestados hacen peticiones referentes a la salud; una de ella pide en específico por su madre enferma. 5 encuestados hacen peticiones referentes a la protección. En donde: los cinco piden que se les permita llegar sanos y salvos a sus hogares y les cuiden de la delincuencia. 3 encuestados hacen peticiones referentes a la familia. En donde: una además pide por aquellos que viven situaciones difíciles; otra refiere que le ayude a que sus hijos salgan adelante Las siguientes peticiones solo se formulan en una ocasión: que bendiga el lugar de trabajo, que no la despidan del trabajo y, paciencia para con los clientes y conocimiento para poder atenderlos. Las siguientes son diversas peticiones que no pueden ser contenidas en las clasificaciones anteriores: pide Dios en general, por un día sin problemas, que aleje las envidias, que le provea lo necesario para comer, que rinda el dinero, solo da gracias por lo que le dan. 5. 6 Diversidad de artículos que se ofrendan a los símbolos sagrados en el espacio laboral Las siguientes son diversas formas en que los encuestados manifiestan el tipo de ofrenda y celebración para algún símbolo sagrado que forma parte de su altar en el espacio laboral El 24 de diciembre abre puertas y ventanas para que entre Dios Lee algunos pasajes de la Biblia mientras esta en su negocio San Martín Caballero ―le pongo pepitas y agua al caballo‖ Sólo carga imágenes en su cartera (Virgen de Guadalupe, Juan Diego) 5. 7 Símbolos sagrados presentes en los altares en el espacio colectivo Ya he considerado como manifestaciones religiosas propias del espacio privado los altares de la casa y el espacio laboral de los habitantes del barrio de Tepito. Pero aun queda elemento que no esta a simple vista y que para conocerlo también se necesitaría granjearse la confianza no sólo de un miembro que habita un espacio que por las condiciones de la vivienda en Tepito viven decenas de familias en un espacio reducido y que existen espacios de uso colectivo, en donde se toma consenso de los otros habitantes para emprender una acción. Me refiero a los altares que se encuentran en el espacio colectivo en torno al cual los habitantes se unen para el cuidado y la celebración de rituales que les permite identificarse, unirse y estrechar relaciones sociales. Estos altares se pueden encontrar a la entrada de la vecindad, Unidad de Renovación Habitacional, condominios o bien de casas particulares y tal como se puntualiza en el segundo capítulo de esta investigación se trata de espacios de difícil acceso y en donde la integridad de los extraños puede verse trastocada. En la misma encuesta referente a las manifestaciones religiosas de los habitantes del barrio de Tepito en el espacio privado, incluí en la última parte las preguntas referentes a la existencia o no de altares en esos espacios y con ello determinar los elementos religiosos más presentes en estos altares, las peticiones que se le hacen y la celebración en torno a una o algunas de ellas. No debemos de olvidar que el fin de elaborar esta encuesta cumple con dos objetivos: el primero de ellos es tener un acercamiento más fehaciente sobre la centralidad de determinadas imágenes religiosas, con ello cubro lo referente a la religiosidad en el barrio de Tepito ya que me arroja datos diversos como es la existencia de cristianos, testigos de Jehová, Santeros, espiritualistas trinitarios marianos y ateos. Segundo, me acerco un poco más al estado actual que guarda el culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito y con ello poder ubicar los usos que los habitantes del barrio de Tepito hacen de ella. De las 115 encuestas aplicadas, 98 encuestados respondieron tener un altar e el espacio colectivo y 2 encuestados manifestaron que tiene casa propia y que si tienen un altar. Debe resaltarse el hecho que 111 encuestados viven en un espacio donde convergen otras familias ya sea en vecindades, Unidades de Renovación Habitacional y departamentos. Las imágenes religiosas que se encuentran en los altares ubicados en el espacio colectivo son: Virgen de Guadalupe en 96 espacios colectivos San Judas Tadeo en 39 espacios colectivos Cristo en 20 espacios colectivos Nuestro Señor de Chalma en 10 espacios colectivos Juan Diego en 7 espacios colectivos Sagrado Corazón en 5 espacios colectivos Santo Niño de Atocha en 5 espacios colectivos Virgen de San Juan de Los Lagos en 5 espacios colectivos San Charbel en 4 espacios colectivos Divino Niño en 4 espacios colectivos Niño Dios en 3 espacios colectivos Niño de Colombia84 en 2 espacios colectivos Santa Muerte en 2 espacios colectivos Los siguientes símbolos sagrados sólo son referidos una sola ocasión: Cristo Rey, La Divina Providencia, Juan Pablo II, Niño de las Suertes, Niño Doctor, Nuestra Señora de la Concepción, La Sagrada Familia, San Antonio de Padua, San Francisco de Asís, San José, San Martín 84 El Santo Niño de Colombia es conocido como el Divino Niño, se trata de la misma imagen. Para fines de la exposición de datos he optado por respetar la forma en que el encuestado lo conoce, por ello no aparece sumado al Divino Niño, aunque se puede hacer. Caballero, San Martín de Porres, San Miguel Arcángel, Señor de las Maravillas, Señor del Veneno, Ángeles (de la angelología) 5. 8 Festividades en torno a los símbolos sagrados presentes en los espacios colectivos Con respecto al carácter festivo en torno a estos símbolos religiosos se debe anotar que por ser un altar en el espacio colectivo la celebración involucra a un mayor número de personas que habitan en el mismo espacio y que por ello se puede presentar la división de tareas para llevar de manera adecuada la celebración. Los resultados de las 115 encuestados sobre la celebración a los símbolos sagrados del espacio colectivo son los siguientes: 75 encuestados refieren que celebran de manera colectiva a uno o varios elementos sagrados presentes en el altar ubicado en el espacio colectivo. 28 encuestados refieren que aunque los vecinos se organizan para celebrar de manera colectiva a uno o varios elementos presentes en el altar ubicado en el espacio colectivo, ellos no se suman a la celebración por diversos motivos que van desde profesar un sistema de creencias diferente, tener diferencias con sus vecinos o porque consideran que esa celebración es de carácter familiar. 12 encuestados no respondieron a la pregunta. Los símbolos sagrados en torno a los cuales los vecinos se unen para celebrar son: 81 encuestados refieren que celebran en torno a la Virgen de Guadalupe cada 12 de diciembre. En donde, la celebración va desde el remozamiento y adorno del altar por parte de los vecinos, por la noche el canto de las mañanitas, el rezo de un rosario y después compartir los alimentos que han aportado cada familia. Tres de ellos además realizan la misma celebración el 10 de mayo 28 encuestados refieren que aun y cuando los vecinos se unen para celebrar, ellos no participa con los vecinos en la celebración. En donde, las razones que argumentan es porque lo hacen de manera familiar, porque han tenido problemas con los vecinos, porque pertenecen a otro sistema de creencias, no se organizan los vecinos o por el ambiente – inseguridad- que priva en el barrio de Tepito 6 encuestados refieren que celebran en torno a San Judas Tadeo. En donde, dos refieren que lo hacen cada 28 de mes; tres de ellos acuden el 28 de octubre al templo de San Hipólito y una más refiere que sólo van al templo de San Hipólito aquellos que prometieron algo 2 encuestados refieren que celebran en torno a la Santa Muerte. En donde, las dos llevan su imagen cada 1º de mes al santuario de Alfarería # 12, pero una refiere que además se realiza un ritual llamado ―cambio de dulces‖ 2 encuestados refieren que la manera en que celebran a uno o varios símbolos sagrados del altar ubicado en el espacio colectivo es asistiendo sólo a la iglesia a escuchar misa Un encuestado refiere que sus vecinos celebran en torno al Niño de Colombia (Divino Niño), pero que no sabe como es la celebración, además de no participar en ella. Un encuestado refiere que celebra en torno al Señor de los Milagros y que cada mes de febrero viene la imagen al edifico donde vive toda su familia, se queda 3 días proveniente de Uruapan; rezan el rosario, cantan canciones, hacen una comida. Ahí mismo han velado a los familiares que han muerto desde 1980. Un encuestado refiere que la celebración la realizan en torno a todos los elementos sagrados del altar colectivo, ellos son: la Virgen de Guadalupe, Cristo, Nuestro Señor de Chalma y el Niño de Colombia, le hacen una misa cada seis meses en ese predio. 5. 9 Peticiones que los habitantes del barrio de Tepito formulan a los símbolos sagrados presentes en el espacio colectivo Sobre las peticiones cotidianas que los habitantes de los espacios antes referidos le hacen a los símbolos sagrados que integran el altar ubicado en el espacio colectivo se encuentran las siguientes: 7 encuestados hacen peticiones por sus familias 22 encuestados hacen petición por la salud propia y de sus seres queridos 28 encuestados hacen peticiones porque no falte el trabajo y éxito en las ventas 54 encuestados hacen petición por la protección de sus hijos y su persona, que lleguen con bien a su casa, que no les pase nada en su trayecto a sus labores. 3 encuestados petición referida a la caridad, ello es, pedir por sus semejantes. 8 encuestados manifiestan que solamente se persignan sin realizar alguna petición, aunque en el hecho de signarse está implícita la protección. 8 encuestados refieren que solamente dan gracias ya sea por la vida o por lo que tienen. 3 encuestados refieren que el altar y las imágenes son sólo un objeto que está en su camino. 5 encuestados refieren que no acostumbran hacer peticiones. 18 encuestados no respondieron la pregunta Casos especiales: ―Que me retiren toda maldad‖; ―Que cuiden de la maldad a toda su familia‖; ―Que alcance el dinero‖; ―Nada, estoy perdiendo la fe‖. De estas imágenes presentes en los altares ubicados en el espacio colectivo sobresale nuevamente la centralidad de la Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo y las diversas advocaciones de Cristo. Con respecto a la poca presencia de la Santa Muerte en los altares ubicados en los espacios colectivos corrobora los resultados que arrojan la etnografía y la revisión de los trabajos elaborados dentro y fuera del barrio de Tepito. 5. 10 El universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito Después de haber elaborado el sondeo sobre los símbolos sagrados presentes en el espacio privado de los habitantes del barrio de Tepito aunado a los símbolos sagrados registrados en la etnografía y los símbolos sagrados que fueron extraídos de las creaciones literarias y artículos periodísticos, puedo ofrecer a los lectores el que considero el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. En este universo de símbolos sagrados se encuentra la expresión de los actores que profesan otro sistema de creencias o bien los que niegan tener nexo con sistemas religiosos. Para fines prácticos he ordenado estos símbolos sagrados en la diversidad de advocaciones que existen en torno a símbolos sagrados centrales como lo son Cristo, María y el Niño Dios. Así también por la diversidad de santos y santas que están presentes en el barrio al igual que otras representaciones. Advocaciones de María: Nuestra Señora de la Concepción, Nuestra Señora del Sagrado Corazón, Virgen de Guadalupe, Virgen de Juquila, Virgen de la Concepción, Virgen de la Luz, Virgen de La Merced, Virgen de La Paz, Virgen de Montserrat, Virgen de San Juan de Los Lagos, Virgen de Zapopan, Virgen del Carmen, Virgen del Perpetuo Socorro, Virgen del Rosario, Virgen María, La Piadosa, Virgen de la Candelaria, María, Virgen de la Caridad del Cobre, Virgen de la Macarena. Advocaciones de Cristo: Señor del Veneno, Señor de los Milagros, Señor de las Maravillas, Señor de la Misericordia, Sagrado Corazón, Nuestro Señor de Chalma, Divino Rostro, Cristo Rey, Cristo, Señor de la Salud, Señor del Perdón. Advocaciones del Niño Dios: Niño de las Palomas, Niño del Cacahuate, Niño de las Suertes, Niño Doctor, Niño Pa, Niño Dios, Divino Niño y/o Niño de Colombia, Santo Niño de Atocha. Santos y santas: Santa Muerte, Santa Cecilia, Santa Bárbara, San Simón, San Miguel Arcángel, San Martín de Porres, San Martín Caballero, San Judas Tadeo, San Juan, San José, San Francisco de Asís, San Crispín, San Cipriano, San Charbel, San Antonio de Padua, San Lázaro, San Simón (santo popular guatemalteco), San Felipe de Jesús, Santa Clara de Asís. Ángeles y Arcángeles: Ángel de la Guarda, Ángeles (de la angelología), Arcángel Rafael. Otras representaciones: Última Cena, Rosarios, Escapularios, La Sagrada Familia, La Divina Providencia y/o Santísima Trinidad, Juan Pablo II, Beato Juan Diego, Dios Padre, Biblia, Ánima Sola, Elegguá, Bagua, Oyá, Yemayá, Oshún, Espíritu Santo, Olofi, Ovatalá, Oggún. Estos son los símbolos sagrados que están vigentes en el barrio de Tepito en el tiempo histórico en que se escribe esta investigación. Llama la atención la aparición de símbolos rituales del culto a los Orishas y los Ángeles y Arcángeles que provienen de la corriente llamada angelología. Hasta el momento la Santa Muerte no juega un papel central como lo pudiera ser la Virgen de San Juan de Los Lagos o el Santo Niño de Atocha que son los dos símbolos sagrados que le siguen a la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo. En las conclusiones de mi anterior trabajo de investigación (2007) que tenía a la Santa Muerte como eje rector hice la observación de que dicho culto tenía su núcleo duro en los rituales de respuesta inmediata, es decir, aquellos problemas que suceden de manera emergente y necesitan una rápida solución. Ahí es donde radica el carácter alternativo de la Santa Muerte, en solucionar aquello que otros símbolos rituales no pueden o han dejado de hacerlo. Por las narraciones de los devotos son dos las características que posee la Santa Muerte: la omnipresencia porque ella está en todos lados ya que todos hemos de morir; la otra es la omnipotencia ya que no existe situación que no pueda remediar. No existe situación en que la Santa Muerte no pueda auxiliar a los demandantes. Desde su aparición y hasta nuestros días no se han dejado de innovar en los símbolos instrumentales que se adhieren al símbolo dominante y como lo había explicado anteriormente, son los símbolos instrumentales donde radica la capacidad operacional. Estas innovaciones y los rituales de respuesta inmediata que diseñan operadores rituales son publicadas en la revista Devoción a la Santa Muerte de la editorial Mina, así también en la revista La Santísima una religión de editorial Mango que hoy en día ya no se publica. Para ejemplificar las innovaciones en los símbolos instrumentales (guadaña, mundo y/o reloj y búho) que se le adhieren al símbolo mayor he de tomar de la revista Devoción a la Santa Muerte de la editorial Mina diez casos, ellos son: La Santa Muerte de la Unión: además de los símbolos instrumentales con que se le identifica se le adhieren las manos unidas en forma de plegaria y trigo, en donde: ―las manos simbolizan las del Creador y siempre deben estar hacia arriba y el trigo representa la abundancia, por eso nunca le faltara el alimento‖.85 La niña Blanca de las 3 virtudes: se trata de una imagen de bulto en tres colores que son el rojo, blanco y dorado, en donde: ―La santa muerte de las tres virtudes representa la salud, el dinero y el amor. El color rojo tiene que ver con los sentimientos ya sea de la pareja, familiar o amigo; el color blanco además de servir para la paz espiritual también se utiliza para la salud; la Santa posee el color dorado que representa el éxito y la fortuna; el búho es un animal que tiene que ver con más afinidad con lo místico y lo oculto‖.86 Valadez, Manuel; ―La Santa Muerte de la unión‖, en Devoción a la Santa Muerte, Editorial Mina, México, septiembre 2005, p. 2 86 Valadez, Manuel; ―La Santa Muerte de las tres virtudes‖, en Devoción a la Santa Muerte, Editorial Mina, México, número 36, 2ª quincena de marzo 2006, p. 2 85 La Santa Muerte del tiempo: ―La Santa Muerte del tiempo se llama así porque tiene un reloj de arena en una de sus manos. el significado de los símbolos es: el reloj de arena…representa el tempo del ser humano en esta vida terrenal, ya que la vida espiritual del tiempo nada más la marcará el Creador. La cruz… tiene como función espiritual la protección en todos los sentidos ya que nos libera de toda maldición y energía nociva de nuestro camino. El candado…su función mística es que no entre ningún tipo de fuerza negativa o nociva en nuestro hogar o negocio; el candado sella nuestro hogar de la envidia y maleficios que llegasen a enviarnos. La guadaña semilunar…su función es la de cortar y destruir toda energía negativa provocada por algún trabajo espiritual que nos llegasen a hacer. La llave…simboliza la llave del éxito y de la esperanza ya que ésta nos va a abrir los caminos en todos los aspectos el éxito en lo económico, en lo sentimental y en la salud. El búho…simboliza la noche. La esfera…representa la equivalencia del infinito en su totalidad. La paloma…animal místico que representa la paz, la armonía y esperanza del ser humano para ser mejor a si mismo y a sus semejantes. El triangulo, espiritualmente representa lo absoluto, lo estático y el dinamismo. Representa el fuego por lo que la postura de este triángulo tendrá que se con uno de sus ángulos hacía arriba. Las semillas…significa la abundancia alimenticia y a su vez la fertilidad, estas semillas nunca deben de faltar en el hogar‖.87 Los comentarios que puedan ser emitidos sobre la connotación que Manuel Valadez hace de los símbolos instrumentales no se puede tener su punto de partida en la catequesis o bien en la connotación que los más doctos puedan hacer de ellos ya que la feligresía identifica y crea un vínculo con una representación iconográfica y no a través de símbolos. Valadez, Manuel; ―La Santa Muerte del tiempo‖, en Devoción a la Santa Muerte, Editorial Mina, México, número 43, 1ª quincena de julio del 2006, p. 2-3 87 La connotación que ofrece Manuel Valadez de símbolos instrumentales tiene su fundamento en las necesidades emergentes que se le presentan al individuo. No importa si en el caso de La Niña Blanca de la Tres Virtudes la exégesis la refiere a los campos de la salud, el dinero y el amor aunque en la catequesis se refiera a las tres virtudes teologales que son: fe, esperanza y caridad. El mismo caso es para La Santa Muerte del Tiempo en donde la exégesis de los símbolos instrumentales están referidos a las necesidades de los devotos aunque una exégesis elaborada desde la catequesis indique que, La Cruz es la representación de Jesús, La Paloma es la representación del Espíritu Santo y el Triángulo Equilátero la representación de Dios Padre, ello en su conjunto se lee como La Santísima Trinidad; además de que La llave es la representación de San Pedro. Pero insisto, no se debe hacer el análisis de este material desde un campo diferente al que fue concebido, hacerlo implica caricaturizar y ridiculizar a los operadores rituales que cumplen un papel fundamental en los diversos cultos…conocer las necesidades de los hombres. He ofrecido estos tres ejemplos como preámbulo a lo que propongo enseguida que es buscar la fortaleza de la Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata principalmente en los campos de la salud, el amor y el dinero. Para ello se diseño una encuesta que tiene como objetivo obtener el dato de la diversidad de rituales de respuesta inmediata a los que posiblemente recurran algunos habitantes del barrio de Tepito. A priori considero que la presencia de la Santa Muerte en este campo será más alta y permitirá ubicar otros símbolos rituales que están en uso en el barrio de Tepito. 5. 11 En Busca de la centralidad de la Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata en los campos de la salud, el amor y el dinero El carácter ritual es fundamental para los cultos alternativos ya que en ellos se ordenan determinados elementos que están asociados a las necesidades del demandante y las palabras u oraciones que se emplean en ellos establecen la conexión con el sistema de creencias y los símbolos sagrados de mayor jerarquía que en el catolicismo serán Dios, Cristo y María. Sobre los rituales, las palabras y el papel de los operadores Arthur Hocart (1975) refiere: Las palabras que se emplean en el ritual evidencian la búsqueda de resultados definidos. Por mucho que difieran las palabras, el contenido es siempre el mismo: "que la vida continué, que la tierra prospere, que reine la concordia", etc. Ya se trate de curar un hombre enfermo, de quemar una ofrenda en honor de los muertos o de consagrar un sacerdote o una nueva casa de cráneos, la suplica es siempre la misma: "que no caigamos en la enfermedad; que la vida se conserve…Dejemos que nuestros testigos hablen libremente, como el psicólogo hace con sus pacientes; dejémosles divagar. En estas condiciones probablemente nadie será más explícito en lo que las intenciones del ritual. Una de las maneras es conseguir a un especialista del ritual y que comente cada una de sus acciones y cada una de sus palabras. La consecuencia puede ser una repetición interminable, ya que el ritual en el fondo es muy simple, y sólo consiste en una larga serie de variaciones sobre el tema de la vida. Para dimensionar el carácter ritual de la Santa Muerte he de citar de las revistas especializadas en el culto algunos rituales referidos a diversos campos, así como los artículos y oraciones necesarios para que dicho ritual tenga éxito. Ritual para tu casa y negocio88 Elementos ritual en casa: Una imagen de la Santa Muerte de color verde, una veladora verde de la Santa Muerte, un ramo de perejil, un huevo, amoniaco, agua bendita de la Santa Muerte, un incienso, una cubeta de agua. Oración: Dios Padre te pido humildemente permiso para que le permitas a la Santa Muerte ayudarme a liberar mi casa de toda mala energía, daño, trabajo, brujería, permíteme despojar de todo eso a mi casa para que nos vaya bien a mi y mi familia. Después de pedir la autorización le solicitamos a nuestra imagen de la Santa Muerte que su bondad y poder nos ayuden a alejar todo lo negativo que tenga la casa en ese momento, que su poder se manifieste y proteja nuestro hogar todos los días. Limpia tu dinero para que se multiplique89 Cuando termina un año que no ha sido exitoso en ningún aspecto, queremos olvidarlo para comenzar los próximos 365 días llenos de bendiciones que se transformen en triunfos. Para atraer fortuna te decimos cómo limpiar tu dinero y convertirlo en amuleto. Los billetes y monedas pasan por infinidad de manos, muchas veces se cargan de mala energía que impide que se multiplique y rinda. A continuación les presentamos una magnifica receta con la Santa Muerte, para que este próximo año 2006 esté lleno de bendiciones y de abundancia para el Ruiz Mata, Youalli; ―Ritual para tu casa y negocio‖, en La Santísima una religión, Editorial Mango, México, número 01, año 1, febrero del 2005, p. 18 89 ―Limpia tu dinero para que se multiplique‖, en La Santísima una religión, Editorial Mango, México, número 19, año 1, 1 de febrero de 2006, p. 9 88 bolsillo. Elementos: Billete y monedas de denominación que quieran; 1 morralito amarillo; loción de la Santa Muerte blanca olor a coco; spray de protección para el dinero; spray corta fluido; sobre de polvo consagrado de ―ven dinero‖; hojas de laurel; polvo de oro y plata y, dije de cobre de la Santa Muerte. Desamarre a la persona para atraerlo hacía ti 90 El mundo gira alrededor del amor, pero muchas veces no se cuenta con el cariño de la persona amada. Cuando hay amor muchas veces se deposita en alguien que tiene compromisos. Hay muchas personas que aunque tiene una pareja estable quieren a otra, pero debido al compromiso o a algún impedimento como los hijos no cortan ese lazo y siguen ahí. El poder de las veladoras es inmenso, las ceras cuando se consumen dicen muchas cosas que solamente alguien especializado puede descifrar. Elementos: una imagen de la Santa Muerte color negro; una cera de pareja de desamarre; un frasco de miel negra; un frasco de aceite del odio; un alfiler; chile piquín; metro y medio de listón negro; dos bolsas de plástico y, polvo del retiro. La oración: ―En el nombre de Dios te pido Santísima Muerte me ayudes a separar a (nombre de la persona) si es para su bien y el mío, haz que se fije y regrese a mí dejando de lado a (nombre de la otra persona). Que éste desamarre absorba tu buena voluntad y tu poder para que funcione de la mejor manera en beneficio mío y de la persona que pretendo. Gracias te doy Santísima Muerte porque en tu poder voy confiado amén‖ Rezar tres veces el ―Padre Nuestro‖ y terminar repitiendo siete veces los nombres de las personas que quieres separar. Unta miel negra en todas las figuras de cera y repetir: ―Que esta miel negra me ayude para que lo dulce de su relación se vuelva agria, para que tome la decisión de dejar completamente a (nombre de la persona). Ritual para curar los vicios 91 Cuando un familiar se encuentra sumergido en alguna adicción hunde a toda la familia en una gran depresión que muchas veces puede terminar en desgracia. Hay muchas personas que han luchado contra todo para poder dejar las adicciones, se encomiendan a todos los santos pero no obtiene respuesta, la fuerza de voluntad no es suficiente. Para poder curar esa adicción les recomendamos realizar el siguiente ritual para que junto con la Santísima Muerte solucionen su problema. Elementos: Una imagen de la Santísima Muerte color ámbar; un poco de producto al que es adicta la persona; una foto de la persona; una estampa de la Santa Muerte; un sobre de polvo consagrado retira vicio, de constancia, de fuerza y fortaleza; una veladora negra de la Ruiz Mata, Youalli; ―Desamarre a la persona para atraerla a ti‖, en La Santísima una religión, Editorial Mango, México, número 11, año 1, 30 de septiembre 2005, p. 12-13 91 ―Ritual para curar los vicios‖, en La Santísima una religión, Editorial Mango, México, número 11, año 1, 30 de septiembre 2005, p. 16-19 90 Santísima; una veladora blanca de la Santísima; listón morado y, un vaso liso de vidrio. Nota importante: el ritual solamente lo deberán hacer cuando haya luna menguante. Colocan la veladora negra frente al vaso y con cerillos de madera la prenden al mismo tiempo que rezan la siguiente oración: ―Padre y señor mío, yo te pido en nombre de tu Padre Jesús, permitas que mi Santísima Muerte retire del vicio a (nombre de la persona), tú sabes que es mucho mi sufrimiento a causa de eso. Te lo pido en este momento, te lo pido en este lugar, te lo pido humildemente. Gracias Señor porque se que ya me escuchaste‖ Prenden la veladora blanca y rezan la siguiente oración: ―Padre y señor mío acudo a ti, a tu bendita caridad para pedirte que con esa gran fuerza que dotaste a mi Santísima Muerte, ella le dé fuerza y fortaleza a (nombre de la persona) para que no vuelva a caer en el (nombre del vicio). Te pido Señor que conforme se consuma esta veladora de esa misma manera se purifique cada vez más (nombre de la persona) y mi niña blanca le dé fuerza y fortaleza con ese gran poder que tú le dotaste. El camino recorrido en esta investigación auxiliado por una diversidad de estrategias92 me permite aventurarme a declarar que la Santa Muerte debe ser considerada como un símbolo ritual y no como un símbolo central que permita en determinado momento cohesionar a la comunidad. La Santa Muerte no representa lo central en la vida del Barrio de Tepito como lo es la Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo, Nuestro Señor de Chalma o la Virgen de San Juan de Los Lagos y, su uso y centralidad se remite a un nivel personal. Aunque estos devotos también recurran a otros símbolos rituales como lo son San Judas Tadeo y San Charbel Majluf a las que acuden en situaciones limite o crisis vitales. Estos devotos acuden a los santuarios de la Santa Muerte a renovar sus votos y elaborar peticiones de igual manera que lo hacen al acudir al Templo de San Hipólito para renovar sus votos y peticiones a San Judas Tadeo o bien, escribir la petición en un listón de un color que esta asociado a la demanda y llevarlo para colgarlo a la imagen de bulto de San Charbel que se encuentran en las iglesias de Nuestra Señora de la Concepción, San Francisco de Asís Tepito (ambas ubicadas en el mismo barrio) u otra iglesia que tenga una imagen del santo. 92 El estado de la cuestión sobre los trabajos que tienen al barrio de Tepito como objeto de estudio, la disertación sobre el catolicismo popular, la etnografía y la encuesta sobre las manifestaciones religiosas en el espacio privado. Siendo que el carácter alternativo de la Santa Muerte –de acuerdo a mis datosno se encuentra en sus semejantes que son otros santos especializados en la solución de problemas debido a que un individuo puede recurrir a uno u otro santo gracias al amplio universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. Por ello, he de buscar el carácter alternativo de la Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata en donde a priori considero que su uso como símbolo ritual será mayor. Para ello, recurro a la segunda encuesta que consta de un universo de 85 en donde el eje es la petición-ofrenda-ritual que los habitantes del barrio de Tepito elaboran cuando surgen problemas referentes a lo económico, la salud y el amor. La ofrenda es el elemento con el cual el demandante trata de ganar la atención y el favor del elemento sagrado a quién se le ha hecho la petición, sin ofrenda la petición no tiene base. La ofrenda es el ―intercambio‖ de los esfuerzos, ya que contiene el trabajo del demandante y por ello pide el trabajo de quien se la ha otorgado. 5. 12 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo de lo económico Los primeros datos que arroja la encuesta están referidos a los problemas económicos, para ello formule la pregunta ¿Cuándo surgen problemas referentes a lo económico a que elemento sagrado recurren para pedir ayuda? Las respuestas fueron las siguientes: Dios, 45 personas Virgen de Guadalupe, 35 personas San Judas Tadeo, 16 personas Santa Muerte, 9 personas. En donde: una de ellas especifica que la considera ―como intermediaria con Dios‖; otra refiere que ―la de color negro que es la más milagrosa‖ Cristo, 7 personas Sagrado Corazón, 4 personas Virgen de San Juan de Los Lagos, 4 personas Santísima Trinidad y/o Divina Providencia, 3 personas Elegguá, 4 personas. En donde: dos de ellos especifican en la encuesta que su equivalente católico es el Santo Niño de Atocha. Niño Dios, 2 personas Oshún, 2 personas San Francisco de Asís, 2 personas Santa Bárbara, 2 personas Virgen de Juquila, 2 personas Otros elementos sagrados referidos: Divino Niño, Espíritu Santo, Juan Pablo II, Nuestra Señora de la Concepción, Olofi, San Cipriano (Patrón de los zapateros), San Crispín (patrón de los zapateros), San José, San Martín Caballero, Virgen del Cobre, Virgen María, Yemayá Otras respuestas expresadas en este rubro: Un encuestado refiere no creer en ello que lo que tiene se lo debe a él mismo; una encuestada expresa que ante estas situaciones de tipo económico le pide ayuda a su difunta madre y finalmente, un encuestado expresa que no cree en ello porque Tepito se lo ha dado todo. El espacio donde se encuentran los elementos sagrados antes señalados es en su mayoría en la casa de los encuestados ya que 74 encuestados así lo refieren y sólo 11 encuestados refieren no tener un altar dentro de la casa. El lugar propicio para realizar la petición es en la iglesia y/o templo y/o santuario, el hogar, en cualquier lugar y el trabajo. Ahora bien, uno de los aspectos que interesan en la investigación es la forma en que se comunican con lo sagrado los habitantes del barrio de Tepito, por ello, deben de existir formas específicas de pedir y sellar la petición. La oración es la vía por la cual el demandante se comunica con lo sagrado a quién acude para la solución de sus problemas. Por ello, se le pregunto a los encuestados sobre la existencia de alguna oración en especial que se le rece a los elementos sagrados cuando hacen la petición de la solución referente a lo económico; siendo 74 encuestados los que respondieron afirmativamente. ¿Existen oraciones especiales dependiendo del tipo de petición? Sobre ello también se pregunto a los encuestados, pero se añadió una pregunta extra que es recitar una parte de la oración. Los resultados que ofrece la encuesta son los siguientes: 45 personas refieren el Padre Nuestro como la oración indicada para la petición. 29 personas refieren el Ave María-Salve María como la oración indicada para la petición 4 personas refieren oraciones a la Santa Muerte. En donde: una se dirige a ella como ―Flaquita, madre, comadre te pido me ayudes‖; otro encuestado le habla, le pide permiso a Dios para comunicarse por medio de la esencia de ella (Santa Muerte), también hace oración espontánea, fusiona oraciones católicas y de la Santa Muerte; otro encuestado refiere la Oración para la protección ―El círculo que sostienes Santa (Muerte) unificadora es tradicionalmente utilizado para representar un campo de poder por la naturaleza, la familia es la unificación natural de la descendencia‖; otro encuestado refiere la Novena del trabajo a la Santa Muerte. 2 personas refieren que las alabanzas y cantos son la forma en que se comunican con lo sagrado 2 personas refieren que la oración al Ángel de la Guarda es la que utilizan 2 personas refieren que la oración La Magnifica es la indicada para la petición, una encuestada recita parte de la misma: ―glorifica mi alma al Señor y mi espíritu se llena de gozo al contemplar la bondad de mi Dios Salvador‖ 2 personas refieren oraciones al Sagrado Corazón. En donde: una de ellas recita: ―Miradme, Oh! mi amado buen Jesús postrado en vuestra santísima presencia os ruego con el mayor fervor imprimáis en mi corazón los sentimientos de fe, esperanza y caridad‖. El otro encuestado recita: ―en vos confió…sin temor Oh dueño mío, Corazón Sagrado en ti confió‖ 2 personas refieren la oración a Santa Bárbara: “Doncella, ayúdame en estos momentos difíciles, bendita seas” 4 personas refieren la oración a San Judas Tadeo como el ideal para la petición. Dos de ellas especifica que se trata de la Oración de los casos difíciles: ―ven a mi ayuda para que reciba tu consuelo y el socorro del cielo en todas mis necesidades y sufrimientos” 2 personas refieren el rezo del Rosario como lo ideal para la petición. Otras oraciones: Gloria, Himno al Trabajo: ―El trabajo Señor de cada día, nos sea por tu amor santificado, convierte su dolor en alegría de amor que para dar tu nos has dado‖, Jesús Sacramentado, Novena de Confianza de la Virgen: “Oh, Virgen Milagrosa a tu bondad confió”; Oración (cristiana); Oración El divino y justo Juez; Oración a San Francisco de Asís: “Señor hazme instrumento de tu paz, donde haya odio siembre yo amor”; Oración al Señor de Chalma: “Señor de Chalma ayúdanos”; Oración de La Divina Providencia: “concédeme tu clemencia por tu infinita bondad arrodillado a tus plantas a ti de toda caridad portento, te pido para los míos vestido, casa y sustento”; Oración del estudiante; Oración del trabajo; Oración Señor del Perdón; Oraciones de la iglesia católica en general; Plegaría a sus difuntos; Salmo 127; Yo Pecador Después de la petición, el demandante puede ofrenda alguno de estos artículos: veladoras, flores, bebidas alcohólicas, incienso, dulces, puro y/o cigarro, manzana, miel, canela, juguetes, dinero, sal y oro. Los colores que los encuestados asocian con las peticiones referentes a lo económico son: 10 personas lo asocian con el color rojo. En donde: una persona especifica que debe ser una veladora de ese color; otra especifica que deben ser claveles de ese color acompañados con claveles blancos y otra más especifica que solamente deben ser flores de este color. 10 personas lo asocian con el color blanco. En donde: dos personas la interpretan como pureza; otra especifica que debe ser en una veladora especialmente para la Virgen de Guadalupe y finalmente otra persona menciona que la veladora debe de ir acompañada de flores de cualquier color y especie 7 personas lo asocian con el color amarillo. En donde: uno especificó que se utiliza en pulsera y collar; otro menciona que se utiliza en listón y flores 2 personas lo asocian con el color dorado 2 personas lo asocian con el color negro. En donde: dos personas la utilizan en imagen de bulto de la Santa Muerte 2 personas lo asocian con el color verde Una persona lo asocia con el color lila y refiere que connota prosperidad Dos personas utilizaron este espacio para comentar: ―todas esas cosas son huecas y estúpidas‖ ―no cree en esas cosas‖ Después de presentar lo referente a la petición y la ofrenda que los habitantes del barrio de Tepito encuestados hacen a los elementos sagrados que refieren como los auxiliadores en los problemas económicos; queda entrar al campo del ritual. En el ritual encontramos una diversidad de artículos que los encuestados asocian con lo económico y que constituyen un campo alternativo paralelo a la oración y la ofrenda. Estos artículos pueden pertenecer a una diversidad de universos provenientes de otras culturas. Pero han sido tomadas como un préstamo cultural las cuales son adaptadas y refuncionalizadas por el grupo que las ha incorporado a su cotidianidad. En estos rituales pueden estar y no estar elementos del universo sagrado católico ya que dichos artículos que están asociados con lo económico no son en si símbolos rituales, sino elementos complementarios del símbolo ritual que evocan un campo de acción; por ello se refiere el color amarillo como propio del oro y se utilizan monedas para que ―llamen‖ a sus iguales. En la encuesta he preguntado si conocen algún ritual referente a lo económico a la cual 30 encuestados respondieron afirmativamente. Los elementos materiales -y la exégesis de algunos de ellos- que deben estar presentes en los rituales referentes a lo económico de acuerdo a los encuestados son: 12 personas refieren que se debe de traer en la cartera o el bolso estampas de santos católicos u otros a los que se acude para pedir ayuda. Algunos de los encuestados manifestaron portar a la Virgen de Guadalupe y San Judas Tadeo; otra persona porta la Virgen de Guadalupe y el Santo Niño de Atocha; otra refiere que las pone en el puesto para que le vaya bien en la venta; otra refiere que trae consigo imágenes de Dios, Virgen de Guadalupe, San Judas Tadeo y un amuleto de un pescado que representa a Cristo, otra persona porta una imagen del Divino Niño; otra porta una imagen del Niño Dios y finalmente otra persona porta diversos santos. 8 personas refieren que se debe traer consigo en la cartera o bolso ya sea Dinero y/o Dólares y/o monedas y/o oro. Algunos encuestados especificaron que el dinero debe de colocarse atrás de puerta del altar y otra refiere que el dólar va en la cartera. Sobre las monedas una persona menciona que debe ser de cobre y otra porta una moneda china. 8 personas refieren que es necesario una veladora para el ritual. 5 personas refieren Flores. 4 personas refieren que en el ritual debe estar presente agua; una persona especifico que la acompaña con perejil y se pone en la mesa. 3 encuestados refieren como indispensable para el ritual amuletos; una persona describió su amuleto el cual es una moneda en un pequeño costalito rojo. 3 personas refieren el uso de collares; una persona especifico que los debe utilizar con los colores de San Judas Tadeo. 3 personas refieren los escapularios. 2 personas refieren los cuarzos. En donde: una persona señaló que los pone cerca de San Judas Tadeo. 2 personas refieren el uso de fruta. 2 personas refieren el uso de miel. 2 personas refieren el uso de bebidas alcohólicas. Otros elementos: borrego con monedas, canela, cerveza, cigarro, cruz de madera, cuadro de un santo siempre en el puesto, dulces, Elegguá, herradura, incienso, listones con los colores de San Judas Tadeo, loción para el trabajo, manzanas, medallas, oraciones impresas, piedras en su bolso por una cuestión zodiacal, pulsera con los colores de San Judas Tadeo, rosario, semilla hindú que la ocupan los santeros y significa dinero, abundancia, prosperidad. Finalmente, se pregunto en la encuesta si podían describir algún ritual o parte del mismo para pedir por lo económico. Las respuestas expresadas son las siguientes: 6 personas refieren que se debe poner un borrego en la puerta. En donde: uno de ellos agrega que también se le pone dinero dentro de una rana y sábila preparada; otro refiere que además se pone detrás de la puerta billetes benditos y monedas. 2 personas refieren la ejecución de ―limpias‖ para quitar la envidia. Una persona ofrece el siguiente ritual ―Poner un vaso con semillas (arroz, fríjol, alpiste, trigo y polvo de oro) además de dólares‖. Poner 11 semillas de mostaza, lenteja, arroz, trigo, cebada, maíz, fríjol, polvo de oro, aceite y bálsamo Poner Flores, un dólar y fruta Hacer una oración a la Santa Muerte invocándola pegando tres veces en el piso con la mano izquierda Se limpia con una gallina a la Santa Muerte y la sangre (de la gallina) se la pone en la frente Hacer oraciones en cadena Se le pide a Elegguá de corazón, él abre y cierra los caminos Espejo octagonal Pedir con devoción a la Santísima Trinidad Una manzana con canela en año nuevo Copa con dulces y vaso con agua Elefante con monedas Poner ajos en la mesa además de un vaso con perejil y una sábila Usar ropa interior amarilla Cadenas de oración Miel con azúcar en un recipiente sobre la mesa Poner en la mesa un vaso con agua que contenga perejil con monedas y un dólar, además debe de quedar frente a la puerta Regar con bálsamo Cuerno de la abundancia en la puerta 5. 13 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo de la salud Entremos ahora al segundo campo de los rituales de respuesta inmediata que están referidos a una de las crisis vitales más difíciles de afrontar…la salud tanto física, espiritual y emocional. Buscar la ayuda de lo sagrado para combatir la enfermedad no es un tema actual de hecho, una diversidad de etnias en nuestro país aun hacen curaciones espirituales auxiliándose de varios santos. Claro que este tipo de curación va acompañado de recetas medicinales preparadas con los recursos naturales propios de la región que han probado su eficacia en combatir determinadas enfermedades. Existe una diversidad de artículos que son los ―indicados‖ para ofrendar a estos elementos sagrados para con ello obtener los beneficios del símbolo ritual que se ha especializado en este campo. Este apartado al igual que el referente al factor económico tiene como fin último el traer esa información que circula en el entorno local y que se va transmitiendo de generación en generación. También me permitirá observar el alcance que tiene la Santa Muerte como un elemento sagrado al que se recurre en los momentos de crisis, las formas en que se le hacen la petición, las ofrendas y los rituales que se elaboran con ella. Se formuló la pregunta: Cuando surgen problemas de salud ¿A qué santos, vírgenes u otros seres sagrados acude a pedir ayuda? Los resultados son los siguientes: 43 personas piden ayuda a Dios. En donde: dos de ellas manifiestan que utilizan como mediadora a la Santa Muerte. 29 personas piden ayuda a la Virgen de Guadalupe 14 personas piden ayuda a San Judas Tadeo 10 personas piden ayuda a la Santa Muerte. En donde: ocho encuestados le piden directamente a ella y dos encuestados piden a Dios con intercesión de ella. 6 personas piden ayuda a Cristo 2 personas piden ayuda a la Virgen de San Juan de Los Lagos 2 personas piden ayuda a Cristo Sacramentado 2 personas piden ayuda al Divino Niño 2 personas piden ayuda al Sagrado Corazón 2 personas piden ayuda a Ovatalá. En donde: uno de los encuestados hace la referencia que su equivalente católico es San Lázaro 2 personas piden ayuda a Oggún 2 personas piden ayuda a la Santísima Trinidad y/o Divina Providencia 2 personas piden ayuda al Santo Niño de Atocha 2 personas piden ayuda a Santa Bárbara Los siguientes símbolos rituales y/o sagrados son mencionados por los encuestados en una sola ocasión: Espíritu Santo, Juan Pablo II, , Niño Doctor, Nuestra Señora de La Purísima Concepción, San Cipriano (patrono de los zapateros), San Crispín (patrono de los zapateros), San Francisco de Asís, San Lázaro, San Martín Caballero, Señor de la Salud, Virgen de las Mercedes, Virgen del Carmen, Virgen María y Cristo 93 Las siguientes son opiniones que los encuestados manifestaron en esta pregunta: ―Busco curarme por mis propios medios‖, ―le pido ayuda a mi hijo y mi mamá‖, ―Leo los Salmos‖, ―no se puede desligar la salud física de la salud espiritual‖, ―no hago petición porque cuido mi cuerpo y no necesito ningún ser divino‖. Los espacios donde se encuentran estos símbolos sagrados y/o rituales son dentro de la casa; aun y cuando las pericones se hacen en ese espacio, algunos demandantes acuden a la iglesia para hacer la petición y celebrar la misa como el acto que sella la petición. Sobre las oraciones especiales referidas a la salud que se recitan, un alto porcentaje de los encuestados refieren que existen oraciones especiales (72 de los 85 encuestados), ellas son: 39 personas refieren como oración para pedir por la salud El Padre Nuestro. 26 personas refieren como oración para pedir por la salud el Ave María. 4 personas refieren como oración para pedir por la salud La Magnifica. 93 ―llama de la selva al Padre Elías y a una Monja-Niña Blanca Azucena‖ (ella pertenece al Espiritualismo Trinitario Mariano) 3 personas refieren como oración para pedir por la salud La Novena. En donde, uno recita “Señor Dios, Rey omnipotente, en tus manos están puestas todas las cosas, si quieres salvar a tu pueblo nadie puede resistir a tu voluntad” 2 personas refieren como oración para pedir por la salud la Oración a la Santísima Trinidad. En donde, uno recita “Concédeles la salud, llévalos por buen camino, que sea siempre la virtud la que los guíe en su destino. Tú eres toda la esperanza, todo el consuelo mío en lo que mi mente alcanza” 2 personas refieren como oración para pedir por la salud la Oración a Santa Bárbara. En donde, uno recita “Doncella ayúdame en estos momentos difíciles, bendita seas…” 2 personas refieren como oración para pedir por la salud el rezar el rosario. 2 personas refieren que solamente hacen oración. Una persona le habla a la imagen en el dialecto Yoruba Una persona recita la Oración a la Santa Muerte: “Muerte querida no me desampares de tu protección, quiero que me des salud, atiéndeme que necesito y se que no vas a fallarme. Gracias que me oíste y que estás haciendo lo necesario para ayudarme” Una persona recita La Novena a la Santa Muerte Una persona recita La Novena de la Confianza Una persona recita La Oración a San Francisco de Asís Una persona recita La Oración de Jesús Sacramentado Una persona recita La Oración de los Casos Difíciles Una persona recita La Oración de San Judas Tadeo al Enfermo: “Os prometo, glorioso San Judas acordarme siempre de vuestros favores y nunca dejar de honrarlos” Una persona recita La Oración del Enfermo: “Acudo a Ti lleno de confianza, pidiendo me concedas salud del alma y el cuerpo, remedia mis males y perdona mis pecados para que con todas mis fuerzas te ame” Una persona recita La Oración del Justo Juez: “Padre no me dejes caer en falsos testimonios, perturbaciones de demonios, malas lenguas, crueles cárceles…” Una persona recita La Oración Dios Vive: “Señor Jesús, creo que estás vivo y resucitado. Creo que estás realmente presente en el Santísimo Sacramento del altar y en cada uno de los que en ti creemos” Una persona hace oración en base a La Biblia Una persona hace oración espontánea Una persona recita las oraciones a la Santa Muerte que regalan los días primero de cada mes en la calle de Alfarería # 12 en Tepito Una persona recita las oraciones a San Judas Tadeo que regalan los días 28 de cada mes en el Templo de San Hipólito Una persona recita las oraciones que vienen al reverso de cada imagen Una persona hace plegaria a la Virgen de Guadalupe Una persona hace plegaria a la Virgen de Juquila Una persona solamente reza el rosario Una persona reza en el nombre de Dios Una persona recita el Salmo 127 Una persona recita El Salve Una persona recita a San Judas Tadeo lo siguiente: “San Judas Tadeo intercesor en todo problema difícil, consígueme salud a mi y mi familia”. Una persona recita el Señor Mío Jesucristo: “Dios y hombre verdadero, m pesa de todo corazón haberte ofendido porque eres infinitamente bueno y el pecado te desagrada” Una persona recita “Señor, tú que sanaste al leproso que te salió al encuentro en el camino, si tú quieres puedes sanarme de la lepra, del egoísmo, mis debilidades, flaquezas, auméntame la fe”. Los artículos que se ofrendan son muy variados pero permite dar cuenta de que predomina una en específico. De los 63 encuestados que respondieron afirmativamente el ofrendar algún artículo tenemos que: 49 personas ofrendan veladoras. En donde, 28 refieren que el color no importa; 17 refieren que exclusivamente veladora blanca; 3 refieren que debe ser de color verde y un encuestado refiere que la veladora la pone frente a la foto de su hermana enferma. 20 personas ofrendan Flores 11 personas ofrendan agua. En donde, Una mujer encuestada que pertenece al Espiritualismo Trinitario Mariano refiere ―es fundamental, ponen un vaso de agua en la noche y dejan que Cristo ponga en ella el bálsamo de curación, al otro día temprano se la toma‖ Una persona que rinde culto a los Orishas refiere un Baño de hierbas y flores, ello es: ―se ofrenda un animal ya que cada santo come distinto‖ 3 personas ofrendan cigarros y/o tabaco y/o puro 3 personas ofrendan incienso 3 personas ofrendan tequila 2 personas ofrendan dulces 2 personas ofrendan manzanas Las siguientes ofrendas se refieren una sola vez: cacao, chocolate, cocos, fruta, moneda de chocolate, papeles con oraciones, sal, sandía, milagro para ponérselo al santo: “si es una pierna esa parte es la que se compra y se le pone al santo en la misma parte del cuerpo”, cordón Dorado: ―la Purísima Concepción que está en el pueblo tiene un cordón dorado y en alguna ocasión que mi niña se enfermo le pase el cordón y que se cura”, “Rosas y cigarro a la Santa Muerte y, si San Judas cumple el milagro yo reparto 20 rosas entre conocidos”. Los colores asociados a las peticiones de salud son diversos y tienen que ver más con el tipo de ofrenda; aunque algunos de los encuestados especifican el artículo, el color y la exégesis del mismo, ellos son: 22 personas refiere el color blanco. En donde, algunos encuestados expresan que ―no por superstición, sino por pureza‖; ―por la pureza que representa es básico entre los Espiritualistas Trinitarios Marinos‖; ―Santa Muerte Blanca‖; ―vestir de blanco al dormir‖ y dos personas refieren que deben ser flores de color blanco. 5 personas refieren el color verde. En donde, una persona menciona ―el Arcángel Rafael viste de verde y el es el bueno para la salud‖ 5 personas refieren el color rojo. En donde, una persona refiere que deben ser flores rojas. Otros colores empleados son: azul, Dorado ―los milagros los venden de ese color‖, Flores amarillas, Una devota a la Santa Muerte refiere el color morado ―es lo espiritual, manda a sus guerreros para que ya vengan por la persona si es que está agonizando‖ Los elementos materiales que deben estar presentes en los rituales que tienen como objetivo el pedir por la salud son: 11 personas refieren la veladora. En donde, ―llevo una veladora a la iglesia; y la otra se la pongo al Señor de la Salud‖; tres personas refieren que deben ser de color blanco 8 personas refieren las flores sin importar el color. 6 personas refieren el agua como el artículo principal. 3 personas refieren la fotografía de la persona que esta enferma junto al santo de su devoción 2 personas refieren el uso de amuletos. En donde, una persona refiere el uso de un ―amuleto maya para la salud‖ 2 personas refieren los escapularios 2 personas refieren la fruta 2 personas refieren el poner imágenes de los santos 2 personas refieren que los medicamentos deben estar junto a las imágenes Otros elementos sagrados y artículos empleados son: berenjena, La Biblia siempre abierta en los Salmos, cigarro, cirio Pascual, collares, una persona que rinde culto a los Orishas refiere al santo Olofi y Elegguá para abrir camino, Una persona refiere ―la foto de la persona enferma y se le reza para que sane, hacer la petición escrita y la deposita en el buzón al mismo tiempo que da el diezmo, incienso, medallas, piedras, poner debajo de la almohada todas las noches una cruz de madera, sagrado Corazón, Señor del Perdón, Tamarindos, Virgen de Juquila, ―Cumplir una manda de vestir a su esposa con el atuendo de San Judas Tadeo porque estuvo enferma; Dulces, veladoras, flores, milagros que se ofrendan a la Santa Muerte; Santos del Resplandor y del Consuelo‖ Se le pregunto a los encuestados si conocen algún tipo de ritual para pedir la salud a lo que 21 de los 85 encuestados respondieron afirmativamente, a ellos se les hizo la petición de que describieran el ritual o parte del mismo, ellos son: 8 personas refieren el rezar. En donde, un encuestado menciona que debe hacerse a La Divina Providencia; otro menciona que al Sagrado Corazón y finalmente, otro refiere que se debe rezar el rosario completo nueve días (La Novena) además de poner un veladora y un vaso con agua. 2 personas refieren la oración Una persona adscrita al Espiritualismo Trinitario Mariano refiere ―Círculo de oraciones, curaciones espirituales o despojos; esto se hace en una ceremonia‖ Una persona refiere el hacer La Novena completa ―porque ahí es donde se pide todo‖ Una persona refiere que sólo se debe hacer mentalización y oración Una persona refiere que se deben hacer misas especiales para pedir por el enfermo y hacer dietas Una persona refiere que se debe hacer ayuno para que todo salga bien Una persona refiere que hacer los siguiente ―ofrecer un milagro o un anillo con una inicial o la imagen de la Santa Muerte, en el caso de las imágenes católicas son de cobre o bronce, en el caso de la Santa Muerte deben ser de oro o ya en su defecto de plata‖ Una persona refiere que se debe prender una veladora y llevar un milagro de latón al templo Una persona que se define como santera refiere que se debe hacer una rogación de cabeza: algodón, coco rayado, cascarilla, agua y miel Una persona refiere que se deben vestir de blanco o con los colores de San Judas Tadeo Una persona adscrita al Espiritualismo Trinitario Mariano refiere que se deben hacer viajes astrales 5. 14 La Santa Muerte en los rituales de respuesta inmediata que los habitantes del barrio de Tepito elaboran en el campo del amor. Vayamos al tercer y último campo de los rituales de respuesta inmediata referido ahora al tema del amor. Al igual que en los campos anteriores el primer objetivo es el identificar el universo de elementos sagrados a los que acuden los encuestados cuando se les presenta un problema referido al amor. Traigo a colación lo referente a las oraciones, ofrendas, colores que intervienen para cerrar con el conocimiento de algún ritual de respuesta inmediata. Se le pregunto a los encuestados que ante los problemas referentes al amor ¿A que santo, virgen u otro elemento sagrado recurren para pedir ayuda? Siendo su respuesta la siguiente: 40 personas refieren a Dios 27 personas refieren La Virgen de Guadalupe 7 personas refieren la Santa Muerte 6 personas refieren a San Judas Tadeo 4 personas refieren a Cristo 3 personas refieren al Sagrado Corazón 3 personas refieren a Oshún. En donde, un encuestado especifica en su respuesta que su equivalente católico es la Virgen de la Caridad del Cobre. 2 personas refieren la Virgen de San Juan de Los Lagos 2 personas refieren a Yemayá 2 personas refieren a Jehová Los siguientes son mencionados una sola ocasión: Divino Niño, San Antonio de Padua ―para las causas difíciles y el amor de hijos que están descarriados‖, Nuestra Señora de la Purísima Concepción, San Cipriano ―patrono de los zapateros‖, San Crispín ―patrono de los zapateros‖, San Francisco de Asís, San Martín Caballero, Santísima Trinidad y/o Divina Providencia, Señor del Perdón, Elegguá y, los santos en general. 63 de los 85 encuestados manifiestan tener en su casa estos elementos sagrados y que pese a que le hacen la petición de manera cotidiana 22 de estos encuestados prefieren a la iglesia y/o templo para realizar la petición. Con respecto a la existencia de una oración especial para la petición de la solución de los problemas de amor, 63 de los 85 encuestados responden afirmativamente y a ellos se les pregunto si podían mencionar la oración y de ser posible recitar parte de la misma, los resultados son los siguientes: 37 personas refieren el Padre Nuestro 22 personas refieren el Ave María 2 personas refieren la Oración a la Divina Providencia. En donde, una de ellas recita ―En ti creo, en ti espero, en ti confió, Tú Divina Providencia se extienda en cada momento para que nunca nos falte casa, vestido y sustento, ni los Santos Sacramentos en el último momento, amen” 2 personas refieren La Magnifica 2 personas refieren La Oración al Espíritu Santo en donde, un de ellos recita ―Ven OH Espíritu Santo, llena de tus dones los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego del amor” 2 personas refieren La Oración de Los Casos Difíciles de San Judas Tadeo 2 personas que manifiestan rendir culto a los Orishas refieren las oraciones en dialecto Yoruba 2 personas refieren el Salve 2 personas refieren el Yo pecador 2 personas refieren oración espontánea, es decir, lo que les nace decir en el momento que están haciendo la petición. 2 personas que pertenecen al Espiritualismo Trinitario Mariano utilizan el espacio para expresar lo siguiente: ―Hay muchos cirios y flores en el templo, esta el Ojo Visor; los hermanos videntes al frente, hombres y mujeres por separado y por edades; se hace un silencio, vienen los cantos y se hace un pedimento‖; ―Si la confianza es prueba de ternura …cuando empiezo a sentir la desconfianza Sagrado Corazón en vos confió‖ Las siguientes oraciones son referidas en un sola ocasión: 15 minutos en compañía de Cristo, Ángel de la Guarda, Credo, el rezo del rosario, La Novena, Novena de Confianza a la Virgen de Guadalupe, oración a Juan Diego ―Padre Celestial que concediste al bienaventurado Juan Diego ser el confidente de la virgen te pedimos socorras a los más necesitados”, oración a San Antonio de Padua, oración a San Fernando “Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, María y José, líbrame de mis enemigos que me quieren mal”, oración a San Judas Tadeo, oración a San Pedro, oración al Sagrado Corazón, oración al Señor del Perdón y Oración al Sagrado Corazón “Miradme Oh mi amado buen Jesús que postrado en vuestra santísima presencia os ruego con el mayor fervor imprimas en mi corazón los sentimientos de fe, esperanza y caridad”, oración de la Familia, oración del Justo Juez, Oración impresa en la veladora de la Santa Muerte o bien la oración que esta al reverso de la estampa de la Santa Muerte, oraciones al reverso de las imágenes que se llevan consigo, Pedir a Dios que tenga misericordia. 49 de los 85 encuestados manifiestan ofrendar un artículo a la entidad sagrada a quién pidieron la pronta solución de los problemas referentes al amor, entre ellos se encuentran: 41 personas ofrendan veladoras. En donde, diez refieren ―veladora blanca‖; una refiere ―veladora de color amarillo‖; otra refiere ―veladora verde‖ 19 personas ofrendan flores. En donde, una refiere ―únicamente de color blanco‖; otra refiere ―girasoles‖; otra refiere ―Rosas rojas‖ 10 personas ofrendan agua 6 personas ofrendan dulces. En donde, tres refieren que ―sólo dulces‖; una refiere ―caramelos‖; una refiere ―moneda de chocolate‖, una refiere ―chocolates‖ 4 personas ofrendan canela 4 personas ofrendan incienso 4 personas ofrendan manzana 4 personas ofrendan miel 3 personas ofrendan aguardiente- tequila 3 personas ofrendan cigarro-Puro. En donde, dos ofrendan cigarro y ofrenda puros. 3 personas ofrendan fruta. En donde, refiere ―debe de ser piña y naranja‖ Las siguientes ofrendas sólo se presentan en una ocasión: una persona adscrita al Espiritualismo Trinitario Mariano refiere un cirio preparado, huevo, limosna en la iglesia, polvo de oro. Los colores que están asociados a los rituales referentes al amor son: 16 personas refieren el color rojo 12 personas refiere el color blanco 3 personas refieren el color azul 3 personas refieren el color amarillo 2 personas refieren el color verde 2 personas refieren el color rosa Los elementos que deben estar presentes en los rituales donde la petición sea el amor son: 13 personas refieren las imágenes. En donde: uno persona refiere que debe ser Elegguá; otra persona que Juan Diego; otra persona que la Santa Muerte; otra persona que la Virgen del Carmen; otra persona que el Señor de la Misericordia, dos personas que la Virgen de Guadalupe; dos personas que San Judas Tadeo y cuatro personas refieren que simplemente imágenes 9 personas refieren que un elemento principal es la fotografía de seres queridos. 7 personas refieren las veladoras. En donde, dos refieren que deben ser de color blanco. 6 personas refieren las flores. En donde, una refiere que deben de ser de color rosa 3 personas refieren el agua 3 personas refieren los escapularios. En donde, uno refiere que debe ser con la imagen del Señor de Chalma. 2 personas refieren un listón. En donde, uno de ellos refiere que debe tener nueve nudos y el otro nada más refiere el listón Los siguientes elementos son referidos una sola ocasión: amuletos, canela, collares, fruta, incienso, libro de oraciones, manzana, medallas, miel, ojo visor, piedras, polvo de oro, pulseras, rosario, Salmos de La Biblia Finalmente, se le pregunto a los encuestados sobre si conocen un ritual de respuesta inmediata para los problemas de amor, solamente 7 de 85 encuestados dijeron conocer los siguientes: Amarre amoroso: un listón con nueve nudos y en cada nudo se hace una oración. Le pone a San Ramón Nonato una corona de ajos y una moneda para que no le falte el trabajo, además de un aromatizante en aerosol Manzana, miel, canela y polvo de oro y oraciones para el ―dominio de las personas‖. Una persona adscrita al Espiritualismo Trinitario Mariano refiere el ojo visor, vaso de agua y flores, ello para los bebés Se pone un vaso con miel, canela y azúcar y la foto de la persona o también un merengue con su foto. 5. 15 Comentarios finales sobre el carácter alternativo del culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito Había mencionado que a priori esperaba tener un registro mayor de habitantes del barrio de Tepito que tuvieran a la Santa Muerte como un símbolo sagrado de uso constante. Esta conjetura tenía su fundamento en los recorridos que efectúe en el barrio de Tepito para elaborar mi primer trabajo de investigación (2007) en donde observe que una gran cantidad de comerciantes tenían en sus puestos metálicos las imágenes de la Santa Muerte, otros más le ponían el nombre de la Santa Muerte a sus negocios y observe en mis recorridos cotidianos a una diversidad de personas de diferente edad y sexo portar dijes y tatuajes con la imagen de la misma. Esta conjetura a priori tenía su fundamento por lo observado en el Mercado Sonora en el que la imagen de bulto, así como la diversidad de artículos propios para el culto y los rituales estaban en primer plano. Tenía su fundamento por la diversidad de artículos periodísticos que establecían un estrecho vínculo entre la Santa Muerte con los habitantes del barrio de Tepito por la inseguridad y las actividades comerciales que ahí se desarrollan. Tenía su fundamento en la existencia del Santuario Nacional de la Santa Muerte en la calle Alfarería # 12 y los miles de devotos que se reúnen los días primero a celebrar la ceremonia. No debemos de pasar por alto que el otro Santuario de la Santa Muerte ubicado en la calle de Bravo # 35 en la colonia Morelos se encuentra a no más de 500 metros del de Alfarería. Ahora bien, después de casi tres años de no haber elaborado una observación a detalle en el barrio de Tepito y solo hasta que elabore la etnografía para la presente investigación pude observar una serie de cambios con respecto a la Santa Muerte como símbolo ritual. Hoy en día ya no aparece en primer plano en los puestos metálicos de los comerciantes y en cambio San Judas Tadeo y Eleggúa han ocupado ese lugar. Hoy en día el escenario es diferente en el Mercado Sonora en donde los artículos para elaborar rituales con deidades Orishas aparecen en primer plano, además de que en los alrededores del mismo se han ubicado operadores de origen afro que elaboran rituales con los Orishas. Es frecuente observar hoy en día a jóvenes portar a San Judas Tadeo en diversos artículos como son pulseras, collares, gorras, playeras, aretes y otros más; además de que cada 28 de mes se ve movimiento de los mismos caminando hacia el Templo de San Hipólito para celebrar la ceremonia en que renuevan sus votos con San Judas Tadeo. De hecho, en el segundo capítulo incluí los diversos Blogs que circulan en el Internet que hacen referencia a las características que según los externos tienen los habitantes de Tepito y asocian más a San Judas Tadeo con el barrio que la misma Santa Muerte. Otro aspecto que llama la atención es que la Editorial Mina que publica la revista Devoción a la Santa Muerte ha sacado a venta una revista especializada en San Judas Tadeo con el mismo formato que la de la Santa Muerte; quizás ellos puedan vislumbrar hacia donde apunta su nuevo mercado de consumo. El culto a San Judas Tadeo esta cobrando auge y por ello la Iglesia Católica mexicana ha encaminado sus baterías para informar a la feligresía sobre el significado del santo y las formas de devoción. Ello debido a las miles de personas que se reúnen a las afueras del templo de San Hipólito cada 28 de mes y el aumento de –principalmente de jóvenes- que portan la imagen en diversos artículos. La vía que la Iglesia Católica Mexicana utiliza para hacer llegar el mensaje es su órgano de difusión el semanario Desde la fe que en su edición del 4 de noviembre del 2007 presenta un artículo sobre este santo firmado por Gabriela Guerrero y Gabriela Reyna (2007) que refieren sobre el culto lo siguiente: San Judas Tadeo, una devoción desvirtuada: Claretianos Aunque muchos fieles buscan imitar la santidad de San Judas Tadeo, otros mantienen prácticas ―inusuales‖ que no comulgan con la fe católica, aseguran. La gran devoción al santo genera recursos que son invertidos en los pobres y necesitados, ayuda que, incluso, es reconocida internacionalmente. En la actualidad, algunos de los fieles devotos de San Judas Tadeo han malformado las verdaderas intenciones de veneración a los santos católicos: novios golpeadores que piden al santo que regrese su enamorada, ladrones confesos que imploran protección de la policía y hasta adoradores de la Santa Muerte, se dan cita -en medio de muchos otros devotos- los días 28 de cada mes en la Parroquia de San Hipólito de la colonia Guerrero de la ciudad de México para agradecer o solicitar la intercesión del santo apóstol. En entrevista para el Sistema Informativo para la Arquidiócesis de México (www.siame.com.mx), el P. Enrique Mascorro, de la congregación de los Misioneros Claretianos, responsables del templo, explicó que la devoción a San Judas ha ido cambiando con el tiempo, toda vez que ahora no sólo se le pide su intercesión para hacer un bien, sino también para hacer el mal, lo cual va en contra de la fe cristiana. Agregó también que ―muchos fieles de San Judas Tadeo crean símbolos y significados propios, con los cuales se identifican y se entienden, por ejemplo: el número de escapularios que portan, el color y el tamaño, así como las cadenas que se cuelgan en el cuello y otras prácticas que no necesariamente comulgan con nuestra fe‖. Sin bien los religiosos dicen desconocer el sentido del número y colores de los escapularios que caracterizan a estos fieles, significado que llega a cambiar de un grupo a otro de devotos, los claretianos se han dado a la tarea de orientar dichas prácticas de religiosidad popular para encaminar la devoción al santo hacia la promoción de la vida y la solidaridad, purificándola de todo lo que va en contra de ella. Uno de estos esfuerzos de los padres claretianos es la publicación bimestralmente de la revista Presencia Apostólica con la que se busca orientar y mantener informados a los fieles sobre la devoción a San Judas. En aumento Todos los días 28 de cada mes se reúnen cerca de tres mil personas dentro del templo, sin considerar a los fieles que sólo lo visitan por fuera. El pasado 28 de octubre -día de San Judas Tadeo- llegaron alrededor de cien mil devotos desde diferentes partes de la República Mexicana para ofrecer al santo apóstol arreglos florales y artículos de despensa para el centro de acopio de los Misioneros Claretianos. Esto ha llevado a los religiosos a redoblar esfuerzos para atender pastoralmente a los fieles; en San Hipólito se realizan 17 misas a los largo del día y, a decir del padre Enrique Mascorro, los cuatro sacerdotes adscritos al templo no se dan abasto, por lo que generalmente invitan a otros sacerdotes claretianos para atender a los millares de fieles que abarrotan el recinto. Solidaridad Sin embargo, el fenómeno devocional a San Judas Tadeo ha provocado otras realidades. La numerosa feligresía que generosamente ofrenda sus bienes durante las misas, propician que el templo tenga los suficientes recursos para ayudar a la población más pobre del país y de otras regiones. Por ejemplo, la Embajada de Perú en México, recientemente agradeció a los Misioneros Claretianos por el acopio de víveres y artículos de primera necesidad que desde México fueron enviados a las zonas costeras de aquella nación afecta por el terremoto de septiembre pasado. Esta colaboración con los hermanos andinos -así como otras muchas invaluables obras que realiza esta congregación en nuestro país- no hubiera sido posible sin la enorme devoción de mexicanos a San Judas Tadeo, promovida por estos sacerdotes claretianos. El auge que esta cobrando el culto y los usos a San Judas Tadeo deben se plasmarse para futuras investigaciones que se interesen en el tema. Aunque no es mi objeto de estudio y bastaba con mencionarlo como parte del universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito se hace necesario dar mayores detalles sobre el mismo. La existencia de San Judas Tadeo así como del grupo que le erige altares si esta registrado en los trabajos de corte académico. Recordemos que en el segundo capítulo extraje de la obra de Guadalupe Quiroz (1992) un fragmento de una entrevista en que el informante refiere que el altar erigido a San Judas Tadeo fue hecho por personas que se dedicaban a actividades ilícitas. Al igual que a la Santa Muerte que se le dedica un día específico del mes en que el devoto renueva sus votos para con ella en San Judas Tadeo sucede lo mismo. Los devotos realizan un peregrinar cada día 28 de mes al templo de San Hipólito ubicado en la estación del metro Hidalgo a escasos 500 metros de del barrio de Tepito. Las imágenes de San Judas Tadeo son llevadas en andas y es común ver en ese día diversas peregrinaciones que llegan al templo a visitar al santo. Los jóvenes es el grupo más nutrido que se da cita en ese espacio, le siguen las amas de casa y los varones de edad madura y los de la tercer edad son los menos. Si describimos las formas elementales del culto a San Judas Tadeo entre los habitantes del barrio de Tepito y después las del culto a la Santa Muerte en el mismo espacio y las llevamos a un plano comparativo no encontraremos grandes diferencias y si muchas similitudes, el símbolo ritual cambia pero la estructura ritual con la que históricamente los habitantes del barrio de Tepito generan en torno a ellos no cambia. Este capítulo permite tener un acercamiento al estado actual que guarda el culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito y es el complemento de lo expuesto en el capítulo dos en donde se busco indicios de la Santa Muerte ya sea en un culto o en sus usos y, es el complemento de la etnografía que arroja datos significativos como es la casi ―ausencia‖ de la Santa Muerte en los altares erigidos en la vía pública. Pero el hecho de que los altares erigidos en la vía pública y en el sector de los comerciantes haya reducido su presencia la Santa Muerte y que en cambio hayan aparecido nuevos símbolos considerarse como un indicador rituales en estos dos campos no debe que hable de que el culto esta desapareciendo, sino que su campo de acción debe buscarse en otro elemento. En la segunda encuesta sobre los rituales de respuesta inmediata es notable el aumento de ocasiones en que la Santa Muerte es referida para la petición de la solución de un problema referente a lo económico y la salud. También llama la atención que mantiene una constantes las referencias a la ayuda que piden los encuestados a elementos sagrados pertenecientes al culto a los Orishas, en donde, Elegguá es al que más acuden en las peticiones referentes a lo económico; mientras que Ovatalá y Oggún son los más referidos. Sobre estos elementos del culto a los Orishas no podemos descartar que cuando los encuestados se refieren a Santa Bárbara se estén refiriendo a Changó; que cuando refieren San Lázaro se estén refiriendo a Babalú Ayé; y finalmente, cuando refieren a la Virgen de las Mercedes se estén refiriendo a Ovatalá. No se puede descartar este tipo de equivalencias para futuras investigaciones ya que se pueden estar incorporando nuevos símbolos del universo sagrado católico, pero que su esencia este no en la especialización que el catolicismo popular ha hecho de ellos, sino que su referente se encuentre en la especialización que se hace de ellos en el culto a los Orishas. La encuesta permite vislumbrar el vínculo que existe entre los habitantes del barrio de Tepito para con la iglesia, ya que de acuerdo a los datos, varios encuestados manifiestan acudir a la iglesia a misa como la forma en que el ―pacto‖ con lo sagrado a quién le hizo la petición se sella. Cabe mencionar que ello incluye a los devotos de San Judas Tadeo y los de la Santa Muerte, en donde, los primeros considera como piedra angular del culto el ―peregrinar‖ con su imagen al templo de San Hipólito; de igual manera los devotos a la Santa Muerte consideran piedra angular del culto el llevar su imagen también en un peregrinar al Santuario de la calle Alfarería # 12 en el barrio de Tepito. Ahora bien, la presencia de la Santa Muerte como de elementos pertenecientes a culto a los Orishas se incrementa cuando entro al campo de los rituales de respuesta inmediata en los campos de la economía, la salud y el amor. Además, la mayor parte de los datos sobre el conocimiento sobre alguno tipo de ritual de respuesta inmediata fue proporcionada por aquellos que manifestaron tener a la Santa Muerte u algún santo Orisha como elemento central en su vida religiosa. Así también la encuesta sobre los rituales de respuesta inmediata permite traer a la escena de la religiosidad en el barrio de Tepito a un elemento sagrado ausente en gran parte de la investigación, me refiero a Dios que en el campo de la salud será al que más recurren los habitantes del barrio de Tepito. Dios que no aparece en la literatura generada en el interior del barrio, ni en las crónicas periodísticas ni en las tesis de investigación. Dios era el gran ausente hasta que esta herramienta metodológica permite traerlo e incorporarlo al universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. Los datos expuestos en este capítulo pueden dar una idea de la diversidad de elementos sagrados a quiénes se recurre para casos específicos. De ninguna manera debe ser considerados para ―construir‖ generalidades, pero si permiten plantear nuevas preguntas sobre el fenómeno religioso en el barrio de Tepito o de la diversidad de manifestaciones propias del catolicismo popular. Hasta aquí, los diversos datos permiten considerar el carácter alternativo de la Santa Muerte que tiene su fundamento y mayor presencia en los rituales de respuesta inmediata y que el grueso de sus devotos son por lo normal jóvenes.94 Queda trabajar el carácter emergente el cual esta dado en la diversidad de mitos de origen que existen en torno al culto a la Santa Muerte. Además de ahondar en las posibles vías por las cuales se ha erigido la santidad a la muerte, ello es tema de nuestro siguiente capítulo. 94 Se debe recordar que estoy hablando del barrio de Tepito, ello no quiere decir que mis observaciones deban ser consideradas como una generalidad. En otra área pueden cambiar los rangos de edad, pero lo que no sufre modificaciones son las formas rituales y los diversos mitos de origen que sobre el culto a la Santa Muerte existen. CAPÍTULO VI: EL CARÁCTER EMERGENTE DE LA SANTA MUERTE En la antropología social la exégesis de los actores es una de las condiciones fundamentales para su quehacer y precisamente esta investigación ha privilegiado esa fuente primaria. Ese fue el sentido que propicio la búsqueda de las diversas manifestaciones religiosas en el barrio de Tepito en una diversidad de documentos y campos del cocimiento. Queda registrada la exégesis de los habitantes del barrio de Tepito a través del sondeo que se aplico en los dos rubros que tienen que ver con los símbolos sagrados en el espacio privado y los rituales de respuesta inmediata en los campos de lo económico, la salud y el amor. Hasta el momento he trabajado el vínculo de los habitantes del barrio de Tepito con lo sagrado desde varios campos como son: los trabajos de corte académico, la literatura, los trabajos de corte periodístico, las producciones en video y los foros de opinión en la Internet. He considerado a cada una de las producciones de los campos referidos como documentos históricos que permiten ubicar los símbolos sagrados más representativos así como los rituales que los habitantes del barrio de Tepito tejen en torno a ellos. Esa búsqueda me llevó a considerar varios campos que tienen al barrio de Tepito como centro de su producción literaria o académica. Mi objetivo es básico, buscar vestigios de la Santa Muerte como un símbolo sagrado lo cual derivaría en un culto no importando si se profesaba en el espacio más privado, si se trataba de un culto que solamente pocos conocían y que el símbolo no era conocido más que por una pequeña, pero muy pequeña comunidad. Pero esa búsqueda cumple un segundo objetivo que es el tratar de ubicar a la Santa Muerte no como un símbolo ritual ya que de ello da cuenta la obra de Oscar Lewis Los hijos de Sánchez (1982) la cual he citado a través de la oración que tiene como objetivo castigar y ver humillado a la persona amada, ese no es mi principal objetivo. La Santa Muerte se nos presenta de manera emergente ya que hizo acto de presencia de manera repentina y de la noche a la mañana se convirtió en el foco de atracción de diversos comentarios elaborados ya sea desde un campo específico del quehacer académico o bien por actores que juegan un rol jerárquico dentro de una institución ya sea civil, política o religiosa y que al emitirlos generaron reacciones encontradas. Emergente lo define el diccionario Encarta como aquello que nace, sale y tiene principio de otra cosa. El motivo por los cual he elegido este término responde al hecho de que estamos en presencia de un nuevo símbolo ritual que tiene en los insertos en el catolicismo popular al grueso de sus devotos. Este nuevo símbolo ritual podría pasar desapercibido si como símbolo dominante al igual que los símbolos instrumentales que lo componen tuvieran primeramente un parangón en el universo sagrado católico u que la exégesis de los mismos remitiera al campo del catolicismo. Son cuatro puntos por los cuales considero como emergente al símbolo dominante llamado Santa Muerte95, ellos son: La existencia de diversos mitos de origen tanto del símbolo dominante como del culto. Si bien el símbolo posee un carácter polisémico, este tiende a homologarse a través del elemento apologético que contiene el ritual. Pero en el símbolo dominante llamado Santa Muerte así como de los símbolos instrumentales que lo componen se presenta una diversidad en la exégesis que ofrecen tanto líderes espirituales del culto, operadores rituales que trabajan con la misma, devotos, jerarquía eclesiástica y los que han trabajado el tema. En lo que respecta al barrio de Tepito hasta antes del 2002 no existen antecedentes que hablen de un culto en forma y las referencias que sobre ella existe la remiten al campo de lo alternativo debido a su especialización en la solución de problemas referentes al amor. Después de cinco años de trabajar el tema y de haber hecho la revisión un porcentaje considerable de los documentos que hablan sobre el culto me permite afirmar que tiene un origen reciente, ello tiene su fundamento por la no existencia de registros que hablen del culto hasta el año del 2002 que inicio en las notas periodísticas y el boom que tuvo en el año 2004. 95 Me refiero exclusivamente al símbolo dominante y no al culto que sería el conjunto de manifestaciones que giran a su alrededor y que, como lo demostré en el capítulo anterior la estructura ritual es producto de las formas en que los católicos populares establecen el vínculo con lo sagrado y que se revitaliza en nuevos símbolos rituales. El presente apartado tiene como fin ofrecer a los lectores las diversas posiciones que diversos actores han asumido ante la presencia de este símbolo ritual. Así también deseo aclarar que un porcentaje del material que he de presentar no corresponde al área de las ciencias sociales o las humanidades, por lo tanto, solamente se expone para que el lector se pueda crear una idea de la manera en como se fueron creando los discursos que tenían como fin ya sea apuntalar el culto en su elemento mítico y simbólico o bien los discursos que tenían como fin ser detractores en los dos rubros mencionados. Desde el campo de la antropología social y específicamente en los estudios sobre el catolicismo popular resulta difícil poder confrontar esta información con la propia de la especialidad ya que los discursos apologéticos deben se pensarse en relación al culto y no con respecto a la lógica de la antropología social, uno de los riesgos que se pudiese presentar es caricaturizar o ridiculizar a los creadores. Por ello, dejemos que la información que sobre la Santa Muerte aportan diversos campos genere en su interior sus propios detractores que teniendo como base el mismo documento, es decir, los mismos códigos pueden confrontar sus dos maneras de interpretar el dato. Siendo que mi campo es el de las ciencias sociales y el método científico es el eje rector de mi investigación estoy en condiciones de poder hacer una revisión critica constructiva a los documentos que han sido generados desde este campo. Aun y cuando algunos de los lectores consideren que este apartado debería de ir al inicio de la presente investigación en descargo de lo que pareciera ser una falta de orden les menciono que el objetivo central es la religiosidad en el barrio de Tepito y la Santa Muerte solamente es el caso que me permite trabajar la categorías de análisis culto alternativo y culto emergente. Si algún lector quisiera mayores referencias sobre el culto a la Santa Muerte le sugiero acudir a mi trabajo sobre el mismo (2007) en donde elaboro una exposición de los elementos que lo componen a través de tres categorías de análisis antropológicas como son el mito, el símbolo y el ritual. ¿Qué decir cuando se pregunta sobre algo que resulta novedoso y que no se tiene antecedente alguno? Este es el caso de la Santa Muerte que de la noche a mañana se posiciona como uno de los símbolos rituales más demandados en la zona metropolitana de la ciudad de México. En los principales centros de distribución de artículos referentes a los rituales de respuesta inmediata como lo es el Mercado Sonora, la Plaza de los artesanos la Sata Muerte aparece en primer plano. Empieza a ser común observar a personas que portan algún artículo que lo identifica como devoto ya sea un dije, un escapulario o playera. En torno a este símbolo ritual se presenta un fenómeno interesante ya que de manera vertiginosa surgen centros de culto donde empiezan a acudir cientos y posteriormente miles de devotos. Surgen operadores rituales especializados en los usos de la Santa Muerte que ofrecen todo tipo de rituales de respuesta inmediata y finalmente, surgen líderes espirituales que proclaman ser los elegidos por la Santa Muerte para llevar su labor misionera. Todos estos elementos que forman parte del fenómeno llamado Santa Muerte ocurren en un lapso no mayor de dos años. La Santa Muerte desde su aparición fue apuntalada en los campos del ritual y del símbolo. Ello gracias a que los devotos en el inicio del culto intercambian información sobre el símbolo ritual y los diversos rituales que se elaboran con la mismas. Es en estos espacios rituales donde se empieza a institucionalizar el culto, es decir, donde surgen las formas elementales del culto a la Santa Muerte en donde no interfieren ni líderes espirituales ni operadores rituales. El campo más endeble del culto a la Santa Muerte es la parte del mito que sería el campo donde están establecidas las formas del culto y las reglas que lo seguidores han de cumplir. Aquí es donde el papel de los líderes espirituales y biógrafos del culto cobran importancia ya que trataran de apuntalar esta parte frágil del culto. Pero no solamente ellos intentaran buscar el origen de las partes que constituyen el culto. Académicos y periodistas se sumaran a este intento y trataran de explicar el actual culto ya sea dando un seguimiento al símbolo dominante o cualquiera de los símbolos rituales que lo componen. Otros buscaran el origen del culto dando un seguimiento a las partes que intervienen en los rituales aes las raíces de los rituales o bien, buscando en los documentos históricos manifestaciones rituales en torno a la muerte para así establecer la idea de que el actual culto es un continuum y no una manifestación religiosa novedosa que su surgimiento obedece a situaciones emergentes en donde los elementos de su universo sagrado han dejado de cumplir con sus funciones. 6. 1 Los diversos mitos de orígenes de la Santa Muerte. Es necesario externar que para el análisis de los mitos se debe hacer a la par de las características propias del grupo que los genera. Someter los mitos a un análisis desde un campo diferente no traería resultados óptimos ya que serían reducidos a un amasijo de incoherencias o bien un relato fantástico. Los mitos otorgan sentido a la comunidad creadora o quienes lo adoptan ya que ahí están contenidas las aspiraciones y reglas que rigen al grupo o el individuo. 6. 1. 1 El origen divino de la Santa Muerte El mito de origen que inserta a la Santa Muerte en el sistema de creencias católico lo ofrece Monseñor David Romo Guillen Arzobispo Primado de La Santa Iglesia Católica, Apostólica Tradicional MEX-USA, Misioneros del Sagrado Corazón y San Felipe de Jesús A.R que tiene su sede en la calle de Bravo # 35 en la colonia Morelos, D.F. se dio a la tarea de crear un Devocionario de la Santa Muerte: Origen y devoción a la Santa Muerte 96 en donde ubica el origen de la Santa Muerte en los siguientes pasajes de La Biblia: Lo que dice la Biblia sobre la Santa Muerte. Génesis 2:17, En este pasaje Dios el Señor ya había creado el universo y todo lo que vemos, tocamos y sentimos, e incluso el mismo hombre lo había formado de la tierra y le estaba dando bajo su dominio el jardín del Edén, sin embargo en la advertencia que le hace al hombre, nos revela la presencia de su creación el ángel de la Muerte, lo que nos lleva a reafirmar que ella es un ángel creado por Dios y que sólo a él obedece. Génesis 3:19, En este pasaje Dios le da la potestad de intervenir en la vida del hombre y por lo tanto, también de ayudarle a superar sus contratiempos y necesidades, pues ella camina con 96 La bibliografía en la cual se apoya el Devocionario a la Santa Muerte: origen y devoción a la Santa muerte es: Perdigón Castañeda Judith Katia, ―La Santísima Muerte‖, en: Boletín oficial del Instituto Nacional de Antropología e Historia, México, número 68, octubre-diciembre 2002 Ambrosio, Juan; La Santa Muerte biografía y culto, Edit. Martínez Roca, México, 2003. Pero no ofrece notas a pie de página que permita asignar a los autores los créditos que les pertenecen. nosotros desde el mismo momento de la concepción y al final de nuestra vida se ve la Luz que nos conducirá hacia la presencia del Padre Eterno. Ezequiel 37, En este Capítulo, La Santa Biblia se refiere a los huesos secos, que al escuchar la palabra de Dios vuelven a unirse y se levantan a una vida nueva, un ejemplo de lo que ocasiones es nuestra propia vida, pues gracias al amor y a la intercesión de la Santa Muerte, nos levantamos del polvo y la destrucción para iniciar una nueva forma de vida en nuestros seres queridos y perdonar a nuestros enemigos. El mismo Devocionario de la Santa Muerte se ofrece un apartado histórico sobre el origen de la Santa Muerte La devoción a la Santa Muerte, no es nueva en nuestra patria, desde tiempos antiguos en las diversas culturas prehispánicas se le ha rendido tributo, en la actualidad y debido a la ignorancia y olvido al que se le a sometido a su culto, el pueblo necesitado de un aliciente espiritual más cercano a sus necesidades, ha retomado la devoción de la Santa Muerte con mayor fe y fuerza; lamentablemente el culto popular deriva en mitos y formas devocionales diversas y contradictorias, como también excesos que los alejan del verdadero sentido y conocimiento cristiano de la gracia de Dio. La Santa Iglesia Católica, Apostólica, Tradicional MEX-USA, Misioneros del Sagrado Corazón y San Felipe de Jesús A.R., tras realizar un cuidadoso y delicado trabajo de investigación, participación y análisis de esta devoción, determinó autorizar su práctica a los devotos que dentro de la jurisdicción y potestad lo deseen, por considerarla una ―devoción piadosa que promueve el espíritu de oración, encuentro y entrega a la voluntad suprema de Dios nuestro creador y a nuestro Señor Jesucristo‖. Por lo cual proclamó el día 15 de agosto como el día de la Fiesta Patronal de la Santa Muerte. ORIGEN DE LA IMAGEN DE LA SANTA MUERTE Los primeros Misioneros Franciscanos que vinieron a Evangelizar la Nueva España, trajeron la devoción a San Pascual Bailón, canonizado por el Papa León XIII, y junto con la devoción llegó una imagen que lo representaba muerto, que llevaron a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Donde se le comenzó a venerar. Los indígenas empezaron a fabricar imágenes pequeñas de la que habían llevado los franciscanos y la llamaron ―El Santo Muerto‖, más tarde le agregaron la guadaña y la balanza y empezó a conocerse como la Santa Muerte. La imagen de la Santa Muerte no surgió espontáneamente, sino como producto del devenir histórico y religioso de Europa que al llegar al territorio de la Nueva España, se afianzo en las comunidades nativas y mestizas. La Santa Muerte muestra atributos traídos de occidente que nada tienen que ver con los antecedentes prehispánicos. Conocida también como Santísima Muerte, Hermana Blanca, Santísima, con el sobre nombre de San Pascual o Santa Pascuala y San Bernardo. EL CULTO, RELIGIOSO Y POPULAR Cuando la religión católica llegó a tierras americanas, se introdujo la idea de la muerte dentro de la liturgia, a través del deceso de Cristo para la salvación de los hombres, y con la expiración de los santos y mártires, como ejemplo de un ―vivir bien‖, para alcanzar la vida eterna en el cielo. Siendo la muerte parte fundamental del dogma, se introdujo deliberadamente el ―Triunfo de la Muerte‖. La Santa Muerte está considerada entre la ―dulía (tributo a ángeles y santos) como intercesora y mediadora entre lo terreno y lo divido, la vida y la muerte, el cielo y la tierra, es un ser espiritual de principio a fin, que en la medida en que sus devotos le elevan plegarias y realiza milagros le otorgan el poder de la santidad, pues conforme los preceptos de la Iglesia Católica pasa a ser mediadora entre el hombre y Dios, como lo son los santos. Los indígenas retoman tradiciones de la época prehispánica y la mezclan con los cultos católicos (como ocurrió en México). El tema de la santidad de la muerte fue uno de los elementos del que los detractores del culto hicieron más uso ¿Quién le otorgó la santidad? Para los detractores no podía ser santa pues no gozaba del reconocimiento de la Iglesia Católica, ante estos ataques el Devocionario de la Santa Muerte ofrece un apartado sobre la Santidad de la Santa Muerte SOBRE LA SANTIDAD DE LA MUERTE ¿Qué no puede ser santa porque no la han canonizado?, El concepto de santidad que maneja y hace creer la iglesia romana es equivocado, en primer lugar porque tú amigo lector eres Santo por la acción del Bautismo y la vida sacramental y la práctica que como Cristiano debes llevar te permite aspirar a la santidad que Dios te ofrece (paz, armonía y progreso), segundo la Santa por ser una creación de Dios y estar en el mismo orden que los ángeles, no necesita que alguna iglesia le reconozca su Santidad o que un hombre común y corriente le proclame como tal, ya que Dios permite que por su intercesión alcancemos el auxilio a nuestras necesidades y tercero los milagros son patentes y visibles, lo que nos permite refrendar que el se acoge a la devoción a la Santa Muerte llega a tener una amistad sincera y firme con Dios. Tema controversial lo fue también el hecho de que los detractores del culto hacían referencia de que se trataba de un ―culto satánico‖ partiendo de la lógica que adorar a la muerte es adorar al diablo. Ante estos ataques el Devocionario de la Santa Muerte ofrece la siguiente explicación a su feligresía. LAS VERDADERAS FORMAS DE VENERACIÓN A LA SANTA MUERTE El devoto no adora a la Santa Muerte, el devoto rinde adoración solo a Dios nuestro Señor y pide la intercesión de la Santa Muerte en sus necesidades como mediadora ante el Todopoderoso, que es quien finalmente nos brinda su generosa ayuda y misericordia para enfrentar las adversidades de nuestra vida. La devoción de la Santa Muerte no ofende a Dios, el devoto siempre cree en Dios y la devoción a la Santa lo obliga a tener mayor dedicación a la oración y a la reflexión sobre su vida y comportamiento, buscando siempre el mejor medio para resolver sus problemas. Dios creó a la Santa Muerte y le dio potestad para actuar con los seres humanos, de tal manera que ella está presente en todos nuestros actos y acontecimientos. La Santa Muerte puede estar a lado de otro santo u virgen, en el Santuario encontrarás la imagen de la Santa, junto a la Virgen de Guadalupe y otros santos porque ella es un ángel de luz, bondad, misericordia que viene de Dios. LA DEVOCIÓN A LA SANTA MUERTE EN LA IGLESIA Y EL SANTUARIO NACIONAL Nuestro Arzobispo Primado revisó cuidadosamente las diversas novenas y oraciones que los devotos regularmente rezaban, concluyó que por ser una devoción que el mismo pueblo había forjado, tenía muchas contradicciones y errores, por lo cual instruyó se elaborara un Devocionario auténticamente Católico que permitiera al devoto por medio de la oración y la meditación reencontrarse con su Redentor Jesucristo, se empezó por reformar oraciones y finalmente se edito el primer Devocionario, con el cual se inicio propiamente la introducción de la devoción en la Liturgia de nuestra Iglesia y se constituyo la Cofradía de la Santa Muerte, compuesta por feligreses que se comprometieron a dar donativos en especie (despensas) a familias necesitadas y recolectar artículos para el mismo fin. Nuestra Iglesia tienen la premisa de salvaguarda la integridad del Evangelio y las normas Litúrgicas que siempre han existido, como también el instruir, educar y formar la conciencia de los feligreses entorno a nuestro Señor Jesucristo y su Palabra, que es vida y fuente inagotable de gracia, por esta razón al reconocer la Devoción a la Santa Muerte como legítima y libre de toda actitud que ofende a Dios, y autorizarla para que se difunda en nuestras Parroquias y congregaciones, pretendemos el formar una sola familia que pueda libremente profesar su devoción sin ser juzgados o señalados por su fe y confianza en la Santa Muerte, al tiempo que aprenden a vivir la verdadera doctrina católica. Los años del 2004 al 2006 fueron años de consolidación del culto a la Santa muerte. En esto años se produjeron una diversidad de discursos que ponían en tela de juicio el culto y en especial sobre la santidad del símbolo dominante. Un tema que ya había sido trabajado por Monseñor David Romo Guillen en el Devocionario a la Santa Muerte que he referido líneas anteriores; además, los devotos habían emprendido la defensa de la santidad de la Santa Muerte con un argumento que no puede ser refutado…la capacidad taumatúrgica de ella. De hecho, en las ceremonias se podía observar a los devotos hablar sobre los milagros concedidos a otros devotos y si a ello le sumamos que las revistas especializadas en el culto Devoción a la Santa Muerte y La Santísima: una religión dedicaban una sección para que los devotos mandaran cartas en donde expresaban el milagro concedido. El posicionamiento de la Iglesia Católica Mexicana con respecto al culto a la Santa Muerte presenta dos etapas a saber: la primera de ella comprende pequeños comunicados sobre la existencia del culto a la Santa Muerte ello en el año del 2003 en donde afirma que se trata de un culto satánico. Aquí presento el primer comunicado de la Iglesia Católica Mexicana en su semanario Desde la Fe97 a través del presbítero Sergio Román en el año del 2003: ¿Adorarías al demonio? -Doña Merceditas, ¿usted adoraría al demonio? -¡De ninguna manera!- contestó la señora con justa indignación. -¿Usted conoce a la ―santísima Muerte‖?, insistió Raquel después de haber permanecido unos segundos impaciente. -¡Claro! Niña, es la devoción de moda. A mi me la recomendó una vecinita y me dijo que es rete milagrosa. Ya me compré su imagen y le puse su altar, no le falta su veladora, y a veces le pongo su manzana, su tequilita y su cigarro. Mírela, aquí traigo una medallita. Después de ese primer comunicado sobre la Santa Muerte no volvemos a encontrar otro sino hasta el año del 2006 que es donde considero la segunda etapa. Aquí los ataques serán frontales contra el culto, los operadores rituales y principalmente en contra de la institución que preside Monseñor David Romo Guillen además de su persona. Es importante señalar que la Iglesia Católica Mexicana constantemente hace llamados a su feligresía a que abandone el culto y vuelva nuevamente a la iglesia. Sobre la manera en que la Iglesia Católica Mexica percibe el culto y los llamados a la feligresía tenemos la carta que una feligresa manda al Semanario Desde la fe (2006) para preguntar sobre los pasos a seguir para deshacerse de la Santa Muerte: 97 Este semanario es difundido de manera gratuita cada domingo del año a través de los periódicos de mayor consumo en la ciudad de México como lo son La Prensa y Esto, ambos de la Organización Editorial Mexicana. ¿Hay forma de renunciar a la "santa Muerte Quiero saber...Un pariente mío empezó a darle culto a la ―santa Muerte‖, incluso se compró una estatua y la puso en su casa y dizque obtuvo favores, pero a un precio muy alto, pues le empezó a ir muy mal, su familia se desintegró y él mismo se sentía como oprimido por algo maligno, no era feliz. Le enseñé lo que publicaron en el número pasado y ahora ya quiere renunciar a todo eso, pero no sabe cómo hacerle, ¿podrían por favor darnos alguna indicación? (La lectora que escribió pidió omitir su nombre) Respuesta: ¡Con mucho gusto! En primer lugar nos alegramos de que su pariente haya comprendido que ese culto no puede traer nada bueno. Se trata de un culto satánico que aparta a la persona de la luz de Dios y la hace vivir en la tiniebla del error y del mal. La muerte no es persona ni es santa, así que no puede conceder favores. El que aparentemente los concede es el demonio, pero como bien dice Ud: a un precio ¡muy alto! Muchos seguidores de este culto han pagado muy caro su error, han visto cómo en lugar de mejorar empeoran y les suceden cosas que ponen los pelos de punta. El demonio no concede verdaderos favores, sólo aparenta para engañar a las personas haciéndoles creer que pueden sacar algo bueno de todo eso, cuando en realidad es todo lo contrario: lo que en realidad sucede es que ponen en serio peligro su salvación eterna. Respecto a lo que debe hacer, he aquí varias indicaciones: 1.En primer lugar, destruir esa estatua (que no la tire a la basura, no sea que otro se la encuentre) y que destruya también todo lo que tenga relacionado a eso (estampitas, folletos, etc.). Si tiene miedo, puede llevar los objetos con un sacerdote para que él lo haga. 2. Que acuda a reconciliarse con el Señor, en el sacramento de la confesión, pues el culto a la 'santa Muerte' es un pecado mortal que ha roto su comunión con Dios. 3. Que le pida al padre de su iglesia que vaya a su casa a bendecirla, como señal de que se desea consagrar su casa a Dios y no al demonio. 4. Que regrese a su vida de fe dentro de la Iglesia: que acuda a Misa, que rece el Rosario, que lea la Palabra de Dios, que haga oración, en fin, que cultive (o recupere) su amistad con Dios. Verá cómo si hace esto se llenará de paz y sentirá el gozo de caminar a la luz del Señor, bajo Su amor y protección. El culto ha cobrado un gran auge y cada vez los devotos están más convencidos de la santidad de la muerte por su capacidad taumatúrgica. Por ello, la Iglesia Católica Mexica encaminará sus acciones a desmentir esa santidad utilizando como argumentos los que le son propios, es decir, a través de pasajes en La Biblia y de la misión que tiene la institución. Ejemplo de ello lo tenemos en el artículo José de Jesús Aguilar Desde la Fe en marzo del 2006: en su artículo publicado en el La Santa Muerte Continúan llegando a la redacción infinidad de cartas para pedirnos que sigamos publicando artículos relacionados con el culto a la Santa Muerte, a través del cual muchas personas buscan solucionar sus problemas de amor, salud, dinero, trabajo y relaciones interpersonales. A continuación presentamos las 10 preguntas más frecuentes sobre el culto a esta grotesca imagen. 1. ¿Es lo mismo una “muerte santa” que la Santa Muerte? No es lo mismo. La Iglesia católica, desde sus inicios, ha invitado a los fieles a vivir en gracia para que cuando llegue la hora final se tenga una muerte sin pecado; es decir, una muerte santa. Desafortunadamente, algunas personas se han aprovechado de la semejanza de estas palabras para engañar y decir que la Iglesia siempre ha dado culto a la Santa Muerte. ¡Que no te engañen! 2. ¿Dios creó la muerte? No. Hay cosas que Dios no creó, pues son solamente ausencia o falta de algo. Por ejemplo, Dios no creó la oscuridad porque la oscuridad es simplemente falta de luz; Dios no creó la pobreza porque la pobreza es falta de recursos; Dios no creó el silencio, porque el silencio es falto de sonido. La muerte, de igual forma, no es algo ni alguien creado; simplemente se llama muerte a no tener vida. Dios creó la vida, pero la vida del hombre es pasajera y limitada. Cuando ésta termina, se declara a la persona muerta. Por lo tanto, la muerte no es un ser o personaje existente. Por el pecado el hombre muere, pero por la resurrección de Cristo el hombre tiene la vida eterna. Los cristianos no buscamos la muerte, sino la Vida que Dios nos ofrece. 3. ¿Cómo surgen esta representación? Desde tiempos antiguos los hombres se dieron cuenta que, cuando una persona deja de vivir, su cuerpo se descompone y se pudre hasta quedar sólo sus huesos. Por eso en muchas culturas representaron a la muerte como un esqueleto sin carne, ni músculos, ni nervios, ni sangre, ni ojos, etc. Porque un esqueleto sin esos elementos no puede estar vivo. Una cosa es que el hombre invente imágenes de la muerte, como las calaveras de dulce o de cartón, y otra cosa es que esas calaveras tengan vida y poderes especiales. 4. ¿De las representaciones de la muerte surgió el ídolo de la “santa Muerte”? Si. Primero se inventó la representación de la muerte hecha por los humanos y después se comenzó a creer que ese esqueleto con túnica tenía vida y poderes. Aunque los esqueletos no tienen sexo, los que empezaron a creer en esa representación le pusieron sexo femenino, por eso curiosamente le llaman: la Santa Muerte, la Niña y cosas semejantes. Los fabricantes de amuletos y objetos de magia fomentaron la creencia en el ídolo del esqueleto y con la finalidad tener jugosas ganancias inventaron oraciones para satisfacer las necesidades de quienes creen en eso. Así, le ofrecen a los incautos supuestas oraciones para conseguir dinero, amor y salud. 5. ¿En que ambiente surgió el culto a la “santa Muerte”? Surgió en los ambientes de la magia, la brujería y el esoterismo, en donde los más ingenuos buscan una respuesta rápida y fácil a sus problemas. Así, la figura del esqueleto vestido, se unió a los múltiples amuletos. Quienes fabrican esos ídolos también pintaron al esqueleto de colores: negro, rojo, verde, amarillo o dorado y le dicen a los incautos que según el color es el poder. ¿Cómo la ves? 6. ¿En qué ambiente se da el culto a la “santa Muerte”? En ambientes donde se cree en la magia y en las fuerzas ocultas más que en el poder y amor del Dios verdadero. Se da en estratos de la sociedad con pocos estudios y con ingresos económicos medios y bajos. Generalmente buscan ese culto personas que quieren las cosas sin esfuerzo, sin responsabilidad y sin respeto a los demás. Por ejemplo, en lugar de atraer a una persona mediante el amor, utilizan por ejemplo una frase que dice más o menos así: ―Tráeme a ‗Fulanito(a) de tal‘, quiero verlo humillado ante mí, quítale su voluntad para que no piense sino sólo en mí…‖. Los que hacen estas oraciones dicen que son respetuosos de los demás, pero esa oración es un ejemplo de que no respetan a los demás y de que, con tal de obtener lo que quieren, se valen de todo tipo de cosas, contrarias a lo que nos pide la Biblia. Por eso es muy común que entre los principales adoradores de ese ídolo o amuleto estén secuestradores, asesinos o criminales como los hemos visto en televisión. 7. ¿El ídolo o amuleto de la “santa Muerte” puede ser pretexto para hacer el mal? Aunque hay algunas personas que lo utilizan como medio para obtener una respuesta mágica a sus necesidades, también hay quienes lo llevan para justificar su maldad. ¿Cómo puede pedirle un asesino a Dios o a los santos que le ayuden a matar?, ¿cómo puede pedirle un secuestrador a la Virgen de Guadalupe que le salga bien su movida?, ¿cómo puede pedirle una prostituta o un violador a Dios y a los santos que le salga bien lo que hace? Como ese tipo de acciones son contrarias a lo que Cristo predicó y no pueden ser bendecidas por Dios, entonces los criminales buscan un ídolo o amuleto que vaya de acuerdo con el mal que hacen y por esta razón se vuelven seguidores del demonio o de la Santa Muerte. Además, como muchos de ellos por sus malas acciones ponen en riesgo su vida, piensan que rezándole al ídolo con forma de esqueleto, ―la muerte no se los va a llevar‖. ¿No sería mejor que se retiraran del mal para proteger su vida? 8. ¿La palabra de Dios en la Biblia está a favor del culto a la “santa Muerte”? No. La palabra de Dios nos enseña a dar culto al verdadero Dios y rechaza la magia, adivinaciones y supersticiones. San Pablo nos dice en la primera carta a los corintios: ―Por eso, queridos hermanos, huyan de la idolatría‖. Si alguien da culto a la imagen de la Santa Muerte, que es un ídolo o amuleto, se hace idólatra. Por otra parte, la Sagrada Escritura nos dice que, como consecuencia del pecado, la vida termina con la muerte, pero Cristo, con su pasión muerte y resurrección nos permite vivir más allá de esta vida venciendo a la muerte. Por eso dice la Sagrada Escritura: ―La muerte ha sido vencida. ¿Dónde está, muerte, tu victoria? ¿Dónde está, muerte, tu aguijón?" (1 Cor 15, 55) 9. ¿El hombre que se dice obispo de la “santa Muerte” forma parte de la Iglesia católica y es reconocido por el papa? No. En México existen muchas asociaciones religiosas que llevan un nombre parecido al de la Iglesia católica y eso confunde a la gente. El hombre que se presenta como obispo de la iglesia de la Santa Muerte representa a otro grupo religioso totalmente distinto de la Iglesia Católica Apostólica y Romana, por lo tanto la Iglesia no lo reconoce ni como sacerdote ni como obispo. Al pertenecer a una agrupación totalmente distinta y nueva, él no tiene ninguna relación con el Papa, ni con los obispos de todo el mundo. El no fue nombrado obispo por el Papa. El puede inventar o crear las cosas que a él le parezcan convenientes, pero no son reconocidas por la Iglesia de la que tú formas parte. ¿Tú le creerías? 10. ¿El culto a la Virgen de Guadalupe y a la “santa Muerte” pueden estar ligados? No. Cuando la Virgen de Guadalupe se le apareció a Juan Diego le habló del verdadero Dios por quien se vive y no de la Santa Muerte. Además la Virgen reconoció la autoridad del obispo y por eso mandó a Juan Diego con él. En la iglesia de la Santa Muerte, aunque se llaman obispos, ellos no reconocen la autoridad del Papa. En esa iglesia pretenden unir el culto a Cristo y a la Virgen con el de la Santa Muerte. Que no te confundan. Ni Cristo, ni la Virgen María ni ninguno de los santos nos han enseñado el error del culto a la Santa Muerte. ¿Crees que un simple humano, brujo o santero tendría más autoridad que ellos? La muerte, para los católicos, es consecuencia del pecado; por lo tanto, un católico sensato no debe venerar como ―santa‖ a la muerte. Estamos a unas cuentas semanas de celebrar la gran fiesta de la Pascua. Para nosotros los católicos esta es la fiesta de fiestas, pues nos recuerda que ¡Cristo resucitó venciendo a la muerte! Aprovechemos este tiempo para acercarnos más a Jesús, a Él que es fuente de vida eterna y, por tanto, enemigo de la muerte. La Iglesia Católica Mexica continúa en base a las Santas Escrituras y su misión evangelizadora informando a la feligresía sobre el culto. En su artículo ―¿La Santa Muerte hace milagros?‖ Publicado en el semanario Desde la fe el 23 de septiembre tiene como objetivo refutar la capacidad taumatúrgica de la Santa Muerte, sobre ello refiere: Sólo Dios hace milagros La doctrina de la Iglesia Católica enseña que sólo Dios hace milagros. La Virgen María, los ángeles y los santos son únicamente intercesores de los hombres ante Dios, es decir, si una persona solicita a San Miguel Arcángel, a San Judas Tadeo, a San Charbel, a San Martín Caballero o a cualquier otro santo un milagro, y éste se cumple, es porque Dios accedió a sus súplicas. Todos ellos son amigos de Dios, lo cual garantiza que su intercesión por los hombres sea escuchada y atendida, siempre y cuando sea para bien de la persona que pide el favor. La Muerte, por su parte, no es ni santa ni amiga de Dios y, por lo tanto, no puede realizar milagros. La Santa que no es santa Muchas personas, por ignorancia, consideran que la muerte no es enemiga de Dios, sino alguien que colabora con Él llevando a su encuentro las almas de aquellas personas que han muerto. Sin embargo, esto es FALSO. La Santa Muerte, como bien señala el artículo principal, es invento del ser humano, quien de la misma forma en que representó la Justicia, como una bella dama con ojos vendados que sostiene en sus manos una espada y una balanza, también representó la muerte como un esqueleto amortajado con una guadaña en la mano. Finalmente…es Satanás La muerte es un estado físico del cese de vida común de todos los seres vivientes. Sin embargo, para los cristianos, esta muerte tiene remedio, pues sabemos que es sólo un peldaño obligado para pasar a la otra vida, la cual es nuestra esperanza. En ese sentido, la muerte es un mal y, como tal, no es querida por Dios. Dios Padre es enemigo de la muerte y nos dio a su Hijo único, quien también se sometió a la muerte para librarnos de ella, venciéndola en su Resurrección. Al final de los tiempos, la última en ser vencida será la muerte. ¿Cómo, entonces, vamos a llamar a la muerte ―Santa‖? El culto a la Muerte es finalmente el culto al adversario de Cristo, es el culto al padre del pecado. Y Satanás no hace milagros Debido a su condición de ángel caído, Satanás tiene un poder preternatural, es decir, que va más allá del obrar de la naturaleza del universo material. Satanás es un ser espiritual e inteligente que conoce a la perfección las potencialidades de la naturaleza, lo cual utiliza para obrar hechos que desconciertan y a los que el ser humano les ha dado el nombre de milagros, pero no lo son. Ofrece ―bienes‖, que en realidad son males, con la única finalidad de apartar a los hombres de Dios. Pero si se los cobra Es común que los devotos de la Santa Muerte y demás prácticas esotéricas, sientan al principio un especie de satisfacción porque Satanás puede producir en ellos efectos agradables para engañarlos, pero a la larga los resultados suelen ser negativos: tienen insomnio o pesadillas, escuchan ruidos o veces extrañas, ven sombras o figuras raras, captan olores fétidos o les aparecen marcas o quemaduras en la piel. Su personalidad también se transforma: surgen conductas violentas o agresivas y comienzan a sentir deseos de suicidio, angustias, ansiedades, depresiones profundas, miedos u obsesiones; tienen dependencia exagerada a los bienes, vicios o al placer sexual, y la característica más frecuente es el abandono de las cosas sagradas: falta de asistencia a Misa, alejamiento de la confesión, pereza para la oración e incluso gusto en ofender las cosas sagradas. Conclusión El culto a la Santa Muerte ha cobrado a lo largo de los últimos años numerosos adeptos, pues es promovido por los que se dedican a la hechicería, esoterismo, santería etc. Sin embargo, ningún católico debe tener devoción a esa grotesca imagen que representa fundamentalmente todo aquello contra lo que Cristo luchó. Respetemos las creencias de nuestros hermanos, pero nosotros, los católicos, no olvidemos que la presencia del Señor en nuestras vidas está infinitamente por encima de cualquier circunstancia, e incluso, de la muerte. Finalmente, en el artículo ―Santa Muerte‖, ignorancia, confusión e idolatría‖ presentado por el presbítero José de Jesús Aguilar (2007) en el semanario Dese la fe refuta con base en argumentos teológicos la existencia de la Santa Muerte reduciendo el culto a la una innovación comercial capitalizada por líderes espirituales, sobre ello refiere: De la misma manera en que se fabrica una calaverita de azúcar para obsequiarla a un amigo el ―Día de los fieles difuntos‖, o como se fabrica una calavera de papel para que explote como ‗Judas‘ el Sábado de Gloria, a Don Fulano se le ocurrió inventar una calaverita con otros elementos. Tomó como modelo un esqueleto sin nada de carne, músculos, nervios, corazón y sobre todo sin cerebro. Lo vistió con lo que tenía a mano, una túnica de monje o un manto de la Virgen; le puso en su mano el instrumento que utilizan los campesinos para cortar la hierba y la hizo más decorativo colgándole collares o medallones. Ya terminado el modelo, a Don Fulano se le ocurrió inventar que la curiosa calaverita tenía vida y también inventó que su fabricación tenía poderes. ¡Órale! Y lo más curioso es que muchos ingenuos le creyeron. La calaverita lo hizo rico Don Fulano comenzó a hacerse rico fabricando más calaveritas. Con las ventas de la primera se le ocurrió inventar primorosas calaveritas de todos colores, al gusto del cliente, y también inventó que cada una sirve para cosas distintas. El resultado: más ingenuos y más dinero. Y como estamos en México, otros vivales le robaron la idea para hacer su dinerito y en muchos lugares aparecieron ―calaveritas patito‖, vestidas de novias, reinas, obispas… Y los incautos siguieron comprando. Bastó inventar que la ‗calaverita‘ fabricada por Don Fulano hacía milagros para que los incautos, incluyendo a Doña Chole, le pusieran un altar dedicado a la ingenuidad. Ya sólo faltaba inventar algunas oraciones dedicadas a la calaverita, por lo que alguien que apenas sabía de ortografía pronto las imprimió y de todas maneras los ingenuos las compraron. Todo eso nos obliga a hacer una reflexión. ¿Es lo mismo una Muerte Santa que la „Santa Muerte‟? No es lo mismo. La Iglesia Católica, desde sus inicios, ha invitado a los fieles a vivir siempre en gracia para que cuando llegue la hora final se tenga una muerte sin pecado, una Muerte Santa. Desafortunadamente, algunas personas se han aprovechado de la semejanza de estas palabras para engañar y decir que la Iglesia siempre ha dado culto a la Santa Muerte. ¡Que no te engañen! ¿Dios creo a la Muerte? No. Dios creó el cielo, la tierra y todo lo que existe. Creo a los ángeles buenos y a aquellos que se rebelaron y se convirtieron en demonios, también creó al hombre y a la mujer. Pero hay cosas que Dios no creó y son solamente ausencia o falta de algo. Por ejemplo, Dios no creó la oscuridad porque la oscuridad es falta de luz, Dios no creo la pobreza porque la pobreza es falta de recursos, Dios no creó el silencio porque el silencio es falta de sonido. La muerte no es algo ni alguien creado. Simplemente se llama muerte a no tener vida. Dios creó la vida, pero la vida del hombre es pasajera y limitada. Cuando la vida termina se declara a la persona muerta. Por lo tanto, la muerte no es un ser o personaje existente. La muerte y el pecado, enemigos del hombre La muerte, como limitación que pone fin a la vida, entra al mundo por el pecado. El pecado y la muerte destruyen al hombre. Cristo al resucitar vence al pecado y a la muerte. ―Por un solo hombre entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte, y así la muerte alcanzó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron‖ (Romanos 5, 12). ―El pecado una vez consumado, engendra la muerte‖ (Santiago 1, 15). ―El salario del pecado es la muerte, pero el don gratuito de Dios, la vida eterna en Cristo Jesús‖ (Romanos 6, 23). La muerte, algo malo Si la muerte fuera algo bueno, Dios no la habría destruido. La muerte ha sido vencida por la victoria de Cristo ―¿Dónde esta muerte tu victoria? ¿Dónde está muerte tu aguijón?‖ (1 Corintios 15, 24). Como la muerte no forma parte del plan de Dios no puede estar en el cielo ni en la vida eterna. ¿Un esqueleto tiene poder? Ningún esqueleto tiene poder para actuar, pensar y moverse, pues, de lo contrario, todos los cementerios estarían llenos de esqueletos que se saldrían de sus tumbas para hacer sus cosas. Este tipo de cosas sólo las vemos en las películas que utilizan trucos para espantar a las personas. ¿Con qué ojos vería un esqueleto? ¿Con qué músculos se movería? ¿Con cuál cerebro pensaría? Las películas han influido en la mente de muchas personas que ingenuamente creen que la muerte es un personaje. ¿Cómo surgió el culto a la „Santa Muerte‟? El culto a la Santa Muerte surgió en los ambientes de la magia, la brujería y el esoterismo, en donde los más ingenuos buscan una respuesta rápida y fácil a sus problemas. Así, la figura del esqueleto vestido se unió a los múltiples amuletos. Quienes fabrican esos ídolos también pintaron el esqueleto de colores: negro, el rojo, el verde, el amarillo o el dorado y le dicen a los incautos que según el color es el poder. ¿Cómo la ves? ¿Dónde se le da el culto a la „Santa muerte‟? Generalmente en ambientes donde se cree en la magia y en las fuerzas ocultas. En lugares donde no se acepta el poder de Dios o se rechaza la obra de Jesucristo. Se da en estratos de la sociedad con pocos estudios y con ingresos económicos medios y bajos. No faltan algunos católicos que con poca instrucción y formación dicen seguir a Dios, pero al mismo tiempo adoran cosas contrarias a él. ¿Quiénes le dan culto? Generalmente personas que quieren las cosas sin esfuerzo, sin responsabilidad y sin respeto a los demás. Por ejemplo, en lugar de atraer a una persona mediante el amor, utilizan una frase que dice: ―tráeme a fulanito(a) de tal, quiero verlo humillado ante mí, quítale su voluntad para que no piense sino sólo en mí…‖. Los que hacen estas oraciones dicen que son respetuosos de los demás, pero esa oración es un ejemplo de que no respetan a los demás y de que, con tal de obtener lo que quieren, se valen de todo tipo de cosas, contrarias a lo que nos pide la Biblia. Por eso es muy común que entre los principales adoradores de ese ídolo o amuleto estén secuestradores, asesinos, criminales como la has visto en televisión. Pretexto para hacer el mal El ídolo o amuleto de la ‗Santa Muerte‘ puede ser pretexto para hacer el mal, pues aunque hay algunas personas que lo utilizan como medio para obtener una respuesta mágica a sus necesidades, también hay quienes lo utilizan para justificar su maldad. ¿Cómo puede pedirle un asesino a Dios o a los santos que le ayuden a matar? o ¿Cómo puede pedirle un secuestrador a la Virgen de Guadalupe que le salga bien su movida? o ¿Cómo puede pedirle a Dios una prostituta o un violador que le salga bien lo que hace? Como ese tipo de acciones son contrarias a lo que Cristo predicó y no pueden ser bendecidas por Dios, los criminales buscan un ídolo o amuleto que vaya de acuerdo con el mal que hacen, así veladamente se vuelven seguidores del demonio. Además, como muchos de ellos por sus malas acciones ponen en riesgo su vida, piensan que invocando al ídolo con forma de esqueleto, ―la muerte no se los va a llevar‖. Pero se ha visto como una persona que tiene el tatuaje de la muerte asesina a otra que también lo tiene. ¿No sería mejor que se retiran del mal para proteger su vida? ¿Qué dice la Biblia sobre la „Santa Muerte‟? La Palabra de Dios nos enseña a dar culto al verdadero Dios y rechaza la magia, adivinaciones y supersticiones. San Pablo nos dice en la Primera Carta a los Corintios: ―Por eso, queridos hermanos, huyan de la idolatría‖ (10, 14). Si alguien da culto a la imagen de la Santa Muerte, que es un ídolo o amuleto, se hace idólatra. ¿El hombre que se dice obispo de la „Santa Muerte‟ forma parte de la Iglesia Católica y es reconocido por el Papa? De ninguna manera. En México existen muchas asociaciones religiosas que llevan un nombre parecido al de la Iglesia Católica y eso confunde a la gente. El hombre que se presenta como obispo de la iglesia de la ‗Santa Muerte‘ representa a un grupo minoritario totalmente distinto a la Iglesia Católica Apostólica y Romana, por lo tanto la iglesia no lo reconoce ni como sacerdote, ni como obispo. Él no tiene ninguna relación con el Papa, ni con los obispos de todo el mundo; no fue nombrado obispo por el Papa. El puede inventar o crear las cosas que a él le parezcan convenientes, pero no son reconocidas por la Iglesia de la que tú formas parte. ¿El culto a la Virgen de Guadalupe y a la „Santa Muerte‟ pueden estar ligados? No. Cuando la Virgen de Guadalupe se le apareció a Juan Diego le habló del verdadero Dios por quien se vive y no de la Santa Muerte. Además la Virgen reconoció la autoridad del obispo y por eso mandó a Juan Diego con él. En la iglesia de la Santa Muerte, aunque alguno se llame obispo, no reconoce la autoridad del Papa. En esa iglesia pretenden unir el culto a Cristo y a la Virgen con el de la Santa Muerte. Que no te confundan. Ni Cristo, ni la Virgen María ni ninguno de los santos dio jamás culto a la calaverita llamada ‗Santa Muerte‘. Saca al enemigo de tu vida y deja que dios te llene de bendiciones Si por ignorancia o equivocación caíste en la trampa de comprar amuletos o imágenes de la llamada ―Santa Muerte‖. Aléjalos de tu vida deshaciéndote de ellos. Puedes ponerlos a los pies del Cristo de tu parroquia mientras renuevas tu fe y tu renuncia al mal, diciendo: ―Renuncio a Satanás, padre y autor del pecado. Renuncio a las seducciones del mal para que el pecado no me esclavice. Renuncio a todos los amuletos y objetos mágicos que desvían mi fe del Todopoderoso. En este año del 2006 por el carácter emergente del Culto a la Santa Muerte se abrieron una diversidad de foros tanto en las universidades, los medios de comunicación electrónicos y en las instituciones religiosas. Académicos, comunicadores, sacerdotes, pastores, operadores rituales, la misma ciudadanía estaba ávida de respuestas principalmente sobre el tema medular del culto que era la santidad de la muerte. Hasta aquí he presentado los argumentos que sobre la Sata Muerte generaron las dos instituciones que tienen el mismo texto como base. Con ello ofrezco al lector una idea del contexto en que se mueve el culto a la Santa Muerte 6. 1. 2 El origen de la Santa Muerte producto del sincretismo La revista especializada en el culto Devoción a La Santa Muerte desde su primera publicación se dio a la tarea de ofrecer a los lectores los diversos orígenes de la Santa Muerte, para ello invitaba a colaborar en la revista a especialistas en el tema. Uno de ellos es Yamarash (2007) que se auto nombra ―el Señor de la Muerte‖ y el artículo que ofrece tiene como fundamento que el actual culto a la Santa Muerte no es nuevo, sobre ello refiere: Dentro de tantas investigaciones que hice acerca del culto la Santa Muerte, debo mencionar que la mayoría de los devotos coincidimos en decir que el culto a Ella, no fue inventado en la actualidad, no es una moda, ni debemos verla como un amuleto que nos trae la suerte, Ella nos abre el camino (amor, salud, trabajo, dinero, etc.) por lo tanto de este culto, Ella es vista como una deidad. La muerte y su culto a través del tiempo Como deidad la Muerte se ha representado de diferentes formas y nombres a lo largo de la historia, es tan antiguo su culto como lo son nuestras raíces y culturas tales como la maya, mixteca, zapoteca, otomí y tolteca (sólo por citar algunas), aunque no sólo se venera en occidente sino en todo el mundo. La forma de venerar a la muerte se realiza de diferentes maneras, dependiendo de la región y coincidiendo la mayoría en que es la misma deidad, pues Ella existe en cada rincón del mundo. Ella tiene muchos nombres y muchas formas, pero es la misma, ya que tiene la capacidad para estar en muchas partes y de muchas formas. Vamos a conocer en las próximas publicaciones, las diferentes formas y nombres que la muerte tiene, así también su origen y la forma de adoración dependiendo de cada lugar. ¿Cuál es el origen de la muerte? ¿Por qué se relaciona con la Santa Muerte? ¿Cómo resurge este culto? Los aztecas veneraban a la muerte como una dualidad (hombre y mujer) y eran nombrados: Mictecacíhuatl (la muerte en masculino) y Mictlantecuhtli (la muerte en femenino), con la llegada de los españoles a tierras aztecas, éstos son sometidos a cambiar sus tradiciones y creencias y fueron destruidos los templos en los que se veneraban a estas deidades, así también toda forma física, pero no espiritual, ya que con la fusión española-mexica se le dedica 2 días a la muerte, retomando nuestras creencias, se le recuerda el 1 y 2 de noviembre de cada año. Así fue recordada la muerte hasta el siglo XIX, cuando José Guadalupe Posada, crea ―La Catrina‖, para representar la muerte. se cuenta que durante el porfiriato y la revolución las personas tenían miedo a morirse en la revuelta, por lo tanto pedían clemencia a la muerte para que no se los llevara, ignorando la fuerza que ésta tiene, Ella los escuchaba y les daba su misericordia. Así fue como resurge su culto, representada en forma femenina. La gente le pedía misericordia y ayuda. La muerte está en un plano espiritual más elevado, y es la encargada de terminar y comenzar ciclos. Para los devotos el nombre o la forma no tiene importancia, lo importante es el sentimiento y la devoción de aquellas personas que se acercan de todo corazón, retomando el culto ancestral de una forma física diferente. A través del tiempo son acoplados diferentes elementos a la figura de la muerte, como lo es la guadaña, que tiene como significado cortar aquellas adversidades, una balanza que nos recuerda la justicia, que nos castiga, que nosotros mismos generamos que nos vaya bien o mal, dependiendo de nuestro comportamiento. Y así al pasar el tiempo y al ser cada día más devotos, nos hace darnos cuenta que Ella está en cada rincón y que ahora su culto es visto y sentido en varias partes del mundo y también nos recuerda que las apariencias no tienen mayor relevancia. Prueba de ello son las diferentes vestimentas que sus devotos le ponen como agradecimiento a algún favor, pues se dice que vestida de la forma que sea Ella siempre escucha sus peticiones. Juan Ambrosio (2003) fue quizá el primero en publicar la biografía de la Santa Muerte además de ofrecer la exégesis de cada uno de los símbolos instrumentales que componen al símbolo llamado Santa Muerte y de los artículos que se le ofrendan. En esta biografía incluye un apartado sobre el origen de la Santa Muerte y su evolución a través de las diversas etapas de la historia nacional, sobre ello refiere: No sabemos con exactitud cuándo nace el culto a la Santa Muerte aunque se tiene noticia de que entre casi todas las antiguas culturas que poblaron lo que hoy es México existía un culto a la muerte. Olmecas, mayas, toltecas, zapotecos, mixtecos, otomíes, por sólo citar algunos de estos pueblos, rendían culto a la muerte. Prueba de ello son las esculturas, vasijas, petroglifos, códices y aun tradiciones orales que nos hablan de este culto y de las deidades que encarnaban…De acuerdo con los mitos recogidos por los cronistas, sabemos que existía un lugar bajo la tierra llamado Mictlán a donde iban las almas de los muertos, hombres y mujeres que habían poblado este mundo. El Mictlán o lugar de los descarnados estaba gobernado por la pareja Mictecacíhuatl y Mictlantecuhtli, dioses de la muerte a quienes se veneraba y respetaba. Para los antiguos mexicanos, ambos poseían el mismo poder. Su imagen adornaba esculturas, códices, objetos ceremoniales para ritos mortuorios y utensilios de uso cotidiano como vasijas, vasos o incensarios. Eran la pareja de la muerte, inseparable e indestructible. Sin embargo, a pesar de su estrecha relación, las piezas más hermosas que representan la muerte descubiertas hasta la fecha poseen rasgos femeninos. Así, tenemos a la colosal Coatlicue, la gran diosa madre con su tocado de cráneos humanos. También encontramos a las llamadas cihuateteo o mujeres divinas, mujeres muertas en el parto a quienes se les representaba con sus atributos femeninos, pero con el rostro completamente descarnado. Estas imágenes talladas en piedra son impresionantes porque, además de poseer rostro de calavera y vestido de mujer, estaban adornadas con collares y coronas de cráneos y sus manos tenían la forma de una garra. En pocas palabras, son la mejor representación de la muerte hechas por nuestros antepasados y, tal vez por esto, muchos creyentes en la actualidad la conocen como Nuestra Señora la Santa Muerte. La muerte durante La Colonia La llegada de los españoles a estas tierras cambió el mundo antiguo. Las deidades de la muerte fueron derribadas de sus altares y los templos destruidos. En su lugar se construyeron las primeras iglesias cristianas. Pero los dioses de la muerte fueron vencidos en lo material, en lo espiritual siguieron vigentes, aunque adoptaron nombres españoles y se ocultaron bajo las ceremonias religiosas de los vencedores. Una de las festividades donde se mezclaron las viejas tradiciones indígenas con las creencias españolas de la época fue el famoso Día de Muertos, que se conmemora hasta hoy en todo el país. En tal fecha, se colocan altares donde, al igual que en la antigüedad indígena, se ofrecen alimentos, bebidas, dulces, además de que se reza, se prenden velas y se lleva un recogimiento muy especial. Permanece la creencia de que el día primero de noviembre –Todos Santos- llegan las almas de los pequeños, mientras que el dos –el de los Fieles Difuntos- arriban los muertos mayores. Esta costumbre es una mezcla de antiguas tradiciones mexicanas con europeas. Durante toda la época colonial se le continuó rindiendo culto a la muerte, quizás con menos fuerza que antes aunque siempre latente. Prueba de ello son las calaveritas de azúcar, de amaranto, de chocolate y aun de los más diversos materiales que abundan por el Día de Muertos. Y también el tradicional pan de muerto con el que se convida tanto a los familiares vivos como a los fallecidos. Es probable que por esa época desembarcara, procedente de Europa, una leyenda que mezcló tanto con las tradiciones mexicanas como con las de otras partes del continente americano. En esta historia se presenta la muerte como madrina de algún afortunado a quien ella le otorga el don de saber quién morirá o vivirá con tan sólo fijarse si se le aparece en la cabecera o a los pies de la cama de un enfermo. La leyenda aún se cuenta en muchos lugares de Europa, México, el sur de América y de manera especial, en Argentina. De la época colonial procede la primera noticia del culto a Nuestra Señora la Santa Muerte, en las minas de Zacatecas. Ahí, fueron los mineros quienes se acogieron a ella para que los protegiese en la difícil tarea de extraer los preciados metales de la tierra. La figura que representaba a esta Santa Muerte fue consumida durante un incendio, aunque aún se venera en aquel estado. Otro dato importante dentro de la biografía de la Santa Muerte es que su atuendo quizá fue inspirado por las imágenes de la muerte elaboradas en la Europa medieval. La túnica y la guadaña que son características de la Señora, acompañan siempre a la imagen de la muerte en las llamadas danzas macabras o danzas de la muerte que fueron pintadas entre los siglos XIV y XVI en Europa. Esta vestimenta sin lugar a dudas fue traída por los españoles ya que en México prehispánico no existían guadañas ni túnicas. De la independencia a nuestros días Una vez consumada la independencia de México las tradiciones en torno a la muerte se mantuvieron vigentes, sin embargo, no fue hasta finales del siglo XIX cuando resurgió el interés por representar a la muerte participando en diversas actividades gracias al ingenio de José Guadalupe Posada, quien inmortalizó a la célebre Catrina, la calavera que pela los dientes sonriente y que se paseó durante todo el porfiriato como siniestro y burlón augurio del millón de muertos que trajo la revolución. Sin embargo, poco antes de que México se llenara de pólvora y cadáveres, se propagó una historia bastante ambigua en torno al nacimiento del culto a la Santa Muerte. Se dice que, a finales del siglo XIX, en Córdoba, Veracruz, vivió un brujo – chamán- a quien se le apareció la Santa Muerte para pedirle que difundiera su culto con el propósito de ayudar a quienes lo necesitaran. En especial, prometió auxiliar al pueblo de México que nunca se había olvidado de ella. El chamán obedeció y desde entonces el culto se extendió por todo el territorio nacional. Ya sea leyenda o verdad, lo cierto es que la veneración por esta imagen creció de tal suerte que hoy, incluso, es conocida más allá de nuestras fronteras, principalmente en el sur de los Estados Unidos y Centroamérica. A partir de esta breve biografía casi podemos asegurar que Nuestra Señora la Santa Muerte, tal y como la conocemos, tuvo su origen en México. Sin embargo algunos investigadores señalan que el culto arribó con los primeros esclavos africanos traídos por los españoles. El culto a la Santa Muerte como producto del sincretismo entre la idea y los usos que tenía la muerte entre los conquistadores y la idea y los usos que tenían de la muerte los conquistados. De aquí surge la versión de que los usos y las ideas de los conquistados nunca desaparecieron y continuaron vigentes a través de los símbolos sagrados y/o rituales impuestos por los conquistadores. Otro recurso que será utilizado para encontrar los orígenes de la Santa Muerte es dar un seguimiento al símbolo dominante o alguno de sus símbolos instrumentales a través de las representaciones iconográficas especialmente en el siglo XIV que es cuando surgen las primeras representaciones de la muerte en la crisis demográfica que la historia nombra como La Muerte Negra. Ejemplo de ello es el trabajo de Elsa Malvido (2005) que realiza un seguimiento iconográfico de las representaciones de la muerte desde el Medioevo hasta nuestros días en donde la muerte es el tema más recurrente. El momento histórico predilecto para justificar el presente culto a la Santa Muerte es el siglo XIV. Con la Muerte Negra se generaron una serie de representaciones iconográficas y literarias en donde la muerte era el tema principal, surgen las representación iconográfica del Triunfo de la Muerte y la conocida Danza Macabra. Sobre el origen de la muerte como tema central en las representaciones iconográficas en el siglo XIV, Robert Gottfried (1989) apunta: La Muerte Negra mató tantos artistas que no aparecieron nuevos maestros, y así, no pudieron mantener sus niveles en este arte. Los efectos de los nuevos patrones y artistas fueron inmediatamente visibles. El arte toscano anterior a la peste era cálido y alegre. Subrayaba las relaciones personales y, cuando trataba temas religiosos, subrayaba la humildad de Jesús, de la Virgen María y de los santos. El arte posterior a la peste, como el pensamiento y los monumentos funerarios, se mostró obsesionado por los aspectos más terribles del dolor, y por la imagen de la muerte. Esta nueva imagen puede verse en muchas formas, siendo uno de los mejores ejemplos el gran fresco de Francesco Triani ―El triunfo de la Muerte‖, que se halla en el camposanto de Pisa, pintado cerca de 1350. La muerte no aparece como un esqueleto, como solía ser antes de la Muerte Negra sino que es, en cambio, una horrible anciana vestida de negro, con un cabello suelto, como de serpientes, con pies como garras, con espolones, y una hoz para recoger sus víctimas con las que alimenta sus serpientes y sapos. La muerte era como un ave de presa, que se lanzaba sobre sus víctimas. Existieron cambios en las creaciones literarias del siglo XIV, el amor y la armonía del hombre con la naturaleza dejaron de ser el tema predilecto de los escritores. Ante la debacle que produjo la Muerte Negra, los escritores del siglo XIV privilegiaron los temas sobre la muerte donde el dolor era el motor de la creación literaria, sobre ello el mismo Gottfried señala: La peste produjo cambios similares en la literatura del norte de Europa. La brevedad de la vida, la exuberancia y el doloroso horror de la muerte por peste fueron subrayados junto con los temas más hedonistas de Chaucer. Los difusores de la condenación y el pesimismo dijeron que la muerte tenía al menos una cosa en su favor: llevar la igualdad a todos los órdenes sociales. La exégesis se volvió popular, pero los comentadores encontraron poco solaz en la Biblia. Se hicieron más citas que nunca del Antiguo Testamento, y se insistió en que Dios afligió a su pueblo elegido, así como a sus enemigos, con la peste. El libro del Nuevo Testamento del que se hicieron más citas fue del Apocalipsis, donde la peste se describe como un castigo de Dios por los pecados del hombre…La danza de los muertos se convirtió en motivo literario común. Estas son desde mi perspectiva las formas en que se ha intentado construir los orígenes de la Santa Muerte. Se debe señalar que los trabajos que hice mención fueron elaborados entre el 2003 y el 2005 que fueron los años en que el culto tuvo mayor auge y genero reacciones adversas por parte de diversos sectores. 6. 2 El culto a la Santa Muerte ¿tiene origen reciente? Llama la atención en la exposición anterior que no se considera al culto a la Santa Muerte como de origen reciente argumentando que se había mantenido oculto para no ser perseguido tanto el símbolo como los devotos de ella. Permítame traer a colación información que no quedo incluida en mi primera investigación (García, 2007). En mi transitar por los diversos altares en que se ofrenda una ceremonia a la Santa Muerte, uno de los devotos98 me comentó que el culto a la Santa Muerte le fue trasmitido por su abuela la cual llevaba a los niños a un espacio privado dentro del mismo espacio privado que es la casa habitación para rezar y pedir a la Santa Muerte. Esta narración permite trazar una línea de tiempo que puede dar cuenta del tiempo de existencia de este culto. Pensemos que la abuela de mi informante fue la primera generación de devotos y considerando que mi informante tiene aproximadamente 50 años, entonces el tiempo de presencia del culto a la Santa Muerte entre ellos se remonta mínimo 80 años. Si el culto es tan antiguo como mi informante menciona y como algunos trabajos de corte histórico dicen que es, entonces deben existir vestigios ya sea imágenes de bulto elaboradas con materiales propios de la época, la presencia en diversos documentos elaborados por la prensa de ese tiempo o algo que permita de una manera fehaciente ubicar el culto en el tiempo que refiere mi informante pero de ello no hay nada. Si bien, el trabajo antropológico no tiene como fin el cuestionar directamente las opiniones de los informantes y menos en el campo de la religiosidad que es un tema sensible, si se pueden formular una serie de preguntas que lleven a obtener datos con la finalidad de ubicar –en mi caso- el culto en un tiempo histórico específico. 98 Él vivió su parte de su vida en el primer cuadro de la ciudad de México, específicamente en el barrio de la Merced. ¿Cómo un culto tan importante y con tanto arraigo como refieren informantes, líderes religiosos de este culto y los trabajos elaborados desde diversas ópticas no ofrezcan más prueba que las hipótesis que ellos han formulado para dar por cierta la afirmación de que estamos ante la presencia de un culto arraigado y no emergente? ¿Efectivamente se trataba de un culto prohibió y por ello sus devotos no expresaban su devoción por temor a persecución y segregación religiosa? Esta información que proveen los informantes si bien no se cuestiona por el hecho de que reafirma su nexo con lo sagrado; si debe ser ubicada por el antropólogo en un contexto mayor en donde las narraciones apunten en una sola dirección. Por ello y de acuerdo con el estado de la cuestión que se elaboró para el segundo capítulo y salvo el multicitado pasaje de la obra de Oscar Lewis (1982), no existe presencia de la Santa Muerte en la revisión de las obras hasta el año del 2002. Pero no es el único dato que puede referir a la existencia y los usos de la Santa Muerte. Silvia Ortiz Echaniz (2000) realiza su investigación sobre El Espiritualismo Trinitario Mariano sentencia la existencia de templos cercanos al barrio de Tepito y en donde, acudían personas de las zonas aledañas 99. Pues bien, Silvia Ortiz menciona que entre los ETM existen espíritus de luz y en especial uno al que llaman Hermana Blanca, sobre ello refiere: En el tercer nivel se ubican los espíritus de luz, que por el grado de desarrollo espiritual alcanzado en sus vidas anteriores tienen la misión actual, como seres espirituales, de trasmitir su sabiduría en ayuda de la humanidad sufriente. Esta referencia y adjudicación de la luz a las entidades espirituales se relaciona con la concepción de la ―luz interna‖, que desempeña un papel esencial en la mística y metafísica indígenas, así como en la teología místico-cristiana de alcanzar la perfección con la iluminación interior. Estos espíritus selectos, positivos y guardianes del bien, ayudarán al hombre a emprender la lucha contra el mundo de las tinieblas, las fuerzas oscuras del mal, es decir, el inframundo que aporta lo negativo: las desgracias, los problemas, las enfermedades. En las prácticas de comunicación con el mundo espiritual, se hace referencia constante a un espíritu de luz llamado la Hermana Blanca o Espíritu de Exterminio, identificado como la Muerte. Éste puede presentarse en cualquier momento y 99 Se debe recordar que cuando trabajo el carácter alternativo de la Santa Muerte en mi sondeo arroja la presencia de una mujer adscrita al Espiritualismo Trinitario Mariano y que aporta una descripción densa de los rituales y artículos necesarios para efectuarlos. dar grandes disertaciones de enseñanza sobre el papel de justicia que el Padre Eterno le ha conferido desde el principio de los tiempos. Algunas facultades de los mensajes de los espíritus de luz (con mayor desarrollo espiritual) que habitan otros planetas, son sobre todo de enseñanzas morales y de técnicas curativas. Reciben el nombre protectores aquellos espíritus de luz que pueden manifestarse o comunicarse a través de una facultad y tienen especifidades de curadores, consejeros o enseñantes de la doctrina. Este dato puede ser revelador cuando futuros investigadores se interesen en el tema de los diversos orígenes de las expresiones y las oraciones presentes en el culto a la Santa Muerte. Resulta un poco tanto difícil dar por cierta la afirmación de un culto prohibido, ello por el hecho de que los barrios poseen una característica básica que es el carácter contestatario ante todo aquello que atente contra sus tradiciones, además de que este carácter contestatario genera manifestaciones que serán expuestas en el espacio público. En el barrio los espacios públicos son tomados por diversos grupos para realizar sus actividades ya sean lúdicas o religiosas. Se trata de espacios autónomos que no permiten la intromisión de los ajenos por lo que, las manifestaciones que en ese espacio se generan pueden ser cuestionadas pero no se atentan contra ellas ya que se corre el riesgo de que se atente contra las de otro grupo. Este tipo de ―pactos‖ permite que la tensión que pueda existir por dos ideas diferentes no conlleve a enfrentamientos violentos. Elaborar una revisión de los centros especializados en la venta de símbolos rituales, artículos necesarios para la elaboración de los rituales de respuesta inmediata y donde se encuentren operadores rituales nos puede dar una idea del tiempo en que el símbolo ritual llamado Santa Muerte empieza a tener auge. Uno de los espacios en la ciudad de México donde se encuentran todos estos elementos es el Mercado de Sonora enclavado en el barrio de La Merced (a un kilometro del barrio de Tepito) que aunque los productos que ofrece son diversos, es identificado como el lugar donde se consigue todo tipo de artículos para elaborar ―trabajos‖ de magia blanca o negra. Para ejemplificar la importancia del Mercado Sonora traigo a colación la descripción que ofrece la revista Casos ¡Extraordinarios! El universo de lo oculto100 (1993) en el cual describe los artículos que se pueden encontrar y los santos que estaban más en boga: VELAS Y VELADORAS Las mercancías más comunes son las velas y veladoras, de cera virgen, parafina o de sebo. Las de cera virgen generalmente son de color ámbar, aunque su tamaño y su precio son variables. Las de sebo se pueden encontrar en casi todos los colores, así como las de parafina. Las últimas, cuando son blancas, pueden conseguirse en diversos tamaños: desde normales, con unos 20 centímetros de longitud, hasta las más grandes que miden hasta 80 centímetros y son un poco más gruesas. También podemos encontrar veladoras en este mercado, con o sin vaso, y de todos los colores y tonos que sean necesarios. Las hay acanaladas y lisas; las segundas son las más solicitadas para los trabajos de brujería porque se dice que permiten que fluya mejor la energía. Vale la pena mencionar aparte las veladoras especiales, dedicadas a Santos y Deidades. Estas se hallan en vasos largos de unos 25 centímetros de altura, y las hay en diferentes colores: amarilla, para el dinero; roja, para el amor; verde, para el trabajo; azul, para la tranquilidad; blanca, para todo en general. Las de las siete potencias tienen los siete colores dedicados a cada una de ellas y son para invocar la solución a problemas de difícil resolución. La veladora de San Alejo es amarilla con rojo y sirve para alejar a personas indeseables. Para el mismo fin sirve la de San Ignacio de Loyola, que es de color azul rey. La de San Martín Caballero es para ser encendida en los negocios y sus colores son verde olivo y rojo. La de San Fernando es amarillo claro y sirve, así como la amarilla con morado denominada “contra daños”, para protegerse de quien se deseé embrujar a quien la enciende. Se dice que la veladora del Ajo Macho sirve para atraer la suerte y el dinero. También la Lucky 13 y la de la Fortuna atraen buena suerte a quien las prende. Las del Rey Salomón o El Dominador son especiales para atraer y dominar al ser amado. La del Manso Cordero, como su nombre lo indica, es para “amansar” al rebelde. Las veladoras de San Lázaro son de color morado y se dice quien las mantiene encendidas en su hogar nunca carece de nada. La del Justo Juez, así como la de la Mano Poderosa son igualmente confiables para brindar protección. De esta manera, en el Mercado de Sonora, podemos encontrar una gran variedad de velas y veladoras destinadas a diferentes usos, así como cirios de todos tamaños cuyos precios oscilan entre cinco y doscientos mil pesos cada uno. AMULETOS, AGUAS MAGICAS Y OTRA SUERTE DE RAREZAS También podemos hallar en este lugar gran cantidad de amuletos preparados, como lo son las sábilas con coronas de ajos, crucifijos, semillas, ojos de venado y otros objetos que sirven de protección para el hogar y el negocio. Asimismo, se venden diferentes dijes en todas las formas y tamaños: con el número trece, tréboles de cuatro hojas, estrellas de cinco o seis puntas, imágenes de santos protectores…Las aguas preparadas se venden en envases de un litro o un cuarto de litro, todas tienen diferente color, el cual depende del uso que se les quiera dar. Las 100 Las negritas son mías de Changó Macho, también llamadas de Oro y Plata, son para traer suerte con el dinero. El Agua Doble Suerte Rápida es de un color verde esmeralda muy agradable y es empleada cuando la suerte se ha alejado debido a embrujos o salaciones. El Agua del Retiro es amarilla y sirve para alejar a las personas indeseables. El Agua del Rey Salomón o del Dominador es roja y se tira a la puerta de quien se necesite controlar. El Agua del Espíritu Santo es para alejar malas vibraciones y envidias del hogar, lo mismo que el Agua de San Ignacio de Loyola. También hay aguas de San Martín Caballero, del Gato Negro y del Sapo; las últimas dos para hacer embrujos de magia negra. También es posible hallar todo tipo de sales y aceites, en diferentes colores, así como medicamentos naturistas tales como: pomadas de árnica, para los golpes; la del Coyote, para las reumas; la de Veneno de Abeja, para la artritis; la de manzana y pan puerco, para problemas estomacales; y la de belladona, para la inflamación del vientre. Los sobres de polvos son innumerables. Los hay para todas las necesidades: Ven a mí, del Estudiante, Velo de Novia, Gato Negro, Oro y Plata, Dominador, Toloache, San Alejo, San Martín Caballero, Santa Marta, Siete Potencias Africanas, y una gran cantidad que se nos escapa debido a su incontable variedad. Las lociones a granel también son vendidas en casi todos los locales de este mercado. Los aromas que ya vienen preparados tienen diferentes presentaciones y en su etiqueta podemos encontrar las indicaciones para su uso. Se pueden emplear para ―trabajos‖ de magia y brujería, así como las velas con figura humana en colores blanco y negro que podemos encontrar en este sitio… También se venden figuras de la Santa Muerte, patrona de asuntos difíciles. Las hay de barro, cerámica y resina, en muy diferentes tamaños. En menor cantidad observamos figuras de deidades chinas e hindúes. En esta descripción la Santa Muerte no aparece entre los artículos que están en primer plano y solamente se sentencia su presencia en la parte final del artículo y refiere exclusivamente su especialización que son los casos difíciles, función que históricamente ha cumplido San Judas Tadeo. Pero estoy citando una revista especializada en el mundo esotérico por lo que están plenamente identificados con los artículos que se venden en el Mercado Sonora. Ahora traigo a colación el artículo de Lucila Rivera de Blanco (1992) publicado en la revista México Desconocido. En esta revista los espacios se describen como una etnografía además de ofrecer el punto de vista de los actores. Sobre el Mercado Sonora refiere: Encontrarse por primera vez en el Mercado de Sonora es una experiencia que se guarda en el recuerdo toda la vida. Este mercado es conocido por sus plantas medicinales, sus objetos esotéricos y sus animales, aunque en realidad es mucho más. El Mercado de Sonora es el punto de reunión de todo aquel que se atreve a traspasar el umbral de lo comprobable para situarse en otra dimensión, donde cualquier cosa puede ocurrir. Allí conviven en armonía las plantas genuinamente curativas con los objetos esotéricos y eclecticismo que a nadie asombra. Allí es otro el tono de voz; las miradas se buscan, se comprenden. Todos entran en la misma frecuencia: la de la esperanza, y jamás se escuchará el discordante ―¡Pásele señito!‖, no, el marchante asume la dignidad de lo que sabe escuchar con discreción de las dolencias ajenas. Entre sacos de yute repletos de plantas secas para los tes y ristras de guajes seriales ―que curados con aguardiente son un remedio infalible para recuperar el gusto por la vida‖, se destaca un puesto de barroca iconografía: santos de yeso, vírgenes, veladoras de colores, rosarios, escapularios, cirios de la buena muerte y toscos cuadernillos con rezos milagrosos, cuelga en complicado equilibrio al lado de los frascos con esencias de ―pachuli‖ y ―siete machos‖ que, según reza un letrero fosforescente ―provocan efectos trastornadores en el ser amado‖ y de amuletos y modernos ―sprays para el amor‖. Un joven de melena ensortijada entre la que se advierte el brillo inoportuno de un arete, es el dueño solícito del puesto. En papel periódico envuelve una veladora que tiende a una mujer de mirada ansiosa: ―¡servida señito!‖. Un letrero llamativo define su objetivo: ―para la devoción de San Pascual‖. Más tarde, gustoso, nos explica con seriedad las propiedades de las veladoras: ―verá usted, San Pascual es famoso por su llamado; si toca tres veces con golpe fuerte en la cabecera de la cama y en lo más pesado del sueño, quiere decir que una desgracia va a ocurrir: un difuntito, un herido o una venganza. Cuando toca ligerito en pleno día, quiere avisarnos de una alegría; un nacimiento, una herencia o un nuevo amor, pero si toca seguidito… así…quiere decir que alguien nos esta llamando, nos esta buscado con urgencia. Si usted le prende una veladora, por decir, a mediodía, él puede manifestarse antes de tres días.‖ Parece mentira que aún persista esta creencia y veneración a San Pascual; es algo nostálgico e ingenuo que nos devuelve al ayer, cuando era tan fácil establecer un hilo conductor con el ―más allá‖. Los cirios de la buena muerte, los escapularios y los rezos tienen también una función específica y sin duda han acompañado duelos y alegrías en nuestros hogares desde tiempos inmemoriales. Una descripción que antecede a la antes expuesta por un año y en donde, el símbolo ritual que hoy se conoce como Santa Muerte fue expuesto por el informante como San Pascual que cumple una función diferente a la que conocemos que es la de avisar que pronto llegará la muerte o bien puede anunciar buenas nuevas, ello depende del número de golpes que es como se manifiesta. Si el culto a la Santa Muerte fuera tan antiguo como afirma tanto el líder espiritual o los biógrafos de la misma, debería de existir una información homogénea del símbolo ritual, así como de la función específica que cumple. Habiendo ofrecido al lector una serie de trabajos que tienen como objetivo encontrar el origen de la Santa Muerte y otros que permiten ubicar el culto en un tiempo más cercano al nuestro; le queda al lector emitir sus propias conclusiones sobre el carácter emergente de la Santa Muerte. Finalmente, ofrezco lo que considero pueden ser los elementos que permitieron que el símbolo ritual llamado Santa Muerte se haya posesionado de manera fuerte en el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito y en su especialización en la solución de situaciones emergentes lo que demuestra su carácter alternativo. 6. 3 La muerte como recurso literario y fílmico en el México pos revolucionario y su relación con el actual culto a la Santa Muerte Que los mexicanos no le tememos a la muerte es una de las expresiones más difundidas y que hemos dado por cierto. De que esta afirmación se de cómo un hecho se le debe agradecer a la literatura y al cine mexicano principalmente la llamada época de oro. Algunas de las formas e ideas en que los devotos establecen su relación con la Santa Muerte las podemos encontrar en las formas en que los literatos y directores de cine han trabajado a la muerte como recurso. Para desarrollar esta parte de la investigación he considerar única y exclusivamente las obras literarias que fueron llevadas al cine ya que parto de la idea de que por lo menos en el barrio de Tepito a aprehensión de la idea de la muerte se ha dado a través de la imagen y en menor proporción a través de las letras. Las obras que he escogido para ejemplificar este apartado son las películas Macario, El ahijado de la muerte, La vida inútil de Pito Pérez y La muerte enamorada. En el campo de la literatura hare una descripción más profunda del Macario de Bruno Traven. La muerte es el eje de cada de una de estas obras, en ellas se maneja un lenguaje cotidiano siendo la característica principal que la muerte establece un vínculo directo con los seres que viven en situaciones limite. Con la muerte se platica y se pacta, concede y cobra, anuncia su llegada y solo se detiene un poco para explicar sus motivos, es una entidad sapiente ya que ha estado en todos los tiempos; pero sobre todo y lo más importante es que la muerte deja de ser una entidad etérea para ser una entidad que se puede palpar y que tiene una función diferente al que cumple en el cristianismo que es ser vencida para erigirse como lo llama Claudio Lomnitz (2006) en un tótem nacional. Los vínculos que se establecen en estas obras fílmicas los podemos encontrar entre los actuales devotos a la Santa Muerte ya sea a través de las formas en que le hablan a la imagen, el negociar un poco más de tiempo de vida o bien por algunas particularidades del culto como son el vestir a las imágenes. En estas obras fílmicas se presenta un fenómeno interesante que es la identificación plena entre los espectadores y el personaje porque la trama de la obra reproduce situaciones similares a la que viven los espectadores. Para redimensionar el culto a la Santa muerte se debe de buscar los textos y contextos donde surgen las formas de expresión que los devotos establecen con la misma. Expresiones tales como madrina, novia fiel y madrecita, además de la idea que tiene los devotos de ataviar su imagen de bulto con diversos motivos como lo son el vestido de novia o catrina (creación de José Guadalupe Posada). 6. 3. 1 La muerte como protectora: La muerte como madrina en el cuento El ahijado de la muerte de los hermanos Grimm y su adaptación en la pantalla del director Norman Foster ¿En que texto encontramos el rol de madrina que los devotos le confieren a la Santa Muerte? su referencia literaria la encontramos en el cuento El ahijado de la Muerte de los Hermanos Grimm (2000) y fue adaptada por Janet y Luis Alcoriza en la película del mismo nombre (1951) dirigida por Norman Foster. Del cuento El ahijado de la muerte de los hermanos Grimm se deriva primeramente la novela Macario de Bruno Traven (1969) y dos obras fílmicas que son por excelencia las que se proyectan en la celebración de Días de Muertos. En ellas, se establece un vínculo entre algunos personajes con la muerte además de dar inicio a la idea de que el pueblo mexicano desde tiempos inmemorables ha pactado con la muerte. En palabras de Claudio Lomnitz (2006) inicia la construcción de la muerte como tótem nacional. Pero vayamos al texto base que es el cuento de los hermanos Grimm que nos presenta un campesino que tenía diez hijos y su mujer anunciando la llegada del onceavo. Cuando nació el niño, el campesino se preocupo porque el recién llegado comía mucho y no era posible mantenerlo, así que decidió buscarle un padrino. Inicia entonces un desfile de personajes que acuden al campesino para hacer la petición de ser el padrino. El primer en acudir para pedir ser el padrino es Jesús el cual es rechazado por el campesino que se da el tiempo para reclamarle por la injusticia de la mala repartición de la riqueza. Acude también el diablo que le pide ser el padrino pero es rechazado argumentando que no se lo puede dar ya que no desea que pierda su alma; finalmente acude la muerte ante el campesino y se presenta el siguiente dialogo: -¿Qué buscas campesino? –pregunto la Muerte. -Necesito un buen padrino para mi hijo. -¿No quieres mejor una madrina? Yo lo cuidaría de todos los peligros y estoy segura de que no te arrepentirás –aseguró la huesuda. -Pienso que sí, que te aceptaré. Tú eres lo más justo que conozco: no distingues entre ricos y pobres, entre reyes y esclavos. A todos tratas de la misma manera. -Haces bien en aceptar –dijo la Muerte-. Todos los que están bajo mi protección se vuelven celebres y poderosos. -Está bien. Acepto. ¿Qué te parece si realizamos el bautismo el domingo? -Me parece excelente. Apenas se pusieron de acuerdo, se separaron. El domingo, como se había convenido se realizó el bautizo. El padre estaba contento y la Muerte fue la madrina, como lo había prometido. Este pasaje donde se celebra el convenio entre el padre y la muerte pertenece a la primera parte del cuento de los hermanos Grimm que visto en su forma total tiene una indicación y no una moraleja tal como lo expone Robert Darnton(1987) en que el mensaje es directo de tal manera que no permite ser interpretado, ello es, el no celebrar pactos con el diablo y la muerte ya que el primero se cobra con el alma y la segunda da poder y prestigio, pero se cobra con el tiempo que uno tiene destinado de vida. En la película El ahijado de la muerte (1951) el director Norman Foster ubica a los personajes como peones de una hacienda que ante el nacimiento de su hijo (sus anteriores hijos ya han muerto) decide buscarle buenos padrinos. Norman Foster ubica un camposanto y el Día de Muertos como el lugar ideal donde se ha de sellar el compromiso con la muerte. Dionisio (el nombre del padre del niño) tendrá una serie de presentaciones de personajes femeninos que harán la petición de ser las madrinas. El escenario y las escenas las presento a continuación: En uno de los jacales de la hacienda vivía un vaquero llamado Dionisio, era bueno pero bebía demasiado. Su mujer había tenido un hijo y él le permitió buscar buenos padrinos para el chamaco. No había nadie, era el Día de Muertos y todos lo celebraban en este mismo camposanto. (Una mujer que pide limosna a la entrada del camposanto se dirige a Dionisio) Mujer: ¡Qué hubo Dionisio! ¿Ya la agarraste tan temprano? Dionisio: ¡Seguro!, ando buscando una buena madrina para mi hijo Mujer: Que haya suerte pues (Dionisio se dirige ante la tumba de su padre para hablarle) Dionisio: ¡Qué hubo viejo! ¿Cómo andas por ahí? Acá vengo a platicarte una buena noticia que tiene usted un nieto. Se parece mucho a usted y le voy a poner su nombre. Nosotros no hemos tenido suerte jefecito, pero a él tiene que irle mejor. Ahora que para eso tengo que hallar alguien que me le ayude. (A través del fondo de la botella de aguardiente que Dionisio ha llevado a la boca para ingerir la bebida tiene la primera aparición de la mujer que ha de pedir ser la madrina de su hijo) Primera petición: la mujer que representa a los ricos Mujer rica: Yo seré la madrina de tu hijo. Yo le daré todo lo que el dinero puede comprar. Dionisio: los ricos son duros con los pobres y primero nos quita lo nuestro que darnos lo de ellos. No patrona, más cuentos no. Mujer rica: borracho inmundo Segunda petición: la mujer que representa a los pobres Mujer pobre: Yo seré la madrina de tu hijo, soy tan pobre como tú, pero cariño si puedo darle. Dionisio: Tú eres una buena mujer, pero yo tengo que mirar por mi criatura. Los pobres tenemos corazón pero no podemos ayudarnos, gracias por tu voluntad. Mujer pobre: Que haya suerte pues. Tercera aparición: La muerte (Mujer anciana vestida de negro, desalineada, andrajosa, tomando de la rienda un caballo blanco y portando una guadaña) que corre de la escena a los niños con mascaras de calavera que se encuentran detrás de Dionisio. La muerte: Ya no le ―vuigas‖, yo seré la madrina Dionisio: ¿Usted? La muerte: ¡Si yo! Soy más poderosa que los ricos y tan buena como los pobres, trato a todos por igual. Dionisio: ¡Voitelas! ¿Pues quién es usted? La muerte: La Muerte Dionisio: ¿No me diga? ¡Sáquese! ¡Sáquese! La muerte: no seas pelado, soy tu amiga Dionisio: ¡Vaya amiga!, te llevaste a mis otros hijos La muerte: pues si, al final me llevo a todo el mundo Dionisio: eres rete mala gente La muerte: ¡A que atontado eres!, no sabes que yo seco las lágrimas, paro el hambre, soy el fin del dolor y la miseria y todavía me llamas mala. Dionisio: Es verdad, eres lo único que nos queda a los pobres La muerte: entonces ¡trato hecho! Dionisio: por mi si ¿Pero mi vieja? La muerte: uh! Acabo de platicar con tu vieja, ella si le entra Dionisio: ¡Hecho! La muerte: nos vemos compadre Cuando el peón llega a su casa para notificar a su mujer sobre la elección que ha hecho la encuentra muerta y aunque ella estaba enferma se puede interpretar que la vida de su esposa fue la moneda de cambio por el compromiso que había contraído con la muerte. El niño crece y no deja de ser un sirviente de la hacienda, durante su crecimiento va teniendo conductas más temerarias pregonando que nada le pasara pues es el ahijado de la muerte. En una escena de la película Dionisio le comenta a Pedro (el ahijado de la muerte) que cuando él se expone a los peligros siempre le pide a su comadre la protección. El dialogo es el siguiente: Dionisio: Yo siempre que estabas en peligro decía: ―comadrita chula, cuídame a mi muchacho que es lo único que tengo‖ y siempre lo hizo. ¡Confía en ella! Pedro: ¿En quién? Dionisio: pues en tu madrina Pedro: ¿la muerte? ojala nunca se le olvide que soy su ahijado La relación que se establece entre la muerte y los personajes centrales de la película se encuentran en la información y la conducta que sobre la Santa Muerte guardan los devotos, ellos son: La Santa Muerte protege de todos los peligros La Santa Muerte es justa porque no hace distinción entre los hombres, a todos se los lleva por igual. Los que acuden a ella piden por la bonanza económica (ello quedo expresado en el capítulo anterior) La Santa Muerte da consuelo a quienes acuden a ella Tanto en la película como el cuento se establece cuales son las acciones por las cuales se puede perder la protección de la muerte, ellas son: En el cuento se puede perder el don de la sanación si se desobedece los designios de la muerte; En la película se pierde la protección cuando se pone en duda la ayuda de la muerte. En ambos casos, la muerte de manera inmisericorde toma la vida de aquellos que el protegido ama. En el cuento toma la vida de la princesa y por desobedecer termina con la vida de su protegido; en la película toma la vida de la mujer que se ama y se condena a vivir sin amor y arraigo al que fue su protegido. Estas restricciones se encuentran en el actual culto a la Santa Muerte. Existe entre los devotos la regla punitiva que se presentan en el cuento, ella es: no dudes y no desobedezcas a la muerte pues ella aunque da y protege también puede terminar contigo o con los tuyos. De hecho, en el cuento de los hermanos Grimm el ahijado muere por haber desobedecido a su madrina y en la película el personaje no muere, pero si mueren los seres que más ama. 6. 3. 2 La expresión novia fiel en la literatura y la filmografía de la época de oro mexicana y su relación con el actual culto a la Santa Muerte: las nupcias con la muerte en La vida inútil de Pito Pérez Ya he mencionado que una de las reglas del culto a la Santa Muerte es la vestir de novia las imágenes de bulto ¿Quiénes han de celebrar nupcias? ¿De donde surge esta idea? Nuevamente acudo a dos fuentes que son la obra literaria de José Rubén Romero (1999) La vida inútil de Pito Pérez y la película del mismo nombre dirigida por Miguel Contreras Torres (1944) estelarizada por Manuel Medel. En la obra literaria el personaje Pito Pérez sufre todas las inequidades y por mucho que anhelo las cosas entre ellas el amor, este nunca llego. Pito Pérez nunca tuvo nada desde la lactancia hasta la muerte, pero no por falta de deseo, sino que siempre fue antepuesto por los intereses materiales. Nunca fue suyo ni el pecho de la madre en la lactancia pues amamanto a un huérfano, no fue suya la educación porque su madre prefirió a su hermano, no fue suyo el amor de la mujer porque cuando lo hizo alguien pensó que arrebatándole la mujer lo haría más feliz pues no tendría que mantener a nadie, finalmente, no fue suyo ni su nombre de pila, fue simplemente Pito Pérez hilo lacre. Pito Pérez es el mexicano que no alcanzo los beneficios de la Revolución, pero en cambio desarrollo un ingenio para obtener los recursos y que es sabedor de las conductas del hombre, por eso nunca falta el alimento. Así lo vemos disfrazado de franciscano tocando a las puertas de los pueblos pidiendo ayuda para la orden religiosa y ser encarcelado por esta causa (de hecho el se jacta de conocer todas las cárceles de Michoacán); lo vemos asesorando a un sacerdote sobre el uso del latín y salir huyendo por diferencias con el párroco; lo vemos como aprendiz de boticario y salir huyendo por tener relaciones sexuales con la esposa del boticario. El mundo es de Pito Pérez porque lo recorre pero no tiene un lugar que le pertenezca, ¿Cuántos pito Pérez tenía el México de ese tiempo? En la novela, después de las decepciones amorosas generadas por el poder económico del varón y el interés de la mujer, Pito Pérez decide renunciar a la mujer pero no a la idea de la pareja. Si no puede poseer a una mujer como pareja por tratarse de una cuestión monetaria ¿Qué opción le queda? La respuesta la encontramos en el siguiente pasaje de la novela: Alguno de la tertulia, sonriendo maliciosamente, interrogó a Pito Pérez: ¿Y la Caneca? –Está en la casa, rodeada de comodidades. ¿Quién es la Caneca? Pregunté intrigado por saber a quién se referían. -¡El amor más fiel que ha tenido mi vida! –Pero vive usted con alguna mujer, Pito Pérez? –Desde que me la rapté, hace tiempo, del hospital de Zamora. La tenían encerrada en un cuarto contiguo a la administración. Una sola vez la vi, pero esa bastó para que decidiera llevármela, y así lo hice […] Ahora vivo con ella, muy a gusto; me espera en casa con mucha sumisión, teniendo siempre una copa en la mano; duerme junto a mí, digo mal, vela mi sueño, jamás cierra los ojos, en cuyo fondo anidan todas las ternuras. ―¡La Caneca no es gorda, ni seca, ni come manteca!‖. –Bueno Pito Pérez, pero ¿de quién se trata? Tanto misterio para viajar con una mujer y tanta virtud en ella, me parecen incomprensibles. –¡Pues de quién se ha de tratar! Del esqueleto de una mujer, armado cuidadosamente por el médico de Zamora y utilizando por lo practicantes del hospital para estudiar anatomía. ¡Qué bárbaro! ¿No siente usted miedo de acostarse con un esqueleto? –Miedo, ¿y por qué? ¿No somos nosotros esqueletos más repugnantes, forrados de carne podrida? Y sabiéndolo, buscamos el contacto de las mujeres. La mía no padece flujos, ni huele mal, ni exige cosa alguna para su atavío. No es coqueta, ni parlanchina, ni rezandera, ni caprichosa. Muy al contrario, es un dechado de virtudes. ¡Qué suerte tuve al encontrármela! Aquí esta su fotografía, conozca usted a la señora de Pito Pérez, colgada de su brazo; admire sus grandes ojos, sus dientes blancos, fíjese que sobre su corazón lleva atado un ramito de azahares, como el que llevo en yo prendido en la solapa de mi levita. La Epístola de San Pablo dice que el matrimonio acaba con la muerte; el mío ha comenzado con ella, y durará por toda la eternidad […] aunque me parece algo paradójico brindar a la salud de la muerte. Hagámoslo por Pito Pérez y por su respetable consorte… Pito Pérez ha contraído nupcias con un esqueleto que connota la muerte. Confía en su fidelidad pues nunca lo abandonará ni aun después de que su vida se extinga. En la novela Pito Pérez trae una foto con un esqueleto, este dato se omite en la película. Después del arduo andar llega a su casa (donde lo espera la Caneca) y estando completamente ebrio recuerda su amor frustrado el cual se le presenta en sus alucinaciones riendo de manera sarcástica, ello le hace sufrir aun más. En un siguiente plano la mujer que se burla de él sufre una metamorfosis y se presenta la caneca ya encarnada y Pito Pérez sentencia ―tu si me quieres tal como soy‖. En la novela, Pito Pérez muere en un hospital dejando un testamento a la humanidad donde expresa el desprecio que siente por ella por todo lo que le hizo y todo lo que le fue negado. La adaptación para el cine de la obra de José Rubén Romero incluye un elemento que no esta presente en la novela. Cuando Pito Pérez muere y se le da lectura a su testamento se ve venir a la ―caneca‖ vestida de novia y conforme se acerca al cuerpo sin vida de Pito Pérez su rostro se encarna en una bella mujer y espera el ―desprendimiento‖ del alma de su ―esposo‖ el cual estará vestido con un traje, él toma la mano de la ―caneca‖ y observa a los dolientes esbozando una sonrisa para después dar la espalda e irse caminando del brazo de su amada ―caneca‖. En la versión cinematográfica de la obra de José Rubén Romero encuentro similitudes con las formas en que los devotos establecen el vínculo con la Santa Muerte, ellos son: Las nupcias con la Muerte es un vínculo indisoluble; La Muerte no hace distingo entre los hombres porque para ella todos son iguales, de ello están convencidos sus devotos; El amor de la muerte hacía los hombres se demuestra por el hecho de que será ella la que acuda por ellos, de hecho, los devotos comentan que en la hora de su muerte Ella vendrá muy bella por ellos. 6. 3. 3 Las peticiones a la muerte en la filmografía de la época de oro mexicana y su relación con el actual culto a la Santa Muerte: La muerte enamorada y Macario Cuando trabaje el carácter alternativo de la Sata Muerte hice mención de que su núcleo duro se encontraba en lo que llame los rituales de respuesta inmediata en los campos del amor, salud y dinero. La trama de la película nos muestra a un varón padre de familia (Fernando Fernández) que no tiene éxito en su oficio que es la venta de seguros y ha cada persona que intenta vender uno sufre un accidente. Ante tal situación exclama que daría años de su vida por tener éxito en la venta de seguros, entonces la situación cambia y se convierte en el mejor vendedor; así pues se ha conseguido el dinero. Todo iba bien hasta que se le presenta una mujer bella (Miroslava) que le dice ser la muerte y que ha llegado por él; ello lo desconcierta y le pregunta que si ya es su hora a lo que la muerte contesta que le tocaban vivir más años pero que por la petición que hizo de éxito en los negocios su vida se acortó. En la trama de la película el hijo del personaje enferma y se presenta una segunda negociación de restar años por la salud de su hijo. La tercera negociación referente al amor se presenta cuando el cuñado del personaje menciona que daría la vida por tenerla a ella (la muerte) lo cual le es concedido. Un detalle que llama la atención en esta película es que la muerte inflexible como se presenta al inicio y después de estar en contacto con los hombres, de conocer sus preocupaciones, de observar el amor que prevalece entre ellos y la manera en que el personaje afronta sus últimos momentos decide no cumplir el contrato contraído con él. En la trama la muerte se ―humaniza‖ de tal manera que puede soñar y amar. Se trata de una muerte más cercana a las necesidades de los hombres y sabe que al solucionar sus problemas cohesiona a las familias. El personaje de Macario quizá sea el que este más presente entre los mexicanos. Ello se debe a que la película se proyecta año con año en los días en que se conmemoran los muertos que son el 1 y de noviembre. Ya sea en la obra literaria de Bruno Traven (1969) como en la película del mismo nombre dirigida por Roberto Gavaldón (1959) el vínculo entre Macario y la muerte es producto de una negociación donde ambas partes obtiene una ganancia, en donde ella sacia su hambre y él obtiene más vida para cumplir con su deseo. Pero existen grandes diferencias en la obra de Traven y la película de Gavaldón. En el Macario de Traven (1969) existe una descripción de la muerte, ella es: Calzaba sandalias antiguas y Macario pensó que el forastero debía de ser un hombre venido de tierras muy lejanas, porque nunca había visto sandalias como aquellas. Al personaje el hambre se manifestaba en forma espantosa. En su cara no quedaba rastro alguno de carne, todo era hueso, como sólo hueso eran las piernas y las manos del nuevo visitante. Sus ojos parecían dos grandes agujeros oscuros cavados en aquella cara descarnada. La boca estaba constituida por dos hileras de recios dientes descubiertos por la carencia de labios. Se apoyaba en un largo bastón de caminar. Iba cubierto por una túnica azulina, de una tela que no era algodón, ni seda, ni lana, ni material alguno conocido por Macario. Del cinturón, descuidadamente colocado alrededor de la túnica, colgaba una caja de caoba muy maltratada, de la que partía un tictac de un reloj. Fue aquella caja, que este personaje traía en lugar de reloj de arena fina que Macario esperaba ver, lo que confundió sus ideas acerca de quién podría ser el nuevo personaje en turno. Al comenzar a hablar, el forastero lo hizo con una voz semejante al sonido producido por el choque pesado de dos trozos de madera. El dialogo entre Macario y la Muerte en la obra de Traven es el siguiente: Muerte: -Ay, compadre, tengo hambre, mucha, muchísima hambre. Macario: No hay para qué hablar de ello, compadre, ya lo veo –dijo Macario sin mostrar el menor temor por la horrible apariencia del recién llegado. Muerte: -Ya que puedes verlo, no dudarás de que necesito algo en el estómago. ¿No quieres darme esa pierna del pavo que te disponías a cortar?. Macario, lanzando una exclamación desesperada y levantando los brazos con el gesto de un ser humano vencido después de la tenaz lucha, dijo: -Bien –y con voz plañidera agregó-: ¿Qué puede hacer un mortal contra el destino? Nada. Tenía que sucumbir finalmente. Ya lo presentía. No hay escape posible. Hubiera podido gozar de gran ventura, pero el destino no lo quiso, y así debe ser. Nunca tendré un pavo entero para mí solo. Nunca, nunca. Así, pues, ¿qué hacer? Bien, compadre, llénese la barriga, yo bien sé lo que es tener hambre. Nunca he tenido otra cosa en mi vida. Siéntese, siéntese frente a mí. Medio pavo es suyo, gócelo. Comieron juntos, y fue aquélla una comida alegre, salpicada de flores de ingenio y de chistes jugosos por parte del huésped, así como de grandes risas y carcajadas por parte del anfitrión. -¿Sabe usted, compadre? –Dijo Macario-. Al principio me desconcerté porque la figura de usted no está de acuerdo con la idea que tenía formada de los muchos retratos que he visto de usted en la iglesia 101 . Esa caja de caoba, que lleva usted colgada del cinturón con un reloj dentro, me confundió y me dificultó el que lo reconociera prontamente. ¿Qué ha hecho usted de su reloj de arena, si no es indiscreción? –Ninguna indiscreción-. No hay secreto alguno en ello. Y si lo deseas puedes decirle al mundo lo que ocurrió con él. Verás; hubo una guerra en Europa, lugar que es precisamente por sus eternas guerras la parte del mundo en donde mis cosechas son mayores. Pues bien, ocurrió que en una cierta batalla tuve que correr de un lado para otro como si todavía fuera joven. Fui de la Ceca a la Meca hasta quedar completamente extenuado y casi loco…y parece que una bala de cañón, mal disparada por un artillero inglés borracho, se estrello contra mi reloj de arena, y lo averió de tal modo que ya no fue posible al viejo herrero Plutón, a quien gustan esa clase de trabajos, componerlo. La Muerte: Sucedió que poco tiempo después visité a un capitán que se hallaba sentado en su cabina mientras su barco se hundía y la tripulación, a salvo en los botes se alejaba remando. Aquel capitán, como todo buen capitán británico, se hundía con su barco, haciendo sus últimas anotaciones en el libro de bitácora. Cuando me descubrió parado a su derecha me dijo: ―Bien, señor, parece que ha llegado mi hora.‖ ―así es, capitán‖, confirmé, sonriendo para hacerle el trance menos pesado y para que olvidase a los que dejaba. Entonces miró su cronómetro y dijo: ―señor, solamente le pido que me conceda quince segundos más para escribir las últimas líneas en mi diario.‖ ―¡Concedido!‖, repuse yo. Y él se sintió feliz de poder escribir la hora exacta que era lo que le faltaba. Entonces yo, viéndolo tan feliz, le pregunté: ―dígame, capitán, ¿querría usted darme su cronómetro?; creo que podrá prescindir de él ahora que para nada lo necesita. A bordo del barco que guiará de ahora en adelante, el tiempo carecerá de importancia. Se lo pido, porque habrá usted de saber que mi reloj de arena fue deshecho por la bala de un cañón británico y creo justo obtener a cambio de él un cronómetro inglés‖. ―inmediatamente cogí este aparato fino y abandoné el barco que se encontraba ya totalmente cubierto por las aguas. Bueno, así es como llegué a hacerme con el cronómetro, olvidando el viejo reloj de arena de otros tiempos. Y he de decirle a usted, compadre, que este artefacto inglés trabaja tan a la perfección que desde que lo tengo no he llegado tarde a ninguna de mis citas. ¡Es uno de los tantos favores que le debe la humanidad a los ingleses! En tanto que antes, más de un sujeto, para quien el ataúd o la canasta o el costal habían sido ya preparados, se me escapaba. Y eso de escaparse así resulta mal negocio para todos y especialmente para mí, pues con ello mi reputación se lesiona. Pero ya no volverá a ocurrir jamás‖. 101 Las frases en cursiva negrita y entre comillas son mías Así conversaron, bromearon, rieron y juntos y sintieron tan alegres como viejos conocidos que se encuentran después de largo tiempo de no verse. La muerte: De vez en cuando quedaba como fascinado por el encanto de aquella excelente comida y trataba de humedecerse los ausentes con una lengua que no tenía. Las funciones que cumple la muerte en la obra de Traven son: Antes de que llegara tuviste otros dos visitantes, ¿verdad?- le preguntó en el curso de la conversación. -Cierto. ¿Cómo lo sabe usted, compadre? -Yo tengo que saber todo lo que ocurre en el mundo. Porque has de saber, Macario, que en cierta forma, yo soy el jefe de la policía secreta de…de…bueno. Tú sabes a quien me refiero, porque el caso es que no me está permitido mencionar su nombre. ¿Reconociste a esos dos visitantes? -Desde luego, o ¿cree usted que soy un hereje? Su huésped continuó: -El primero era ese que tantas dificultades nos causa, el Demonio. -Ya lo sabía-dijo Macario convencido-. Este tipo puede presentárseme bajo cualquier disfraz, el que guste, que de todos modos lo conozco. -El segundo visitante era…bien, tú sabes a quién me refiero. ¿Lo recociste, verdad? -Desde luego, ¿acaso no soy cristiano? Lo habría reconocido en cualquier parte. Sentí mucho tener que negarle un pedacito, porque fácilmente se veía que tenía mucha hambre y necesitaba con urgencia algún alimento. -Lo único que me intriga ahora es tu actitud hacia mi –dijo el visitante, limpiando el hueso de un alón con sus recios dientes-. Lo que quiero decir es que…bueno, ¿por qué me diste la mitad de tu pavo cuando solamente unos minutos antes habías negado hasta un alón al Diablo y Nuestro Señor. Macario: La cosa con usted es distinta por una razón: yo soy humano y sé lo que es el hambre y lo que es sentirse morir de necesidad. Además, yo nunca he sabido que usted tenga poder para crear o transformar alguna cosa. Usted no es más que un servidor obediente del Supremo Juez. Tampoco tiene usted dinero para comprar algo, porque ni siquiera tiene bolsillos en su traje o lleva algún morral consigo. La negociación con la muerte se presenta de la siguiente manera en la obra de Traven: -Vamos, compadre, vamos –dijo el huésped, haciendo visibles esfuerzos por sonreír con los labios que no poseía-. No les des tantas vueltas al asunto. Eres en verdad muy ingenioso. Pero dime la verdad, no temas lastimarme. Tú dijiste, cuando empezaste a hablar, que atendiendo a una razón me habías convidado. Ahora dime, ¿cuál es la otra? -Bien, compadre. En cuanto le vi comprendí que no me quedaba tiempo de comer ni una sola pierna y que tendría que abandonar el pavo entero. Cuando usted se aparece ya no da tiempo de nada. Así, pues, pensé: “mientras él coma, comeré yo”, y por eso partí el pavo en dos. -Por el gran Júpiter, compadre ¡qué listo eres! No recuerdo haber encontrado otro más listo desde hace largo tiempo y que supiera esquivar tan hábilmente su última hora. ¡Ni siquiera me tuviste miedo! Realmente mereces que yo te seleccione para prestarme cierto servicio, un servicio que hará mi existencia solitaria menos aburrida de vez en cuando. Habrás de saber, compadre, que alguna vez gusto de jugar bromas a los hombres. Bromas que no hieren a nadie y que me divierten haciendo que mi trabajo sea menos monótono, ¿comprendes? El don que se le concede por su acto de ofrendar es el siguiente: -Este líquido, Macario, hará de ti el médico más notable del siglo. Una sola gota bastará para curar cualquier enfermedad, y si digo cualquier enfermedad me refiero a aquellas consideradas como incurables, como fatales. Pero entiende y entiéndelo bien, compadre; una vez que se haya agotado la última gota, no podrás obtener ni una más, por lo que el poder curativo que tienes habrá terminado para siempre. -Solamente que no debes olvidar que, como todas las cosas en la vida, una vez que comiences tendrás que seguir adelante. No habrá manera de retroceder. Pues cuando cures al primer enfermo llegarán otros que querrán ser curados también. Te verás acosado por los que sufren y no podrás negarte. -Adondequiera que te llamen para que atiendas un paciente, allí estaré yo también. Nadie más que tú podrá verme. Cuando me veas parado a los pies de la cama de tu paciente, concrétate a poner una gota de la medicina dentro de un vaso de agua, haz que tu enfermo la beba y antes de que pasen dos días se habrá recuperado completamente. Pero si me ves parado a la cabecera del enfermo, no te tomes el trabajo de usar la medicina, pues mi presencia en ese sitio será señal de que el enfermo debe morir, sin que importen los esfuerzos que tú o muchos médicos hábiles hagan por arrebatármelo. En ese caso no emplees la medicina que te he dado, porque no harías más que desperdiciarla. “Debes darte precisa cuenta de que el poder divino de que me hallo investido, esto es, el poder de elegir a los que han de abandonar este mundo, mientras los canallas o los muy viejos han de permanecer aún en él, no es transferible a ningún ser humano susceptible de errar o corromperse. Por ello la decisión final en cada caso debe quedar en mis manos, y tú tendrás que acatarla y respetarla.” Ahora bien, demos paso a la adaptación de la obra de Bruno Traven por parte de Emilio Carballido y Roberto Gavaldón. El primer detalle que sobresale es la clara intención por parte de ellos de que la película reafirme el vínculo que existe entre el pueblo mexicano y la muerte, que a diferencia de la obra de Traven solamente la relación es entre Macario y la Muerte. Roberto Gavaldón ofrece el siguiente prólogo al inicio de la película: ―El Día de muertos se celebra en México de una manera singular debido a que el mexicano tiene arraigado un sentido muy peculiar de la muerte. Hace juguetes en forma de esqueletos, pan de muerto, calaveras de azúcar y de chocolate. En este día colocan en sus casas ―ofrendas‖ de panes y alimentos para que sus deudos coman y beban. El culto a la muerte data entre los indígenas de México de ocho mil años, durante los siglos XVI y XVII sus costumbre y creencias se mezclaron con los del cristianismo, por lo que sus ritos y prácticas son hasta nuestros días una combinación de las dos culturas‖. El escenario a diferencia de la novela de Traven se sitúa en la ciudad de Taxco Guerrero, en un día de Muertos. Traven no describe el escenario más allá de los espacios que habita Macario. La película inicia con el texto antes referido sobre el sincretismo del culto a los muertos. Hay una procesión de un esqueleto vestido de rey, en un trono, con una guadaña en una de sus manos, a los pies del trono se encuentran osamentas distribuidas alrededor del trono, es llevado en andas, detrás cuatro niñas vestidas de negro con una osamenta entre las manos, los jóvenes van vestidos de luto y llevan cargando un esqueleto. Roberto Gavaldón nos presenta un Macario que utiliza el don otorgado por la muerte para acumular riqueza lo cual no sucede en la obra de Traven y lo que si respeta es el hecho que al estar frente al potentado de la región se le condiciona de que si no logra salvar la vida será condenado a muerte. El Macario de Traven es el que ofrece mayores elementos religiosos ya que dota al personaje de una catequesis fuerte y un personaje apegado a la iglesia. Por ello, cuando se le presenta la muerte no logra identificarla ya que los símbolos instrumentales que describe no tienen parangón en el mundo iconográfico de la iglesia con el cual esta identificado Macario. Así también, la función de la muerte y a quien sirve están referida a la catequesis que se imparte en la iglesia. Por el contrario, la película de Roberto Gavaldón tiene la intención de afirmar el vínculo de los mexicanos con la muerte y ofrece un elemento que será utilizado por futuros trabajos sobre la muerte en México que es la del sincretismo. Por lo que respecta al culto a la Santa Muerte no considero viable abordarlo utilizando la idea del sincretismo ya que se carecen de vestigios para poder apuntalar los estudios. Además, los trabajos que han utilizado esta idea del sincretismo lo han hecho para reclamar la paternidad del culto basados en la idea romántica de que los mexicanos que han sido abandonados por los sistemas políticos, económicos y sociales a través de la historia nacional son los que viven y se ríen la muerte. Por ello se hace gala de que el mexicano es temerario porque la muerte esta con él todo el tiempo, por ello se pacta con Ella porque a final de cuentas es la que vendrá por ellos; la muerte es la que posee el sentido de justicia más excelso porque no hace distingo entre los hombres ya que a todos se los ha de llevar. Pues bien, carácter emergente el culto a la Santa Muerte reside en la diversidad de mitos de origen y sobre todo, en la diversidad de interpretaciones que los devotos, líderes espirituales y operadores rituales han hecho de la misma. Si bien Monseñor David Romo Guillen ha sido uno de los principales actores que han intentado institucionalizar el culto proponiendo una nueva advocación de la Santa Muerte, homologar la información y tener a la liturgia como el acto ritual principal no lo ha logrado. Por el contrario, este intento genero un clima de encono por parte de los diversos actores que tiene a la Santa Muerte como elemento central de su actividad. ¿Hacía donde se dirige el culto a la Santa Muerte? es una pregunta interesante que podría ser trabajada quizás en un lustro para poder establecer un estudio comparativo. Pero en lo que respecta a la presencia de la Santa Muerte en el barrio de Tepito ha reducido considerablemente su presencia, ello debido a que ha surgido un nuevo símbolo ritual en donde las mismas formas rituales se refuncionalizan…el culto a San Judas Tadeo. Conclusiones En los seis capítulos que componen este trabajo de investigación he presentado a los lectores la diversidad de símbolos rituales que existen en el barrio de Tepito poniendo especial énfasis en el símbolo ritual llamado Santa Muerte y el culto que genera el mismo puede ser abordado desde la categoría catolicismo popular. He descrito el barrio de Tepito a través de la diversidad y para ello, me auxilie de otros trabajos que aunque no tenían como eje rector la religiosidad de los habitantes aportan información que me permitieron vislumbrar los símbolos rituales más recurridos. Pero esa información sirvió para ubicar a la Santa Muerte y sus usos desde la década de los 60‘s. Con respecto a la etnografía decidí traer a colación otras narraciones que sobre el espacio se han elaborado. En ellas se encuentran artículos periodísticos, tesis y obras literarias elaboradas por habitantes del barrio de Tepito. Gracias a estas lecturas pude diseñar mi estrategia para abordar el barrio, además de que tenía una idea de lo que encontraría en el campo. He presentado un capítulo metodológico donde menciono mis experiencias en campo con la finalidad de que sirvan a futuros investigadores para diseñar sus métodos de intervención social que tienen como objetivo recolectar los datos. He manifestado las complicaciones que presenta el barrio de Tepito para elaborar estudios de corte sincrónico y que por las características del barrio como lo son sus actividades ilegales es difícil preguntar y mucho más aun recurrir a la observación participante. El carácter alternativo del culto a la Santa Muerte fue trabajado considerando su grado de presencia en un todo sagrado que llamé el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito, en donde, su presencia no fue mayor que otros símbolos sagrados y sus devotos no superaron incluso a personas que profesan otro sistema de creencias. El carácter emergente de la Santa Muerte fue trabajado a través de los diversos mitos de origen, la diversidad de advocaciones que sobre el símbolo ritual existen y el hecho de que se trata de un culto reciente y no producto del sincretismo entre la idea y los usos que sobre la muerte tenían los conquistadores y los usos e ideas que sobre la muerte tenían los conquistados. Cada capítulo en su parte final contiene sus propia conclusión además de que por el tema que se maneja los lectores plantean sus propias preguntas y porque no decirlo, sus propias conclusiones. Luego entonces, en este apartado donde debería concluir el proceso de investigación me resulta difícil porque el material recopilado fue abundante y solo se hizo uso de un porcentaje reducido. Las conclusiones de la investigación las he de encaminar a mis observaciones sobre la religiosidad en el barrio de Tepito y el culto a la Santa Muerte que se quedaron en el tintero y que pueden dar cabida a nuevas investigaciones. La centralidad de lo femenino en el barrio de Tepito Llama la atención la centralidad de lo femenino en la literatura producida en el interior del barrio de Tepito y en el universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. La supervivencia del barrio de Tepito descansa en los hombros de lo femenino, en donde, el rol de madre es el principal y el más sagrado. Las características del rol de la madre son: Brindar el regazo a los hijos no importando las acciones que haya cometido El sacrificio de su persona en pos de sus hijos La penitencia por los actos de sus hijos La imploración para que los actos de sus hijos sean perdonados Aunque la palabra Tepito denote lo masculino su esencia es femenina. Por ello lo habitantes del barrio se refieren al mismo como aquel que brinda el regazo a cada uno de sus habitantes, además de no cuestiona sus actividades comerciales. En los sondeos efectuados para esta investigación llama la atención el doble y triple rol de la mujer debido a lo escaso de los recursos económicos que puede proveer y por ello se sume a una actividad que genere recursos monetarios o bien, por la ausencia del varón. Esposa, madre y trabajadora son actividades que son familiares para las mujeres del barrio de Tepito y para que cumplan estos roles el barrio provee las condiciones óptimas, ellas son: El comercio informal permite que las mujeres se inserten ya sea como propietaria, empleadas o prestando diversos servicios a los comerciantes siendo el de proveer alimentos la principal. Las instituciones educativas de nivel básico se encuentran dentro del perímetro del barrio lo que permite maximizar los tiempos. El problema surge cuando los adolescentes o jóvenes desean continuar sus estudios ya que las instituciones de nivel medio y superior se encuentran fuera del barrio. Pero si tomamos en cuenta los sondeos efectuados en esta investigación es un porcentaje mínimo los que deciden continuar con estudios más allá del nivel básico. Las redes solidarias que tejen las mujeres permiten solicitar ayuda a otras para la solución de problemas o la atención de los hijos. Los habitantes desde niños identifican el espacio y se mueven con soltura entre sus calles. Muchos de ellos se sumaran a la actividad comercial de su madre o bien, será empleado por los comerciantes para cumplir tareas de acorde a su edad. Siendo que un alto porcentaje de habitantes se encuentran insertos en el sector informal no cuentan con prestaciones sociales, entre ellas las de contar con acceso a la salud. Pero al interior del barrio se encuentra una clínica que desde décadas ha brindado servicio a sus habitantes y que goza de prestigio, de tal manera que habitantes de otras colonias o bien ex habitantes del barrio acuden a ella cuando tienen problemas de salud. Con respecto a la religiosidad, el rol que juega la mujer en el barrio de Tepito es el siguiente: Es la principal proveedora de instrucción religiosa superando con creces las catequesis que los niños obtienen en la iglesia previa a efectuar su Primera Comunión. Por lo tanto, la idea que las mujeres tienen de lo sagrado puede ser considerado como una especie de ―religión oficial‖ e el barrio de Tepito. No se debe descartar que por ello las símbolos sagrados femeninos son los que más arraigados se encuentran en el barrio de Tepito y que, otros símbolos sagrados o bien símbolos rituales femeninos sean integrados al universo sagrado de los habitantes del barrio de Tepito. Este proceso tiene que ver más con la empatía ya que estos símbolos sagrados como ―madres‖ saben de las necesidades y de los sufrimientos por los que pasan quienes acuden a ellos. No es privativo de los habitantes del barrio de Tepito que incorporan a estos elementos sagrados a la ―familia‖, por ello, los roles adjudicados a los elementos sagrados femeninos será el que socialmente deben ejecutar las madres y de manera inversa, las madres introyectan el rol que en la catequesis enseña cumplió la Madre de Dios. Debido a que en ellas descansa la institución familiar necesitan de ayuda para cumplir sus funciones. Esa ayuda la provee lo sagrado o bien los símbolos rituales; se acude constantemente a ellos para pedir principalmente la protección de los suyos. Cuando se toco el tema relacionado a los símbolos sagrados que se le pide ayuda llama la atención que ante los problemas económicos, de salud y de amor, Dios es el elemento central a quién se le pide cesen los problemas seguidos de la Virgen de Guadalupe y Cristo El cuidado de los altares ya sean en el espacio privado o en el espacio público recaen principalmente en las mujeres. Además que son ellas quienes organizan las diversas ceremonias a los símbolos sagrados que conforman el altar. Cuando se acerca la celebración del símbolo mayor que en este caso es la Virgen de Guadalupe, la comunidad se reúne para dar mantenimiento a los altares donde se encuentra Ella. Los varones se encargan de la estructura física y de las remodelaciones que requiera el altar, pero el aspecto estético recae en las mujeres. Ellas son las que tienen contacto con los símbolos sagrados bien para limpiarlos o vestirlos. En las ceremonias que por lo general constan del rezo de un rosario, las mujeres son las que llevan el rol protagónico. Las mujeres conocen los tiempos y las formas del rosario además de otras oraciones, mientras que el varón es fácil de perder la atención. La mujer también peregrina en el barrio de Tepito y aunque el varón predomina en esta manifestación religiosa, las mujeres se suman a la misma pero de manera diferente. Algunas caminan principalmente las jóvenes que aunque sean madres dejan el cuidado de sus hijos a sus madres. Pero otras, entre quienes se encuentran las madres de familia (que no pueden separarse por mucho tiempo de sus roles) y las personas de la tercera edad se organizan para rentar un transporte que les permita trasladarse a los santuarios para alcanzar a sus familiares que iniciaron el peregrinar desde hace días (las peregrinaciones pueden durar hasta un mes), algunas de ellas caminaran la última etapa para cumplir la manda o bien para pedir la gracia de lo sagrado. Sobre las representaciones masculinas del universo sagrado del catolicismo es Cristo y San Judas Tadeo los centrales, la incorporación del primero al núcleo familiar se da a través de lo fraterno, es el hermano mayor que comprende y apoya en los momentos difíciles. Mientras que el segundo la incorporación es a través de un rol de amista, de apoyo e intercambio mutuo; por lo tanto, sobreviene la decepción cuando el ―amigo‖ no cumple con lo prometido a pesar de que uno puso todo de su parte; por ello, al santo se le castiga y en el caso de San Judas Tadeo he mencionado que algunos devotos le cercenan la cabeza hasta que no cumpla con el pacto que estableció con el demandante. Pero falta una figura central en la familia que es el padre, el que impone la disciplina, el que castiga pero que recompensa si su comportamiento es el indicado, ese rol pertenece a Dios. Esa ausencia se da en el campo de lo simbólico ya que fuera de la representación de Dios Padre en La Santísima Trinidad y/o Divina Providencia no existen otra representaciones que connoten a Dios Padre y aunque en algunos altares aparece el triángulo equilátero con el ojo en medio que es el símbolo con el cual se representa, los habitantes no refieren en su exégesis algo que connota equilibrio y no a Dios Padre. Si bien existe una ausencia de representaciones de Dios padre, Él se encuentra presente en las peticiones que los habitantes del barrio hacen principalmente en el campo de la salud superando incluso a la Virgen de Guadalupe. ¿Tepito unido, jamás será vencido? Existe una versión romántica sobre los barrios que hablan de solidaridad entre sus miembros producto de que todos viven y tienen problemas similares. Que se deben mantener unidos porque siempre existe alguien a su acecho para exterminarlos. La cinematografía mexicana de las décadas 50‘s y 60‘s nos presentaron un barrio solidario. Las vecindades eran por excelencia el espacio donde se tejían situaciones hilarantes o grandes dramas. El barrio era el espacio de personajes con características especiales entre los que sobresalían los Robín Hood que robaban a los ricos para dárselo a los pobres. Era el espacio donde surgían grandes boxeadores o luchadores pero que lamentablemente terminaban muertos o bien alcohólicos. Pero quizás la característica más sobresaliente del barrio era el abierto desprecio a las personas de estratos sociales. Este desprecio era producto de los constantes abusos que los más poderosos hacían de la gente del barrio, principalmente de las mujeres que eran deslumbradas por el dinero y que al final de la historia terminaban engañadas para volver al barrio en donde el amor es verdadero, en donde los hombres ofrendan el producto de su trabajo para ellas y sus hijos. En mi transitar por el barrio de Tepito puede constatar que la idea del barrio de la cinematografía mexicana es una ficción y siempre lo fue. Se trata de una creación que respondía a los intereses de su tiempo de ―romantizar‖ la pobreza y con ello, que los individuos insertos en la misma aceptaran su situación como un ―privilegio‖. Cuando elaboré el estado de la cuestión para el segundo capítulo de esta investigación me encontré que en la década de los 70‘s ejecutó el llamado Plan Tepito que tenía la misión de brindar mejores condiciones habitacionales. Surgieron voces disidentes contra dicho programa argumentando que atentaba contra la estructura social del barrio y que si desaparecían las vecindades era terminar con piedra angular que determina la identidad del tepiteño. La característica principal de los comunicados que fueron elaborados para informar sobre las ―verdaderas‖ intenciones del Plan Tepito es que nos habla de la unidad del barrio y acciones de resistencia. Quizá el último hecho que permitió que los habitantes del barrio de Tepito se unieran en pos de un objetivo fueron los sismos de 1985. Después de ese movimiento solidario el barrio de Tepito inicia un proceso de segmentación producto de la introducción de la llamada ―fayuca‖ que permitió que decenas de familias que vivían en la vecindad cambiaran de estrato social, ello llevo a divisiones en su interior. Otro problema que generó la introducción de la ―fayuca‖ fue el desplazamiento por las buenas o las malas de los vendedores de fierro viejo y herramienta que se instalaban en la calle de Tenochtitlán. La introducción de la ―fayuca‖ trajo un crecimiento acelerado del comercio en la década de los 80‘s y como tal actividad era de las más lucrativas llevó a que los habitantes del barrio se sumaran a ella. Con ello, se perdieron los talleres de calzado y oficios relativos a ello porque las nuevas generaciones prefirieron l venta de ―fayuca‖. Hoy el barrio de Tepito presenta el siguiente panorama: Algunas vecindades y Unidades de Renovación Habitacional son verdaderas fortalezas infranqueables no solo para los ajenos al barrio, sino para la misma gente del barrio. Algunas de estas vecindades cuentan con personas que constantemente están monitoreando el perímetro. En lo que he llamado la zona A del barrio de Tepito (ver etnografía) se ubican principalmente los oficios de hojalatería y pintura y es considerada por los mismos habitantes del barrio como la más peligrosa. En lo que he llamado la zona B del barrio de Tepito (ver etnografía) se ubican diversas bodegas y servicios como son un banco y un Nacional Monte de Piedad. Las calles lucen desoladas por la mañana y la tarde ya que los que ahí habitan prestan en su mayoría servicio en la zona comercial. En lo que he llamado la zona C del barrio de Tepito (ver etnografía) se encuentra la zona comercial lo que impide observar las características físicas que guardan las viviendas y las actividades cotidianas de los habitantes. Para hacerlo se debe transitar por detrás de los puestos metálicos pero implica un alto riesgo, de hecho, los mismos comerciantes no recomiendan hacerlo porque pueden ser asaltados. En este mismo tenor, algunos comerciantes le pagan a personas para que protejan y trasladen a sus clientes que compran de mayoreo ya sea al metro o su vehículo. El único día que se podría apreciar es el martes, pero por las características del espacio no es recomendable internarse en ella. Pensar el barrio de Tepito como un espacio de libre tránsito dista mucho de la realidad. Si bien las mujeres y los niños se mueven con soltura por el barrio no sucede lo mismo con los varones adolescentes, jóvenes o adultos. Ello se debe a que el barrio de Tepito se ha fragmentado en pequeños territorios autónomos que son dirigidos por un grupo de individuos del sexo masculino. Un varón se mueve en el espacio donde su grupo domina, pero se encuentra en riesgo cuando abandona el mismo. Las ejecuciones entre bandos rivales es parte de la cotidianidad con la que viven los habitantes del barrio. Las crónicas periodísticas que hablan del barrio de Tepito como un espacio violento son capitalizadas por algunas personas del barrio ya que tornan más violento el barrio les permite crear un cinturón higiénico en donde nadie se acerca. Cuando estaba elaborando la etnografía tuve que recurrir a un habitante del barrio de Tepito para que me ―abriera‖ los espacios para cumplir con mi tarea. Pero esa ayuda solamente se limitaba a un área específica ya que después de ella su influencia caducaba. He aquí una de los principales obstáculos con los que se encontrara el investigador que pretenda elaborar investigaciones sobre el barrio de Tepito. Si no logra contactar una persona que lo lleve por tranquilas aguas sus probabilidades de éxito sin mínimas. Siendo que existe una diversidad de intereses en el barrio de Tepito cabría preguntarse si en verdad se trata de un barrio unido. He aquí dos ejemplos: El gobierno local ha emprendido una campaña de rescate de espacios considerados de alto riesgo como fue el predio 40 de la calle Tenochtitlán y aunque se presento resistencia, solo fue de aquellos directamente involucrados. Cuando el gobierno federal implementa operativos en contra de productos apócrifos que se almacenan o producen en el barrio de Tepito solo se resisten los locatarios que están siendo afectados. Las reglas de oro ―en Tepito nadie le va al Guadalajara, porque el que es chiva se muere‖; ―en Tepito nadie escucha‖; ―en Tepito nadie dice nada‖, son parte del saber de los habitantes del barrio de Tepito y con dichas reglas no puede existir la unión de TODO el barrio ya que transgredirlas puede significar la muerte. La Santa Muerte y el barrio de Tepito Con respecto al culto a la Santa Muerte en el barrio de Tepito los diversos mecanismos que emplee para obtener el dato no ofrecen una representatividad mayor de la misma. Quizá en el barrio de Tepito se presenta un fenómeno similar al de Tepatepec, Hgo. Lo explico, dentro del culto a la Santa Muerte esa localidad es reconocida porque ahí se encuentra lo que se considera una de las primeras apariciones materiales de la misma. El espacio donde se encuentra a sido elevado a santuario por los devotos y cada 20 de agosto (día de San Bernardino) es la celebración mayor por lo que decenas de peregrinaciones se dirigen hacía ahí y son miles de devotos que se congregan en ese espacio. Pero cuando uno recorre la localidad para dar cuenta del alcance que tiene la Santa Muerte no se encuentra manifestaciones de la misma ya sea en altares en la vía pública, imágenes de bulto o cuadros en los negocios o que los habitantes de esa población porten algún elemento que los adscriba al mismo. Pese a ello, son miles de personas las que acuden a este espacio a la celebración mayor y cada fin de semana el santuario recibe a devotos que provienen principalmente de la ciudad de México. En la calle Alfarería # 12 en pleno corazón del barrio de Tepito se encuentra el altar y la imagen de la Santa Muerte que –me atrevo a afirmarlo- congrega a miles de devotos y que recibe durante todo el año peregrinaciones de varias partes de la república, pero no necesariamente los que ahí se reúnen pertenecen al barrio de Tepito. Es difícil no dejarse seducir a la idea de establecer una relación directa entre la Santa Muerte y el barrio de Tepito por el número de devotos que ahí acuden, aunque hacerlo representa para las ciencias sociales dar un paso al precipicio. Finalmente, les comparto dos notas que versan sobre la religiosidad en el barrio de Tepito. En la primera que lleva por título Los tepiteños no creen en la Santa Muerte elaborado por Raymundo César (2005) describe la ceremonia que se realiza cada día 8 de mes a escasos metros de donde se encuentra el santuario de la Santa Muerte. El segundo artículo que lleva por nombre Cristo en Tepito…y de noche redactado por Mauricio Carmona (2007) narra el vínculo que existe entre los habitantes del barrio de Tepito y la iglesia cuando de celebrar símbolos sagrados se trata. Los tepiteños no creen en la Santa Muerte Párrocos del barrio organizaron el pasado martes la Misa por la vida, ceremonia con la que pretenden reforzar la fe de los vecinos ante el cada vez más extendido culto a la Santa Muerte. Vecinos del barrio de Tepito acudieron, unas vez más, a la Misa por la vida, ceremonia que ofrecen para reforzar su fe como católicos y como tepiteños. El altar a la Virgen de Guadalupe, ubicado en la esquina de Alfarería y Panaderos, es el punto de referencia para montar entre lonas, sillas, camiones y escaleras, ―la casa del Señor‖. ―Queremos dejar claro que los tepiteños no creemos en la Santa Muerte. hay quienes la veneran, sí, pero no queremos que se generalice‖, dijeron los hermanos Cedeño, cuya familia tiene más de cuatro generaciones de vivir en el barrio. ―Nosotros respetamos a las personas que veneran a la Santa Muerte, ¡allá ellos y su mala cabeza! Queremos dejar muy claro: no todos los te-pi-te-ños creemos en ella. La mayoría de los que acuden el primero ni siquiera son del barrio. ―La Misa por la vida comenzó cuando vecinos de la colonia Morelos se acercaron a nosotros para clamar que nos los olvidáramos. Y es que el culto a la Santa Muerte se ha propagado, dentro y fuera del barrio, como algo novedoso‖, aseguró el párroco de la Divina Institución, Héctor Gerardo González. ―Fue así como desde el 8 de septiembre de 2004 nos congregamos, mes con mes, para celebrar la misa en honor de la vida, que dio la vida, a la verdadera vida, que da la vida, cuyo propósito es nutrir y fortalecer de fe a la comunidad. Los camiones custodian la esquina; las lonas, la retadora lluvia, La Casa Blanca de un lado, un baldío del otro. Las sillas están perfectamente acomodadas y ocupan un cuarto de la calle; dos mil 500, precisó uno de los organizadores. Los vecinos se apoderan de la calle y cierran el paso para montar su improvisado aunque bien organizado ―templo de la vida‖. A escasos 100 metros está el altar a la Santa Muerte, el pionero en Tepito, el de doña Queta. Aquel que sirvió de inspiración para David Romo Guillén, obispo de la Iglesia Católica Tradicional Méx-USA, y donde sacó la idea de incluir esta devoción en su templo. La cercanía con la Huesuda, lejos de ser una provocación para los seguidores de la Santísima, es un acto de fe que comparten, desde el polo opuesto, con los católicos. Para la Muerte, los primeros de cada mes; para los católicos, el ocho; ambos toman la vía pública como una extensión de su veneración. Por la tarde, un camión recorría las calles del barrio: ―¡Vengan a celebrar con nosotros. Vengan a rezar por la vida. Los esperamos a las siete de la noche en Alfarería y Panaderos. No falten!‖ Las filas del frente estaban ocupadas, los sacerdotes sonreían y esperaban a que llegara el plazo para comenzar la homilía, encabezada por los sacerdotes de la parroquia de la Divina Institución, San Francisco de Asís, La Conchita y Santa Ana, todas dentro del perímetro tepiteño. Sin olvidar la de Cristo Rey. ―El objetivo de la Misa por la vida es que la fe de los tepiteños madure. Es una respuesta de nuestra identidad. Por ello buscamos que los sacerdotes oriundos del barrio acudan a predicar‖, aseguró el párroco de la Divina Institución, Héctor Gerardo González‖. ―La Iglesia católica nunca aceptará el culto a la Santa Muerte, es algo que se ha difundido como algo novedoso‖. Y es que para Gerardo González la relación de la Muerte, que no es santa, con sus seguidores es un concepto mágico de la religión que no les compromete a nada y convierte su relación en oferta-demanda, ya que prolifera el trato consumista: te pongo una veladora o un altar en cambio de. El cristianismo es mucho más complejo‖, puntualizó. Nosotros no faltaremos al respeto a quienes veneran a la Muerte, no es nuestra finalidad. Nosotros buscamos fortalecer la fe de los cristianos, y de paso dar una respuesta a la identidad del tepiteño, que perdió fuerza con los temblores de 1985. el barrio no es sólo comercio, hay gente trabajadora‖, sentenció. ¡Tepito va al encuentro de sus raíces, de ahí la respuesta satisfactoria para estas misas. En promedio asiste dos mil personas a cada misa. ―¡En Tepito se vende de todo, menos la dignidad!‖, exclamó Julián Álvarez párroco de la iglesia de Cristo Rey. ―por ello pretendemos, por medio de la evangelización, fortalecer el camino de la fe‖. Nosotros –la iglesia católica- no atacamos a quienes creen en la Muerte, nuestro trabajo radica en reforzar la fe de nuestros feligreses a través del Evangelio. Ese culto no va a desaparecer con la revocación del registro por parte de la Segob, por el contrario, lo promocionan, tal y como sucedió con el Padre Amaro. El viento agita las lonas mientras los párrocos instan a los feligreses a rezar con ímpetu. Hay más de dos mil personas congregadas, la mayoría roza la senectud. Los más jóvenes se acomodan en las orillas. ―¡Vamos a celebrar la vida, no la muerte!‖, responden los feligreses. Se escuchan las palmas. Después los juegos pirotécnicos. La celebración ha subido de tono. Hay más personas. La solemnidad ha sido remplazada por el júbilo. Hilarantes, responden a los cantos. Como aquella señora que con trabajo se mantiene en pie, pero que simula los saltos. Todos responden al llamado del cura. ―¡Más fuerte. Canten!‖, pide el padre Julián Álvarez y Gerardo González ofician la misa en compañía de otros colegas. Mientras tanto, otros dos se encargan de confesar a quienes solicitan su servicio, la fila no tiene fin. Un niño de la calle que al inicio ocultó su identidad tras una máscara del Hombre Araña, trató de llevarse la noche. Aparecía de la nada, abrazaba a los sacerdotes, auxiliaba a los ancianos, trataba de consumir doble ostia e intentaba debutar como fotógrafo. Los sacerdotes comparten la misa, y aun así los asistentes no paran de cantar, de agitar las manos, de reír, si perder la solemnidad. De paso, una broma. Y después una felicitación a las féminas por el Día Internacional de la Mujer. Con el ánimo al tope se pide que antes de concluir la misa se lance una porra para Jesús. Otra para la virgen de Guadalupe: Chiqui ti bum,… y después la invitación para la próxima celebración. ―Antes de ir quiero pedir que devuelvan las sillas. Se los recuerdo, ya que si no lo hacen les recordare otra cosa‖, advirtió uno de los sacerdotes. Y estallaron las carcajadas. Un aplauso y, de pronto, la dispersión. No sin antes pasar a degustar pan, café y frijoles charros que repartieron vecinos del barrio. ―¡Así somos en Tepito! ¡Qué viva la vida!‖ exclamó una de las abuelas que acudió a la misa. Cristo en Tepito… y de noche • La Noche Santa, caminata nocturna con el Santísimo Sacramento, llegó a su quinta edición y despertó emociones en el barrio bravo. Una vez más, los ―soldados de la noche‖, ―los guerreros del Centro Histórico‖, los ―peregrinos de la Eucaristía‖ recorrieron las calles del primer cuadro de la ciudad en una experiencia de fe y oración al lado de Jesús Eucaristía. Los charcos de lluvia sobre el asfalto, mezclados con el cúmulo de basura heredado del comercio informal, no representó ningún impedimento para que cientos de personas participaran por quinta ocasión en la tradicional Noche Santa en el Centro Histórico, aunque esta vez con una emotiva visita al barrio bravo de Tepito. La caminata partió como de costumbre de la Parroquia de San Sebastián en la calle Rodríguez Puebla, dejando tras de sí una estela luminosa por las cientos de velas encendidas que portaban los participantes, capitaneados por una camioneta sobre la que previamente se instaló un pequeño altar para el Santísimo Sacramento, embellecido con la leyenda ―Yo soy el pan de Vida‖. ―Él es mi Rey, mi Salvador…‖ gritó el padre Eduardo Lozano, organizador del evento, y al unísono los caminantes, ataviados con la mascada roja como distintivo, respondieron: ―...Yo le amaré, ¡Viva Jesús!‖. –Yo vine a la primera Noche Santa en febrero del año pasado, me enfermé y hasta ahora pude asistir nuevamente– cuenta don José Estrada mientras coordina el ritmo de sus muletas con sus cansadas piernas de más de 80 años. –No puedo decir lo que me causa estar aquí, ni yo mismo me lo puedo explicar, pero quiero acompañar a Jesús– agrega emocionado. En un hecho sin precedentes, esta noche el Santísimo Sacramento recorrió las calles de Tepito. Los tubos de los puestos que bloqueaban el paso de la caravana, no fueron obstáculo para que ésta llegara a la iglesia de San Francisco en el corazón del barrio bravo, pues en un acto de solidaridad y de respeto, vecinos y vendedores ofrecieron desmontar algunos puestos para facilitar el acceso al templo. Tras colaborar en el desmontamiento de las estructuras metálicas y liberar de basura las calles, un grupo de 15 ―carga diablos‖ se unió a la comitiva. Pronto las alabanzas a Dios comenzaron a brotar de sus rudas gargantas. Entre los fieles caminó también Mons. Antonio Ortega, obispo para la IV Vicaría Episcopal ―San Miguel Arcángel‖, quien vistió una chamarra gruesa para protegerse del frío. Al igual que los participantes, el Sr. Obispo recibió la mascada roja en medio de una ovación de su grey. –Padre Obispo, gracias por estar con nosotros– externó el P. Eduardo ya en el templo de la ―Conchita‖, ubicado en las calles de Constancia y Tenochtitlán, también en la colonia Morelos. –Gracias a ti Padre, por llevarnos a caminar con Él– respondió Mons. Ortega. Después de recorrer 17 templos durante la noche, -y como ya es costumbre, la caminata-, concluyó en la Catedral de México, que abrió sus puertas con el alba. En su interior, algunos de los participantes aprovecharon para agradecer a Dios por su participación en esta experiencia o bien para pedir algún favor a Jesús Eucaristía, que majestuoso y protegido con una hermosa custodia, entró en hombros al templo ante la mirada enamorada de cientos de fieles postrados de hinojos, para concluir una edición más de esta experiencia de fe en el corazón de la ciudad. 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El Ahijado de la Muerte; Director: Norman Foster, guión de Janet y Luis Alcoriza, México, 1946, actores: Jorge Negrete, Rita Conde, Polo Ortín, Emma Roldán, Tito Junco, Alejandro Ciangherotti, Francisco Jambrina, Manuel Dondé, Carlos Múzquiz La muerte enamorada; Director e Historia: Ernesto Cortázar, Adaptación de Jaime Contreras, México, 1951, actores: Miroslava Sterm, Fernando Fernández, Jorge Reyes, Esperanza Issa, Eufrosina García, Marcela Quevedo, Salvador Quiroz, Manuel Sánchez Navarro, Mauricio Garcés, Jorge Treviño, Pepe Nava La vida inútil de Pito Pérez; Director: Miguel Contreras Torres, adaptación de la novela homónima de Jesús Romero García, México, 1944, actores: Manuel Medel, Eduardo Arozamena, Manuel Arvide, Paco Astol, Luis G. Barreiro, Lauro Benítez, Gerardo del Castillo, Manuel Dondé, Edmundo Espino, Eufrosina García, Conchita Gentil Arcos, Emilia Guiú, Elías Haber, Katy Jurado, Max Langler, Félix Medel, Salvador Quiroz, Humberto Rodríguez, Ángel T. Sala, Elvia Salcedo, Arturo Soto Rangel, Dolores Tinoco, Lupita Torrentera, José Torvay, David Valle González Los fayuqueros de Tepito; Roberto ―flaco‖ Guzmán, Rafael Inclán, Carmen Salinas; México, 1982, Argumento: Roberto Rodríguez Ruelas, Director: José Luis Urqueta